Sei sulla pagina 1di 2

Tema 10.

Creo en Dios Padre

Objetivos

Comprender qué es el Credo y qué partes tiene.


Profundizar en el conocimiento de Dios como Padre y como Creador.

1. REALIDAD

Hoy compartimos unas preguntas entre nosotros:


o ¿Conoce el Credo la gente de nuestro entorno? ¿Qué idea tiene la gente sobre Dios?
o ¿Quién es Dios para nosotros? ¿Qué papel juega en nuestra vida?

2. PALABRA DE DIOS

Jesús nos invita a poner toda nuestra confianza en el Padre del cielo. Y nos diceque Él sabe
incluso mejor que nosotros lo que necesitamos.

Leemos (en el Nuevo Testamento) del Evangelio según San Mateo, Mt 6,24-34
¿Qué nos ha dicho la lectura?

Dialogamos a partir de estas preguntas:

¿Qué es el Credo?
¿Cuántas partes tiene el Credo?
¿Qué es creer?
¿Qué significa “Creo en Dios”?
¿Qué significa “Padre Todopoderoso”? ¿Qué nos pide el texto que leímos hace un
momento?
¿Qué significa que Dios Padre es “Creador del cielo y de la tierra”?

3. PROFUNDIZAMOS EN EL TEMA

Dios para nosotros es inabarcable con nuestra sola inteligencia. Pero aunque nosotros no
seamos capaces de llegarlo a meter completamente en nuestro conocimiento, porque es tan
grande y tan inmenso, tan poderoso y trascendente,… aun así, Él se nos ha dado a conocer.
Y lo ha hecho de varias maneras: en la obra de la creación, en su Palabra (la Sagrada
Escritura) que nos ofrece las intervenciones de Dios a lo largo de la historia… Pero se ha
manifestado plenamente a nosotros en la persona de su Hijo Jesucristo.

Dios es uno solo, pero se nos ha manifestado (se nos ha dado a conocer) como “Padre” que
es el origen de todo, como “Hijo” que se hace hombre y da la vida por nosotros, y como
“Espíritu Santo” que es el amor del Padre y del Hijo, y lleva a cabo en nosotros la obra de
la Salvación.
A veces se nos puede hacer un poco difícil comprender este misterio de fe, que llamamos
“Santísima Trinidad”, es decir, que Dios es un solo Dios, pero al mismo tiempo tres
personas divinas.

Crear significa llamar a la existencia desde la nada. Esto sólo lo puede hacer Dios. Dios
creó el mundo para manifestar y comunicar su gloria. La gloria para la que Dios creó a sus
criaturas consiste en que tengan parte en su verdad, en su bondad y en su belleza.

Muchos nos dicen que no creen en Dios. Unos aseguran que Dios no existe, pero resulta
que luego hacen el bien en sus vidas. Otros dicen que no creen en Dios y hacen todo lo
posible por vivir de espaldas a Él. Los agnósticos, por el contrario, son los que solamente
creen en lo material y en lo que la ciencia pueda “demostrar”, con lo cual ellos dicen que
los humanos no podemos demostrar la existencia de Dios. Aunque están abiertos a que se
les pudiera demostrar de alguna remota manera, no lo ven posible hoy por hoy.

Los católicos creemos que Dios es “Padre”, pero no como los padres humanos, aunque
coinciden las dos ideas en que Dios nos da vida a todo y cuida de su obra. A nosotros nos
da una vida nueva en el día de nuestro Bautismo, porque nos hace hijos adoptivos suyos, y
cuida de nuestra vida por medio del Espíritu Santo. Por eso Jesús nos pide siempre que
confiemos plenamente en Dios Padre. Ese es el mandamiento primero: “Amar a Dios sobre
todas las cosas”.

El mundo creado por Dios es bueno. Pero el ser humano tiene su ser dañado por lo que
llamamos “pecado original”, que es fuente de muchos males. uando C decimos que Dios
crea, queremos decir que Él hace que el mundo exista y se conserve según las leyes que
Dios ha puesto en él. El relato que hay en la Biblia, en el libro del Génesis, según el cual
Dios creó el mundo en seis días, no hay que tomarlo al pie de la letra. Ya conocemos que
hay que tener en cuenta los distintos géneros literarios que hay en los distintos libros de la
Biblia. Pero sí que nos da una lección importante: Dios es el principio de todo. De su mano
viene todo lo que vemos alrededor nuestra.

En resumen:

A Dios Padre no lo podemos “comprender”; sólo adorarlo y creer en Él.


Jesús, siendo también Dios, nos lo ha presentado como su “Padre”. Por eso lo llamamos
así.
“Creer en Dios es acoger su Palabra y vivirla.
Dios Padre nos ama como hijos suyos que somos. Nuestra fe no debe basarse en el miedo,
ni tampoco en el mero interés para que nos haga “milagros” o favores, sino en el amor a Él
demostrado con obras sencillas de la vida diaria.

Compromiso:

- leer la oración del Credo e ir recitándola hasta aprendérsela (en el caso de que no nos
la sepamos). La vamos a usar mucho en estas catequesis que tenemos por delante.

Potrebbero piacerti anche