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Uno de los siete mil

Siete mil no se vendieron, siete mil no se postraron


Siete mil no aceptaron, el manjar de Jezabel.
Siete mil que no cambiaron el llamado y la unción
Siete mil pagando el precio, por la victoria de la nación

Como Elías estos hombres rechazaron todo mal


No cambiaron la verdad por la farsa de Baal
Más cuando el fuego en el Carmelo, hizo hasta el agua secar
Los siete mil no se cansaban de adorar

Coro
Donde están los siete mil que van a adorar
Donde están los siete mil que no van a parar
Donde están los siete mil que aún tienen coraje
De enfrentar el pecado y la maldad
Yo soy de los siete mil no voy a desistir
Yo soy de los siete mil llegare hasta el fin
Si fuera preciso enfrentare batallas, Dios peleara por mi.
Yo soy de los siete mil, yo soy siete mil
Que va mantenerse fiel, y ver fuego del cielo derramándose
Hoy aquí.

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