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UNIVERSIDAD PERUANA UNIÓN

FACULTAD DE TEOLOGÍA

HEBREO II

DOCENTE:

Dr. JORGE MAQUERA PLATÓN

POR

CRISTHIAN GEORGE ALAVE MAMANI

ÑAÑA Mayo

2018
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El sueño revelado y el futuro

El libro de Daniel 2, es uno de los más sobresalientes de la literatura profética. Su

contenido es muy sorprendente a la mayoria de los eruditos destacados. Mediante este pasaje

de Dios revela el maravilloso plan de Dios para los gentiles en el gobierno Mesiánico.

El sueño de Nabucodonosor

En el segundo año del reinado, Nabucodonosor tuvo un sueño que turbo su espíritu,

y no pudo seguir durmiendo. (Daniel 2:1).

La expresión “tuvo Nabucodonosor sueños” literalmente significa “soñó sueños”. La

idea dicha expresión involucra es que el rey tuvo una serie de sueños o tal vez una repetición

del mismo sueño o aspectos de este durante un periodo de tiempo. Dichos sueños afectaron

profundamente al rey Nabucodonosor de modo que “se perturbó su espíritu”. En el idioma

hebreo el verbo “perturbó” (fa’am) significa golpear y se encuentra en la forma hitpael

(reflexivo).1

La exactitud histórica del autor respecto a a historia de Babilonia hace difícil creer

que el libro fuera escrito unos 400 años después de su escenario histórico. Como afirma

Raven, la precisión de la imagen que da de la historia de Babilonia Daniel, muestra que tiene

que haber sido escrito allí. 32/331.2

1
Carballosa Evis., Daniel y el reino mesianico (Barcelona España: Editorial Portavoz
evangelico, 2015). 59.
2
Mcdowell Josh, Profecia: hechos o ficción (Barcelona Terrassa: Editorial CLIE,
1988). 21.
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La verdadera adoración

En el capítulo 3 de Daniel muestra la lealtad exigida por Nabucodonosor y la lealtad

de Dios y la adoración al Dios verdadero es contrastada agudamente contra la idolatría.

(Daniel 3).

“El rey Nabucodonosor hizo una imagen de oro cuya altura era de sesenta codos, y su anchura de

seis codos; la levanto en la planicie de Dura, en la providencia de Babilonia. Y envió el rey Nabucodonosor a

que se reuniesen los sátrapas, los magistrados y capitanes, oidores, tesoreros, consejeros, jueces y todos los

gobernadores de las provincias, para que viviesen a la dedicación de la estatua que el rey Nabucodonosor

había levantado. Fue pues reunidos los sátrapas, magistrados, capitanes, oidores, tesoreros, consejeros,

jueces, y todos los gobernadores de la provincias, a la dedicación de la imagen que el rey Nabucodonosor

había levantado; y estaban en pie delante de la imagen que había levantado el rey Nabucodonosor” (Dan. 3:1-

3) 2

La estatua inmensa de oro que Nabucodonosor erigió era lo contrario de lo que se le

revelo. Aproximadamente media “sesenta codos de alto” (30 mts).3

1
Alomiá Merling, Daniel: el profeta mesiánico. volumen II (Lima, Perú́ : Ediciones
Theologika, Universidad Peruana Unión, 2007). 82.
2
Reina Valera, Santa Biblia con himnario (Buenos Aires, Argentina: ASES, 2013).
774.
3
Ibid. EPM. 84.