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SEXUALIDAD Y GÉNERO

ENSAYO

“LAS ACTITUDES HACIA LA SEXUALIDAD”

PRESENTADO POR:
YUDY PIMENTEL RODRÍGUEZ CÓDIGO: 1080361736

PRESENTADO A:
DR. EDIXON FELIX BERMUDEZ
TUTOR DEL CURSO

UNIVERSIDAD NACIONAL ABIERTA Y A DISTANCIA “UNAD”


ESCUELA DE CIENCIA SOCIALES ARTE Y HUMANIDADES
PROGRAMA DE PSICOLOGÍA
SEPTIEMBRE DE 2017
Ensayo
Las actitudes hacía la sexualidad
Las actitudes son predisposiciones a responder de una determinada manera
con reacciones favorables o desfavorables hacia algo, las integran las opciones,
creencias, sentimientos, intenciones o tendencias hacia un objeto, factores que no
son innatos pero se forman a lo largo de sus vidas; es decir que las actitudes dirigen
nuestra atención a aspectos particulares de un objeto e influyen nuestra
interpretaciones del mismo.
Es importante señalar que la sexualidad se refiere a una dimensión
fundamental del ser humano basado en el sexo. Incluyendo el género, la identidad
de sexo, la orientación sexual, el erotismo, la vinculación afectiva, el amor y la
reproducción, es decir que la sexualidad es parte integral de nuestras vidas y debe
de ser considerada dentro el contexto y desarrollo humano, en el caso de los
adolescentes se expresa en su relación con pares, sociedad en general, padres y
también con el adolecente mismo. Particularmente en la adolescencia se consolida
las actitudes hacia la sexualidad; como consecuencia las actitudes hacia la
sexualidad influyen significativamente el modo de vida del adolecente.
Las actitudes se forman a partir de experiencias personales, modelos de
personas importantes en nuestra vida y por aquello que se enseña a través del
sistema educativo y los medios masivos. La primera actitud sexual que aprendemos
viene del hogar.
De este modo la actitud forma una estructura por tres factores como son:
cognitivo que hace referencia al conjunto de creencias del hombre. Es la
información que el individuo tiene sobre el objeto, lo que sabe o cree saber sobre
él, su manera de representarlo y las categorías en las que lo incluye, lo afectivo-
emocional hace referencia al conjunto de sentimientos del ser humano. Se entiende
como un continuo bipolar equidistante entre sentimientos negativos y positivos y lo
comportamental que es el resultante de los dos componentes anteriores marca
una tendencia a comportarse de manera coherente con el conjunto de la estructura.
De igual manera las actitudes se articulan en tres niveles partiendo de ideas
correctas o incorrectas, emociones y sentimientos como son el placer, la
atracción, la satisfacción, la culpa, el miedo, la vergüenza y las tendencias de
acción como la comprensión, integración, aproximación, negación, etc.
El cambio de actitudes puede producirse fundamentalmente si se modifica la
base cognitiva que lo sustenta, o bien si cambia las relaciones emocionales, el
cambio de actitud no es fácil si se mantiene una cohesión de estructura, como lo
indica la teoría del sistema (Brofenbrenner 1979) todo sistema tiende al equilibrio y
se resiste al cambio.
Si bien es sierto la actitud hacia la sexualidad es una disposición hacia la
misma que puede ser positiva o negativa, de agrado o desagrado, de aceptación o
el rechazo; la actitud positiva se caracteriza por la comprensión de que la dimensión
sexual del individuo es fuente de riqueza la cual debe ser vivida en plenitud, las
personas que están de este lado poseen ideas positivas hacia lo erótico, son
abiertas y respetuosas hacia las opciones sexuales de los demás y consideran que
la educación sexual es necesaria, pero las personas que tiene una actitud negativa
hacia la sexualidad tienden a pensar que todo lo relacionado con el sexo es
peligroso, surgen de estos individuos emociones negativas como son sentimientos
de culpa, miedo, vergüenza, y piensan que la educación sexual es una cuestión muy
delicada que cuya responsabilidad esta es en los padres.
La actitud hacia la sexualidad no es una cuestión baladí, en el quehacer de
los profesionales es importante caer en cuenta la importancia de la disponibilidad
de la sexualidad media en la intervención psicológica y educativa, es por esto que
toda persona que desee trabajar en este ámbito debe de revisar sus propias
actitudes puesto que ellas intervendrán.
La culpabilidad sexual se desarrolla en situaciones que influyen la emisión de
los afectos relacionados con la expresión del erotismo, como el deseo, la excitación,
el placer; de los procesos cognitivos, que influyen la toma de conciencia de los
mismos.
El sentimiento de culpa sexual, por tanto aparecería en aquellas personas
particularmente vulnerables a la trasgresión de las normas en general por tal
manera los efectos de la culpa dependerán de la vulnerabilidad individual hacia la
misma.
Los autores como Fisher, Byrne, White y Kelley (1988), desarrollan el
constructo erotofobia-erotofilia y explican a través del paradigma de aprendizaje,
como un individuo puede llegar a tener una disposición positiva o negativa en menor
o mayor grado de erotismo.
De igual manera Byrne (1983), propone que la tendencia de aceptar e
integrar armónicamente el deseo sexual, esta mediatizada por la carencias
actitudinales que consisten en procesos afectivos, evaluativos, informativos, etc,
respecto a las cuestiones relacionadas con la sexualidad.
Como ya hemos visto la actitud hacia la sexualidad interviene de los
comportamientos relacionados con ella en su sentido más genérico.
Desde el punto de vista de la psicología de la sexualidad, estos aspectos son
importantes porque, afectan la vida personal de una persona e infiere en las
intervenciones profesionales.
A si mismo se han encontrado evidencias empíricas suficientes para
mantener que las personas que tienden altos sentimientos de culpa sexual o la
erotofobia tiene a tener menor experiencia sexual, menor interés por lo erótico,
menor volumen de fantasía sexuales.
Por otro lado la actitud hacia la sexualidad en términos de erotofobia –
erotofilia o sentimientos de culpa sexual afecta también a los comportamientos
homosexuales; en este ámbito no está comprometido el riesgos de embarazo pero
si el riesgo de enfermedades de trasmisión sexual, toda vez que el uso de medidas
preventivas, uso de preservativos o técnicas de sexo seguro, estaría influenciando
por la actitud hacia la sexualidad por los mismos motivos.
Encontramos otras actitudes relacionadas con la sexualidad que debe de
tenerse en cuenta como son el sexismo lo cual es una discriminación de las
personas en razón de su sexo (masculino - femenino), y el heterosexismo se coloca
en un nivel superior, definiéndose como el mantenimiento de la relación jerárquica
en la heterosexualidad. Están formadas por una componente cognitiva, es decir
creencias acerca de las características de las mujeres y de los hombres, un
componente efectivo-emocional, reacciones emocionales que surgen en las
situaciones concretas y una tendencia comportamental.
La homofobia tiene claramente dos sentidos, el primero hace referencia a
una dimensión individual que se ajusta al concepto clínico de fobia, expresándose
como temor al homosexual o a la homosexualidad y el segundo sentido es el
rechazo social de la homosexualidad y se ajusta más al concepto de actitud
psicológica y social.
Referencias bibliográficas

Gómez, J.(2014) Psicología de la sexualidad, Difusora Larousse- Alianza editorial.


Recuperado de
http://bibliotecavirtual.unad.edu.co:2077/lib/unadsp/detail.action?docID=11038661
&p00=sexualidad

http://psicologia-social-roiel.blogspot.com.co/p/actitudes.html

https://es.slideshare.net/PsJuanPabloD/las-actitudes-sexuales

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