Sei sulla pagina 1di 6

La palabra filosofía procede del griego, de la suma de dos vocablos: filos que

significa amor y sofía que significa sabiduría. Su significado etimológico es, “amor
a la sabiduría”.

Filosofía: amante del conocimiento, va detrás de lo que no voy a poseer totalmente.


Para la filosofía la perfección no existe, somos seres imperfectos.
Es una disciplina que tiende al deseo del saber conocer. Siempre va a pensar en el
sentido de las cosas y preguntarse ¿Por qué?

Es una disciplina que se indaga en todo momento, es el arte del preguntar. Se


pregunta y responde y sobre esa respuesta surge una nueva pregunta y así
sucesivamente.

Es considerada una meta-ciencia, ha sido en su momento pensada como la madre


de todas las ciencias puesto que en ella están todos los puntos de partidas que
luego van a ser considerados ciencias.

Padre de la filosofía: Sócrates (filósofo griego).


Discípulos: Platón (seguidor de Sócrates y maestro de Aristóteles) y Aristóteles
(polímata: filósofo, lógico y científico de la Antigua Grecia, sabiduría que abarca
conocimientos de diversos campos).

1. Según el filósofo alemán Karl Jaspers podemos entender a la filosofía en dos líneas,
el origen y el comienzo.

El origen: es lo que lleva al hombre a filosofar, a buscar una explicación mediante


tres índoles: asombro, duda y situaciones límites.
 Del asombro: sale la admiración, la pregunta y el conocimiento.
 De la duda: acerca de lo conocido, el examen crítico y la certeza.
 Y de las situaciones límites: el sentirse perdido y el encontrarse a sí mismo.
Replantearnos el sentido.
El origen histórico de la filosofía surge como resultado de los diferentes
cuestionamientos que el hombre comenzó a hacerse sobre las cosas que le rodeaba,
y de esta manera nace la filosofía como una forma racional de explicación.

También se podría decir que existen tres axiomas que movilizan el racionamiento
del sujeto. El hombre hace filosofía a partir de “el no haber sido en el pasado, ser
en el presente y dejar de ser en el futuro”. Esa es la gran duda del hombre.

El comienzo: surge en la Grecia antigua. Es lo histórico, lo concreto. A partir de aquí


la filosofía hace un salto del mito (relato) al logos (razón), es decir, se deja de
explicar el mundo a través de creencias y pasan a explicar desde un pensamiento
lógico.
Los mitos están presentes hasta nuestros días: Mírenla de Ciro y los Persas.
 Etapas de la filosofía:

EDAD ANTIGUA: tiene su aparición en Grecia en el siglo 6 A.C, su cosmovisión es


cosmocéntrica: es decir, el centro del mundo es el universo. Tema principal: el
asombro ante la naturaleza, y sobre la estructura de la realidad.

EDAD MEDIEVAL: surgimiento del cristianismo en el siglo 5, su cosmovisión es


teocéntrica: Dios en el centro del universo. Tema principal: la relación entre la fe y
la razón. Todo se preguntaba y respondía dentro de la religión.

EDAD MODERNA: siglo 16, su cosmovisión es antropocéntrica, es decir, el hombre


es el centro de este estudio, lo que lo distingue es su razonamiento. Intenta lograr
el pensamiento crítico-reflexivo. Es decir, todo conocimiento que se produzca sin
ser racional queda afuera. Tema principal: el conocimiento.

EDAD CONTEMPORANEA: siglo 19 y 20. Es un tiempo de incertidumbre y


ambigüedad. Eje: conciencia de ser sujeto, de existencia. Tema principal:
imposibilidad de un saber absoluto.

PRIMEROS FILÓSOFO: PRE-SOCRÁTICOS (anteriores a Sócrates).


Con Tales de Mileto: aparece la mirada hacia la filosofía: de ser mística pasa a ser
cosmogónica: es decir, que trata el origen y la evolución del universo. Introduce a
las sustancias, el acercamiento a las ciencias naturales: decía que el agua fue el
elemento primero que posibilitó la vida “El origen fue el agua y la tierra se formó
en ella”. Arjé: agua.
Arjé: comienzo del universo o el primer elemento de todas las cosas.
Anaximandro de Mileto: nació a finales de S. VII a.C, fue el primer ser humano en
formular la hipótesis de que la tierra no era plana, era esférica, también creía que
el universo era infinito. Anaximandro no estaba de acuerdo con Tales de Mileto en
que el arjé fuese el agua, él decía que el arjé tenía que tener las siguientes
características: inmortal, indestructible, eterno, sin envejecimiento, a este elemento
le llama: indeterminado, que en griego se dice “apeirón”.
Anaxímenes de Mileto: nació en el S. VI a.C. Está influenciado por Anaximandro.
Anaxímenes sustituye el arjé indeterminado como un elemento físico concreto “el
aire” sustancia originaria del mundo. Se fijó en que si soplamos con los labios
bastantes cerrados sale frío pero si lo hacemos con la boca muy abierta sale cálido.
Pensó en un mecanismo de cambio y cómo un elemento se va transformando y
dando lugar a otras cosas.
Pitágoras: introduce la noción del número. Aparecen el legado de la música, el
compás. Se dio cuenta de que la música se podía expresar numéricamente. Creía
que la matemáticas gobierna y constituya la realidad (por ejemplo: en internet todos
los textos e imágenes que leemos se reducen a códigos binarios).
Heráclito: nació en el S. VI a.C. Heráclito creía que el arjé del universo era el fuego,
también defendía que en el interior de cada cosa hay una estructura contradictoria,
la oposición es lo que le da sentido a los elementos, por ejemplo si nunca hiciera
fría no podríamos hablar de calor. Introduce la noción del movimiento no tan solo
local, sino de cambio, de transformación. Todo se corroía, la planta daba frutos, se
moría y volvía a nacer, era cíclico, interminable, inacabable. “No me bañaré en la
misma agua dos veces” el río corre y además porque la Rocío que entró hace 2
minutos no es la misma que la que ha salido y ha vuelto a entrar.
Parménides: nació en el S. VI a.C. No creía en que haya habido un arjé. Decía que
de la nada no puede surgir algo. “El ser, es. El no ser, no es”. Una cosa no puede ser
y no ser al mismo tiempo.
Sócrates: filosofía pre socrática y post socrática.
Pre socrático: no había una definición del hombre, el hombre era un objeto más que
estaba puesto en el mundo y el único capaz de racionar.
Sócrates nació en el S. V a.C, era un filósofo que daba clases en las plazas públicas,
era antiformal, enseñaba la mayéutica: método de preguntar para conocer, significa
obstetricia en griego, hace que nazca el conocimiento, y les enseñaba a todas las
clases sociales. Fue acusado por los sofistas de pervertir a los menores.
Los sofistas tenían un modo de hablar muy técnico, un lenguaje muy explícito y no
eran comprendidos por el pueblo. Dominaban la retórica y la oratoria.
Los sofistas fueron los primeros filósofos profesionales que recibían un salario a
cambio de sus enseñanzas “Sócrates consideraba que recibir dinero por enseñar era
una forma de prostitución”, ya que conversarían con quienes podían pagar sus
honorarios (familias aristocráticas).
Sócrates introduce al hombre, porque a él lo llevan al tribunal y prefería irse con
sus ideales y beber la cicuta (veneno), morir, a ser desterrado y cambiar de opinión.
Con su muerte nos da una mirada diferente de lo que es el hombre de preguntar y
repreguntar.
La felicidad está en nuestro interior: orden, equilibrio del ánimo y la razón.
Platón: se dice que Sócrates puede llegar a ser una ficción de Platón, no hay prueba
de la existencia de Sócrates.
Platón introduce la noción de la dialéctica: un método que consiste en enseñar y
aprender a través de diálogo y de esta manera irían apareciendo los conocimiento
verdaderos.
Según Platón existen dos realidades totalmente diferentes somos la copia de la
copia. Vivimos en un mundo ficticio: el cree que hay un mundo sensible: el de
objetos materiales, que están sometidos al cambio, por lo tanto las cosas nacen o
mueren, los objetos son una copia de la realidad inteligible, los podemos percibir
por los sentidos y un mundo inteligible: el mundo de las ideas, es eterno, perfecto,
inmutable, no cambia. Mundo formado por almas universales y entidades
matemáticas.
Alegoría de la caverna:
Las sombras no son la auténtica realidad. Cuando sale de la caverna pasa del mundo
sensible al inteligible, alcanzando el conocimiento racional.
La auténtica realidad es el mundo inteligible, el mundo de las ideas, ya que estas
son eternas y nunca desaparecerán.
Por ejemplo: Matrix nos presenta dos realidades.
Aristóteles: metafísica: sacar al ser del acto a la potencia
Acto: lo que sos actualmente.
Potencia: lo que puedes llegar a ser pero aún no sos.
Tránsito del acto a la potencia: semilla > trigo > pan.
Teoría de las cuatro causas aristotélicas: Las cosas que existen, seres, tienen 4
causas que condicionan la existencia. 1) Materia: músculos, huesos, pelos, etc. 2)
Forma: tu esencia como especie: ser humano, aquello que te convierte en ser único
y te diferencia de lo demás. HILEMORFISMO (materia y forma). 3) causa eficiente:
yo no existiría si nueve meses antes de que nacieran mis padres no hubieran tenido
relaciones sexuales sin protección. 4) causa final: Teleología: en el universo todo
tiene una finalidad, nada es casual. Los animales se mueven para conseguir comida,
los seres humanos para intentar ser felices, etc.

2. La búsqueda del sentido es lo que caracteriza a la filosofía como un quehacer


esencialmente humano y arraigado en la cultura.
Todo lo que el hombre conoce, sus decisiones y sus actividades suponen un
cuestionamiento previo. De algún modo todos hacemos filosofía cuando
intentamos conferirle un sentido a nuestras acciones, elecciones, relaciones, etc. De
manera que hacemos filosofía para intentar entender el modo en que suceden las
cosas pero conscientes de que cada nuevo porqué abre una nueva búsqueda. Nada
de lo que conocemos nos conforma definitivamente. Es como un impulso de
permanente transcendencia, el teólogo Juan Alfaro lo denomina “dialéctica de
transcendencia”, es decir, ir más allá.
También Alfaro y el filósofo Emerich Coreth, junto con otros autores, concuerda en
que el preguntar ilimitado sobre todo lo real es una dimensión constitutiva del
hombre ya que es propia de su ser (ontológica) y anterior a toda experiencia
(apriórica).
Este preguntar es entonces algo que caracteriza al hombre como tal, entonces, a
partir de ello, podríamos decir que el hombre es un animal que pregunta.
De esta manera se puede manifestar la idea del hombre como ser pensante, ya que
sin su razonamiento, reflexión y creación, no surgirían las preguntas sobre la
utilidad de la filosofía.
La inquietud por el sentido es el rasgo más propio de este ser paradójico y complejo
que es el hombre. El hombre ha sido puesto en el mundo a la búsqueda de sí mismo
y de su porvenir.

3. Según el filósofo Immanuel Kant las preguntas que impulsan a la metafísica son
cuando el hombre se interroga ¿qué es lo que yo puedo saber?, en cuanto a lo moral
¿qué es lo que yo debo hacer?, y con respecto a lo religioso ¿qué me cabe esperar?
Estas preguntas llevan al hombre a cuestionarse sobre el sentido de su existencia y
a su vez estas preguntas se reducen a la expresión de decir: ¿qué soy yo y cuál es
el sentido de mi vida?
Desde y con la reflexión filosófica se da el arte del preguntar, un arte que se anima
a interrogar.
El hombre es el cuestionante y el cuestionado, es el preguntante y el preguntado, la
relación es de sujeto a sujeto (se cuestiona a sí mismo).
En conclusión, la inquietud preguntadora del hombre no cesa ante ninguna
respuesta, particularmente cuando se trata de sí mismo; el conocimiento de sí
mismo es una tarea que se le impone al hombre e interpela su libertad, por el hecho
mismo de ser hombre.

4. El hombre posee una conciencia autorreflexiva, denominada: conciencia testigo, es


decir, reflexionarse sobre sí. El conocimiento de sí mismo, es el primer aspecto que
tiene que ver con la experiencia de la conciencia autorreflexiva (preguntante y
preguntado). La segunda experiencia de la paradoja tiene que ver con la experiencia
de la tendencia a la autorrealización (nunca está plenamente satisfecho ya que
consiste su destino en buscar el último sentido de su vida).
El autoconocimiento y la autorrealización, son dos experiencias que constituyen la
inquietud radical del hombre, es una cuestión permanentemente presente en el acto
mismo de existir.

5. El filósofo alemán, Platón, en su libro: “La alegoría de la caverna”, nos hace suponer
que en el interior de una montaña existe una caverna muy profunda. La luz que
entra desde el exterior se va extinguiendo a medida que llega al fondo de la caverna.
La caverna es amplia. Se puede vivir en ella. En el fondo de la caverna, hay un grupo
de personas sentadas, encadenados, mirando la pared. Detrás de ellos hay un gran
fuego. En el espacio entre los prisioneros y el fuego, otros hombres caminan,
paseando objetos que llevan por encima de sus cabezas. Caminan. Van y vienen.
Hablan entre sí. El fuego ilumina esos objetos, que proyectan sombras hacia la
pared, como si fuera una película que está siendo observada por los encadenados.
Ellos ven unas sombras deformadas que confunden la horma real de las cosas.
Ninguna de esas sombras representa literalmente al objeto real. Nada de lo real se
proyecta como sombra tal como es. La sombra, para Platón, no es algo real. Los
encadenados confunden apariencia y realidad. No pueden darse cuenta de que lo
que están viendo son sombras. Están encadenados desde siempre y ya están
habituados. Han incorporado sus cadenas y las sombras como parte de su realidad.
Evidentemente, los encadenados no podrían, de ninguna manera darse cuenta de
que hay otra realidad detrás de ellos, ningún prisionero podría darse cuenta, porque
se encuentra acostumbrado.
El exterior de la caverna es, en realidad, el mundo real, y este mundo de sombras
del interior de la caverna, es un mundo de apariencias porque no pueden darse
cuenta que lo que están viendo son, en realidad, sombras.
La liberación del esclavo es la acción liberadora de la filosofía; la aventura del
esclavo fuera de la caverna representa la experiencia filosófica; el mundo fuera de
la caverna es el mundo de las ideas, el único verdaderamente real; el Sol que ilumina
el mundo verdadero es la idea de Bien, que guía al conocimiento; el retorno del
esclavo es el deber del filósofo de implicar a la sociedad en la experiencia de la
verdad; la incapacidad del esclavo de readaptarse a la vida de la caverna es la
inadaptación social de los filósofos.

6. En el mito de Platón, la caverna oscura es nuestro mundo; los esclavos encadenados


son los hombres; las cadenas son las pasiones y la ignorancia, ya que los prisioneros
prefieren vivir encadenados dentro de la caverna y no ver la luz, vivir en la
ignorancia y la función que cumple el filósofo es sacarlos de la ignorancia y
mostrarles el mundo real a todos los que están encadenados. La luz representa la
verdad, el muro, la separación entre verdadera y falsa realidad. Al hablar de las
cadenas en el mito de Platón se refiere a que son formas subjetivas de atarnos
¿Cuáles son nuestras cadenas? El lenguaje, nuestro cuerpo, los miedos, los
prejuicios, los mandatos, la religión, la sociedad, la política, la economía, etc.
Aunque nosotros no lo percibamos, estamos encadenados. El filósofo Heidegger lo
denomina “El impersonal se”: todos pensamos como se piensa, consumimos lo que
se consume, hacemos lo que se hace… Nuestra autonomía se vuelve limitada por el
dispositivo del autoengaño, y en la confusión entre lo real y lo aparente,
terminamos siempre a disposición de las necesidades del poder. La normalidad
determina inauténtica nuestro existir. Es como una corriente, hace lo mismo que
todos, se entrega al mundo del “se”.
En cambio, el filósofo Karl Marx lo denomina “Alineación”: ya que pensamos ideas
que otros necesitan que pensemos, compramos mercancías que otros necesitan que
compremos.
A diario estamos atados a distintas cadenas de las cuales somos inconscientes.
“No es la conciencia del hombre la que determina su ser, sino, por el contrario, es
su ser social el que determina su conciencia”.

7. Relación entre filosofía y educación: a partir de ellas se desarrollan las implicancias


e interacciones. De manera comparativa, esta relación es similar al clásico
enunciado del huevo o de la gallina: ¿qué es primero la filosofía o la pedagogía?
Estos conceptos están intrínsecamente relacionados ya que uno no es sin el otro,
es decir, la filosofía sin educación no puede cumplir a cabalidad su trabajo y liberar
a las personas de su ignorancia. El filósofo se vale de la educación para transmitir
sus preceptos y sin ésta sería imposible lograrlo. Mientras que el educador se vale
de la filosofía para poder organizar sus conceptos y así transmitirlos de manera
lógica y acertada a sus alumnos.
Filosofía de la educación: es una disciplina que estudia el fenómeno educativo y las
teorías sobre el mismo desde una perspectiva racional, con el deseo de ofrecer una
explicación estimativa sobre la educación humana.

Karl Marx y Georg Hegel son considerados dos de los más destacados pensadores
en la filosofía contemporánea occidental. Hegel sostenía el mundo de las ideas
(idealismo) y Marx el mundo material (materialismo absoluto).
Hegel era idealista y espiritualista, consideraba “la idea” como base de todo
conocimiento, y que tanto la idea como el espíritu son la esencia de la realidad.
Mark considera a la materia (agua, tierra, aire y fuego) como a la única realidad en
el mundo y que el ser humano está sujeto a la materia y obtiene beneficio de ella.

Potrebbero piacerti anche