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ANÁLISIS DE LOS CUENTOS

LA NIÑA FEA

“La niña fea” nos cuenta la experiencia discriminatoria que vive una niña por
ser vista por sus compañeras de escuela como un chica fea.

En cuanto a su significado más profundo, podríamos hablar de la intención de


reflejar el rechazo que a veces ejercemos las personas hacia otras que son
diferentes. Además, el cuento parece querer transmitir como vive una niña una
situación de marginación escolar.

Por otro lado, observamos el papel importante que desempeña la naturaleza


(flores, animales, tierra, semillas…) en este primer cuento, pues la niña
encuentra en ella la verdadera belleza de la que ella parece carecer. Esto
sucede justo cuando se come una manzana, una vez alejada de las niñas que
le hacen daño, por lo que podemos deducir que esta le abre las puertas hacia
un lugar menos tóxico y más bonito. De todos modos, se deduce que una vez
está en este sitio, la niña decide morir tranquila y sintiéndose bella, gracias a
elementos como “cintas azules y moradas en las muñecas” que inducen a
pensar que se ha cortado las venas.

EL HIJO DE LA LAVANDERA

Este cuento trata el acoso que recibe un niño por parte de un grupo chicos,
tanto verbal como físico.

Si profundizamos más, nos encontramos, nuevamente, un repudio hacia un


niño por ser diferente a los demás, físicamente hablando. Esta vez, no
obstante, se añade la circunstancia de no pertenecer a la misma categoría
social-económica que el resto de los niños, hecho que se vuelve una
motivación más para burlarse de él.

Se observa, también, una posición negativa del narrador, que parece


comprender el odio que los demás sienten hacia el protagonista, hecho que
solo le da un carácter más cruel al cuento. Por otro lado, el único acto
afectuoso y bueno que integra el relato es el beso que la madre del niño le da
en su cabeza. Sin embargo, es en el mismo sitio donde la madre le otorga un
beso donde el niño recibirá una pedrada por parte de los niños que le hostigan.
En el cuento no se menciona, pero no sería sorprenderte que los niños le
golpearan más de una vez hasta acabar con el protagonista, debido a la
maldad que les caracteriza durante todo el cuento.
EL ÁRBOL

El relato de a continuación explica la obsesión de un niño por la figura de un


árbol situado dentro de un palacio, que le llevará a la muerte.

El significado del cuento probablemente resida en las alucinaciones que sufre


el niño pequeño, pues deja de distinguir lo real de lo ficticio. Su mente empieza
a hacerle pasar malas jugadas, viendo un árbol en el interior de un palacio
cada día de su vida, sin poder dejar de pensar en su existencia. Empieza a
relacionarlo con cosas que realmente existen, cosa que solo acentúa su
obsesión irracional. Se olvida de su vida real para centrarse únicamente en el
árbol.

Metafóricamente hablando, podemos encontrar que la noche simboliza la


muerte, pues cuando esta llega y entra en su habitación se lo lleva todo,
incluido el niño. De igual manera, el árbol también hace el papel de muerte,
pues cuando el niño logra encontrarle, se abandona a él. Por otro lado, se
menciona la intervención de la madre, que observa como la obsesión de su hijo
le consume y enferma, e intenta evitarlo poniendo sus manos en la frente para
frenar sus pensamientos.

EL NIÑO QUE NO SABÍA JUGAR

“El niño que no sabía jugar” es un relato corto que trata la incapacidad de un
niño por hacer una de las actividades más normales en la infancia: jugar.

Más concretamente, este cuento nos muestra la anomalía que presenta un


niño, pues no sabe jugar o al menos no parece divertirse utilizando los medios
convencionales que usan los niños para entretenerse. Contrariamente, debido
a que no se siente identificado con los demás niños, acaba desarrollando un
gusto particular, extraño y cruel por hacer cosas como decapitar a diferentes
animales, método que utiliza para evadirse de una realidad en la que él no
encaja.

En este cuento, observamos el frio que siente la madre al mirar a su hijo como
símbolo premonitorio de un mal próximo. Paralelamente, encontramos la figura
del padre que representa la pasividad adulta. Por otro lado, se aprecia una
contraposición respecto a los juguetes llamativos y coloridos con el niño, que
se nos muestra inerte, inexpresivo y apagado.
EL NIÑO DEL CAZADOR

Este breve cuento relata el deseo de un hijo por parecerse a su padre, que es
cazador, y como la ambición por hacer algo aventurero le lleva a una muerte
accidental.

El cuento nos quiere transmitir la influencia que ejercen los padres en sus hijos
y como por eso, hay que tener cuidado con lo que se les inculca, pues en este
cuento, el niño protagonista acaba muerto por intentar imitar a su padre. En
este caso, el padre es cazador, y el hijo anhela sentirse como él y vivir una
aventura cazando. Por ello, cogerá una escopeta y en el bosque acabará
disparándose a si mismo.

Cuando el niño se lanza a la aventura en el bosque, el ambiente se vuelve


ansioso, acelerado y tétrico. Dichas sensaciones se ven reflejadas gracias al
uso consecutivo de términos para describir cuan arriesgado es lo que está
haciendo el niño: “El niño cazó todas las estrellas de la noche, las alondras
blancas, las liebres azules, las palomas verdes, las hojas doradas y el viento
puntiagudo. Cazó el miedo, el frío, la oscuridad.”

Por último, se evidencia la muerte accidental del niño cuando la madre le


encuentra, gracias a la descripción “vuelto rojo como vino” que simboliza la
sangre que brota del niño.

EL JOROBADO

El relato “El jorobado” cuenta la tristeza que siente un niño por no poder llegar
a cumplir su sueño por el hecho de tener una joroba pronunciada y ser
diferente al resto.

Respecto a su significado profundo, podemos observar varias cosas: la


repetida idea del niño diferente y anómalo que no se integra en la sociedad (en
este caso, debido a su joroba) y la sobreprotección de su padre, que no quiere
que reciba ningún tipo de acoso por la gente, además que se avergüenza de su
hijo y prefiere mantenerlo encerrado en casa. Por otro lado, el padre es
consciente de la tristeza que siente su hijo y para compensarle, le ofrece
juguetes y comida cara.

Se observan diferentes casos de dualidad. Por un lado, se contrapone el hecho


de que el padre es un guiñol y su trabajo consiste en divertir a la gente, y,
contrariamente, el padre no es capaz de hacer feliz a su hijo. Por otro lado,
contrasta el deseo del niño por participar en el teatro delante de todo el mundo,
y su realidad, que es estar encerrado en casa, ocultado de la gente.

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