Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
ISBN 987-591-008-2
Primera edición
Impreso en Argentina
ISBN: 987-591-008-2
Queda hecho el depósito que marca la ley 11.723
Editorial Brujas
editorialbrujas@arnet.com.ar
Tel./fax: (0351) 4606044 – Pasaje España 1485
Córdoba – Argentina
Equipo docente y colaboradores del libro
Encargada de la materia: Prof. Dra. Maria Santucci de Mina (1997-2005)
Prof. Dr. Alberto M. E. Costamagna (1999-2004)
Año 2004
Colaboradores docentes:
Lic. Marcela Cecilia Antequera
Lic. Viviana Silva
Colaboradoras:
Mariel Nievas
Maria Laura Gianoboli
Maria Julia Monserrat
Trabajos de investigación de los alumnos (supervisado por los profesores)
Año 2005:
Colaboradores docentes:
Lic. Alfredo Barale
Lic. Rogelio Guzmán
Lic. Osmar Muñoz
Colaboradoras Alumnas:
Alejandra Alanis
Maria Fernanda Cobos
Maria Angélica Morell
Mariel Nievas
Claudia Alejandra Rodríguez
Andrea Ofelia Valencia
Profesionales Coordinadoras
Lic. Maria Julia Monserrat
Lic. Andrea Ofelia Valencia
Profesionales Participantes:
Lic. Marcela Cecilia Antequera
Lic. Alfredo Barale
Prof. Dr. Alberto M. E. Costamagna
Lic. Maricel Ferreyra
Lic. Maria Julia Monserrat
Prof. Dra. Maria Santucci de Mina
Lic. Viviana Silva
Lic. Andrea Ofelia Valencia
ÍNDICE
Pág.
2° Parte .................................................................................... 97
Sistema educativo y respeto por las altas capacidades.
Maricel Ferreyra ...................................................................... 99
Aspectos psicológicos sobre superdotación.
Marcela C. Antequera .............................................................. 105
Superdotación.
Paula Alejo, Cristina De la Vega, Hilda Paz ........................... 113
Las necesidades educativas especiales de todos los superdotados
Alberto Costamagna 121
Estrategias y técnicas de modificación de conductas negativas.
Gimena Borquez, Silvina Gatti ................................................. 133
Retraso mental, familia e instituciones.
Ana Barton, María Bollati, Rocio Davrieux, Lourdes Fontaine ... 141
Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD).
Alejandra Alanis ....................................................................... 147
Mirada psicológica acerca de la educación y terapia del niño
autista.
María Julia Monserrat ............................................................. 157
Autismo infantil. Aspectos generales.
Claudia Alejandra Rodríguez ................................................... 163
El adolescente con Síndrome de Down y sus modalidades
identificatorias como constructivas de la personalidad.
Viviana Bálsamo, Cecilia Pereira, Paola Valverde ................. 171
Introducción
1
Hernández Gomez. “Antropología de la discapacidad y dependencia”. Madrid, 2001.
15
María Fernanda Cobos
16
Introducción a la evolución histórica del concepto de discapacidad y los valores
3
A, Marchesi, C. Coll y J. Palacios. “Desarrollo Psicológico y Educación III.
Alianza Editorial, S.A, Madrid, 1999.
4
Gilbert y Mardomingo. Educación Especial Cincel, Madrid. 1988 (p-1)
17
María Fernanda Cobos
5
Clase no editada, de M. Santucci Materia “Psicología de los Educandos con Ne-
cesidades Especiales”. Marzo, 2004.
18
Introducción a la evolución histórica del concepto de discapacidad y los valores
ELEANOR ROOSEVELT
You Leam by Living
19
La educación y habilitación en edad temprana
favorecen la evolución psicosocial del niño que
nació o adquirió una parálisis cerebral
21
María Santucci de Mina
22
La educación y habilitación en edad temprana favorecen la evolución psicosocial del niño...
23
María Santucci de Mina
24
La educación y habilitación en edad temprana favorecen la evolución psicosocial del niño...
Bibliografía:
Gonzalez Mas, R.: “Tratado de rehabilitación Médica” tomo I y II.
Ed. Científico –Médica. Barcelona. España. 1976.
Piaget, Jean: “Seis Estudios de Psicología”. Barral Editores. Barce-
lona. 1973
Santucci de Mina, María.: “Evolución Psicosocial del niño con Pa-
rálisis Cerebral”. Ed. Brujas. Córdoba. Argentina. 2003.
25
Consideraciones sobre la Parálisis Cerebral
de niños en Educación Especial
27
Blanco, R., González Grané, M., Mercurio, M.
1
Cano, M.; Piana, M.; Ramírez, B.; Santucci, M. Integración del educando con
parálisis cerebral a la sociedad. Ed. Agencia periodística CID- Diario del viajero.
Bs. As., Argentina, 1996. pág. 31.
2
Ibíd., pág. 32.
3
Santucci de Mina M. Evolución Psicosocial del niño con Parálisis Cerebral. Ed.
Brujas, Córdoba 2003, pág.86.
28
Consideraciones sobre la parálisis cerebral de niños en educación especial
4
Mayor Sánchez y otros. Manual de Educación Especial. Cap. IV: Deficiencias
Físicas. Ed. Madrid, 1988 pág.287.
5
http:// www.cpc.org.ar, Recuperado 27/06/04.
29
Blanco, R., González Grané, M., Mercurio, M.
Bibliografía:
Cano, M.; Piana, M.; Ramírez, B.; Santucci, M. “Integración del edu-
cando con parálisis cerebral a la sociedad”. Ed. Agencia periodís-
tica CID- Diario del viajero. Bs. As., Argentina, 1996.
Santucci de Mina M.” Evolución Psicosocial del niño con Parálisis
Cerebral. Ed. Brujas, Córdoba. 2003.
Mayor Sánchez y otros. “Manual de Educación Especial”. Cap. IV:
Deficiencias Físicas. Ed. Madrid, 1988.
http:// www.cpc.org.ar, Recuperado 27/06/04.
http:// www.neurorehabilitación.com, recuperada el 01/09/2004.
6
http:// www.neurorehabilitación.com, recuperada el 01/09/2004.
30
Parálisis Cerebral
31
Bussi Sandra, Caballero Valeria, Campagno Carla, Cena Nadia
32
Parálisis Cerebral
33
Bussi Sandra, Caballero Valeria, Campagno Carla, Cena Nadia
1
Santucci de Mina M. Evolución Psicosocial del niño con Parálisis Cerebral. Ed.
Brujas. Córdoba, 2003.pág.26.
34
Parálisis Cerebral
2
Ibíd., pág.27
3
Ibíd., pág.30
4
Malher, M. Estudio 1. Psicosis infantiles y otros trabajos. Ed. Paidós. Buenos
Aires. 1984.
35
Bussi Sandra, Caballero Valeria, Campagno Carla, Cena Nadia
5
Ibíd. Cita 1, pág. 32.
6
Ibíd. Cita 4,
7
Ibíd. Cita 1, pág. 36.
8
Ibíd. Cita 1, pág. 37.
36
Parálisis Cerebral
9
Ibíd. Cita 1, pág. 38.
10
Ibíd. Cita 1, pág. 40, 41.
37
Bussi Sandra, Caballero Valeria, Campagno Carla, Cena Nadia
Bibliografía
Cordera de Hillman E. Apunte de cátedra de Psicología Evolutiva de la
Niñez. Facultad de Psicología, Universidad Nacional de Córdoba.
1999.
Comunidad Educativa. Proyecto Educativo Institucional (P. E. I). Traba-
jo de Investigación de la comunidad educativa. Escuela N ° 19. Cór-
doba, 1998.
Piaget J. Seis estudios de Psicología. Editorial Barral, Barcelona, 1973.
Santucci de Mina M. Evolución Psicosocial del niño con Parálisis Cere-
bral. Ed. Brujas. Córdoba, 2003.
Apuntes teórico-práctico de la Materia Psicología de los Educandos con
Necesidades Educativas Especiales. Facultad de Psicología, Univer-
sidad Nacional de Córdoba. 2004.
Luis C Moll (comp.) Vygotsky y la educación. Ed. Aique, 1989.
11
Ibíd. Cita 1, pág. 43.
38
Una aproximación de la Terapia Gestáltica
y resiliencia en personas con discapacidad
39
María Laura Gianoboli, Mariel Nievas
1
Horney,K. Neurosis y Madur, Ed. Siglo XX .Buenos Aires1991, Cáp. I, Pág. 13.
2
Grotberg,E. Resiliencia descubriendo las propias fortalezas, 2004 Pág. 20.
40
Una aproximación de la terapia gestáltica y resiliencia en personas con discapacidad
41
María Laura Gianoboli, Mariel Nievas
3
Suárez Ojeda. Perfil del niño resiliente. Trabajo presentado en el Seminario In-
ternacional sobre aplicación del Congreso de Resiliencia en proyectos sociales.
Univ. Nacional de Lanús. Fundación Bernard Van Leer. 1997.
42
Una aproximación de la terapia gestáltica y resiliencia en personas con discapacidad
Autoestima:
Constituye la capacidad del individuo para valorarse a sí mismo,
con una visión, que incluya el manejo de la crítica constructiva.
La imagen que la persona discapacitada tiene de sí misma, se ve
menoscabada a causa de su discapacidad, asumiendo sentimientos
de inferioridad, y poca confianza en sí mismo. Su autoestima de-
pende de que los demás lo acepten como persona, como un igual, y
no como discapacitado.
Con el objetivo de elevar su baja autoestima, aquellos que le
rodean, deben percibirlo y aceptarlo tal cual es, prodigándole amor
incondicional, tranquilidad y equilibradas expectativas, pues estas
gravitan significativamente en las percepciones que tiene de él
mismo. Este pilar es fundamental, pues forma el núcleo central, ya
que es la base de los demás.
43
María Laura Gianoboli, Mariel Nievas
posibilidades.
También a asumir responsabilidades, y aprender a hacerse, en la
medida de lo posible cargo de su propia persona, autorregular su
propia conducta, y mantener control sobre los problemas que se le
presentan a diario.
Ejercitándolo para que desarrolle habilidades útiles para su ade-
cuado desenvolvimiento en el entorno que habita, mediante la prác-
tica del ensayo y el error y la asignación de tareas que lo hagan
sentirse útil.
44
Una aproximación de la terapia gestáltica y resiliencia en personas con discapacidad
Creatividad:
La capacidad de crear está potencialmente en todo ser humano.
Produce orden, armonía y belleza, alrededor del caos. En el disca-
pacitado, crear produce en él un salto sublime: Empieza a sublimar,
comienza a mirar lo negativo bajo otro punto de vista, puede ex-
presar sentimientos y emociones a través del arte y sus múltiples
medios, produciéndose en él un benéfico efecto liberador.
Bibliografía:
Horney, Karen. “Neurosis y Madurez”. Ed. Siglo XX Bs. As.
Año1991.
Melillo Aldo y Néstor Suárez Ojeda. “Resiliencia descubriendo las
propias fortalezas”. Ed. Paidós. Bs. As. 2004.
Perls, Firtz. “El enfoque gestáltico y testimonios de terapia”. Ed.
Vientos. Bs. As. 1976.
45
El Rol del Psicólogo en los procesos de integración,
inclusión y socialización en personas con necesidades
especiales
47
Paola Barzola, Marta Coppo, Laura Julián
1
Diccionario Océano Uno. Ed. Océano, Colombia, 1990
2
Pérez de Plá, E.; Carrizosa S.. “Sujeto, inclusión y diferencia”. Ed. Grupo Olé,
México 2000.
48
El rol del psicólogo en los procesos de integración...
3
http://www.down21.org
49
Paola Barzola, Marta Coppo, Laura Julián
4
Diccionario Océano Uno. Ed. Océano, Colombia, 1990
50
El rol del psicólogo en los procesos de integración...
51
Paola Barzola, Marta Coppo, Laura Julián
52
El rol del psicólogo en los procesos de integración...
6
Costamagna, Alberto. “ Quiero Ser”. Ed. Brujas, Córdoba 2002, pág.124, 125.
53
Paola Barzola, Marta Coppo, Laura Julián
7
Santucci de Mina, María. “ Evolución Psicosocial del niño con Parálisis Cere-
bral”. Ed. Brujas. Córdoba.2002.
54
El rol del psicólogo en los procesos de integración...
Bibliografía:
Diccionario Océano Uno. Ed. Océano, Colombia, 1990
Costamagna, Alberto. “ Quiero Ser”. Ed. Brujas, Córdoba 2002,
pág.124, 125.
Santucci de Mina, María. “Evolución Psicosocial del niño con Paráli-
sis Cerebral”. Ed. Brujas. Córdoba.2002.
Pérez de Plá, E ; Carrizosa S.. “Sujeto, inclusión y diferencia”. Ed.
Grupo Olé, México 2000.
http://www.down21.org
55
Los educandos con necesidades
especiales y la socialización
Deficiencia Mental
En cuanto a la experiencia realizada en las instituciones de Edu-
cación Especial, comenzaremos precisando el término “Deficien-
cia” dadas las características de la población a la que asisten que se
trata de deficientes mentales leves y moderados.
En referencia a la definición de la deficiencia mental, se en-
cuentran variadas descripciones. Entre ellas, podemos indicar a la
que menciona el DSM IV cuando alude al retraso mental, donde
dice: “la característica esencial del retraso mental es una capacidad
intelectual general significativamente inferior al promedio (criterio
A) que se acompaña de limitaciones significativas de la actividad
adaptativa propia de por lo menos dos de las siguientes áreas de
habilidades: comunicación, cuidado de sí mismo, vida doméstica,
habilidades sociales/interpersonales, utilización de recursos comu-
nitarios, autocontrol, habilidades académicas funcionales, trabajo,
ocio, salud y seguridad (criterio B). Su inicio debe ser anterior a los
18 años de edad (criterio C). El retraso mental tiene diferentes etio-
logías y puede ser considerada como vía final común de varios
procesos psicopatológicos que afectan el funcionamiento del sis-
tema nervioso central”.1
Otra de las descripciones del concepto, según el manual de
“Psicopedagogía Operativa” 2, al hablar de deficiencia mental hace
alusión a los niños que no pueden superar las exigencias que el
medio ambiente demanda comúnmente a los niños de su edad, pre-
sentando un retraso más o menos constante a través de los años. El
comportamiento inteligente normal cumple un desarrollo de madu-
1
Pichot, P. DSM IV, Breviario, Criterios diagnósticos. Ed. Masson. Barcelona
(España). 1995. Pág 49.
2
Manual de Psicopedagogía Operativa. Tratamiento educativo de la deficiencia
mental. Ed. Nueva Visión. Bs. As.
57
Mónica Mellado, María A. Morell
ración más o menos constante para todos los niños. En los niños
con retraso mental este desarrollo se hace más lentamente y en
forma incompleta: en razón de esta diferencia en el ritmo, se define
a la deficiencia mental y sus grados de gravedad comparando el ni-
vel actual del comportamiento del niño con la edad en que este
comportamiento sería suficiente.
Desde el punto de vista cualitativo, y continuando con lo men-
cionado en el manual de “Psicopedagogía Operativa”, la deficien-
cia mental presenta las características más definitorias y pedagógi-
camente más operativas que las que surgen de la simple diferencia
entre la edad mental y la edad cronológica de un individuo.
Los rasgos que diferencian al niño con retraso mental puede
describirse en una particular forma de pensamiento que se da en
estos niños y en ciertos aspectos que tienen que ver con la estructu-
ra de su personalidad y que se relacionan en parte con las conse-
cuencias sociales de ser deficiente mental. Se advierte que en estos
niños hay un marcado desinterés por el mundo que los rodea,
acompañado por una debilidad manifiesta en el espíritu de obser-
vación. Puede estar mucho tiempo inactivo o realizando movimien-
tos inconsecuentes, o bien repetir estereotipadamente el mismo
juego, aceptando con dificultad los nuevos estímulos.
Por otra parte la adquisición del vocabulario, si se logra, es de
manera muy lenta en relación con otros conocimientos, observán-
dose, además, un particular retardo en otras formas expresivas, re-
sultándoles muy difícil para estos niños la integración de la expe-
riencia.
Según Margaret Johnson la deficiencia mental es la capacidad
restringida de aprender, muchos de los deficientes son “educables”,
se les considera capaces de adquirir conocimientos académicos por
medio de una instrucción especializada.3
Para dicha autora, entre algunas de las características que po-
seen los niños con deficiencia mental podemos mencionar:
• Dificultades de la percepción, donde el sujeto tiene difi-
cultades para interpretar adecuadamente las experiencias sensoria-
3
Johnson, Margaret Anne. “La educación del niño deficiente mental”. Manual
para padres y educadores. Bs. As.
58
Los educandos con necesidades especiales y la socialización
59
Mónica Mellado, María A. Morell
La familia
Consideramos de fundamental importancia a la familia, como la
institución que representa para el ser humano, el primer lugar en
donde recibe las bases primordiales para acceder a su socialización.
Por eso abordamos a dicho concepto desde la teoría sistémica, se
pueden obtener importantes aportes para el niño, más específica-
mente de los Educandos con Necesidades Especiales (ENEE)
De este tipo de terapia, se desprende una concepción del ser,
como coexistente en interacción con otros, como lo expresa Matu-
rana “el ser social es individual, y ser humano individual es so-
cial”4, es decir cobra especial importancia el contexto vincular del
ser, en tanto es a partir de dicha interacción recíproca donde emer-
ge el individuo, donde logra el proceso de individuación. Se puede
definir a la familia como el grupo primario de las relaciones inter-
personales que establece el ser, donde se desarrollan diversos vín-
culos de parentesco, definidos de acuerdo con las funciones ejerci-
das en el grupo. A su vez esta instancia permite el encuentro entre
necesidades individuales y propuestas sociales.
La visión que el terapeuta tiene de la familia, según lo expone
Salvador Minuchín y H. Fishman, es una red compleja de interac-
ciones, es entendida como totalidad, como organismo que en sí
mismo es una forma de vida.5
La comprensión de la familia como sistema, permite una orga-
4
Maturana en Grosman, C. y Colaboradores. Violencia en la familia. Ed. Univer-
sidad. Bs.As., 1992, pág 7.
5
Minuchín, Salvador: “Familias y terapia familiar, un modelo Familiar”. Editorial
Gedisa. Bs. As. 1982. Cáp. III, Pág 86.
60
Los educandos con necesidades especiales y la socialización
6
Rey Andre. Retraso Mental y primeros ejercicios educativos. Edit. Cincel Kape-
luz Madrid. 1980.
61
Mónica Mellado, María A. Morell
62
Aproximaciones terapéuticas respecto del lenguaje y
la deficiencia mental
63
Osmar Edrel Muñoz
64
Una nueva actitud desde la Psicología para la
educación de las personas sordas
1
Skliar, C.,Massone, M. y Veinberg, S. Revista: Infancia y aprendizaje: El acce-
so de los niños sordos al bilingüismo y biculturalismo. Madrid, vol.69-70,
1995.pág.85-100.
2
Heward, W. L. Niños Excepcionales: Una introducción a la Educación Espe-
cial. Cap.8. Primera edición en español por Pearson Educación, S.A., Núñez de
Balboa, 120. 28006. Madrid, 1998. pág.272.
65
Andrea Ofelia Valencia
El Trabajo en Equipo
En la actualidad se apuesta por abordar un problema, trabajando
en equipo. Lo que se sugiere también en el caso del estudio de las
personas sordas.
Los profesionales que pueden asistir a las personas sordas son
numerosos. Uno de ellos es el Psicólogo, al cual, le está encomen-
dado el advertir las características intelectuales, psíquicas y socia-
les del sordo. A su vez revelar la personalidad como consecuencias
de la pérdida de la audición. Es decir, describe la conducta de las
personas sordas y sus actitudes hacia el mundo que los rodea. En-
tendiendo que en la sordera además de una manifestación cultural,
también se unen inseparablemente pautas y problemas sociales,
emotivos, lingüísticos e intelectuales.
3
Skliar, C.,Massone, M. y Veinberg, S. Revista: Infancia y aprendizaje: El acce-
so de los niños sordos al bilingüismo y biculturalismo. Madrid, vol.69-70,
1995.pág.85-100.
66
Una nueva actitud desde la Psicología para la educación de las personas sordas
4
Heward, W. L. Niños Excepcionales: Una introducción a la Educación Espe-
cial. Cap.8. Primera edición en español por Pearson Educación, S.A., Núñez de
Balboa, 120. 28006. Madrid, 1998. pág.273.
5
http://www.susmedicos.com.Recuperado el 08/07/2005 –1:30 hs y en
http://www.audiofon.com.co
67
Andrea Ofelia Valencia
6
Heward, W. L. Niños Excepcionales: Una introducción a la Educación Espe-
cial. Cap.8. Primera edición en español por Pearson Educación, S.A., Núñez de
Balboa, 120. 28006. Madrid, 1998, pág.273,275,276
7
http://www.psicopedagogia.com, recuperado el 08/07/2005 –1:30 hs.
8
Apunte de Cátedra Psicología de los Educandos con Necesidades especiales Fa-
cultad de Psicología. Universidad Nacional de Córdoba, 2004. pág.112.
68
Una nueva actitud desde la Psicología para la educación de las personas sordas
tiene delante, las que puede tocar. Esto, desde los primeros años,
está impidiendo la formación del desarrollo de la capacidad inte-
lectual del sujeto, va desconociendo desde el principio, la realidad,
o la va adquiriendo a partir de formaciones visuales o actuales
siempre incompletas y deficitarias, accede con mucha dificultad a
lo abstracto, a conceptos intelectuales. De ahí, la importancia de
poner a su disposición un sistema de comunicación alternativo, que
le sirva para comunicarse e interaccionar con los demás, organizar
y transmitir su pensamiento, influir en los demás y autorregularse.
69
Andrea Ofelia Valencia
Bibliografía:
Apunte de Cátedra “Psicología de los Educandos con Necesidades
Especiales” Facultad de Psicología. Universidad Nacional de
Córdoba, 2004.
Skliar, C.,Massone, M. y Veinberg, S. Revista: “Infancia y aprendi-
zaje: El acceso de los niños sordos al bilingüismo y bicultura-
ralismo”. Madrid, vol.69-70, 1995.
Heward, W. L. “Niños Excepcionales: Una introducción a la Educa-
ción Especial”. Cap.8. Primera edición en español por Pearson
Educación, S.A., Núñez de Balboa, 120. 28006. Madrid, 1998.
http://www.susmedicos.com.Recuperado el 08/07/2005 –1:30 hs y en
http://www.audiofon.com.co
http://www.psicopedagogia.com, recuperado el 08/07/2005 –1:30 hs.
9
I Ibíd., pág. 118-122.
70
Educación Especial en el niño sordo
o con deficiencias auditivas
71
María C. Gatto, Valeria Guzmán
Educación Especial:
En el presente trabajo se considera la Educación Especial como
un proceso integral, flexible y dinámico de las orientaciones, acti-
vidades y atenciones, que se requiere para la superación de las dife-
rencias, y que están encaminadas a conseguir la integración social.
Tiene por finalidad preparar, mediante el tratamiento educativo
adecuado a todos los deficientes, para su incorporación, tan plena
como sea posible, a la vida social y a un sistema de trabajo que les
permita servirse a sí mismos, y ser útiles a la sociedad.
La Educación Especial se destina a aquellas personas, cuyo de-
sarrollo evolutivo, sensorial y del lenguaje, y sus dificultades para
el aprendizaje y de ajuste social, dificultan con respecto al medio
en que viven, su independencia personal y su integración educati-
va, laboral y social.
En un sentido socio-político, la Educación Especial constituye
un acuerdo con los derechos humanos, que consideran que la edu-
cación es un derecho que tiene toda persona y no sólo de la persona
intelectualmente dotada.
La educación constituye un medio de socialización, promoción,
desarrollo personal, comunitario y no como simple instrumento de
rentabilidad instructiva que excluye sus beneficios a las personas
disminuidas en sus capacidades.
Juan Mayor Sánchez define a la Educación Especial como "una
disciplina posible que posee un objeto unitario, que consiste en una
intervención para lograr un cambio, una mejora de las condiciones
72
Educación especial en el niño sordo o con deficiencias auditivas
1
-3 Mayor Sánchez. J. y otros. Manual de Educación Especial. Deficiencias Audi-
tivas. Ed. Anaya. Madrid, 1988.
2
Apunte de Materia Psicología de los Educandos con Necesidades Especiales.
Facultad de Psicología. UNC, 2004. pág.34.
73
María C. Gatto, Valeria Guzmán
74
Educación especial en el niño sordo o con deficiencias auditivas
75
María C. Gatto, Valeria Guzmán
Familia.
La familia constituye la unidad básica de la sociedad humana, el
centro fundamental de la vida afectiva y moral del individuo.
La familia cumple un papel fundamental en el desarrollo de la
persona humana, ya que, en su seno, también toda la pareja como
los hijos modelan su carácter y perfilan su conducta. La familia es,
la primera de las sociedades educativas.
La familia, como célula social, es un grupo organizado unido
por lazos personales, domésticos e íntimos cuya misión no termina
con el cuidado de los hijos. Constituye el medio apto para desarro-
llar personalidades socialmente útiles y para transmitir la cultura
básica de un pueblo. La familia constituye un eslabón fundamental
de la civilización humana.
La familia es la más sencilla de las sociedades humanas, es
también la sociedad natural, primera y necesaria:
- natural, porque ha sido creada para satisfacer las necesidades
de la vida diaria.
- primera, porque es anterior a toda otra forma de sociedad, y
dentro de ella nace el hombre.
- necesaria, porque sin ella no existiría otra forma de sociedad y
porque es ella donde el hombre comienza a socializarse.
La familia es una institución social cuyo comportamiento influ-
ye en el desarrollo de quienes la integran. En ella conviven varias
generaciones, razón por la cual se transforma en una comunidad
social en que se cultivan una serie de valores que posibilitan la
transmisión de hábitos, experiencias, tradiciones y modos de vida
que influyen en la marcha de la sociedad.
Funciones de la familia:
-Asegura la conservación de la especie (procreación), de un
modo moral, armónico y feliz.
-Permite la rápida adaptación del hombre al medio social.
-Asegura la crianza y educación de los hijos.
-Brinda normas religiosas, morales indispensables para lograr
una mejor calidad de vida.
76
Educación especial en el niño sordo o con deficiencias auditivas
77
María C. Gatto, Valeria Guzmán
Valores:
La vida humana necesita el valor, como las plantas necesitan la
luz solar. Si nos apartamos de los valores, quedamos recluidos en
nuestro yo y nos empobrecemos.
Entre los valores más importantes de nuestra vida encontramos
la amistad, la bondad, la justicia y la solidaridad.
Actualmente, con las características negativas que trae apareja-
da la post-modernidad, entre los que se destaca el individualismo,
lo superficial, los excesos, el consumismo, etc. Educarnos e inte-
riorizarnos “en los valores es lo único que nos puede acercar al
verdadero estado de bienestar y felicidad”3.
Ante la problemática de las personas con una deficiencia auditi-
va o sordera, debemos potenciar al máximo nuestros valores, para
que ellos no se sientan marginados o discriminados y que puedan
sentirse integrados en la sociedad.
"Si la escuela es el segundo hogar,
el hogar es la primera escuela.
Los padres son los primeros maestros.
Los que enseñan a hablar, a pensar.
A los 6 años los padres deben mandar a sus hijos a la Escuela.
Pero también acompañarlos.
La escuela y el maestro necesitan su apoyo"
Bibliografía
López Quintás, Alfonso. Los grandes valores. Ed. Galeón. Córdoba, 1996.
Luchenio, Á.E. Educación Cívica.Ed. El Kapeluz, 1984.
Mayor Sánchez. J. y Otros. Manual de Educación Especial. Deficiencias
Auditivas. Ed.Anaya. Madrid, 1988.
Apunte de Materia Psicología de los Educandos con Necesidades Espe-
ciales. Facultad de Psicología. UNC, 2004.
Revista Aquí vivimos. Córdoba. Septiembre, 2001 pág. 34.
3
López Quintás, A. Los Grandes Valores. Ed. Galeon. Córdoba. 1996.
78
Introducción a los trastornos de la visión
Aportes desde el área de Psicología
Viviana Silva
79
Viviana Silva
ojo, con la mejor corrección posible, así como aquellos sujetos cu-
yo campo visual se reduce a 20 grados o menos (el ojo normal
abarca 180 grados) a partir de un punto de fijación.
Es necesario asimismo informarnos acerca de la etiología de la
enfermedad, en función de la cual conoceremos si el proceso de
pérdida de visión fue lento, dando al sujeto la posibilidad de adap-
tación utilizando sus recursos residuales, o abrupta, conmocionan-
do al sujeto de forma violenta.
El segundo aspecto a clarificar es si se trata de un trastorno
congénito o adventicio, ya que la construcción misma del mundo, y
por ende del psiquismo, transcurrirán por caminos diferentes según
se trate de una u otra situación.
Todo bebé conoce los objetos del mundo que lo rodea a través
de la manipulación real que mantiene con ellos en sus constancias
perceptivas, las cuales aparecen ya desde el primer año de vida.1
Progresivamente la visión va imponiendo su predominio como el
órgano por el cual se capta mayor información del medio externo
con menor inversión de energía, así los objetos se recrean en la
mente a modo de imágenes visuales bidimensionales. Este proceso
lo llevarían a cabo los niños con ceguera adquirida, quienes con-
servan imágenes visuales, que le permiten interpretar y comprender
fenómenos como los colores, o los tamaños de los objetos a distan-
cia. En los niños ciegos congénitos, en cambio, se observa la tridi-
mensionalidad desde temprana edad, sosteniéndose y consolidán-
dose a lo largo del tiempo.2
Junto con estas diferencias Lowenfeld investiga dos modos di-
ferentes de organización perceptiva y de categorización conceptual
del medio externo, el modo predominantemente háptico, y el vi-
sual. Los niños ciegos congénitos entrarían dentro de la primera
categoría, en tanto los niños ciegos adventicios lo harían en la se-
gunda, he aquí la dificultad para estos últimos a quienes se les pre-
senta la contradicción entre el modo de funcionamiento psíquico
1
Piaget, Jean. “Psicología del niño”. Editorial Morata. Madrid, España. 1969.
Pág. 55.
2
Trabajo de investigación realizado en el Instituto Helen Keller. Silva, Viviana.
Volcoff, Karina. 2001.
80
Introducción a los trastornos de la visión. Aportes desde el área de psicología
81
Viviana Silva
82
El juego del niño ciego y disminuido visual
Características generales:
El niño trata de experimentar mediante el juego las posibilida-
des que le ofrecen su cuerpo y su medio. El carácter de la actividad
va cambiando, al principio le interesa solo el resultado, pero des-
pués le da primacía al placer que obtiene con el juego en sí. Apare-
ce, por ello, una nueva actividad de juego: el niño afirma sus po-
tencialidades y prueba sus valores.
El juego verdadero tiene un carácter de seriedad, ello implica
una desvinculación del ambiente real. Se comprende, que el juego,
tenga como aspectos la evasión y la compensación. También le
brinda la posibilidad de acceder a un mundo donde es omnipotente
1
Garaigordobil Landazabal, M. Intervención psicológica para desarrollar la per-
sonalidad infantil. Ed. Pirámide, 2003. Cáp. 2. Pág. 67.
83
María L. Gianoboli, Mariel Nievas
y puede crear.
El juego es proyecto, anticipación al mundo de las ocupaciones
serias. Por la prueba del juego el niño realiza un adiestramiento in-
voluntario.
Conquista autonomía, personalidad y esquemas prácticos, útiles
para la vida adulta con sustitutos imaginarios.
Aún no tiene conciencia del adiestramiento que procura, de
hecho, el niño solo persigue imitación del adulto en un mundo lú-
dico. El juego le permite practicar verdaderos modelos adultos.
Como si fuera una especie de calco del trabajo, un seudo-
trabajo que comporta una seudo-seriedad.
En el dominio de los juegos infantiles aparece el motor esencial
de la actividad lúdica: Se observa en el niño, mientras juega, un
sentimiento de dignidad y orgullo humano. Compromete a todo el
ser, es una manifestación de su personalidad entera.
En la tercera infancia tienen importancia los juegos de proeza
(saltar más lejos, lanzar una piedra mas alta, etc.), y los juegos de
las batallas. Estos consisten en un verdadero torneo, el niño quiere
probar su superioridad. El niño busca con estos juegos una prueba
que le permita afirmar su YO.
Autores como Jean Chateau2, afirman que un niño que no quie-
re jugar es un niño cuya personalidad no se afirma, que se contenta
con ser pequeño y débil, un ser sin orgullo, un ser sin porvenir.
Por medio del juego, el niño descarga tendencias reprimidas e
impulsos hostiles (esto se ve en el juego ficticio donde el niño in-
venta e imita personajes).
La actividad lúdica infantil es una recapitulación de la actividad
de la humanidad primitiva: de los juegos de caza pasa a los juegos
sociales.
El juego en la niñez presenta un fin: La afirmación del YO. A la
vez que genera alegría y fomenta creatividad.
2
Chateau, J Psicología de los juegos infantiles. Ed. Kapelusz. 1958.
84
El juego del niño ciego y disminuido visual
3
Lowenfeld, B. El niño disminuido visual en la escuela. A.F.O.B. 1974.
85
María L. Gianoboli, Mariel Nievas
4
Apunte de la Materia Psicología de los Educandos con Necesidades Especiales
.Facultad de Psicología. UNC.2003 pág. 105-106.
86
El juego del niño ciego y disminuido visual
87
María L. Gianoboli, Mariel Nievas
88
El juego del niño ciego y disminuido visual
relacionándose no solo con sus pares ciegos sino también con niños
con vista, permitiendo una mayor integración al medio social en el
cual se desempeñará con mayor libertad y actitudes positivas hacia
los otros y hacia el mismo.
El juego es importante en el desarrollo del niño, destacamos que
en el caso de los niños ciegos y disminuidos visuales es de esencial
importancia favorecer actividades lúdicas, para que éstos tengan un
conocimiento mas amplio de la realidad que los circundan, para
una mejor aceptación social e integración.
Para que conozca y considere sus propias posibilidades y limi-
taciones, y pueda desarrollar su creatividad, imaginación, indepen-
dencia. Accediendo de esta manera a un desarrollo armónico e in-
tegral.
“La noche de la ceguera tiene también sus maravillas. La no-
che de la ignorancia y de la insensibilidad es la única tiniebla im-
penetrable. El infortunio de los ciegos es inmenso, irreparable. Pe-
ro no nos priva de compartir con nuestros semejantes la actuación
altruista, la amistad, el buen humor, la imaginación y la sabidu-
ría”.( Hellen Keller, “el Mundo donde vivo”).
Bibliografía:
Garaigordobil Landazabal, M. Intervención psicológica para
desarrollar la personalidad infantil. Ed. Pirámide. 2003.
Piaget, J. e Inhelder: Psicología del niño. Ed. Morata. 1972.
Lebovici, S Significado y función del juego en el niño. Ed. Proteo.
1969.
89
Aspectos sobre el Rol de Psicólogo
en la Educación Especial
1
Santucci de Mina, M. Aspectos Psicológicos Integración del educando con Pará-
lisis Cerebral a la sociedad. Ed. Fundación Obligado.1996.pág. 20-22.
91
María Santucci de Mina
ser cordial. Pero sobre todo tratar al otro con respeto porque esto
implica valorarlo y estimarlo. Ser comprensivo con los demás como
expresa López Quintás “la amistad transforma la vida y la eleva a un
plano de creatividad y valor. Es un antídoto contra la soledad.”2
Cada persona que participa en la tarea educativa- habilitadora
debe establecer un tipo de vinculación sólida, fundando modos de
vida comunitarios y creando lazos de convivencia con el entorno y
el resto de las personas, donde todos estén unidos a los mismos va-
lores, promoviendo así el propio desarrollo de su personalidad.
Generosidad, empatía, altruismo, podrían ser significantes de
cada vínculo interpersonal, sin focalizar los déficits, ni estigmatizar
al individuo.
El profesional que forma parte de un equipo docente habilitador
como por ejemplo el Psicólogo, debe ser:
- Optimista, para no darse por vencido.
- Alegre, para ver siempre lo positivo.
- Sincero, para nunca mentir y buscar siempre la verdad.
- Constante, en el anhelo de integrar al niño pese a las barre-
ras de la sociedad.
- Generoso, para brindarse al educando de manera incondicio-
nal, particularmente en los momentos en que necesite el apo-
yo y la orientación.
- Paciente, para entender que los resultados se verán con el
tiempo.
- Responsable, para asumir la misión educativa habilitadora
que le corresponde.
- Justo, para dar y exigir según la posibilidad de los educandos
con necesidades especiales.
En nuestra sociedad donde se vive una decadencia de valores,
debemos intentar un camino de encuentro hacia el otro, hacia la
comunicación, hacia la participación, hacia la cooperación. Es una
tarea difícil ya que existen diferentes prejuicios que anulan o dis-
minuyen nuestra capacidad de conocer y de esa forma amar a quie-
nes nos rodean.
2
López Quintás, A. Los grandes valores. Ed. Galeón, Córdoba 1996.
92
Aspectos sobre el rol de Psicólogo en la Educación Especial
93
María Santucci de Mina
3
Ibíd.,cita 1 pág. 98-99.
4
Ibíd., cita 1. pág .96, 54-55
94
Aspectos sobre el rol de Psicólogo en la Educación Especial
95
María Santucci de Mina
Bibliografía:
Santucci de Mina, M. “Aspectos Psicológicos Integración del
educando con Parálisis Cerebral a la sociedad”. Ed. Fundación
Obligado.1996.
López Quintás, A. “Los grandes valores”. Ed. Galeón, Córdoba
1996.
96
2° Parte
Maricel Ferreyra
99
Maricel Ferreyra
1
Gimeno S. y Pérez Gómez: Comprender y Trasnformar la enseñanza. Ed. Mora-
ta. España.1993.
100
Sistema Educativo y Respeto por las Altas Capacidades
101
Maricel Ferreyra
2
Climent Giné i Giné. Madrid 1990.
102
Sistema Educativo y Respeto por las Altas Capacidades
3
Melero M. y Guerrero J.: Lecturas sobre integración escolar y social. Ed. Paidós.
103
Maricel Ferreyra
104
Aspectos psicológicos sobre superdotación
105
Marcela Cecilia Antequera
106
Aspectos psicológicos sobre superdotación
107
Marcela Cecilia Antequera
108
Aspectos psicológicos sobre superdotación
CREATIVIDAD:
!"Para Joseph Renzulli el tercer grupo de elementos que carac-
teriza a las personas con superdotación consiste en factores
que usualmente juntos reciben el título general de creatividad.
!"Se puede definir como: fluidez, flexibilidad y originalidad
de pensamiento, apertura a la experiencia, receptividad a
aquello que es nuevo y diferente y a veces irracional, curio-
sidad, especulación, aventura. Sensibilidad al detalle, deseo
de actuar y actuar a la estimulación externa y a las propias
ideas y sentimientos, etc.
Según Joseph Renzulli cualquier definición o conjunto de pro-
cedimientos de identificación que no preste igual atención a cada
uno de los tres grupos, es una visión reduccionista del tema. Aque-
llo que los tres grupos tienen en común es que cada uno puede ser
traído para acompañar a una multitud de áreas de rendimiento es-
pecíficas. Como ya fue indicado, la interacción o superposición en-
tre los grupos hace a personas con superdotación.
Es de vital importancia el papel que juegan los padres en el de-
sarrollo armónico del niño. En el caso particular de los niños con
superdotación, conviene tener en claro las características que sue-
len presentar, esto facilitará la labor de los padres en la crianza de
los niños.
Otro aspecto al que debemos referirnos es a la necesidad de un
diagnóstico, el que en ningún caso debe usarse para justificar con-
ductas inadecuadas, presionar excesivamente por poseer alta capa-
cidad o ser muy permisivos. La finalidad de un diagnóstico, es te-
ner un buen conocimiento del niño, lo que beneficiará la educación
familiar más adecuada a las necesidades particulares del niño.
La familia debe ser para el niño un entorno que lo estimule y
motive en la justa medida, ya que tanto los excesos como los défi-
cits son perjudiciales. Los padres y educadores son los pilares bási-
cos sobre los que se sustenta el adecuado desarrollo del niño, sea
cual sea su nivel de capacidad: alto, medio o bajo. El buen conoci-
miento del niño conduce a una adecuada intervención familiar co-
mo pedagógica.
109
Marcela Cecilia Antequera
Bibliografía:
Andreani, Ornella y Orio, Stefanía. Las raíces psicológicas del talento.
Editorial Kapeluz. Año 1978. Bs. As. Argentina.
110
Aspectos psicológicos sobre superdotación
111
Superdotación
113
Paula Alejo, Cristina De la Vega, Hilda Paz
El diagnóstico precoz es
de gran beneficio, pues ayu-
da a distinguirlos desde muy
pequeños, pero también es
precisamente por su tempra-
na edad por lo que pueden
surgir confusiones entre un
superdotado y un niño pre-
coz, por lo cual, se reco-
mienda consultar a un espe-
cialista para su diagnóstico eficaz.
Entre los recursos psicológicos para el psicodiagnóstico del ni-
ño y para recoger información de índole madurativa y de rendi-
miento escolar, encontramos: test de Wechsler-Bellevue, Test de la
114
Superdotación
115
Paula Alejo, Cristina De la Vega, Hilda Paz
ADAPTACIÓN CURRICULAR
Una adaptación curricular significa profundizar con el niño en
todas las asignaturas o en las que despunta mucho más que los de-
más, manteniéndolo en el curso que le corresponde por edad pero
organizando seminarios, actividades escolares adicionales orienta-
das a profundizar en dichas materias.
Una ventaja adicional es que en todas estas actividades se reú-
nen todos los niños que despuntan en este o estos campos- agrupa-
dos por nivel e interés y no por edad- lo que ayuda a mantenerlos
estimulados.
116
Superdotación
117
Paula Alejo, Cristina De la Vega, Hilda Paz
118
Superdotación
BIBLIOGRAFÍA
“Asociación española de niños superdotados (ASENID)”. Recuperado
el 6 de agosto del 2004, en http//www.google.com.ar
“Asociación de superdotados y talentosos Clandellas y Pros”. Recupe-
rado el 24 de agosto del 2004, en http//www. yahoo.com.ar
Clark, Barbara. “Optimización del aprendizaje: identificación, planifi-
cación y recursos para jóvenes superdotados y con talentos especí-
ficos”, en Asociación de padres de niños dotados de Puerto Rico.
Recuperado el 24 de agosto del 2004, en http//www.google.com.ar
“Diseñan un método empírico de detección de superdotados”
(9/09/99). Recuperado el 06 de agosto del 2004, de
http//www.diariomédico.com
“El niño superdotado”. Recuperado el 24 de agosto del 2004,de
http//www.guiainfantil.com
“Mundohogar en el colegio-Ficha-Problemas de los niños superdota-
dos”. Recuperado el 24 de agosto del 2004, de
http//www.yahoo.com.ar
“Pequeños genios con grandes emociones” (30/07/99). Recuperado el
6 de agosto del 2004, de http //www.diariomédico.com
Perdomo, Leopoldo. “Niños inteligentes y felices ”. Recuperado el 24
de agosto del 2004, de http //www.yahoo.com.ar
Tejerina, M./ Lagoa, M. “La compleja labor de descubrir a un super-
dotado” (19/07/2001). Recuperado el 6 de agosto del 2004, de
http//www.diariomédico.com
119
Las Necesidades Educativas Especiales
de todos los Superdotados
Alberto M. E. Costamagna
121
Alberto M. E. Costamagna
• Estrategias:
. Producir acercamiento y sembrar confianza.
. Estar preparado y documentado.
. Conocer sus habilidades y niveles altos.
. A las limitaciones no nombrarlas, no darles importancia, sal-
vadas de la forma más indirecta posible.
. Hablarles claro, rectificando sus errores, de expresión, conduc-
ta, etc., con comprensión y actitud positiva: "esto se hace así", o
"esto se dice así", etc..
. Lograr ambiente positivo creando equipo con tutoría especiali-
zada.
• Recursos:
. Maestros especializados.
. Atención lo más personalizada posible.
. Usar tests psicotécnicos.
. Dialogar mucho.
. Disponerles lecturas instructivas y educativas.
. Juegos educativos.
. Ambiente positivo (crear equipo).
Creatividad
Es la capacidad de originalidad e inventiva. Es una habilidad
que se expresa también como "pensamiento divergente" así como
facilidad por producir algo nuevo o ver puntos de vista diferentes.
Todo superdotado incluye entre sus capacidades un índice muy alto
de creatividad.
• Criterios:
. Escuchar y valorar todo lo positivo de cualquier iniciativa.
122
Las necesidades educativas especiales de todos los superdotados
• Estrategias:
. Organizar cursillos por áreas.
. Visitas a entidades, empresas, museos, etc..
. Dejarles al alcance libros especiales, diccionarios, etc.
• Recursos:
. Pautas pedagógicas específicas, conociendo sus NENES.
. Locales de apoyo, tal como centros específicos, aulas, etc.
. Profesorado especializado.
Disincronía
Es el diferencial o el desfase mental permanente de la inteligen-
cia del superdotado respecto al resto de las personas. Sus causas
están en la rapidez y la madurez mental. Sus manifestaciones típi-
cas: predominio del razonamiento frente al lenguaje, la lectura
frente a la escritura, madurez mental frente a la madurez afectiva,
eficacia mental frente a experiencia de vida, estrategias defensivas
frente a barreras sociales, algunas fobias producto de fantasías aso-
ciadas a nuevas experiencias o vivencias.
• Criterios:
. Comprenderlos y que se sientan comprendidos.
. Situados desde muy pequeños en ambientes positivos en el
ámbito familiar y social.
. Aportarles desde muy pequeños atención persona1izada y es-
pecializada.
. Situados con los de mayor edad desde muy pequeños.
. Dar cauce a las precocidades.
• Estrategias:
. Disponer de profesorado especializado.
. Agrupar padres o las familias para llevar a cabo la tarea de la
atención educativa.
. Disponer de espacios, terrenos, etc.
123
Alberto M. E. Costamagna
• Recursos:
. Tests psicotécnicos.
. Partidas económicas.
. Apoyo de personas e instituciones.
Hiperactividad
Es una permanente actitud ejecutiva. Con sensaciones próximas
a la ansiedad y el aburrimiento si no está activo. La actividad prác-
ticamente sin pausa es una imposición de la mente del superdotado
a su propia persona. Debemos valorar la hiperactividad teniendo en
cuenta todas sus partes positivas, por que ayuda al desarrollo inte-
gral de la persona, de otra forma irrumpe y dificulta sustancialmen-
te el desarrollo de la personalidad.
• Criterios:
. Comprenderlos y que se sientan comprendidos.
. Dar cauce con actividades orientadas y previstas.
. Atención personal desde que aparezcan las precocidades.
. Situarlos en medio seguro, vigilado, tranquilo (ambiente rela-
jado, no agresivo y participativo).
. Ambiente familiar estable.
• Estrategia:
. Detección de las precocidades y áreas de madurez desde muy
pequeños (antes de los dos años si es posible).
. Conocerlos lo más posible.
. Centro especial o escuela en casa, o las dos si es posible.
. Aceleración o avance de curso que los acerque lo más posible
a su nivel de madurez mental.
• Recursos:
. Utilizar métodos prácticos y eficaces, como el Método Mon-
tessori.
. Tutores especializados en superdotación.
. Organizar cursillos monográficos.
124
Las necesidades educativas especiales de todos los superdotados
Hipersensibilidad
Es la capacidad emocional ante cualquier sensación o percep-
ción capaz de afectar al campo psico-sensible. Es importante y sig-
nificativa desde el punto de vista del desarrollo de la personalidad,
siendo inherente a todo superdotado. Es tan importante que existe
el desarrollo de la "inteligencia emocional".
Inteligencia y emoción son dos parámetros diferenciados, de-
biendo facilitar su bifurcación o separación, para luego integrar,
permitiendo el sentido del pleno desarrollo. Su interinfluencia es
decisiva.
• Criterios:
. Disponer de ambientes de comprensión donde el superdotado
se sienta comprendido.
. Lograr una dinámica pedagógica preventiva, de forma que la
energía emocional impulse la promoción de cualidades y habilida-
des.
. Habilitar el desarrollo de las capacidades y habilidades, crean-
do las condiciones y produciendo los recursos específicos.
• Estrategias:
. Situarlo con personas de edad correspondiente a su área de
más madurez mental.
. Atenderlo en contenidos según su ritmo natural de aprendizaje.
. Agruparlo con niños o jóvenes con similar planteamiento.
. Lograr que en los centros de enseñanza se apliquen de forma
habitual todos los recursos pedagógicos disponibles.
• Recursos:
. Agrupamientos familiares para organizar estrategias de apoyo.
. Recurrir a profesores y tutores personales especializados en
superdotación.
125
Alberto M. E. Costamagna
• Criterios:
. Detección de las precocidades con pruebas adecuadas.
. Pedagogía permanente de retos.
. Producir la aceleración, o avance de cursos, de forma planifi-
cada y continuada mientras no se alcance su nivel de máxima ma-
durez..
. Atención personal a nivel académico, y en general.
• Estrategias:
. Poseer informes psicotécnicos sobre precocidades y niveles de
madurez.
126
Las necesidades educativas especiales de todos los superdotados
• Recursos:
. Lograr un grupo familiar preparado.
. Profesor o educador especializado en superdotación.
. Voluntariado en sus diversas opciones.
. Mecenazgo.
. Convenios de colaboraciones, apoyos, institucionales.
Perfeccionismo
Es radicalizar la actitud de realizar las cosas de forma perfecta.
Es habitual que se nieguen a realizar acciones porque valoran que
no están en condiciones de hacerlas perfectas. Esta actitud se puede
prolongar a lo largo de toda la vida. "Lo bien" es lo perfecto.
• Criterios:
. Conocimiento preciso y amplio de las habilidades y capacida-
des.
. Elogiar y reconocer toda acción positiva y todo lo positivo de
cualquier acción. Producir cauce para el desarrollo de habilidades y
capacidades.
. Pedagogía permanente de desafío.
• Estrategias:
. Realizar y documentar el conocimiento personal mediante
tests psicotécnicos.
. Aplicar en la familia y los centros educativos pautas pedagógi-
cas específicas para superdotados.
. Atención personalizada, en la familia y en los centros educativos.
. Producir la aceleración correspondiente de curso o cursos que
lo acerquen a su nivel de madurez y rapidez de aprendizaje.
• Recursos:
. Disponer de apoyo psicotécnico experto en superdotación.
127
Alberto M. E. Costamagna
Rapidez en el aprendizaje
La rapidez para aprender aumenta de forma proporcional al
CIG. Le sobran alrededor de tres cuartos de hora de cada hora de
clase. Simultáneamente tienen alta capacidad de registro mental, de
relacionar datos diferentes con eficacia. Esta rapidez es de mayor
eficacia cuando acompaña el interés personal.
Poder de atender simultáneamente sin aparentar esfuerzo, dos o
tres hechos simultáneos y realizar sus correspondientes registros.
Desconocer la rapidez mental conduce a pensar que son niños
manipulados: Ej. “a ese niño lo van a volver loco con tantos cono-
cimientos”, ...Conocer la rapidez mental favorece al pleno desarro-
llo de la personalidad, evitando el desánimo, la desmotivación, el
aburrimiento, la dispersión, la inconstancia, la pérdida de hábitos
de trabajo, lectura, etc.
De la rapidez mental se desprende de alguna manera la gran ca-
pacidad de imitación. Los mejores profesores no serán efectivos sin
el medio ambiente favorable, que será el que más va a ayudar en el
proceso educativo.
• Criterios:
. Disponerles ambiente familiar positivo: Integrado, relajado,
estable, comprensivo.
. Integrarlos en ambiente escolar positivo, desafiante que brinde
respuesta al interés por aprender, no repetitivo, con metodología y
actividades que faciliten la concentración, la constancia, entusias-
mo por la tarea, hábito de estudio, afición a la lectura y escritura.
. Integrarlos a una enseñanza bilingüe, o atención personal de
otro idioma.
. Aceleración, o avance de curso, o cursos es alternativa eficaz a
valorar.
. Las actividades extra curriculares deberán adecuarse a su ritmo
128
Las necesidades educativas especiales de todos los superdotados
de aprendizaje.
• Estrategias:
. Mejorar la integración familiar en la comunicación, la com-
prensión, mutuo apoyo.
. Lograr realizar las pautas pedagógicas para superdotados.
. Lograr que se implementen todas las necesidades educativas
especiales.
. Hacer cumplir los derechos legalmente establecidos para la
educación.
• Recursos:
. Vincularse, o crear una escuela de familia.
. Vincularse a grupos de familias de ayuda al superdotado.
. Especializarse en la pedagogía de la sobredotación.
. Disponer especialistas en las diferentes áreas del conocimiento.
. Asesoramiento jurídico.
• Estrategias:
. La familia y el docente deben atender personalizadamente.
. Compartir positivamente el ambiente de convivencia. Trato
129
Alberto M. E. Costamagna
• Recursos:
. Profesor o profesores personales desde muy pequeños.
. Vincularse o generar una escuela de familia.
. Utilizar pedagogía de superdotación.
130
Las necesidades educativas especiales de todos los superdotados
_____________________________________________________
En memoria del Profesor Doctor Alberto M E. Costamagna.
Clase escrita y dada por él en la Materia “Psicología de los Edu-
candos con Necesidades Especiales” Facultad de Psicología. Uni-
versidad Nacional de Córdoba. Mayo 2004.
131
Estrategias y técnicas de modificación
de conductas negativas
1
Costamagna A. M. E. Quiero ser... Ed. Brujas. Córdoba 2002. Pág. 36.
2
Ibíd. Pág. 34.
133
Gimena Borquez, Silvina Gatti
Etiología:
El D.S.M. IV considera que “ Los factores etiológicos pueden
ser primariamente biológicos o psicosociales, o una combinación
de ambos”. Hay casos que no puede determinarse una etiología
precisa aunque fueran sometidos a diversos estudios.
Factores predisponentes:
• Herencia: Factores que incluyen factores innatos del metabo-
lismo, otras anomalías de un único gen y alteraciones cromo-
sómicas, etc ( por ej: síndrome de Down)
• Alteraciones tempranas del desarrollo embrionario: afecta-
ción prenatal por toxinas (alcoholismo, infecciones, etc)
• Problemas del embarazo y perinatales: mal nutrición fetal,
prematuridad, hipoxia, infecciones, traumatismos.
• Enfermedades médicas adquiridas durante la infancia y la ni-
ñez: Incluyen infecciones, traumatismos y envenenamiento.
• Influencias ambientales y otros trastornos mentales: Incluyen
3
Ibíd. Pág. 36-37.
134
Estrategias y técnicas de modificación de conductas negativas
Personalidad:
“El retraso mental afecta a la globalidad de la persona, es decir,
repercute en la personalidad. Asimismo aparecen una serie de va-
riables que determinan y condicionan la personalidad del retrasado
mental, causando trastornos y comportamientos desadaptativos. Es-
tas variables son: las relaciones sociales distorsionadas, en distintos
períodos de su desarrollo, tanto en el ámbito familiar como so-
cial(..) La personalidad del retrasado mental se caracteriza por sen-
timientos de frustración, fragilidad y labilidad emocional. En sínte-
sis, el retrasado mental tiene un pobre concepto de sí mismo.
Algunas características de los retrasados mentales las sintetiza-
mos a continuación:
• Auto concepto: Se refiere a la actitud personal que el indivi-
duo tiene de sí mismo. Se ha afirmado que una inteligencia
baja conlleva un menor éxito y también una subestimación
de capacidad, no obstante puede ocurrir lo contrario.
• Ansiedad: En general los retrasados mentales muestran ma-
yor impaciencia que sus compañeros de igual edad cronoló-
gica o metal. Se estima que el desasosiego se debe a factores
sociales más que a su nivel intelectual, tienen menos oportu-
nidad de éxito. Por esa razón, tienden a evitar el fracaso más
que a buscar el éxito.
• Locus de Control: las personas en las que predominan un lo-
cus de control interno, se pueden hacer cargo de los éxitos o
fracasos. Esta capacidad para asumir el propio comporta-
miento, la responsabilidad, la alcanzan los retrasados menta-
les leves y moderados”5.
Es común que en sujetos con retraso mental puedan aparecer en
su personalidad rasgos de estereotipias, como ecolalias, balanceo,
4
DSM-IV. Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales Edito-
rial Masson. Barcelona, 2000, pag.44.
5
Ibid. Pág. 118
135
Gimena Borquez, Silvina Gatti
Trastornos psicológicos
Es necesario para el abordaje de ésta problemática realizar un
diagnóstico dual o múltiple el cual permite determinar de manera
integral dicha problemática, no discriminando entre un problema
emocional o intelectual sino diagnosticando ambos, posibilitando
el abordaje adecuado para cada uno.
Las personas con retraso mental están más propensas a desarro-
llar problemas de conductas o enfermedades mentales, que las per-
sonas sin retraso. Esto puede deberse a las dificultades de comuni-
cación para expresar sus sentimientos, ya que manifiestan dificul-
tades para procesar información por trastornos clínicos, físicos o
sensoriales.
“Todos estos factores contribuyen a que las personas con re-
traso mental desarrollen ciertos desajustes emocionales, ante los
que carecen de recursos cognitivos necesarios para poder hacerles
frente. Además la presencia de trastornos emocionales tiene im-
portantes consecuencias negativas para los mismos, repercuten en
su calidad de vida, crean importantes barreras en su integración so-
cial, afectan su comportamiento adaptativo, interfieren en su fun-
cionamiento intelectual. Lo más importante, es el sufrimiento per-
sonal”.6
La familia
La llegada al hogar de un nuevo hijo siempre genera tensiones y
ocasiona cambios en la organización de la familia.
Ante la llegada de un niño con discapacidad es inevitable que
los padres reaccionen con sentimientos variados, dentro de las reac-
ciones psicológicas se pueden observar una serie de fases o estados:
6
Ibíd. Pág. 118.
136
Estrategias y técnicas de modificación de conductas negativas
137
Gimena Borquez, Silvina Gatti
7
Santucci de Mina, M. Evolución Psicosocial del Niño con Parálisis Cerebral”.
Ed. Brujas. Córdoba. 2003, pág. 66
138
Estrategias y técnicas de modificación de conductas negativas
8
Apunte de Cátedra. Psicología de los educados con necesidades especiales. To-
mo I. Universidad Nacional de Cordoba. Facultad de Psicología, 2004, pág. 33.
139
Gimena Borquez, Silvina Gatti
Bibliografía:
Costamagna A. M. E. “Quiero ser” Ed. Brujas. Córdoba 2002.
DSM-IV. Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos
Mentales Editorial Masson. Barcelona, 2000.
Apunte de Cátedra. Psicología de los Educandos con Necesidades
Especiales. Universidad Nacional de Córdoba. Facultad de Psi-
1
cología, 2004 .
Santucci de Mina, M. “Evolución Psicosocial del Niño con Paráli-
sis Cerebral”. Ed. Brujas. Córdoba. 2003.
9
Ibíd. Pág. 14.
10
Sanz, J. M. Una actualización del enfoque sobre el retraso mental. En: Apunte
de Seminario: Práctica en Interdisciplina. Psicología y rehabilitación. Universidad
Nacional de Córdoba: Facultad de Psicología, 2003. pág. 105.
140
Retraso mental, familia e instituciones
Ana C. Barton, María V. Bollati, Rocío Davrieux, Lourdes Fontaine
141
Ana C. Barton, María V. Bollati, Rocío Davrieux, Lourdes Fontaine
1
Rivière, Pichón. El proceso grupal del psicoanálisis a la psicología social. Ed.
Nueva Visión. Bs. As. 1987.
142
Retraso mental, familia e instituciones
2
Foucault, M. Enfermedad mental y personalidad: el sentido histórico de la ali-
neación menta, Paidos.Buenos Aires, 1961.
143
Ana C. Barton, María V. Bollati, Rocío Davrieux, Lourdes Fontaine
3
Goffman, E. Sobre las características de las instituciones totales. Amorrortu
Editores. Buenos Aires. 1992.
144
Retraso mental, familia e instituciones
4
Costamagna, A.M.E. Quiero ser. Enfoques de la Discapacidad, Editorial Brujas,
Córdoba, 2002.
145
Ana C. Barton, María V. Bollati, Rocío Davrieux, Lourdes Fontaine
146
Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD)
Alejandra Alanis
1
Kanner, L. Psiquiatría Infantil . Ed. Siglo XX, Bs. As., 1943.
147
Alejandra Alanis
2
Manual Diagnóstico y Estadístico de los trastornos Mentales (DSM IV) Barce-
lona: MASSON. 1995
148
Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD)
149
Alejandra Alanis
150
Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD)
Característica de la familia:
La familia es un sistema de unidades que se caracteriza por su
interdependencia mutua, ya que las condiciones particulares de un
miembro afectan las condiciones de los demás, además de ser un
sistema sociocultural en constante cambio.
Frente a los modelos culpabilizantes de las familias de los años
50 y 60, en los últimos años se han invertido los términos de la re-
lación entre el autismo y las condiciones familiares. El problema
que preocupa actualmente a los investigadores y clínicos no es ya
el de “la influencia de la familia en el origen del autismo”. Ya se
sabe que el origen no reside en ninguna patología psicológica de
los padres, ni en que éstos abandonen, rechacen o den cuidados in-
suficientes al niño. El verdadero problema es el de “ la influencia
del autismo en la familia”.
Para las familias conocer el diagnóstico de autismo de uno de
sus miembros, es un golpe muy fuerte del que es muy difícil recu-
perarse; hay que tener en cuenta que “la mayoría de los padres po-
ne toda su confianza e ilusión en el nacimiento de su hijo, el cual
tiene un desarrollo prácticamente normal durante el primer año de
vida, y que es tras este periodo de tiempo cuando comienzan a ob-
servar los síntomas, y para ellos es muy desconcertante, les parece
inadmisible que su hijo no tenga un comunicación normal con ellos
ni con el mundo que le rodea".3
Frecuentemente el autismo frustra la realización primera de las
intensas motivaciones de crianza que se derivan de la preparación
biológica para la reproducción. Produce sentimientos confusos de
culpa, frustración, ansiedad, pérdida de autoestima y estrés. La
sensación de que “algo se ha hecho mal” en esa relación primera.
Es necesario, en primer lugar, proporcionar a los padres apoyo
terapéutico, y en ocasiones intervenir sobre el sistema familiar co-
mo un todo; en segundo lugar es importante capacitar a los padres,
dándoles información suficiente sobre el autismo y su hijo en parti-
3
Rivière, Ángel y Martos, Juan (compiladores): “El tratamiento del autismo.
Nuevas perspectivas”. Ed. Artegraf S.A. Madrid 1999.
151
Alejandra Alanis
Etiología:
En la actualidad no se conoce con exactitud la causa de los
Trastorno Generalizado del Desarrollo, pero se reconoce en general
que puede deberse a múltiples etiologías que van desde alteracio-
nes genéticas a trastornos metabólicos o procesos infecciosos, que
pueden intervenir en diversas fases del desarrollo prenatal, perina-
tal o postnatal del sistema nervioso central. Por ejemplo se han
asociado con el autismo alteraciones genéticas, como el cuadro de
X frágil, anomalías de metabolismo como la fenilcetonuria, infec-
ciones como la rubéola congénita, condiciones prenatales como las
pérdidas en el primer trimestre de embarazo, perinatales como el
aumento de la bilirrubina, postnatales como la encefalitis ligada al
herpes simple o la esclerosis tuberosa.
4
Riviere, A. Curso de Desarrollo Normal y Autismo, Santa Cruz de Tenerife, Es-
paña, 24- 27 de septiembre de 1997.
152
Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD)
Tratamiento:
Actualmente, gracias al desarrollo de nuevas tecnologías diag-
nósticas en las áreas de neurofisiología, neuroquímica, neuropato-
logía, genética y neuroimágenes; se ha posibilitado un importante
avance en el conocimiento y profundización de este trastorno cró-
nico que involucra varias áreas del desarrollo, lo que ha posibilita-
do la creación e implementación de nuevas y variadas estrategias
terapéuticas que permiten efectuar un abordaje integral y global a
la hora de realizar el tratamiento con el niño.
Entre las estrategias terapéuticas se incluyen:
1. Los análisis conductuales y las técnicas de modificación de
esas conductas.
2. El entrenamiento de pautas sociales.
3.La terapia de lenguaje.
4.Terapia de movimiento.
5. Musicoterapia.
6.Vitaminoterapia.
7.Terapias dietéticas.
8. Farmacoterapia, entre otras.
Muchos especialistas provenientes de distintas disciplinas están
comprometidos en la búsqueda de tratamientos apropiados para los
trastornos generalizados del desarrollo, entre ellos encontramos:
!"Especialistas en patologías del lenguaje, Maestros en educa-
ción especial, Terapia ocupacionales, Trab. Sociales, Psicó-
logos, Psiquiatras, Médicos, Psicopedagogos, Kinesiólogos.
!"
Al presentar el Trastorno Generalizado del Desarrollo una
marcada complejidad, ningún profesional, pueden dar una
respuesta individual desde la disciplina desde la cual se han
formado, por lo cual se habla de la necesidad ineludible de
un trabajo conjunto (interdisciplinario) entre los profesiona-
les para poder visualizar, abarcar y dar respuestas a las nece-
sidades particulares de cada niño, efectuando un abordaje in-
tegral del trastorno.
Al respecto, Ángel Riviere nos dice... “el afrontamiento tera-
153
Alejandra Alanis
5
Riviere, A. Autismo. Orientaciones para la intervención educativa. Ed. Trota.
2001.
154
Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD)
Bibliografía:
Arango, A., Rueda C., Valderrama S. Estudio exploratorio de la es-
tructura de familias con un hijo autista Tesis de grado. Universi-
dad Javeriana. Bogotá, Colombia. 1997.
Apunte de la Materia Psicología de los educandos con Necesidades
Especiales. Facultad de Psicología. Universidad Nacional de Cór-
doba, 2003.
Diez A., Cuervo, J. Definición y Etiología del Autismo, 1989. Extraído
de pág. de Internet: www.autismo.com
Kanner, L. Psiquiatría Infantil . Ed. Siglo XX, Bs. As., 1943.
Riviere, A. Autismo. Orientaciones para la intervención educativa.
Ed. Trota, 2001.
Rivière, Ángel y Martos, Juan (compiladores): “El tratamiento del au-
tismo. Nuevas perspectivas”. Ed. Artegraf S.A. Madrid, 1999.
155
Mirada psicológica acerca de la educación
y terapia del niño autista
157
María Julia Monserrat
158
Mirada psicológica acerca de la educación y terapia del niño autista
1
Gisbert, Mardomingo y otros. Educación Especial, Ed. Cincel, Madrid, 1988.
159
María Julia Monserrat
2
Compilación de Marchesi Á. y otros. Desarrollo psicológico y educación, tomo
III, Ed. Alianza,1999, pág. 330.
160
Mirada psicológica acerca de la educación y terapia del niño autista
3
Compilación de Bautista R. Necesidades Educativas Especiales. Ed. Aljibe.
1993. pag. 259.
161
María Julia Monserrat
162
Autismo Infantil. Aspectos generales
163
Claudia Alejandra Rodríguez
1
Diagnostic and Statical Manual of Mental Disorders (D.S.M). Cuarta edición.
American Psychiatric Association. Washington DC. Coord. General de las edicio-
nes españolas, francesas e italianas: Pierre Pichot. Edit. Masson. 1994. Barcelona.
164
Autismo Infantil. Aspectos generales
2
Valdez, Daniel: Ángel Rivière y el autismo, el desafío del Everest. Propuesta
Educativa 25. Ediciones novedades educativas Año 12 Nº 25. 2002. Argentina.
3
Rivière, Ángel y Martos, Juan (compiladores): El tratamiento del autismo. Nue-
vas perspectivas. Ed. Artegraf S.A. Madrid 1999.
165
Claudia Alejandra Rodríguez
4
Ib. Ídem.
166
Autismo Infantil. Aspectos generales
blecido.5
Todas estas condiciones hacen posible y favorecen el trabajo
con los niños autistas, que tanto necesitan de nosotros para volver a
establecer un vínculo significativo con el mundo que los rodea, y
derribar de a poco las barreras con las que se protegen.
Bibliografía:
“Diagnostic and Statical Manual of Mental Disorders” (D.S.M). Cuar-
ta edición. American Psychiatric Association. Washington DC.
Coord. General de las ediciones españolas, francesas e italianas:
Pierre Pichot. Edit. Masson. 1994. Barcelona.
García Coto, Miguel: “Algunas bases para la formación de un pro-
grama cognitivo-conductual”. Conferencia del Congreso de au-
tismo de la Asociación de padres de autistas. Madrid. 1998.
Rivière, Ángel y Martos, Juan (compiladores): “El tratamiento del au-
tismo. Nuevas perspectivas”. Ed. Artegraf S.A. Madrid 1999.
Valdez, Daniel: “Ángel Rivière y el autismo, el desafío del Everest”.
Propuesta Educativa 25. Ediciones novedades educativas Año 12
Nº 25. 2002. Argentina.
5
García Coto, Miguel: Algunas bases para la formación de un programa cogniti-
vo-conductual.Conferencia del Congreso de autismo de la Asociación de padres
de autistas. Madrid. 1998
167
El adolescente con Síndrome de Down
y sus modalidades identificatorias
como constructivas de la personalidad
169
Viviana Bálsamo, Cecilia Pereira, Paola Valverde
170
El adolescente con Síndrome de Down y sus modalidades identificatorias...
171
Viviana Bálsamo, Cecilia Pereira, Paola Valverde
172
El adolescente con Síndrome de Down y sus modalidades identificatorias...
173
Viviana Bálsamo, Cecilia Pereira, Paola Valverde
Bibliografía
Freud, S. Obras Completas. Ed. Clemares, Madrid. 1948.
Winnicott, D.: Escritos de Pediatría y Psicoanálisis. Ed. Laia, Barcelona, 1979.
Winnicott, D.: El proceso de Maduración de los niños. Ed. Laia, Barcelona,
1979.
Berensteim. Psicoanálisis de la estructura familiar. Ed. Paidós, Buenos Aires,
1987.
174
Socialización. Aliada de la Discapacidad
Alfredo Barale
175
Alfredo Barale
176
Socialización. Aliada de la Discapacidad
177
Alfredo Barale
#"
La socialización le hace vivenciar y sentir a la persona que
es miembro de un todo, del cual forma parte y con el cual
debe articularse.
Para alcanzar estos logros entre otras cosas, se propone que la
persona desarrolle la capacidad de colaboración, haciéndole sentir
que depende de sus semejantes del mismo modo que éstos depen-
den de él.
Los valores culturales y sociales, como así también los cívicos,
son enunciados y vividos con el máximo de intensidad.
La tarea desde este concepto estimula el trabajo en grupo para
que la persona aprenda a convivir con sus compañeros. La persona
es parte vida de la comunidad en la cual está inmersa dejando de
lado “la artificialidad” cuando se trabaja en el campo social.
La socialización da lugar a todas aquellas actividades que mejo-
ran el carácter individual, que son tan necesarias como el carácter
grupal, éste se beneficia si está constituido por individualidades
bien formadas, que contribuyan con lo que puedan para el trabajo
en conjunto.
En nuestro trabajo con personas discapacitadas nos interesa
la socialización ya que la misma nos permite crear disposicio-
nes y actitudes de colaboración con sus semejantes en su medio,
identificándolo con las aspiraciones de su comunidad, pero que
además, como instancia superadora a la integración, propone-
mos como alternativa valorada “la socialización”, para que la
persona o su familia pueda cooperar con otras comunidades
además de las suyas en forma madura y responsable.
Se desprenden entonces algunas otras ideas:
Atención a todos los individuos en las actividades que tien-
den al desarrollo pleno del sentido de responsabilidad para sí
mismo como para con los demás, convirtiéndose las actividades
de suma importancia para el desenvolvimiento natural de todas
aquellas variables que favorezcan la actitud responsable. Este
aspecto da lugar a la resolución de los sin números de proble-
mas que se plantean para su solución ya sea en forma individual
o grupal. el tomar iniciativa para la solución de las dificultades
178
Socialización. Aliada de la Discapacidad
179
Alfredo Barale
180
La sexualidad y las personas
con necesidades especiales
Ana L. Piaggio, Andrea Espinardi, Noelia Mendieta
181
Ana L. Piaggio, Andrea Espinardi, Noelia Mendieta
182
La sexualidad y las personas con necesidades especiales
183
Ana L. Piaggio, Andrea Espinardi, Noelia Mendieta
184
La sexualidad y las personas con necesidades especiales
1
Buscaglia, L. Los discapacitados y sus padres. Emecé Editores, Buenos Aires,
Noviembre de1998. pág. 171.
2
Ibíd., pág.
185
Ana L. Piaggio, Andrea Espinardi, Noelia Mendieta
186
La sexualidad y las personas con necesidades especiales
187
Ana L. Piaggio, Andrea Espinardi, Noelia Mendieta
188
La sexualidad y las personas con necesidades especiales
189
Ana L. Piaggio, Andrea Espinardi, Noelia Mendieta
Bibliografía:
Buscaglia L. Los discapacitados y sus padres. Emecé Editores, 1990.
Argüello M. Revista Dar conciencia, "La homofobia y el coming out".
Edición Junio 2004.
Revista “Maestra especial, nivel inicial y EGB, Ediciones Abril, Mayo
y Septiembre 2001. Editorial Bahiense.
Moisset de Spontón, S. Curso de Sexualidad Humana, Hospital Clíni-
ca, Córdoba, Agosto. 2004.
190
Se imprimió en Editorial Brujas
en el mes de agosto de 2005
Ciudad de Córdoba, Argentina