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¿De qué hablarnos cuando

hablarnos de bioética?
l desarrollo y la aplicación de perplejo y se da cuenta de que las una convergencia de factores so-
E las ciencias de la vida y de la
salud plantea, como ya es sabido,
posibles respuestas no son ni evi-
dentes ni fáciles de encontrar y,
ciales, políticos, económicos, mé-
dicos ... que gozarán de un gran
una seri e de cuestiones éticas nue- además, no hay respuestas prefa- relieve en la sociedad estadouni-
vas, so rprendentes y complejas. bricadas. A fin de estudiar estas dense de aquel momento y, por
Frente a estas cuestiones y a sus cuestiones de una manera riguro- otra parte, en las novedades -y su
implicaciones individuales y so- sa y metódica e intentar dar res- correspondiente carga de ambi-
ciales, a menudo, uno se queda puestas teóricas y prácticas, fun- valencia- aportada.s por tres gran-
damentadas racionalmente, se ha des revoluciones, todavía hoy en
sumario creado este nuevo saber llamado pleno desarrollo: la revolución
"bioética". biológica (que da al hombre un
El impulso inicial que caracteri- dominio sobre la reproducción, la
¿De qué hablamos cuando zó la bioética respondía al deseo herencia y el sistema nervioso),la
hablamos de bioética? ..... 1 a 6 de poner en marcha un nuevo cipo revolución ecológica (que nos hace
de reflexión y una nueva práctica ver que el crecimiento económico
La ética del cuidar ......... 7 a 10 que fueran capaces de integrar tan- no necesariamente conlleva me-
to las aportaciones de las ciencias jor calidad de vida), y la revolu-
El consentimiento informado de la vida y de la salud como los ción médico-sanitaria (que crea
y la enfermería .... .-.... .-. 11 a 12 valores humanos. Este deseo hun- nuevas tecnologías, promueve la
de sus raíces en los años cincuenta autonomía del paciente y plantea
Más allá de la notícia: y sesenta, en los Estados Unidos, la necesidad de establecer políti-
La enfermería ¿qué y empieza a brotar con fuerza en cas sanitarias ante la escasez de
podría decir? .. .-.......... .-... 13 a 14 el año 1970, cuando un grupo de recursos)!.
científicos y humanistas estado- A l frente de todo este movimien-
La enfermería una profesión unidenses ponen un gran empeño to, y ya desde primera hora, esta-
de futuro .............................. 15 en sacar adelante todos juntos este rán dos personajes que reclaman
ambicioso proyecto de hacer dia- la patern idad de esta nueva disci-
Agenda ..............•.................. 16 logar las ciencias y las humanida- plina: Van Rensselaer Poner,
des y se sientan a deliberar para bioquímico y oncólogo, recono-
orientar y buscar respuestas nue- cido portodoscomo el creador de
vas a los problema éticos nuevos la palabra "bioética" y el primero
en el ámbito de las ciencias de la en usarla en un articulo publicado
vida y las ciencias de la salud. El en t 970 Yel Dr. André Hellegers,
esfuerzo de estos hombres encon- ginecólogo y profesor en la uni-
trará el estímulo por una parte en versidad de Georgetown (Was-
(Pasa a pág. 3)

¡"stitlll Borja de Bioi!Uca: Sal/la Rosa. 39·573 Q • 08950 Esplllglles (Barcelo"a) • lI'eb Ibb_bsj(lbcll_orR
2. 7 eu,.os
Bioética en la enfermería
reinta años después del nacimiento de la bioética, la enfermería no
T parece haber desplegado -ni mucho menos!- sus potencialidades en
este campo. Una de las muchas causas que puede haber contribuido a esta
TRIBUNA ABIERTA anomalía es el hecho que, con demasiada frecuencia y erróneamente, se ha
DEL INSTITUT BORjA tendido a pensar -y hasta a escribir- que la bioética era la formulación
DE BIOETICA moderna de la clásica ética médica, y por tanto, la bioécica era algo
reservado únicamente a los médicos. Pero ni la bioética se puede confundir
con la ética médica, ya que la primera es mucho más amplia que la segunda,
DIRECCIÓN ni la bioéuca es patrimonio de los médicos, porque este nuevo saber,
Núria Terribas ¡Sala nacido en Estados Unidos, necesita la aportación de las más diversas

-
REDACCIÓN y EDICIÓN
lrinaJurglis Talp
disciplinas: biología, medicina, enfermería, filosofía, derecho ... La exclusión
(o autoexclusión) de alguno de estos saberes solamente puede contribuir
al empobrecimiento del debate bioético.
Este número de Sioetica & Debat, dedicado a la enfermería, tiene por
objeüvo ayudar a tomar conciencia, una vez más, de que los profesionales

-
CONSEJO DE REDACCIÓN
de la enfermería tienen que intervenir, desde su especificidad, en el estudio
y resolución de las cuestiones éticas generadas por el desarrollo y aplicación
de las ciencias biológicas y biomédicas. La enfermería, pues se tiene que
implicar más en el debate bioético tanto para enriquecer la enfermería
como a la misma bioética.
Francesc Abel i Fabre La estructura de este número de Sioetica & Debat es la siguiente: En
Jordi Craven-Bartle primer lugar hemos intentado dar una visión panorámica sobre la bioética.
Miguel Martín Rodrigo Por eso en el artículo ¿De qué hablamos cuando hablamos de bioética? se
explica brevemente en que consiste esta joven disciplina, cuales han estado
Jaume Terribas Alamego
los factores que han intervenido en su génesis, que contenidos estudia, que

-
DISEÑO GRÁFICO
criterios y qué metodologías hace servir en la toma de decisiones, dónde
se hace bioética etc ... En segundo lugar encontraremos una reflexión sobre
La ética del cuidar, ya que hoy en día hay una corriente de pensamiento
que insiste en presentar el cuidar como una característica esencial de la
enfermería, y ve un filón importante de refle,uón sobre la identidad de la
Elisahet Valls ¡Remolí

-
COLABORADORES
profesión. Al mismo tiempo no debe olvidarse que la enfermería también
debe desarrollar otras tareas importantes como la investigación, la gestión,
la formación ... Finalmente, y en tercer lugar de este recorrido, en el
articulo El consentimiento informado y la enfermería se intenta describir
Ester Busquets i Alihés cual es la aportación que puede hacer el profesional de enfermería en el
Lydia Feito Grande proceso de consentimiento informado. Sin embargo, a pesarde la actualidad
de este tema, no se pueden olvidar otros temas importantes que conviene
Anna Iglesias i Sallés
que sean objeto de estudio por parte de este colectivo. La enfermería debe
Joan Mir i Tubau poder participar con competencia y eficacia en el debate bioético, haciendo
E. U.L Sant Joan de Déu

-
aportaciones significativas y al mismo tiempo, no debe tener miedo de
dejarse interpelar por las aportaciones de otras disciplinas que intervienen
en dicho debate.
Retomando el hilo del inicio se debe volver a insistir que hasta ahora y
en nuestra área geográfica la aportación de la enfermería a la bioética
IMPRESO EN:
creemos que ha sido pobre e insuficiente. Si esto es así, conviene que, en
Gráficas JIDER, S.A . adelante, la enfermería se esfuerce para conseguir un nivel de reflexión

- cuanto más riguroso mejor y se convenza que con este bagaje podrá
participar en el diálogo bioético en igualdad de condiciones con las otras
disciplinas. De esta manera, los profesionales de la enfermería se les
EDITADO POR:
reconocerá sin regateos el derecho de participar en la construcción de la
Institut Borja de Bioetica, bioética. He aquí un retO difícil, pero suficientemente a.tractivo para. que
Fundación Privada la enfermería se lo apropie.

abril 2002 Instltut BOila de Blootlca


(viene de pág. 1) Desde entonces la reflexión y la proceso de razonamiento que bus-
hington), pionero en introducir la práctica bioéticas se han ido cen- ca fundamentar los juicios mora-

-
bioética en el ámbito académico trando en tres ámbitos principa- les.
universitario y hacerla llegar a los les: la clínica (todo lo que hace
medios de comunicación social. referencia a la relación encre los El aspecto práctico recuerda
Ambos representan y promueven, enfennos y los profesionales sani- que la bioétlca es un
ya desde un principio, dos visio- tarios); la investigación con suje- procedimiemo de loma
nes diferences de la bioética1 . Se- tos humanos (las condiciones que de decisiones: un método que
gún Pouer, la supervivencia de la tendría que cumplir la investiga- conJugando hechos y valores,
humanidad y el equilibrio de nues- ción con seres humanos); y las ayuda lt tomar decisiones
tro ecosistema están en peligro. políticas de salud (la distribución racionales, razonables
Por eso hace falta adquirir una
nueva sabiduría que nos propor-
cione el conocimiento de cómo
equitativa de los recursos sanita-
rios a fin de prevenir, proteger y
restablecer la salud de los ciuda-
-
y prudentes.

El aspecto práctico recuerda que


usar el conocimiento. Y a esca danos)}. Pero la bioética, además la bioética es un procedimiento de
nueva sabiduría Poner la llama de interesarse por estas cuestiones toma de decisiones: un método
"bioética". Por tanto, Poner da a éticas relacionadas más directa- que conjugando hechos y valores,
la bioética un enfoque globaliza- mente con la biología y la medici- ayuda a tomar decisiones raciona-
dor, ponee! acento en la vida en su na, también se interesa por la vida les, razonables y prudentes. Por
sentido más amplio. Hellcgers, en en general y los aspectos éticos tanto, la bioética dentro del ámbi-
cambio, entiende la bioética en un que conlleva. Por tanto, la bioética to de la ética, debe situarse en la
sentido diferente y más restringi- recuerda que en el ámbito más lista de la llamadas "éticas aplica-
do. Según él, la bioética debe cen- amplio y global del medio am- das"'. 2) La bioética, tanto en su
trarse en las cuestiones éticas de la biente, la calidad de vida y los reflexión como en su método de
práctica clínica y la investigación problemas de crecimiento de la trabajo, es esencialmente multi-
biomédica. Por tanto, Hellegers, población también hay preguntas disciplinar y interdisciplinar. Con
a diferencia de Poner, da a la interesantes a plantear y, sobreto- estas dos palabras se quiere decir
bioética un enfoque biomédico, do, decisiones éticas a tomar. que la bioética para comprender
pone el acento en la salud, más
que en la vida en su sentido más
amplio. Esta segunda visión, la de
-
El saber bioético tiene por
objetlvo clarificar y resolver
mejor los problemas que se quie-
ren estudiar promueve el diálogo
entre saberes diversos y hace que
Hellegers quees mayoritariamen- las cuestiones de tipo ético estos saberes interaccionen entre
te aceptada hasta el día de hoy, que plantean los avances ellos, se fecunden recíprocamen-
quedará perfectamente recogida- de las oencias de la vida te, y así se pueda llegar a tomar las
y de alguna manera oficializada
en la bioética norteamericana- en
la definición de bioética firmada
por Warren Reich, uno de los pri-
-
y de la salud

Definiciones de bioética hay


muchas y cada una acentúa unos
mejores decisiones posibles. 3) El
saber bioético tiene por objetivo
clarificar y resolver las cuestiones
de tipo ético que plantean los avan-
meros colaboradores de H ellegers, aspectos y deja otros en la penum- ces de las ciencias de la vida y de la
y que aparece en l' cEncyclopedia bra. Nosotros creemos que una salud y sus aplicaciones, teniendo
o[ bioethics» (1978 y 1995), una buena respuesta a la pregunta" ¿de en cuenta que las respuestas que
obra de bioética que cons iguió qué hablamos cuando hablamos se darán a estas cuestiones ten-
enseguida un gran prestigio: .. La de bioética?"' debería incluir estos drán una incidencia en ¡a sociedad
bioética es el estudio sistemático puntos esenciales: 1) La bioética presente y futura yen su sistema
de la conducta humana en el área es un nuevo saber que tiene un de valores.
de las ciencias de la vida y de la aspecto teórico y uno práctico q ue Ahora que ya sabemos qué tipo
salud, examinando esta conducta son inseparables. El aspecto teó- de saber es la bioética conviene
a Lt luz de los valores y los princi- rico recuerda que la bioética es fijarnos en los contenidos, en los
pios morales"'. una reflexión de orden ético: un temas que estudia, los cuales com-

abril 2002 lel Institut Borja de a loética


prenden un campo muy amplio. mente¡ separa hechos y valores, y en sus aplicaciones, la bioética
A pesar de ciertas discrepancias separa las recomendaciones téc- estadounidense, la bioética domi-
entre los expertos -hay temas que nicas de las orientaciones de la nante actualmente, deja en un se-
son considerados más específicos conducta; el objetivo es conseguir gundo plano la búsqueda de una
de la bioética que otros- se acos- la máxima eficacia y se prescinde fundamentación racional que sea
tumbra a establecer una clasifica- de los valores y de los fines a Los válida universalmente y, guiada
ción por bloques y dentro de cada fines que deberían irguiando nues- por su pragmatismo, recurre a los
bloque se incluye la lista de temas tras vidas -remarca un pensador llamados principios éticos de se-
concretos. Una clasificación posi- crítico hacia este tipo de racio- gundo nivel. Se considera que a
ble sería la siguiente: a) Interven- nalidad- se ven eclipsados por la partir de estos principios es más
ciones en el inicio de la vida hu- exigencia de obtener el máximo fácil entenderse y llegar a un con-
mana, en su desarrollo y en su rendimiento·. La racionalidad senso a la hora de tomar decisio-
final. b) Intervenciones en seres y ético-filosófica, en cambio, se fija nes éticas. De principios de se-
medios vivientes no humanos. c) en los valores, en lo que es gundo nivel hay varios, pero la
Problemas entorno a la distribu- éticamente bueno y por eso consi- bioética estadounidense ha privi-
ción de recursos sani tarios en el dera que los medios deben some- legiado estos cuatro: no male-
área de la salud. En el estudio de terse a los fines. Debemos pre- ficencia, beneficencia, autonomía
los temas concretos correspon- guntamos sobre la licitud o ilicitud y justicia. Son los cuatro princi-
dientes a cada bloque se plantea la de los diversos fines que quere- pios de todos conocidos, y de uso
pregunta ya clásica en bioética: mos obtener, sobre el hombre y la indispensable, en la reflexión y la
"'Todo lo que es técnicamente po- sociedad hacia la cual queremos práctica bioética.
sible hacer, es éticamente acepta-
blel".
caminar y sobre las normas que
deben regular la convivencia hu- -
Estos cuatro prmcipios son
-
La racionalidad cientifico-
técnica -l/amada tambzén
mana. A la racionalidad jurídico-
política, le toca -a menudo, te-
niendo q ue salvar la fuerte presión
una forma de afirmar los
derechos fundamentales
a la vida (no maleficencia
racionalidad instrumental- de la opinión pública- pensar y y beneficencia), a la libertad
es la racionalidad dommante hacer propuestas para llenar el (autonomía) y a la igualdad
actualmente; separa hechos vacío jurídico que se hace eviden- (justicia), es decir, recuerdan
y valores, separa las te ante ciertos avances en biomedi- la exigencia ética fundamental
recomendaciones técnicas cina. Por otro lado, debe pensar y de hacer el bien y
de las orientaciones

-
de la conducta.
proponer los mínimos éticos para
regular la convivencia y promo-
ver el bien común, en una socie-
-
evitar el mal.

y estos cuatro principios, ¿de


y las posibles respuestas, la dad que es plural y tiene diferen- dónde han salido? En el trasfon-
bioética las elabora dentro de un tes ideales de vida buena. do de cada uno de estos principios
marco que le es propio y caracte- Encerrarse en alguno de estos hay toda una tradición médica y
rístico: el diálogo entre la raciona- tipos de racionalidad es negar, ya filosófica importante y su origen
lidad científico-técnica, la racio- de entrada, la posibilidad de diá- se encuentra en fuentes diversas y
nalidad ético-filósofica y la logo y por tanto la posibilidad de fácilmente identificables: en la tra-
racionalidad jurídico-politica; tres hacer bioética. Intentar hacer dia- dición de la deontología médica
racionalidades que son diferentes logar estas tres racionalidades e (los principios de no maleficencia
(pluridisciplinariedad), pero que interaccionarlas es un objetivo y beneficencia) y en la tradición
la bioética se esfuerza en promo- prioritario en bioética. judeo-cristiana y en la ética filo-
ver su interacción (interdiscipli- Ante la dificultad, muy acentua- sófica (los principios de autono-
nariedad). La racionalidad cientí- da hoy día. de determinar los prin- mía y justicia). YJ por otro lado,
fico-técnica -llamada también cipios últimos que deben regir estos cuatro principios son una
racionalidad instrumental- es la nuestra conducta en el ámbito de forma de afirmar los derechos fun-
racionalidad dominante actual- las ciencias de la vida y de la salud damentales a la vida (no male-

abril 2002
~I Institut 80fja de Bloétlca
ficencía y beneficencia), a la liber- en bioética comparten el mismo miento. Las metodologías son ins-
tad (autonomía) y a la igualdad objetivo: resolver problemas ylo trumentos, herramientas, para
Gusticia), es decir, recuerdan la dilemas éticos; pero se diferen- ayudar a los profesionales sanita-
exigencia ética fundamental de cian en los distintos pasos que rios a conseguir que en su práctica
hacer el bien y evitar el mal. A la deben hacerse; cada mecodología clínica la corrección técnica vaya
. .
hora de definir los cuatro princi- propone un cammo o un recorn- siempre acompañada de la correc-
pios no hay unanimidad. Accual- do propio. ción ética, esto es, que las decisio-
mente, su sentido todavía no está En el ámbico norteamericano hay nes que se tomen, repitámoslo una
bien precisado y es objeto de de- dos metodologías que sobresalen, vez más, sean decisiones raciona-
bate entre los expertos en bioética. son metodologías diferentes y les, razonables y prudentes.
Ofrecemos la interpretación más hasta opuestas, pero las dos son Otro instrumento importante al
común hasta ahora. El principio usadas ampliamente en biomedi- servicio de la bioética son los lla-
de no maleficencia designa la obli- cina. Se trata del método princi- mados comités de ética o bioética7•
gación de no hacer daño al otro, pialista (o principialismo) y de la En general, los podemos definir
tanto por acción como por omi- corriente casuista (o casuismo)5. como un grupo multidisciplinar,
sión. El principio de beneficencia Según el método principialista es es decir, un grupo de personas
quiere decir hacer el bien, pero posible aclarar, y algunas veces expertas en diversos saberes (me-
teniendo en cuenta que ese bien resolver, los problemas éticos de dicina, biología, filosofía, dere-
no es independiente de la autono- la biomedicina si estos problemas cho ... ) que, desde la diversidad
mía del individuo al cual se pre- se analizan a la luz de los cuatro profesional e ideológica, y a tra-
tende hacer el bien. El principio principios de la bioética. En el vés de un diálogo interdisciplinar,
de autonomía hace referencia a la polo opuesto al método princi- estudia las cuestiones éticas que
capacidad del sujeto humano de pialista surge, también en la plantea el desarrollo y la aplica-
tomar libremente y responsable- bioética norteamericana, la co- ción de las ciencias de la vida y de
mente sus decisiones. Finalmen- rriente llamada casuista. Se trata la salud, e intenta dar respuestas

-
te, el principio de justicia exige de un método que no parte de los fundamentadas racionalmente.
tratar a todos con la misma consi- principios éticos sino de los casos

-
deración y respeto 4 • clínicos concretos. Ante estos dos Los Comités de Étlca
métodos es recomendable no caer Asistencial son de carácter
Las metodologías son ni en la "tirania de los principios'" consultivo, y ayudan a anali-
instrumentos, herramientas, ni en ~eJ abuso de la casuística". zar los problemas éticos que
para ayudar a los En Europa las metodologías in- puedan surgir en el ámbito
profesionales sanitarios a tentarán compaginar la búsqueda hospitalario, teniendo por
conseguir que en su práctica de fundamentos -la preocupación objetivo último mejorar la
clín ica la corrección técnica
vaya siempre acompañada
propia de la tradición filosófica y
ética europea-, con el utilitarismo -
calidad asistencial.

-
de la corrección ética.

Además, de estos cuatro princi-


pios y de otras referencias éticas,
y pragmatismo anglosajón 6 : es
decir, tendrán en cuenta los prin-
cipios, pero también las conse-
cuencias de los actos y, a partir de
Los comités de bioética se pue-
den clasificar en dos bloques: por
una parte hay los comités que de-
penden de una instancia nacional
la bioética trabaja con diferentes esta complementariedad, se inten- o supranacional (por ejemplo el
metodologías a fin de optimizar la ta que las decisiones u opciones a Comité Consultativo Nacional de
corrección ética de la toma de de- tomar estén justificadas racional- Ética para las Ciencias de la Vida
cisiones en el ámbito de las cien- mente. Entre este tipo de metodo- y de la Salud (CCNE), creado en
cias de la vida y de la salud. Como logías se podrían mencionar, como Francia en 1983; el Comité Direc-
es sabido, una metodología es un más significativas, entre nosotros, tor para la Bioética, fundado en
camino que se sigue para llegar a la del Dr. Francesc Abel y la del 1985 por el Consejo de Europa; y
un determinado objetivo. Todas profesor Diego Gracia y de algu- el Comité Internacional de Bioé-
las metodologías que se utilizan nos bioeticistas afines a su pensa- tica de la UNESCO, en funciona-

abrí! 2002
r"1 Institut BorjB de BioMca
miento desde el 1993. Por otra puede confundir la legalidad y la Notas Bibliográficas;
parte, están los comités que de- moralidad. No todo lo que es le- (1) Pua un comentario sobre la tra~­

-
penden de una instancia local (por gal es moral, y al revés. cendencia de estas tres revoluciones cr.
ejemplo Comités Éticos de Inves- D. GRACIA, Fundamentación y ense-
tigación Clínica, que velan por la Este nuevo saber llamado ñanza de la bioétlca, Ed. El Buho, S¡¡nta
"blOética", podemos decir que Fe de Bogoü, 1998, p.12- J 7. También J.
corrección metodológica, ética y
BERNARD, La bioétiea, Deb¡¡te -
jurídica de cualquier proyecto de no se tra ta de una disciplina Dominos, Madrid, 1994, p.15ss.
investigación y los Comités de inventada para poner freno a
Ética Asistencial, que son de ca- la cienda y a la tecnología y (2) Ver el ajusudo y completo análisis
rácter consultivo, y ayudan a ana- así recortar la creatividad de que h¡¡ee de estn dos visione~ F. ABEL,
Bioética: ongenes,preseme y futuro, IBB-
lizar los problemas éticos que los científicos e investigadores, Fundación Mapfre Medicina, Madrid,
puedan surgir en el ámbito hospi- sino más bien debe ser consi- 2001, p.12, 15-16, 25-37.
talario, teniendo por objetivo úl- derada como una contribución
timo mejorar la calidad asistencial. a la evolución y madurez ética (3) Cf. G. DURAND. /mroduetion
Con demasiada frecuencia, ante
la complejidad de los problemas
éticos que la bioética intentaclari-
ficar y resolver, se ha recurrido
-
de las socieda des.

Después de esta visión rápida y


panorámica sobre el conjunto de
générale a la bioéthique, Cerf, Québec,
1999. p.l51-16 1.

(4) Estos CU¡¡tro principios ¡¡demás de


ser tratados por varios biDeticistas se en-
innecesariamente a pedir auxilio este nuevo saber llamado "bioéti- cuentun ampli¡¡mente explicados en : G.
HOTTOIS ct J-N. MISSA, NoU've/le
al derecho. Es cierto que la bioética ca", podemos decir que no se trata
encyclopidle de blOéthlque. De Boeck
y el llamado bioderecho están es- de una disciplina inventada para Université, Bruxelles, 2001 yen el famo-
trechamente relacionados, pero poner freno a la ciencia y a la so libro de T.L. BEAUC H AM P i J.F.
también hay que tener presente tecnología y así recortar la creati- CHILDRESS; PrmClpios de ética bio-
que pertenecen a ámbitos diferen- vidad de los científicos e investi- médica, Masson, Barcelona, 1998.

tcs. La bioética no debe someterse gadores, sino más bien debe ser (5) Además del cDnDcidD libro de D.
al derecho, o dicho de otra forma, considerada como una contribu- G RA C lA, Procedimientos de decúión en
no debe juridificarse 8, porque de ción a la evolución y madurez étIca e/iniea, Eudcma, Madrid, 1991, re-
esa forma corre el peligro de que- ética de las sociedades y una invi- sulu interesante consultar T.L. BEA U-
CHAMP i J.F. C HI LDRESS, p.20-36,
dar desdibujada, y hasta puede tación a intentar gestionar de una
67-94; G. D URAND, p.60-63; 96-98;

-
dejar de ser bioética.

Hay que saber artlcular ética


y derecho, pero respetando las
manera creativa y responsable la
vida humana y la vida en general.
Se trata "de hacer el esfuerzo de
prever lo imprevisible para preve-
437-452 .

(6) Cf. A. KAI-IN, Et I'homme daru tout


fa? Pla/doyerpounm humanume moderne,
Nil Editions. Paris. 2000, p.70-79.
peculiaridades de cada disci- nir lo irreversible". Y todos los
plina. No se puede confundir ciudadanos deberíamos sentirnos (7) Para toda la cuestión de ID5 comités
la legalidad y la moralidad. implicados en este arduo pero de ética: funciones, modalidades, dificul-
N o todo lo que es legal es apasionante esfuerzo. tades y posibilidades continuan siendo
pUntO de referencia obligada las ¡¡POrta-

-
moral, y al re'1Jés.

Eso no quiere decir que ética y


ciones de F. ABEL en diversas publica-
ciones especializadas; Aquí remilim()S a
su últimD libro:, Bioe/iea: origenes, pre-
derecho tengan que vivir ignorán- ESTER BUSQUETS 1 AUBfs sente y futuro: p.44-'U, t 03-115, 130-
dose mútuamente. Como dice RESPONSABLE DE ENFERMERIA DEL IBB 137, 195-201; Cf. También el interesante
Irabajo de G. HOrrO IS, Demande et
acertadamente el bioeticista Diego PROF . BIOÉTlCA UNIVERSIDAD DE VIC
reful d'un rontróle éthique de la saence,
Gracia "el bioderecho sin la p.J05ss m AA. VV. Contró/er la saenee?,
bioética es ciego, y la bioética sin el JOAN MIR I TUBAV De Boeck U nivcrsité, BruxeUes, 1990.;
bioderecho resulta vada". Hay PROF , Blo~nCA UNIVERSIDAD DE VIC G. DURAND, P.491ss.
MÁSTER EN BIO~TICA
que saber articular ética y dere-
(8) Ver el excelente artículo de M.
cho, pero respetando las peculia- AT1ENZAJuridificarla bioética en Cla-
ridades de cada disciplina. No se ves de razón práctica, p.2-15.

abril 2002 Institut Borja de Bioétlca


La ética del cuidar
Introducción . La ética no que está enfermo, que sufre, o preeminencia de la medicina sería
del cuidado en las que padece alguna" anormalidad" total, ya que la labor de la enfer~
profesiones sanitarios en el sentido de tener alguna dife- mería es, en este esquema, mera-
rencia que le incapacite de alguna mente subsidiaria. A ello cabe aña-
La ética del cuidado es un mode- manera para realizar su proyecto dir que la distinción de roles por
lo de fundamentación que recu- vital. Se trata de una labor en la géneros contribuye a esta diferen-
pera algunas dimensiones de la que se pretende el restablecimien- cia de valoración en sociedades
moralidad olvidadas o sometidas to de la situación de "normali- tradicionalmente sexistas donde
al dominio de las aproximaciones dad" o salud, o, al menos el alivio el papel de la mujer se ha conside-
del deber y la justicia. Sin embar- del sufrimiento. Por eso es in- rado con frecuencia inferior en
go, no es tanta su novedad como comprensible sin acoger el ele- importancia y subordinado al de
se suele creer. En la historia de la mento de cuidado, atención, es- los varones.

-
filosofía pueden citarse varios cucha, consuelo. Esca distinción entre curación y
ejemplos de autores, como M. cuidado difícilmente se sostiene.
Heidegger o P. Ricoeur, que han La tarea profesional de la La diferenciación ha servido para
insistido en la dimensión de soli- enfermería es una práctica justificar una organización insti-
citud y atención al otro, como moral en la que el cuidado tucional que es indefendible en el
clave de la ética. La aportación de
C. Gilligan al debate sobre el de-
sarrollo moral, sirvió como lla-
mada de atención, desde el punto
-
cobra su máxima 'Uigenda.

Sin embargo, en nuestros días


tendemos a disociar ambos ele-
mundo actual. La enfermería y la
medicina forman parte de un úni-
co acto sanitario, por más que sus
funciones sean diferentes, que sean
de vista psicológico y pedagógi- mentos como si se tratara de dos distintos los focos de atención que
co, acerca de los modelos unilate- tareas diferentes: la medicina se cada una de eUas enfatiza, que sean
rales con los que se venía traba- ocuparía de la curación de los en~ profesiones con características di-
jando. Desde entonces se ha fermos, mientras que la enfer~ versas, y que no puedan confundir-
convertido en un punto de referen~ mena tendría por objeto el cuida- se. La especificidad de cada una de
cia obligado, porque varias autoras do y atención de los mismos. La ellas no se pone en duda. Pero sí el
han encontrado una fuente de ins- meta final sería la misma, qué duda extremo de su diferenciación que
piración y fundamentación para cabe: el bienestardel paciente. Pero origina dos absurdos: o bien la
la ética de la enfermería, que tan el bien interno que define cada anulación de la tarea de la enfer-
necesitada está de una reflexión una de las profesiones sena abso- mería, que quedaría subsumida
sobre su misma identidad. Suele lutamente distinto. Tanto es así en la medicina, como quehacer
situarse, pues, la ética del cuidado que suelen presentarse los dos tér- auxiliar; o bien la distanciación de
en relación con la ética de la enfer- minos como dicotomía y binomio las dos labores, como si no tuvie-
mena, sin embargo no es exclusiva de opuestos, especial-mente en el ran relación, cuando, en realidad,
de eUa. La ética de la enfermería es mundo anglosajón donde se utili- además de complementarse, am-
una ética del cuidado, porque el za un juego de palabras: cure/care. bas son tareas basadas en el cuida-
bien interno de la profesión es Cure (=curar) sería la labor de la do.
necesariamente el cuidado. 1 Sin medicina, sabiduría técnica, habi- A pesar de esta coincidencia en el
embargo, no es cierta la contraria: tualmente ejercida por varones; cuidado como elemento que da
no toda ética del cuidado es una Care (=cuidar) sena la labor de la sentido a las tareas sanitarias en su
ética de la enfermería. enfermería, práctica de asistencia conjunto, es claro que la tarea pro-
No es absurdo afirmar que el solícita, habitualmente ejercida fesional de la enfermería es una
acto sanitario es, por excelencia, por mUJeres. práctica moral en la que el cuida-
un acto basado en el cuidado. La La diferente valoración de am- do cobra su máxima vigencia. De
atención solícita al otro ser huma- bas tareas es bien conocida: la ahí queen la actualidad la éticadel

abril 2002 t ... Instltut Bo~a de aloética


cuidado sea uno de los puntos forma parte de un grupo de pers- las que predomina lo correcto
básicos de la ética de la enferme- pectivas de la enfermería que la como objeto de la ética, en las que
ría. Así lo han defendido buena entienden como una entrega a una se busca la justicia imparcial e
pane de las autoras que recogen comunicación intensa con el pa- igualitaria, y la defensa de los de-
las aportaciones de Gilligan, ciente, de modo que haya una rechos, como base de unos míni-
reinterpretándola desde la pers- mutua implicación que posibilite mos para la convivencia. En esos
pectiva del nuevo rol de la enfer- conocerse como personas y cre- modelos, denominados de modo
mera que cumple una labor del cer conjuntamente. global "éticas de la justicia", la
cuidado contrapuesta a la aproxi- Este énfasis en la importancia virtud queda restringida al ámbi-
mación "masculina" de la justicia. del cuidado en enfermería no obs- to privado, referida a las creencias
En este grupo se sitúa, por ejem- ta a la afirmación de que el cuida- u opciones personales.
plo, N. Noddings, cuya obra ha do hace referencia a la tarea pro- El modelo de la justicia permite
tenido un gran éxito y ha sido pia de la asistencia sanitaria en articular la sociedad mediante la
recogida y desarrollada por otras general, en cuanto que enfatiza la defensa de las ideas de libertad e
autoras como V. Tschudin, M.S. dimensión relacional de esta la- igualdad que están en la base de

-
Roach, P. Benner o S. Fry. bor. Si la ética del cuidado ha ser- los sistemas democráticos del es-
vido para algo ha sido para acen- tado de derecho, pero olvida, o al
La ética del midado logra tuar cómo un énfasis excesivo en menos deja en segundo plano, di-
recuperar las emociones para las tareas técnicas puede perder de mensiones importantes de la ética
la vida moral, insistierldo en vista el elemento de relación y como las emociones, la voluntad,
que los problemas reales )' comunicación humana que sub- lo afectivo, etc. Estos son elemen-
vitales t'Xigen prudenCIa, yace y da sentido a las mismas. Y, toS que componen la vida moral
responsabilidad, )' accIOnes por otro lado, su insistencia en los de las personas, pero que no tie-

-
personalizadas.

El puma de partida de No-


ddingsl es la distinción entre el
elementos contextuales sirve de
contrapunto necesario para la éti-
ca de la justicia, ceñida a la preo-
cupación por lo universal y por la
nen cabida en un modelo de
fundamentación racional de corte
lógico y deductivista, en el que se
pretende la universalización im-
"cuidado natural" yel "cuidado imparcialidad. En el fondo, se tra- parcial.
ético". El primero está basado en ta de elaborar una reflexión sobre La ética del cuidado recupera esas
una inclinación natural, una res- los fines de las tareas asistenciales, dimensiones, insistiendo en la
puesta afectiva básica aprendida además de sobre los medios. El incompletitud de los modelos de
en el núcleo familiar. Desde este hincapié en los procedimientos la justicia y reivindicando la im-
cuidado natural, que surge sin es- puede perder de vista los objeti- portancia ética que tienen las acti-
fuerzo, hay una expansión hacia vos, los valores que se pretende tudes de comprensión y preocu-
la preocupación por las otras per- salvaguardar. Esos fines no están pación por las personas y sus
sonas, que dará lugar al cuidado predeterminados, ni son eviden- particularidades. Especialmente
ético. El cuidado, pues, sería algo tes, dependen de una cierta mane- enfatiza la idea de solidaridad,
asequible a todas las personas, ra de comprender al ser humano, entendida como preocupación y
aunque es más propio de la expe- de unas opciones de valor. responsabilidad por el Otro ser
riencia femenina, en la medida en humano, en la convicción de que
que deriva del cuidado recibido. Característícas de sin ella no es posible la realización
Es una preocupación por uno la ética del cuidado de la justicia.
mismo que se transforma en cui- La propuesta de C. Gilligan pue-
dado del otro y que permite que la Como ya se ha indicado, la ética de situarse en este marco. La no-
relación sanitaria sea un compro- del cuidado es, ante todo, un mo- vedad de su teoría reside, por un
. .
miso que permite un crecimiento delo ético que viene a compensar lado, en establecer una conexión
personal por parte de los implica- la preeminencia de las propuestas con la cuestión del género, y por
dos en ella. Esta idea ha tenido que se han impuesto mayormente otro, en trabajar desde la psicolo-
una acogida bastante amplia, y desde la Modernidad, aquel1as en gía del desarrollo moral. Su io-

abril ZOOZ 1:1 Institut Borja de Bloétlca


fluencia ha sido enorme en la psi- aspectos que tienen más que ver de verse cómo justicia y cuidado
cología, la filosofía, la teoría femi- con la justicia: la imparcialidad, han de articularse, matizando re-

-
nista y en la bioética, especial- los derechos y las reglas. cíprocamente sus demandas y
mente en la ética de la enfermería. objetivos.
Su obra más famosa, ¡na Dlfferent La compasión y el clndado El respeto a la individualidad
Voice. Psychological Theory and han de complementarse con exige que los sanitarios sean sen-
Women'sDevelopment,3 muestra los presupuestos sibles a las peculiares característi-
cómo el desarrollo moral de las universalizables de justicia, cas del paciente en cuanto perso-
mujeres sigue un "'patrón" dife- como un contrapunto na con unos valores y un proyecto
rente al de los varones. Intentan- necesano que marca vital. En la relación que con él o
do subsanar las deficiencias la madurez ella establezcan deberán ofrecer
percibidas en la teoría del desa-
rrollo moral de su maestro L.
Kohlberg, Gilligan plantea dile-
mas morales a varones y mujeres,
-
del desarrollo moral.

La ética del cuidado logra recu-


perar las emociones para la vida
consuelo y apoyo, escuchar y
aconsejar, pero siempre determi-
nar los bienes conforme a su liber-
tad. Una mala comprensión de la
a fin de observar si sus respuestas moral, insistiendo en que los pro- beneficencia desde la ética del cui-
difieren. La conclusión de su es- blemas reales y vitales exigen pru- dado, podría incurrir en una suer-
tudio es que los primeros tienden dencia, responsabilidad, y accio- te de "'maternalismo" que atenta-
a analizar los conflictos morales nes personalizadas, y no un mero ría contra el derecho a la libertad
en función de derechos en pugna, análisis racional hipotético. Sin de opción por parte del paciente.
aplicando sistemas de evaluación embargo, esta demanda no es ex- En este sentido, el encuentro per-
imparcial, basados en la libertad y clusiva de las profesiones sanita- sonal en la relación sanitaria, que
la igualdad. Por su parte, las muje- rias, ni se trata de una reivindica- defienden algunos modelos de éti-
res tienden a enfocar los proble- ción de la aportación femenina a ca del cuidado (aplicados a la en-
mas desde una perspectiva más la ética, se trata de una verdadera fermería) como "relación total"
relacional, en la que prima el com- transformación de la humanidad en la que se produce una identifi-
promiso y la responsabi lidad por que supone una ganancia Irrenun- cación que resulta gratificante y
las personas, atendiendo a sus pe- ciable a la altura de nuestro tiem- enriquecedora para ambas partes,
culiaridades y situaciones concre- po: la solidaridad. Con ello trae al exigiría una atención desmesura-
tas. ámbito público lo que la ética de la da por parte de la enfermera (y de
Gilligan considera que estos re- justicia había relegado a lo priva- cualquier otro profesional sanita-
sultados hacen ver cómo las mu- do: los valores de atención al otro, rio), pondría en peligro la objeti-
jeres tienen una "'voz diferente" el compromiso moral ante la in- vidad con la que debe realizar la-
de la de los varones, que ha sido terpe lación de las personas que bores determinadas por la justicia
predominante en nuestra cultura, necesitan ayuda, y la formación y no por la beneficencia, e impon-
y aboga por la recuperación de de actitudes de responsabilidad. dría un modo de realización per-
esas dimensiones éticas que jue- sonal a los participantes de la rela-
gan un papel fundamental en las La incompletitud del ción que no siempre es posible o
acciones de las personas. Su pro- modelo del cuidado y la deseable. Lo cual no quiere decir
puesta no es tanto una reivindica- necesidad de la articulación que no pueda establecerse como
ción feminista, cuanto una mani- con el modelo de la justicia un máximo propio de las opcio-
festación de la necesidad de una nes morales de las personas impli-
articulación entre ambos mode- Sin embargo, como se ha indica- cadas, y que resulte realizable.
los . La madurez en el desarrollo do, el cuidado, con ser importan- Pero no puede ser exigible como
moral tiene que ver con un doble te, no es suficiente. Un modelo no un minimo de la tarea profesional
desarrollo, tanto en los aspectos puede ser sustituido por otro, sino de la enfermería, ni de las profe-
relacionados con el cuidado: la complementado con él. En la rela- siones sociosanitarias en general.
responsabilidad, la coexistencia- ción sanitaria, quizá más clara- El cuidado, como atención solí-
lidad y las relaciones, como en los mente que en otros ámbitos, pue- cita al otro que requiere ayuda, no

abril 2002 Instltut Bo~a de Bloética


es renunciable, pero su ejercicio imparcialidad, ha de completarse ética del cuidado y la ética de la
debe realizarse en el marco de la con una ética de la responsabili- JUStiCIa.
justicia. Una defensa exclusiva del dad que acentúe y coloque en su La ética del cuidado es una de las
cuidado puede llevar a un exceso justo lugar la diferencia. La com- claves de la ética de los sanitarios
de celo en un malentendido ejer- pasión y el cuidado han de com- en la actualidad. Su insistencia en
cicio de la beneficencia que sobre- plementarse con los presupuestos las dimensiones de ayuda y aten-
pase el respeto debido a la auto- universalizables de justicia, como ción al otro enlazan también con
nomía del paciente, pero además un contrapunto necesano que los modelos de humanización de
puede emrar en conflicto con otros marca la madurez del desarrollo la asistencia sanitaria. Sin embar-
principios de rango superior, moral. Esa tensión entre ambos go, esto no es todo. La ética del
como la justicia y la no male- elementos es un modo de integra- cuidado, como se dijo al comien-
ficencia. El elememo de cuidado ción de dos experiencias diferen- zo, es un modelo ético que com-
tiene aspectos de exigencia de mí- tes pero conectadas. pleta y matiza el enfoque de la
nimos, y también niveles de máxi-
mos, y es preciso no olvidar estos
dos niveles.
-
La compasión y el cuidado
han de complementarse
justicia. Se trata de una propuesta
para la humanidad en su conjun-
to: la convicción de que el mero
Aunque se tiende a pensar que el con los presupuestos respeto a la libertad de los indivi-
cuidado es lo opuesto a la justicia, unÍversalizables de justicia, duos y la imparcialidad a la hora
y que las dos tradiciones son dis- como un contrapunto de tratarlos como iguales, con ser
pares porque sus acemos se sitúan necesario que marca la fundamentales y básicos para la
en perspectivas incomunicables
entre sí, no hay nada más alejado
de la realidad. Ambos son ele-
mentos que se necesitan mutua-
-
madurez del desarrollo moral.

Esta unión es posible utilizando


la distinción entre éticas de máxi-
construcción de la convivencia,
no son suficientes para dar cuenta
de la complejidad de los actos
morales, ni prestan la atención
mente y una ética a la altura de mos y éticas de mínimos. Desde debida a un elemento que es tam-
nuestro tiempo no puede renun- ella es posible afirmar que el para- bién fundamental en el reconoci-
ciar a ninguno de ellos. El olvido digma de la justicia es vacío si se miento del otro ser humano como
del cuidado y del enfoque más construye desde la racionalidad persona, la responsabilidad soli-
contextual y relacional lleva a una ajena a una moralidad que es más daria.
ética excesivameme impersonal y rica en contenidos y cuya dota-
fría, que, acogida a sus principios, ción de sentido proviene de un
no atiende a la realidad de la vida. ideal de perfección. El perímetro LYDIA FEITO GRANDE
Por su parte, el olvido de la justi- de la justicia se ve así ampliado y DOCTORA EN FILOSOFiA
cia y su énfasis en la imparcialidad completado alcanzando su verda- MASTER EN 810~TICA
PIl:OFESORA DE 810~TICA
yen los derechos, lleva a una ética dero sentido, pues esos otros ele- UNIVERSIDAD REY JUAN CARLOS (MADRID)
débil y arbitraria, poco útil para mentos, aparentemente dispares,
las decisiones más allá del nivel no son meros adornos para el edi-
estrictamente individual. Por tan- ficio de la ética, sino los verdade- (1) Las ideas aquí expresadas se han
to se trata de dos aproximaciones desarrollado con mayor amplitud en: L.
ros pilares de su consistencia. Del
Feito, ttica profeJional de la enfermeria.
que han de combinarse. mismo modo, la ética de la solici- Filosofía de /01 enfermería como érica drl
La relación interpersonal que se tud y el cuidado, la ética de la cuidado. PPC. Madrid, 2000.
da en la relación sanitaria, permite realización personal, la autoim-
(2) N . Noddings. C<lring: a feminine
reconocer al individuo, al otro, posición de un grado de excelen-
<lpproach to ethlc$ and moral ed/lcaÚon.
como fuerza moral que exige una cia, son ciegas e inviables si no se Universityof California PreS!o Berkeley,
responsabilidad. Pero la amplia- dan en el marco de la justicia y la 1984.
ción de esa responsabilidad más universalidad. La articulación en-
(3) C. Gilligan, In a DiffemJt Voice.
allá de esa persona, al conjunto de tre ambos es muestra de la riqueza Psychological Theory and Women's
la humanidad, exige la justicia. La de la vida moral y va más allá de Devrlopmem. Harvard University Press.
ética de los derechos, basada en la una aparente controversia entre la Cambridge, 1982 .

abri/2002 1[1 Instltut Bo~a de Bloétlca


El consentimiento informado
y la enfermería
l hablar de consentimiento tratamiento y, a la vez, se le priva- Implicación de la enferme-
A informado (el) es interesan-
te hacer referencia a un grupo de
ba de participar en la toma de
decisiones en materia de salud. Se
ria en el proceso de infor·
mación yel:
textos internacionales y naciona- potenciaba mucho el principio de En Cataluña uno de los docu-
les que ponen de relieve la necesi- beneficencia, entendido en el sen- mentos más conocidos en el ámbi-
dad de informar e implicar al cn- 6do de hacer bien al enfermo des- to sanitario, en referencia al tema
fcrmo en la toma de decisiones. de el pumo de vista de la medici- tratado, es la Guía de Recomen-
Textos como ahora el Código de na, y se ignoraba el principio de daciones sobre el Consentimiento
Nurembcrg(t 947), la Declaración autonomía, es decir, la capacidad Informado, este documento defi-
Universal de 105 Derechos Hu- de la persona de tomar libremente ne el consentimiento informado
manos (1948), la primera Carta de sus decisiones. Esta actitud como: '"la aceptación por parte de
Dcrechosde los Enfermos (1973), paternalista .. protectora", hacía un enfermo competente de un pro-
la Carta de los Derechos del en- que el enfermo no pudiese ejercer cedimiento diagnóstico o terapéuti-
fermo del hospital (1984), la Ley su autonomia como una persona co después de tener la información
General de Sanidad (1986), la Guía adulta. También es cierto, y en adecuada para poderse implicar li-
de Recomendaciones sobrcel Con- honor a la verdad debe decirse, bremente en la decisión". Para que
sentimiento Informado (1997), han que a pesar de todo, existía una pueda desarrollarse el proceso de
desempeñado un papel importante verdadera confianza por parte del conscntimienro informado hacen
en la gran transformación que ha paciente hacia '"su" médico, cosa falta unos requisitos básicos: li-
experimentado la relación sanitaria que en la actualidad, no se puede bertad de la persona para poder
en el último medio siglo, en la cual apreciar, al menos de una forma decidir, haber recibido informa-
la práctica del patcrnalismo se tie- generalizada. Pero se debe tener ción comprensible y en cantidad
ne que ir substituyendo por el presente que el paternalismo no suficienre, capacidad de la perso~
reconocimiento de la capacidad era practicado sólo por los médi- na para poder comprender y valo-
de decisión del enfermo. Parece cos, sino también por todos los rar los riesgos y beneficios, y fi-
que fue Montesquieu quien dijo otros profesionales de la salud, nalmente la decisión, que en
que: "cuando un pueblo tienebue- entre eUos los profesionales de la determinados casos conducirá a la
nas costumbres, las leyes son send- enfermería. firma de un documento de con-
llas·. Por tanto, todas las norma- Este cambio en la manera de sentimiento informado.
tivas, todas las indicaciones en pro concebir la relación sanitaria, es En el marco de este nuevo pano-
de la información a la persona, decir, el hecho de querer pasar rama, ¿la enfermería que puede
serían mucho más sencillas de de un modelo, basado en el hacer? La enfermería adquiere un
cumplir sí, ya de entrada, los pro- paternalismo, a otro, donde se compromiso profesional y perso-
fesionales sanitarios tuviésemos respeta el principio de autono- nal en el acto de cuidar. La rela-
buenas coscumbres, pero la pre- mía, exige una reflexión amplia y ción profesional que se establece
gunta es: ¿ Realmente tenemos metódica sobre cuáles deben ser entre la enfermera y el pacientel
buenas costumbres? las actitudes de los profesionales familia en este acto, está condicio-
La relación clínica se ha basado de la salud, ante esta transforma- nada por una responsabilidad de
históricamente en un esquema ción paradigmatica, en la cual el caráctcr ético, donde de manera
totalmente paterna lista, según el enfermo, a pesar de estar enfer- obvia surgen unos deberes y obli-
cual el médico decidía en nombre mo, no puede ser tratado como un gaciones para la enfermería. La
del enfermo. Con esta actitud era menor de edad, sino como una comunicación y la información ha-
inimaginable aceptar que el enfer- persona adulta, y por tanto con cia el paciente y las personas que él
mo tuviese derecho a recibir in- derecho a ser informado y a ejer- nos indique, cs uno de los deberes
formación sobre su diagnós6co y cer su autonomía. más importantes que debe cum-

abril 2002 1I1 Instltut Borja de Bloétlca


plir la enfermera, y más si tene- tiva que sería deseable. Para co- próximo y más intenso con el en-
mos en cuenta que es qUIen pasa rregir esta situación no basta decir fermo, sobretodo con aquellos
más horas y quien está mas cerca que no hay tiempo, debemos sa- enfermos hospitalizados. Este
del paciente. Desde la perspectiva ber argumentar y defender cuales acercamiento condiciona un cli-
de la enfermería, la información al son las prioridades, y analizar a ma de comunicación más fluido,
enfermo es beneficiosa en el senti- fondo cómo nos organizamos, que permite conocer mucho me-
do que nos demuestra que la im- cómo administramos los recur- jor el enfermo, las creencias y va-
plicación del enfermo en su pro- sos ... El espacio donde se da la in- lores que orientan su vida, sus
ceso de rehabilitación es la mejor formación también debe cuidarse. opiniones, sus dudas, la falta de
garantía para poder satisfacer sus información, ... porque el enfer-
necesidades básicas. .1',El proceso de información se mo se expresa con naturalidad
desarrolla, día a día, por parte de delante de la enfermera. Dentro
A tener en cuenta: todo el equipo interdisciplinar: de la estructura sanitaria se obser-
Debemos tener presente que el va que el el aún no se ha extendi-
¡/ El el es una responsabilidad consentimiento informado es un do de la manera que sería desea-
ética compartida entre todos los proceso de diálogo que se tiene ble. Con demasiada frecuencia el
profesionales: que adaptar a las necesidades de el se ha visto más como un requi-
Ya ha quedado claro que el en- cada paciente. Cabe mencionar la sito legal, que no como una mane-
fermo tiene derecho a recibir in- dificultad que vive la enfermería ra de respetar el derecho a la auto-
formación 1, por tanto, la enfer- cuando se encuentra con pacien- nomía, y de implicar al enfermo
mería además de dar la información tes sin información básica sobre en las decisiones que le efectan.
que es propia de sus competencias su proceso patológico. Hoy en Por tanto, el objetivo del el no es
profesionales, debe velar, por el día aún hay profesionales de la conseguir la firma inmediata de
bien del enfermo, porque los otros salud que no han incorporado un documento como mecanismo
profesionales sanitarios, sobreto- dentro de su hábito de trabajo, el de defensa legal, sino que el el,en
do médicos, no ahoguen este de- hecho de informar el pacience, el sentido ético, se basa en un proceso
recho a la información. saber trabajar el proceso de infor- de diálogo entre los profesionales y
mación conjuntamente con el el paciente, que debe permitir al
h Para informar y comunicar- equipo de profesionales de una enfermo ejercer su autonomía.
nos con el paciente y la familia manera participa ti va «aprove- Los profesionales de la enferme-
hace falta tener unas actitudes chando" los recursos de todos, ría, como miembros del equipo
específicas: haciendo de la información (y so- multidisciplinar, tienen una do-
Sí, somos conscientes de que te- bretodo la información "difícil") ble función: en primer lugar, tie-
nemos dificultades para comuni- un proceso planificado, debatido nen la obligación de cuestionar las
carnos con el paciente y/o familia, y consensuado ... Aún hay profe· actitudes de todos los profesiona-
tenemos la obligación de corregir sionales que no han acabado de ha- les sanitarios que recortan o no
nuestras lagunas, ya que sí no, la cer suyo el compromiso ético que respetan suficientemente la liber-
relación con el paciente y su en- todos tenemos de respetar y pro- tad del enfermo; y en segundo
torno quedará afectada, porque la mover la autonomía del enfermo. lugar, ellos deben comprometerse
atención asistencial que daremos Por último, es bueno recordar a respetar y promover el derecho
no será de suficiente calidad. que la enfermería goza de una po- que tiene el enfermo de ser infor-
sición privilegiada para poder ac- mado adecuadamente. De esta
.1 Para informar se debe d ispo- tuar como elemento fundamental manera, la enfermería demostrará
ner de tiempo suficiente yespa- en la integración y la práctica del -citando Montesquieu- que tiene
cios adecuados: consentimiento informado den- «buenas costumbres ".
Frecuentemente la sobrecarga de tro del ámbito sanitario. Esta po-
trabajo es uno de los obstáculos sici6n privilegiada le viene dada ANNA IGLESIAS SALLJ!:S
para que la comunicación enfer- por la posibilidad de establecer un ENFE~MERA HOSPITAL DE OlA ONCOLOGiA
mería-paciente no sea todo lo efec- contacto más continuado, más HOSPITAL GENERAL DE MANRESA

abrlJ2002
'J'. Institut Borja de Bloétlca
íjl-l-·III- _- [?JI 1- •• I-J-'¡ ..¡-

y la enfermería, ¿que podría decir?


Os medios de comunicación
L presentan, y cada vez con más
frecuencia, informaciones rela-
Las células madre El uso de células madre

cionadas con la bioética. Así, no Mica rIa va dirigida a los políticos Esta cartano sólo va dirigida a los
es extraño encontrar en las pági- de eiU. No soy un número, sino políticos, sino también a todos los
nas de los periódicos muchas no- una catalana con derechos y con ciudadanos que creen que usar cé-
ticias y amplios reportajes sobre sueños. Estoy enfenna de fibrosis lulas madres para poder curar cm-
quística y trasplantada de pulmón, fennedades es amoral. Un científi-
temas relacionados con la eutana-
pero creo que ustedes no saben co que ha trabajado con células
sia, el aborto, la clonación huma- qué significa esto. Ustedes no se madres en ratas ya ha conseguido
na o terapéutica, los alimentos ahogan, ni se ahogan sus hijos, ni que estos animales generen insulina.
transgénicos, etc ... Este hecho tie- sufren la angustia por el rechazo Este avance significa un rayo de
ne de bueno que pone a la palestra de un órgano trasplantado, ni son esperanza para muchos diabéticos,
pública una serie de cuestiones diabéticos, nipadecen Alzheimer, como mi hijo y mi sobrina. Sin em-
ni cáncer... Pero han denegado el bargo, algunas personas no ven con
éticas que afectan de una manera
uso de las células madre por buenos ojos que se siga adelante con
directa a todos los ciudadanos y motivos moralistas. Prefieren dejar la investigación para aplicarla des-
que, por tanto, reclaman un deba- los embriones congelados, y que pués en humanos. ¿Saben lo que
te social serio y conjunto. Pero, vivan ,pero que mueran niños en esto significaría para los diabéticos?
demasiadas veces,las informacio- los hospitaLes sin hacer nada. Llega Pues que na tendrídn que pincharse
nes periodísticas a las que tene- un momento en que con rezar no cinco o seis veces al día para inyec-
se consigue seguir respirando. Si tarse la insulina que su páncreas no
mos aceso no son suficientemente
sus hijos estuviesen como yo, quizá crea, ni pmcharse para saber su ín-
rigurosas, yeso hace que la pobla- su moral caería, como Cae la fe de dice de glucosa. ¿Es amoral intentar
ción, en general poco familiarizada muchos de nosotros en ustedes. El mejorar la calidad de vida a las
con la bioética, tenga concepciones PSOE puede estar equivocado, personas que sufren algút¡ tipo de
nubladas e inexactas, y en conse- incluso no gustarme, pero si ellos enfennedad que podría curarse si
cuencia haga juicios precipitados aprueban el uso de céLulas madre, todos fuéramos más solidarios?
sobre estos temas. Eso se puede les votaré.
comprobar, fácilmente, leyendo, El Periódico, 26-Marzo-200l El Periódico, 1-Abril-lOOl
por ejemplo, las múltiples "cartas
al director", en las cuales se opina
sobre temas de máxima actuali-
dad en bioética. educación para la salud, sino tam- científicos en el campo de la salud.
bién en la educación bioética de la Pero para poder desarrollar esta
• sociedad. Y esta responsabilidad responsabilidad educativa, es ob-
Desde la enfermería deberían
aportarse elementos de juicio educativa toca muy cerca a la en- vio decir que la enfermería deberá
que ayudasen a reflexionar fermería. De razones hay muchas, integrar, en el conjunto de sus
sobre las cuestiones éticas que la más relevante la encontramos conocimientos, una sólida forma-
plantean los avances en el hecho de que la enfermería es ción bioética, y, al mismo tiempo,
científicos en el campo el colectivo más numeroso en el tendrá q uc actualizarla converuen-
de la salud. ámbito sanitario, y, en muchos temente.
• casos, también el colectivo más He aquí, dos cartas al director
Ante este hecho sería deseable próximo y accesible a las personas que ejemplifican el problema que
que los profesionales sanitarios, enfermas. Por eso desde la enfer- planteamos y que sugieren una
generalmente con mucho menos mería deberían aportarse elemen- pregunta de este cipo: ¿Qué po-
poder de influencia que los me- tos de juicio que ayudasen a re- dría responder una enfermera de-
dios de comunicación en este cam- flexionar sobre las cuestiones lance de opiniones como las que se
po, tomaran parte no sólo en la éticas que plantean los avances expresan en estas cartas que re-

abril 2002 Institut Bo~a de Bioética


producimos? paliar las más diversas enfermeda- podrían ser algunas de las cues-
En primer lugar, la enfermería des, ya que de momento eso aún tiones que la enfermería podría
debería saber transmitir a estas no es técnicamente posible. Por ayudara pensar (no adictarque se
personas que los profesionales de tanto, no se puede dar como un debe hacer), a fin de que las perso-
la salud somos sensibles al sufri- hecho aquello que todavía no es nas afectadas--en eHe caso las dos
mienco y a los problemas perso- posible hacer. Si algún día de las autoras de las cartas al director y
nales y familiares ligados a la en- células madre se pueden obtener personas con una manera de pen-
fermedad, y que en nuestra labor los órganos deseados, continuará sar semejante- tuviesen más ele-
profesional queremos tratar a to- siendo pertinence preguntarse: mentos de juicio para elaboraruna
dos con la misma consideración y ¿Todo lo que se puede hacer téc- opinión personal y fundamen-

-
respeto. nicamente es bueno hacerlo?, ¿Au- tadasobrc el uso de célu las madre,
torizar el uso de células madre es a partir de una base más sólida que
La enfermería debería hacerse un avance para la humanidad? ¿ La la que facilitan algunos medios de
eco de la pregunta que, regulación jurídica de esta prácti- comunicación. Este ejercicio que
tratándose de células madre, ca debe extenderse a todo el mun- hemos hecho, desde la enferme-
es fundamental: ¿ Qué do? ¿Cómo hacerlo? ría, alrededor de dos opiniones
estatuto ético y jurídico
- sobre las células madre nos tocará

-
cabe otorgar al embrión?

En segundo lugar, la enfermería


debería hacerse eco de la preguma
Este ejercicio que hemos
hecho, desde la enfermería,
alrededor de dos opiniones
sobre las células madre nos
hacerlo a menudo con muchos
otros temas relacionados con la
bioética. Por eso es importante
que también la enfermería cola-
que, tratándose de células madre, tocará hacerlo a menudo bore en hacer reflexionar a la so-
es fundamental: ¿Qué estatuto con muchos otros temas ciedad.
ético y jurídico cabe otorgar al relacionados con la bioética.
embrión? Y esta es una cuestión Por eso es lmportante que
actualmen te tan controvertida q ue también la enfermería
no acepta respuestas ni fáciles ni colabore en hacer reflexionar ESTER BUSQUETS 1 ALlBtS
impulsivas. Preguntarse por el es-
tatuto ético y jurídico del em-
brión es tener que hacer freme a
un cúmulo de cuestiones muy
-
a la sociedad.

En tercer lugar, una vez expues-


tos algunos de los datos científi-
DIPLOMADA EN ENfERMER1A
lICENCIADA EN FILOSOflA
RESPONSABLE DE ENFERMER1A DElIBB

complejas, que no se pueden res- cos y plameados algunos inte-


ponder sólo desde la ciencia expe- rrogantes éticos, se debería hacer
rimental, sino que también se de- una valoración de los beneficios e
ben escuchar las ciencias humanas, inconveruences que podría con-
para dejar después que la sociedad llevar el uso de células madre. Por
decida democráticamente lo que tanto, nos podríamos preguntar:
cabe hacer: ¿Cuándo empieza la ¿Cuáles serán las consecuencias a
vida humana? ¿El embrión, es un medio y largo termino del uso de
ser humano? ¿El embrión, es un esta técnica? ¿En qué consistiría
ser humano en potencia? ¿ El em- un comportamiento prudente en
brión, es un sujeto de derechos? este campo? -entendiendo la pru-
¿En que momento se tiene que dencia en un sentido aristotélico,
empezar a proteger la vida hu - es decir, como "la cualidad que,
mana? .. Otro aspecto a tener en guiada por la verdad y por la ra-
cuenca es que, al menos de mo- zón, determina nuestra conducta
mento, usar células madre no quie- con respecto a las cosas quepueden
re decir poder obtener todos aque- ser buenas para el hombre"'-.
llos órganos necesarios para poder Todas estas, y aún muchas más,

abril 2002 Institut Boria de Bloética


«Enfermería una profesión de futuro»
a jornada «Enfermería una pro- zarse solícitamente por alguna de una universidad debe ser nece-
L fesión de (muro», organiza-
da el 7 de marzo por la ... Escola
cosa o alguna persona. Y añadía
«la necesidad del otro me interpe-
sariamente catedrático. Este he-
cho desdibuja los colectivos profe-
Universitaria d'Infermeria Sant la y me empuja a moverme. La sionales y favorece el prestigio
Joan de DéuJoo (Universidad de mirada del otro me suscita un profesional individuaL
Barcelona), pretendía crear un es- movimiento para salir de mí mis-
pacio de reflexión acerca de la pro-
fesión de enfermería, concreta-
mente en el papel que desarrolla la
mo y darle una respuesta. El hecho
de cuidar es un acto de atención
voluntaria en beneficio del otro:
-
El gran cambio sociológico
del siglo XX es la pérdida
enfermería en la humaruzación de los enfermeros y las enfermeras de autonomía de
la asistencia sanitaria y la imagen estamos en contacto con una serie las profesiones, lo cual ha
que los profesionales dan a la so- de personas con identidad propia originado -y esto se irá
ciedad. A pesar de que las aporta- que son para nosotros un estímulo acentuando- una tensión
ciones por parte de los diferentes
ponentes fueron numerosas, no-
sotros, aquí, sólo haremos un pe-
queño destacado a la ponencia: La
y una fuente de acción". Su inter-
vención finalizó con unos f1ashes
que pretendían hacer recordarque
los enfermeros y enfermeras «de-
-
entre profesionales y gestores.

Después de oír todas la inter-


venciones la conclusión final en-
enfermería: hacemos de las perso- bemos tenercon[zanza en nosotros torno a la jornada se podría resu-
nas nuestro punto de encuentro, a mismos, debemos reconocer que el mir diciendo que el futuro de la
cargo del Hno. Quim Erra, enfer- trabajo interdisciplinar es una po- enfermería está en saber redefinir
mero y Superior de la Orden de sibilidad de enriquecimiento pro- bien la profesión, saberla desarro-
San Juan de Dios -Provincia de fesiona~ también debemos dedi- llar mejor, ydeesta manera, cierta-
San Rafael-y también de la expo- car tiempo a pensar y formular mente, crecerá el prestigio social
sición de Jesús de Miguel, soció- aquello que hacemos a través de que tanto anhelamos.
logo y catedrático de la Universi - un lenguaje y un método científi-
dad de Barcelona, dentro de la co,y finalmente cabe recordar per-
mesa redonda <tLa imagen de la manentemente que la persona es
enfermería desde diferentes pers- el núcleo central hacia la cual se ESCOLA UNIV. O'INFERMERIA
pectivas». dirige nuestra profesión". J DÉu
-
SANT DAN DE
Jesús de Miguel, en el bloque UNIVERSIDAD DE 8ARCElONA
El núcleo de la profesión dedicado a la imagen social, trató
de enfermería es cuidar, esa cuestión desde la perspectiva
y cuidar es esforzarse sociológica. En su visión particu-
solícitamente por alguna lar sobre la enfermería habló de la

-
cosa o alguna persona.

Quim Erra, en el bloque dedicado


a la humanización, se preguntó por
lucha entre el estado, el capitalis-
mo y las profesiones, y el salto
sociológico que es[O representa:
el gran cambio sociológico del si-
el origen de la enfermería, un ori- glo XX es la pérdida de autono-
gen que se encuentra en la expe- mía de las profesiones, 10 cual ha
riencia, es decir, en saber dar res- originado -y es[O se irá acentuan-
puesta ante las situaciones de do- una tensión entre profesiona-
vulnerabilidad de las personas. El les y gestores. Hoy, un gestor de
núcleo de la profesión de enfer- un hospital no tiene porque ser un
mería es cuidar, y cuidar es esfor- médico, como tampoco el rector

abril 2002 Institut Bolja de Bioética


./ IX J ornadas N acio nales de Bioética "La ética ./ 3111 International DNA Sampling C onference,
del cuidar", organizadas po r la O rden Hospitalaria o rganizada po r " Genccics and society project- Centre
San Juan de Dios - Provincia Betica, para los días 31 de recherche endroit publjclt (U njversiry ofMontreal).
de mayo y 1de junio enJerez de la Frontera. Secretaría: para los días 5 a 8 de septiembre en Montreal (Canadá).
Hospital Juan Grande Uerez de la Frontera), Te!: Secretaría: Centre de recherche en droit public -
956-35.73.00; Fax 956- 18.48.02; Universitéde Montrea!. Tcl: 514-343-21-42; E-mail:
E- mai l: agaldran@jerez.betica.sanjuandedios-ob.es conferenceADN@droit.umontreaLca

./ l1 emeCoUoqu e de laCNC P "LaProtectiondes ./ XX Reunión C ientífica de la Sociedad Española


Personnes se Pretant ala Recherche Biomédicale a de Epidemiolog ía "Genero y salud: la v isión
l'heure Européenne". organjzado por la Conferénce ep idemiológica", organizada po r la Sociedad
Nationale des Comités Consultatifs de Protcction Españo la de Epidemiología para los días 12 a 14 de
des Personnes dans la Recherchc Biomédicale, para septiembre en Barcelona. Secretaría: Suport Scrvcis.
los días 31 de mayo y 1 de junio en Paris. Secretaría: Tcl: 93.201.75 .7 1; Fax 93.201.97.89; E-mail:
Madame Danie!e Depret-Rius, CCPPRB Paris - suPOrt@suportserveis.com
Neckcr. 156 ruede Vaugirard -75730 Paris cedex 15.
Tel: 33.1. 40 61 5653; Fax: 33.1. 40 61 5588; E-mail: ./ EAC ME Annual C onference ocEnd of life
depret@necker.fr decisions", organizado por la . . Eu ropean Association
of Centres of Medical Ethics" (EACME) para e! día
./ V C ongreso N acio nal de la Asociación de 27 de sepciembreen Maastricht (Holand a). Secretaría:
Bioética Fundamental y C línica. organizado por la EACME ExecutiveOffice, Univ. OfMaastrichtP.O.
ABFyC, para los días 6 a 8 de junio en Madrid. Box 616 6200 MD Maastricht (fhe Netherlands). T el:
Secretaría: Viajes Guadatour, S.A.. Te!: (949) 21 .77.86; 31-43-388.21.45; Fax: 31 - 43 -388.41.71; E-mai l:
Fax: (949) 22.99.26; E- mail: guadatour@injcia.es secrerariaat-ige@ige. unimaas.nl

./ 14th World Co ng ress o n Medi cal Law, ./ Internacional Conference "Between Technology
organizado por la .World Association for Medical andHumanity", organi zada por Caritas Vlaanderen
Lawlt para los días 11 a 15 de agosto en Maastricht (Bruselas), para los días 18 y 19deoctubreen Bruselas
(Holanda). Secretaría: Conference Agency Limburg (Bélgica). Secretaría: International Conference
P.O.Box 1402, 6201 BK Maastricht Tel: 31(0)43- Caritas Vlaanderen, Guimardstraat 1 1040 Brussels.
3619192; E-mail: cal.conferenceagency®WXs.nl Tel: 32-2-507.01.1 1; E- mail: post@caritas.be.

I, ~ I FUNDACION MAPFRE MEDICINA

abril 2002 InsUtut Bo4ja de Bloétlca

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