La falla de la educación generalizada

A través de los años, la educación ha sido establecida como un derecho fundamental del ser
humano, y mediante esta, se espera la formación intelectual y personal del individuo para un
futuro tanto profesional como moral. Para esto, ha sido cambiada desde sus orígenes (Que
parecen tener una raíz tan antigua como la sociedad misma), donde se enseñaba religión y las
costumbres de los sitios de donde se impartía; hasta llegar al punto que conocemos hoy en día,
que establece a través de los años una serie de tópicos o materias a abordar con el fin de impulsar
la inteligencia en cada aspecto de la vida del ser humano (O es lo esperado).

Ahora, al observar no muy lejos, en cualquier institución educativa bumanguesa, es obvia la falla
del sistema educativo establecido, que generaliza la capacidad del alumno. Esto es evidenciado
tanto en la mortalidad como en la deserción, que a pesar de los esfuerzos de los educandos y de
las instituciones que velan por la calidad de la impartición intelectual, pareciera ir aumentando
cada vez más. La pregunta yace entonces en ¿Cómo un sistema moderno de educación, algo que
ha estado desde los inicios de la sociedad humana, parece ser una falencia ante el individuo que la
toma?

El problema radica en la solución implantada al aumento de las masas en necesidad de educación:

La generalización de la misma. Al observar el sistema educativo actual, o por lo menos en general
en Colombia y en gran parte del mundo, no existe lugar del sujeto para el crecimiento de sus
habilidades individuales tanto a nivel intelectual como en nivel de personalidad. El alumno es
sometido, en un sentido cruel de la palabra, a decidir a permanecer como parte del grupo o a no
estudiar. Esto se ejemplifica no sólo en la impartición del mismo programa pedagógico para cada
sujeto, sin importar las cualidades que destacan intelectualmente en este; sino también el
establecimiento normativo de la vestimenta y la expresión corporal y social del alumno. Bajo estos
parámetros, el sujeto se suprime como individuo para ser una institución que pareciera perder
cada vez más identidad debido a la falta de esta por quienes la integran.

Aunque pareciera obvia la solución, acudiendo a la educación individual del alumno, esto implica
una decadencia en el número de graduados más grande que el nivel de deserción o mortalidad
escolar; pero en cuestión de calidad, enfocarse en las destrezas personales pareciera hacer un
gran incremento por el interés del sujeto y por lo tanto, por las posibilidades de este de mejorar a
un nivel que la educación masiva no podría alcanzar, aunque por supuesto, se necesita siempre de
la presencia de lo básico para hacer a un individuo funcional y hábil socialmente. Tomando como
ejemplo la escritura: Es necesario que cada individuo tenga el aprendizaje de escribir, pero no es
necesario que alguien a quien se le dificulta la elaboración de un ensayo y que no espera tener una
vida profesional relacionada con esta área en específico sea obligado a realizarlo y evaluado en
este parámetro.

A pesar de esto, es posible pensar en una forma de dejar ser al individuo en el sistema educativo.
Esto podría iniciarse con el aplazamiento de la edad del inicio de la vida estudiantil, ya que
Colombia es uno de los únicos países donde se puede ingresar a un grado de educación teniendo
tan sólo 1 año de edad.

Al revisar teóricamente el inicio de una educación a tan temprana edad, es posible encontrar
grandes falencias en lo que muchos padres actuales considerarían una venta, siendo la más
importante la anulación de la infancia y por lo tanto de la personalidad de individuo. Si
observamos la corriente psicoanalista, ésta establece que los primeros 5 años de vida de un sujeto
determinan tanto la personalidad como la forma en que este observa su entorno y su alrededor.
Esto es llamado ‘Determinismo psíquico’. Se establece como ideal que el niño posea la presencia
de sus padres la mayor cantidad de tiempo durante esta etapa temprana de vida para la formación
adecuada de su ser, pero al ser impedido por el colegio, el desprendimiento temprano de sus
progenitores agrava la crisis que de por sí ya es generada por el inicio de la vida escolar.

El distanciamiento emocional, y la adecuación a una nueva rutina, no sólo perjudican la formación

social del individuo, sino que también produce un desinterés por la vida escolar. Sumando la
posibilidad de rechazo por los compañeros y la actitud agresiva de algunos profesores que, sin
pensar en el futuro del alumno, bombardean constantemente al niño con gritos y discursos
lacerantes son grandes explicaciones a muchas de la muestras de la falla educativa: El desinterés,
la falta de verdadero aprendizaje, problemas emocionales en el alumno, y, en algunos casos,
incluso suicidios debidos a la incomprensión de la institución por el sujeto.

En conclusión, el sistema educativo muestra fallas a nivel general, al intentar hacer objetivo la
impartición del conocimiento a individuos completamente subjetivos. A pesar de esto, la solución
no es individualizar del todo la impartición del material intelectual provisto por los sistemas
pedagógicos, tanto por la funcionalidad del sujeto como por la demanda de las masas, sino llegar
promover estrategias para el correcto desarrollo del sujeto.

Preguntas:

¿Considera usted justo evaluar un grupo tan grande de alumnos bajo los mismos parámetros sin
tener en cuenta las diferencias individuales?

¿Es indicado impartir filosofía a alumnos con poco interés de aprenderla y sin interés de vincularse
profesionalmente a esta? Si es así ¿Considera que podría hacer una evaluación objetiva de un
tema filosófico?