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Repensando la Organización del Siglo XXI

Alejandro Marchesán
Autor de El Líder que Sirve
Dunken

La organización del siglo que recién se inicia, cualquiera sea su actividad, se


encuentra atravesando un proceso donde necesita repensarse, considerando su
desarrollo y el estilo de gestión que tiene. Ante las distintas demandas del mercado, las
tensiones internas, la alta rotación y pérdida de talentos y en especial, los recortes de
rentabilidad por la excesiva competencia y crisis de precios, la dirección y el liderazgo es
convocado a estar sensible a lo que sucede y con una importante capacidad de
anticipación respecto de “hacia dónde va la demanda” y el valor agregado que, ya no
sólo busca al cliente externo… sino también el interno. En esta reflexión surgen algunos
ejes conceptuales a tener muy en cuenta, como por ejemplo:
 La expansión del conocimiento y su valor en el mundo de la empresa.
 La noción de empresa hoy: debilidades y necesidades.
 El mundo, la región y el país que vienen y su mayor desafío: La ética en
la gestión.
 La cultura de la gestión integrada basada en la cooperación solidaria la
cual postula que “Mejor gente realiza mejores procesos que generan
mejores negocios”.
 Confianza y flexibilidad para transitar los cambios vertiginosos en un
mundo complejo.

Todo empresario debe ser consciente de la profundidad y de los alcances de estos


ejes conceptuales. Tenerlos en cuenta le permitirá ser efectivo a la hora de poder
observar el estado de situación de su organización y desde allí pensar en un proceso de
desarrollo y gestión organizacional que eleve los estándares de su eficiencia en un marco
de equilibrio entre el borde humano y el productivo.

¿Qué necesita la empresa actual para hacer más eficiente su gestión?

 Generar diferencia distintiva a partir de su gente.


 Desarrollar fortaleza adaptativa y flexibilidad.
 Coordinar acciones en un marco de cooperación solidaria.
 Entrenar a sus líderes como facilitadores que sirvan a la gente, a la
empresa y a su entorno, con estilo y competencias.
 Crecer sistémica y ordenadamente para garantizar un desarrollo
sustentable.
En esencia la empresa actual necesita tener capacidad de respuesta. ¿Cómo se
va construyendo esta capacidad? ¿Qué desafíos enfrenta?
Entre sus mayores necesidades y desafíos está la competencia de cada uno de sus
integrantes y especialmente de sus líderes, para comenzar a observar la organización
como un todo, pensando globalmente y actuando localmente.
Pensar sistémicamente para luego actuar enfocando la necesidad presente, es un arte
que está en el inicio de su desarrollo. Aún continuamos con gerentes que hacen y hacen
localmente, con la ilusión de que los resultados puntuales le den eficiencia a la gestión
global, y cuando esto no sucede se auto justifican pensando… y diciendo que, al menos
en su área, los resultados fueron alcanzados. Este modelo mental y de gestión no es
sustentable en el tiempo.
Es tiempo de pensar a la organización como un ente vivo… con sus diferentes
sistemas, tal como una persona. Miramos a la organización con sus cuatro sistemas
centrales desde la figura metafórica que denominamos:

Estrella Organizacional

SISTEMA FUNDACIONAL –SF-

SISTEMA OPERATIVO –SO- Estrella Organizacional SISTEMA PRODUCTIVO –SP-

SISTEMA SOCIAL –SS-

¿Qué representa, haciendo uso del pensamiento metafórico, esta estrella


organizacional? ¿Qué significa cada uno de estos sistemas que conforman la
organización? ¿Qué representan y qué encontramos en ellos?
Cada uno de ellos funciona, así como los sistemas del ser humano de manera
autónoma, interdependiente y solidaria. Autónoma en virtud de que tiene su propio
diseño, objetivos y desempeño. Interdependiente a partir que da y recibe de los otros
sistemas para desarrollarse y brindar la prestación que se espera de él. Solidaria en su
funcionamiento pues siente y se resiente, afectando a los tres restantes con su
desempeño y viceversa, siendo afectado por el desempeño de cualquiera de los otros
tres.
Capitales necesarios en los sistemas de la organización

En los sistemas de la organización encontramos diferentes capitales que lo


constituyen, cada uno para un diferente propósito que, en su complementación,
responderán al fin común de la organización.

SF
Capital Accionario

Estrella Organizacional
SO SP
Capital Institucional Capital Productivo

SS
Capital Humano y Social

Una organización requiere el aporte del capital necesario en cada uno de sus sistemas
para funcionar con equilibrio, crecer y ser sustentable en el tiempo.¿Qué aportan cada
uno de estos capitales?

Capital Accionario en el SF

El accionario es el capital de inicio, motivo por el que se encuentra en el sistema


fundacional. Cuando una organización o empresa comienza, será necesario que los
fundadores aporten la misión, esto es “quiénes son como organización y para qué están”,
una visión haciendo claro “qué se proponen lograr y cómo será la realidad cuando
suceda”. Este es el sentido por el cual el SF se encuentra en la punta norte de la estrella
de sistemas y no en la base… a pesar de llamarse “fundacional”. Será el sistema social
quien, en la base de la estrella, se encargue de brindar estabilidad a la organización.
Nuevamente, el SF definirá su misión y propondrá la visión de la organización. Visión que
buscarán fortalecer con la participación de los líderes y referentes de la organización.
También será parte del capital accionario, el marco de políticas y estrategia de inicio,
y claro, la inversión de dinero para instalar y realizar la puesta en marcha de la
organización la cual requerirá, entre otras cosas, de personas y equipamiento que darán
vida simultanea al sistema social, operativo y productivo.
En la vida de la organización, los accionistas o dueños deberán velar cuidando su
responsabilidad en términos de aporte de capital accionario con el fin de facilitar la vida,
el desarrollo y el crecimiento sustentable de la organización.

Capital Humano y Social en el SS

El sistema social es el sistema de la gente, y por tanto requiere el aporte de capital


humano y social. Son las personas que, con su vigor en términos de (como lo califica el
Banco Mundial) salud, nutrición y educación, aportan a la organización su oficio,
formación, competencias, experiencia y muy especialmente en estos tiempos, el
intangible pero diferencial capital social en términos de compromiso, confianza,
comunicación y cooperación solidaria.
En este sistema aparece una de las combinaciones más críticas en los días de extrema
demanda y tensión que viven las organizaciones: el que refiere al equilibrio entre el
bienestar físico y emocional de la gente y las competencias sociales y profesionales que
brinden en conjunto. ¿De qué sirve que el personal de una organización se encuentre
vigoroso y emocionalmente equilibrado si, por sus acciones y competencias, es incapaz
de hacer efectiva a la organización? Peor aún ¿Cuan sustentable es ser muy competentes
y aún aportando una alta cuota de capital social, si las personas se enferman y viven
estresadas? Un sistema social vigoroso, productivo y sustentable, se ocupa del bienestar
de las personas, esto incluye el clima y lugar de trabajo, y de facilitar el desarrollo de
cada uno para hacer eficiente su gestión y la del equipo que forma parte.
En el sistema social encontramos los “como´s” de la organización, esto es, cómo se
hace lo que se hace. ¿Cuáles son los valores que dan sentido y contenido a la acción?
¿Cómo se viven y cuáles son los comportamientos esperables, y por tanto observables,
de las personas en relación con los valores de la organización?
¿Qué sucede cuando una persona se incorpora a un sistema social ya en marcha y
funcionando? La tendencia es que se amolde al status quo existente y replique las
creencias y prácticas existentes. Si los valores están “dibujados” en la pared y nadie los
vive, harán eso mismo, ignorarlos. Si encuentra un sistema social que fue constructor de
los valores y los vive con compromiso, hará eso mismo, procurar vivirlos.
En resumen el sistema social pone el foco en las personas y las relaciones, en su
bienestar, en sus capacidades y en sus desarrollos ya que todo esto definirá el perfil de
cómo se hacen las cosas que se hacen en la organización. En cualquier organización del
mundo y sin valer en este análisis la actividad que desarrolla, existe un sistema social
que sustenta el “cómo hacen lo que hacen”.
Cuando unimos al Sistema Fundacional con el Social tenemos el Eje vertical que
denominamos Eje Humano de la Organización. En este Eje se desempeña nuestro foco,
compromiso y responsabilidad al brindar nuestros servicios, especialmente, en la
construcción de un Sistema Social Fortalecido capaz de sostener al eje horizontal que
denominamos Eje Productivo, compuesto por el sistema operativo y el sistema
productivo.
Capital Institucional en el SO

En el sistema operativo es necesaria la construcción de capital institucional que haga


predecible y sustentable a lo que se hace. En este sistema observamos lo que la
organización hace.
Si es un hospital vemos que, por ejemplo, se toman turnos, se atiende pacientes en
consultorios externos, se realizan intervenciones quirúrgicas, se realizan tratamientos
extensos, se interna a las personas, se realizan campañas locales de atención
comunitaria, se hace escuela hospitalaria, etcétera, el SO es el responsable de brindar
todo lo necesario para que el SS, que ya trabajó en el “cómo hacer” … pueda ahora
“hacer” dado que cuenta con el respaldo de equipamientos, procesos y tareas
“institucionalizados como capital”. El hecho de que no haya gasas en un hospital o el
equipamiento para una tomografía, es un problema en el SO, el cual afecta inicialmente
al SS ya que, por más compromiso y vocación puesto en el servicio, verá afectado su
accionar por la carencia de elementos. Por otro lado, si a pesar de contar con toda la
tecnología en el SO, las personas viven en una cultura de la queja o la insatisfacción,
existe un problema en el SS, y si ambas cosas suceden, quejas y escasez de
equipamiento, el problema ocurre en los sistemas operativo y social el que terminará
impactando en el productivo y en el corto o mediano plazo, en el fundacional, lo cual
significa estar en presencia de un problema sistémico.

Capital Productivo en el SP

Aquí aparece el capital que termina siendo el feedback que recibe la organización en
cuanto a su sentido, propósito, objetivos… qué hace y cómo hace lo que hace. Este
capital productivo hace referencia a un primer indicio simple y directo que es el producto
propiamente dicho y cómo este “entregable” es aceptado, recomprado y aún
recomendado. Una comida, si fuera un restaurante, la calidad y seguridad de un vuelo, el
aprendizaje en una instancia educativa, el rendimiento y durabilidad de una maquinaria,
la prestación de una tecnología, la mejora y el desarrollo de una gestión pública y todo
aquello que se pueda considerar como un producto acerca del cual encuentra o no
satisfacción conforme a sus expectativas.
Ahora bien, observemos que este producto… hecho por personas mediante un
sistema productivo, requiere de proveedores y clientes para transformarse en un
negocio. Si pudiésemos plantear una ecuación acerca de esta idea diríamos que:

Proveedores + Producto + Clientes = Negocio

Si la organización logra hacer buenos negocios tendrá un sistema productivo sólido.


Sin embargo, el hecho de que la empresa logre tener un buen producto germinado de
su sistema operativo y haga buenos negocios comprando bien (proveedor) y vendiendo
mejor (cliente), no es indicio suficiente para que el negocio y el crecimiento que suponen
estos negocios, sea sustentable. Si bien la ecuación planteada es esencial, como también
lo es la ganancia en términos de satisfacción del cliente y rentabilidad directa entre hacer
el producto y venderlo, esto no alcanza para sostener a la organización en el tiempo.
Cuando pensamos en términos de sustentabilidad es más importante aún la presencia
e incidencia del eje vertical de nuestra estrella de sistemas, esto es el SF y el SS que
denominamos Eje Humano.
Son estos sistemas los que aportan dirección, equilibrio, capital social, flexibilidad y
adaptabilidad para sostener a los sistemas operativo y productivo, esto es, qué hace la
organización que culmina en un producto y con quiénes lo hace, a partir de ese
producto, hace negocios con proveedores y clientes. Esta es la razón por la que el SS
social está en la base de la estrella, por el simple hecho de que las personas presentes
en el sistema operativo y productivo, le dan sustentabilidad en el tiempo a lo que se hace
y con quiénes se hace.
El eje horizontal de la estrella definido por el SO y el SP es quien motoriza la acción y
los resultados de la organización, mientras el eje vertical tiene la responsabilidad de velar
por la misión, el norte, la visión, los valores, la relación con la sociedad y el mercado, con
el presente y el futuro, con los cambios y desafíos mientras la organización hace lo que
hace, siendo productiva y rentable.

Coaching Organizacional Sistémico

Al entender la organización como un “sistema vivo” que se forma y conforma en


cuatro sistemas centrales con sus variados subsistemas y procesos (logística, compras,
pagos a proveedores, cobranzas a clientes, etcétera) nuestros servicios de consultaría se
centra en la:

 asistencia personal para el desarrollo y el mejor desempeño de sus distintos roles


basados en la generación de capital social y competencias genéricas.

 actividad de coaching organizacional, para asistir y facilitar el desarrollo y


crecimiento sustentable de los diferentes sistemas de la empresa.

Conclusión
Miramos a la organización como un todo, globalmente para, según las
necesidades, actuar localmente en los diferentes sistemas y, especialmente,
para fortalecer el SISTEMA SOCIAL…el Sistema de la Gente que brinda
sustentabilidad organizacional.

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