Magmatismo, Plutonismo y Vulcanismo

Magmatismo

El término magma se utiliza para definir un material rocoso parcial o totalmente fundido,
muy caliente, móvil y capaz de atravesar las rocas de la corteza terrestre. Los magmas están
formados por una mezcla de un líquido silicatado, gases y pequeños cristales (sólidos). Los
cristales contenidos en el magma pueden tener un origen heredado, es decir, son restos sin fundir
de la roca a partir de la cual se origina el magma, o neoformado, esto es, son minerales que han
cristalizado dentro del magma en una etapa inicial. Por tanto, cabe imaginar un magma como un
fundido muy viscoso que contiene una cierta cantidad de minerales y que se mueve muy
lentamente.

Los principales gases contenidos en los magmas son el H20 y el CO2, que pueden llegar a
formar el 15 % en peso del mismo. La presencia de gases es muy importante, ya que condiciona la
movilidad y el punto de fusión del magma. Estos parámetros a su vez controlarán el tipo de
actividad volcánica que originan los magmas cuando alcanzan la superficie. Así, por ejemplo, los
magmas muy ricos en volátiles tienden a generar erupciones volcánicas violentas.

Los principales elementos presentes en un magma son: O, Si, Al, Ca, Na, K, Fe, y Mg. La
viscosidad de un magma esta condicionada fundamentalmente por la cantidad de SiO2 presente,
esto es debido a que los tetraedros de silicio y oxígeno tienden a unirse (polimerizarse) incluso
antes de la cristalización de los minerales, de forma que el aumento en el numero de uniones
produce un aumento en la viscosidad del magma.

En la actualidad, y desde un punto de vista geoquímico, se observan dos tipos

fundamentales de magmas:

(1) Magmas basálticos, que son magmas pobres en sílice ( 50%), poco viscosos y que se
encuentran a altas temperaturas (900ºC a 1200ºC).

(2) Magmas silíceos, que son ricos en sílice (aprox. entre un 65 a 77 %), muy viscosos y que
se encuentran a menor temperatura que los basálticos (< 800ºC).

Los magmas son generalmente menos densos que las rocas del manto y de la corteza que
los rodean y, por tanto, tienden a ascender diapíricamente a través de ellas. Este ascenso es muy
lento, los magmas se mueven a un ritmo de unos cuantos milímetros al año en los casos más
rápidos. El ascenso se produce mediante varios mecanismos, como son: la inyección forzada y la
asimilación. Cuando un magma alcanza la superficie terrestre y se solidifica en el exterior da
origen a las rocas extrusivas o volcánicas, mientras que cuando se solidifica en el interior da lugar
a las rocas intrusivas o plutónicas, siendo ambas rocas ígneas o magmáticas.

Anualmente se producen en la Tierra unos 15 km 3 de magma cada año, aunque solo un

20% de esta cantidad alcanza la superficie, es decir, la gran mayoría del magma generado en la
Tierra forma rocas plutónicas. En general, los mayores volúmenes de magma se van a generar en
las zonas de construcción y destrucción de litosfera.

El proceso de fusión. Habitualmente, las rocas están formadas por una asociación de minerales,
como cada mineral tiene un punto de fusión característico y distinto, cuando calentamos una roca
ésta no se fundirá homogéneamente, es decir, no tendrá un punto de fusión, sino un intervalo de
fusión desde que funde el mineral de más baja temperatura de fusión hasta que lo hace el de más
alta. Durante este intervalo el magma estará formado por una mezcla de cristales y fundido. A la
temperatura de comienzo de fusión de una roca se le denomina sólidus y a la del final de la fusión
líquidus. Inversamente, la cristalización completa de un magma también requiere un intervalo
térmico. Bowen, en 1920, estableció que en ese intervalo cristalizaban determinados minerales en
orden secuencial (cristalización fraccionada), este orden era discontinuo para los minerales
ferromagnesianos y continuo para los feldespatos.

Existen tres mecanismos básicos que permiten generar un magma a partir de una roca
sólida pero lo suficientemente caliente para estar cerca de su punto de fusión, que son: (a)
incrementar la temperatura, (b) disminuir la presión, (c) añadir minerales hidratados (los grupos
oxidrilo tienden a romper los enlaces Si-O) ó CO 2 a la roca a fundir. Una vez que se han fundido
pequeñas cantidades de roca, entre un 1 a un 6% del volumen total, las zonas fundidas comienzan
a conectarse entre sí, pudiendo ser extraído el magma recién formado mediante un mecanismo
denominado compactación. La velocidad de ascenso del magma dependerá del contraste de
densidades con las rocas supracrustales, de la presión de fluidos y de la viscosidad que tenga.

Tipos y evolución de magmas

Como hemos visto, existen dos tipos fundamentales de magmas, basálticos (contenido en
sílice  50%) y silíceos (contenido en sílice entre 65% y 77 %), los últimos se pueden subdividir a
su vez en andesíticos y riolíticos.

Magmas basálticos. Estos magmas proceden de la fusión parcial de rocas del manto,
generalmente a nivel de la astenosfera. La astenosfera, al igual que el resto del manto de la Tierra,
esta probablemente formado por rocas de tipo peridotítico (constituidas por olivino, y piroxeno).
El balance entre la temperatura y la presión en la astenosfera, permite que una pequeña cantidad
de la misma este fundida (lo que explica su comportamiento dúctil). La fusión parcial de una
peridotita (entre un 10 y un 30%) produce un magma basáltico. Este magma basáltico es menos
denso que la peridotita y asciende diapíricamente hacia la superficie terrestre.

Existen dos tipos diferentes de magmas basálticos: (a) el toleítico, que es rico en sílice y
típico de las dorsales oceánicas, zonas de rifting y flujos basálticos masivos. Se originan por
fusión parcial de una peridotita (30%) a una profundidad aproximada de 30 Km, y (b) El alcalino,
que es más pobre en sílice y más rico en Na y K que el anterior. Es típico de las zonas de
intraplaca y de las islas oceánicas situadas sobre un punto caliente del manto. Se forman por
fusión parcial de una peridotita (15%) a una profundidad aproximada de 80 Km

Magmas silíceos. Los magmas de este tipo están asociados principalmente con las zonas de
subducción, ya que la fusión parcial de la litosfera oceánica que se subduce hacia el manto o bien
la fusión parcial del manto situado sobre ella y de la base de la corteza continental (en el caso de
zonas de subducción situadas bajo continentes) generan gran cantidad de magmas con alto
contenido en sílice.

Magmas andesíticos. Las andesitas son rocas más ricas en sílice y minerales hidratados (anfíbol,
biotita) que los basaltos. Este tipo de magmas se encuentra siempre en los bordes de tipo
convergente, tanto oceánicos (CO-CO) como continentales (CC-CO). Existe una cierta polémica
sobre si los magmas andesíticos son magmas primarios o no. En general se admite que los
magmas andesíticos pueden generarse por fusión parcial de la placa que se subduce.

Magmas riolíticos. Los granitos son rocas muy comunes en la corteza continental, que están
formadas por cuarzo y feldespatos (Na, K). Estos magmas son los que tienen intervalos de fusión
más bajos (600 a 800º C). Los granitos formados recientemente se encuentran en grandes masas
alargadas e irregulares de mas de 1000 Km de largo en zonas de la corteza continental que están o
estuvieron situadas sobre una zona de subducción. Estos magmas se originarían por la fusión
parcial de la base de la corteza continental. Este tipo de granitos se suelen denominar orogénicos y
son los más abundantes, aunque también se pueden generar granitos localmente mediante otro tipo
de procesos distintos.
La evolución de los magmas. Una vez que se ha generado una magma en el interior de la Tierra,
éste asciende lentamente hacia la superficie, pero generalmente no alcanza directamente la
superficie, sino que se acumula cerca de la misma, a profundidades entre 1 y 5 Km, en un depósito
que se denomina cámara magmática. Allí pueden producirse una serie de procesos que alteran la
composición química del magma, estos procesos son:

(a) La diferenciación. Conforme comienza a disminuir la temperatura, dentro del magma

comienzan a formarse los minerales que tienen mayores puntos de fusión. Los minerales
cristalizan según un orden bien definido (serie de Bowen), si este proceso no es
interrumpido al final se formara una roca de la misma composición que el magma inicial.
Pero mediante los mecanismos de diferenciación (sedimentación cristalina, compactación,
transporte gaseoso, convección composicional, etc.) pueden separarse los minerales recién
formados del magma residual y este ultimo puede emigrar hacia otras zonas, de forma que
se pueden originar varios tipos rocosos, de composición diferente, a partir de un mismo
magma inicial.
(b) La asimilación. Es el proceso por el cual el magma funde y asimila parte de la roca sólida
que se encuentra a su alrededor (roca caja), contaminándose y cambiando ligeramente su
composición química.
(c) La mezcla o recarga de la cámara magmática. Es el proceso mediante el cual dos
magmas diferentes se mezclan en la misma cámara magmática. En el caso de que el
magma que ocupaba la cámara magmática estuviese ya diferenciado, los gases segregados
durante este proceso tienden a acumularse en la parte superior de la cámara magmática, de
modo que cuando se produce la diferenciación en el segundo magma puede ocurrir que la
acumulación de volátiles a altas temperaturas pueden dar origen a grandes erupciones
volcánicas.

Plutonismo y vulcanismo.

Cuerpos extrusivos. Son los que se forman cuando un magma llega a la superficie de la Tierra. Al
proceso se denomina erupción volcánica. Las erupciones volcánicas se producen
fundamentalmente mediante la desgasificación del magma. El tipo de estructuras volcánicas que
se formara en la superficie terrestre es función del tipo de magma.

(1) Erupciones de magmas basálticos. Son las erupciones más comunes en la Tierra. Las lavas
basálticas están a altas temperaturas y pueden fluir a velocidades muy elevadas, hasta 30 a 40
km/h. Conforme la lava se mueve va enfriándose y desgasificándose, de manera que aumenta su
viscosidad y disminuye su velocidad de movimiento. Existen dos tipos de coladas de lava:

(a) Coladas de bloques (aa). Son lavas con bajo contenido en gases que se mueven muy
lentamente (m/h) y que forman coladas muy gruesas (3 a 10 m). En cada colada se puede
distinguir una corteza sólida y una zona interna fluida, esta última al moverse rompe la
capa exterior, lo que da origen a una superficie formada por la acumulación de bloques
angulosos. Este tipo de coladas suele presentar abundantes vesículas en su parte superior.

(b) Coladas pahoehoe (lavas cordadas). Son coladas muy fluidas que tienen pequeño
espesor. En su superficie desarrollan una capa plástica, la cual cuando se solidifica
adquiere formas fusiformes y cordadas que reflejan la dirección de flujo. El interior suele
ser masivo y no vesicular, en algunos caso puede estar vacío -tubos volcánicos- al haber
continuado el flujo de lava en el interior. Suelen presentar disyunción columnar. Las
erupciones volcánicas submarinas, donde las lavas se enfrían muy rápidamente originan un
tipo especial de colada, formada por bloques redondeados con forma de almohadilla
superpuestos entre sí, que se denominan lavas almohadilladas.
La salida de las lavas basálticas a la superficie se suele producir a lo largo de grandes fisuras o
fracturas (p.ej. las dorsales oceánicas). De forma, que las coladas de lava que fluyen de estas
fisuras llegan a cubrir grandes superficies sin que se observen grandes edificios volcánicos,
aunque en algunos casos, se pueden formar puntualmente pequeños conos volcánicos aislados a lo
largo de las fisuras. En el caso de extrusiones de grandes cantidades de lava de forma muy
continua, se pueden formar grandes conos volcánicos, denominados volcanes en escudo (p. ej. El
Mauna Loa). Estos volcanes tienen pendientes muy suaves (< 10°) y están formados por la
acumulación de innumerables coladas de lavas y relativamente muy pocos piroclastos, pueden
alcanzar un diámetro de 100 km y una altura de 10 km. Los fragmentos de lava arrojados por el
volcán a la atmósfera, se enfrían total o parcialmente antes de caer al suelo y dan origen a los
piroclastos. Estos en función del tamaño reciben diferentes nombres: polvo, cenizas y bombas
volcánicas. Las partículas más grandes suelen caer cerca del volcán y su acumulación da origen a
los conos de cenizas, conos volcánicos que pueden alcanzar los 2 km de diámetro y los 300 m de
altura.

(2) Erupciones de magmas silíceos. Estas erupciones se producen a menores temperaturas y con
lavas más viscosas que las anteriores originando estructuras volcánicas muy diferentes. La
viscosidad es tan elevada que sobre la chimenea volcánica se suelen formar unos domos masivos,
esta alta viscosidad hace que los gases presentes en el magma no puedan escapar fácilmente
alcanzando enormes presiones, lo que origina erupciones explosivas con gran cantidad de material
piroclástico. La alternancia de piroclastos y capas de lavas viscosas condiciona la forma de los
volcanes, que reciben el nombre de volcanes compuestos o estratovolcanes. En este caso sus
laderas tienen fuertes pendientes, los volcanes mas conocidos, p.ej., el Stromboli, el Vesubio, el
Monte Fuji, el Teide, pertenecen a este tipo.

Durante las erupciones de magmas silíceos, se pueden arrojar grandes volúmenes de magma en un
corto espacio de tiempo, esto hace que se vacíe muy rápidamente la cámara magmática situada
bajo el volcán, de forma que al finalizar la erupción éste se hunde al perder soporte en la base,
provocando que en la superficie se forme un gran cráter o caldera. Posterior a la erupción, la
caldera suele rellenarse de agua formando un gran lago o una ensenada. En estas erupciones son
especialmente notables las nubes ardientes, que están formadas por gases, cenizas volcánicas y
gotas de lava, a alta temperatura (aprox. 600ºC). Las erupciones de magmas silíceos suelen ser
muy irregulares, una cada 100 o 200 años, pero cuando se producen son generalmente
catastróficas. En algunos casos, cuando los edificios volcánicos están cubiertos por nieve, durante
la erupción se producen también grandes desprendimientos de rocas y barro procedentes de la
fusión de la nieve acumulada en la cima y en las laderas de los volcanes. Estos desprendimientos
se denominan lahares y son muy peligrosos (p.ej. el Nevado de Ruiz).

Los cuerpos intrusivos. Estos cuerpos se forman cuando el magma intruye en otras rocas y se
consolida en ellas. El nombre que reciben las intrusiones es función del tamaño, geometría y
relaciones entre la intrusión y la roca caja. Los más importantes son:

(a) Batolito. Es una gran masa de rocas intrusivas, con dimensiones de afloramiento
mayores de 100 km2 y con forma generalmente alargada.
(b) Plutón. Suele ser una cámara magmática consolidada, de tamaño menor que un batolito
y que suele tener formas elípticas en planta.
(c) Sill. Pequeño cuerpo tabular de rocas magmáticas inyectado concordantemente entre
capas sedimentarias.
(d) Lacolitos. Es otro pequeño cuerpo intrusivo concordante con la roca caja, con base
plana y techo en forma de cúpula. Los Lopolitos tienen iguales características, pero su base
y techo tienen formas cóncavas hacia arriba.
(e) Stocks. Es un plutón con forma cilíndrica, con tamaño, en superficie, menor que 10
km2.
 (f) Diques. Son cuerpos intrusivos tabulares que cortan discordantemente a los estratos o a
la roca caja, pueden formar asociaciones radiales, cónicas y circulares.
(g) Chimeneas. Son conductos estrechos, cilíndricos y verticales por los que asciende el
magma.

El proceso por el cual el magma se abre paso a través de la corteza sigue varias etapas.
Inicialmente y a grandes profundidades dentro de la corteza, el magma es mucho menos denso que
las rocas que lo rodean y asciende como un diapiro de magma semifundido, apartando las rocas
que tienen por encima mediante un proceso de fusión y asimilación, formando plutones y
batolitos. Si continúa el ascenso hacia niveles más superficiales de la corteza, el contraste de
densidades es menor, y el magma se suele emplazar desplazando a las rocas que tienen por
encima, de forma que se originan estructuras concordantes como lacolitos, sills, lopolitos, etc. En
este nivel también se puede producir una última etapa de ascenso mediante el hundimiento de la
cámara magmática, de esta forma se originan, chimeneas, stocks y diques anulares. Las estructuras
discordantes como los diques se suelen formar cuando la roca se rompe por esfuerzos tectónicos,
generándose de esta forma huecos que son rellenos por el magma.

Lima, diciembre de 2002.