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INTRODUCCIÓN

En la actualidad nuevos problemas están preocupando a la sociedad, problemas que


hasta hace poco no tenían mucha relevancia, uno de ellos es el estrés infantil. Es difícil
de entender que en la infancia; una época de gozo, libre de preocupaciones y
responsabilidades pueda hablarse de la existencia del estrés. Pero las reacciones
emocionales negativas ante determinados acontecimientos de la vida y las angustias
reflejadas en conductas que no son normales en el infante hace difícil negar su
existencia.

Describir las situaciones que generan estrés infantil en el ámbito familiar para establecer
estrategias de prevención es nuestro objetivo. El estrés es una palabra omnipresente,
me duele la cabeza: estrés, no tengo hambre: estrés, no puedo dormir: estrés. Pero nos
hemos preguntado que los más pequeños de la casa podrían estar padeciéndolo y que
la causa principal sea su propio entorno familiar, cuan perjudicial puede resultar para su
desarrollo y cómo podríamos prevenirlo. En este trabajo encontraremos respuesta a
estas interrogantes.

El presente trabajo se encuentra organizado en dos puntos teóricos principales y uno de


aplicación, en el primero, describimos las diferentes situaciones familiares que generan
estrés en el infante, a la vez éste deriva en dos tipos de agentes estresores, el primero
generado por los padres y el segundo, generado por los hermanos. En el segundo punto,
brindamos las estrategias de prevención primaria y secundaria de dicho estrés, y
finalmente adjuntamos un trabajo de aplicación en donde queda demostrado la
importancia de tratar este tema, debido a la falta de información por parte de las
personas.

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1. FACTORES FAMILIARES QUE PRODUCEN ESTRÉS INFANTIL

1.1 Agentes Estresores: Padres

La familia, como institución, para el niño constituye el respaldo para que éste
pueda desarrollarse de la mejor manera en todos los aspectos o áreas. Desde el
primer instante que el niño nace, la familia se convierte en la organización que
brinda el apego que éste necesita, debido a esto cualquier desequilibrio en
alguno(s) de los miembros de la familia, que generan cambios parciales o
totales, no solo afectan a la familia como una totalidad sino también son
proyectadas a los miembros más pequeños de esta, los niños.

Los niños que se encuentran en medio de una situación desequilibrante y no


reciben el respaldo o la ayuda de otro miembro de su familia para poder
confrontar esta situación (muchas veces amenazadoras para ellos) tienen gran
cantidad probabilidades de desarrollar estrés. Este estrés genera no solo
problemas físicos que se solucionarían con medicamentos si no también
problemas más graves como los psicológicos.

Dentro de la familia las personas que influyen en gran medida en los niños son
los padres. Los padres como personajes modelos, siempre son muestra a seguir
de sus hijos y más cuando estos se encuentran en la etapa de la niñez, es decir,
los niños son la reproducción en miniatura de todo lo que hagan los padres.
Debido a esta situación cualquier ambiente de tensión o clima problemático
dentro de la relación de los padres debe ser considerada como uno de los
principales agentes estresores para el niño generadas en el ámbito familiar.

Según Paredes (2004): “si nos preguntamos: ¿Qué experiencias en mi diario vivir
han sido estresantes? Tendríamos un sinnúmero de respuestas”. En primer
lugar, el proceso de divorcio o ya concluido este, debe ser considerado como
uno de los tantos estresores en los niños. Un trabajo de investigación realizado
por Barton y Zeanah (en Trianes 2002) dieron como resultado que las
consecuencias que genera en el niño y su afrontamiento varían con respecto a la
edad y al sexo. Según estos estudios los niños más jóvenes en una primera
instancia son los más afectados a comparación de los más grandes; sin embargo

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los más jóvenes, son los que logran recuperarse más rápido y no muestran
secuelas del divorcio.

Con respecto al sexo encontramos que es difícil optar por escoger entre uno de
los géneros debido a que los efectos del divorcio también son consecuencia de
otros estresores, debido a que tanto el niño como la niña reaccionarán de
distintas maneras, por lo tanto no es preciso establecer una edad o genero
favorable frente a esta situación. Arnold y Carnahan (como se citó en Trianes,
2002) señalan tres grupos de estresores más comunes los cuales son: Pérdida
del acceso a los padres o a uno de ellos; cambios en el entorno y condiciones
de vida y hostilidades entre los padres e intrusión del sistema legal en la familia.

Los niños reaccionan frente al estrés como se les ha enseñado en la casa afirma
el Psiquiatra Oscar Sánchez. Existen dos opciones que frecuentemente ocurren;
una es que el niño espera con ansias que llegue el día de poder volver a ver a
sus padres juntos y la otra es que adquiera un mecanismo de defensa el cual
sería la negación. En la primera, el niño puede verse ansioso en el transcurso de
la espera y en el momento que no ve logrado su propósito entrar en una
frustración que traería consigo problemas futuros; en la segunda opción el niño
reconstruye la realidad para volver a formar el momento en el cual sus padres
estaban juntos.

En segundo lugar, como situación estresante tenemos a los problemas


económicos de los padres, entendiéndoselo a esto como pobreza. Bien este
problema se cree que sólo afecta a los padres, pero también afecta a los niños,
debido a que no logran entender por qué sus padres están más preocupados,
cansados o de mal humor. Los infantes frente a esta situación se estresan y se
enferman.

Así nos afirma los informes públicos de los estados y del congreso de Estados
Unidos donde se reconoce que los niños involucrados en estas situaciones están
expuestos a ambientes peligrosos y viven conductas negativas y deprimentes.
(Toomey y Cristie, 1990). Otro estudio de Anderson (en Trianes 2002)
manifiesta que: “se encontró una alta incidencia de problemas de conducta y

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trastornos emocionales en niños de edad preescolar de familias en desventaja
económica semejante a la pobreza”.

Las consecuencias posibles que se generaría en los niños con problemas


económicos en casa es que se vuelvan distraídos, faltos de atención, además
esta situación genera en el niño una conducta insegura de sí misma que acarrea
una dependencia y una idea de desigualdad con los demás la cual trae consigo
un rechazo de los demás.

1.2 Agentes Estresores: Hermanos

Como ya ha sido señalado, en el ambiente familiar existen factores estresantes


que influyen en el desarrollo del niño, uno de estos factores, además de los
conflictos entre los padres, es la presencia de hermanos como generador de
situaciones que alteran el estado emocional del niño, como ejemplo de aquellas
situaciones tenemos, el nacimiento de un hermano y las peleas entre hermanos.

En cierta etapa el niño requiere adquirir una autonomía y el reconocimiento de un


rol en las decisiones de sus padres, de modo que esto refuerza los lazos de
unión con ellos, Trianes (2002) acerca del nacimiento de un nuevo hermano,
propone el siguiente postulado:

El niño acelera una sensibilidad para percibir las diferencias con otros, lo

que genera que este establezca comparaciones de cómo son tratados

con relación a los hermanos, por lo tanto, esta distinción con sus

hermanos recién nacidos que los niños asimilaran de una forma más

directa por parte de sus padres o parientes cercanos, originara una

situación que se considera estresor para los niños. (p.49).

Además, este nuevo acontecer de la integración de un nuevo miembro en la


familia atrae nuevas situaciones que alteran las rutinas ya acostumbradas, de
manera que en la gran mayoría de los casos los niños se van a ver afectados
emocionalmente, entre estas situaciones podemos mencionar el momento en
que el niño es llevado a dormir a una habitación propia, sacándolo del cuarto de
los padres, la concentración elevada hacia el recién nacido no solo de los

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padres, sino también de otros familiares o amigos, el tiempo en que la madre
requiere estar en el hospital y el niño debe ir a dormir a casa de abuelos o
familiares es una de las situaciones que pueden ser traumáticos para los niños,
ya que desatan el temor a la separación de la madre, así como explica
Fernández (2007) sobre todo, si estos cambios afectan a niños de 2 a 4 años,
que son más sensibles y dependientes de los lazos de afecto y apego con sus
cuidadores, pueden percibir como muy estresante la separación temporal de la
madre. Pueden incluso pensar que esta separación va a ser duradera o que
tienen responsabilidad o culpa en ella.

Es preciso entender que el nacimiento de un hermano es estresante para el niño,


esto supone entender cómo es que los niños tienden a manifestarlo, Barton y
Zeanah (como se citó en Trianes 2002) mencionan que en muchos casos el
síntoma más aparente son celos más o menos manifiestos, este efecto es más
intenso de los 2 a los 4 años debido al efecto combinado de las limitaciones
cognitivas, pensamiento egocéntrico, con las limitaciones para aceptar, compartir
o entender las necesidades de otro. Aparte de ello el niño puede manifestar un
grado de agresividad hacia el recién nacido.

No obstante, la adaptación inicial a un nuevo hermano no constituye un hecho


problemático que hay que resolver o considerarlo como perjudicial, sino que esto
incluye una “tarea más que forma parte del desarrollo humano, que serían la
interacción y relación con los hermanos” (Trianes ,2002, p.51), puesto que la
pelea entre hermanos que se debe a los celos producidos en el niño supone un
doble papel que es estimulante positivo en el niño que vendrían a ser el conflicto
que se debe resolver y tarea estimulante del desarrollo.

El nacimiento de un hermano en el infante puede resolverse de dos maneras


principalmente. En primer lugar es que el niño se acomode a los requerimientos
y expectativas de los padres, de manera que reciban elogios y asegurar el
afecto; en consecuencia, los niños que así los hacen suelen ser dóciles y fáciles
de guiar ya que se someten a la autoridad prudente de los padres. En segundo
lugar, es que el niño debe asumir un nivel superior acatando nuevas
responsabilidades, de modo que de esta manera consiga las ventajas

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correspondientes por actuar y sentirse identificado con su posición de hermano
mayor.

El siguiente factor estresor en el ámbito familiar es la pelea entre hermanos,


Spirito (como se citó en Trianes 2002) resalta una investigación en la que los
problemas con hermanos constituyen una fuente de estrés desde los cinco años
hasta la adolescencia. A esta edad decrecen, bien porque los niños hayan
aprendido estrategias más sofisticadas y eficaces para manejar las peleas, bien
porque pasan a ser más importantes otros conflictos con los padres, el colegio,
los amigos y primeros novios.

La presencia de hermanos, como ya es entendido, es fuente de ventajas y


provecho a largo plazo por la relación afectuosa que se genera en el ambiente
familiar, pero plantea problemas y conflictos a corto plazo o inmediatos, sobre
todo, si es que los hermanos tienen edades muy próximas y son de distinto
género, estos conflictos se dan debido a que la característica propia de los niños
de tener distintas pautas de juego e interacciones sociales hacen que las buenas
relaciones se vean dificultadas. De acuerdo a esto Selman en Trianes (2002)
menciona que las diferencias entre hermanos, en temperamento, habilidades,
gustos y tendencias pueden ser acusadas, incluso en edades inferiores, lo que
contribuye a dificultar la relación en estas edades iniciales.

Las peleas entre hermanos es causado por características típicas de los niños.
En esta etapa es común observar que los niños son egocéntricos e impulsivos en
la interacción con otros niños, intentando que cada hermano intente controlar la
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conducta del otro, pero como aún no es capaz de manejar habilidades para
negociar teniendo en cuenta el punto de vista del otro, sus deseos y
necesidades, cada uno intenta dominar al otro, obligándole y exigiéndole
mediante peleas, es por esto que también se entiende el sentido que tienen
muchos comportamientos de molestar y pelear tan frecuentes en la infancia y
edad escolar.

Este factor estresor es considerado como uno de las situaciones que provoca
mayor estrés en el niño, en torno a esto Trianes (2002) sostiene que el temor y
enfado debido a la conducta agresiva de uno de los hermanos resulta muy
estresante a estas edades.

2. ESTRATEGIAS DE PREVENCIÓN

2.1 Prevención Primaria

El estrés infantil desemboca en conductas desadaptadas de todo tipo: fracaso


escolar, inhibición social, timidez, rebeldía, conductas disóciales o violentas, etc.
Se debe estar atento a cualquier cambio en la conducta o actitud del niño y
preguntarse, no cómo conseguir de él una respuesta adaptada, sino por qué se
comporta de un modo que nos desconcierta.

El nivel de estrés no está necesariamente relacionado con las presiones


ambientales externas. Depende, en gran parte, de la interpretación que hacemos
de los acontecimientos y de su repercusión fisiológica en el organismo. La
vulnerabilidad al estrés puede tener su origen en aprendizajes emocionales
tempranos, en el miedo que el niño puede vivir a no ser querido o a sentirse
abandonado, en cualquier momento de la vida.

Por ello la prevención de estos problemas tiene que estar enfocado al


desarrollo del niño sin afectar su autoestima ni desarrollo afectivo como por
ejemplo, las acciones de los padres para evitar las peleas entre hermanos,
prepararlo durante el embarazo para que perciba el nacimiento de un hermano
como un hecho deseable. Evitar verbalizar sentimientos negativos hacia un
progenitor en el caso de una separación o divorcio, etc.

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Como señala Trianes (2003):

La respuesta individual al estrés, los primeros años de la vida del niño

tienen una importancia decisiva, pues el cerebro está en proceso de

formación. Toda información, aprendizaje, reacción emocional que tiene

lugar en estos primeros años, quedan grabados a fuego en nuestro

cerebro y condicionan nuestra respuesta emocional, el funcionamiento

fisiológico del organismo, la capacidad de resistencia al estrés y, en

definitiva, todo el desarrollo psicoafectivo posterior. La mayor parte de

las dificultades afectivas del adulto tienen su origen en estos primeros

patrones aprendidos en la infancia.

A continuación describiremos las estrategias de prevención primaria del estrés


infantil y se considerará como prevención primaria a las medidas que hay de
tomar antes de haberse dado la situación estresora para el infante generada
por situaciones familiares.

Las prevenciones estarán clasificadas según las posibles causas. En primer


lugar, consideraremos como agentes estresores a los padres; en el caso de
estrés en niños cuyos progenitores se divorcian depende principalmente de los
padres, ellos al estar pasando por un momento de crisis soslayan la atención
hacia el niño y esto puede ser dañino para él(ella), en este caso no se debe
intentar eliminar al padre de la vida del niño ni hablar mal de él , no se debe
verbalizar sentimientos negativos, implicar al niño en las disputas y pelear
delante del niño públicamente . Según Quintana y Sotil, (2000) Se debe procurar
acuerdos para respetar al máximo y facilitar la fluidez de comunicación para
abordar el tema de una manera madura y responsable.

Es imprescindible destacar a la vez la reacción y conducta de los padres, en un


divorcio ya devenido es inevitable fomentar un clima de tensión, ya que este se
debe muchas veces a infidelidades o maltratos, lo que siempre va a generar
rivalidad y enfado entre los padres, por ello, una de las estrategias de prevención
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a considerar es tratar en la menor medida posible hacer notorio actitudes que el
niño puede asimilar como estresante.

En el caso en el que la pobreza y las malas condiciones socioeconómicas vienen


a ser un estresor para el niño, esta situación resulta drásticamente negativa para
el niño, debido a que la mayoría de los padres en situación de pobreza o pobreza
extrema suelen no estar interesados en el bienestar de sus hijos, Trianes (2002)
sostiene que los padres en pobreza no les preocupa que los niños reciban una
buena educación, no tienen expectativas hacia el niño, no le proporcionan guías
de desarrollo, ni atienden sus necesidades y ofrecen modelos negativos que el
niño observa e imita.

Por lo tanto, la prevención radica netamente en la identificación de las familias en


riesgo por parte de las instituciones del estado, además de una evaluación
sistemática de las condiciones socioeconómicas de los alumnos con el fin de
identificar niños en riesgo que pudieran beneficiarse de una asistencia especial y
tratamiento.

En segundo lugar, consideremos como causa a los agentes estresores


hermanos , cómo prevenir el estrés por el nacimiento de un bebe; en este caso
es preciso una preparación durante el embarazo, para que reciba al nuevo
hermano como un hecho deseable, definirle el papel de hermano mayor para que
le ayude a comprender la relación con el neonato , destacarle que puede ser
atractivo tener un futuro compañero de juego, prevenir a las visitas que cuando
estén en casa integren al hermano mayor en los elogios.

Es sabido que las peleas entre hermanos puede ser muy recurrente en este caso
la estrategia de prevención radica en la equidad de trato hacia los hermanos por
parte de los padres , respetar sus individualidades y procurar eventos familiares
agradables que implique el compartir entre hermano , dándoles la oportunidad de
relacionarse a través de la cooperación y sin peleas.

2.2 Prevención Secundaria

En este trabajo se considerará a la prevención secundaria como las medidas que


hay de tomar para disminuir o evitar posibles consecuencias ya habiéndose dado
la situación, en este caso estresores para el infante generadas por situaciones
familiares.

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En primer lugar, frente al divorcio de los padres, estos deberían adoptar o
realizar actuaciones saludables con lo cual evitarían que los hijos sufran de
estrés. Antes de mencionar las diversas situaciones que uno puede adoptar,
señalaremos que en este punto se considerará a la madre como el progenitor
que ha obtenido la custodia de un hijo; debido a que mayoritariamente se dan
estos casos, esto se explica debido a que esta es la que puede en gran parte
cumplir con las necesidades e intereses del menor.

Las actitudes saludables están relacionadas a las ya mencionadas otros factores


que influyen en si un niño llegue a tener estrés o no. Cuando el niño pierde el
acercamiento con el padre lo más aconsejable para la madre es evitar intentar
alejar al padre totalmente de la vida del niño, al llegar al extremo de ni querer
mencionarlo; puesto que el infante percibirá como muy estresante .Situación
opuesta, sería la correcta para que el niño pueda seguir desarrollándose sin
problemas, como por ejemplo establecer un horario de visitas que pueda permitir
que la criatura recupere el tiempo perdido y no se vea perjudicado por la falta
diaria de su padre.

Otra situación preventiva es mantener en la mayor cantidad posible la interacción


de los padres, con la finalidad de no hacer tan notorio la separación, así el niño
ya no sentirá la situación tan diferente a tiempos pasados. Además de poder
entender con el transcurso de tiempo que a pesar que papá y mamá estén
separados lo siguen queriendo y eso no cambiará.

Los cambios de condición de vida tienen como principal preventor el establecer


un nuevo horario rutinario (dejando el anterior atrás) con actividades donde los
niños se sientan cómodos y productivos además de tener apoyo afectivo
continuo. Este horario tendría que ser estable por lo menos en lo que demore el
proceso o los procesos de los niños en adecuarse a la nueva vida, sin papá y
mamá juntos.

En caso de hostilidades en los padres, lo más aconsejable es evitar hablar mal


del otro padre en frente de los niños, esto trae mayormente tres consecuencias
que en ambos casos no permite la armonía total. Uno de ellos es que el niño al

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escuchar hablar mal en este caso de su padre adjunta esos sentimientos a él y
empiece a sentir desagrado y ganas de no pasar tiempo con sus padres. Otra
situación que podría darse es que al ver que hablan mal, critican al padre se
sienta solo puesto que él tiene una opinión diferente, el no cree que su padre es
así y lo defiende. Por último puede sentirse que el culpable tanto del divorcio
como de las continuas hostilidades es nada menos que el, lo cual traería consigo
un grave problema en el presente y en el futuro de la autoestima del niño.

Considerando los problemas económicos, la estrategia de prevención que más


se acomoda en este punto gira en torno a las acciones de los padres, en caso se
encuentre en pobreza o pobreza extrema, lo apropiado es buscar ayuda a las
instituciones que puedan brindarle apoyo en el cuidado de su hijo hasta que
pueda conseguir un trabajo con el cual solventarse. En caso de que la situación
de los problemas económicos se dé de un momento a otro, lo mejor es evitar las
tensiones frente a esta incómoda situación, y tratar de buscar la solución más
pronta evitando que los niños lo perciban como malo, lo que se traduciría a la
vez como estresante.

En segundo lugar, frente al nacimiento de un hermano, la llegada a casa de un


bebé; viene desde la perspectiva del niño como un ladrón que se robará su lugar.
Lo primordial es que desde el momento en que los padres saben que esperan un
nuevo bebe lo mejor sería ir relacionándolo en el transcurso del embarazo con su
nuevo hermano. Además de explicarle con claridad y con información
comprensible para su edad que es lo que sucederá. En el caso de que no se
haya tomado esta medida con anticipación y el niño muestre actitudes negativas
contra el recién nacido en Trianes (2002) menciona lo siguiente:

Comprender, igualmente, que pueden aparecer reacciones regresivas o

ansiedad en torno al nuevo bebé, por parte del hermano o hermana

mayor. Tratarlas con naturalidad, evitando sobrecargar al niño con

exigencias, dándole un margen para que se adapte a la nueva situación,

manifestándole especial cariño y valorándole por sí mismo.

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El nuevo hermano ya estando en la casa, lo preferible es que no cambie las
actitudes con el niño pues este es el principal problema por el cual empiezan a
rechazar al nuevo bebe. Brindarle la misma o si se puede más atención que
antes tanto de los padres como de personas visitantes, pues se sentiría excluido
si ahora toman atención al recién nacido y no a él, darle su espacio y
comprender además las nuevas actitudes buenas o no que pueda tener el niño.
También asignarle al niño el papel del hermano mayor, esa responsabilidad lo
haría sentir que cumple un papel importante y comprender que no es malo el
tener un nuevo hermano.

Respecto a la pelea entre hermano, muchas de las peleas se deben a la


disparidad de trato entre los hermanos pues los padres creen que por las
diferentes edades uno necesita más atención que el otro, lo que es incorrecto, ya
que esta idea solo genera más conflictos entre los niños. Por ello lo más
importante sería brindarle mismas manifestaciones de afecto, atención tanto
como cosas materiales.

Además a pesar de ser hermanos no tendrán los mismos gustos ni preferencias


por tal motivo lo más aconsejable es que pasen tiempos individuales brindándole
a cada uno sus espacios. Otra estrategia para contrarrestar la separación de
actividades por lo anterior mencionado sería bueno planificar salidas familiares
donde se fusionan los gustos de todos los participantes de la familia y así poder
reforzar el lazo de hermandad.

Para esta situación Trianes (2002) propone un cuadro donde se pueda registrar
las actividades negativas que generen peleas entre los hermanos, sostiene
además, que este cuadro sea público. A continuación observaremos el cuadro
que propone:

Fuente: Tomado de Trianes (2002). Niños con estrés. Cómo evitarlo, cómo tratarlo. 12
3. TRABAJO DE APLICACIÓN
3.1 Descripción y resultados de la aplicación
En modo de reconocer la importancia de tocar este tema, hemos decidido
realizar una pequeña encuesta a un grupo de trabajadores que tratan con niños
en mayor número, con la finalidad de percibir la cantidad de información que
poseen acerca del estrés Infantil.

El lugar donde acudimos lleva por nombre CDSP 258, forma parte de una iglesia
cristiana llamada “Semilla de Cristo”, este programa integra parte de una red,
que al hacer una unidad forman una ONG. Trabajan específicamente con niños y
adolescentes, en los cuales buscan un desarrollo físico, cognitivo y espiritual, a
la vez también optan por tener un contacto permanente con los padres ya que
son pieza importante de la visión que se han establecido.

o Muestra: 60 trabajadores del CDSP 258.


o Instrumento: Cuestionario con dos preguntas.
o Objetivo: Conocer el grado de información y conocimiento que manejan
acerca del tema planteado en este trabajo.
o Resultados:
 Comenzamos preguntando a las 60 personas de manera verbal si
creían que los niños se pueden estresar, obtuvimos que 29
trabajadores no sabían, 10 mencionaron que no, y 21 respondieron que
un niño si se puede estresar.

¿CREE QUE LOS NIÑOS SE ESTRESAN?

NO SABE 29

NO 10 Respuestas

SI 21

0 5 10 15 20 25 30 35

Fuente: Elaborado por Katherine, Adriana y Suriel. Facultad de Psicología. UNMSM.


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01/07/13
 A las 21 personas que respondieron de manera afirmativa, le
entregamos un cuestionario con dos preguntas en las cuales se incluía
las dos situaciones que hemos considerado en este trabajo como
estresantes para los niños, uno por parte de los padres y otro por los
hermanos.
 Los resultados fueron los que se muestran a continuación:

FACTORES ESTRESORES: PADRES

12
12
10 9
8
6
4
2
0
DIVORCIO PROBLEMAS ECONOMICOS

NÚMERO DE RESPUESTAS

Fuente: Elaborado por Katherine, Adriana y Suriel. Facultad de Psicología. UNMSM.


01/07/13

FACTORES ESTRESORES: HERMANOS

16
16
14
12
10
8
6 5
4
2
0
PELEA ENTRE HERMANOS NACIMIENTO DE UN HERMANO

NÚMERO DE RESPUESTAS

Fuente: Elaborado por Katherine, Adriana y Suriel. Facultad de Psicología. UNMSM. 14


01/07/13
o Conclusiones:
 Abordar este tema es indispensable ya que como hemos podido observar una
cantidad considerable de personas no conocen del tema, lo que se refleja en el
número de personas que respondió de manera negativa y los que no sabían que
responder al plantearles la pregunta, si es que un niño se podía estresar.
 Estimamos con esta muestra, reconocer que si obtuvimos estos resultados, en una
encuesta con un mayor número de personas obtendremos resultados similares.

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4. CONCLUSIONES

Finalmente se ha llegado a las siguientes conclusiones:

 El factor más importante que genera estrés infantil en el ámbito familiar, con
respecto a los padres, es el divorcio, debido a que el niño enfrenta una separación
parcial o total de uno de los padres lo que genera sobrecarga en el progenitor a
cargo, que a su vez genera estrés en el niño.

 La prevención frente al estrés infantil generado por situaciones familiares se logra


a través de una directa comunicación sobre el problema con la finalidad de
establecer un clima con la menor tensión posible para los niños.

 El factor más importante que genera estrés infantil en el ámbito familiar, con
respecto a los hermanos, es la pelea entre ellos, específicamente la conducta
agresiva de un hermano produce permanentemente temor y enfado que resulta
muy estresante para el niño.

 Investigar este tema es necesario ya que se demostró con el trabajo de aplicación


que realizamos al grupo de trabajadores que la información es escasa sobre el
estrés infantil.

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REFERENCIAS

 Fernández, F. (2007). Estrés, riesgo familiar e inadaptación socioemocional y escolar


en la infancia. Tesis Doctoral. Universidad Malacitana, Málaga. Recuperada el 28
de Mayo del 2013 de http://www.biblioteca.uma.es/bbldoc/tesisuma/16851511.pdf.

 Oros, Laura. & Vogel, G. (2005). Eventos que generan estrés en la infancia: diferencias por
sexo y edad. Enfoques, vol. XVII, núm. 1, pp. 85-101.

 Paredes, R. (2004). El estrés infantil en la etapa preescolar de 4 y 5 años. Tesis de previa


a la obtención del título de licenciada, universidad. Tecnológica Equinoccial, Quito,
Ecuador.

 Trianes, V. (2002). Niños con estrés, cómo evitarlo, cómo tratarlo. DF: Alfaomega.

 Trianes, V. (2003). Estrés en la infancia. Madrid: Narcea.

 Quintana, A. & Sotil, A. (2000). Influencia del clima familiar y estrés del padre de familia en la
salud mental de los niños. Revista de investigación en Psicología (Lima), 2, 29-45.

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