ANTROPOLOGÍA MARXISTA

Se encuentra ya en sus primeros escritos críticos sobre Hegel y Feuerbach.

Se concreta en 3 puntos:

1. Frente a la concepción abstracta hegeliana del hombre como conciencia y

pensamiento Marx define al hombre como actividad1.
2. Bajo ciertas circunstancias el hombre está alienado y cosificado, impidiéndose
su realización y libertad mediante su trabajo.
3. Crítica al concepto de alienación de Feuerbach: la alienación feuerbachiana es
abstracta, teórica y no se ocupa del hombre concreto.

La actividad como esencia del hombre

El hombre no es algo abstracto, una esencia previa, sino que es actividad, trabajo que se
realiza sin un modelo previo. Para Marx la dimensión práctica-activa del hombre es la
importante y definitoria. Mediante el trabajo

a) se pone en relación con la naturaleza y otros hombres (“la esencia del hombre
[…] es el conjunto de sus relacione sociales” 6ª tesis de las Tesis sobre
Feuerbach).
b) El hombre se realiza, muestra su verdadero ser.
c) Se integra en la naturaleza y la transforma humanizándola.

Alienación

La alienación es el extrañamiento del sujeto en su realización. Fue estudiada por

Hegel y Ludwind Feuerbach, y la concepción marxiana se perfila principalmente en la
lectura crítica de Feuerbach, quien la expuso en La esencia del cristianismo (1841),
libro que trata sobre el origen, desarrollo y naturaleza de la religión. Feuerbach afirma
que la religión es una creación humana, estando el origen de los dioses en una operación
humana en que se absolutizan e hipostasian propiedades humanas en realidades
trascendentes. Con el tiempo se produjo una inversión intercambiándose los papeles de
creador y creado, teniendo así lugar una alienación religiosa: el hombre se somete a
los dioses renunciando a su propia naturaleza en favor de la de un ser ajeno,
convirtiéndose en un ser alienado, ajeno a sí mismo. Un producto suyo (objetivación) se
le impone como una realidad a la que debe someterse “viviendo para otro”2.

1
Rasgo diferenciador que lo separa de los animales, pues modifica la naturaleza y no simplemente toma
de ella. Mediante el trabajo nos relacionamos con la naturaleza y con los demás hombres.
2
Crítica de Marx a la alienación feuerbachiana: Marx considera que Feuerbach realiza un análisis
abstracto de la naturaleza humano, que es meramente teórico y abstracto, y, finalmente, que no atiende a
la alienación fundamental que es la religiosa.
Marx critica la alienación feuerbachiana, que es del ámbito religioso, y la extenderá a
todos los demás ámbitos de lo humano, considerando que la fundamental es la
económica, la que afecta a la actividad, al trabajo. Para Marx la alienación es el
proceso o situación económica, etc. en el que el hombre es algo ajeno o distinto a sí
mismo, a lo que debería ser. Aunque son distinguibles varias alienaciones, la
fundamental y de la que derivan las demás es la alienación económica, la de la
actividad: lo que debería realizar y liberar al hombre lo deshumaniza, cosifica y aliena.

Mediante el trabajo el hombre debería expresar su naturaleza y realizar su humanidad y

libertad. Lo producido (objetos) es la esencia humana convertida o cristalizada en algo
físico, en algo externo. El problema está en que bajo ciertas condiciones históricas
(ej.: la sociedad capitalista industrial) el producto del trabajo no le pertenece, se ha
convertido en algo ajeno-extraño (alio) a él, en una mercancía, y tanto que mercancía
intercambiable, en una simple cosa. Bajo ciertas circunstancias el trabajo es una
actividad alienada y alienante

Podemos distinguir 4 dimensiones la alienación económica:

- Respecto de la naturaleza: la naturaleza deja de ser el original patrimonio

común a disposición de cualquiera para ser propiedad privada o mercancía.
- Respecto del trabajo: no es del trabajador, ni elegido ni ejecutado libremente, ni
creativo. El trabajador se ve obligado a venderse por un salario y a ser
explotado. El trabajador es un apéndice de la máquina.
- Respecto del producto: el producto resultado de su trabajo le es extraño (alio),
ajeno y no le pertenece. Pertenece a quien le paga el salario.
- Respecto de la sociedad: la posición ocupada en el trabajo determina nuestra
posición en la sociedad y nuestras relaciones sociales. Desde el punto de vista
social, el otro es visto como un rival con el que estamos en posición de
competencia. esto da lugar a una socidad sin relaciones armoniosas y justas entre
iguales y donde el otro pasa a ser un instrumento para realizar intereses egoístas.
El trabajo alienado es, por tanto, el origen de las diferencias y clases sociales.

Como actividad alienada, el trabajo contribuye a la realización del capitalista que se

adueña de sus productos, volviéndose el trabajo en su contra de su productor
enriqueciendo y aumentando el poder del capitalista.

Desde sus primeras obras Marx en que perfila el concepto de alienación, pone en
relación la alienación con la propiedad privada, abogando por su libertad.

La alienación económica es la fundamental, estructura y radical, y de ella dependen las

demás:

- Alienación social.
- Alienación política.
- Alienación ideológica (religiosa, filosófica, cultural, etc.): busca justificar,
naturalizar y legitimar la situación real de alienación y explotación, creando una
 falsa conciencia de la misma3. La alienación ideológica sería la culminación o
cierre de la alienación, en la medida en que justifica o legitimiza la situación4.
La ideología está al servicio de los intereses de la clase explotadora, ofreciendo
una representación aparentemente verdadera de la realidad.

3
Por ejemplo, haciendo creer al trabajador que el capitalista al poseer legítimamente los medios de
producción (talleres, máquinas, etc.) tiene el derecho fundado para apropiarse de una parte del trabajo
(plusvalor).
4
Ejemplos mediante expresiones corrientes: “Siempre ha habido ricos”, “es natural que el dueño se lleve
una parte de la coseña/producción, pues al fin y al cabo el campo/fábrica es suyo y nos da trabajo”.