MI PRIMER FRANQUICIA

1. Liderazgo

En el caso de “Mi primer franquicia”, podemos encontrar los dos tipos de liderazgo:
autocrático y democrático. El primero, predomina en la situación, ya que las decisiones importantes
se centran en una sola persona (el responsable de contabilidad) quien controla los permisos y
coacciona a los otros directivos de la organización. En el segundo caso, el líder democrático es
representado por el joven de nombre Pedro, quien muestra una iniciativa por la participación y la
mejora de la organización con el apoyo de todos los directivos. A Pedro, lo podemos identificar como
un especialista de tarea, pues se centra en generar nueva ideas. La comparación entre estos dos
tipos de liderazgo no es equitativa, puesto que el líder autocrático concentra el absoluto poder en
la toma de decisiones, dado que quienes le confieren dicho papel son personas con características
y modos de pensamiento afines a él. Esto sin duda, deja en una mala posición al joven directivo, ya
que su poder se ve eclipsado por una prominente discordancia en la forma de pensar dentro de la
organización, a pesar de que Pedro trae consigo la frescura del cambio y el conocimiento sobre
como dirigir una empresa en tiempos actuales. A final de cuentas, las características de los directivos
definen las acciones que habrán de hacer. La edad y las costumbres de los líderes de la organización
suponen un gran obstáculo para el cambio, a pesar de que ya han notado como el permanecer
estáticos les está costando perder su clientela.

2. Trabajo en equipo

Para comprender las relaciones dentro de la empresa, hay que analizar el rol que
desempeñan el líder y sus seguidores. En este aspecto, el caso de “Mi primera franquicia” muestra
una relación que dista de ser bidireccional como lo abordan Lussier y Achua (2011), donde los
seguidores también desempeñan roles de liderazgo cuando es necesario. Contrario a ello, nos
encontramos con seguidores del tipo “Pasivo” según el modelo de Miller, donde los sujetos
presentan baja participación y bajo pensamiento crítico. A parte de esta aseveración, identificamos
al equipo de trabajo dentro del estilo que elude la resolución de conflictos. Lo anterior es en
consecuencia al tipo de liderazgo que predomina en la empresa, ya que, al ser autocrático, se orienta
puramente a la tarea y todas las decisiones se concentran en el líder.

Algunas características del líder autocrático son:

 Liderazgo orientado a la tarea.

 El poder de tomar decisiones se concentra en el líder.
 Toma decisiones sin consultar a su equipo
 Se preocupa por la tarea.
 Define con precisión las responsabilidades individuales y designa tareas específicas.
 Poca motivación hacia sus seguidores.
 Resistencia al cambio.
 Este tipo de liderazgo no siempre es perjudicial, ya que en muchos de los casos es
verdaderamente efectivo en el éxito de la empresa o en los procesos de producción donde se
registran avances significativos. Sin embargo, en el caso de “Mi primera franquicia”, podemos
percatarnos como es que el estilo de liderazgo no toma en cuenta elementos muy importantes para
el éxito de la empresa. En primer lugar, encontramos que no toman en cuenta la participación de
los integrantes de la mesa directiva, así como también es muy notorio el pensamiento arcaico que
caracteriza a la mayoría de ellos y principalmente al encargado de la contabilidad que a fin de
cuentas es quien se encarga de tomar la decisión final. En gran parte se debe a las edades en que
oscilan los miembros y también a la comodidad con que ha funcionado la empresa, por lo que creen
que no es necesario hacer cambios sin darse cuenta de la amenaza real que significa la competencia.

A mi forma de ver la situación, el liderazgo presente en “Mi primera franquicia” no es

efectivo, ya que desestima los elementos indispensables para seguir cosechando buenos frutos. El
primer aspecto, como ya lo mencione en el párrafo anterior es, descartar las ideas del joven
directivo; el segundo aspecto, representa la poca importancia que le dan a las recomendaciones de
sus clientes, despreciando el dicho que dice: “El cliente siempre tiene la razón”; y finalmente, la
resistencia al cambio, que consecuentemente llevará a la empresa al fracaso.

Dicho lo anterior, para lograr la efectividad de la empresa, el primer cambio necesario

debería ser el tipo de liderazgo, ya que es la fuente del poco éxito que tendrán. De esta manera, los
seguidores podrán participar y obtener un pensamiento crítico ante los desafíos que se le presenten
a la organización. Lo ideal es formar seguidores pragmáticos que cuenten con habilidades directivas
que vayan en función de la mejora de los procesos y la toma de decisiones acertadas. Otro cambio
que debería darse, es la toma en consideración de la nuevas ideas y sobre todo de las
recomendaciones de los clientes, ya que es en base a estos parámetros que la empresa pueda
brindar mejores servicios y productos. Todo lo anterior, sumado a una buena motivación por parte
del líder, supondría un buen trabajo en equipo con resultados favorables ante la amenaza de la
competencia.

3. Cambio y toma de decisiones

Es importante que nunca se pierda de vista que la estabilidad en las organizaciones sólo es
un status quo, el ideal o una mera utopía. En muchos casos las empresas deben decidir
cambiar o dejarse morir, “en la actualidad ninguna compañía se desenvuelve en un
ambiente particularmente estable. Incluso las compañías que tienen una participación
dominante en el mercado deben cambiar, y a veces radicalmente”. (Robbins & Judge, 2003,
p. 578)

La historia de la empresa tiene sus orígenes por conformación familiar. Los Peña,
fundadores y dueños de “Mi primera franquicia”, llevan al frente desde hace veinte años y siempre
han producido los mismos alimentos en base a ingredientes vegetales, los cuales obtienen de los
mismos proveedores. Los empleados de esta empresa, se han adaptado a los mismos
procedimientos de trabajo de forma rutinaria y sin ningún cambio aparente a causa de la buena
calidad y sobre todo de la lealtad de sus clientes. Por tales motivos, los directivos y líder de la
organización, se han acostumbrado a realizar sus labores de manera tradicional y arcaica, limitados
a seguir una serie de pasos pues les ha funcionado de manera satisfactoria. Es hasta este momento
en que esa tranquilidad y prosperidad se ve interrumpida por la competencia de una empresa
asiática que brinda un servicio similar al de “Mi primera franquicia”, por lo que las cosas se empiezan
a dislocar en el funcionamiento y los directivos deben tomar decisiones para contrarrestar los
efectos de la nueva amenaza.

Esta nueva tentativa de cambio, ha puesto en confusión a los miembros de la organización

puesto que nunca se había presentado una situación similar. La comodidad disfrutada durante las
dos décadas de existencia de la empresa les hacía creer que el peligro ante la competencia era casi
inexistente, hasta que empezaron a perder a sus clientes. Es entonces en ese momento en que la
directiva debió reunirse y discutir sobre la posibilidad de realizar ajustes para equilibrar esta
situación adversa. El cambio, en esta ocasión no es la mejor solución, así lo deciden en su mayoría,
excepto un joven directivo llamado Pedro, quien piensa en la necesidad de realizar ajustes y
decidirse por darle un nuevo rumbo al quehacer de la empresa. El cambio, pera él, es la mejor
decisión.

Los directivos no tomaron en cuenta la propuesta de Pedro, la cual era sin lugar a dudas la
mejor opción, sino que decidieron o mejor dicho, el responsable de la contabilidad quien era de los
más grandes de edad, decidió que no era necesario ningún cambio, puesto que la empresa asiática
no representaba ninguna amenaza. La razón es muy simple, pues disfrutaron por tanto tiempo una
tranquilidad y prosperidad que se quedaron acostumbrados a la inmovilidad. A parte de ello, el
miedo a lo desconocido, les impidió arriesgarse a mejorar sus procesos y sobre todo a invertir en las
certificaciones para estar al día en lo que los consumidores buscan. “Sin la delegación y el
facultamiento correspondiente, ninguna organización o directivo podría disfrutar del éxito a largo
plazo” (Whetten & Cameron, 2011).

Dado que los directivos de hoy, definitivamente no pueden continuar con la mentalidad
que se tenía ayer, propongo decisiones que deberían haber tomado desde la primera reunión:

 Escuchar las propuestas de los distintos directivos, sobre todo de los que tienen ideas
nuevas y frescas.
 Escuchar y centrarse en las recomendaciones de los clientes.
 Cambiar los procesos y productos a fin de mejorar el servicio.
 Ampliar y variar los productos que ofrecen a los consumidores.
 Realizar certificaciones como el de ESR (Empresa Socialmente Responsable).
 Agilizar sus trámites fiscales.
 Reconocer que la competencia es un factor para mejorar.

4. Estrés y control de emociones

Para entender las emociones que se presentan en el caso de “Mi primera franquicia”, es
necesario conocer y analizar las fuentes potenciales de estrés: ambientales, organizacionales y
personales. La que nos atañe y a la cual se hace referencia en el caso a tratar es la de factores
ambientales. Esta categoría aborda los factores de contexto, principalmente la incertidumbre,
entendiéndose por “razón principal por la que las personas tienen problemas para afrontar los
cambios organizacionales” (Robbins, 2013, p. 597).

La incertidumbre que experimentan los integrantes de la directiva responde a la de tipo

económica, ya que se deriva de una amenaza comercial con la competencia. La pérdida de clientes
representa una baja en los ingresos de la empresa y un factor de caída en lo general. Al principio la
confianza que muestran los directivos hace parecer que todo está controlado, sin embargo, poco a
poco los estresores se harán presentes y la incertidumbre se apoderará de los directivos, haciendo
arrebatos en la toma de decisiones. Todo ello llevará a la organización a realizar cambios inminentes
o a dejarse morir. Esa tranquilidad con que se manejaba la empresa desaparecerá, pues ninguna
compañía puede gozar de éxito por un largo tiempo, en un momento dado deben sujetarse a los
cambios de la sociedad y a los desafíos que representa la competencia.

5. Dirección asertiva

El tipo de dirección que se ejerce en “Mi primera franquicia” es referente al tipo de

liderazgo, que al ser autocrático, hace énfasis en la toma de decisiones por parte de una sola
persona. De este modo, se lleva una dirección poco asertiva, ya que no se toma en cuenta las
opiniones y sugerencias de los demás integrantes, que a su vez no tienen la intención de darlas,
puesto que son de tipo de seguidores pasivos. Para que la dirección asertiva pueda imponerse, es
necesario expresarse de forma consciente, clara, directa, equilibrada, teniendo como finalidad
comunicar sus ideas, sentimientos, objetivos claros en el plano de la comunicación, la negociación
y persuasión.

Los factores que inciden en este tipo de dirección son la comodidad de sus miembros y la
delegación de todo el poder de la toma de decisiones a una sola personas, cuyo liderazgo es
autocrático. De este modo, los seguidores (directivos en este caso) se deslindan de sus
responsabilidades y funciones para la realización de una dirección bidireccional donde ellos también
sean líderes. La consecuencia principal de este tipo de dirección será la resistencia al cambio y, por
ende, el fracaso comercial.

6. Propuesta

En primera instancia, los directivos deberían tomar en serio su papel y generar alternativas
además de sugerencias de cambio. La competencia debería ser más que la excusa para regenerarse
y mantener a la clientela con nuevas adecuaciones a los servicios y productos. A partir de esto, en
la junta directiva, el líder debería dirigir con miras a una organización bidireccional. Dejar que los
miembros se expresen y compartan ideas para la resolución de conflictos, sin duda hará de los
procesos algo más simple.

Cambiar de un líder autocrático a uno democrático, generara una visión más completa de
hacia donde se quiere ir con la empresa y, sobre todo, como será la transición de cambio para
generar nuevos caminos hacia nuevos clientes. Como ya lo he mencionado, el liderazgo bidireccional
contribuirá a delegar en cada miembro el poder de opinar y elegir.
 Las acciones a seguir para no ser devorados por la competencia deberían ser las siguientes:

 Abrir el paso hacia el cambio.

 Invertir en certificaciones.
 Tomar en cuenta las sugerencias de los clientes.
 Innovar.
 Modernizarse.
 Creer en los jóvenes emprendedores.
 Cambiar el tipo de liderazgo hacia uno democrático.

Un ejemplo de existo empresarial es el de Toyota. Planificar la acción antes de iniciarla,

permite reducir la probabilidad de errar en una estrategia o decisión de cualquier naturaleza, lo cual
podría significar la supervivencia de la empresa en casos más extremos donde tomar una decisión
acertada significa seguir creciendo o morir. Un buen ejemplo de esta estrategia es lo que hizo Toyota
en los años setenta, cuando lanzaron su primer vehículo Corolla al mercado norteamericano.

BIBLIOGRAFÍA

López, L.&Campos, J (2002).Evaluación de Factores presentes en el Estrés laboral. En revista de

Psicología 11(1), 149-163. Recuperado de http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=26411111

Lussier, N. & Achua, F. (2011). Liderazgo. Teoría, aplicación y desarrollo de habilidades. Estados
Unidos: Cengage learning.

Robbins, P. & Judge, A. (2013). Comportamiento organizacional. México: Pearson.

Whetten, A. & Cameron, S. (2011). Desarrollo de habilidades directivas. México: Pearson.