Sei sulla pagina 1di 19

Universidad Autónoma de Nuevo León.

Preparatoria No.1

Actividad Integradora
Tema: Alcoholismo
Español 2
Grupo: 263
Maestro: Ernesto Soria Cortez
NOMBRE MATRICULA

Daniel Esteban Bautista 1931190

Manuel Jesús Espinosa Rodríguez 1849406

Jorge Jordán Rocha Flores 1936395

Cesar Gerardo Dávalos Rincón 1930424

José Carmen Mireles Alemán 1931187

Britney Gwyneth Chávelas Ramos 1930866

Jesús Emiliano Peña Molina 1925416

APODACA, NUEVO LEON A 15 DE FEBRERO DEL 2018


Índice
Introducción…………………………………………………………………………..3
Capítulo I. Alcoholismo…………………………………………………………….4
a) El alcoholismo es una enfermedad
b) ¿Qué es el alcoholismo?
c) ¿se puede curar el alcoholismo?
Capítulo II. Causas y efectos del alcoholismo…………………………………..7
a) Causas
b) Problemas familiares que pueden incidir en que una persona se transforme
en alcohólico
c) Efectos

Capítulo III. Alcoholismo en los adolescentes………………………………….9


a) ¿Una enfermedad o un entretenimiento?
b) ¿Culpas de la sociedad?
c) ¿Cuáles son las señales de que existe un problema de alcohol?

Capítulo IV. Mitos del alcoholismo………………………………………………...11


a) ¿Es buena para la salud?
b) ¿Previene ciertas enfermedades?
c) ¿Es un alimento?

Capítulo V. Detección del alcoholismo……………………………………………12


a) ¿Cómo detectar el alcoholismo?
b) ¿Cuáles son los síntomas?
c) Distinguirlos

Capítulo VI. Tratamiento para el alcoholismo……………………………………14


a) Doble AA
b) Psicólogos
c) Aceptar el problema
Referencia……………………………………………………………………………….16
Introducción
El alcoholismo, a diferencia del simple consumo excesivo o irresponsable de
alcohol, ha sido considerado en el pasado un síntoma de estrés social o
psicológico, o un comportamiento aprendido e inadaptado. El alcoholismo ha
pasado a ser definido recientemente, y quizá de forma más acertada, como una
enfermedad compleja en sí. Los primeros síntomas incluyen la preocupación por la
disponibilidad de alcohol, lo que influye poderosamente en la elección por parte
del enfermo de sus amistades o actividades.
El alcohol se está considerando cada vez más como una droga que modifica el
estado de ánimo, y menos como una parte de la alimentación, una costumbre
social o un rito religioso. Se caracteriza por una dependencia emocional y a veces
orgánica del alcohol, y produce un daño cerebral progresivo y finalmente la
muerte.
A pesar de que el alcoholismo afecta mayormente a los adultos, su consumo en
los adolescentes es cada vez más preocupante.
Nuestro trabajo consistirá en tratar este tema que más allá de ser una diversión,
se está transformando en un tema preocupante. Cada vez, más chicos terminan
borrachos cuando salen a bailar o se juntan con amigos.
A su vez, el consumo empieza cada vez desde más chicos, y los padres son cada
vez más permisivos al respecto.
ALCOHOLISMO

Capítulo I. Alcoholismo
a) El alcoholismo es una enfermedad
Muchas personas se preguntan ¿Es el alcoholismo una enfermedad? Y si es así,
¿Quién es un Alcohólico? Un Alcohólico, Alcohólica –según la definición de Marty
Mann- es “alguien a quien la bebida causa un continuo problema en cualquier
aspecto de su vida” y que sufre una enfermedad para la cual no se conoce cura
alguna, es decir, no hay curación en el sentido de que él o ella puedan ser
capaces de beber moderadamente, como lo hace un no-alcohólico por un periodo
determinado de tiempo.

Cuando se presenta la enfermedad -una compulsión física combinada con una


obsesión mental por beber-, el alcohólico debe aprender a permanecer totalmente
alejado del alcohol para poder llevar una vida normal. Fundamentalmente, el
alcoholismo es un problema de salud -una enfermedad física y emocional- más
que una cuestión de poca fuerza de voluntad o una debilidad moral. Al igual que
no tiene caso culpar a una víctima de diabetes por estar enfermo a causa de su
falta de fuerza de voluntad, es inútil cargar al bebedor problema con la
responsabilidad por la enfermedad o considerar esa forma de beber como un vicio.

El alcoholismo sigue muchos caminos. Hay quienes beben de manera


descontrolada desde su primer trago. Otros progresan lentamente durante
décadas hasta beber sin control. Algunos alcohólicos son solamente bebedores
diurnos. Algunos pueden ser capaces de abstenerse por largos períodos, que
luego cortan por un “carrusel” en el que beben sin ningún control. A estos últimos
se les llama “bebedores periódicos”.

Una cosa que todos los alcohólicos parecen tener en común es que, con el
tiempo, empeora su manera de beber. No existe evidencia confiable de que
alguien que haya bebido alcohólicamente haya sido capaz de volver, a la larga, a
beber normal y socialmente. No se puede ser “un poquito alcohólico”. A causa de
que la enfermedad progresa por etapas, existen diversos tipos de bebedores y
síntomas característicos de la enfermedad. Una vez que los bebedores problema
cruzan la línea dentro del alcoholismo, con todo, no pueden volver atrás.

b) ¿Qué es un alcohólico?
Es un padecimiento que genera una fuerte necesidad y ansiedad de ingerir
alcohol, de forma que existe una dependencia física del mismo, manifestándose a
través de varios síntomas de abstinencia cuando no es posible su ingesta. El
alcohólico no tiene control sobre los límites de su consumo, que va en aumento a
medida que se desarrolla tolerancia a esta droga. Se considera como una
enfermedad crónica, progresiva y mortal por la Asociación Médica Estadounidense
al igual que otras drogodependencias. Por su parte, la Organización Mundial de la
Salud (OMS) lo determina como toda forma de embriaguez que excede el
consumo alimenticio tradicional y corriente o que sobrepasa los linderos de
costumbres sociales.

La dependencia al alcohol puede resultar de una predisposición genética, una


enfermedad mental, el consumo de alcohol abundante, sostenido y abusivo o una
combinación de estos factores. Esta enfermedad no solo afecta al adicto sino
también la vida de todo aquel que se encuentra a su alrededor. Investigaciones
recientes sobre genética y neurociencia han identificado ciertas características
genéticas que se cree están relacionadas con la dependencia al alcohol. Los
investigadores continúan indagando el vínculo entre la herencia genética y el
alcoholismo. Actualmente no existe una posible cura para esta enfermedad, sin
embargo muchos alcohólicos se mantienen sobrios por periodos de tiempo
prolongados de acuerdo a su voluntad y compromiso para vencer esta
enfermedad. Pero es innegable que para que un adicto al alcohol pueda recibir
tratamiento y llegar a una posible recuperación, primero tiene que aceptar su
condición de dependencia al licor.
La adicción al alcohol o la dependencia a la bebida, también conocido como
alcoholismo, es la forma más grave del consumo problemático del alcohol.
Además de sufrir los típicos signos producidos por el abuso del alcohol, un
alcohólico tiene también una dependencia física al alcohol. Esto significa que ya
no puede controlar su consumo de alcohol y experimenta síntomas de abstinencia
si intenta parar.

El alcoholismo es una enfermedad crónica, lo que significa que una vez que
alguien ha desarrollado una adicción, será un adicto para el resto de su vida. Por
ejemplo, alguien que tiene dependencia al alcohol, cuando sufre desgaste físico
seguirá siendo un alcohólico, incluso después de que se haya tratado con éxito su
adicción. Mientras que dicha adicción al alcohol no se puede curar, sí se puede
controlar. La recuperación requiere del apoyo de la familia, amigos y profesionales
por igual. Infórmate sobre el eficaz programa de tratamiento de Triora

c) ¿Se puede curar el alcohólico?


Muchas personas con una adicción al alcohol y sus familiares se preguntan si se
puede curar el alcoholismo. ¿Podré beber alcohol alguna vez sin descontrolarme?,
¿llegará el día en que sea capaz de tomarme solo una copa de vino? La respuesta
es clara y contundente: no. Las personas con una adicción al alcohol no van a
poder tener una relación sana con esta sustancia nunca.

El alcoholismo no se cura, se controla, al igual que la diabetes u otras


enfermedades crónicas. Con un tratamiento adecuado las personas con una
adicción al alcohol pueden aprender a vivir sin esta sustancia de forma sana y
equilibrada. El alcoholismo es una enfermedad incurable pero la dependencia se
puede superar y la persona puede recuperar su libertad. Algunos pequeños
cambios pueden ayudar a reducir la cantidad de alcohol que se toma y controlar la
situación para impedir que se vaya de las manos. Algunas sugerencias para la
primera semana y luego añadir otras recomendaciones. Es vital, llevar la cuenta
de cuánto se bebe, hacerlo en una agenda o una aplicación móvil. Tomar nota de
cada trago antes de beber, hace ser consciente de todo lo que se ingiere. Fijar
metas: decidir cuántos días a la semanas se va a beber y el número de copas. Es
importante reservar algunos días a la semana para practicar la abstinencia y
ayudar al cuerpo a desintoxicarse.
Ir lento, beber con calma, a pequeños sorbos, consciente de cada uno de los
tragos. No beber más de una copa de alcohol por hora y alterna con agua o
refrescos. Fundamental: no olvidar comer, ya que con el estómago vacío hará que
la alcoholemia sea mayor y se pierda el control más fácilmente. Comer mientras
se bebe para que el alcohol sea absorbido más lentamente. Ser consciente de
cuáles son los estímulos que disparan ganas de beber. Si ciertas actividades,
horas del día, sentimientos, personas o lugares incrementan las ganas de beber,
planificar cuidadosamente actividades o rutas alternativas para evitar tomar. Si el
problema está en casa, no comprar alcohol. Planificar los pasos para controlar los
impulsos. Cuando aparezca un deseo muy fuerte de beber recordar los motivos
para cambiar. Puede ser útil hablar con una persona de confianza, y que ayude a
aceptar e integrar esas ganas, no dejándose llevar por ellas.
Es importante saber decir no, de manera educada y rápida a ofrecimientos. ¿Qué
hacer cuando un ser querido tiene un problema con el alcohol? La conciencia de
sufrir un problema con el alcohol es inversamente proporcional a la gravedad de la
adicción y son los familiares los que solicitan ayuda. Cuando nos damos cuenta de
que una persona a la que apreciamos no es capaz de controlar su consumo de
alcohol, una sensación de miedo e incertidumbre nos recorre. Podemos entonces
charlar calmadamente con la persona alcohólica sobre el problema y sobre cómo
afrontarlo. Ofrecerle ayuda, hacer que se sienta apoyado, entendido y no juzgado.
No tratar de hablar con la persona cuando haya estado bebiendo. Busca un
momento de sobriedad. Ofrecerle opciones de tratamiento. Dejar de salvar al
enfermo de los problemas económicos, sociales, laborales o legales que le causa
la bebida, debe ser él quien asuma las consecuencias de su enfermedad. Cuando
un alcohólico no quiere acudir a tratamiento ni dejar de beber, ponerse en contacto
con profesionales que puedan ayudar a la familia a saber qué hacer. El
alcoholismo es una enfermedad crónica. Con el tratamiento adecuado la persona
enferma puede aprender a vivir bien, una vida totalmente plena, sin recurrir a esta
sustancia.
Capitulo II. Causas y efectos del alcoholismo

a) Causas
No hay una única causa y si bien se cree que determinados genes podrían
favorecer el riesgo de desarrollar la enfermedad, se desconoce exactamente
cuáles son y cómo funcionan.

Las personas que tienen mayor riesgo de transformarse en alcohólicas son


aquellas que:

 Tomen más de 5 tragos (340 ml de cerveza, 140 ml de vino, 40 ml de


licor) en una ocasión por lo menos una vez a la semana
 Mujeres que tomen 12 tragos o más a la semana
 Hombres que tomen 15 tragos o más a la semana
 Tengan uno de los padres alcohólicos
 Tienen problemas de relacionamiento interpersonal

La mayoría de las personas consumen bebidas alcohólicas


 Para sentirse bien y divertirse.
 Para descansar y olvidar el estrés.
 Para escapar de situaciones negativas, desagradables.
 Para ser parte del grupo.
 Para emborracharse.
¿Qué es la abstinencia al alcohol y cuáles son sus síntomas?
El alcoholismo provoca síntomas indeseables como:
 Temblores.
 Nerviosismo.
 Confusión.
 Vómitos.
 Sudoración.
 Convulsiones.

b) Problema familiares que pueden incidir en que una persona se trasforme


en alcoholismo.
En este sentido, uno de los síntomas del alcoholismo es el aumento de la hostilidad
y la agresividad. La persona alcohólica cada vez es menos tolerante y menos
paciente ante los estímulos del exterior reaccionando de manera hostil en
situaciones que no puede controlar. El riesgo de ser una persona violenta aumenta
muchísimo debido a estos factores generando que la vida social y familiar del
enfermo o la enferma se vaya reduciendo y se convierta en una persona tóxica para
las relaciones interpersonales.
Por un lado, las consecuencias sociales del alcoholismo son sumamente
importantes para entender su adicción. Su vida social comienza a girar en torno al
consumo de alcohol. La mayoría de las veces empiezan a necesitar alcohol para
socializar o entablar nuevas relaciones. Además, se utiliza el consumo de alcohol
como excusa para encontrarse con los amigos y amigas de manera que se genera
una dependencia para relacionarse con el exterior. Todo esto se ve agravado por
los problemas psicológicos y de autoestima que genera el alcoholismo.

Por otro lado, las consecuencias del alcoholismo en el entorno familiar también son
muy relevantes. Mientras la familia ve cómo se va degradando la salud y la vida
social de la persona alcohólica, él o ella no son capaces de aceptar que tienen un
problema hasta que llegan a una situación extrema. Los familiares más
cercanos puedes pasar por procesos en los que culpabilizan del enfermo llegando
incluso a abandonarlo y cortar los nexos familiares.
c) Efectos

Las bebidas alcohólicas han estado con nosotros durante miles de años. A pesar
de ello, no parece que el hombre haya comprendido que el consumo excesivo de
alcohol es peligroso, perjudicial e incluso mortal.

El alcohol hace daño en todos los rincones de nuestra cultura actual. Los daños
llegan a ser tan graves y tan fuertes que incluso se podría decir que el alcohol
impide y corrompe nuestra civilización. Se proporciona evidencia en el informe
anual de la Organización Mundial de la Salud, el Informe del Estado Global acerca
del Alcohol y la Salud.

Aproximadamente dos millones y medio de muertes cada año están relacionadas


con el alcohol. En total, el 4 por ciento de muertes en el mundo y el 4,5 por ciento
de enfermedades y de lesiones pueden ser atribuidos al alcohol.

Efectos del Alcohol – enfermedades o problemas específicos causados por el


abuso de alcohol:

 Intoxicación etílica
 Accidentes de tráfico
 Violencia, agresiones y asesinatos
 Cáncer de colon/recto, mama, laringe, hígado, esófago, cavidad oral y
faringe
 Suicidio
 Trauma y lesiones por caídas, quemaduras y agresiones
 Enfermedad cardiovascular
 Diabetes
Capitulo III. Alcoholismo en los adolescentes.

a) ¿Una enfermedad o entretenimiento?

El consumo de bebidas alcohólicas ha sido siempre fuente de graves problemas,


pero en la época actual sus efectos negativos se han agravado por circunstancias
<nuevas. Una de ellas es que las bebidas alcohólicas se han popularizado
rápidamente entre los adolescentes y cada vez son más jóvenes las personas que
beben. Las causas que llevan a consumir alcohol a la juventud son múltiples y
variadas. Para algunos, significa el falso atractivo de entrar en el mundo de los
adultos y romper con las pautas que marcan el universo de la niñez. Para muchos
más, en cambio, no hay verdadera diversión sin
alcohol de por medio, y ello porque el alcohol, aun
consumido en pequeñas cantidades, estimula la
corteza cerebral y vuelve a las personas más
desenfadadas y ocurrentes. El problema es que tras
esos primeros efectos de euforia aparece una
pérdida de autocontrol y las personas asumen
conductas que sin el catalizador etílico no serían capaces de adoptar. Nuestro país
tiene más de 1.265.000 alcohólicos mayores de 16 años, pero lo sintomático del
futuro nada promisorio es que tiene más de 800.000 menores de entre 12 y 15 años
que ya consumen alcohol regularmente. Esta precocidad pone de manifiesto una
situación de aceleramiento en la reducción de la edad de inicio: el 35% comienza a
beber entre los 16 y 18 años; el 31% lo hace entre los 13 y los 15; en tanto, hay un
9% que actualmente experimenta con el alcohol antes de esa edad. El abuso de
alcohol en los menores se encuentra instalado y socialmente aceptado. Se ha
resuelto impulsar una fuerte ofensiva contra la venta de alcohol a menores. Hasta
hace algún tiempo, y no sin cierta condescendencia, esta nociva costumbre fue
considerada una moda temporaria que más tarde o más temprano -como tantas
otras-, terminaría por extinguirse. Esa actitud permisiva tuvo graves consecuencias:
la afición por el alcohol se ha convertido en un hábito que tiene hondo enraizamiento
en las franjas más jóvenes de la sociedad. Cualquier transeúnte puede presenciar
el desalentador espectáculo de menores que beben en la vía pública, en algunos
casos refugiándose en los umbrales y en otros a la vista y paciencia de los demás.
¿Cómo obtienen las bebidas a pesar de las reglamentaciones vigentes? Éstas son
reiteradamente violadas porque nadie se preocupa por hacerlas respetar. A ello se
suman otros dos factores: el cuidado despreocupado de los respectivos núcleos
familiares y el desmedido afán de lucro de ciertos comerciantes a los cuales tiene
sin cuidado el daño que provocan. Al traspasar los límites de una ingesta moderada
y esporádica, los bebedores de alcohol -tanto más cuando se trata de jóvenes- se
arriesgan a transformarse en adictos. Las cifras del consumo juvenil comienzan a
ser preocupantes por su progresivo asentamiento y, sobre todo, por las pocas
barreras capaces de contrarrestar su incidencia. Las estadísticas nos indican que la
droga está presente en muchos ámbitos antes incontaminados, sobre todo en los
juveniles, donde el camino de introducción es preparado por el consumo desmedido
del alcohol. El alcohol representa una droga "lícita" con la cual se inician los jóvenes
en el vicio adictivo porque es barato, accesible y socialmente aceptado. Las
organizaciones criminales lo utilizan como una puerta a nuevas experiencias dado
que trabaja abriendo brechas en las que se infiltra, gradualmente, el concepto de
iniciación en el consumo. El exceso en el consumo de alcohol suele ser el primer
paso antes de probar la marihuana o la cocaína. El alcohol es, en muchos casos, el
camino a la droga y muchísimos jóvenes han comenzado a transitarlo. En Al-Anon,
asociación que agrupa a los familiares de alcohólicos, afirman que antes lo más
común era hablar de mujeres e hijos de alcohólicos. Pero cada vez es más frecuente
ver padres, amigos y maridos, ya que en los últimos años se incrementó el número
de adolescentes y mujeres que tienen problemas con el alcohol. Por ese motivo,
fundaron grupos de padres donde es posible compartir experiencias

b) CULPAS DE LA SOCIEDAD

Las bebidas alcohólicas suelen aparecer asociadas con el éxito social, en los
negocios o en el deporte. Los momentos más románticos se acompañan con vino o
champagne. La cerveza patrocina al seleccionado nacional de fútbol... Y la lista
podría seguir indefinidamente. Muchas cosas generan que el adolescente beba,
entre ellas la presión de los grupos de adolescentes. Hay además, una cultura que
favorece el consumo del alcohol. Además,
muchos de los espectáculos deportivos,
que tienen por mayoría de público gente
joven, tienen como publicidad de marcas
de conocidas bebidas alcohólicas. Esto
quiere decir que en sí que las personas
han hecho que todo tipo de festejo,
reunión o simplemente para ser parte de
algo tiene o debes beber alcohol para
entrar en ambiente con los demás.

c) ¿Cuáles son las señales de que existe un problema de alcohol?

Cinco señales principales para identificar dependencia o abuso de alcohol:

 Alta tolerancia al alcohol: significa que la persona bebe cantidades cada vez
más grandes de alcohol. Una persona con alta tolerancia puede beber más
que los demás sin mostrar señales obvias de intoxicación.
 Presentar síntomas de abstinencia cuando no se está tomando. Estos
síntomas incluyen ansiedad, temblor, nerviosismo,
sudoración, náuseas y vómito, insomnio,
irritabilidad, depresión, fatiga, Dolores de cabeza e
inapetencia. Algunos individuos sufren
convulsiones potencialmente mortales debido a la
abstinencia
 Tener problemas recurrentes con la bebida: las personas pasan menos
tiempo realizando actividades que solían ser importantes, pues el consumo
de alcohol ocupa más de su tiempo, energía y concentración
 Poder seguir bebiendo a pesar de las consecuencias negativas: algunas de
las posibles consecuencias son problemas en el trabajo, daño al matrimonio
o a otras relaciones, o padecimientos de salud.
 La persona no puede dejar el alcohol o reducir su consumo aun cuando
desea hacerlo.

Capitulo IV. Mitos del alcoholismo

a) ¿Es buena para la salud?


Con seguridad has leído o escuchado en algún lugar que es bueno incluir en la
dieta una dosis moderada de alcohol, porque trae beneficios para la salud, en
especial, para el corazón. Pero, ¿qué tanto es moderado? y ¿cuáles son los
beneficios y los riesgos de tomar una copa o un trago de vez en cuando? Sigue
leyendo para que te enteres.

Cuando sales a tomar con tus amigos y al otro día te despiertas con la resaca, te
acuerdas de la famosa frase: “hay que beber con moderación”. Aunque ya sea
muy tarde para pensar en beber moderadamente porque te tomaste todos los
tragos de la noche, y la cabeza no te para de dar vueltas, nunca es tarde para
aprender por qué beber alcohol en moderación podría ser beneficioso para tu
salud. El problema surge cuando se quiere definir qué tanto es “moderación”.
¿Una copa, dos, cuatro? ¿De qué depende?

b) ¿previne cierta enfermedad?


Algunos de los beneficios para la salud de incorporar el alcohol en moderación en
tu dieta que se han estudiado son:
 Reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares o del corazón
 Reduce el riesgo de morir de un ataque al corazón o infarto
 Reduce el riesgo de sufrir derrames o accidentes cerebrales o apoplejías
 Puede ser que reduzca el riesgo de sufrir de diabetes
 Reduce el riesgo de sufrir de cálculos (piedras) en la vesícula
Pero hay cierta controversia y no todos los estudios están de acuerdo. En lo que sí
concuerdan es que es muy importante que no te excedas de la cantidad
mencionada.

Al beber alcohol en exceso puede causar muchos daños a la salud, entre ellos:
Pancreatitis—en particular en las personas que tienen niveles elevados de
triglicéridos en su sangre
 Cáncer del hígado, páncreas, esófago, boca, laringe, faringe y cáncer de
mama o seno.
 Daño del músculo cardíaco o cardiomiopatía alcohólica
 Derrame o accidente cerebral o apoplejía (ACV)
 Presión arterial alta (hipertensión)
 Aborto
 Cirrosis
 Malformaciones del feto
 Lesiones debido a un accidente de tránsito cuando se maneja bajo el efecto
del alcohol
 Depresión y tendencias suicidas
Recuerda que el alcohol sólo es bueno cuando se toma con medida. Esto no
quiere decir que se recomienda que empieces a beber si no bebes. El alcohol no
es necesario para la salud. Hay muchas formas de mantenerse saludable sin él.
Esto es para las personas que ya lo beben, para que lo hagan en moderación. Así
que ¡no te excedas!

c) ¿Es un alimento?

En respuesta a estas preguntas, el alcohol de forma aislada (ya que la cerveza y


el vino, como bebidas alcohólicas sí que aportan nutrientes), se considera un
alimento no nutritivo, es decir “una caloría vacía”, ya que no aporta ningún
macronutriente ni micronutriente, aunque si nos aporta una gran cantidad de
energía (7 kcal/g). Más que los hidratos de carbono (4 kcal/g), y menos que las
grasas (9 kcal/g).

Una de sus características principales, es que crea adicción o dependencia, por lo


que un consumo no adecuado o excesivo, puede provocar consecuencias muy
negativas para nosotros y para las personas que nos rodean. En este caso, nos
referimos al alcoholismo.

Capitulo V. Detección del alcoholismo.

a) ¿Cómo detecta el alcoholismo?

Las adicciones al alcohol y a las drogas resultan de un largo proceso que en ningún
caso se origina de la noche a la mañana. Ambos tipos de adicciones son muy graves
para el que la sufre, y además de originar conflictos a nivel social, repercuten
gravemente en la salud física. Detectar a una persona adicta al alcohol o a las
drogas no es fácil, pero en el caso de los adictos a la bebida, uno de los primeros
aspectos que resultan relativamente fáciles de
detectar es la cantidad de alcohol consumido,
especialmente cuando más se conoce a la
persona.
Este tipo de consumidores nunca suelen negarse
a beber otra copa cuando se encuentran en
compañía de otros, y una vez empiezan no se dan cuenta de cuándo su consumo
está fuera de control. No pueden parar de beber. Como sucede en la mayoría de
las adicciones, una persona alcohólica negará tener un problema con la bebida. Por
otro lado, hay ciertos indicativos que tienen que ser considerados, por ejemplo, si la
persona se enoja cuando se le critica por beber demasiado, o cuando la persona
adicta al alcohol muestra síntomas asociados a la ansiedad o la depresión. En
Triora proporcionamos un test orientativo para comprobar si puede existir un
problema de alcoholismo.

b) ¿Cuáles son los síntomas?

Por lo general, se puede realizar un autodiagnóstico


Los síntomas incluyen consumo recurrente de alcohol a pesar de los problemas
legales y de salud relacionado. Las personas alcohólicas pueden beber al
comienzo del día, sentirse culpables por el consumo y tener el deseo de reducir la
cantidad de alcohol que ingieren.

Las personas pueden sufrir:


 Todo el cuerpo: laguna mental, ansias,
inestabilidad, mareos o sudoración
 Comportamiento: agitación, agresión,
comportamiento autodestructivo,
comportamiento compulsivo o falta de
autocontrol
 Estado de ánimo: ansiedad, culpa,
descontento general, euforia o soledad
 Gastrointestinales: náusea o vómitos
 Psicológicos: delirio o miedo
 También comunes: dependencia física de sustancias, habla mal
articulada, problemas de coordinación o temblor

c) Distinguirlos:
 La cantidad de alcohol ingerido por un adicto es progresivamente mayor
con el paso del tiempo, haciéndose necesario para ellos incrementar la
cantidad y la frecuencia en la que lo beben.
 Hay que estar atentos a la desaparición de cosas alrededor de la casa: es
normal para ellos hurtar joyas, dinero en efectivo, cheques y otros
productos de valor para conseguir su bebida y calmar su ansiedad.
La desesperación los lleva a realizar actos inconcebibles y con el correr del
tiempo pierden la sensación de culpa y arrepentimiento.
 En el abuso del alcohol resulta muy normal para los adictos comenzar a
tomar incluso antes de reunirse con amigos, con el objetivo de tomar junto a
ellos la misma cantidad y así evitar levantar sospechas
Capítulo VI. Tratamiento para el alcoholismo
a) Doble AA

El ejemplo y la amistad de los alcohólicos en recuperación ayudan al recién


llegado en su esfuerzo por dejar de beber. Comparten sus experiencias y le
transmiten cosas tan sencillas como que "si no se toma la primera copa, no se
puede uno emborrachar", o a no proponerse metas a largo plazo y sustituirlas por
otras de plazos más cortos, como por ejemplo 24 horas.

"Cualquier alcohólico puede pasar 24 horas sin tomar esa primera copa".

Al no ingerir alcohol, los alcohólicos se recuperan físicamente de su enfermedad.


Pero, el alcoholismo es una enfermedad que no sólo afecta al cuerpo, si un
alcohólico en recuperación quiere alcanzar una sobriedad duradera necesita
también una mente sana y unas emociones equilibradas.

El programa de Recuperación de A.A. ayuda al alcohólico a poner en orden sus


pensamientos confusos y a deshacerse de la carga de negatividad de sus
sentimientos. Los miembros asisten a reuniones de A.A. con regularidad, para estar
en contacto con otros miembros y para aprender cómo aplicar mejor el Programa
de recuperación en sus vidas. Rara vez se ha visto
fracasar a una persona que haya seguido
cuidadosamente el Programa de Recuperación de
Alcohólicos Anónimos. Los que no se recuperan son
aquellas personas que no pueden o no quieren entregarse
totalmente a este sencillo Programa. Las experiencias de
los miembros de A.A., explican de modo general, cómo
eran, lo que les ocurrió y cómo son ahora, tras haber dado
ciertos pasos en la aplicación del Programa de
Recuperación.

b) Psicólogos.
Tratamiento del alcoholismo
La dependencia del alcohol puede originar numerosos problemas tanto al paciente
alcohólico como al entorno que le rodea (familiares, amigos, vida sentimental,
trabajo). Las consecuencias de la adicción alcohólica pueden manifestarse en el
individuo (atrofia cerebral, cirrosis hepática…), en el entorno social (malos tratos,
distanciamiento…) y en el entorno laboral (accidentes laborales, ausencias
injustificadas…).
Por un lado, existen individuos que consumen alcohol reiteradamente, de forma
excesiva, pero que nunca llegan a mostrar síndrome de abstinencia; por otro lado
hay individuos que, abusando igualmente del alcohol, muestran síntomas de
abstinencia cuando dejan de beber. Estas diferencias definen el abuso y la
dependencia.
El tratamiento psicológico del alcoholismo que nuestro centro propone intenta
incrementar la conciencia de enfermedad del paciente haciéndole ver los riesgos
reales de la adicción al alcohol a la vez que se le dota de instrumentos que permitan
reducir la exposición a situaciones asociadas con el consumo de bebidas
alcohólicas.
En algunos casos, el tratamiento psicológico puede reforzarse de forma coordinada
con tratamiento farmacológico de un médico experto para asegurar una
rehabilitación con éxito.
Para asegurar la continuidad del tratamiento y la máxima eficacia en el proceso de
desintoxicación y deshabituación alcohólica recomendamos contratar nuestros
bonos de terapia.
Terapia psicológica individual
Las primeras dos o tres sesiones se utilizan para la correcta evaluación y
diagnóstico del paciente. Una vez analizada la problemática específica de cada caso
se procede a presentar un informe con los modelos de inicio (¿cómo surgió el
problema?) y de mantenimiento (¿por qué se mantiene?) y se fijan los objetivos de
tratamiento a medio y largo plazo.
Durante las siguientes sesiones se aplica la terapia psicológica cognitivo
conductual para dotar al paciente de las herramientas que le permitan detectar y
superar situaciones de riesgo.
La terapia permite al psicólogo orientar al paciente para que supere sus dificultades
pero es el paciente quién debe esforzarse por poner en práctica los cambios de
hábitos, rutinas y tareas que el terapeuta indique para su correcta recuperación.
Una vez superados los objetivos de terapia, el psicólogo realizará algunas sesiones
adicionales más distanciadas en el tiempo para hacer un seguimiento que permita
evitar recaídas y asegurar una recuperación definitiva del paciente.
Terapia de pareja y mediación familiar
Dirigido a aquellas parejas a las que la convivencia cada vez les resulta más difícil,
la terapia de pareja y mediación familiar trata de buscar puntos en común con el
objetivo de reconstruir la relación y solucionar los conflictos anteriores de una forma
definitiva.
La mediación familiar también puede ser una apoyo para las parejas que han
decidido separarse y requieren de un intermediario neutral que les ayude a llevar
adelante este proceso de la forma menos traumática posible y minimizando el efecto
negativo que pueda tener en los hijos u otras personas ligadas a la antigua relación
de pareja.
La terapia de pareja es la herramienta de tratamiento idónea para solucionar los
problemas de pareja, si bien éstos pueden ser tratados también con sesiones
individuales para profundizar en el análisis de la perspectiva de cada individuo.
Ventajas:
 Permite poner en común información de forma inmediata.
 Posibilita al terapeuta la mediación en conflictos de pareja.

c) Aceptar el problema.
El enfermo alcohólico Aceptación o negación en la familia
El alcoholismo no es una enfermedad de un solo individuo, es una enfermedad
familiar, ya que sus repercusiones deben ser enfrentadas por todos los miembros
de la familia.
El alcoholismo es una enfermedad crónica que consiste en el consumo excesivo e
incontrolado de bebidas alcohólicas por parte de la persona que la padece.
Aunque, si lo vemos desde otra perspectiva más seria, el alcoholismo no es una
simple enfermedad, es un factor social que afecta a todas las esferas de una
sociedad. El alcohólico sufre de forma psíquica y física.
El enfermo alcohólico
Su constante preocupación es tener el dinero para la compra de la bebida, sin estar
consciente del daño que causa en su familia, del daño que se causa a sí mismo y
cómo le afecta esto en su trabajo, en la sociedad y en todos los ámbitos.
Muchas veces el alcohólico, cuando reconoce el problema, trata de curarse
buscando ayuda en Alcohólicos Anónimos u otras instituciones, otras veces no
quiere reconocer su enfermedad y se enfrasca en la bebida, la cual puede hasta
causarle la muerte.
Negación
La negación del problema por parte del enfermo y de sus familiares hace que su
descubrimiento y tratamiento sea difícil. Generalmente la persona alcohólica no
quiere, ni puede, reconocer que es adicto al alcohol, establece como excusa una
serie de factores tales como:
* "Bebo solamente para socializar."
* "Son los nervios, los que me hacen beber."
* "Es la única manera en que puedo relajarme."
* "Si no salgo con mis amigos a beber dirán que soy antisocial y que tu me mandas."
* "Bebo todos los días pero a la medida."
* "No tiene nada de malo divertirse un momento."
* "Es que no puedo decir que no."
Aunque el alcohólico invente y se apoye en una serie de excusas, lo cierto es que
toda persona que necesite beber a diario, o necesite de la bebida un par de días por
semana y que no pueda controlar su límite, es un enfermo alcohólico. Toda persona
con cierta dependencia alcohólica en menor o mayor grado es un enfermo
alcohólico.
La familia debe reconocer y aceptar cuando se convive con un alcohólico y tratar de
apoyar sin reproches al enfermo. No ayuda cuando se niega la enfermedad por
mantener las apariencias y no causar problemas familiares.
Tipos de alcoholismo
* El alcohólico de diario: es aquel enfermo que necesita consumir todos los días
para sentirse bien.
* El alcohólico intermitente: es el que tiene la necesidad de ingerir alcohol cada
cierto tiempo, no muy prolongado, pero ha adquirido la dependencia.
* El alcohólico de fin de semana: es lo mas corriente en la situación actual. No falta
ni un fin de semana que no pueda dejar de salir a beber. Se da mucho entre las
personas jovenes.
Consecuencias en la familia
Cuando en la familia hay una persona que es alcohólica, las consecuencias de la
enfermedad la sufren todos los miembros. Se pierde la confianza y, sobre todo, la
armonía familiar.
El cónyuge es la persona que tiene que aceptar que vive con un alcohólico y, por
ende, tomar las medidas necesarias para ver cómo ayuda a su pareja y solucionar
el problema junto. Así mismo, la pareja es la que tiene que lidiar con los desastres
provocados por la enfermedad, dar soporte a los hijos, dar excusas y explicaciones
al resto de la familia y sobre todo, mantenerse con equilibrio ante la situación, así
como mantener su autoestima.
Como siempre los más afectados son los hijos, que son los testigos de gritos,
insultos, violencia doméstica y falta de respeto. Los hijos terminan encerrados en
sus habitaciones deseando que no llegue la hora en que el alcohólico llegue a su
casa, se evaden viendo televisión o escuchando música a alto volumen, muchas
veces optan por salir de la casa cuando llega la hora tan temida.
Los hijos tienen que sufrir las consecuencias de los comentarios tanto de la familia,
como de los vecinos, y muchas veces, se hacen antisociales debido al temor y
vergüenza de las preguntas que hacen las demás personas.
El alcoholismo es una enfermedad que se debe enfrentar en familia, donde se debe
apoyar al enfermo no negando la enfermedad, sino buscando ayuda para salir del
problema de la mejor manera posible. Así mismo el alcohólico debe reconocer,
aceptar y buscar ayuda, sin olvidar el daño que se causa a sí mismo y a los seres
que ama.
Conclusión:
Britney: La juventud es una etapa muy importante de la vida en la que hombres y
mujeres se van descubriendo en forma espontánea y rápida a ellos mismos.
Algunos lo hacen sin grandes tropiezos, avanzando en la formación de la
personalidad que les permitirá ser, ya mayores, gente útil a la sociedad de la que
formarán parte. Otros, en cambio, no tendrán tan feliz destino y se verán
acorralados por circunstancias poco favorables y a veces tristes. Entre ellos están
los alcohólicos predispuestos tempranamente a que esta terrible enfermedad los
atrape en esa etapa jovial de sus vidas. Los caminos que los llevan a vivir
experiencias tan desgraciadas son muchos y variados. Pero actualmente el mundo
que nos toca compartir está demostrando que el alcoholismo ya se ha instalado
con vigor en la juventud, sumiéndola en cruentas circunstancias que, años atrás,
estaban reservadas a gente de mayor edad.

José: Al término de esta investigación me he podido informar sobre todas las


consecuencias que puede ocasionar el consumo de alcohol excesivamente. Así
como los malestares que puede ocasionar en nuestra vida.
Me he podido percatar que este problema surge en muchas ocasiones porque los
"amigos" lo dicen por tanto lo imitamos, porque Así creemos que estamos en la
onda. Otro problema que influye, son los problemas personales (con familia, la
sociedad, etc.), y sobre todo con ellos mismos.
Así mismo puedo decir que si uno tiene fuerza de voluntad y si quiere, puede dejar
de tomar, con ayuda de expertos, tratamientos, centros de apoyo y sobre todo
comprensión de la familia.
Daniel: la verdad pues la actividad nos ayudó a reforzar más de lo que sabíamos
del alcoholismo, pues teníamos que investigar los temas y los subtemas del
trabajo en equipo, lo más importante es que todos trabajaron bien, nomás que
algunos no trabajaron por flojos, pero como quiera ellos no, nos detendrá para
hacer el trabajo, podemos decir que fue un trabaja muy largo, pues tenía mucha
información para leer, al igual que sacar información en diferentes fuentes porque
si no venía en una página de internet, teníamos que buscar en libros, periódicos,
etc. la mayoría lo sacamos de internet unos cuantos de libro, pero lo más
importante es que podemos trabajar en equipo.

Cesar: Pues en base a lo que investigue del subtema de los tratamientos


alcoholismo, creo que es importante atender este problema que jóvenes
presentamos a muy temprana edad y también algunas personas de la tercera
edad que por el descuido de su salud son enfermos y hasta a veces no pueden
dejar de beber alcohol por lo mismo de esa adicción en fin creo que a donde vayas
a que te ayuden siempre tienes que tener fuerza de voluntad para poder salir
adelante de su problema.

Potrebbero piacerti anche