SEGUNDO TRATADO SOBRE EL GOBIERNO CIVIL

(JOHN LOCKE, 1690)

(Wrington, Somerset, 1632 - Oaks, Essex, 1704) Pensador británico, uno de los máximos
representantes del empirismo inglés, que destacó especialmente por sus estudios de
filosofía política. Este hombre polifacético estudió en la Universidad de Oxford, en donde
se doctoró en 1658. Aunque su especialidad era la medicina y mantuvo relaciones con
reputados científicos de la época (como Isaac Newton), John Locke fue también
diplomático, teólogo, economista, profesor de griego antiguo y de retórica, y alcanzó
renombre por sus escritos filosóficos, en los que sentó las bases del pensamiento político
liberal.

Con la siguiente reseña se busca un análisis a la lectura del pensador ingles del siglo XVII.
Que es considerado el padre del empirismo y liberalismo moderno; fue filósofo, pedagogo
y médico. Propuso una teoría política que inaugura la idea de propiedad privada y la
soberanía popular.
El texto de Locke, comienza haciendo una exposición de lo que se conocerá como el estado
naturaleza, un estado primitivo en donde los hombres se gobiernan por la libertad absoluta
siendo iguales, bajo esa libertad tienen derecho a todo, por lo mismo cada cual está en
capacidad de tomar la justicia en sus propias manos si se considera agraviado.
Según Locke, no existe autoridad, justicia, ni propiedad, ni tampoco el derecho a la vida se
garantiza porque para mantener la libertad, es necesario eliminar al otro si así lo considera
el sentido común.

El autor hace referencia que en el mundo toda la creación es producto de Dios para el
disfrute de todos los hombres, pero a la creación, la acción humana es la que le da un valor
adicional, es decir: “el hombre al transformar la obra de Dios mediante su trabajo ha
producido una riqueza adicional a determinado producto y a la naturaleza en general, al
hacer esto puede apropiarse de ese producto nuevo que ya no es obra de Dios sino que
ahora es producto del hombre”.
De hecho cuando se refiere a un hombre lo hace en específico porque al tomar ese hombre
la obra de Dios en sus manos y transformarla el resultado deja de ser de todos los hijos del
creador y ahora es propiedad de aquel que la trabajo.

Para Locke, esta situación de propiedad privada se da ya en el estado naturaleza, pero al

estar desprovisto de una autoridad que hayan escogido voluntariamente y cuente con una
capacidad obligada, es imposible apropiar los frutos del propio trabajo, acumular o
intercambiar bienes. Estableciendo una autoridad imparcial que va a tener jurisdicción
sobre todos, contando con un poder coercitivo capaz de castigar o someter a aquellos que
transgredan los derechos de los otros.

Para Locke, la autoridad al establecerse no puede ser parte de un conflicto, será una
autoridad imparcial que gobernara bajos las leyes sociales aceptadas, no buscando
beneficiar a ninguna de las partes sino que busca la justicia y la apelación, donde se
castigara los agravios de la manera más apropiada.

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La autoridad gobernara a la sociedad en su conjunto porque así lo decidieron, se entrega su
soberanía y su poder de gobernarse a sí mismos a un estado que deberá garantizarles unos
derechos esenciales como: el derecho a la propiedad, el derecho a la vida y el derecho a la
felicidad.
La autoridad de los estados dependerá entonces según Locke, de la voluntad de los
ciudadanos que apoyan o rechazan y que en virtud de esto pueden tumbar al poder judicial
mediante medidas legales si este no cumple con la garantía de sus derechos, de la misma
manera que pueden modificar el parlamento si consideran que este legisla de manera
contraria a sus intereses.

Cabe resaltar que si el estado no respeta estos parámetros entonces no podrá gobernar dado
que carecerá de carácter por lo que se considera que el poder no puede ser absoluto,
propone la desunión de poderes y un principio de gobernabilidad basado en la legalidad y la
legitimidad para evitar cualquier abuso.

Es aquí donde Locke, a la estructura del estado le adiciona un elemento nuevo: el tributo o
los impuestos, porque los gobiernos no pueden mantenerse sin grandes gastos y aquellos
que se ven beneficiados por su existencia deben gestionar para que perdure.

Para este pensador, sus planteamientos proponen que el estado este constituido por lo que al
día de hoy sería un poder legislativo como una cámara o senado y uno judicial que se
encargara de acompañar el poder legislativo regularlo y promover que este cumpla con la
función para la cual fue escogido.

Es así que Locke rompe la lógica simbolista o unipersonal del gobierno y procurar
establecer un llamado regular a elecciones, rompe también con dos mitos existentes en su
época sobre la autoridad del estado y sus gobernantes: el que le daba un poder absoluto y el
que lo declaraba como un enviado de Dios.

Otro elemento importante de esta lectura y que me parece que es importantísimo referir es
lo que se proyecta o quiere proyectar Locke con respecto a anticiparse a la democracia y
porque no a los derechos humanos, dado que en su texto se evidencia o se propone que
todos los hombres tienen estos derechos de manera natural.

Estos no son propios de una sola clase o exclusivos de los hombres propietarios sino que
todos los hombres nacen con esos derechos, incluyendo sin discriminación a las mujeres y
los niños que se encuentran primero en un estado de protección pero que al alcanzar una
determinada edad pueden empezar a ejercer sus derechos, sin que nadie tenga soberanía
sobre sus vidas o sus propiedades, algo muy particular y similar a el objetivo de la
constitución política de Colombia de 1991.

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