- El mito de la caverna platónica representa primeramente el proceso del
conocimiento en el cual no debe existir una noción de tiempo ni un plazo determinado, es decir que se manifieste la libertad de tiempo para así llegar a saber; por el contrario, si se carece de tiempo para pensar y se toman decisiones apresuradas no será conocimiento, Platón lo llama esclavitud.
- El tiempo y la opinión se dictaminan según sus circunstancias, ya que si
pone en tela de juicio una cuestión y se comparten distintas opiniones sin demostración alguna de que sean propiamente verídicas, que tienen como resultados conjeturas si convicción alguna. Pero cuando esta convicción es efectiva en cierto modo y la abandonamos, ahí ocurre un duelo, es decir dolor por algo que era válido y se desechó; tal es el caso de las relaciones amorosas, en la cuales sientes ese dolor porque tu pareja ya no está contigo y entras en la represión de que los planes y proyectos que realzarían juntos se han derrumbado; solamente esperar con el tiempo una necesaria reconstrucción.
Las convicciones no son solo pensamientos de nuestra mente, sino
guías en nuestra vida. Tampoco se deben malinterpretar con las modas, por ejemplo: se pone de moda cierto cantante, se escucha en todas partes, se aprenden todas sus canciones, compran camisas con su nombre y cuando pasa de moda se olvidan de él y sin ningún duelo empiezan a escuchar a otro cantante.
- El ideal del racionalismo se emplea como un mecanismo dentro del
ejercicio del pensar y que se torna en base a lo que se piensa y realmente se puede demostrar, o sea pensar por sí mismos, no a partir de ideas o pensamientos de otros. Desde las diferentes perspectivas se trata de concebir un pensamiento por cuenta propia bajo fundamentos que impliquen certeza para así luchar de una u otra manera por nuestros ideales, aunque sabiendo que estos no se realizaran con total plenitud, llevándolas como guía para construir algo positivo.
Pensar en el lugar de otros se determina como ese estado en que se
puede tergiversar la información dentro de un dialogo que puede terminar en una ridiculización del individuo al otro, es decir al plantear una cuestión lo ideal sería en qué medida podría tener razón, no tratar de criticarlo ni hacerlo pasar en vergüenza, sino tratar de ayudarlo de la forma más adecuada aportando sus diferentes puntos de vista para así tratar de dar a entender de una mejor forma el planteamiento.
Ser consecuente, se trata de aceptar ese duelo cuando nos
mantenemos en una posición y que esta puede estar errada, necesita ser corregida y así mejorarla y tratar de esclarecerla de la mejor forma, sin llegar a la terquedad. Este principio ya que cuando vemos que estamos equivocados, nos duele, pero el ideal consiste en afrontar nuestros errores de una u otra forma y así tener una visión más racional acerca del tema que está en cuestión.
- El conocimiento como idealización y desencanto nos transmite una
concepción más estrictamente conceptualizada del conocimiento, el cual para formularse una idea, se debe tener el suficiente tiempo para analizarla y exponerla, además de discernir desde diferentes puntos de vista para juzgarla. Otro punto importante radica en nuestro narcisismo y este se nos presenta en todo momento y lugar; creemos tener respuestas a cualquier problema, pero no sabemos realmente si lo que decimos es con convicción o solamente hacemos comentarios tergiversados y banales.
- El conocimiento como conquista personal nos explica la compresión del
asunto, esta adquisición del conocimiento debe ser de un modo personal, de cada quien según sus capacidades, experiencias con las cuales desarrolle ese proceso de conocimiento racional desde cual ámbito que se presente dentro de su vida.
‘‘Todo lo que nos da nuevos conocimientos, nos da la oportunidad de ser más