Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
En sentido humanista, se entiende por valor lo que hace que un hombre y una mujer
sean tales, sin lo cual perderían la humanidad o parte de ella.
Son guías que dan determinada orientación a la conducta y a la vida de cada individuo
y de cada grupo social.
La escuela neokantiana afirma que el valor es, ante todo, una idea. Se
diferencia lo que es valioso de lo que no lo es dependiendo de las ideas o
conceptos generales que comparten las personas.
Los actores se sienten atraídos más por algunos valores que por otros. Los valores no
solo contienen elementos cognitivos, sino que además contienen elementos afectivos
muy fuertes. En la medida que un valor está enraizado en una persona, ocupa un lugar
privilegiado en el sistema y es vivido con intensidad, más es tomando en serio,
suscitando emociones y movilizando energías vehementemente. Hay algunos valores
por los cuales los seres humanos son capaces de dar la vida.
El modo de organización de un sistema de valores varía de una cultura a otra. Su
lógica interna no obedece de igual manera en todas partes, ni sigue las mismas reglas.
Por otra parte, esta divergencia es la razón principal de la incomprensión entre las
civilizaciones, donde cada una interpreta el mundo en sus propios términos.
A primera vista la palabra «sistema» sugiere que los valores adoptados por los actores
tienen su racionalidad y que esta racionalidad puede ser conocida. Acabamos de
hablar de una lógica interna. Un examen más cercano revela sin embargo, que los
valores no son necesariamente claros y que ellos no pueden ser expresados
fácilmente. Un sistema no es necesariamente transparente. A menudo el sistema se
deduce del comportamiento y de las acciones de los actores.
Rezsohazy (2006:7) nos propone una tipología de valores que pasamos a detallar:
En primer lugar el autor nos habla de los valores centrales. Estos son aquellos
que son compartidos por el conjunto de una población dada,
independientemente de su pertenencia profesional, de su edad, de su sexo o
de su nivel de instrucción. Los valores específicos son propios de una
categoría particular de personas: por ejemplo de una clase social, de una
generación, una etnia o los militantes de un determinado partido político. Los
valores centrales forman la base de consentimiento social, ellos contribuyen a
los fundamentos del acuerdo social. Es gracias a ellos que los miembros de
una colectividad hacen planes, se comunican, se comprenden, tienen una
cohesión mínima y viven juntos, iguales y diferentes como diría Touraine. Sus
valores centrales corresponden a aquellos que llamamos ethos de una
civilización o el espíritu de un pueblo.
Las sociedades totalitarias imponen la unanimidad en el dominio de los valores.
Muchas comunidades tradicionales son también unánimes y los «líderes»
sancionan a aquellos que no piensan como ellos. Sin embargo, si las presiones
se suavizan, la sociedad se transforma progresivamente en pluralista. La
coexistencia de sistemas de valores divergentes apela a la tolerancia, sin
embargo, ella puede también manifestarse en resistencias vigorosas. Los
conflictos de valores tienden a ser más duros que los conflictos de intereses
porque ellos son acompañados de emociones y a menudo de pasiones.
Cuando los valores tales como el nacionalismo o la religión (o los dos juntos)
definen la identidad de los oponentes y definen su acción, el combate amenaza
con causar destrucción y muerte.
Para comprender el sistema de valores de los actores, los valores
estructurantes son capitales. Ellos ordenan el conjunto, ordenan su jerarquía,
alimentan las explicaciones últimas de las elecciones cruciales. Es a partir de
ellos que el actor da una orientación a su vida. Por ejemplo, para algunos el
valor estructurante es la familia, para otros es el amor o el éxito profesional, la
religión o el dinero, el fútbol o no importa que tipo de combinación de dos o tres
valores predominantes. Esto permite dibujar un perfil del actor y los perfiles
parecidos reagrupados revelan las grandes familias de valores presentes en la
sociedad, por ejemplo los «postmodernos», los «tradicionalistas», los
«cristianos», los «laicos», la «izquierda», la «derecha». Los valores periféricos
rodean a este núcleo duro en importancia decreciente.
Una distinción similar opone valores finales y valores instrumentales. Los
primeros apuntan a objetivos buscados, los segundos son necesarios para la
concreción de los primeros. Por ejemplo aquellos que buscan el éxito
profesional, valorizan también el trabajo y la perseverancia o la ambición.
Los valores globales trascienden las diferentes esferas de la vida social, su
área de validez se extiende sobre todas las relaciones humanas. Por ejemplo,
la justicia puede ser una exigencia para repartir una herencia, para fijar un
salario, para pronunciar un juicio o para arreglar un conflicto internacional. Los
valores morales son por naturaleza globales. Las categorías de bueno/malo,
justo/ injusto, lícito/ilícito tienen aplicación en todas partes. Los valores
sectoriales están confinados a una esfera particular de la sociedad. Los valores
políticos, económicos o religiosos, como la democracia parlamentaria, la
competencia o la oración, son sectoriales. Evidentemente un valor de este tipo
puede llegar a ser estructurante, como por ejemplo, el deporte puede llegar a
ser el eje central de la vida de una persona.
Los valores explícitos son enunciados espontáneamente por los «portadores
de valores» o son nombrados en respuesta a un cuestionario. Los valores
implícitos son observables por los signos exteriores, como por ejemplo el
letrero: «propiedad privada, prohibido entrar» denota las características de una
casa, el puente elevado señala un valor político de una propiedad o el canto
entusiasta de un himno nacional nos recuerda el patriotismo de una persona.
Ellos se encuentran entre las grandes figuras morales, los profetas, los filósofos, los
artistas, los intelectuales, los científicos, los escritores, los cineastas y las instituciones
como las Iglesias, los centros de investigaciones o las universidades.
Gracias a los productores y a los transmisores así como al público que los sigue,
existe en la sociedad, a un momento dado, un stock de valores disponibles para ser
inculcados y adoptados. Uno de los primeros es el tiempo (que es precioso): apenas
un niño nace debe distinguir la noche del día para respetar los tiempos de sueño de
sus padres. Poco a poco su cuadro temporal se precisa, y en la medida que crece el
ser humano aprende lo importante de la puntualidad, o desde una perspectiva
weberiana, aprende a que «el tiempo es oro».
Los medios gracias a los cuales los valores se enraízan en la población pueden ser
más o menos explícitos como las recompensas por el éxito o las sanciones por las
faltas cometidas, pero también pueden ser poco palpables como un intercambio
improvisado o los hechos y gestos de una persona que sirve de modelo y de
referencia. La aprobación o reprobación social ejerce también una influencia.
Generalmente los seres humanos tienden a conformarse a lo que se piensa o lo que
se hace (lo «políticamente correcto»).
Todo el mundo guía su vida por los valores adquiridos. Las personas que nacen en un
mismo medio social o en la misma época, es decir, pertenecen a una misma
generación, tienen la tendencia a embarcarse en aventuras humanas basadas en más
o menos los mismos valores. Y aquellos y aquellas que comparten los mismos valores
tienen la tendencia a actuar en conjunto.
DEFINICIÓN DE ANTIVALORES
Los antivalores, también conocidos como los valores inmorales, son aquellas
actitudes o prácticas dañinas y negativas que realiza un individuo en su día a
día, puede que en un sentido personal o social. Entonces en el entorno social según la
ética y la moral, los antivalores son posturas o conductas peligrosas que la sociedad
no apoya como sanas.
negativa
manipuladora
fría
irresponsable
Es decir que rechaza y viola a toda medida los valores impuestos por una sociedad
existente.
Los antivalores, que son acciones que degradan, deshumanizan, y además atraen el
desprecio y rechazo de las personas que nos rodean y de la sociedad misma y puede
conllevar hasta un castigo por parte de esta.
EL IRRESPETO
Hace mucho que la figura del irrespeto se ha engrandecido hasta el punto que no ay
respeto por la vida y los derivados de la existencia humana, y esto ocurre no solo a
nivel local, nacional, internacional, y hasta mundial. ¿Qué ha pasado con el respeto
humano? ¿Por qué este valor no existe en forma natural? ¿Por qué el respeto tiene
que utilizar la fuerza para hacerse notar? Y ¿por qué ese respeto muchas veces se
torna en abuso o poderío? Hace unos años cuando se consideraba a las personas
adultas mayores, sabias por su experiencia de la vida, y sus consejos sensatos eran
escuchados había una mejor convivencia.
LA INTOLERANCIA
La tolerancia es un acto por el cual se acepta o se permite que una acción de otra
persona sea acatada o aceptada por nosotros. La tolerancia puede ser física o mental
y en ambos casos tiene como base los ingredientes de poder, interés, familiaridad,
autoridad, deseo y sexo algunas veces.
tal es el caso del novio antes del matrimonio, acepta todas las insinuaciones o
seudo–órdenes de la novia. Cuando una de las dos personas quiere salir del
sometimiento, entonces entra la intolerancia, y hay vienen los problemas.
viajamos en el transporte público, donde se vulnera este espacio personal, y
esto nos causa malestar o molestia.
DESOBEDIENCIA
La desobediencia es una negatividad de as más antigua que existe, quizás fue a base
del primer antivalor a nivel espiritual, y luego a nivel material, lo primero porque
abusando de la libertad del CREADOR, nos alejamos de su lado dentro del libertinaje
que nos produjo la sensación de no depender de nadie, ser libres, confundiendo este
don, con hacer lo que nos diera en gana
es la falta de acción ante una norma, disposición, orden, u obligación que nos
corresponde por algún motivo, ya sea trabajo, familiar, misión, deber, o aspecto que se
debe ejecutar para cumplir determinado objetivo.
La mentira reina en los círculos sociales de las esferas humanas, y se encuentra como
a favorita entre todos, claro esto tiene sus excepciones, como toda regla, se utiliza en
múltiples formas desde el hogar hasta el trabajo, y por qué no decirlo hasta en el amor.
Tiene su origen desde la existencia material misma del hombre en la tierra, que
constató los buenos resultados personales que le otorgaba el inventar cosas y casos,
y como primer ejemplo tenemos el invento de los cultos a las diversas deidades que se
inventaba el hombre, como también los fenómenos naturales, plantas, animales etc.
que explotaban la ignorancia espiritual del hombre.
A veces tenemos que decir mentiras piadosas, y esto es viable, para evitar males
mayores, y casi siempre al niño se le está dibujando la mentira como una fantasía,
cuando está en la infancia, y esto es pasajero, por que el niño poco a poco va
entrando en la realidad de la vida y termina por vivir su entorno tal como es. aun
cuando tome personajes de la fantasía para hacerlos reales en su mundo de chiquillo.
LA INJUSTICIA
La justicia siempre está acompañada de la verdad, ya que la una y otra se puede decir
que son hermanas, y lo justo es verdadero, y lo verdadero es justo.
LA NEGLIGENCIA
EL ORGULLO
El orgullo en los hombres, la vanidad en las mujeres, son las mismas expresiones en
diferentes sexos, en las cuales se quiere representar una supremacía del ser que
ostenta la debilidad, y es una debilidad, porque con el orgullo o vanidad se trata de
disfrazar una anomalía personal, dándose ínfulas o categoría de personaje, sin
tenerlo. Se puede decir el orgullo o la vanidad es una expresión personal basada en el
falso concepto de una mayor cualidad física, intelectual o económica, con lo que se
quiere aparentar mayor cosa, o mejor persona.
LA ALTANERÍA
La altanería nace como una situación en la cual la persona se cree que quien más
grita, es quien tiene la razón, porque la ley del más gritón es la que impera según el
argot de los ignorantes, cuando la realidad es que la persona que grita, es porque
quiere imponer sus razones, sin tener la razón de ser de sus argumentos. Pero
dejemos que grite y diga lo que quiera que la adrenalina en el organismo tiene un
efecto de 8 segundos, y una vez que se agota su potencial, y la garganta se irrita es
entonces cuando entra en juego nuestra sensatez, nuestro verbo, y podemos exponer
nuestros puntos de vista sin necesidad de hacer esfuerzos alguno.
LA DESLEALTAD
Muchas creemos saber o entender mucho sobre lealtad, y el único que sabe más de
lealtad que todo el mundo es el perro. Porque este es un animal leal hasta la muerte. Y
algunas personas manifiestan que mientras más conocen a sus congéneres más
quieren a sus perros, ¿por qué será? Bueno la lealtad es un valor humano, basado en
la fraternidad muchas veces, otras en la confianza, otras en el cariño, otras en el amor,
otras en lo laboral, y se manifiesta por las situaciones de solidaridad, de reciprocidad,
mutuo accionar ante una situación, calamidad, o mal momento, ya sea de enfermedad
o de siniestro, en los cuales las personas que se deben lealtad, están unidas, juntas,
acompañadas, sufren, gozan, o lloran una situación. Y si es a nivel laboral el cuidado,
la responsabilidad, la confianza, y el sentido ético del cargo o empleo que es
representado por una persona que vive de su puesto, y como tal siente la necesidad
de defenderlo, cuidarlo y hacerlo respetar.
LA FALSEDAD
La falsedad es una forma de presentar las cosas, las situaciones, las personas, los
actos etc. como mejor nos parezcan o nos produzcan resultados o beneficios
pecuniarios, es una alteración de la realidad, y se hace en forma inteligente y
voluntaria. La falsedad se utiliza desde infinidades de contextos, ya sea a nivel político,
religioso, cultural, económico, educativo, y siempre se ampara por premisas que utiliza
la persona o contexto del caso, incluso se establecen paradigmas en lo que aparece la
verdad distorsionada, alterada, modificada o cambiada, pero solo con objetivos
específicos. La falsedad se da muchas veces como mentira, pero para que tenga
existencia como tal debe estar respaldada por la palabra, que es la que estable el
nacimiento de la mentira, y en este caso la falsedad se ampara en ella y se L 54
convierte en mentira real.
LA BURLA
La burla es una expresión grotesca de las personas aquellas que no tienen la idea de
humanidad, ni respeto, ni mucho menos un poco de cultura, decencia, o instrucción
que les permita portarse o mostrar sus buenos modales. La burla parece tener su
origen en las poblaciones donde hay un personaje como el bobo del pueblo, o el
jorobado, o persona con una discapacidad física que no es tolerada y aceptada por el
resto de la comunidad y es tomado como el hazmerreír del lugar. También parece ser
que su origen en parte se originó en las cortes reales, donde el rey empleaba un
personaje llamado bufón para que hiciera de cómico en la corte y los cortesanos rieran
a buena gana.
LA FALTA DE MODALES
No se sabe que pasa en nuestra sociedad, ni donde están los buenos modales, no
aparecen por ningún lado, y eso en todos los círculos sociales de estrato 1 a 6
imperan malos modales desde todo punto de vista, desde el aspecto personal hasta el
social. Que está ocurriendo con nuestra gente, porque esa ausencia de modales? Los
malos modales se observan en todos los sitios que usted quiera observarlos, y de
ejemplo vamos a colación la mesa a la hora de comer, ya no hay esa etiqueta en la
cual el padre se sentaba al frente, la madre al otro lado, y los hijos en sus otros
puestos, se hacía una oración de gracias a nuestro Padre y Creador Espiritual, por los
alimentos recibidos y se comentaban las cosas triviales o cotidianas del día.
LA CRÍTICA
LA TRAICIÓN
Hoy en día se habla de traición solo cuando se refiere a actos de familia, sentimientos,
negocios, o ventajas en algún descubrimiento o invención. Antes solo se hablaba
cuando se decía que había traición a la patria, cuando existía ese amor por la patria,
en forma tal que se moría por la patria en luchas o guerras, hoy en día eso suena
como una utopía y han sacado hasta un cuento, que el luchar por la patria era
conseguir que el enemigo muriera por la suya.
La misantropía aunque parezca increíble aún existe en algunas personas que han
ejercido cargos, o direcciones de grupos o membresías, en lo que se revela la
inclinación y amor por estos grupos y desprecios por todos los demás, en forma tal,
que son capaces de hacer un genocidio o un crimen de lesa humanidad con el fin de
conseguir el objetivo que solo existan ellos y nada más que ellos. Así tenemos el caso
de los judíos que fueron perseguidos y exterminados en su totalidad por los nazis,
algunas sectas religiosas hacen la guerra a otras con el fin de exterminarla y existir
solamente ellas, esto es un crimen aunque se disfrace de religión o de raza como pasó
en los EE. UU. cuando se estableció el Ku Klux Klan con el objetivo de acabar con la
raza negra, y aún algunos estado todavía conservan esos principio de no permitir la
mezcla de raza, y la persiguen.
LA CONCIENCIA MORAL
Como se sabe el ser humano es un ser de una enorme grandeza como muestra el
núcleo personal.
Desde el punto de vista social, la conciencia moral muestra la importancia del respeto
al otro ser humano dentro de una comunidad.
Dicha conciencia moral también queda determinada por unas normas de actuación,
leyes generales y universales que ayudan al individuo a interiorizar el concepto de
deber moral. Uno de los principales criterios de la conciencia moral es la justicia.
El ser humano tiene la capacidad de reflexionar sobre sus propias acciones con el
objetivo de poder valorar posibles errores que cometen.
Es decir, tiene la capacidad de realizar una buena acción pero también, puede realizar
una mala praxis. Lo importante es que desde el punto de vista ético, el ser humano
sea virtuoso para actuar haciéndose responsable de las consecuencias de sus actos y
pueda reparar el daño cometido en caso de cometer un fallo determinado.
También se ve La importancia del ejemplo familiar: Los padres son un referente moral
para los hijos ya que a través de sus acciones guían en el camino de la vida con un
ejemplo positivo. Los padres educan a sus hijos en la conciencia del bien a través del
cumplimiento de unas normas que son claras y concretas en el hogar. Padres y
profesores trabajan en equipo en el cumplimiento de unos objetivos concretos porque
dicha conciencia del bien se adquiere en los primeros años de vida.
COMPORTAMIENTO HUMANO Y VALORES
Escribe que el enfoque sociológico del comportamiento humano esta (basado en los
valores), en contraste con el enfoque biológico (basado en valores genéticos),presenta
menos problemas éticos para el investigador al estudiar las causas del
comportamiento de las personas. Los valores no deben confundirse con términos
similares tales como creencias y actitudes. Los valores, al igual que la actitudes, son
creencias, pero difieren en sus niveles de abstracción y connotaciones morales.
Cada persona nace dentro de un ambiente social y cultural familiar, comunidad, clase
social, idioma, religión y a la larga desarrolla muchas relaciones sociales. Las
características del medio social de un niño afectan la manera en que aprende a pensar
y a comportarse, por medio de la enseñanza, premios y castigos, por ejemplo. Este
ambiente incluye el hogar, la escuela, el vecindario y quizá también las iglesias locales
y las dependencias encargadas de hacer cumplir la ley. Asimismo, existen las
interacciones más informales del niño con amigos, otros compañeros, parientes, y
medios de comunicación y entretenimiento. No suele ser predecible la manera en que
los individuos responderán a todas estas influencias, o cuál de ellas será más fuerte.
No obstante, hay cierta similitud sustancial en la forma en que los individuos
responden al mismo patrón de influencias, o sea haber crecido en la misma cultura.
Además, las pautas de conducta inducidas por la cultura, como los modelos de habla,
el lenguaje corporal y las formas de humor, llegan a arraigarse tan profundamente en
la mente humana que con frecuencia operan sin que los mismos individuos estén muy
conscientes de ellas.
Cada cultura tiene una red de patrones y significados algo diferente: formas de
ganarse la vida, sistemas de comercio y gobierno, funciones sociales, religiones,
tradiciones en vestido, alimentos y artes, expectativas de conducta, actitudes hacia
otras culturas y creencias y valores sobre todas estas actividades. Dentro de una gran
sociedad puede haber muchos grupos con subculturas muy distintas que se asocian
con la región, el origen étnico o la clase social. Si una sola cultura domina en una
vasta región, sus valores pueden considerarse correctos y pueden promoverse, no
sólo por las familias y los grupos religiosos, sino también por las escuelas y los
gobiernos. Algunas subculturas pueden emerger de entre categorías sociales
especiales (como los hombres de negocios y los criminales), algunas de las cuales
pueden pasar las fronteras nacionales (como las de los músicos y científicos).
Justas o injustas, deseables o indeseables, las distinciones sociales son una parte
sobresaliente de casi toda cultura. La forma de éstas varia con el lugar y tiempo,
incluyendo en ocasiones castas rígidas, jerarquías tribales o de clan y a veces una
clase social más flexible. Las distinciones de clase se hacen sobre todo con base en la
riqueza, educación y ocupación; pero también es probable que se asocien con otras
diferencias subculturales, como vestido, dialecto y actitudes hacia la escuela y el
trabajo. Estas distinciones económicas, políticas y culturales se reconocen por casi
todos los miembros de una sociedad y algunos de ellos las resienten.
La clase dentro de la cual nacen las personas afecta el lenguaje, la dieta, los gustos e
intereses que tendrán cuando niños y, por consiguiente, influye en la manera en que
percibirán el mundo social. Además, la clase determina qué presiones y oportunidades
experimentarán las personas y, por tanto, afectará el rumbo que posiblemente tomen
sus vidas, incluyendo escolaridad, ocupación, matrimonio y modelo de vida. No
obstante, muchas personas viven vidas muy diferentes de las normas de su clase.
La facilidad con la que alguien puede cambiar de clase social varía enormemente con
el tiempo y lugar. Durante la mayor parte de la historia humana, los individuos han
estado casi seguros de vivir y morir en la clase donde nacieron. Los momentos de
gran movilidad ascendente han ocurrido cuando una sociedad se ha encargado de
nuevas empresas (por ejemplo, en el territorio o la tecnología), por lo que ha
necesitado más personas en ocupaciones de clase más alta. En algunas partes del
mundo actual, un número cada vez más grande de seres humanos están saliendo de
la pobreza por medio de la oportunidad educacional o económica, mientras que en
otras, altas cifras se están empobreciendo.
CONDUCTA GRUPAL
Además de pertenecer a los ambientes social y cultural dentro de los que nacen, las
personas se unen de manera voluntaria a grupos que se basan en actividades,
creencias o intereses compartidos (como sindicatos, partidos políticos o clubes). La
pertenencia a estos grupos influye en la forma en que los individuos piensan de sí
mismos y cómo otros piensan acerca de ellos. Estos agrupamientos imponen
expectativas y reglas que hacen más predecible el comportamiento de los miembros y
permiten a cada conjunto funcionar sin problemas y retener su identidad. Las reglas
pueden ser informales y transmitidas, por ejemplo, la manera de comportarse en una
reunión social, o pueden ser reglas escritas que son impuestas por la fuerza. Los
grupos formales indican a menudo el tipo de conducta que favorecen por medio de
recompensas (como elogios, premios y privilegios) y castigos (como amenazas, multas
y rechazo).
Las organizaciones sociales pueden servir para muchos propósitos más allá de los
originales. Los clubes privados que existen para recrearse, a menudo son lugares
importantes para realizar transacciones de negocios; las universidades que existen
formalmente para promover el aprendizaje y el saber pueden ayudar a promover o
reducir las distinciones de clase; así como las organizaciones religiosas y de negocios
con frecuencia tienen agendas sociales y políticas que van más allá de obtener lucro o
ejercer el ministerio entre la gente. En muchos casos, un propósito no mencionado de
los grupos es el excluir de sus actividades a personas de categorías específicas
siendo otra forma de discriminación.
CAMBIO SOCIAL
Las sociedades, como las especies, evolucionan en direcciones que se abren o limitan
en parte por fuerzas internas, como el desarrollo tecnológico o las tradiciones políticas.
Las condiciones de una generación limitan y determinan la gama de posibilidades que
se abren para la siguiente. Por un lado, cada nueva generación aprende las formas
culturales de la sociedad y, de esta manera, no tiene que reinventar estrategias para
producir alimentos, manejar conflictos, educar a los jóvenes, gobernar, etc. También
aprende aspiraciones para saber de qué manera la sociedad se puede mantener y
mejorar. Por otro lado, cada nueva generación debe tratar problemas no resueltos de
la generación anterior: tensiones que pueden conducir a la guerra, abuso de drogas en
gran escala, pobreza y privación, racismo y un sinnúmero de injusticias personales y
grupales. La esclavitud en los albores de la historia de la Unión Americana, por
ejemplo, todavía tiene serias consecuencias para los afroestadounidenses y para la
economía, educación, salud y sistema de justicia estadounidense en general. Las
injusticias se pueden mitigar lo suficiente para hacer que las personas las toleren, o
pueden desbordarse en una revolución que ataca la estructura de la misma sociedad.
Muchas sociedades continúan perpetuando disputas de muchos siglos con otras sobre
fronteras, religión y creencias muy arraigadas sobre agravios pasados.
Los gobiernos suelen tratar de dirigir el cambio social por medio de políticas, leyes,
incentivos o coerción. A veces estos esfuerzos funcionan de manera eficaz y hacen
posible que, de hecho, no haya conflicto social. En otras ocasiones, tales esfuerzos
pueden precipitar el conflicto. Por ejemplo, el establecimiento de comunas agrícolas en
la Unión Soviética, en contra de la voluntad de los granjeros de labrar su propia tierra,
se llevó a cabo sólo con la fuerza armada y la pérdida de millones de vidas. La
liberación de esclavos en los Estados Unidos vino sólo como consecuencia de una
guerra civil sangrienta; 100 años más tarde, la eliminación de la segregación racial
explícita se consiguió en algunos lugares sólo haciendo uso de la acción legislativa,
requerimientos de los tribunales y guardia militar armada y continúa siendo un
problema social muy importante.
Los Valores son Principios de conducta individual y colectiva del hombre. Tienen la
particular característica de que los integrantes de la sociedad los tienen como
correctos e indiscutibles. Es un tema tan abstracto, como extenso e importante, y en
esta edición nos ocuparemos de conocer sus fuentes, clasificación y funciones.
El término fuentes deriva del latín fons-fontis, que significa manantial de agua que
brota de la tierra. En sentido figurado y por extensión del significado, la noción de
fuentes se refiere a todo aquello que es principio, fundamento u origen de algo.
En su obra de Sociología, Joseph Fichter afirma que las fuentes de los valores podrían
analizarse en dos niveles:
Está determinado por las cualidades que posee la persona y que la sociedad tiene
como determinantes; son circunstancias, cuyo valor no puede controlar el individuo;
es externa a la persona social, y esos elementos son las cualidades físicas de la
persona, el dinero que posee, su formación intelectual, religiosa, entre otros; y todo
ello tiene su fuente en el ambiente cultural.
Una persona puede tener varios status en la sociedad, según el número de grupos
sociales a los que pertenece: político, universitario, comercial artístico, etc. Pero
siempre tiene un status que podríamos llamar “principal”, que por su relevancia
sobresale en relación a los demás.
* VITALES: este grupo lo componen todos aquellos valores que tienen relación con la
vida, los que hagan posible una vida buena y plena dentro de la sociedad, como son:
el respeto y la consideración hacia los demás.
* ÉTICOS: tienen que ver con el “deber ser”. Es decir, el cumplimiento de cada
persona del deber o responsabilidad que tiene como integrante de la sociedad.
* RELIGIOSOS: tienen que ver con las creencias y las prácticas religiosas; por
ejemplo: El amor al prójimo, lo que a su vez lleva a la caridad.
ÉTICA PRÁCTICA
Su libro más extenso Ética práctica analiza en detalle por qué y cómo deben
sopesarse los intereses de los individuos. Su principio de la consideración igual de
intereses no dictamina la igualdad de tratamiento de estos intereses, porque diferentes
intereses determinan un tratamiento diferente. Por ejemplo: todos tienen interés en
evitar el dolor, pero pocos tienen interés en cultivar sus habilidades. Su principio
justifica no sólo el diferente tratamiento para intereses diferentes, sino que permite
diferentes tratamientos para el mismo interés cuando disminuye la utilidad marginal,
por ejemplo, el interés por alimentarse de una persona hambrienta es superior al
mismo interés de alguien satisfecho en su alimentación y que momentáneamente
siente hambre.
LA BASE DE LA IGUALDAD
En el presente siglo ha habido grandes cambios en las actitudes morales, siendo la
mayoría de éstos todavía polémicos. El aborto, que hace treinta años estaba prohibido
casi en todas partes, es ahora legal en muchos países (aunque todavía con la
oposición de sustanciales y respetados sectores de la sociedad). Esto mismo ocurre
con los cambios en las actitudes respecto al sexo fuera del matrimonio, la
homosexualidad, la pornografía, la eutanasia y el suicidio. Pero, aunque los cambios
han sido grandes, no se ha alcanzado ningún nuevo consenso. Estos temas siguen
siendo polémicos y es posible defender cada postura sin poner en peligro el nivel
social e intelectual de uno.
Cuando decimos que todos los seres humanos son iguales, sin tener en cuenta raza o
sexo, ¿qué pretendemos exactamente? Tanto racistas como sexistas o cualquier otro
grupo que se oponga a la igualdad han afirmado a menudo que, cualquiera que sea el
criterio elegido, sencillamente no es cierto que todos los seres humanos sean iguales.
Los hay altos, bajos; buenos o malos en matemáticas; algunos corren 100 metros en
diez segundos mientras que otros lo hacen en quince o veinte; algunos nunca harían
intencionadamente daño a un semejante mientras que otros matarían a un extraño por
100 dólares si salieran impunes de ello; los hay que llevan vidas emocionales capaces
de alcanzar el éxtasis total y la desesperación más absoluta, mientras que otros llevan
una vida más estable, relativamente insensibles a lo que acontece a su alrededor. Y
así podríamos continuar poniendo ejemplos. Sin embargo, lo que es evidente es que
los seres humanos difieren unos de otros, y que sus diferencias se aprecian en tantas
características que la búsqueda de una base fáctica sobre la cual erigir el principio de
igualdad parece imposible.
Ahora bien, aunque "CI" significa "cociente de inteligencia", no quiere decir que un test
de CI realmente mida lo que generalmente entendemos por "inteligencia" en un
contexto ordinario. Es evidente que existe algún tipo de correlación entre los dos: si,
por ejemplo, los escolares considerados por sus profesores como extremadamente
inteligentes no consiguieran generalmente puntuar mejor en los tests de CI que los
escolares a los que se considera con una inteligencia por debajo de lo normal,
tendríamos que cambiar esos tests, como de hecho fueron cambiados en el pasado.
Pero esto no nos indica hasta qué punto es estrecha esta correlación y, como nuestra
idea habitual de la inteligencia es vaga, no hay forma de saberlo. Algunos psicólogos
han intentado resolver este problema definiendo "inteligencia" como "lo que miden los
tests de inteligencia". Pero lo único que supone esto es introducir un nuevo concepto
de "inteligencia", que es más fácil de medir que nuestra idea habitual pero que pudiera
ser muy distinto en su significado.
Los hombres, por otro lado, parecen tener una mayor capacidad matemática y también
realizan mejor los tests relacionados con lo que se conoce como capacidad "visual-
espacial".
Los hombres tienen una mayor tendencia que las mujeres a herir a los demás, y buena
prueba de ello es que la mayoría de los delitos violentos son cometidos por hombres.
Se ha sugerido que la agresividad está relacionada con la competitividad y con el
instinto de dominar a los demás y alcanzar la cima de cualquiera que sea la pirámide
de la que formemos parte. Por el contrario, las mujeres tienen una mayor tendencia a
adoptar un papel en el que es importante cuidar de los demás.
También para esto existen los factores biológicos también influyen. Las pruebas que
apoyan este punto de vista son particularmente fuertes en cuanto a la agresividad se
refiere. En The Vsycholoqy oí Sex Differences, Eleanor Emmons Maccoby y Carol
Nagy Jacklin ofrecen cuatro motivos por los cuales creen que la mayor agresividad de
los hombres tiene un componente biológico:
1. Los hombres son más agresivos que las mujeres en todas las sociedades humanas
en las que se han estudiado las diferencias.
3. Se han observado las diferencias en niños muy pequeños, a una edad en la que no
existe prueba de ningún condicionante social en este sentido (en efecto, Jacklin y
Maccoby descubrieron alguna evidencia de que a los chicos se les castiga con más
dureza que a las chicas por mostrarse agresivos).
Tomando lo anterior como base, podemos decir que el hecho de que algunas
personas no sean miembros de nuestra raza no nos da derecho a explotarlas, del
mismo modo, el hecho de que algunas personas sean menos inteligentes que otras no
significa que podamos hacer caso omiso de sus intereses. Sin embargo, el principio
también implica que el hecho de que algunos seres no sean miembros de nuestra
especie no nos da derecho a explotarlos, y del mismo modo el hecho de que otros
animales sean menos inteligentes que nosotros no implica que se pueda hacer caso
omiso de sus intereses.
En este capítulo veremos algunos puntos de vista acerca del valor de la vida y del mal
-que supone quitarla, con objeto de preparar el terreno para los capítulos siguientes en
los cuales trataremos de temas prácticos como matar animales, el aborto, la eutanasia
y la ética sobre el medio ambiente. La vida humana A menudo se dice que la vida es
sagrada, pero casi nunca se siente lo que se dice. No se quiere decir, como parece
que implican las palabras, que la vida es en sí misma sagrada ya que, de ser así,
matar a un cerdo o arrancar una col sería tan abominable como asesinar a un ser
humano. Cuando se dice que la vida es sagrada, lo que se tiene en mente es la vida
humana. Pero, ¿por qué ha de tener la vida humana un valor especial?
Aunque el utilitarismo de preferencia ofrece una razón directa para no matar a una
persona, algunos pueden considerar dicha razón -incluso cuando esté asociada a
razones indirectas importantes que cualquier forma de utilitarismo tenga en cuenta- no
suficientemente rigurosa.
Por todo esto, veremos esta cuestión en primer lugar. Hemos visto que existen
razones para mantener que matar a una persona es peor que matar a un ser que no
sea persona. Lo anterior es cierto, aceptemos o no el utilitarismo de preferencia, el
argumento de Tooley sobre el derecho a la vida, o el principio del respeto a la
autonomía.
Singer difiere en su posición con respecto a otros ponentes del aborto en que en vez
de atacar la segunda premisa, él ataca la primera, negando que esté mal quitar una
vida humana inocente. Su argumento contra el silogismo «clásico» es que, mientras
el feto es a todas luces un miembro de la especie humana, no es una persona,
definida como un ser consciente de sí mismo que se reconoce en el tiempo. Mientras
la pertenencia a la especie humana no es relevante, sí que lo es la condición de
persona. Singer afirma que los argumentos a favor o en contra del aborto deberían
estar basados en el cálculo utilitario que sopese las preferencias de una madre contra
las preferencias del feto o embrión. En su visión, una preferencia es cualquier cosa
que se busca obtener o evitar; toda forma de beneficio o daño causado a un ser
corresponde directamente con la satisfacción o frustración de una o más de sus
preferencias. Dado que la capacidad de experimentar sensaciones de sufrimiento o
satisfacción es un prerrequisito para tener cualquier preferencia, y el feto, al menos
hasta alrededor de las 18 semanas es incapaz de sufrir o sentir satisfacción alguna, no
es posible para tal feto el tener preferencia alguna. En un cálculo utilitario, no hay nada
que sopesar contra las preferencias de la madre para tener un aborto, por tanto el
aborto es moralmente permisible.
Del mismo modo, Singer argumenta que los recién nacidos carecen de las
características esenciales para ser considerados personas: "la racionalidad, la
autonomía y la conciencia de sí mismo" y, por tanto, "matar a un bebé recién nacido
no es equivalente a matar a una persona, es decir, un ser que quiere seguir viviendo".
Singer defiende que los padres deberían tener la posibilidad de quitar la vida a los
bebes con discapacidades graves. “Por supuesto, el infanticidio debe ser excepcional
y estrictamente controlado de forma legal, pero no se debería excluir, como no se
excluye el aborto”
El problema ;Pocos son los problemas éticos sobre los que hoy en día se discute tanto
como el aborto y, mientras el péndulo ha ido balanceándose de un lado a otro, ninguna
posición ha conseguido alterar de forma significativa las opiniones de sus oponentes.
Hasta 1967, el aborto era ilegal en la mayoría de las democracias occidentales,
excepto en Suecia y Dinamarca. Posteriormente, los británicos modificaron su
legislación permitiendo el aborto por motivos sociales amplios y, en 1973, en el caso
de Roe contra Wade, el Tribunal Supremo de los Estados Unidos dictó a favor del
derecho constitucional de las mujeres a abortar en los seis primeros meses de
embarazo. Todas las naciones de Europa Occidental, incluidos países católicos como
Italia, España y Francia, liberalizaron su legislación sobre el aborto, excepto la
República de Irlanda, que se mantuvo al margen de esta tendencia.
Pero los oponentes al aborto no abandonaron su lucha. En los Estados Unidos, los
presidentes conservadores han modificado la composición del Tribunal Supremo, el
que a su vez ha limado los márgenes de la decisión de Roe contra Wade, permitiendo
así que los estados restrinjan, de diferentes formas, el acceso al aborto.La posición
conservadora.
El razonamiento principal contra el aborto, de una manera formal, sería algo así:
Primera premisa: es malo matar a un ser humano inocente.
Segunda premisa: un feto humano es un ser humano inocente.
Conclusión: por tanto, es malo matar a un feto humano.
El aborto es, sin embargo, permisible. Consideraremos tres argumentos que apoyan
este punto de vista.
El primer argumento consiste en que las leyes que prohiben el aborto no evitan
que éste se lleve a cabo, sino que hacen que se realice de forma clandestina. Las
mujeres que quieren abortar están generalmente desesperadas, y acuden a
abortistas ilegales o intentan remedios caseros.
Este segundo argumento también se refiere a la legislación sobre el aborto más
que a la ética del mismo. Utiliza el criterio de que, como aparece en un informe
llevado a cabo por una comisión gubernamental británica sobre la legislación
acerca de la homo- sexualidad y la prostitución: "Debe haber una esfera de la
moralidad e inmoralidad privadas que, dicho en términos breves y claros, no sea
competencia del Derecho".
En la definición normal de eutanasia existen tres tipos diferentes, cada uno de los
cuales plantea cuestiones éticas distintas. Nuestra discusión se verá favorecida si
comenzamos estableciendo esta triple distinción para luego evaluar la justificabilidad
de cada tipo.
TIPOS DE EUTANASIA
LA POBREZA
La pobreza en el nivel absoluto es vivir en el mismo límite de la existencia. Los pobres
absolutos son seres humanos con graves privaciones que luchan por sobrevivir en
unas circunstancias de miseria y degradación que, desde nuestras condiciones
privilegiadas, casi no podemos concebir en nuestra sofisticada imaginación.
Comparados con los que tienen la suerte de vivir en países desarrollados, los
individuos de las naciones más pobres tienen:
POBREZA MUNDIAL
En Hambre, riqueza y moral, uno de los mejores ensayos filosóficos de Singer, arguye
que es moralmente indefendible la injusticia de que algunas personas vivan en
abundancia mientras otras mueren de hambre. Singer propone que toda persona
capaz de ayudar a los pobres debiera donar parte de sus ingresos a asociaciones de
ayuda a los pobres y otros esfuerzos similares.
Singer razona que, cuando uno vive de manera confortable, una nueva compra para
aumentar la comodidad carecerá de la importancia moral de salvar la vida de otra
persona (Un punto de contención es hasta qué punto una persona puede decir que
vive «confortablemente» y en la obra no se deja especificidad de este ítem). Singer
mismo declara que dona un 25% de sus ingresos a instituciones de ayuda pública
como OXFAM y UNICEF. En la reflexión sobre este tema que hace en Ética práctica,
declara:
Si nos es posible prevenir algo malo sin sacrificar nada de importancia comparable,
debemos hacerlo; la pobreza absoluta es mala; cada uno de nosotros puede aliviar un
poco de pobreza absoluta sin sacrificar nada de importancia moral comparable;
entonces, cada uno debemos aliviar alguna fracción de la pobreza absoluta.
RICOS Y POBRES
Que esta riqueza existe es evidente. Frente al cuadro de pobreza absoluta que nos ha
dibujado McNamara, se podría plantear una situación de "riqueza absoluta". Los que
son absolutamente ricos no lo son necesariamente en comparación con sus vecinos,
sino que lo son teniendo en cuenta cualquier definición razonable de las necesidades
humanas. Esto significa que tienen más ingresos de los que necesitan para satisfacer
de forma adecuada todas las necesidades básicas de la vida. Después de adquirir
(bien directamente o mediante sus impuestos) comida, vivienda, ropa, servicios
sanitarios básicos y educación, a los absolutamente ricos les queda todavía dinero
para gastar en lujos. Los absolutamente ricos eligen su alimento por el gusto de su
paladar, y no para detener el hambre; se compran ropa nueva para variar, y no para
abrigarse; se mudan de casa para vivir en un barrio mejor o tener una habitación de
juegos para los niños, y no para resguardarse de la lluvia; y después de todo esto les
queda todavía dinero para gastar en equipos de sonido, video-cámaras y vacaciones
en el extranjero.
También cuentan con sofisticados sistemas de seguridad que les permiten dejar entrar
en el refugio a cualquier persona que elijan, dejando fuera al resto.
Naturalmente, los miembros de una comunidad llamada Puerto Seguro han recibido
con gran alegría la noticia de que no será necesario que permanezcan en los refugios
mucho más de ocho años. Sin embargo, la noticia también ha provocado las primeras
fricciones serias entre ellos: ya que en la entrada que conduce hasta el pueblo, hay
miles de personas que no invirtieron en un refugio. Se puede ver y oír a estas
personas, a través de cámaras de televisión instaladas en la entrada. Suplican que les
dejen entrar ya que saben que si pueden entrar en un refugio con rapidez, conseguirán
escapar a la mayoría de las consecuencias causadas por la exposición a la radiación.
EL MEDIO AMBIENTE
Un rio se agita por barrancos selváticos y desfiladeros rocosos hacia el mar. La
comisión hidroeléctrica del estado ve el agua caer como energía sin explotar. Construir
una presa a través de uno de los desfiladeros proporcionaría tres años de empleo para
un millar de personas, y un trabajo para un período más largo para veinte o treinta. La
presa almacenaría agua suficiente para asegurar que el estado pudiera satisfacer
económicamente sus necesidades de energía para la próxima década. Esto
estimularía el establecimiento de industrias que consumen mucha energía, las que a
su vez contribuirían a la creación de empleo y al crecimiento económico.
¿Son iguales las preguntas "¿Por qué debo actuar moralmente?" y "¿Por qué debo ser
racional?" en el sentido en que presuponen el mismo punto de vista que cuestionan?
Deberían serlo, si inter- pretamos el "debo" como un "deber" moral. Entonces la
cuestión pediría razones morales para ser moral, y esto sería absurdo.
Una vez que hayamos decidido que una acción es moralmente obligatoria, no hay
ninguna otra cuestión moral que preguntar. Es redundante preguntar por qué debo
hacer moralmente una acción que moralmente debo hacer.
JUSTIFICACIÓN CONDUCTUAL
La conducta ética está justificada por razones que van más allá de la prudencia para
«algo más grande que lo meramente individual». Singer identifica esto que va más allá
de las razones morales como «algo universal», específicamente en la frase «amar al
prójimo como a ti mismo», interpretado por él como una demanda para considerar los
intereses personales, con el mismo peso con que otros consideran sus propios
intereses.
PROPUESTAS PRAGMÁTICAS
Ética práctica incluye un capítulo que aboga por la redistribución radical de la riqueza
para paliar la pobreza absoluta (capítulo 8: «Ricos y pobres»), y otro sobre el caso de
reubicación de refugiados a larga escala en países industrializados (capítulo 9: «Los
de dentro y los de fuera»). Mientras que la naturaleza, el medio ambiente «no
sintiente» no tiene valor intrínseco para un utilitario como Singer, la degradación medio
ambiental es una profunda amenaza para la vida sintiente, y por esta razón los
ambientalistas tienen derecho a hablar de la naturaleza salvaje como un «herencia de
la humanidad.
JUSTICIA SOCIAL COMO VALOR SUPREMO DEL
DERECHO
¿QUÉ ES JUSTICIA?
La justicia proviene del latín iustitĭa, significa en su acepción propia «lo justo, tiene
varias acepciones en el Diccionario de la lengua española, más conocido como DRAE.
Es un valor determinado como bien común por la sociedad. Nació de la necesidad de
mantener la armonía entre sus integrantes. Es el conjunto de pautas y criterios que
establecen un marco adecuado para las relaciones entre personas e instituciones,
autorizando, prohibiendo y permitiendo acciones específicas en la interacción de los
mismos.
JUSTICIA SOCIAL
La justicia social solo puede definirse a partir del hecho concreto de la injusticia social.
Algunos estudiosos.
La justicia social implica el compromiso del Estado para compensar las desigualdades
que surgen en el mercado y en otros mecanismos propios de la sociedad. Las
autoridades deben propiciar las condiciones para que toda la sociedad pueda
desarrollarse en términos económicos. Esto quiere decir, en otras palabras, que no
deberían existir unos pocos multimillonarios y una gran masa de pobres.
ORIGEN Y EVOLUCIÓN
TODO VIENE DE ORIENTE 2.000 años antes de Cristo, en -una época en que
Occidente apenas balbuceaba una cultura, un rey caldeo, Hammurabi, dictaba un
Código, el más antiguo de que se tenga memoria. En el primer año de este siglo,
Morgan, un arqueólogo francés, descubrió una piedra de 2,25 metros de alto,
actualmente en el Museo del Louvre.
La expresión "justicia social" fue acuñada por el sacerdote jesuita italiano Luigi
Taparelli, en el libro (Ensayo teórico del derecho natural apoyado en los hechos),
publicado en 1843, en Livorno, Italia.
La justicia social debe igualar de hecho a todos los hombres en lo tocante a los
derechos de humanidad.
Varias décadas después, a finales del siglo XIX, el término "justicia social vuelve a
usarse en Inglaterra, por parte de los socialistas fabianos. La expresión ya aparece en
los famosos (Ensayos fabianos sobre el socialismo), publicados en 1889. En el
socialismo Fabiano, la justicia social desempeña el papel de finalidad ética por
excelencia, para guiar la evolución social mediante cambios no revolucionarios hacia
un sistema de socialdemocracia.
A cada cual, por consiguiente, debe dársele lo suyo en la distribución de los bienes,
siendo necesario que la partición de los bienes creados se revoque y se ajuste a las
normas del bien común o de la justicia social, pues cualquier persona sensata ve cuán
gravísimo trastorno acarrea consigo esta enorme diferencia actual entre unos pocos
cargados de fabulosas riquezas y la incontable multitud de los necesitados. Pío XI,
Encíclica Quadragesimo anno, 1931.
La aparición en las primeras décadas del siglo XX, del constitucionalismo social, el
Estado de bienestar y el derecho laboral, son cuestiones que rápidamente se
vincularon con las ideas de justicia social.
El tratamiento del término justicia social por las Ciencias Sociales se encuentra en R.
L. Cohen, tomado de justice, social en el 'Dictionary of Sociology' de Oxford. En
Internet puede ubicarse como Social justice. En cuanto a la Filosofía y la Teología el
término es relativamente reciente, pero contiene ya una gran cantidad de trabajos que
conforman una idea post-moderna o contemporánea de la justicia social que merece
un estudio completo.
Su definición llega más allá del contrato social: 'los bienes de este mundo están
originalmente destinados a todos', que forma un conjunto de principios, criterios de
juicio y directrices de acción, 'un compromiso para la justicia según la función,
vocación y circunstancias de cada uno'. Se ha construido ya un modelo de filosofía
moral para la sociedad civil y se ha incorporado a la estructura social a través de las
Ciencias Sociales, es decir, con aportaciones y puntos de vista de técnicas
multidisciplinarias, variadas.
Es por eso los juristas del mundo y en especial de Latinoamérica Plantean que los
ordenamientos jurídicas han de contribuir a revitalización y materialización de valores
supremos tales como. La justicia, libertad, igualdad para así detener la pobreza y
miseria. De estos valores que vive la humanidad y tener la justicia como una
herramienta de carácter. Social que trata la necesidad que existe en la humanidad
entera, para lograr un reparto equitativo de los bienes sociales.
El bien común
DERECHO SOCIAL
Son aquellos derechos que facilitan a los ciudadanos de un país a desarrollarse en
autonomía, igualdad y libertad.
Como un conjunto de exigencias que la persona pueda a ser valer ante la sociedad.
Justicia es el valor supremo que todos nosotros debemos concebir y como hombres y
mujeres de derecho podemos hacer aportes para esa justicia eficiente y efectiva
entonces la justicia no se debe hacer entender como una pieza literaria en la que se
puede hacer una hermosa. Sentencia. Y con el paso del tiempo no sirva para nada.
Es injusto.- todo acto, comportamiento, que trangrede la ley, que viola la ley.
La justicia social es justa porque está en favor de los que menos tienen, la justicia
social es dar a cada quien lo que le corresponde o merece, atiende a los méritos,
es la voluntad de satisfacer, atender necesidades mínimas indispensables ya que
ninguna persona debe carecer de lo elemental como: educación, salud,
alimentación, igualdad de oportunidades.
Quitar a unos para dar a otros, es injusta se corrompe la justicia, una trampa si el
juez deja de juzgar en base a derechos objetivo material y empieza a juzgar en
base a impresiones.
No hay reglas posibles para una justa distribución en un sistema, si no hay gente
haciéndolo realidad.
Los hombres tenemos diferentes formas de pensar, es así que existe una gran
contraposición de idas en el criterio de lo bueno y lo malo, es así que nunca podrá
llegar a ser el mismo para todas las personas.
Héctor lucha con Aquiles por defender a su patria y a su familia, sin embargo; tiene la
decisión de poder ausentarse mediante la escusa (estoy enfermo) sabemos cómo
termino dicho enfrentamiento pero es considerado un gran héroe, pero no merecen
una medalla al igual las hormigas que dieron su vida por su colonia? Entonces nos
referimos a la libertad, la libertad animal, estos no tienen más remedio de actuar o ser
tal como son y actúan como son porque están programados naturalmente para hacer,
no se les puede reprochar lo que hacen, en el caso de las hormigas; tampoco se les
podría reprochar porque no saben actuar de otra forma, ni tampoco aplaudírseles.
Entonces por mucha programación biológica o cultural dependiendo de nuestro
contexto los hombres podemos siempre podemos optar finalmente por algo que no
esté en el programa, es decir podemos decir “si” o “no”.
Cierto es que no somos libres o hacer una sola cosa, ya que conviene aclarar cosas
sobre la libertad:
SEGUNDO.- Ser libres para intentar algo que no tiene nada que ver con lograrlo
indefectiblemente. No es lo mismo libertad (la cual consiste en elegir dentro de lo
posible) que la omnipotencia (que sería conseguir siempre lo que uno quiere, aunque
pareciese imposible).
Las circunstancias nos ponen elegir dos opciones que no hemos elegido, no siempre
está claro que cosas son las que nos convienen. Aunque no podamos elegir lo que
nos pasa, podemos en cambio elegir lo que hacer frente a lo que nos pasa. Cuando
vamos hacer algo, lo hacemos porque preferimos hacer a realizar otra cosa, o por que
preferimos hacerlo a no hacerlo.
Por lo general uno se pasa la vida dando vueltas a lo que nos conviene o no nos
conviene hacer, porque la mayoría de nuestros casos o actos lo hacemos casi
automáticamente, sin darle demasiadas vueltas al asunto.
Savater nos pone un ejemplo hecho por Aristóteles, quien ya había propugnado el
tema: “un barco de Grecia tenia q llegar de puerto a otro puerto, pero llevaba una
carga de valor, en el transcurso del viaje a la tripulación se le acerca una peligrosa
tormenta, es ahí donde el capitán debe de decidir en cuestión sobre: la vida de sus
marinos, su vida, el barco (bien), la carga de valor. En la reflexión del capitán se podría
optar en deshacerse de la carga para poder llegar salvos al puerto de destino, pero
tendría una consecuencia de regaños por no llevar la carga. Sin embargo la otra
opción sería llevar la carga y esperar que la tormenta seda, pero lo cual sería muy
difícil” esta cuestión es planteada por Savater como medio de decisión que optamos.
Otro ejemplo más, te despiertas y apagas la alarma, te quedas otro ratito más, te
levantas porque le autobús no espera, te duchas, has ido dando patadas a una lata
vacía. No creo que cada uno de esos actos los hayas realizado tras angustiosas
meditaciones: "¿me levanto? o ¿no me levanto? no se parecen a las del pobre capitán
del barco, tratando de decidir si tirar la carga o no. Has actuado de manera casi
intuitiva, sin plantearte muchos problemas. Nos plantemos porque hice lo que hice,
nosotros debemos de decidir por nuestras acciones, pero lo que hacemos cada día, en
cambio, puede llegar hacer costumbre, las cuales realizamos sin pensarlas, por
ejemplo el lavarnos o peinarnos. Uno de los tipos de motivación que reconoces es el
de que yo te mando que hagas tal o cual cosa, a estos motivos se le llaman "ordenes".
Al motivo que sueles hacer siempre y lo repites casi sin pensar se llama "costumbres".
El motivo que parece ser la ausencia del motivo se le llama "caprichos". Los
"funcionales" introducen aquellos gestos que haces como puro y directo instrumento
para conseguir algo. Entonces cada uno de los motivos inclina la conducta en una
dirección u otra, esto explica más o menos a tu preferencia por hacer lo que haces
frente a las otras muchas cosas que podrías hacer.
La pregunta para plantear sobre ellos es ¿de qué modo y con cuanta fuerza te obliga
actuar cada uno? Por qué no todos tienen el mismo peso en cada ocasión. A la hora
de hacer las cosas, las hacemos por varios motivos:
-Por órdenes: esperando o un castigo o una recompensa.
-Por costumbre: porque es algo que estas habituado a hacer y ya haces sin pensarlo.
-Por capricho: porque es algo que nos apetece hacer.
¿Estás de acuerdo en que llamemos caprichos al porqué de estos comportamientos?.
Cada uno de estos motivos inclina la conducta en una dirección u otra, explica más o
menos tu preferencia por hacer lo que haces frente a las otras muchas cosas que
podrías hacer. Las ordenes, por ejemplo sacan su fuerza del miedo que puedes tener
a las represalias. La costumbre en cambio viene a la comodidad de seguir una rutina
en ciertas ocasiones e interés que no son contrarias a otros.
Pero nosotros podemos hacer lo que queramos, pero el acto realizado puede traer
consecuencias no muy agradables.
Cuando tiene que salir a exponer el pellejo junto a las murallas de Troya desafiando el
ataque de Aquiles, como hizo Héctor, o cuando hay que decidir entre tirar al mar la
carga para salvar a la tripulación o tirar unos cuantos de la tripulación para salvar la
carga.
Libertad es poder decir “si o no” lo hago o no lo hago, digan lo que digan; esto me
conviene y lo quiero, aquello no me conviene por lo tanto no lo quiero, Libertad es
decidir pero también no olvides darte cuenta de lo que estas decidiendo.
Lo más opuesto de dejarse llevar, como podrás comprender. Y para no dejarte llevar
no tienes más remedio que intentar pensar al menos dos veces lo que vas a hacer,
aunque te duela la cabeza.
Mencionamos que pueden haber ordenes, costumbres y caprichos que sean motivos
que sean motivos para obrar, pero en otros casos no pueden ser así, es decir; por qué
hago esto? Lo hago porque me mandan, porque es costumbre hacerlo y por qué me
da la gana hacerlo, lo bueno lo malo referente a lo que preferimos hacer son términos
muy confuso, “bueno” lo consideramos que nos hace bien, “malo” considerando que
nos hace perjudicar. Lo mismo sucede con las costumbres ¿Por qué diablos tengo que
hacer lo que suele hacerse? Ni que fueran esclavos de quienes me rodean. El
capricho, muchas veces tengo ganas de hacer cosas que enseguida se vuelvan contra
mí, entonces el asunto del capricho puede ser aceptable, pero cuando se trata de
cosas más serias dejarme llevar por él, sin reflexionar si se trata de un capricho
conveniente o inconveniente.
Nadie puede ser libre en mi lugar, es decir; nadie puede dispensarse de elegir de
buscar por mí mismo.
La palabra "moral" etimológicamente, tiene que ver con las costumbres, pues eso
precisamente es lo que significa la voz latina mores, y también con las ordenes, pues
la mayoría de los preceptos morales suenan así "debes hacer tal cosa" "ni se te ocurra
hacer tal otra cosa" pues la mayoría de los preceptos morales así como “debes hacer
tal cosa” o ni se te ocurra hacer tal otra cosa”, por muy ordenadas y acostumbradas
que se nos presenten. Si queremos profundizar en la moral de verdad, si queremos
aprender en serio como emplear bien la libertad que tenemos, más vale dejarse de
órdenes, costumbres y caprichos. Lo primero que hay que dejar claro es que la ética
de un hombre libre nada tiene que ver con los castigos ni los premios repartidos por la
autoridad que sea, autoridad humana o divina, para el caso es igual, el que no hace
más que huir del castigo y buscar la recompensa que dispensan a otros, según
normas establecidas por ellos, no es mejor que un pobre esclavo.
En el transcurso de la vida nos preguntamos siempre hacia dónde ir, que elegir
especialmente cuando damos el paso hacia la vida adulta, muchas inquietudes,
prejuicios, lo que quiere la familia para nosotros y lo que queremos. La ética nos
enseña que lo que queremos es lo que debe guiar nuestras decisiones porque somos
libres de elegir como será nuestra “buena vida” y como vivirla. Teniendo en cuenta que
no somos animales, ya que hemos sido capaces de crear complejos sistemas sociales
y organizaciones muy complejas gracias a nuestra herramienta básica que es el
lenguaje, el cual nos permite expresar emociones, sentimientos, ideas, etc. Que van
dirigidas a otro ser humano que tiene las mismas potencialidades que nosotros, capaz
de comprender, de analizar y en base a esto crear y evolucionar en distintos
aspectos. Es la relación entre humanos (familia, amigos, compañeros, paciente, etc.)
que nos permite evidenciar la libertad humana y elegir nuestra buena vida, compartirla
con otros y dar buena vida. A todos nos gustaría ser tratados con respeto, que valoren
más allá de la situación en sí, nuestro sentir, nuestras dificultades y más importante
aún destaquen nuestras aptitudes para alcanzar una buena vida, y así también los
demás puedan dar ese buen vivir a alguien más. La esencia de la vida humana es la
interacción humana como tal, basada en el lenguaje que nos permite visualizar
diferencias y semejanzas entre cada uno de nosotros las que nos hacen respetarnos,
admirarnos y amarnos y establecer relaciones afectivas estables en el tiempo siempre
considerando lo humano como propio, convirtiéndolo en una virtud para así “darnos la
buena vida”.
¡DESPIERTA BABY!
Esau como Kane tenían claro que querían darse una buena vida, pero no sabían en
qué consistía, no es querer cosas simples, que se fijan en un solo aspecto de la
realidad, que es la forma en que actúo Esaú, simplificando su vida actuando bajo el
mandato de la muerte. En cambio que la vida es complejidad y complicaciones. Kane
estaba obsesionado por conseguir cosas y dinero, tratando a las personas como
cosas, poseyéndolas y dominándolas a su gusto, y cuando no les servían, las
desechaba, asi trataban a Kane como una cosa, solo les importaba el dinero de Kane,
no dando cosas verdaderas que solo el ser humano puede otorgar, el amor o la
compañía, pero él se dio cuenta que le faltaba el verdadero afecto. Es crucial la
atención, reflexionar de lo que se hace comprendiendo lo que es vivir. Uno de los
temas que trata la ética, es la moral, que no es solo cumplir las reglas, es comprender
que comportamientos con hacen bien y cuales pueden hacernos tener una buena vida.
Son nuestras necesidades las que nos hacen apegarnos a otros seres humanos, por
lo que un ser feliz, es un ser solitario, pero si pudiera bastarse a sí mismo y que no
tuviera alguna necesidad no podría amar, y que quien no ama, no puede ser feliz
Darnos la buena vida es lo que se refiere este capítulo, y para lograrla es estar bien
con uno mismo. Es saber dar afecto, comprensión y compañía a los demás, ya que
somos los únicos que podemos darlo, porque eso nos hace seres humanos. Todo
esto se deja de lado si solo nos enfocamos en las cosas materiales, cosas simples,
dejando de lado lo que de verdad importa, que son las complicaciones de la vida, y el
aprender a solucionarlas y vivirlas, nos permiten vivir de verdad. Al centrarnos en
cosas materiales, tratamos a las personas como “cosas” perdiendo el verdadero
sentido de la humanidad. Las personas que solo se centran en cosas materiales,
nunca podrán tener la felicidad verdadera, en donde esta permite tener una buena
vida, sintiéndonos bien con nosotros mismos y con nuestro entorno. El dinero y las
cosas materiales pueden ser importantes en muchos aspectos de la vida, pero
también se tiene que valorar que hay aspectos que no compra el dinero y que nos
hacen seres humanos, como lo son la amistad, el amor, etc. Estas cosas materiales
pueden hacer que tratemos a los demás como objetos, o que suceda al revés, que
seamos tratados como objetos, dejándonos manipular por las cosas materiales, pero
siempre debemos de defender el respeto por uno mismo, para que así no pasemos a
ser cosas para otros. La buena vida es vista en conjunto, no solo por mí, sino que
como me relaciono con mi entorno, en base al respeto, amor y amistad dejando de
prescindir por completo de las cosas. Esto se refiere a una visión moral, que no es
solo el saber que está bien o mal, sino que es comprender porque llevamos esta vida y
que la hace buena.
También hace diferencia entre el egoísta y el imbécil, arguyendo que solo deberíamos
llamar egoísta consecuente al que sabe de verdad lo que le conviene para vivir bien y
se esfuerza en conseguirlo, y no al imbécil que cree ser feliz con lo que tiene o posee
pero al final se fastidia el mismo.
El autor nos ofrece una interesante visión sobre nuestra actitud para con la vida, y nos
invita a desarrollar nuestra capacidad crítica sobres nuestras posibilidades de libertad.
PONTE EN SU LUGAR
El punto central de este capítulo, y tal como lo expresa Sabater, es: “¿en qué consiste
tratar a las personas como a personas, es decir, humanamente? Respuesta: consiste
en que intentes ponerte en su lugar”. “Ponerse en el lugar de otro” implica
comprenderle desde dentro, de adoptar su punto de vista, esto se ve posibilitado por el
hecho de que el ser humano es el único que maneja símbolos.
Acercándonos a un punto de vista más jurídico Sabater nos explica que “ponerse en el
lugar de otro” se trata además de tomar en cuenta sus derechos y sus razones. El
hombre tiene derecho a que se le comprenda, aunque sea para condenarle en nombre
de las leyes. Ponerte en lugar de otro -en palabras de Sabater- es tomarle en serio, no
tomar en serio al otro genera aprovechamientos y daños. Más adelante Sabater amplia
que gran parte del proceso de ponerse en el lugar de otro significa llegar a la Justicia,
no entendiéndola como institución pública, sino como virtud de justicia, es decir, la
habilidad y el esfuerzo que debe hacer cada uno por entender lo que nuestros
semejantes pueden esperar de nosotros.
Sabater propone “relativizar” los intereses, explica que no tiene nada de malo fijarse
por los propios intereses y no debe renunciar a ellos, sin embargo el hombre no vive
solo y los intereses de los otros también son respetables. Ello no significa que siempre
se le deba dar la razón al otro en lo que reclama o en lo que hace. Ponerse en el lugar
de otro significa hacer un esfuerzo por ver las cosas como las ve el otro, no ocupar su
sitio ni someterse a él. Significa tener EMPATÍA con el otro.
TANTO GUSTO
Sabater inicia indicando que el común de las personas asocia lo “moral” e “inmoral” al
sexo. Se cree que lo moral se dedica a juzgar lo que la gente hace con sus cuerpos y
genitales. Una de las funciones más importantes del sexo es la procreación, lo que
genera obligaciones desde un punto de vista ético. Además produce otros efectos
como la poesía lírica y la institución matrimonial, además se le añade símbolos y
refinamientos, invenciones que hace el hombre. Sabater precisa que los animales son
quienes emplean el sexo solo con fines reproductivos. En contraste cuanto más aleja
el hombre el sexo de la simple procreación, menos animal y más humano resulta.
Sabater cree que esta obcecación sobre la inmoralidad del sexo tiene que ver con un
antiguo recelo social: el miedo al placer. El posible origen de este temor tiene que ver
con la distracción que puede generar el placer, dichas distracciones podrían poner en
peligro al grupo. Pero este temor fue degenerando en una actitud negativa al placer, al
punto de que existen personas que solo disfrutan no dejando disfrutar, creen que algo
es malo solo porque da gusto hacerlo, Sabater llama a estos individuos Puritanos. Los
puritanos se creen además guardianes de la moralidad. El puritanismo es considerado
como a actitud más opuesta a la Ética.
Sabater amplía su análisis del placer en dos puntos: primero, el placer implica el
saboreo del presente, esto no significa que se deba buscar todos los placeres en un
solo momento, sino que se busque los placeres del momento, la forma más segura de
estropear el gozo es empeñarse en que cada momento tenga todo y brinde los
placeres más dispares e improbables. Segundo: se debe tener cierto control sobre los
placeres, esto implica no permitir que cualquiera de ellos borre la posibilidad de todos
los otros. En este sentido Sabater diferencia entre “uso” y “abuso” del placer, mientras
que el primero enriquece la vida, el segundo la empobrece, dado que solo se vive para
satisfacer un placer dejando de lado los demás.
ELECCIONES GENERALES
Este capítulo trata la relación entre la Ética y la Política. Sabater inicia su análisis
sacando a relucir el tema del porque los políticos son tan mal vistos -lo cual no sería
más que una percepción, lo que él mismo concluye es que los políticos se parecen
mucho a los que los votan, solo los gobernantes que no llegan al poder por elecciones
generales son distintos al común. Entonces el escenario político se hace muy diverso
ya que entre los políticos habrá unos decentes y otros aprovechados.
La ética es el arte de elegir lo que más nos conviene y vivir lo mejor posible, en tanto
que el objetivo de la política es organizar de la mejor manera la convivencia social, en
este sentido cualquiera que pretenda vivir bien no puede desentenderse de la política.
La ética se ocupa de un aspecto más personal, es decir, de lo que uno mismo hace
con su libertad; la política, en cambio, intenta coordinar de la manera más provechosa
para el conjunto lo que muchos hacen con sus libertades.
Sabater nos plantea desde un punto de vista ético tres condiciones con las que
debería cumplir una organización política para conseguir la buena vida:
a. Libertad. El sistema político deseable debe respetar todas las facetas públicas de
la libertad humana: libertad de reunión, de expresión, de invención, de trabajo, de
tránsito, etc. Es ser libre también implica asumir la responsabilidad social por las
acciones y omisiones.
b. Justicia. El principio básico de la vida buena consiste ponerse en el lugar del otro,
respetar los intereses del otro relativizando los propios. El régimen político debe
buscar alcanzar la justicia. La dignidad es la condición por la que cada ser humano
de ser tratado como igual por los demás, en este sentido, la única razón legitima
para privar a alguien de su libertad es que no trate a los demás como igual. La
Dignidad Humana nos hace a todos semejantes, certifica a cada uno como único,
no intercambiable y con los mismos derechos que cualquier otro.
c. Asistencia. El ser humano debe simpatizar con el sufrimiento de los demás. El
sistema político tiene que garantizar en lo posible la asistencia comunitaria a los
que sufren.
Las exigencias mínimas con las que debe cumplir la sociedad política y la humanidad
en general es el cumplimento y respeto de los derechos humanos; buscar el equilibrio
vegetal y animal del planeta; establecer la tolerancia, evitar el racismo, los
nacionalismos y las ideologías fanáticas.
Sabater nos da una recomendación: no tomarse demasiado en serio este libro, el libro
no es una guía ética y que principal mensaje que él quería transmitir es acerca de qué
es lo que uno puede hacer con la vida.
Savater se queda con la interrogante ¿cómo vivir mejor?, la cual Savater indica que
debemos responderla por nosotros mismos debido a tres motivos:
LA JUSTICIA
Etimología: El término Justicia es una de las palabras más difíciles de definir y de las
que más preguntas se han hecho. Filósofos, juristas, escritores, entre otros, han
tratado de dar su concepto pero, ninguno se ha considerado como universal.
¿QUÉ ES LA JUSTICIA?
El jurista Hans Kelsen afirmó que: “No hubo pregunta alguna que haya sido planteada
con más pasión, no hubo otra por la que se haya derramado tanta sangre preciosa ni
tantas amargas lágrimas como por ésta; no hubo pregunta alguna acerca de la cual
hayan meditado con mayor profundidad los espíritus más ilustres, desde Platón a
Kant. No obstante, ahora como entonces carece de respuesta”.
Desde la época romana, la Justicia ha sido representada por la diosa Themis. La cual
se presenta con el aspecto de una noble mujer empuñando en todo lo alto la espada
de la ley; sosteniendo con la otra mano, la balanza de la equidad y manteniendo
siempre los ojos vendados en señal de imparcialidad. Esto es, que deja caer la fuerza
de la espada sobre quien trate de desequilibrar la balanza, no viendo las
particularidades del individuo, sin importar que sea joven o viejo, rico o pobre, enfermo
o sano, blanco o negro, virtuoso o criminal.
El hombre siempre realiza conductas a las cuales se les puede catalogar como justas
o injustas. Un claro ejemplo, es cuando un individuo da muerte a otro individuo, pues
aquí ya nos encontramos con la privación del valor primordial del ser humano: la vida.
Porque donde hay negación de la vida o atentados contra la misma, en cualquier
forma y aspecto, no hay Justicia; ya que ella es la reina y señora de todas las virtudes.
Es así como Sócrates declaraba que la Justicia es ante todo una perfección interior,
una virtud que radica en el alma. Y Aristóteles termina diciendo que la Justicia es la
virtud más alta, la virtud perfecta. Por el contrario, para los juristas es el fin principal
para solucionar de forma práctica y oportuna los problemas sociales que surgen de la
convivencia humana, siendo esta última la que le pertenece al abogado.
El Derecho es justo por naturaleza: , tal como lo afirmaran los iusnaturalistas. La ley,
en cambio, trata de serlo. Aquí hay que hacer una aclaración, que no es lo mismo ley
que Derecho; porque toda ley es Derecho, pero no todo Derecho es ley. La ley es una
parte del Derecho, ella surge de él, por lo que es necesario no incurrir en el error de
catalogarlos como sinónimos.
Los positivistas consideran que por Justicia debe entenderse la legalidad, el riguroso
apego a la ley, o sea, la imparcial y correcta aplicación e interpretación del Derecho
positivo. Pero, en uno de los mandamientos del abogado que da Couture, sostiene:
“Tu deber es luchar por el Derecho, pero el día que encuentres en conflicto el Derecho
con la Justicia, lucha por la Justicia”. Esto significa que la Justicia está por encima del
propio Derecho, pero del derecho positivo.
Se debe dejar en claro, que todos aquellos jueces impartidores de Justicia, deben de
hacerlo, no conforme a Derecho sino conforme a la propia Justicia. Así como el profeta
Isaías dijo: “Y ciertamente haré del Derecho el cordel de medir y de la Justicia el
instrumento de nivelar”.
LA JUSTICIA SE REPRESENTA POR UNA MUJER CON LOS OJOS VENDADOS, CON UNA
BALANZA EN UNA MANO Y UNA ESPADA EN LA OTRA, MEJOR CONOCIDA COMO LA
DIOSA THEMIS
La justicia se representa por una mujer con los ojos vendados, con una balanza en
una mano y una espada en la otra.
La venda
Desde el siglo XV, la Dama de la Justicia ha sido a menudo representada con los ojos
vendados. La venda en los ojos representa la objetividad, en que la justicia es, o
debería ser impuesta objetivamente, sin miedo ni favoritismos, independientemente de
la identidad, el dinero, el poder o debilidad; la justicia ciega e imparcial. Las primeras
monedas romanas representan a Iustitia con la espada en una mano y la balanza en la
otra, pero con los ojos descubiertos. Iustitia sólo se representa comúnmente como
"ciega", desde fines del siglo XV.
Otro nivel de análisis es entender la justicia como valor y fin del Derecho más que
como virtud subjetiva al que podemos conceptuar juntamente con Norberto Bobbio
como "aquel conjunto de valores, bienes o intereses para cuya protección o
incremento los hombres recurren a esa técnica de convivencia a la que llamamos
Derecho".
Ahora bien en cuanto el ideal de justicia o sea, ese conjunto de condiciones protegidas
por el derecho se puede considerar desde una perspectiva absoluta iusnaturalista
dentro de lo cual todo derecho es justo y si no es justo es derecho.
IMPORTANCIA
La importancia de la justicia reside entonces justamente en este último detalle: en la
posibilidad de organizar a la sociedad de manera más o menos objetiva (aunque es
verdad que cada región, país o Estado organiza su propia justicia) y equitativa para
todos. La justicia al ser un conjunto de leyes escritas supone que todos deberán
cumplirlas por igual y que no se podrá ya prestar al debate o a la justicia por mano
propia la resolución de cada caso particular.
PLATÓN: La Justicia Aristocrática como armonía social. Propone que los puestos de
mando lo lleven los mejores de la sociedad, es decir, los más sabios.
ARISTÓTELES: La Justicia como igualdad proporcional: Dar a cada uno lo que es suyo,
o lo que le corresponde. Dice que lo que le corresponde a cada ciudadano tiene que
estar en proporción con su rango social y sus méritos personales. También nos habla
sobre el Justo medio en las cosas y el modo de vida.
SANTO TOMÁS DE AQUINO: La Ley Natural. Dice que los ciudadanos han de tener los
derechos naturales, que son los que Dios les da. Estos derechos son más tarde
llamados los Derechos Humanos.
UTILITARISTAS: Para ellos, las instituciones públicas se componen de una forma justa
cuando consiguen maximizar la utilidad en el sentido de felicidad agregada. Según
esta teoría, lo justo es lo que beneficia al mayor número de personas a la vez.
TIPOS DE JUSTICIA
LEGAL O GENERAL: Ordena los actos de todas las virtudes del hombre al bien común,
al interés de la sociedad o la familia. A su vez la ley determina el débito o deuda que el
individua particular ha de pagar al bien común.
General porque la aportación del hombre se realiza por los actos de todas las virtudes,
no es una virtud particular ya que su objeto o materia es el de todas las virtudes,
referido al bien común.
A la vez tiene una finalidad social ya que colabora con la paz y el bienestar de la
comunidad y esto ayuda a realizar la satisfacción entre los hombres de las
necesidades.
Siempre la ley positiva ha mirado a esta finalidad social de las acciones humanas. La
ley es un precepto racional con miras al bien común. La justicia social tiene la misión
de tener de cada cual cuanto pueda ser necesario para la prosperidad y la felicidad de
todos. Muchos la identifican con la justicia legal, esto no es así porque la legal tiene
una razón formal bien definida, que la constituye en justicia verdadera no particular
sino general.