Sei sulla pagina 1di 4

Genero

En taxonomía, el género es una categoría taxonómica que se ubica entre


la familia y la especie; así, un género es un grupo de organismos que a su vez
puede dividirse en varias especies (existen algunos géneros que son
monoespecíficos, es decir, contienen una sola especie). El término proviene
del latín genus, que significa linaje, familia, tipo,1 cognado a su vez
del griegoγένος 'genos', raza, estirpe, pariente

Categorías relacionadas con el género


Al igual que ocurre con otros niveles, en la taxonomía de los seres vivos, y debido
a la enorme dificultad para clasificar ciertas especies, varios géneros pueden
agruparse dentro de supergéneros, y también los individuos de un género pueden
organizarse en subgéneros. Estos, a su vez, pueden organizarse en infragéneros.
En la siguiente tabla, se han marcado los niveles, es decir, las categorías de
mayor a menor obligatorios.

Familia
Subfamilia
Infrafamilia
Tribu
Supergénero
Género
Subgénero
Infragénero
Especie
Subespecie
Nomenclatura
El nombre genérico para un taxón ha de ser un sustantivo, sin que existan reglas
precisas para su desinencia. En varios casos, el taxón genérico constituye un
grupo tan natural que es de dominio vulgar. Por ejemplo: el género Pinus es un
género en sentido científico, integrado por numerosas especies de pinos que
usualmente tienen un nombre vulgar "binomial", semejante a la nomenclatura
científica, como pino albar, pino negral, pino carrasco, etc.

Historia del concepto


El concepto de género y el propio vocablo fueron establecidos por Joseph Pitton
de Tournefort (1656-1708). Carlos Linneo los tomó, concretando así su
pensamiento:

Hay tantos géneros cuantas son las fructificaciones semejantes producidas por
diversas especies naturales

Palau, en la traducción de la Phylosophya botanica, de Linneo, p. 84.


Originariamente Linneo y los botánicos de su escuela establecieron los géneros
sobre la base de los caracteres de la flor y el fruto.
Sexo
En biología, el sexo es el conjunto de las peculiaridades que caracterizan los
individuos de una especie dividiéndolos en masculinos y femeninos, y hacen
posible una reproducción que se caracteriza por una diversificación genética.1
La reproducción sexual implica la combinación de células especializadas
llamadas gametos para formar hijos que heredan el material genético, y por tanto
los rasgos y naturaleza de ambos padres. Los gametos pueden ser idénticos en
forma y función (isogametos), pero en algunos casos han evolucionado hacia una
asimetría de tal manera que hay dos tipos de gametos específicos por sexo
(heterogametos): los gametos masculinos son pequeños, móviles, y optimizados
para el transporte de su información genética a cierta distancia; mientras que los
gametos femeninos son grandes, no móviles y contienen los nutrientes necesarios
para el desarrollo temprano del organismo joven.
El sexo de un organismo se define por los gametos que produce: los del sexo
masculino producen gametos masculinos (espermatozoides) mientras que los de
sexo femenino producen gametos femeninos (óvulos), los organismos individuales
que producen tanto gametos masculinos como gametos femeninos se
denominan hermafroditas. En la especie humana no existe el hermafroditismo,
pero sí la intersexualidad (anteriormente llamada seudohermafroditismo), una
anomalía física congénita que, en apariencia, tiene similitudes con el
hermafroditismo. Con frecuencia, las diferencias físicas se asocian con el sexo del
organismo; este dimorfismo sexual puede reflejar las presiones reproductivas
diferentes de cada sexo.

Etimología
El término «sexo» deriva del latín sexus, por sectus, «sección, separación» y
aparece usado por primera vez en De inventione I de Cicerón.[cita requerida]

Evolución
Se considera que la reproducción sexual apareció por primera vez alrededor de
hace 1000 millones de años, evolucionaron dentro de ancestros
de eucariotasunicelulares.2 La razón de la evolución inicial de sexo, (y las
razones) por las que ha sobrevivido hasta el presente, son todavía materia de
debate. Algunas de las teorías plausibles incluyen: que el sexo crea la variación de
la descendencia, el sexo ayuda a la propagación de características ventajosas, y
que el sexo ayuda a la eliminación de los rasgos desfavorables; proceso que
ocurre mediante la selección sexual.
La reproducción sexual es un proceso específico de las eucariotas, organismos
cuyas células contienen un núcleo y mitocondrias. Además de los animales, las
plantas y los hongos, otras eucariotas (por ejemplo, el parásito de la malaria)
también participan en la reproducción sexual. Algunas bacterias utilizan
la conjugación, que es una transferencia de material genético entre las células, y
aunque no es lo mismo que la reproducción sexual, se traduce también en la
mezcla de los rasgos genéticos.

Potrebbero piacerti anche