Una mirada critica desde el Trabajo Social
Reflexiones en torno
a la "cuestion social"
Desgrabacién de la conferencia
del Dr. José Paulo Netto! dictada el
25 de octubre de 2000 en Ia Carrera
de Trabajo Social de la UBA
Estar hoy acd me trae mucha alegria porque me
reencuentro con viejos amigos.
La idea de la charla es algo en lo cual estoy trabajando
hace un tiempo. No sé cémo esta el debate profesional en la
Argentina, pero en Brasil, Chile y Europa hay una discusi6n
muy fuerte en tomo a la “cuestién social”. Se trata de una
discusién que no es casual. En los ultimos veinte aflos en
todo el mundo, sobre todo bajo orientaciones politicas eco-
némicas del llamado “ajuste”, se han incrementado, agudizado,
Procesos sociales de pauperizacién frente a los cuales se
han establecido nuevos patrones de analisis que recuperan
las viejas nociones de marginalidad, o plantean nociones que
parecen nuevas, como la exclusién social.
En el marco de eso se discute: zHay una nueva “cues-
tién social”, o hay nuevas expresiones de la vieja “cuestién
social"? Esta discusién es extremadamente importante para
los trabajadores sociales. Me gustaria entonces, a modo de
(1) Doctor en Trabajo Social. Docente e investigador de la Pontificia Universi-
dad Catélica de San Pablo y de la Universidad de Rio de Janeiro, Brasil.Nuevos escenarios y practica profesional
charla, intercambiar ideas sobre esto.
Intentaré distinguir tres momentos en mi exposicion.
Primero hablaré sobre la “cuestién social" tal como ha
sido pensada en el siglo XIX, y hasta mediados de nuestro
siglo. Segundo, me gustarla subrayar algunas de las relacio-
nes y conexiones del Trabajo Social con esta tematica. Ter-
cero, discutir un poco con ustedes si hay 0 no una “nueva
cuestién social”, o si tenemos por delante nuevas expresio-
nes de la causalidad historica de la “cuestién social”, qué ha-
cemos como trabajadores sociales frente a eso.
Mi hipétesis es la siguiente: no hay ninguna situacion
histrica que ponga limites a las acciones profesionales y que
no ofrezca, ademas, posibilidades y alternativas.
El primer punto parece una cuestién filoséfica, pero no
lo es. Hoy esta muy fuerte en el imaginario, y en el discurso
de distintas profesiones, la idea de lo “social”. Si hay una
palabra cuyo contenido preciso, riguroso, es muy dificil de
establecer, es ésta: “social”. Lo “social” sirve para todo. Pero,
curiosamente, esta es una palabra muy moderna; con la car-
ga semantica que tiene hoy, no tiene mas de 200 afios. To-
das las indicaciones documentales accesibles a la investi-
gacién apuntan que lo “social” emerge, surge sobre todo en
el pensamiento francés en los afios "30 del Siglo pasado, y -
gana una densidad muy Tuerte en la transicion de los afios
‘40 a los ' ar
Y sien un primer momento la palabra era casi exclusiva-
mente francesa, en el paso de los afios '40 y’50 se vuelve
universal. Hay una raz6n histérica para eso. Es la revolucion
dé!"48, ustedes saben que la revolucién del "48 es divisoria
de aguas, una frontera muy clara en el siglo XIX. Esta revolu-
cién que empezo en febrero en Francia, como un rastrillo de
pdlvora cubrié toda Europa occidental, incluso su parte medi-
terranea, y también Europa Central y Asia Oriental, donde
toma un rumbo que es de liberacién nacional. Pero la gran
reivindicacion ge ice revolucionarios del '48, no por azar, era
la Republica Social. p siteaagate wisi cell
10
“Una mirada critica desde el Trabajo Social
Es la primera vez que con fuerza trasciende el léxico ted-
rico y el léxico de los politicos. Les recuerdo que eLespacio de_
la politica era todavia muy restrictivo, el voto universal era toda-
via una demanda; pero esta palabra emerge de grupos peque-
fios para saturar, llenar la sociedad. Pero la palabra va a_ ganar __
dos sentidos distintos. En los medios revolucionarios y
reformistas, entendiéndose por ello, de una parte, el proléfaria-
do, que surge como sujeto historico en las jornadas del '48; y
como reformistas los sectores radicalizados (la pequefia bur-
guesia). En este marco, lo “social” denotaba un universo que
involucraba lo politico y lo econémico, donde la idea de Reptibli-
a Social era casi una reivindicacién revolucionaria.
Pero el pensamiento conservador se ha apropiado de la
expresién, y es cuando surge —en los '40-, pero con mucho
mas fuerza después de Ia revolucién del '48, la idea de “cues-
tién social”. Se puede afirmar que la expresién “cuestién so-
cial”_aparece en el vocabulario politico del siglo XIX después _
de la revolucién del '48, y con un significado que es distinto
del que tiene entre los revolucionarios y los reformistas. Esto
me parece un punto muy importante. Incluso para que noso-
tros podamos pensar el Trabajo Social en sus origenes. Mi-
ren, tanto los reformistas pequefios burgueses como la pe-
qQuefia burguesia radicali: , que tiene un papel muy impor-
tante en las jornadas del '48, pensaban que la problematica
nee
_ social del orden burgués —les recuerdo que el orden burgués
gana su institucionalizacién hace poco tiempo; el Cédigo
Napoleénico, que es la gran estructura del Estado burgués,
es de 1808, 0 sea que las cosas estaban muy frescas en la
memoria social- sdlo seria solucionada con una revolucién
politica que marcase él transito hacia un orden pos-burgués,
0 Sea Socialista. Entonces, para la izquierda en la segunda
mitad del siglo XIX no habia solucién técnica ni social a los
_ problemas sociales sin cambios politicos fundamentales.
Habia como una hipoteca. La solucién de las cuestiones
que marcaban el orden burgués —cuestiones de desempleo,
bajos salarios, pésimas condiciones de trabajo, de habitacién,
1"Nuevos escenarios y prictica profesional
acceso a la educacién, a servicios de salud— sdlo podria dar-
se con un profundo cambio politico que tuviera incidencias
econdémicas. Fuera de eso, ni revolucionarios ni reformistas
pensaban en la posibilidad de solucionar los problemas so-
ciales. 4Cémo reacciona frente a estas proposiciones el pen-
samiento conservador?
Aca hay que abrir un pequefio paréntesis: es importante
no confundir el pensamiento conservador con el pensamien-
to reaccionario, alinque en nuestro lenguaje cotidiano aso-
ciemos lo reaccionario con lo conservador. El_pensamiento
reaccionario es un pensamiento restaurador, o sea, él pre-
tende la restauracién de las instituciones socio-politicas del
antiguo régimen. Esta no es la posicién de los conservado-
res. Los conservadores se distinguen de los reaccionarios,
desde el punto de vista tedrico-politico, por el hecho funda-
mental de suponer que no se hace girar hacia atras la rueda
de la historia.
Para los conservadores, a lo largo del siglo XIX, el fin del
antiguo régimen era algo establecido. O sea, la unidad de la
iglesia con el Estado, las ordenes o Estados feudales, nada
_de eso era restaurable. Para los conservadores la revolucién
~ burguesa —el orden burgués— ya estaba establecida y no ha-
_ bia cémo volver al estado anterior.
‘ {Qué caracteriza al pensamiento conservador? De una
\ parte, la idea de que el orden burgués es el orden final de la
/ historia; 0 sea, después de la Revolucion Francesa, toda revo-
lucién no es mas un caso de politica, es un caso de policia;
luego, hay que reprimir los movimientos revolucionarios. Pero
al mismo tiempo, y en eso los conservadores se distinguen
/ netamente de los reaccionarios, ellos entienden que esta so-
ciedad no es perfecta, que tiene problemas, y es necesario
reformaria,, éVen lo que parece paraddjico?: los conservado-
res son reformistas. Es propio del pensamiento conservador, y
es necesario subrayar esto especialmente cuando estamos
conversando con trabajadores sociales mas progresistas, por-
que ellos tienden a identificar a conservadores y reaccionarios
12
Una mirada critica desde el Trabajo Social
en una misma cuna. Pero, son diferentes.
Es propio del conservadurismo proponer reformas. Todo
conservador es reformista, pero no todo reformismo es conser-
vador. Lo que caracteriza al reformismo conservador es que
6ste piensa todas las reformas bajo una doble luz: 1) sus limi-
téS, son los limites del orden burgués, se trata de un_reformis-
mo para mantenerlo; 2) la despolitizacién de la reforma; es un
feformismo que despolitiza la naturaleza de la reforma. La re-
forma propuesta por los conservadores incide siempre sobre.
aspectos técnicos, administrativos y procesuales. Cierro este
téma y después lo retomamos en el debate.
~Qué hace el pensamiento conservador después del '48?
Propone reformas sociales, reconociendo —asi como los re-
volucionarios y los reformistas— que el orden burgués tiene
problemas. Pero, el pensamiento conservador crea la expre-
sin “cuestion social” para decir lo siguiente: Hay problemas
en el orden burgués que pueden ser solucionados en el mar-
co de este orden. Y esos problemas son los que se conocen
bajo la expresi6n “cuestién social”.
Voy a repetir para que quede claro. Para los socialistas y
para los revolucionarios comunistas la problematica social del
orden burgués en el siglo XIX podria Ser solucionada con cam-
bios estructurales —politicos— cuyas derivaciones econémi-
cas vulnerabilizaran el orden burgués. Para ellos, por lo tan-
to, la problematica social propia de la sociedad burguesa no.
era solucionable en el marco de esta sociedad. El pensamiento
conservador, que no es reaccionario, acepta que hay proble-
mas sociales, pero propone para solucionarlos reformas en
el marco de este orden; y llama a estos problemas “cuestion
social”. Y propone intervenir sobre la “cuestién social” bajo
las dos luces que he subrayado antes. La primera: es posible
intervenir sobre la “cuestién social” en el marco de este or-
den, 0 sea que no es necesaria otra estructura societal. La _
segunda luz: haciendo intervenciones técnico-manipulativas.
Para decirlo mas sencillo: hay problemas sociales, con bue-
na administracién y buenos técnicos podemos solucionarlos;
13‘Nuevos escenarios y practica profesional
el problema es de planeamiento, de estrategia, de
operacionalidad, de! buen uso de los recursos.
Con esto quiero enfatizar algo: en si misma la expresion
“cuestién social” es una expresion conservadora. Esta expre-
sién es una objetivacién del pensamiento conservador, el cual
reduce lo.que.son.problemas estructurales del orden burgués
a su expresién despolitizada, que es “cuestion | social”.
"Es evidente que estoy hablando de la génesis, esto cam-
bia con los afios. Sdlo un detalle: jamas he escrito la expre-
sin “cuestién social” sin comilla:
del pensamiento conservador, len
pensamiento conservador de que es posible enfrentar la “cues-
tién social” sin enfrentar los rasgos estructurales del orden
burgués.
Bueno, gquién ha incorporado primero la idea de la “cues-
tién social’? Han sido los prusianos. Ustedes saben que la
unidad nacional alemana es la penultima unidad nacional eu-
ropea. Esta se obtiene en 1869 bajo el control prusiano. En
los ltimos 30 afios del siglo pasado, uno de los ultimos paj-
ses a constituir su Estado nacional, Alemania, experimento
un brutal desarrollo capitalista. Pero, curiosamente, sin ha-
ber pasado por una revolucién democratica burguesa. La re-
volucién burguesa tal como se ha operado en Inglaterra, en
Francia, en Béigica, no ha ocurrido en Alemania. En Alema-
nia el desarrollo capitalista se hace con una burguesia muy
débil, y para el contro! de la nobleza prusiana. Su maximo
representante es Bismark. El periodo bismarkiano marca el
ingreso del proletariado en Alemania, es entonces que ocu-
rre la tardia revoluci6n industrial en este pais. Entre 1870 y
1900, Alemania se vuelve una potencia capitalista. Su indus-
trializacién es tardia pero muy intensa; lo que significa decir
que con una burguesia débil hay un proletariado muy vigoro-
‘sO, muy combatiente, y sobre el cual las reivindicaciones re-
volucionarias y reformistas encuentran larga resonancia. No
es casual que el primer partido socialista de masas haya sido
el Partido Social Demécrata Aleman.
14
Una mirada critica desde el Trabajo Social
Bueno, gqué hace la elite prusiana? Incorpora el pro-
blema de la “cuestién social”.
Bismark es un anticipador, promueve las primeras
protoformas de politicas sociales. Las politicas sociales sur-
gen entonces como una anticipacién a las demandas obre-
fas; y con la clarisima idea de que a través de estos instru-
mentos institucionales se pueden reducir los impactos de los
problemas propios de la industrializacién.
Entonces, los primeros en trabajar, en el sentido de una
intervencién, sobre la “cuestion social”, son los prusianos; que
como ustedes saben han sido siempre muy practicos desde
el punto de vista politico. No es casual que la idea de una via
Prusiana, 0 sea un desarrollo capitalista sin reformas estruc-
turales, se haya vuelto una llave holistica muy oe
Gramsci va a llamar a esto “revolucién pasiva”.
Los prusianos han sido muy practicos; en estos proce-
sos dejaron de lado las cuestiones religiosas de sus tiempos.
Pero no olviden que la Iglesia Catdlica venia de una pérdida
enorme de influencias, y sobre todo de recursos, desde la
Revolucién Francesa. La Revolucién Francesa marca la_
laicizacion del ae ene, tania ae la década del '80 la
de legitimacién en ie medio av los trabajadores, una vez que
se ponia abiertamente en el campo reaccionario. Hasta la
década del ‘70/'80 del siglo XIX el Vaticano promueve la res-
tauracién. En la segunda mitad del siglo XIX el Papa reclama
por las instituciones medievales, la cual es el ejemplo del re-
accionarismo extremo de la Iglesia Catdlica. En las décadas.
‘80/ '90 queda muy claro que con esta orientacion la Iglesia
perderia sus feligreses entre los trabajadores. Hay una clara
inflexion, un claro giro en la orientacion de la Iglesia. Esto
comparece en la enciclica de Leén XIll, que es cuando la
Iglesia por primera vez deja de proponer una programatica
reaccionaria y asume una clara perspectiva reformista, pero
de! reformismo conservador. El eje de esta enciclica es la
ce hens
“cuestion social”. El Papa, el Santo Padre, incorpora ora la “cues ‘cues-
15‘Nuevos escenarios y practica profesional
—-
Yd
tin social”. Esto es el fundamento de la doctrina social de la
iglesia en la modemidad. Es un esfuerzo deta iglesia para’
abrir su camino en el marco de la modernidad. Lo cual desa-
rrollara intentando confluir con las practicas anticipatorias de
sistemas de proto-politicas sociales que han sido utilizadas
inicialmente por los prusianos. Y bajo esta orientacién ideold-
gica de la Iglesia, es que el conservadurismo trae para si el
trato de la “cuestién social". O sea, aquel enunciado que es
propio del conservadurismo, gana ahora mas que el simple
reconocimiento de los problemas.del orden burgués. Y con
este reconocimiento va a ir toda una programatica socio-poli-
tica. Yo diria que con todas las modificaciones y con todos los
cambios; es esta linea interpretativa de la “cuestién social” la
que hasta hoy, mas de cien afios después, continua de algu-
na manera amparando las formas de intervencién del pensa-
miento conservador.
cial"?
tion
social”..4Cémo se percibe esto? Se percibe en una argumen-
tacién que no es exclusiva del Papa. Valdria la pena hacer un
estudio de cémo el conservadorismo reformista de Le6n XIII
no sdlo recoge algunos de los elementos de la experien
prusiana, sino también, curiosamente, elementos e la tradi-
cidn positivista. Ustedes diran: 4cémo puede ser que el Papa
tome las ideas de alguien que ha sido radicalmente protes-
tante como Bismark? Bismark incluso habia perseguido a los
catélicos alemanes... Es una mezcla inusitada. Pero mas in-
usitada todavia es la relacién de la Iglesia con el positivismo.
Ustedes saben que la iglesia tiene distancias muy claras con
el positivismo. Sea desde el punto de vista ideolégico, o des-
de el punto de vista epistemolégico, ustedes saben que las
bases de la doctrina social es el newtonismo, y el newtonismo
no es facilmente conciliable con el positivismag,.a expresion
entonces de la enciclica del ’91 es una sintesis del pensa-
miento conservador no sdlo catdlico, yo dirfa que la habilidad
4Cuales son las caracteristicas de estejencuadre He los
problemas sociales sees soa stio se El
imer rasgo 6S Una Clarisima moralizacién_d
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Una mirada critica desde el Trabajo Social
¢ de esta enciclica es que recoge para el encuadre de la Igle-
)sia toda una serie de ideas, de proyectos, que estaban como
} flotando en el pensamiento conservador de la segunda mitad
del siglo xx
Si leen las obras de Comte, encontraran un proyecto de
reforma social que no es muy distinto al del Papa. {Cual es el
eje del proyecto? La moralizacién de la “cuestién social”. Ello
consiste en la supdsicién de que hay un orden natural en la
sociedad. En la sociedad hay una jerarquia social que es na-
tural. Entonces, es natural que haya quienes mandan y quie-
nes obedecen; que haya ricos y pobres. Y el Papa dice: asi
como en el cuerpo hay manos, pies y cerebro; en la sociedad
estan los de arriba y los de abajo, esto es natural. Entonces,
hay ricos; no hay que tocar eso porque es
natural. Pero, al mismo tiempo que dice esto, 4a qué recurre
el Santo Padre para decir que esto no puede ser motivo de
discordia, de conflictos ? El dice: “Hay una chispa divina en
todos los hombres que los unifica por la gracia de Dios a tra-
vés de la nocién de la ‘solidaridad’, de la fraternidad; que se
traducen _caridad”. Entonces, gqué propone el Santo
) Padre? Primero; que los obreros no oigan las palabras de los
falsos profétas, que no se articulen para hacer huelgas, sa-
botajes. El mensaje del Papa es clarisimo: “Sefiores, cierren
los oidos a los anarquistas, a los sindicalistas, a los socialis-
tas, que son falsos profetas. No se debe conspirar contra los
\ Patrones”. Rero al mismo tiempo el Papa se dirige a los em-
presarios y les dice que es necesario contener sus ansias de
ganancias, es necesario pagar sueldos decentes. Es esta di-
reccién_moral la que fundamenta la caridad y la filantropia_
que puede unificar a la sociedad,
Vean este doble movimiento: de una parte, la naturaliza-
cién, y de otra parte, la moralizacién. Es una exigencia moral
trabajar para que este orden natural no cree c iones de
contflictividad. Es el primer rasgo de la proposiciér
que hacen los conservadores, y que se encuentra muy claro
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