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ANEXOS

MODELOS DE MERCADO
La competencia en los mercados
En la vida real, en una economía coexisten distintos tipos de mercado caracterizados por diferentes grados de
competencia. Decimos que un mercado es más competitivo que otro cuando ningún productor o consumidor tiene el
poder para influir decisivamente en el precio o la cantidad del bien que transa. Por lo mismo, un mercado es menos
competitivo cuando uno o más productores o consumidores tienen el poder para influir decisivamente en el precio o
la cantidad del bien que se acuerda.
Existen diversos factores que determinan el grado de competencia de los mercados. Son principalmente los siguientes:
 el número de productores y consumidores que participan en él, y su importancia;
 el acceso a la información respecto de los productos disponibles;
 la facilidad para la entrada y la salida de las empresas en el mercado, y
 la homogeneidad del bien o servicio que se transa.
Sobre la base de estos factores, un mercado puede clasificarse en dos situaciones extremas –la competencia perfecta
y el monopolio– y en una serie de casos intermedios. Empezaremos viendo uno de estos casos: el de la libre
competencia.

El mercado de libre competencia


La característica principal de este mercado es la existencia de un gran número de
ofertantes y consumidores y la facilidad de las empresas para entrar y salir libremente del
mercado. Como consecuencia, la capacidad que tiene una empresa o un consumidor de
influir sobre el precio de mercado es muy limitada.
Por ejemplo: imagina que Nicolás tiene una combi y le pide a su sobrino Germán que lo
ayude como cobrador en el verano. Ya en la ruta, Germán puede observar aspectos muy
interesantes del negocio. En un mercado competitivo, ni
En primer lugar, hay muchas camionetas que trabajan, y todo el tiempo están entrando y los productores ni los
saliendo nuevas unidades. ¿Cuál es el efecto de esta situación? Lo puedes notar en cada consumidores tienen suficiente
poder como para fijar precios.
esquina: la gente no tiene mayor interés por subirse a una combi específica, porque pasan
muchas y puede elegir cualquiera de ellas.
Por otro lado, Germán reflexiona que, a pesar de que desde hace algunos años el precio del boleto ya no es fijado por
el gobierno, este es el mismo en cada una de las combis (para rutas de similar longitud). Ello sucede porque a ningún
chofer se le ocurriría cobrar un precio mayor que el del mercado, pues en ese caso todas las personas optarían por
subir a otras unidades.
En el caso extremo (teórico) de la competencia perfecta, la capacidad de las empresas para influir en los precios es
nula. En la vida real no existe la competencia perfecta sino diversos grados de competencia, algunos de los cuales
pueden ser muy próximos al extremo teórico.
La competencia obliga a las empresas a conquistar la preferencia de los consumidores por su producto. Por esto, las
empresas que trabajan con mucha competencia suelen ser mucho más eficientes y productivas que aquellas que
operan en mercados menos competitivos. Los consumidores son los favorecidos con la competencia en los mercados,
pues, en su afán por satisfacerlos, las empresas venden mejores productos y a precios cada vez más bajos.
En un mercado de libre competencia los requisitos son:
 Cada productor y consumidor debe ser pequeño en relación con el mercado, así no pueden influir en el precio.
 El producto que se transa debe ser homogéneo, así se garantiza que los consumidores queden satisfechos
comprándole a un productor o al otro; de esta forma se asegura la competencia.
 Las empresas deben poder entrar y salir libremente del mercado, así las empresas pueden usar sus recursos
donde creen que pueden tener mayor éxito.
 Las empresas que ya están en el mercado no deben tener ventajas insalvables sobre potenciales
competidores. Así, se garantiza que los antiguos y los nuevos compitan en condiciones similares
 La información sobre precios y calidad debe estar fácilmente disponible. Así, las empresas pueden conocer
qué ofrece el competidor y competir con él.
 Debe existir muchos compradores. Así, no pueden influir en el precio.

El monopolio
El monopolio es un mercado en el cual existen muchos compradores, pero solo una empresa proveedora. Una empresa
monopólica está en la capacidad de escoger el precio de su producto, de tal manera que su ganancia sea la máxima
posible, porque no tiene que competir con nadie por atraer a los consumidores. Cuando un mercado es de tipo
monopólico, probablemente se produzca una serie de inconvenientes. Por ejemplo, el precio puede ser mayor, la
cantidad ofertada puede reducirse y la calidad del producto puede disminuir.
En la economía de cualquier país, siempre hay algunos mercados monopólicos y, en algunos casos, se justifica que así
sea. Por ejemplo, el BCR tiene el monopolio en la emisión de moneda nacional. Si alguien quiere dedicarse a fabricar
dinero en una imprenta, se arriesga a terminar en la cárcel por falsificador. Otro caso de un monopolio necesario son
los derechos de exclusividad que se otorga a los inventores para permitir que estos sean retribuidos por sus creaciones,
y estimular la creatividad y la innovación.
Algunos mercados son monopólicos porque no hay otra alternativa: los costos de entrar al mercado son tan altos, que
este solo da para una empresa. Por ejemplo, si vives en Lima y quieres agua potable para tu casa, tu única opción es
comprarla a Sedapal. No tendría sentido que otra empresa más hiciera cañerías de agua y desagüe por toda la ciudad,
además de todas las otras inversiones en infraestructura necesarias para dar el servicio de agua potable.
En una situación de monopolio se deben dar las siguientes condiciones:
 Existe un solo productor que fija el precio y obtiene mayor ganancia.
 Existen barreras para la entrada de nuevas empresas al mercado, así la empresa monopólica se protege de
nuevos competidores.
 El bien que se ofrece no debe ser fácilmente sustituible, de lo contrario el consumidor adquiriría el bien
sustituto.
Los monopolios pueden ser legales y naturales. Un monopolio es legal cuando una ley, licencia o patente restringe el
ingreso de más de una empresa para la producción de un bien o servicio. En el Perú, por ejemplo, el Estado tiene el
monopolio legal de la compra de la hoja de coca, para controlar el narcotráfico. Por lo general, sin embargo, los
monopolios legales no se justifican, por lo que la Constitución de 1993 ha optado por no permitirlos, salvo en
situaciones excepcionales. Otro tipo de monopolios legales son las patentes o los derechos de autor. Una patente es
un derecho de exclusividad (monopolio) que se otorga sobre la producción de un bien o servicio al inventor de ese
producto. Los derechos de autor son derechos similares otorgados principalmente a la producción artística o
intelectual.
Existen monopolios naturales cuando solo una empresa puede ofrecer un bien o servicio de manera rentable. Eso
ocurre normalmente cuando el costo de iniciar esa actividad es muy alto y el mercado no permite que más de una
empresa pueda recuperar la inversión hecha. Por ejemplo, en el caso de la provisión del servicio de agua potable por
Sedapal.
Los monopolios pueden implicar consecuencias adversas para los consumidores como: precios más altos, reducción
de la cantidad ofertada y tendencia a desperdiciar recursos productivos. Por ello, es necesario que el Estado los
controle para que no abusen de su poder.
El Estado normalmente regula los monopolios fijando un precio máximo del producto, que debiera ser equivalente al
que regiría en caso de que hubiera libre competencia.
El oligopolio
Un oligopolio es un tipo de mercado en el que existe un número reducido de productores y un gran número de
compradores. Si los productores compiten entre sí por ganar la preferencia de los consumidores, no hay mayor
problema, y el mercado se comporta como uno de libre competencia.
No es extraño ver que la competencia entre unas pocas empresas puede ser mucho más fuerte que cuando hay
muchas empresas en competencia. Un ejemplo de esta competencia entre pesos pesados se observa en el mercado
de telefonía celular entre Movistar y Claro.
Los oligopolios aparecen generalmente en la producción de bienes y servicios que requieren grandes cantidades de
inversión en capital y desarrollo de tecnología. Ejemplos de mercados oligopólicos son la industria mundial de petróleo
y la industria aeronáutica.
En un oligopolio, como son pocas las empresas participantes, la acción de una de ellas tiene efectos significativos sobre
todas las demás. Por eso, en el momento de tomar una decisión, cada empresa oligopólica considera la posible
reacción de sus competidores. Para maximizar sus ganancias en estas condiciones, las empresas oligopólicas:
 Intentan calcular y predecir las acciones de las empresas rivales.
 No compiten tomando como base el precio, sino diferenciando sus productos.
 Pueden intentar ponerse de acuerdo entre ellas sobre qué precios cobrar o cómo repartirse el mercado. Este
tipo de acuerdos son penados por la ley, porque atentan contra el bienestar de los consumidores.

El cártel
Un cártel es un grupo de empresas que se pone de acuerdo en limitar la producción para hacer subir el precio de su
producto. Ello equivale a que este grupo de empresas se comporte como si fuera un monopolio. Como ya hemos visto,
los monopolios no pueden ser prohibidos porque a veces no hay alternativa, como en el del agua potable. Incluso hay
casos, como las patentes, en que el monopolio puede tener aspectos beneficiosos. En cambio, sí es posible y
conveniente prohibir los cárteles.
Los productores siempre deben competir entre sí, porque esa competencia beneficia a los consumidores. No existe
ninguna razón para que la ley permita que los productores fijen un precio de manera concertada, en perjuicio del
consumidor. Lamentablemente, en el Perú, la tradición ha sido la de considerar válido este tipo de acuerdos. Incluso,
ha sido usual referirse a este tipo de convenios como “pacto de caballeros”. Felizmente, ello está cambiando y existe
ahora mayor conciencia de que este tipo de acuerdos son contrarios al buen funcionamiento de los mercados.
Incluso, probablemente un cártel ya formado dure poco. Ello se debe a que, una vez que se ha acordado ilegalmente
el precio, cada productor tiene el incentivo de bajar un poco el de su producto para atraer a los consumidores hacia
su empresa y sacar ventaja a sus socios.
Los cárteles no son la única práctica restrictiva de la competencia que la ley prohíbe. También es ilegal que se acuerden
reparticiones geográficas del mercado, por ejemplo.

Economía para todos (2013:116-120).


LAS FALLAS DEL MERCADO:
Las fallas del mercado son situaciones en las que el mecanismo del mercado no genera asignaciones eficientes de
recursos. Ello ocurre, por ejemplo, cuando existen monopolios en el mercado, lo que no garantiza la competencia. En
estas circunstancias, el Estado puede intervenir en el mercado para ofrecer las condiciones de competencia o, al
menos, intentarlo.
Otro tipo de falla está relacionada con los efectos perjudiciales de las acciones de ciertos agentes económicos sobre
otros. Eso ocurre, por ejemplo, cuando una fábrica contamina el ambiente al arrojar sus residuos tóxicos a un río, lo
que perjudica seriamente la salud de la población y la sostenibilidad de la vida en dicho espacio. Ante ello, el Estado
puede imponer sanciones o impuestos o limitar la cantidad de emisiones contaminantes permitidas a cada empresa.

Texto escolar. 4º Historia, Geografía y Economía (2012: 236).

ORGANISMOS REGULADORES DELE STADO


La Ley N° 27332 publicada el 29 de julio de 2000, “Ley Marco de los Organismos Reguladores de la Inversión Privada
en los Servicios Públicos”, establece la naturaleza de los organismos reguladores, su ámbito de aplicación, sus
facultades, así como el financiamiento de los mismos. Se asignan a los organismos reguladores las funciones de
supervisión, regulación, fiscalización y sanción, normativa, solución de controversias y reclamos.

Estos organismos reguladores son:


 CONASEV (Comisión Nacional Supervisora de Empresas y Valores).
 OSINERGMIN (Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería)
 OSITRAN (Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de
Transporte de Uso Público).
 INDECOPI (Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección
de la Propiedad Intelectual).
 OSIPTEL (Organismo Supervisor de la Inversión Privada en Telecomunicaciones).
 SBS (Superintendencia de Banca, Seguros y AFP).
 SUNASS (Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento).
 SUNAT (Superintendencia Nacional de Administración Tributaria).

Adaptado de <http://es.scribd.com/doc/97934548/ORGANISMOS-REGULADORES-EN-PERU#scribd
LA GLOBALIZACIÓN DE LA ECONOMÍA

Durante las últimas décadas, los inversionistas de todo el mundo han visto la necesidad de invertir en empresas
localizadas en otros países. Los avances en las comunicaciones y en el manejo de la información han dado lugar a lo
que se conoce como la globalización de la economía. En este nuevo entorno, han surgido nuevos mecanismos para
comprar y vender acciones a nivel internacional.
Mediante estos nuevos mecanismos, los inversionistas pueden comprar por medio de las bolsas de valores más
importantes del mundo (Tokio, Nueva York, Londres) acciones de una empresa situada en cualquier país, sin más
intermediarios que sus agentes de bolsa.
Un ejemplo sobre cómo funciona la globalización de la economía y sobre el punto al que las relaciones económicas
internacionales han logrado estrecharse está en que hoy no es nada raro que un empresario coreano
compre acciones de una empresa neozelandesa en la Bolsa de Valores de Nueva York.
Como es de suponer, para negociar sus acciones en una bolsa extranjera, las empresas deben ser
probadamente confiables. En el Perú, solo algunas empresas han logrado ingresar a este nuevo sistema
financiero internacional y comerciar sus acciones en la Bolsa de Valores de Nueva York, Londres y Oslo.
El nivel de interdependencia que han alcanzado las economías de los países se evidencia en los efectos que
acontecimientos económicos o políticos tienen sobre la actividad económica de las bolsas. Así, una brusca caída en
Nueva York, por ejemplo, repercute inmediatamente en las bolsas de Tokio, Londres, y también de Lima, como ocurrió
en la última crisis mundial.

Apoyo (2013: 32).

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