Una Familia

Había un oso caminando en el bosque, pero este oso era curioso y no solo porque le
gustara estar en donde habí más de alguna exivisión, sino que el quería saber muchas cosas sobre
donde vivía.

Lo lamentable del oso era que no tenia una familia, el era un viajero pero esta vez habí
decidido estar por un tiempo en el bosque y descansar después de ver tantos lugares. Había visto
España, Londres, Japón y habí uno en especial que se había convertidor en su lugar favorito y este
tenia un nombre interesante y no era ni más ni menos que Reino de los Dulces.

Este reino era totalmente de dulces y como no, el principe que miraba por el bien de los
aldeanos era alguein de buen corazón, alegre ynada más que guapo. ¡No Podemos negarlo! ¡Era
realmentte guapo!

El oso vivia a unos cuantos metros del reinno, de vez en cuando iba a ver el lugar o a solo pasear.
Los dulces de ese reino eran los más deliciosos de todo el mundo y no había que pagar eran
¡Gratis!

Un día el oso quiso ir a caminar y fue ahí donde se dio cuenta que debía conocer a más
personas y hacer amigos, porque los amigos son los mejores acompañantes que uno pudiera tener
para tener la mejor compañia.

-¡Que aire más refrescante! – exclamó

-tienes mucha razón querido amigo, el día de hoy es un buen día – una voz extraño apareció cerca
del osito

-Me disculparás pero yo no lo conozco señor…

-Leonardo la oveja – sonrío amablemente

-Un gusto Leonardo la oveja

-El gusto es mío osito, me disculparás pero debo ir a comprar unos dulces – ve a la niña y le
extiende un dulce - ¿quieres un dulce pequeña?

La oveja le da el dulce a la niña y se va.

-La ovejita Leonardo es muy buena

Siguió su camino, camino y camino, llego a una casa de madera. Su curiosidad por un olor
que salía de la casa era lo que le llamaba la atención a entrar pero ¿Deberia de entrar?, el no lo
sabía realmente.

Tocó la Puerta tres veces y la Puerta se abrió solita, al entrar vió una mesa llena de todo
tipo de comida

-Deliciosa comida… - el oso se saboreaba la comida per ¿Estaba bien si comia solo un poco?

No hacia daño así que vio toda la cas en busca de alguna persona pero no había nadie así
que era su Oportunidad para comer.

Tomo cada trozo de comida que se encontraba en la mesa, satisfecho sonrío. El sonido de
la Puerta abriendose lo estremecio, salto en su sitio al ver a un gato.

-¿Quién eres? – pregunto el gato cruzado de brazos

-Buenas Tardes, soy osito Julian – se levanta saludando

-mucho gusto osito, soy el gato Angel

-Lamento lo de la comida, pero toque y la Puerta se abrió sola, así que entre
-No te preocupes, tenia una fiesta más tarde con unos amigo pero tu tranquilo, hare más y estás
invitado a venir

-Gracias, no lo dudes vendre – dijo y salio de la casa

Siguió caminando de nuevo recorriendo un camino de priedras y a sus lados árboles

adornaban el lugar todo se veia realmente hermoso. Despu´´es d eun tiempor de recorrer el lugar
llegó a la entrada del reino de dulces, entró a ver el lugar.

-Bienvenido al reino de dulce -saludo cordialmente

-Princípe Allan – Hizo una reverencia ante el princípe

-hola osito – se ríe un poco

-h-hola – Saluda nerviso

-ha que se debe tu visita?

-solo pasaba aquí a recorrer el lugar un poco

-Es Bueno que hagas ejercicio – Camina un poco hacia atrás -Vamos

-En verdad que el lugar no ha cambiado mucho desde la última vez que vine – viendo el lugar

-hace cuanto que no vienes? – pregunta

-pues…como un día – Las risas del princípe asustarona al osito

-nada va a cambiar en solo un día! – eclamó riendose

-Yo solo decía… - agacha la mirada

-Tranquilo, pero debo dejarte tengo asunto reales que atender

-asuntos reales? – levanta una ceja con curiosidad

-sí, son como el caso de cuando el hombre bizcocho se callo a la Fuente del centro y tuvimos que
regresarlo a su forma normal

-A Bueno, entonces no molesto – se despide con la mano y se va

(…)

Habían pasados tres horas desde que entro de nuevo a su casa, debia descanssar pero no
faltaba mucho para que tuviera que salir de nuevo e irse a la casa del gato Angel para ir a una
reunion con otros de sus amigos.

Al llegar a la casa, toco tres veces la Puerta y espero a que le abrieran, poco tubo que
esperar cuando le abrió el gato con una sonrisa, le dijo un ¨Adelante¨ para que entrara y así lo
hizo. Cuando paso su vista por el lugar escucho unas risas a lo lejos, camino a paso ento hacia ellos
hasta que se encontró con nadie más que con las personas que choco ese dia Leonardo la oveja y
el princípe Allan, pero había uno más que el no conocia.

-Ella es Misa, mi hermana – Dijo el gato

-Mucho gusto soy la hermana menor de Leo – Saludo

-El gusto es mío – Sonrío el oso

-Bueno hora de festejar! – Frito el princípe

La fiesta había comenzado, todos bailaban, conversaban, se levaron bien desde un

principio y no era para más que así seria durante muchos años.

(…)

Los años pasaron y siguieron siendo amigos, no había nada que los separaba pero el osito
estaba más que feliz porque tenia ya una familia con la hermana del gato, su amor había sido a
primera vista desde el momento en que se vieron.

No pedia más tenia todo lo que quería, una familia, amigos, todo lo que el deseaba desde
un principio se hizo realida.

FIN

Moraleja:

Los sueños los puedes alcanzar sit e propones llegar a cumplirlos, no debes dejarlos por un
lado, siguelos y se haran realidad. Una sonrisa lleva siempre contigo a donde vayas siempre.