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En- nues- tro- en- ga- ño –in- mó- vi –les- vi- vi- mos
En- nues- tro en- ga- ño in- mó- vi –les- vi- vi- mos (endecasílabo)
Los fenómenos métricos que resultan de la no coincidencia entre el cómputo
silábico métrico y fonológico son:
La hormiga en el sembrado.
Se ahogaba en el crepúsculo
Estos tres fenómenos, por considerarse que son recursos propios sólo del poeta,
son conocidos como licencias métricas. Sin embargo, no son exclusivas de la
versificación. En el habla corriente producimos muchas sinalefas y sinéresis, e
incluso diéresis en la pronunciación enfática.
Mayúsculas: versos de arte
mayor
Minúsculas : versos de arte
menor
Un número: sílabas fijas
Raya: verso suelto, sin rima
Rima: C,A: consonante,
asonante
de versos
Número Romance –a –a –a … 8 A Es la forma estrófica
más típica de la
Indeterminado métrica española.
de versos
Número Silva Combinación C Cuando la
de versos combinación se repite
Indeterminado heptasílabos y periódicamente recibe
endecasílabos. el nombre de estancia
de versos Disposición
libre.
Medida de los versos
Romance:
El romance que nació como forma de expresión de la épica, pronto invadió otros
campos y se convirtió también en forma aceptable en la lírica: Romance de
Fontefrida.
Los primeros romances datan del siglo XV. Desde entonces, su cultivo no va a
cesar hasta nuestros días.
Cuando el romance presenta versos heptasílabos, recibe el nombre de endecha; si
está constituido por versos de menos de siete, romancillo; si de once, romance
heroico.
El soneto:
ABAB- ABAB
Por fin, el soneto a veces presenta un añadido de tres versos que recibe el nombre
de estrambote.
A partir del Modernismo, la métrica se hace cada vez más rica y las formas
clásicas, cada vez más, ceden el paso a formas convencionales.
El Modernismo, creado por Rubén Darío, rompe los moldes de la métrica clásica y
ensaya brillantes variaciones de muchas estrofas, creando incluso formas nuevas.
Versos
Córdoba
Lejana y sola.
Correr y atravesar
El mar. La mar.
A la ciudad?
Del mar?
En sueños, la marejada
Se lo quisiera llevar.
Acá?
Federico.
Tú no estás.
Federico.
Tú no estás.
Federico.
Me llegaba a la cintura.
Si derribaran mi frente
XLIV
¡Llora! No te avergüences
LI
De mí has hablado.
Y esta vida mortal y de la eterna
De mí has pensado.
XXXVIII
XXI
Poesía...eres tú.
XXIII
(Moguer, Huelva, 23 de diciembre de 1881 – San Juan, Puerto Rico, 29 de mayo de 1958).
Tiene varias crisis depresivas (la muerte de su padre, la ruina familiar cuando perdieron todo su
patrimonio embargado) y permanece ingresado en sanatorios en Francia y en Madrid. En esta
ciudad se instala definitivamente; realiza viajes a Francia y a Estados Unidos, donde se casa en
1916 con Zenobia Camprubí.
En 1936, al estallar la Guerra Civil española, se exilia a Estados Unidos, Cuba y Puerto Rico. En
este último país recibe la noticia de la concesión del Premio Nobel de Literatura en 1956. Tres
días después muere su mujer de cáncer y J.R.J. se recluye en casa. En 1958 el gran poeta fallece
en Puerto Rico. Sus restos son trasladados a España, donde están enterrados junto con los de su
esposa, en el panteón familiar de Moguer.
Etapa intelectual (1916-1936): la segunda etapa empieza desde Diario de un poeta recién
casado (1917); es el camino hacia la poesía pura y desnuda.
Etapa suficiente o verdadera (1937-1958): todo lo escrito durante su exilio americano. Juan
Ramón continúa replegado en sí mismo en busca de la belleza y la perfección.
Platero y yo (1917) es la obra, sin duda, que más fama le ha dado. Un delicado poema escrito en
prosa musical, perfecta y sugestiva. Escrita en prosa poética, donde funde fantasía y realismo en las
relaciones de un hombre y su asno. El libro es una comunicación de la soledad, para la que se vale de
Platero, el borriquillo, y de los niños, por lo que muestra una gran ternura, sobre todo por los niños
pobres y enfermos, los niños necesitados. Es el libro español traducido a más lenguas del mundo,
junto con Don Quijote de Miguel de Cervantes.
Juan Ramón Jiménez. (1881-1958)
El viaje definitivo
(1875 - 1939)
Nació en Sevilla. Su infancia transcurrió en la capital andaluza, de la que siempre
recordará algunos elementos procedentes de su casa natal: el patio, la fuente, el
limonero. (Uno de ellos (fuente o fontana) lo veremos en el texto que estudiaremos)
Fue el segundo de cinco hermanos, hijo de un eminente folcklorista recopilador de la poesía
popular andaluza.
Perteneciente al movimiento literario de la Generación del 98.
Hermano de otro ilustre literato, Manuel Machado, junto al que escribe obras de teatro.
En 1883, toda la familia se traslada con él a la capital de España.
Su primer viaje a Francia lo hace con su hermano Manuel en 1899, trabajando como
traductor de español . Su estancia en París le pone en contacto con los poetas simbolistas
franceses, principalmente con Paul Verlaine y con el poeta nicaragüense Rubén Darío.
Fruto de todo ello es la publicación en 1903 de su primer poemario "Soledades", donde
hace alarde de la estética modernista. Un modernismo intimista que hunde sus raíces en
Bécquer y Rosalía de Castro.
En 1910 con una beca de un año de duración para estudiar filología francesa en París, va
a la Sorbona. En los años sucesivos vive en Segovia y Madrid, donde le nombran en 1927
miembro de la Real Academia Española, aunque nunca llegó a tomar posesión de su sillón.
Es la clase. En un cartel
se representa a Caín
fugitivo, y muerto Abel,
junto a una mancha carmín.
En el aire conmovido
mueve la luna sus brazos
y enseña, lúbrica y pura,
sus senos de duro estaño.
El jinete se acercaba
tocando el tambor del llano.
Dentro de la fragua el niño,
tiene los ojos cerrados.
(1910/10/30 - 1942/03/28)
En los años 30 viaja a Madrid, busca trabajo pero, pese a sus esfuerzos, no lo
consigue. Conoce a poetas como el chileno Pablo Neruda, y los españoles
Rafael Alberti, Luis Cernuda y otros.
MIGUEL HERNÁNDEZ
Es Miguel Hernández uno de los poetas españoles que más admiración puede
despertar entre los amantes del verso. Nanas de la cebolla está dedicado a su
segundo hijo (el primero murió con pocos meses), Manuel Miguel, y guarda en
cada palabra una desesperación curada únicamente por el anhelo de verle.
La cebolla es escarcha
cerrada y pobre:
escarcha de tus días
y de mis noches.
Hambre y cebolla:
hielo negro y escarcha
grande y redonda.
En la cuna del hambre
mi niño estaba.
Con sangre de cebolla
se amamantaba.
Pero tu sangre
escarchaba de azúcar,
cebolla y hambre.
Una mujer morena,
resuelta en luna,
se derrama hilo a hilo
sobre la cuna.
Ríete, niño,
que te tragas la luna
cuando es preciso.
Alondra de mi casa,
ríete mucho.
Es tu risa en los ojos
la luz del mundo.
Ríete tanto
que en el alma, al oírte,
bata el espacio.
Tu risa me hace libre,
me pone alas.
Soledades me quita,
cárcel me arranca.
Boca que vuela,
corazón que en tus labios
relampaguea.
Es tu risa la espada
más victoriosa.
Vencedor de las flores
y las alondras.
Rival del sol,
porvenir de mis huesos
y de mi amor.
La carne aleteante,
súbito el párpado,
y el niño como nunca
coloreado.
¡Cuánto jilguero
se remonta, aletea,
desde tu cuerpo!
Desperté de ser niño.
Nunca despiertes.
Triste llevo la boca.
Ríete siempre.
Siempre en la cuna,
defendiendo la risa
pluma por pluma.
Ser de vuelo tan alto,
tan extendido,
que tu carne parece
cielo cernido.
¡Si yo pudiera
remontarme al origen
de tu carrera!
Al octavo mes ríes
con cinco azahares.
Con cinco diminutas
ferocidades.
Con cinco dientes
como cinco jazmines
adolescentes.
Frontera de los besos
serán mañana,
cuando en la dentadura
sientas un arma.
Sientas un fuego
correr dientes abajo
buscando el centro.
Vuela niño en la doble
luna del pecho.
Él, triste de cebolla.
Tú, satisfecho.
No te derrumbes.
No sepas lo que pasa
ni lo que ocurre.