1. Las cadenas de la muerte me 1. Romanos 8:2: pues por medio
quitó de él la ley del Espíritu de vida me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte. 2. Para mí ya no hay condenación 2. Romanos 8:1: Por lo tanto, ya no hay ninguna condenación para los que están unidos a Cristo Jesús, 3. Hay libertad, libertad 3. 2 Corintios 3:17: Ahora bien, el Señor es el Espíritu; y, donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad. 4. Siendo esclavo del pecado me 4. Romanos 6:17-18: Pero gracias libró a Dios que, aunque antes eran esclavos del pecado, ya se han sometido de corazón a la enseñanza que les fue transmitida. 18 En efecto, habiendo sido liberados del pecado, ahora son ustedes esclavos de la justicia. 5. En la cruz compró mi redención 5. Colosenses 2:14 y anular la deuda que teníamos pendiente por los requisitos de la ley. Él anuló esa deuda que nos era adversa, clavándola en la cruz. 6. Y libertad, libertad 6. Efesios 3:12: En él, mediante la fe, disfrutamos de libertad y confianza para acercarnos a Dios. 7. Rompió mis cadenas 7. Salmo 116:16. Yo, SEÑOR, soy tu siervo; soy siervo tuyo, tu hijo fiel; ¡tú has roto mis cadenas! 8. Me dio vida nueva 8. Romanos 6:4: Por tanto, mediante el bautismo fuimos sepultados con él en su muerte, a fin de que, así como Cristo resucitó por el poder del Padre, también nosotros llevemos una vida nueva. 9. Y al fondo del mar echó mi 9. Miqueas 7:19. Vuelve a maldad compadecerte de nosotros. Pon tu pie sobre nuestras maldades y arroja al fondo del mar todos nuestros pecados. 10. Lavó mis pecados y me ha 10. 1 Juan 1:9: Si confesamos perdonado nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad. 11. Solo en el nombre de Jesús hay 11. Gálatas 5:1 Cristo nos libertó libertad para que vivamos en libertad. Por lo tanto, manténganse firmes y no se sometan nuevamente al yugo de esclavitud. 12. Yo proclamo al que en la cruz por 12. Filipenses 2:8 Y, al mí murió manifestarse como hombre, se humilló a sí mismo y se hizo obediente hasta la muerte, ¡y muerte de cruz! 13. Y cambió mi duro corazón 13. Ezequiel 36:26 Les daré un Por libertad, libertad nuevo corazón, y les infundiré un espíritu nuevo; les quitaré ese corazón de piedra que ahora tienen, y les pondré un corazón de carne. 14. El poder de su evangelio me 14. Efesios 3:7 De este evangelio salvó llegué a ser servidor. Este fue el regalo que Dios me dio por su gracia, conforme a su poder eficaz. 15. Y no me avergüenzo del Señor 15. 2Timoteo 1:12 Por ese motivo padezco estos sufrimientos. Pero no me avergüenzo, porque sé en quién he creído, y estoy seguro de que tiene poder para guardar hasta aquel día lo que le he confiado. 16. Mi libertad, libertad 16. Salmo 118:5 Desde mi angustia clamé al SEÑOR, y él respondió dándome libertad. 17. Al que el Hijo hace libre 17. Juan 8:36 Así que, si el Hijo Es libre en verdad los libera, serán ustedes verdaderamente libres. HAY LIBERTAD IBI