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EGIPTO

La civilización egipcia se desarrolló en torno al río Nilo. Este río, que nace en el
centro de África en una zona de clima tropical, sufre crecidas en sus aguas en
los meses de verano por el ritmo de lluvias propio de este clima.

Con las lluvias se inundan sus orillas y se deposita un limo que convierte en muy
fértiles las tierras que el agua había cubierto. El origen de la civilización egipcia
y de su temprano desarrollo se ha unido siempre a esta peculiaridad de su río,
que al proporcionar buenas cosechas favoreció el aumento de población.

1. UBICACION GEOGRAFICA

Egipto es país situado al noreste del continente africano. Egipto es un verdadero


desierto, sin lluvias y sometido a altas temperaturas.

En la antigüedad limitaba:

 POR EL NORTE: Mar mediterráneo


 POR EL ESTE : El Mar Rojo y el Istmo de
 POR EL SUR : Nubia Suez
 POR EL OESTE : El desierto de Libia
1.1 REGIONES

Tiene 2 regiones que son las siguientes:

a. El Alto Egipto: Esta región se encuentra en el sur del país y comprende desde
Assuan hasta el Cairo, esta zona es montañosa (la Arábiga al este y la Líbica al
oeste) y favorece al Nilo para que exhiba sus famosas cataratas.

b. El Bajo Egipto: Esta región se encuentra en el norte del país y se extiende


desde el Cairo hasta el Mar Mediterráneo.

Esta parte de Egipto esta formada por tierras bajas, pantanosas y fértiles que
son irrigadas por los siete brazos con que desemboca el Nilo en el Mar
Mediterráneo y que forma el Delta (territorio que tiene la forma parecida a la letra
"D" griega),

2. ASPECTO POLITICO

2.1 EVOLUCION HISTORICA DE EGIPTO

La evolución histórica de Egipto abarco algo mas de 4,000 años y comprende los
siguientes periodos:

a. Periodo Legendario: Este primer periodo. Fue gobernado por los reyes. Los
hombres vivían primeramente formando clanes y luego formaron agrupaciones
mayores llamadas nomos. Durante este periodo se dividió Egipto en 2 regiones
se estableció el calendario y apareció la escritura jeroglífica.
b. Periodo Mefítico: Llamado así por el desarrollo que alcanzo la ciudad de
Menfis, gobernada por Menees. Durante este periodo se construyeron las
famosas piramides Keops, Kefren y Micerino, y también se dio impulso a la
cultura
mediante la creación de bibliotecas.

c. Periodo Tebano; Tuvo como capital a la ciudad de Tebas en este periodo se


construyo el edificio del laberinto, y el lago artificial de Meris En este tiempo al
darse las guerras civiles fueron invadidos por los hicsos

d. Periodo del Apogeo: Como su nombre lo indica Egipto logra su máxima


expansión con los faraones: Tutmosis, El Grande y Ranses II.

e. Periodo de la Decadencia: Las luchas candentes entre los pobladores del


alto y bajo Egipto lo debilitaron políticamente y favorecieron las conquistas de
los persas, comandados por Cambisis, la de los griegos guiados por
Alejandro el Grande y la de los romanos quienes comandados por Octavio
vencieron a Cleopatra en la batalla de Actiun.

2.2. CARACTERÍSTICAS

El gobierno Egipcio se caracterizo por ser:

a) Teocrático.- Porque el faraón era considerado como un Dios, hijo del divino RA
(sol), el cual gobernaba despóticamente, todos los hombres le debían suma
reverencia y ninguno de ellos podía pronunciar su nombre sin antes añadir la
expresión "que florezcan en la vida y la salud".

b) Monárquico.- Porque el gobierno estaba en manos de una sola persona, el


Faraón, quien estaba rodeado de una gran corte constituida por funcionarios,
sacerdotes, guerreros, etc.

c) Absoluto- Porque el faraón era el dueño absoluto de todo: de los hombres, de


la tierra, de las aguas. Su voluntad la expresaba a través de la ley.

2.3 0RGANIZACION POLÍTICA

El gobierno Egipcio estuvo organizado de la siguiente manera:


a) EL FARAÓN

Monarca absoluto dueño de todo y que podía disponer de la vida y bienes de sus
súbditos. El faraón era considerado juez supremo, primer sacerdote y jefe del
ejército ante el cual acudían todas las personas, era rey y dios al mismo tiempo,
vivía rodeado de una numerosa corte.

Su autoridad se ejerce por intermedio de los funcionarios, estrictamente


jerarquizados, y reclutados entre los escribas o egipcios instruidos, y el
ejército, mitad nacional y mitad mercenario.

El Estado egipcio se fundamentó sobre la autoridad absoluta y divina del


faraón. Se le consideraba como la encarnación del Dios Ra en la tierra. De él
emana todo en Egipto, su poder sin límites alcanza a todos los campos:
político, religioso, militar y social. Sus deseos son órdenes inexorables. Es
dueño de todo. A él se le atribuye la prosperidad del país.

b) EL ESCRIBA REAL

Era una persona que dominaba la matemática y la escritura, y que se encargaba de


llevar el calculo de los ingresos agrícolas, y de supervisar las actividades
industriales-y comerciales.

Los escribas redactaban los documentos oficiales y llevaban las cuentas de


los impuestos reales y las mercancías que entraban y salían de los
almacenes de palacio.

Por lo general, pertenecían a familias ricas. Gozaban de gran prestigio y


tenían una buena posición económica.
Los escribas conocían la escritura y cuya utilidad era indispensable para
transmitir exactamente los mandatos del poder central y para llevar el registro
de los impuestos, de los linderos de las fincas que anualmente eran borrados
por las inundaciones y los censos de personas y animales.

Los escribas eran, en general, hombres ilustrados cuya cultura estaba muy
por encima de la de los mismos gobernantes que los mandaban. Su labor era
difícil, puesto que, antes de la invención del dinero, los impuestos se pagaban
en especies o en trabajo. Existían escribas agrimensores, censores,
aduaneros, aunque la mayoría de ellos estaban ocupados en la corte y en los
templos. Hubo verdaderas escuelas de escribas en que la disciplina era muy
severa.

c) EL GRAN VISIR.

Cuando la organización del Estado se complicó más, el faraón se ayudaba


con una especie de primer ministro, el visir, que podía intervenir en todos los
asuntos del Estado.

Los deberes de este funcionario eran abrumadores, ya que tenía que cumplir
al menos treinta funciones esenciales: Ayudaba ha administrar justicia en las
provincias (nomos), presidía el tribunal supremo de justicia; dirigía la
recaudación de impuestos; supervisaba el tráfico de mercancías por el Nilo;
regulaba los tributos que debían pagar los estados vasallos, entre otras
funciones. Tutmosis III lo definió como el "cargo sobre el que pesa todo el
país".

El cargo de visir nunca fue hereditario, aunque, durante algunos períodos, fue
desempeñado por miembros de una misma familia. Su elección pertenecía
exclusivamente al faraón. En muchas ocasiones, accedieron a él personas de
la más humilde condición.

d) EL JEFE DE SELLO DEL ESTADO

Encargado de la administración de las Rentas, es decir de los ingresos y egresos


del Estado.

e) EL GRAN SACERDOTE

Encargado del culto religioso, el cual tenia la obligación de presentar al faraón


como descendiente de los dioses.

Los sacerdotes eran los todos poderosos en la civilización egipcia, por el


prestigio mismo de su dignidad y por sus inmensas riquezas. Cada colegio
estaba dirigido por un gran sacerdote. Tenían a su servicio a miles de
personas que trabajaban para ellos o que debían darles parte de sus
cosechas.
3. ASPECTO SOCIAL

El pueblo Egipcio estuvo conformado por clases privilegiadas y no privilegiadas.

3.1 Privilegiadas

a) EL FARAÓN

El país pertenece al faraón, hijo de Ra, el sol, encarnación del dios halcón
Horus. Se le rinde culto como a un dios, y los artistas lo representan con
atributos divinos: el halcón y el disco solar encerrado entre dos cuernos.

Divinidad absoluta dueño de todo, vivía con todos los lujos. Su verdadero nombre
no podía ser pronunciado por ningún miembro del pueblo ya que contenía un
significado sagrado e incomprensible para el profano. Es por ello que sólo se
le decía faraón, que significa "casa real".

Pese a ser el dueño de todo, debía respetar ciertas normas que velaban los
sacerdotes, como casarse sólo con miembros de su propia familia con el fin
de no contaminar su estirpe divina con la sangre de alguien "inferior".

1) Faraones famosos

 Akhenatón : En el reinado de Akhenatón, fueron abolidos los dioses


tradicionales egipcios; solo se siguió venerando al dios-sol. Para
romper los lazos con los demás dioses, Akhenatón fundó una nueva
capital y cerró todos los templos menos los del dios-sol. La reina
Nefertiti ayudó a su esposo a establecer el culto al dios-sol Atón, y
probablemente reinó conjuntamente con Akhenatón .

 Hatshepsut : Hatshepsut fue una resuelta mujer que gobernó Egipto


durante unos 20 años. Debería haber sido regente en nombre de su
joven hijastro Tutmosis III, pero empuñó con firmeza las riendas del
poder. Llevaba corona de faraón y la barba de ceremonia.

 Ramsés II : Reino en Egipto durante 67 años. Construyó más


monumentos y levantó más estatuas que ningún otro faraón. Entre sus
edificaciones está el complejo funerario de la orilla occidental, en
Tebas, hoy denominado Ramesseum.

 Tutmosis IV : Fue famoso porque mandó a liberar a la gran esfinge de


Gizeh de la arena del desierto que se había acumulado sobre ella.

 Tutankhamón : El rey Tutankhamón subió al trono con 9 años de edad


solamente. Es evidente que le aconsejaron sus altos dignatarios, pero
al parecer decidió restablecer los dioses antiguos abolidos por
Akhenatón.

2) Un reino gobernado por divinos faraones.

En el valle del Nilo se edificaron colosales tumbas para los soberanos


egipcios que durante 3.500 años reinaron como dioses.
Lo más notable y espectacular legado por pueblo alguno del mundo
antiguo fue la obra de una civilización que tuvo sus raíces en la estrecha y
fértil zona del Valle del Nilo y que floreció durante el asombroso espacio
de 3.500 años. El legado de Egipto comprende las pirámides de Gizeh, la
Gran Esfinge y los fabulosos tesoros del rey niño Tutankhamón. Sin
embargo, las reliquias tal vez más notables descansan en la sala de un
museo de la moderna ciudad de El Cairo, donde el visitante puede
contemplar actualmente los rostros de algunos de los más grandes
gobernantes de la historia egipcia, reyes que murieron 2.500 años antes
de que Cristóbal Colón y sus sucesores llevarán a América la civilización
europea.

En el antiguo Egipto, la supervivencia del cuerpo momificado era una


garantía de vida más allá de la muerte. Las profundas creencias religiosas
de los egipcios fueron el origen de su civilización. Dichas creencias
inspiraron la edificación de grandes templos a lo largo del Nilo, templos
que todavía hoy subsisten, tales como las salas de columna de Karnak y
los grandes monumentos edificados por Ramsés II en Abu Simbel.

La religión dictó las normas que inspiraron todo el arte Egipcio, y, pese a
la creencia popular, las pirámides no fueron edificadas por sudorosos
esclavos extranjeros bajo el látigo de brutales capataces, sino por los
propios egipcios que probablemente consideraron su trabajo como un
acto de ofrenda religiosa a sus faraones.

3) Los poderes del faraón

Participar en la construcción de las pirámides y de los templos era para


los egipcios un acto de profundo significado.

Toda la tierra de Egipto y su pueblo pertenecían a los dioses, y en


particular a Horus, a quien, según se creía, el faraón representaba sobre
la tierra en el transcurso de su vida.

Las funciones del faraón consistían en mantener el orden total del


universo, establecido en el momento de la creación, y que abarcaba no
solamente la estructura social y política de Egipto, sino también las leyes
de la naturaleza, el movimiento de los cuerpos celestes, la sucesión de
las estaciones y la inundación y estiaje anuales del Nilo.

Los miles de campesinos que intervenían en el gran esfuerzo de construir


un templo o una tumba para el faraón participaban en un acto que, según
se estimaba, traería espléndidas consecuencias para la tierra y el pueblo
de Egipto.

A todo lo largo de la historia egipcia, el rey dispuso la autoridad absoluta


en todas las esferas de la administración, aunque sus responsabilidades
cotidianas quedaran necesariamente delegadas en su visir y en un
número cada vez mayor de funcionarios. Como solamente el rey podía
llegar a los dioses, él era también el cause gracias al cual los hombres
tomaban contacto con el mundo espiritual. El rey había de interceder ante
los dioses en favor del pueblo, cumpliendo los ritos apropiados y haciendo
a las ofrendas requeridas, con el objeto de que los dioses consideraran
benévolamente a Egipto. En teoría el rey era, por tanto, el sumo
sacerdote de cualquier templo del territorio, y era él quien designaba a
otros sacerdotes para tan alto menester y quien dotaba a los templos de
tierras y rentas.

4) Privilegios del faraón

El faraón podía dedicarse a la caza en los desiertos de Egipto, podían


cazar toros salvajes, gacelas, órices, antílopes y leones. El faraón
Amenhotep III se ufanaba de haber matado más de 100 fieros leones en
10 años; también mató 90 toros salvajes en una cacería.

Por lo general, el faraón no corría peligro en sus partidas de caza: le


acorralaban los toros en un cercado y allí les azuzaban las piezas. Luego,
también utilizaron carros.

Además de la caza, el río estaba rebosante de peces que se podían


capturar con arpones, anzuelos o redes. Los macizos de papiro también
ofrecía gran variedad de aves y gansos. Para cazarlos la técnica consistía
en lanzar un bastón arrojadizo cuando las aves salían volando del macizo.
5) El Valle de los Reyes

Los reyes del Nuevo Reino ya no fueron enterrados en imponentes


pirámides a la vista de todos. Sus tumbas se excavaban ahora
profundamente en la roca, ocultas en un lejano valle solitario llamado el
Valle de las Tumbas de los Reyes, donde se esperaba que estarían
protegidas de los saqueadores de sepulturas. Sin embargo, no siempre
las salvaría esta precaución y así, hacia finales del Nuevo Reinado, casi
todas las tumbas habían sido violadas y saqueadas, dispersado su
contenido y fundido el oro de los tesoros. Excepción notable fue la tumba
de Tutankhamón, cuya cámara interior permaneció intacta.

Aunque, en teoría, el rey designaba a los altos funcionarios, en la


práctica, un hijo sucedía a su padre en los menesteres reales, pese a que
la promoción por méritos no fuera de ningún modo desconocida. Como
fuente de justicia, los edictos del rey eran ley, si bien parece que en esta
época existió un cuerpo de leyes escritas y la mayoría de las querellas
fueron sentenciadas por los magistrados en tribunales locales.

Los rollos de papiro de finales del Nuevo Reino registran el juicio seguido
contra un número de conspiradores acusados de alta traición, y también
un proceso contra ladrones de tumbas acusados de despojar los
sepulcros reales tebanos.

En ambos casos parece que los jueces condujeron sus actuaciones con
exquisita consideración hacia los principios de justicia. A los acusados se
les permitió asumir su propia defensa, y aunque los cabecillas fueron
condenados a muerte, a los demás se les dejó en libertad. Ya mil años
antes de que la civilización griega llagara a su apogeo, los egipcios
pudientes disfrutaban de un grato y complicadísimo estilo de vida.

b) LA NOBLEZA

Los nobles y los sacerdotes formaban los grupos sociales más poderosos de
Egipto. Tenían muchas riquezas y poseían gran parte de las tierras del país.

La nobleza estaba formada por los hijos y familiares del faraón, por los reyes
vencidos y los altos funcionarios.

Los nobles eran los miembros de la familia del faraón y de otras familias a las
que el faraón había favorecido. Gobernaban las provincias en las que se
dividía Egipto. Vivían en grandes villas rodeadas de jardines.

c) LOS ESCRIBAS

Eran personas que sabían leer y escribir perfectamente, eran considerados como
ministros de estado. Ellos se encargaron de llevar los libros de contabilidad, cobrar
impuestos y reclutar soldados.

Los escribas redactaban los documentos oficiales y llevaban las cuentas de


los impuestos reales y las mercancías que entraban y salían de los almacenes
de palacio.

Por lo general, pertenecían a familias ricas. Gozaban de gran prestigio y


tenían una buena posición económica.

d) LOS GUERREROS

Eran soldados de carrera y reclutas, que servían a su patria, ellos poseían muchas
riquezas y privilegios por defender a su país y realizar conquistas.

En los primeros tiempos, los soldados desempeñaron un importante papel en


Egipto, alrededor del año 3000 a. C. Más adelante, los faraones emprendieron
campañas militares fuera de sus fronteras, en Palestina, Siria y Nubia. El
ejército egipcio estaba bien organizado, poseía una jerarquía de mandos
desde el propio faraón hasta los oficiales que mandaban a grupos de
cincuenta hombres, y los escribas castrenses que escribían despachos y
reseñaban las campañas. Había tropas tanto de infantería como de carros.
Los carros egipcios, tripulados cada uno por dos soldados y tirados por dos
caballos, eran de madera. Y servían de plataformas móviles de ataque, desde
las cuales los arqueros podían asaetar al enemigo.

En tiempo de paz, los soldados participaban en tareas civiles como la


excavación de canales de riego o el transporte de piedras desde el desierto
para las tumbas de los reyes.
3.2 No Privilegiadas

a) EL PUEBLO

Estaba conformado por los campesinos, artesanos y comerciantes los cuales tenían
que pagar impuestos al faraón, esta clase baja que no tenía ningún privilegio
conformaba la mayoría de la población.

Los comerciantes, sobre todo, se destacaban como elementos de valor


inapreciable dentro de un imperio rico y próspero, ya que mediante sus
actividades de importación y exportación de mercancías eran quienes, en
gran parte contribuían a mantener la supremacía egipcia.

Los escalones más bajos lo ocupaban los artesanos y los campesinos. Eran
hombres libres obligados a pagar tributos al faraón, bien en especie (entregar
una parte de la cosecha) o en trabajo (participar en la construcción de las
obras públicas). La mayor parte de los campesinos eran los fellah que
cultivaban las tierras propiedad del faraón o del templo, en teoría eran
hombres libres, pero en la práctica estaban sometidos a la voluntad de los
dueños de la tierra.

b) LOS ESCLAVOS

Eran personas consideradas como animales o cosas, encargados de los trabajos mas
duros y pesados (construcción de pirámides) generalmente esta clase desposeída de
todo privilegio estuvo conformada por los prisioneros de guerra, habitantes de los
pueblos dominados así como personas compradas en los mercados extranjeros.

Los esclavos eran distinguidos con una marca, hecha con un hierro candente en la
nariz y en las orejas.

En Egipto existía la esclavitud, pero no en el sentido clásico de la palabra. Los


siervos "forzosos" tenían derechos legales, percibían salario y hasta podían ser
ascendidos. Los malos tratos no eran frecuentes, y cuando ocurrían, el esclavo
tenía derecho a reclamar ante los tribunales, aunque únicamente si el castigo
había sido injusto. Para servir en las mejores familias incluso había voluntarios.
A veces, personas arruinadas se vendían a sí mismas a familias de buena
posición. Los esclavos adscritos al servicio doméstico podían considerárseles
afortunados. Además de alojamiento y comida, su dueño estaba obligado a
suministrarles una cantidad de telas, aceites y vestidos.

Muchos piensan que las pirámides fueron obras de esclavos, pero en realidad
fueron obras de personas libres, eso sí, a contratos que les obligaba prestar
servicios al Estado durante los meses de crecida del Nilo. El papel de los
esclavos no fue muy relevante en la economía de Egipto, a pesar de lo que la
Biblia da a entender. Es durante el Imperio Antiguo (2635-2154 a.C.), la época
en que se contribuyeron las pirámides, cuando más clara se presenta esta
peculiaridad, hasta el punto de que el egiptólogo Joseph Padró Parcerisa, afirma
rotundamente: "En esa época no hubo esclavos". Sin embargo es un fenómeno
que difícilmente puede desligarse se las sociedades de la antigüedad.
Pero el mismo Joseph Padró añade inmediatamente: "Ahora bien, el Estado, en
sus campañas de guerra, podía hacer prisioneros de guerra. Considerados como
botín, eran deportados a Egipto y obligados a realizar trabajos forzados en las
propiedades del propia Estado: son los llamados esclavos reales".

Sobre esto existe una poderosa constancia de una expedición llevada a cabo por
el primer faraón de la IV dinastía, Snofru, de la que regresó con 7,000 cautivos
que acabarían convertidos en esclavos reales. Pero el faraón no era el único
poseedor de trabajadores forzosos, se tiene una constancia de que en el Bajo
Egipto hubo ese tipo de siervos que eran distribuidos en templos y casas
particulares.

La Biblia con el caso de José nos aporta más datos sobre la esclavitud en
Egipto, como que el comercio de esclavos no era cosa rara, así como que los
esclavos podían hacer carrera, puesto que de un simple esclavo llegó a tener un
lugar preponderante en la casa de Potifar, que incluso lo elevó al grado de
"mayordomo de la casa". El caso de José quizá sea demasiado aislado como
para aventurarse a hacer conclusiones generales; pero, el texto nos muestra el
buen trato que se le daba a los esclavos. Existían normas jurídicas que
protegían al esclavo e incluso en el "Libro de los muertos", una de sus fórmulas
dice: "No perjudiqué a un esclavo ante su amo".

Ahora bien, es también en el Libro de los Muertos donde puede leerse una frase
que encierra una inquietante sugerencia: "...mi nombre no llegó a las funciones
de un jefe de esclavos". Más contundentes aún resultan ciertos bajorrelieves en
los que aparecen prisioneros nubios de rodillas, maniatados y sujetos unos a
otros en hilera por el cuello. En otro conocido relieve, la escena representa a un
grupo de esclavos castigados por un guardián que enarbola una vara. Dichas
escenas contrastan con las numerosas pinturas en las que sirvientas (esclavas
tal vez) atienden a sus señoras durante la celebración de elegantes banquetes.

"Muertos vivos o vivos para matar", es la traducción literal de la palabra con la


que los antiguos egipcios designaban a sus esclavos. Ciertamente mejor
tratados que en otras civilizaciones, su condición no era, sin embargo,
envidiable, y variaba mucho unos de otros. Los más afortunados eran los que
estaban adscritos a servicios domésticos, pero muchos otros acababan en las
minas de cobre y oro de Nubia y el Sinaí, lugares donde el clima y el trabajo
producían gran mortandad.

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