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Facultad de psicología
(Modalidad semi-escolarizada)
Practicas psicológicas I
Existen muy diversos marcos teóricos desde donde se puede desarrollar una
psicoterapia exitosa, es decir, que lleva un cambio positivo y duradero en la calidad
de vida de quien solicita esta atención.
Existen diversos libros en los que se nos presentan diferentes formas de cómo debe
llevarse a cabo la relación paciente/ terapeuta. El libro titulado ´´El orientador
experto: un modelo para la ayuda sistemática y relación interpersonal´´ del
autor Gerard Egan, es un ejemplo de ello. Este libro está basado en tres puntos
clave, los cuales son el trabajo Carhuff, quien sugiere que el mejor modo de
tratamiento es el adiestrar directa y sistemáticamente al orientador en las destrezas
que necesita para vivir más efectivamente. Estas incluyen tanto las relaciones
humanas como las destrezas para la solución de problemas.
Incluye también la teoría de la influencia social, que pone como premisa inicial que
toda acción o conducta en el ambiente social de la persona tiene una consecuencia
influyente en su conducta.
El último punto clave que maneja como uno de los principales pilares es la teoría
del aprendizaje, desde el modelo conductista.
El modelo de orientación está enfocado hacia las metas, hacia los objetivos, desde
una perspectiva en su mayoría empírica y sistemática.
En el primer capítulo Egan nos habla de un modelo de trabajo para la ayuda, basado
en los trabajos de Carhuff. Señala los momentos a través de los cuales oscila el
proceso de ayuda, como las destrezas básicas que el orientador debe formar en
cada fase del modelo con el objeto de lograr la efectividad en cada etapa. La ayuda
es una acción y una conducta, o bien, un comportamiento social, con un cambio en
el cliente, y el orientador es un agente de cambio en un proceso colaborativo de
influencia social.
Egan menciona y sintetiza también las fases del modelo de ayuda que se propone
en el libro:
Cada etapa exige del orientador destrezas específicas, a la vez que propone metas
específicas a la persona o cliente que recibe la ayuda.
Otro de los autores que nos ha presentado un tipo de terapia en particular ha sido
Carl Rogers, con su terapia centrada en el cliente esta tiene sus raíces en la
terapia de Rank. Está constituida sobre una base de observaciones minuciosas,
intimas y especificas del hombre en relación con su entorno.
Este tipo de terapia puede llegar a ser aplicada de diferentes formas, un ejemplo de
ello son la terapia de juego, terapia grupal, área educativa y área organizacional.
La actitud del consejero debe ser coherente y debe comprobar continuamente los
propósitos o la hipótesis con la técnica o instrumento que se utiliza.
El consejero debe de adoptar cierto papel para que el paciente se sienta realmente
escuchado.
Escuchar es una de esas habilidades que todo el mundo piensa que tienen, pero
pocos lo hacen en realidad. Rogers introdujo una técnica conocida como Reflejo. El
terapeuta escucha al cliente y refleja los pensamientos y sentimientos significativos
diciendo al cliente lo que les oyó decir.
Debe ser una autentica comunicación de comprensión y preocupación. Hoy en día
el reflejo es una parte de lo que se denomina una escucha activa.
Rogers cree que el trabajo del terapeuta no es tanto hacer esto o aquello, sino
´´estar´´ de cierta manera para el cliente. El habla de tres cualidades que el
terapeuta debe exhibir durante las sesiones de terapia:
1. Debe ser congruente. Básicamente esto se reduce a ser honesto, no ser
falso. Rogers estaba preocupado en particular de que el terapeuta debe ser
honesto en lo que respecta a sus sentimientos. Sintió que los clientes
siempre pueden sentir cuando estas fingiendo, por lo que, con el fin de
generar confianza en la relación terapéutica, la congruencia es una
necesidad.
2. Debe ser empático. El terapeuta debe ser capaz de identificarse con el
cliente, entendiéndolos no tanto como psicólogo sino como una persona que
también ha visto parte de sus problemas. El terapeuta debe ser capaz de
mirar a los ojos del cliente y verse a sí mismo. La escucha activa es la forma
en que el terapeuta puede mostrar que él o ella está tratando de entender al
cliente.
3. Él o ella debe mostrar al cliente una consideración positiva incondicional.
Esto no significa que el terapeuta tiene que armar al cliente, o incluso como
ellos. Significa que debe respetarles como ser humano, y no juzgarles. Esta
puede ser la cosa mes difícil de hacer para un terapeuta, pero Roger dice y
cree que solo sintiendo respeto puede mejorar un cliente.
Rogers nos dice que el terapeuta no debe ser alguien que ´´cure´´ a una persona
que está enferma, como actualmente se llega a creer; sino más bien debe ser una
persona que sepa comprender a su cliente, convertirse en algo así como un asesor
para la otra persona.
Como efecto de la terapia, Rogers nos dice que el cliente reorganiza la percepción
que tiene de sí mismo, se libera de una concepción de sí mismo como una persona
inaceptable, indigna de consideración, y obligada a vivir según normas de otros,
conquista progresivamente una concepción de sí mismo como una persona de
valor, autónoma, capaz de fundamentar sus propios valores y normas de acuerdo a
su propia experiencia, desarrollando una actitud mucho más positiva hacia sí
mismo, se torna menos defensivo y por ende, más abierto a su propia experiencia
y a los demás, sus percepciones se tornan más realistas y diferenciadas. Disminuye
la distancia entre lo que es y lo que desearía ser, ya que también reduce la tensión,
el malestar psicológico y la ansiedad, gracias a esto; percibe a los otros de modos
más realistas y los acepta.
Fue en el año 1956 cuando Alexander Lowen, Pierrakos, Walling y Alice Landas, le
dieron origen a la terapia bioenergética de manera formal.
Lowen dice que la vida está orientada principalmente en la búsqueda del placer,
que es lo que estimula la vida y el bienestar del organismo, pero con el impulso de
tratar de alcanzar esta sensación también existe el dolor al momento de forzar al
organismo creando estados de ansiedad, la única manera de evitarnos ese dolor es
creando una barrera de defensa contra este impulso y el individuo se suprime y así
evita el dolor, pero tampoco alcanza la sensación de placer por lo tanto, por lo que
ocurre dentro de él se determinan las expresiones corporales. nos ofrece en su libro
las estructuras del carácter en el que podemos definir cada personalidad de acuerdo
a la posición física de un cuerpo humano.
Así como también en el libro Análisis transaccional, Eric Berne por medio de su
aportación aprendemos a identificar al individuo en lo que el describe como estados
del Yo (Padre, Adulto, Niño) los cuales son estados conscientes en la persona,
coherentes en pensamiento y sentimientos.
Niño: "una serie de sentimientos, actitudes y pautas de conducta que son reliquias
de la propia infancia del individuo". (Berne, 1961,1976). Las actitudes que toma una
persona, comienza a expresar y a sentir en modo infantil, se es impulsivo, natural,
espontaneo y se comporta de acuerdo a toda la experiencia en la infancia.
Berne dice que estar en estos estados puede ser oportuno en algunas ocasiones,
por ejemplo, se puede adoptar la actitud de Niño cuando estas en contacto con
algunos niños y comportarte de acuerdo a ellos para establecer una relación, jugar,
etc. Así como adoptar el rol de adulto al momento de establecer una relación o
conversación seria, tomar alguna decisión, o mirar la realidad objetiva en algo. Estas
adopciones se juegan en las transacciones con otras personas, pero, al momento
de establecer una conversación con otra persona es importante determinar la actitud
que tendremos y procurar que sea en el estado del yo adecuado.
Al momento de establecer contacto con otra persona se pueden dar las llamadas
transacciones cruzadas, donde se puede hacer un estímulo Adulto-Adulto, pero la
respuesta podría ser Niño-Padre, en este caso se puede dar una confusión en la
conversación. De lo contrario si se da una conversación Adulto-Adulto y se responde
de la misma manera, es una transacción complementaria, y de esto puede surgir
una conversación esperada y fluida.
De esta manera se establecen las relaciones con nosotros mismos y con los demás,
y muchos de nuestros conflictos se derivan a que adoptamos estrategias basadas
en estos estados sin darnos cuenta ya estamos actuando y respondiendo al otro
con alguna de las tres formas, infantil, adulta o de padre.
Así mismo, Eric Berne posteriormente nos ofrece el libro Juegos en que
participamos en el cual nos explica cómo es que por medio de estas transiciones
que hablaba anteriormente se dan en la vida cotidiana, en una conversación en
donde para alguien sin idea alguna, pueden pasar desapercibidas.
Estos patrones de conducta pueden parecer de lo más normal, pero, como decía
antes, crean confusión y dificultades al interactuar con alguien más. Siempre
estamos jugando juegos, adoptamos roles con los cuales pretendemos obtener
algo, terminamos dominando o manipulando sentimientos de alguien en particular.
Siempre estamos en uno de los roles buscando algo que, sin decirlo, sin pensarlo
lo estamos pidiendo por medio de estos comportamientos.
Tenemos el rol de víctima, salvador y perseguidor, donde por ejemplo una hija
puede sentirse sufriendo por algo, pero actúa en modo manipulador, hacia otra
persona para obtener algo que busca, entonces se victimiza, se piensa que todo es
injusto para ella, que no puede hacer algo y necesita alguna ayuda, empujando a
los otros dos roles a responder, y el salvador, es por ejemplo la persona que hace
todo lo necesario por apoyarte aun cuando sobrepase por encima de lo que puede
hacer. Y el tercero, perseguidor podría describirse como la persona mala, el
agresivo, el que es el malo del cuento, o alguien controlador que no ayuda.
Peter afirma que las palabras son símbolos, que las combinamos para crear
significados y así comprender la realidad que nos rodea y describir aquello de lo
que ya tenemos conocimiento. Menciona también el poder que presentan las
palabras para crear en nosotros diversos sentimientos, de cómo abrimos nuestra
mente hacia nuevos conceptos y vamos conociendo diversas formas de
comunicación.
Se menciona que los problemas que presentamos por lo regular surgen por que al
momento de utilizar el lenguaje no sabemos establecer la relación en la
comunicación, y fallamos al querer darle un significado a lo que decimos o lo que
nos dicen. Y una de las formas para evitar esto y tener una comunicación excelente,
requiere una flexibilidad para escuchar y poner atención al otro. Lograr establecer
una sintonía con el otro, compartir la realidad de ambas personas y minimizar las
diferencias, hace que entremos en una comodidad con la compañía de esa persona
con la que nos comunicamos y de esta manera puede fluir un dialogo armonioso.
De acuerdo con Peter Young la PNL consiste en explorar nuestra realidad personal:
los marcos perceptivos, los modelos de realidad y las visiones del mundo que
influyen en el modo en que nos comportamos, nos relacionamos y pensamos.
En pocas palabras es el estudio de la estructura de la experiencia subjetiva.
Las tres nociones que constituyen la PNL pueden ser explicadas de la manera
siguiente:
P – Programación
Repetición de secuencias de comportamiento y patrones de pensamiento que nos
pueden ayudar o perjudicar.
N – Neutro
El cuerpo-mente: estados y modo en que funciona
L – Lingüística
El lenguaje que utilizamos para describir y clasificar al mundo. Extraer sentido a las
experiencias y en comunicarnos.
También nos menciona como percibimos el mundo de una manera o de otra, como
creamos significado de nuestro entorno y le damos el sentido de acuerdo a nuestro
aprendizaje, el nombrar algo nuevo, una mascota o cosas, dar ese significado por
medio de codificaciones y la individualidad que adquieren.
La continuidad establece que siempre estamos aprendiendo, siempre estamos
creciendo y vamos cambiando conforme el tiempo, que nuestra mente evoluciona y
no pensamos como 10 años atrás, ni en 30 años adelante pensaremos como
pensamos en la actualidad.
Peter Young nos ofrece muchas técnicas y procesos para mejorar el lenguaje y la
comunicación, establecer relaciones adecuadas. De esta manera nos abrimos aún
más los métodos para establecer una relación con los demás, y saber cómo aplicar
estos a la práctica, mejorar nuestro criterio y evitar confusiones al momento de darle
un sentido a lo que un paciente nos estará comunicando. Todo es con la intención
de comprender la cantidad de información que siempre estamos recibiendo.
La traducción del alma (no del esqueleto) de la Gestalt viene a cubrir un hueco:
reflexionar sobre ´´un intuicionismo que se reconoce como tal´´. La terapia se
aprende viéndola impartir, participando en ella y supervisando, y como cuarto
componente: la explicación por parte del terapeuta de su ´´Porqué´´, sus estrategias,
sus procesos emocionales y sus azares; queda claro que la teoría es la explicación
de la práctica.
El proceso terapéutico descansa por parte del paciente en factores como la toma
de conciencia y espontaneidad, mientras el terapeuta contribuye con el estímulo y
apoyo de la expresión genuina para confrontar lo disfuncional, como estrategia.
Las técnicas constituyen la expresión practica de las ideas que caracterizan un
sistema dado. La terapia Gestalt es un sistema construido sobre el entendimiento
intuitivo sobre la teoría.
Para que pueda darse la confianza básica es muy importante tener una actitud
congruente, honesta en nuestra vida personal, por eso es muy importante el proceso
personal y depositarse en la terapia propia con honestidad, con ello lograr ser un
buen terapeuta y poder guiar al paciente, respetar su ritmo, no forzar cambios y que
utilice su propia energía.
Para propiciar la experiencia directa, la terapia Gestalt da más valor a la acción que
a las palabras.
Claudio Naranjo nos dice que, sin la actitud apropiada, las técnicas se convierten
en formas vacías, sin la experiencia incluso la actitud se transforma en dogmas de
segunda mano.
En la terapia Gestalt, al terapeuta se le exige más que en otras terapias para ser
´´un ser desnudo´´ y también ser ´´un artista´´, por ello las acciones del terapeuta
son significativas solo en la medida en que son más que técnica, expresiones de
una perspectiva, que pueden generar tal entendimiento en otra persona, así generar
más confianza para una comunicación profunda a través de un trabajo de contacto.
Salamá explica que cada experiencia que vivenciamos tiene un ciclo y que a su
vez puede formar parte de otros ciclos a los que se engancha; a través de cada
uno utilizamos energía cuyo flujo debería ser ininterrumpido para lograr una
situación ideal, pero en muchos casos, esto no ocurre así, puesto que se topa con
diversos bloqueos que lo entorpecen t por tanto, la satisfacción de la necesidad es
parcial o nula, o en otras palabras, la persona entra en un estado de neurosis
(incapacidad para poder concluir o satisfacer una necesidad).
Al respecto de los bloqueos se tiene: postergación, que es dejar las cosas para
después; la desensibilización que es la negación del contacto sensorial entre el
organismo y la necesidad emergente; la proyección que consiste en atribuir a algo
externo al individuo lo que le pertenece a si mismo, negándolo en él; la introyección,
que implica la incorporación de actitudes, ideas y creencias que no fueron
asimiladas por el organismo y son distonicas con el Yo; la retroflexión, donde la
persona se hace a sí misma lo que le gustaría hacerle a los demás (autoagresión,
somatización) y proflexión, que es cuando el sujeto le hace a otros lo que le gustaría
que le hicieran a él; la deflexión, en donde el organismo se ha movilizado para
contactar el satisfactor, pero cuando está por hacerlo, elige otro objetivo desviando
el camino; la confluencia, donde el individuo no distingue límite alguno entre su Sí
mismo y el medio y cree falsamente que las del medio son sus decisiones, ideas,
pensamientos, emociones, etc.
Por último, la fijación, que es la necesidad de no retirarse del contacto, provocando
la rigidizacion de patrones de conducta.
Los bloqueos mencionados anteriormente impiden el libre flujo de la energía, y por
lo tanto, generan insatisfacción de la necesidad, llevan a la no conciencia, no
aceptación ni resposabilizacion del Yo, y provocan al individuo situaciones que ve
como problemáticas.