La actividad minera en Cajamarca ha experimentado gran auge en los últimos
años gracias al boom en la explotación de oro. Los yacimientos de Yanacocha han convertido a Minera Yanacocha en la primera empresa productora de oro de Sudamérica y —junto con otras minas de La Libertad y con los lavaderos de Madre de Dios— han convertido al Perú en el primer productor de oro en Latinoamérica, desde 1997, y en el noveno a nivel mundial.
La explotación de oro en Yanacocha está altamente tecnificada, por lo cual no se
requiere de mucha mano de obra. Sin embargo, el beneficio para la región no ha sido muy alto, pues la mayor parte de los insumos (cianuro) es obtenida fuera del departamento. El sistema de services o subcontratistas ha sido cuestionado en varias oportunidades por la sobreexplotación de la mano de obra y por no otorgar beneficios sociales a los trabajadores. Los sistemas de seguridad han fallado en algunas oportunidades (en el año 2000 hubo un derrame de mercurio que intoxicó a toda una población) y la administración del canon minero no se ha canalizado adecuadamente en obras de importancia para la región.
Otros proyectos mineros importantes son Michiquillay (cobre, oro y plata), La
Granja (grandes yacimientos de cobre calculados en 2500 millones de toneladas métricas) y el cerro Corona (cobre y oro). Hay minas de plata, plomo, zinc y molibdeno; además de minerales no metálicos como sílice, sal, caolín, hormigón y feldespato. La explotación en la zona minera de Hualgayoc es prácticamente insignificante.
El porvenir de la explotación minera del departamento es promisorio por las
grandes inversiones comprometidas a futuro de las empresas mineras. La explotación de nuevos yacimientos y la eficiencia de la extracción hacen prever un incremento en el volumen de los minerales extraídos. Resta aún establecer una mayor participación regional en los beneficios de la extracción, tarea que compete al futuro inmediato.