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La tradición Apostólica es antes de cualquier escritura hecha por los apóstoles

y por los discípulos del Señor Jesucristo, que luego después de su propagación
como literatura pedagógica, las iglesias reconocerían como textos inspirados del
Espíritu Santo por tener la “Autoridad Apostólica”; el establecimiento del
canon, ya por el siglo II, como regla de Fe es decir la lista de aquellos escritos
considerados como inspirados de Dios sirvieron para preservar la verdadera
doctrina del Cristo la cual fue una decisión sabia de la iglesia post-apostólica;
cabe recalcar que el contenido de todos estos escritos contienen esa antigua
tradición la cual fue transmitida, comunicada y enseñada por los Apóstoles,
entonces se debe mencionar que antes de cualquier escrito que manifieste la vida,
el ministerio y la doctrina del Dios hecho hombre ya se estaba comunicando por
medio de la oralidad, tema que es de suma importancia en la teología de san
Pablo y en la de los demás apóstoles y discípulos del Señor.
Esta tradición debe de entenderse también como un depósito de la Fe que necesita
la Iglesia para permanecer en verdadero vínculo con Cristo, pues ninguna
comunidad que se autodenomine de Dios debe de obviar este tema, aún más
porque esta verdad es histórica y de tendencia doctrinal, ya que al hablar de ella
no se enseña de una mera tradición más, sino de la que nos fue entregada por los
Apóstoles y esto por virtud del Espíritu Santo a través de la glorificación del
Señor Jesucristo; estos apóstoles son hombres verdaderamente catalogados
como legítimos enviados y guías seguros del Cristo para establecer iglesias
locales por todo el mundo diseminando así la Fe la cual es don que viene por el
oír y el oír por las palabras de Dios venido en carne.
Así que antes de que algo estuviera escrito ya estaba dicho, en este sentido la
oralidad fue, es y será siempre el primer medio que Dios ha usado y que usa para
comunicarse con el hombre y la escritura es el medio que Dios ha utilizado y
sigue usando para preservar su mensaje y así el hombre pueda recordar por la
lectura sus deberes para con Dios.
Es evidente por el contexto histórico eclesiástico que muchos escritos inspirados
no fueron hechos intencionados para toda la iglesia universal como fin
pedagógico sino para algunas iglesias locales, como otros también fueron para
ciertas facciones culturales dentro de la Iglesia, otras como cartas exhortativas,
doctrinales, apologéticas, pero siempre todas estas ya mencionadas conteniendo
aquella tradición divina que es regada por medio del testimonio apostólico.
Ciertamente luego que desaparecen del plano histórico los testigos oculares del
Cristo llegan los sucesores y estos para entender que era necesario conservar
aquellos escritos porque comprendieron que estos eran de una condición
inspirada por el sello de la Apostolicidad y por tanto a la vez una autoridad y
así darle el debido uso para la conservación del Evangelio, noticia de naturaleza
divina comunicada por Jesús el Cristo de Dios y tanto también para la buena
administración eclesiástica.
Así debe de esta manera la Iglesia actual o contemporánea entender el plan de
Dios desde la óptica apostólica y post-apostólica y no desde la percepción
doctrinal protestante, evangélica o pentecostal.
Porque la sucesión apostólica la tendremos si nos vinculamos con la doctrina de
los apóstoles y solo así podremos tener comunión con Dios y su Cristo,
entendimiento que nace de los escritos del Apóstol Juan cuando en una de sus
epístolas escribe lo siguiente, "Lo que era desde el principio, lo que hemos oído,
lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon
nuestras manos tocante al Verbo de vida (porque la vida fue manifestada, y la
hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con
el Padre, y se nos manifestó); lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para
que también ustedes tengan comunión con nosotros; y nuestra comunión
verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo. Estas cosas os
escribimos, para que vuestro gozo sea cumplido."
Se concluye este breve estudio dejando entendido la importancia de la Tradición
Apostólica como depósito infalible de la Fe que una vez fue dada a la Iglesia.
La sucesión apostólica no debe de ser entendida como una teoría sino como un
testimonio, porque solo los testigos hacen testigos.
Oíd a San Pablo, imítenlo y vivirán. Escuchad al Apóstol de condición
irreprensible, escuchad al íntimo amante del Cristo. Imitad su ministerio y seréis
verdaderamente útiles en el Señor.
Como fue dicho y como también está escrito,” El que a ustedes les recibe, a mí me
recibe; y el que me recibe a mí, recibe al que me envió”, Jesucristo…
En este sentido entiéndase que aquel que atiende a un Apóstol escucha y recibe
al Cristo mismo y si a El también a Dios su Padre y así se conserva aquel en la
voluntad y en la unidad del Espíritu para vida eterna.
Iglesias del siglo XXI herederas del evangelio por medio del protestantismo, yo
les pregunto, ¿El Evangelio salió de entre ustedes o vino por ustedes?, ¿Vino de
la reforma?, ¿La Iglesia no tiene más edad que el movimiento protestante?
¿Acaso el Evangelio no vino y es por medio solo y exclusivamente por los
apóstoles y nos es conocido a nosotros este sagrado mensaje por su obediencia a
la autoridad del Cristo la cual fue de ir por todo el orbe diseminando su noticia?
¿Y si por los apóstoles, entonces porque no se someten a su lenguaje?
Deben entender que todas las enseñanzas escritas en las epístolas de parte de los
Apóstoles y de los discípulos inmediatos son para atenderlas y obedecerlas y no
para seleccionarlas a gusto del criterio y del pobre juicio de sus ministros,
aprendan Iglesias del siglo XXI, que es desde el siglo I y no desde otro, es por
medio del apostolado y no desde otro ministerio, es obedeciendo el Evangelio y
consultando la antigua tradición que se contiene en los sagrados escritos y no
desde otro testimonio, es por la voluntad del Espíritu Santo y no por la de algún
hombre, es para conservarla y no para negociarla, es para aceptarla y no para
cuestionarla.
La Santa Iglesia de Dios, desde el siglo I hasta el XXI; no proveniente por algún
sucesor del siglo II, no salida del intelecto y de la espiritualidad de Tertuliano,
ni tampoco por el ascético Montanismo, no inaugurada por Prisciliano Obispo
y Mártir de Jesucristo del siglo IV, no fundada por los Paulicianos de Armenia,
no originada por el movimiento Valdense de la edad media, no nacida por medio
del pensamiento crítico de Wicliff, no por la evidencia de Huss, testigo de Cristo
en Bohemia, no por medio del cisma suscitado en el 16 por el doctor Lutero, no
por el trabajo misionero de los reformadores, ni tampoco salida por la pluma de
John Wesley, ni por las manifestaciones carismáticas del siglo 20, ni por una
cuestionable profecía a un hombre en Puerto Rico, ni mucho menos por un pastor
asalariado cubano; sino “Engendrada por el trabajo Apostólico del Primer siglo;
por medio del compromiso, del ágape, de las lágrimas, del sudor, de la sangre y
sobre todo por medio de la pasión de aquellos Apóstoles y testigos presenciales
de la gloriosa resurrección y ascensión del Cristo de Dios”; y ahora por la Gracia
del Espíritu Santo nosotros hemos venido hacer por medio de la obediencia
legítimos herederos y sucesores del legado apostólico, teniendo la
administración de conservar esta antigua Sagrada Tradición, viniendo hacer
para Dios los depósitos y custodios de su verdad revelada, esto es el Evangelio;
siendo los que atendemos y nos sometemos a la autoridad exclusiva de los
apóstoles dejada por el Glorioso Señor JESUCRISTO, quien es la Autoridad
Suprema y Máxima de la Iglesia.
Por esto confesamos en la armonía y en compañía de Dios el Padre y del Espíritu
Santo unidos con los santos apóstoles, con los antiguos obispos y doctores, con
los gloriosos mártires, con los preservadores y conservadores ya sea por viva voz
o por escrito lo siguiente;
“Que verse el Verbo y que toda criatura se someta a piadoso silencio". Amen.
La verdad nos une o nos divide.
Aquellos que no se dejen influenciar por los Apóstoles no pueden ser del Cristo.
Consideremos los grados y el orden, respetemos el programa de Dios el Padre.
DIOS – CRISTO – ESPIRITU SANTO – PROFETAS – APOSTOLES – IGLESIA.
Nosotros los menos prominentes seguimos el ejemplo de los más notables a saber
el de los Apóstoles del Dios hecho carne.
¡Cautivos de SU pasión por el testimonio de aquella Antigua Tradición!
Reconozcamos a los fundadores de este movimiento llamado Ekklesia,
consideremos a los Apóstoles como instrumentos indispensables de este
programa.
Jerarquía…Sin apostolado no hay iglesia.
- Yo les envió como ovejas en medio de lobos, aun ante gobernadores y reyes
serán llevados por causa de mí para que le den un testimonio.
- El que a ustedes les recibe me recibe a mí y el que me recibe a mi recibe al que
me envió.
- Pero los “Once” discípulos se fueron a Galilea al monte donde Jesús les había
ordenado y cuando le vieron le adoraron pero algunos dudaban, y Jesús se acercó
y les hablo diciendo toda potestad me ha sido dada en la tierra como en el cielo
así que Id por todo el mundo y haced discípulos bautizándolos en el nombre del
Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que yo os
eh mandado.
- Finalmente se le apareció a los “Once” (¿y los demás discípulos fueron
marginados?, no, sino que los Once tiene un ministerio exclusivo el del
Apostolado y siendo así también un encargo especial el de fundar Iglesias),
mismos estando ellos sentados a la mesa y les reprocho su incredulidad y dureza
de corazón porque no les creyeron a aquellos que le habían visto resucitado (debe
de entenderse que los discípulos que no habían sido escogido para ser Apóstoles,
a ellos según el texto no les creyeron los Once que Jesús había resucitado), y les
dijo Id por todo el mundo y predicad el Evangelio a toda criatura el que creyere
y fuere bautizado será salvo más el que no será condenado…
- Hizo además Jesús muchas otras señales en presencia de sus discípulos, las
cuales no están escritas en este libro. Pero estas se han escrito para que creáis
que Jesús es el CRISTO, el Hijo de Dios y para que creyendo tengan la vida en su
Nombre.
-Y el Señor le dijo a Ananías, ve porque instrumento escogido me es este para
llevar mi nombre en presencia de los gentiles y de reyes;
-¿Cómo, pues, invocaran a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en
aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? ¿Y cómo
predicaran sino fueren enviados?;
-Pablo, Apóstol (no de hombres ni por hombre), sino por Jesucristo y por Dios el
Padre que lo resucito de los muertos.
-Así que téngannos los hombres por servidores de Cristo y administradores de
los misterios de Dios.
-Porque aunque tengáis diez mil tutores en Cristo no tendréis muchos padres
pues en Cristo Jesús Yo Pablo os Engendre por medio del Evangelio.
-Si para otros no soy apóstol para ustedes ciertamente lo soy porque el sello de
mi apostolado son ustedes.
- Lo que hemos visto y oído eso les anunciamos, para que también ustedes tengan
comunión con nosotros.
- Imitadme a mí como yo a CRISTO. (Que sus pastores imiten al hombre de
tarso)

Aquí, San Pablo, el Apóstol de los Gentiles, fundador de las primeras iglesias
en la Europa Oriental del Primer Siglo. Autoridad Vigente e Incuestionable por
designio de Dios y esto para todas las Iglesias en todas las partes y en todos
los tiempos.
QUIEN NO SE SOMETE A LA ENSEÑANZA DE UN APÓSTOL NO SE
SOMETE A LA AUTORIDAD DEL CRISTO Y DESECHA LA GRACIA MISMA
DE DIOS PADRE Y AFRENTA AL ESPIRITU DE LA CONSOLACION Y DE
TODA VERDAD.
EL NO SOMETERTE AFECTA TU SALVACION, ¡TEN CUIDADO! QUE NO
TE ENGAÑEN AQUELLOS QUE NO TIENEN LA SUCESION O TAMBIEN
AQUELLOS QUE NO ATIENDEN A LA ANTIGUA TRADICION TE LO
DECLARA “LA IGLESIA DE DIOS”.
-No es el término Biblia, párvulos en Cristo sino es el testimonio de los
patriarcas, los oráculos de los Profetas, el Evangelio de Dios Y la Tradición de
los Apóstoles. Entendamos el tema expuesto aquí con toda Propiedad y con
toda Sapiencia que es el don y la virtud de todo regenerado por el Espíritu
Santo que viene de DIOS.
La Iglesia de Dios no conoce de Reforma, ni de denominaciones, llamémosla
por su verdadero nombre, recuperemos la verdadera identidad.
Vinculémonos con el inicio, porque la Antigua Tradición Apostólica no muere
sino que sigue estando vigente.
Atte.

“La Iglesia de Dios”


El depósito de la Fe es el corazón de los que creen…
SUCESION APOSTOLICA REACTIVADA.
ECLESIOLOGIA APOSTOLICA REINICIADA.
TRADICION APOSTOLICA NUESTRA HERENCIA.
EVANGELIO NUESTRA NOTICIA.
En Hebreo, en Arameo, en Griego o en Latín esto es

“SIN CENSURA”
No hay lugar para el evangelio novedoso del siglo XXI-
Una opinión muy antigua dijo” La Verdad sola vence” pero yo le respondo que
“La Verdad vence cuando hay quienes la exponen”.
El silencio es cómplice con el error.
Pero, ¡La verdad es la pasión de los que creen!
Y en este sentido, la Verdad se quedó con nosotros.
Honor, Gloria y Pasión al Divinisimo y Sapientísimo Jesucristo, Monarca
Universal, Escuela misma del género humano y del celestial, respeten al que
tiene el mando, por naturaleza…
Quieres encontrar el camino es decir al cristo pregúntale a los
apóstoles ellos tienen la orientación exacta. Busca a quienes se les
dio las llaves del reino de los cielos porque solo ellos te la pueden
abrir, solo ellos, ¡Que no te engañen!
Desde la Villa…”El Salvador”, el Epígono comunicando verdad que permanece.
Bendito sea “YHWH”, para siempre y dignísimo de ser atendido. Amen.
Contra el escritor quien quiera, pero contra AQUEL que dicto quien pueda.
Si la Fe es firme defiende toda la casa. VEN SEÑOR JESUS, Amen
El que tenga vista que lea y el que lea que entienda-
¡Amaras al Señor tu Dios sobre todas las cosas!
Es desde Jerusalén y no desde otro lugar, es desde el siglo I y no desde
otra edad, es por medio de los Apóstoles y no por medio de los Pastores.
La mentira gobierna hasta que la Verdad llega. Amen.

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