Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
HOMICIDIO AGRAVADO.
HOMICIDIO CONCAUSAL.
Culposo. Preterintencional con causal. Por causa de honor. Inducción y ayuda
al suicidio. Análisis y ubicación de estas figuras en el Código Penal
Venezolano.
EL HOMICIDIO CONCAUSAL.
El homicidio es concausal porque es un homicidio donde existe una
circunstancia preexistente desconocida por el sujeto activo. El Art. 408 C.P.
tiene una norma de remisión, puesto que remite al delito de homicidio simple,
homicidio calificado u homicidio agravado.
En el caso del homicidio concausal, Art. 408 C.P. tenemos un sujeto activo que
ejecuta una acción para obtener un resultado: La muerte; para lo cual ejecuta
una acción; pero esta acción por si sola no es suficiente para obtener el
resultado deseado (la muerte del sujeto contra quien se dirige la acción) Por
ejemplo: Una persona quiere matar a otra con la navajita que traen consigo los
cortaúñas. Ojo: El sujeto tiene la intención de matar (Arts, 405, 406 y 407 C.P.),
tiene el dolo, pero a diferencia del resultado en los anteriores artículos 405, 406
y 407 del C.P. En este Art. 408 (Homicidio Concasual) la acción no es suficiente
para ocasionar el resultado buscado que es la muerte y existe una
circunstancia que se llama concausa que es lo que le ocasiona la muerte al
sujeto. ¿Qué es la Concausa? Es una circunstancia que puede estar presente
en el sujeto como dice el artículo o que puede ser sobrevenida, es decir, que
aparece después. De acuerdo con el ejemplo, la persona rasguñó al otro con el
corta uñas con la intención de matarlo, pero el medio no era suficiente para
lograr el resultado que pretendía; pero, la persona a quien se hiere con la
navajita del corta uñas era hemofílica, y a pesar de lo pequeña de la herida la
persona muere desangrada; o por ser cardiaca le da un infarto dé la impresión
y muere.
Las circunstancias o causas preexistentes son aquellas que forman parte del
sujeto pasivo: enfermedades como la diabetes, la hemofilia, el que sufre del
corazón, o de cualquier otra enfermedad.
Las circunstancias sobrevenidas son aquellas que son causadas por casos
fortuitos, de fuerza mayor, etc.
Hay una condición para este tipo de delitos; y es que, las circunstancias
prexistentes tienen que ser desconocidas por el sujeto activo, por que si éste
conoce la existencia de dicha circunstancia el delito de homicidio ya no es
concasual.
¿Por qué la pena es menor en el delito concausal?
La pena es menor, porque la acción ejecutada por el sujeto activo no fue
suficiente para producir el resultado que buscaba que era la muerte del otro
sujeto; sino que es producto de circunstancias preexistentes desconocidas del
culpado o de causas imprevistas desprendidas del hecho que se produce la
muerte de la persona.
En resumen: Para los homicidios: simple o intencional (Art. 405 C.P.), calificado
(Art. 406 C.P.), agravado (Art. 407 C.P.) y concausal (Art. 408 C.P.) se necesita
el dolo, la intención, "animus necandi", existe dolo cuando la persona tiene la
intención, porque la persona sabe lo que está haciendo y tiene la intención de
hacerlo, y, el resultado antijurídico es igual a lo que se preparó, a lo que pensó,
ideó, premeditó; en eso se basa el dolo o la intención, es una relación entre el
resultado y la acción prevista por el autor. Pero, en los delitos culposos no
existe intención o dolo. La culpa es lo contrario al dolo. Existen los grados de
culpabilidad, que son como sabemos a título de dolo y a título de culpa.
HOMICIDIO CULPOSO
En los delitos de homicidios culposos, el autor pudo haber previsto el hecho
antijurídico, pero no tenía la intención de cometerlo, no tenía el dolo, es decir la
mala fe, el deseo de que el hecho ocurriera. Por ejemplo: El que a las 12 M,
pasa frente a la USM, en su carro a toda velocidad por el hombrillo para
avanzar rápido por la cola; dicha persona (chofer) sabe que si alguien se cruza
en su camino puede atropellarla y lesionarla o matarla; sin embargo, a pesar de
haberlo previsto, de haberlo pensado; la persona no salió buscando que eso
pase, es decir, no tiene la intención de atropellar o matar a alguien; sin
embargo, a pesar de haber previsto que puede ocurrir o sobrevenir un
resultado antijurídico, no desiste de su conducta; es decir, no baja la velocidad,
y, eso es lo que se castiga: Se castiga que la persona previó que podía suceder
algo y no desistió de su acción sino que lo continuó haciendo; por ello, no se
castiga la intención, y, al no existir dolo la pena es menor.
¿Cuáles son las especies de culpa?
Las especies de culpa son:
La Imprudencia: Es lo contrario a la prudencia; La persona no hizo lo necesario
para evitar que sucediera el resultado antijurídico. Además de haberlo previsto,
no actuó de acuerdo a lo establecido en las reglas de ser prudente.
Prudencia es igual a cautela. No actuar cautelosamente es ser imprudente.
La Negligencia: Es lo contrario a la diligencia. Ser diligentes es hacer las cosas
como se deben hacer. Ser negligentes es hacer mal las cosas. Por ejemplo; el
que a sabiendas de que para trabajar con electricidad debe cortarla y no baja
los brekers y se da un corrientazo y se mata.
Inobservancia de órdenes, reglamentos e instrucciones: Es la inobservancia de
todo lo que esta escrito, no cumplir con lo que está previsto en el ordenamiento
legal.
Siempre debe estar presente algunos de estos aspectos (cualquiera de ellos)
es decir, que no deben ser concurrentes necesariamente para que se consolide
el delito culposo.
EL HOMICIDIO PRETERINTENCIONAL.
Praeter: Más allá de la intención. Art. 410 C.P.
En el delito de homicidio preterintencional, la persona sólo tiene la intención de
lesionar, pero el resultado es la muerte de la persona. Por ejemplo; una
persona le da un golpe a otra, pero esta se cae y pega la cabeza contra el filo
de la acera y muere.
La diferencia entre el homicidio preterintencional y el homicidio culposo es la
intención; puesto que en el homicidio preterintencional la persona (sujeto
activo) tenía la intención de lesionar, pero el resultado antijurídico va más allá y
la persona muere (sujeto pasivo); mientras que en el homicidio culposo no
había intención de matar ni de lesionar.
La diferencia del homicidio preterintencional con las diversas modalidades del
homicidio intencional (simple, calificado y agravado): La intención en el
homicidio preterintencional es lesionar pero el resultado va más allá y se
produce la muerte de la persona; mientras que en el homicidio intencional la
intención es matar y así lo hace el sujeto activo.
La diferencia del homicidio preterintencional con el homicidio concausal; es que
en el primero el sujeto no tenía la intención de matar sino de lesionar, pero el
resultado es la muerte; mientras que en el homicidio concausal hay la intención
de matar pero el medio utilizado no es suficiente para lograr el resultado, y la
muerte de la persona se produce como consecuencia de circunstancias
preexistentes desconocidas del culpado o de causas imprevistas que no han
dependido de su hecho.
Art. 422° Código Penal. Los Tribunales estimarán como motivo de atenuación
en los juicios por muerte o lesiones corporales, el haberse causado los hechos
en duelo regular. En este caso podrá rebajarse de una a dos terceras partes la
pena correspondiente al hecho punible; y a los testigos se les aplicará una
pena igual a la que se imponga al matador o heridor, disminuida a la mitad.
El DUELO.
Si en el duelo hubiere deslealtad (duelo irregular), esta circunstancia se
considerará agravante para la aplicación de las penas correspondientes al
homicidio o lesiones que hubieren resultado; y los testigos serán considerados
como coautores.
LA RIÑA CUERPO A CUERPO.
En caso de homicidio cometido en riña cuerpo a cuerpo, si el herido o interfecto
la hubiere provocado y aunque el heridor o matador la hubiere aceptado o
continuado a pesar de haber podido cortarla o haber podido abstenerse de
reñir sin grave riesgo, se tendrá en cuenta aquella circunstancia y se aplicará la
pena correspondiente con la atenuación prevista en la primera parte de este
artículo.
En estos casos, si el lance se ha originado por haber una de las partes
ofendido el honor o la reputación de la otra o de su familia en documento
público o con escritos o dibujo divulgados o expuestos al público o con otros
medios de publicidad, se estimará como provocador al autor de estos hechos;
según la gravedad de la difamación, los Tribunales pueden cambiar la pena
que correspondiere al que haya herido o dado muerte al provocador, en
confinamiento por igual tiempo, con la reducción prevista.
DUELO REGULAR.
Esta establecido en la primera parte subrayada del Art. 422° Código Penal.
Este duelo regular, ya en desuso, viene de una vieja costumbre de solucionar
los problemas que tenían que ver con el honor batiéndose en duelo, en
principio, se daba entre los burgueses y los plebeyos, y se le denominaba
duelo rusticano; del cual provino el duelo criollo; y donde, por aquello de la ley
del talión (ojo por ojo y diente por diente) se buscaba dirimir o utilizar cualquier
otro medio para hacerse justicia por propia mano a través de la utilización de la
violencia. En ambos casos se debía cumplir con unas formalidades, puesto que
el duelo como figura jurídica de auto composición procesal para la época tenía
su normativa o reglamentación: la primera era que debía ser ocasionado por
una causa de honor; en segundo lugar, la formalidad en cuanto a la propuesta
de duelo, para utilizar éste para arreglar el problema y la aceptación por parte
de la otra persona, lo cual no era obligado. En tercer lugar fijar el sitio del
encuentro y que las condiciones fueran iguales para ambos y por último, en
cuarto término, debían existir jueces o testigos.
Se refiere entonces, a que los tribunales estimarán estos hechos como motivos
de atenuación en los juicios, con una pena disminuidas de una a dos terceras
partes; aplicándose a los testigos una pena igual a la del matador o heridor
disminuida a la mitad; por lo que tenemos, en este caso, una plurisubjetividad
activa, porque existen varios sujetos; sujeto activo (matador o heridor), y los
que de igual forma van a ser sancionados igual que éste, en este caso, los
testigos, y el sujeto pasivo.
DUELO IRREGULAR.
El siguiente aparte del artículo 422° Código Penal, está referido al duelo
irregular, que consiste en el mismo duelo regular, pero con violación de las
condiciones impuestas para el duelo en favor de alguna de las partes, lo que
deja a la otra en franca desventaja; caso en el cual, los testigos se
considerarán coautores, por haberse prestado a violar las condiciones
previamente establecidas; un ejemplo de esto sería, si el duelo se pactó con el
uso de pistolas; y los testigos se prestan para dar a una de las partes una
pistola sin balas, lo cual lo deja en abierta desventaja.
El próximo aparte nos refiere lo que es la riña cuerpo a cuerpo, que a diferencia
del duelo no se ha preestablecido, premeditado, sino que sobreviene en un
momento determinado, sin ningún tipo de preparación, sin testigos o jueces; es
más común hoy día.
El último aparte del Art. 422° Código Penal, nos dice que si existe provocación,
se considerará ésta como una causa de atenuación, para aquel que produzca
la muerte o las heridas al que haya provocado la situación.
LA COMPLICIDAD CORRESPECTIVA.
Art. 424° Código Penal. "Cuando en la perpetración de la muerte o las lesiones
han tomado parte varias personas y no puede descubrirse quien las causó, se
castigará a todos con las penas respectivamente correspondientes al delito
cometido, disminuidas de una tercera parte a la mitad.
No se aplicará esta rebaja de pena al cooperador inmediato del hecho".
Es común en las investigaciones llevadas a cabo en riñas o en homicidios
donde han participado varios sujetos al igual que en delito de lesiones donde
hayan participado varias personas; debido a que entre los participantes, es una
especie de cuestión de honor no delatarse ni atribuirse el hecho que causó la
lesión o la muerte del sujeto pasivo; para estos casos la figura jurídica que se
utiliza para sancionar a los que participaron en el hecho sin que haya podido
determinarse exactamente quien cometió el delito ya sea de lesiones o de
homicidio, es la denominada complicidad correspectiva, y, en tal sentido, se
aplica la pena correspondiente al delito (lesiones u homicidio) pero con una
disminución comprendida de una tercera parte a la mitad.
La complicidad correspectiva es una figura subsidiaria, lo que indica que si no
hay un delito de homicidio o de lesiones, no se puede aplicar esta figura;
porque la complicidad correspectiva solamente se aplica para los delitos de
homicidios y de lesiones, en cualquiera de sus tipos o modalidades.
LA RIÑA TUMULTUARIA:
Está referida en el Art. 425° Código Penal. "Sin perjuicio en lo dispuesto en el
artículo anterior y de las mayores penas en que se incurran por los hechos
individualmente cometidos, cuando en una refriega entre varias personas
resulte algún muerto o con una lesión personal, todos los que agredieron al
herido serán castigados con las penas correspondientes al delito cometido. Los
que hayan tomado parte en la refriega sin agredir al herido serán castigados
con prisión de uno a tres años. En los casos de homicidio, y de uno a seis
meses en los casos de lesiones.
Al provocador de la refriega se le aplicarán las penas que se dejan indicadas,
aumentadas en una tercera parte".
Como podemos leer, debe existir una refriega, lo que la doctrina llama "riña
tumultuaria", es decir, en otras palabras, una riña colectiva, donde varios
sujetos ocasionan lesiones (o también la muerte) a un solo sujeto. En este
caso, hay que determinar quienes son los sujetos que han agredido al herido o
matado a la persona; quienes, aunque participaron en la riña no lo agredieron y
quién o quienes son los responsables de provocar la refriega; ya que estos son
los sujetos activos de la riña tumultuaria, que serán sancionados según la
gravedad del hecho y su grado de participación en el mismo como señala el
texto del artículo 425° Código Penal.
El Art. 426° Código Penal. "El que en riña entre dos o más personas saque el
arma primero, arma de fuego o arma blanca, o primero dispare la de fuego,
será castigado con arresto de uno a seis meses, aunque no cause muerte ni
lesión; si las causare, la pena correspondiente al delito se le aplicará
aumentada en una sexta parte. En uno u otro caso se aplicará, asimismo, la
pena correspondiente por el delito de porte ilícito de armas".
Este artículo establece que el primero que saque un arma de fuego o blanca,
será sancionado con una pena aparte de lo que pueda sancionarse de los
delitos previstos en el artículo anterior.
En lo que respecta al Art. 423° Código Penal, es una causa de justificación; el
obrar en defensa de bienes contra el ladrón nocturno.