Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Puesto que la educación es una función intrín- La generación del 80, en plena modernidad,
seca de la cultura, ya sea por el proceso de tuvo como metas claras las de inculturar a las
endoculturación o por el de inculturación, des- masas inmigrantes, homogeneizar el país y
cubriremos el perfil del rol docente de acuerdo proveer de buena mano de obra a la cultura del
con las características y demandas prospecti- progreso indefinido. Y no le fue mal. Partía de
vas de cada cultura. La nuestra y actual es una serie de elementos fundamentales que
aquella a la que hemos dado un nombre que gozaban socialmente de presencia y estabili-
quizá no sea del todo exacto, pero que resulta dad. Tal es el caso de Sarmiento, interesado en
útil: el de posmodernidad. El gran sociólogo escribir un Catecismo de la religión católica
Zigmant Bauman prefiere cambiar este término para uso en las escuelas de su tiempo, y que se
por el de “modernidad líquida”, pero de todos esforzaba denodadamente por enseñar a leer y
modos entendemos la realidad que se está con- escribir, y avanzar en el conocimiento científi-
ceptualizando y que Alain Touraine sintetiza en co. Lo otro estaba prácticamente aceptado.
gran medida cuando escribe en “¿Qué es la
democracia?”: “Hoy en día, en la sociedad de En nuestra cultura del relativismo y, simultá-
masas, no se habla más que de participación, neamente, de la búsqueda constante de soli-
pero ésta significa más bien la disolución en la daridad y de superación de la absorción de los
muchedumbre, a la que David Riesman definió individuos por los sistemas, la escuela tiene
como solitaria. Es necesario combinar, en vez que asumir nuevos desafíos y los docentes
de oponerlos, el objetivo de integración con el deben descubrir la nueva fisonomía de su rol.
proyecto personal o identidad. Es preciso que
alguien se integre a algo, a un conjunto de per- El rol docente del futuro nos muestra, según
sonas y de técnicas. ¿Cómo va a existir ese descubrimos al reflexionar, una doble e inse-
alguien si no dispone de un espacio privado, parable misión: la de formar integralmente a la
que la familia, el grupo nacional, étnico o reli- persona, capaz de “convivir”, como dice bella-
gioso constituyen o protegen?” (p. 216). mente Jacques Delors, y la de enseñar a
aprender, para que le sea posible actualizarse
Estos tiempos culturales están signados por permanentemente por disponer del manejo
la dependencia del poder económico, cuyo serio de esa capacidad fundamental del homo
centro de gravedad no pasa por la búsqueda sapiens: la de pensar, y la de pensar con pro-
del “bien común”, como se suponía necesaria- funda seriedad y compromiso. Como pocas
mente en las “democracias”, que concedían veces en la historia hasta el presente, el futu-
esa misión al Estado capaz de lograrlo. Esta ro está en manos de la libertad responsable
“economocracia” está centrada en el “interés”, del ser humano, como afirma Ilya Prigogine.
que es interés económico e individualista, sin
verdadero sentido del bienestar humano. Zigmunt Bauman dice sabiamente: “Nos resul-
tará evidente que el entendimiento es el punto
En el contexto es posible que se le pida a la de partida de la libertad si recordamos que
educación y se suponga del rol docente una ‘para un sujeto que actúa ingenuamente [...]
función de proveedor de buena mano de obra su propio condicionamiento no es transparen-
calificada. En tal perspectiva, con ser un “buen te’, y que ésa no transparencia del condiciona-
enseñante de saberes” (entiendo por tales miento es en sí misma garantía de eterna inge-
también las habilidades), se estaría cumplien- nuidad” (Modernidad líquida. Buenos Aires,
do la supuesta expectiva cultural. Fondo de Cultura Económica, 2003, pp. 47-48).