Hernández (2016) que realizó un estudio de tipo descriptivo correlacional, en el que tuvo

como objetivo establecer la relación entre los estilos de liderazgo y la toma de decisiones de

los mandos medios de la Distribuidora de bebidas en la aldea Tojocaz del departamento de

Huehuetenango; la investigación se realizó con 25 sujetos, de sexo masculino entre las edades

de 25 a 50 años. Para el estudio se utilizó como instrumento el test de estilos de liderazgo de

Kurt Lewin, el cual contiene tres estilos (Autoritario, Democrático y Liberal) y el test de

toma de decisiones adaptado del cuestionario de 15 preguntas de Tsedek, el cual determina

los estados del yo adulto, padre nutritivo y padre crítico los cuales son enfocados en toma de

decisiones racionales y los estados del yo niño libre, niño sumiso y niño rebelde son

enfocados en toma de decisiones emocionales. Los resultados determinaron que no existe

correlación significativa entre estilos de liderazgo y toma de decisiones. Concluyó que la

mayoría de colaboradores se basa en la toma de decisión racional. Recomendó mantener la

toma de decisiones racionales por parte de los mandos medios, ya que el mismo es funcional

debido al tipo de actividades que realizan.

Por otro lado Ralda (2015) realizó un estudio de tipo descriptivo correlacional, en el que

tuvo como objetivo establecer si existe correlación entre inteligencia emocional y toma de

decisiones en los mandos medios de una empresa camaronera del municipio de Champerico

del departamento de Retalhuleu; la investigación se realizó con 27 sujetos de género

masculino y femenino. Para el estudio los instrumentos utilizados fueron, el Test de

Inteligencia Emocional (TIE) y el Test de Toma de Decisiones (TTD). Los resultados

determinaron que no existe relación estadísticamente significativa entre la Inteligencia

Emocional y la Toma de Decisiones. Concluyó que el 56% de los sujetos posee un índice de

Adulto (A), el cual por las características propias posee: ética, autonomía, responsabilidad,
manejo óptimo de información y un buen proceso de análisis y síntesis. Recomendó

programas de capacitación para fomentar y fortalecer el buen manejo de toma de decisiones

de los colaboradores de la empresa.

A su vez Quiroa (2014) realizó un estudio de tipo descriptivo, en el que tuvo como

objetivo conocer la influencia de toma de decisiones en la productividad laboral en

colaboradores del área de salud del departamento de Quetzaltenango; la investigación se

realizó con 50 sujetos de ambos sexos comprendidos entre las edades de 20 a 65 años. Para

obtener resultados se utilizó una escala de Likert la cual mide actitudes o predisposiciones

individuales en contextos sociales particulares. Los resultados determinaron que las

decisiones tomadas siempre van a afectar de una manera positiva o negativa dentro de la

organización. Concluyó que la toma de decisiones es muy importante para que cada uno de

los trabajadores pueda tener un mejor desempeño laboral. Recomendó un plan de

capacitación a todos los colaboradores para mejores resultados en la toma de decisiones.

Así también Flores (2013) realizó un estudio de tipo descriptivo correlacional, en el que

tuvo como objetivo determinar la relación entre el estilo de liderazgo y el estilo de toma de

decisiones de los coordinadores académicos de una Universidad Privada de la Ciudad de

Guatemala; la investigación se realizó con 36 empleados que desempeñan el puesto de

Coordinación Académica de las Facultades. Los instrumentos utilizados para el estudio

fueron el cuestionario de Estilos de Liderazgo y el test de toma de decisiones, diseñados por

Robbins. Los resultados determinaron que no existe correlación significativa entre los estilos

de liderazgo y la toma de decisiones. Concluyó que el estilo de toma de decisiones más

utilizado por los colaboradores fue el estilo analítico y el estilo de liderazgo que predominó

es el orientado a la persona. Recomendó a la institución seguir promoviendo y proporcionado

las herramientas, como talleres o conferencias donde puedan practicar las habilidades y

aprender a manejar situaciones, de forma que sensibilicen al personal sobre la importancia

de la toma de decisiones.

Por otra parte Tax (2013) realizó un estudio de tipo descriptivo correlacional, en el que

tuvo como objetivo establecer si los círculos de calidad contribuyen para mejorar la toma de

decisiones en las Cooperativas de Ahorro y Crédito de Totonicapán; la investigación se

realizó con 43 sujetos del área administrativa y operativa. Para obtener los resultados se

utilizó una boleta de opinión con preguntas abiertas y cerradas. Los resultados determinaron

que los círculos de calidad contribuyen en la toma de decisiones para detectar y dar

seguimiento a la solución de problemas. Concluyó que la participación de los colaboradores

en la toma de decisiones logra alcanzar los objetivos que se tiene dentro de estas instituciones.

Recomendó realizar reuniones quincenales de acuerdo a la necesidad de tomar decisiones y

dar solución a las situaciones que se presenten.

Así mismo Batres (2010) realizó un estudio de tipo descriptivo correlacional, en el que

tuvo como objetivo determinar la viabilidad de los métodos de comunicación para la toma

de decisiones de las medianas empresas del sector industrial de la ciudad de Quetzaltenango;

la investigación se realizó con dos grupos, el primer grupo representado por 6

administradores uno por cada mediana empresa y el segundo grupo integrado por 176

colaboradores del nivel operativo de las medianas empresas del sector industrial. Para la

obtención de resultados se utilizaron dos boletas de encuesta, una dirigida a los

administradores y otra dirigida a los colaboradores del nivel operativo. Los resultados

determinaron que los métodos de comunicación facilitan la toma de decisiones. Concluyó

que la toma de decisiones debe ser cuantitativa ya que de esta manera se logra una mayor
precisión de la información al momento de generar alternativas. Recomendó el

involucramiento del personal en la toma de decisiones a través de los métodos existentes.

Por otro lado Guzmán (2006), realizó un estudio de tipo descriptivo, en el cual tuvo como

objetivo analizar el proceso de toma de decisiones en las empresas importadoras de materia

prima para la industria alimenticia en Guatemala; la investigación la realizó con 20 gerentes

generales. Para recabar información elaboró un cuestionario con una pregunta abierta y seis

preguntas cerradas, el cual tuvo su origen y fundamento en los elementos de estudio y sus

respectivos indicadores. Los resultados demostraron que la aplicación del proceso de toma

de decisiones es aceptable ya que tienen suficiente conocimiento e información para

realizarlo. Concluyó que un 73% de gerentes generales aplican el proceso de toma de

decisiones para la importación de materia prima, mientras que un 23% no aplican totalmente.

Recomendó impulsar el proceso de toma de decisiones como una actividad gerencial dentro

de la organización ya que de este depende el éxito.

Del mismo modo García (2006) realizó un estudio descriptivo, con el objetivo de

determinar los criterios de decisiones sobre los cuales se basan los gerentes, directivos o

administradores de las pequeñas empresas afiliadas a la Cámara de Comercio de

Huehuetenango; la investigación se realizó con 25 sujetos siendo estos: propietarios,

administradores, gerentes o empresarios responsables de tomar las decisiones en las pequeñas

empresas. Para el estudio elaboró un instrumento tipo encuesta con preguntas cerradas, Los

resultados determinaron que la mayoría de los entrevistados llevan a cabo un proceso de toma

de decisiones, aunque éste se realiza de una manera mental y en ocasiones sin un orden.

Concluyó que las decisiones que toman los pequeños empresarios se caracterizan
especialmente por ser enfocadas a los valores éticos que ellos poseen, a la experiencia en el

medio y su creatividad. Recomendó fomentar la participación de los empleados en decisiones

importantes para la empresa, especialmente cuando se trata de personal con experiencia,

porque pueden brindar una mejor perspectiva de la situación actual así como información

valiosa al respecto.