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UNIVERSIDAD ABIERTA PARA ADULTO

(UAPA)

Asignatura:

Derecho Civil V

Tema:

Practica VII

Participante:

Miguel Ángel Francisco Tapia 14-4126

Santo Domingo, Distrito Nacional


2016
TEMA VII La Hipoteca

EVOLUCIÓN DE LAS HIPOTECAS

El contrato de hipoteca.

Es un contrato solemne que necesita, para su validez, la intervención de un


Notario. Que hace que un determinado bien inmueble quede sujeto al
cumplimiento de la obligación o al pago de un crédito, sin que el Propietario del
Inmueble se desapodere de el, implica para su titular un Derecho de Persecución
y un Derecho de Preferencia.

Caracteres de las hipotecas.

La hipoteca es un derecho real indivisible, esto es, aunque se reduzca la


obligación garantizada no se reduce la responsabilidad sobre la totalidad de la
finca. Así se desprende del artículo 1860 que establece que "la prenda y la
hipoteca son indivisibles, aunque la deuda se divida entre los causahabientes
del deudor o del acreedor". Igualmente, recoge esta seña de identidad de la
hipoteca el artículo 122 de la Ley Hipotecaria que dice: "la hipoteca subsistirá
íntegra, mientras no se cancele sobre la totalidad de los bienes hipotecados,
aunque se reduzca la obligación garantizada, y sobre cualquiera parte de los
mismos bienes que se conserve, aunque la restante haya desaparecido; pero sin
perjuicio de lo que se dispone en los dos siguientes artículos".

La hipoteca, como sabemos, es un derecho accesorio. Es un derecho real


accesorio derivado de un derecho de crédito. En este sentido, las vicisitudes del
derecho de crédito afectan al derecho real pero no al contrario (las posibles
mutaciones del derecho de crédito pueden a su vez afectar a la hipoteca, no a la
inversa).

1. La hipoteca no implica desposesión. En materia de posesión podemos


distinguir en la hipoteca dos etapas:

a) Una primera etapa que se denomina plazo de seguridad, que comprende desde
la fecha de constitución de la hipoteca hasta el cumplimiento de la obligación
garantizada. En este periodo el propietario de la finca puede hacer con ella lo
que tenga por conveniente siempre que su actividad no suponga un menoscabo
del valor del bien hipotecado.
b) El segundo plazo es el llamado plazo de ejecución. En el plazo de ejecución
lo que se establece es que el hipotecado puede estar sometido a la voluntad del
acreedor que en ciertos supuestos puede solicitar incluso la administración de
la finca sobre la hipoteca que se ha constituido.

2. El acreedor hipotecario tiene derecho de persecución, esto es, el poder de


dirigirse contra cualquiera que tenga el bien.

3. La necesidad de determinación de la obligación garantizada y de la garantía,


estableciéndose el grado de responsabilidad que se asume en la escritura
pública inscrita en el Registro de la Propiedad.

4. La hipoteca es transmisible tanto en el lado activo como en el pasivo. En este


caso, el acreedor puede vender el derecho de crédito a un tercero y ese
tercero adquiere el crédito con todas las garantías incluida, lógicamente, la
hipoteca. Por otra parte, igualmente, el deudor puede también enajenar el
bien y transmitir la hipoteca a un tercero que tendrá que responder que se
subroga en la deuda del deudor.

Clasificación de las hipotecas.

Hipotecas Legal (Simples «creadas por la ley» y Privilegiadas «se benefician


de un trato de favor»);

Hipotecas Judicial: Es la que resulta de las sentencias o actos judiciales;

Hipoteca Convencional: Es la que depende de posconvenios y de forma


exterior de los actos y contratos; y

HIPOTECAS DE LA MUJER CASADA: Según Art. 2135 del Código Civil,


Es la que graba los bienes Inmuebles del marido, a contar desde el día
del matrimonio. La mujer no tiene hipoteca por las sumas dótales procedentes
de sucesiones o donaciones que se les hayan hecho durante el matrimonio, sino
desde el día en que se abrieron las sucesiones, o desde aquel en que tuvieron
efecto las donaciones. No tiene hipoteca por la indemnización de las deudas que
haya contraído con su marido, y para el reemplazo de sus propios bienes
enajenados, sino a contar desde el día de la obligación o de la venta.

La Hipoteca Pupilar: Según Art. 2135 del Código Civil, para asegurarle a los
incapaces, los impúberes, los menores y a los furiosi, el cobro de los créditos
resultantes de la mala gestión de su tutor o curador, le concede en primer
término, un privilegio de acción interpersonal, Derecho de Prelación con
respecto a los acreedores quirografarios, pero no un Derecho de Persecución.
Formas de la hipoteca convencional

Las hipotecas se dividen en: legales, judiciales o convencionales. La hipoteca


legal es aquella que se deriva de la ley, por ejemplo, la hipoteca legal de la mujer
casada, que la mujer posee de pleno derecho sobre los bienes propios del marido
sin necesidad de una constitución convencional.

Sanción de las reglas de forma y responsabilidad del notario

La responsabilidad del notario se fundamenta en dos principios:

1) En relación directa con el estricto y fiel cumplimiento del oficio notarial que
debe desempeñar el notario, cumpliendo con todos los deberes generales que
le impone la función y

2) en referencia a la responsabilidad que debe tener el notario ante las personas


que le solicitan sus servicios, a quienes no puede defraudar la confianza que en
él hayan depositado; ya que en el caso de defraudarla, la consecuencia es que
se le hace responsable por los daños y perjuicios provocados.

Esta responsabilidad obedece al deber de obrar conforme a las normas propias


de la función notarial.

La responsabilidad civil en que incurre el notario, nace de la abstención o


actuación ilícita, con culpa o no, que dé lugar a uno de los siguientes supuestos:

a) Por causar daños y perjuicios al abstenerse, sin causa justa, de autenticar por
medio de un instrumento público un hecho o un acto jurídico.

b) Por provocar daños y perjuicios en virtud de una actuación notarial morosa,


negligente o falta de técnica notarial.

c) Por causar daños y prejuicios por la declaración judicial de nulidad o


inexistencia de un acta o escritura pública.
d) Por originar daños y perjuicios al no inscribir o inscribir tardíamente en el
Registro Público, una escritura pública o actas que sean inscribibles, cuando
haya recibido de su cliente para tal efecto, los gastos y honorarios.

e) Por el daño material o moral causado a la víctima o a su familia en la


comisión de un delito.

Los arts. 19, 20 y 59 de la Ley 301 del Notariado penalizan al notario por los
daños y perjuicios ocasionados por su violación, pudiéndose actuar contra él
por su incumplimiento del art. 9 de la misma ley y, así mismo, de conformidad
con la responsabilidad común dentro de los términos de los arts. 1382 y
siguientes del C.C.

Requisitos de fondo de la hipoteca convencional.


a) Requisitos Relativos al Estipulante: El Estipulante debe ser Acreedor; pero
su crédito puede ser futuro, condicional o eventual. No parece que se le exija
una capacidad particular; porque la constitución de Hipoteca,
con independencia del contrato creador del crédito por garantizar, es un acto
conservatorio.

b) Requisitos Relativos al Constituyente: El Constituyente no es


necesariamente el deudor del crédito garantizado. Se llama Fiador Real a la
persona que afecta a un inmueble suyo como garantía de la deuda de otro.
El Fiador Real no se obliga personalmente, sino tan sólo propter rem; su
situación se parece a la del tercero tenedor del inmueble hipotecado; pero no
es similar por completo; el Fiador Real, especialmente, no puede utilizar
el procedimiento de purga. Según Art. 1108 del Código Civil, "Cuatro
condiciones son esenciales para la validez de una convención: 1ro.- El
Consentimiento de la Parte que se obliga; 2do.- Su Capacidad para contratar;
3ro.- Un Objeto cierto; y 4to.- Una Causa Lícita en la obligación.

Especialidad de la hipoteca convencional.

Según Art. 2132 del Código Civil, no exige explícitamente sino que la causa del
crédito esté indicada en el documento constitutivo de la hipoteca; y el Art. 2148
del Código Civil, aunque especificaba que "la naturaleza del título" debía ser
mencionada al efectuarse la inscripción, no hacía alusión a la causa.
La hipoteca legal

La hipoteca legal es aquella que se deriva de la ley, por ejemplo, la hipoteca


legal de la mujer casada, que la mujer posee de pleno derecho sobre los bienes
propios del marido sin necesidad de una constitución convencional.

La hipoteca judicial.

Es la resultante de las sentencias emitidas por los tribunales de la república o la


resultante de los actos judiciales.

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