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Plantea que, debido a las presiones de tiempo, los líderes establecen una relación
especial con un grupo pequeño de sus seguidores. Estos individuos constituyen el
círculo interno: son confiables, reciben una cantidad desproporcionada de la
atención del líder y tienen mayores probabilidades de recibir privilegios especiales.
Los demás seguidores caen en el círculo externo. La teoría establece que en las
fases tempranas de la historia de la interacción entre un líder y un seguidor dado, el
líder lo clasifica en forma implícita como alguien que esta “dentro” o “fuera” , y que
esa relación se mantiene relativamente estable con el paso del tiempo. Los líderes
inducen la TILM al recompensar a aquellos subalternos con quienes desean tener
una relación más estrecha, y castigan a aquellos con quienes no la tienen. Sin
embargo, para que la relación de TILM permanezca intacta, el líder y el seguidor
necesitan invertir en ella.
No está clara la forma precisa en que el líder elige quien queda dentro de cada
categoría, pero hay evidencias de que los miembros del círculo interno tienen
características demográficas, de actitudes y de personalidad similares a las del líder,
o bien, un mayor nivel de competencia que los miembros del circulo externo.
Los líderes y los seguidores del mismo género suelen tener relaciones más
cercanas (un mayor intercambio) que los de género diferente. Aun cuando el líder
es quien elige, las características del seguidor influyen en la decisión de clasificación
del líder. Las investigaciones realizadas para probar la TILM en general la
sustentan, ya que han proporcionado evidencias importantes de que los lideres
actúan de forma diferente con sus seguidores, que esas diferencias no se deben al
azar, y que los seguidores del circulo interno obtienen mejores puntuaciones de
desempeño, exhiben mas comportamientos de ayuda o “de ciudadanía” en el
trabajo, y reportan sentirse más satisfechos con su jefe.
Liderazgo Carismático
El sociólogo Max Weber definió el carisma (de la palabra griega que significa
“obsequio”) hace más de un siglo como “cierta cualidad en la personalidad de un
individuo, la cual lo separa de la gente común y hace que se le trate como si
estuviera dotado con poderes o cualidades supernaturales, sobrehumanas o, al
menos, bastante excepcionales. Estos poderes no son accesibles a las personas
comunes y se consideran de origen divino o ejemplares, y con base en ellos, el
individuo al que se le asignan es tratado como líder”. Weber planteo que el liderazgo
carismático era uno de varios tipos ideales de autoridad.