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¿Se dirige Colombia hacia la libertad?

Laura Alejandra Quiñones Reyes

ID: 000608025

Corporación Universitaria Minuto de Dios

Programa de Trabajo Social

Sociología

¿Se dirige Colombia hacia la libertad?

“El abuso del poder es una enfermedad, al parecer incurable del ser humano y, claro, que
produce desorden”
Salvador de Madariaga
En el siguiente documento se realizará un breve análisis acerca de la cinta cinematográfica
“Los Colores de la Montaña” (Arbeláez, 2010), tomando como base al sociólogo francés Pierre
Bourdieu y al suizo Jean-Jacques Rousseau, precursor de la sociología, con la finalidad de
comparar sus posturas frente al poder del Estado y la sociedad, además de los individuos;
también, con respecto a la educación y la discordancia de estos en cuanto a pensamiento
comunista y republicano en paralelo con el conflicto armado en Colombia, adicionalmente, el
papel del trabajador social en el marco de los acuerdos de paz y de la ideología contemporánea,
para dar respuesta a unas de tantas preguntas que se hacen los colombianos ¿Ha cambiado la
sociedad colombiana de las últimas décadas el pensamiento marxista leninista?¿Logrará este
país superar tanta barbarie producida por los subversivos y salir del subdesarrollo, que tanto
han propuesto los gobiernos democráticos?

El filme colombiano narra la realidad que lamentablemente, el país ha tenido que vivir
desde hace unos sesenta años, donde la violencia se ha apoderado especialmente del campo,
llevándose consigo cantidad de víctimas inocentes, que ni relación tienen con el supuesto
objetivo de los que, con arma en mano y uniforme camuflado pretenden cambiar el sistema,
asumiendo que con tanta atrocidad el gobierno finalmente cederá (que a la postre ya logró). Estos
revolucionarios son los que, han desligado del seno de la familia a sus miembros, los que
sanguinariamente asesinan por placer y no, como ellos dicen “por supervivencia”, aquellos que
dividieron a Manuel, Julián y Poca Luz, protagonistas de la película y representantes, sin duda, de
los millones de niños que han vivido en carne propia lo que es la guerra y que por supuesto, nada
entienden de acuerdos de paz, que aunque marcan otra etapa de la historia contemporánea del
país, no restituyen nada de lo que les fue arrebatado, ya esa etapa sangrienta quedó marcada en la
mente de niños, padres y madres, en fin, todos los miembros de la sociedad que recibieron el
impacto de una violencia incontrolable que no justifica en nada, un idealismo extremista que no
ha contribuido a cambiar la mentalidad de los gobernantes y de la sociedad. Además,
desencadenan otro tipo de reacciones, contrarias al planteamiento del ideal marxista, como el
desplazamiento forzado, que se refleja en la vereda La Pradera, (espacio en el que se relata la
historia) cuando una a una, las familias se ven obligadas a abandonarlo todo con tal de salvar sus
vidas, sin embargo, el líder de la junta comunal, padre de Julián, no tuvo tiempo de escaparse y
desafortunadamente es asesinado. Y así, son tantas las situaciones repetitivas que no hay límite
para tanta atrocidad.

Ahora bien, ¿Qué tan asertiva es la postura de los grupos subversivos? Su fin inicial, era
buscar la igualdad, llevar a la justicia social y dar fin a las clases sociales, procurar el bienestar de
los más vulnerados y transformar la ideología capitalista, sin embargo, esa es la teoría, pues en la
práctica, es todo lo contrario, simplemente conformaron otro tipo de “clase social” que a través
de masacres, secuestros y cantidad de violaciones a los derechos humanos buscan alcanzar sus
propios intereses y perjudicar al pueblo y, por ende, al Estado. Es lo que Bourdieu afirmaba
frente a la dominación de una clase social sobre otra, la cual se asentaba en el ejercicio del poder
simbólico, el cual otorga prestigio, autoridad y poder al individuo (Educatina, 2011), es decir, en
otras palabras, estos grupos oprimen a los que aparentemente buscan defender y, de esa manera
ganan, sino respeto, por lo menos temor y eso es suficiente para obtener lo que desean, que, en
palabras del autor anteriormente mencionado, sería el capital político, económico y social, para
tomar el poder y ser ellos quienes gobiernen y es que, “los dominados piensan con las categorías
mentales heredadas de los dominantes” (Bessone, 2016). Para Rousseau, todas estas
características, como las desigualdades y el poder que se impone, son resultado del
despojamiento del hombre natural, pues según él, “el hombre es bueno por naturaleza y la
sociedad lo corrompe” (1762) por eso, Rousseau propone reformar las sociedades actuales con el
objeto de crear un modo de organización política que permita mantener las ventajas de vivir en
sociedad, pero que sea acorde con la naturaleza humana y es lo que expone en su obra “el
contrato social”, donde también, establece que quien mejor toma las decisiones es el mismo
pueblo, y que el Estado debe responder recíprocamente a esto, es a partir de ello, que surge el
concepto de democracia, la cual contradice al comunismo y además, al pensamiento de Bourdieu,
quien aseguraba que existía un campus y un habitus, el primero, tiene la capacidad de orientar y
coaccionar las prácticas sociales, es decir, dan la estructura o esquema de comportamiento, y el
segundo, permite que el sujeto interiorice las reglas del “juego” y las practique, de manera que él
rompe con las teorías clásicas que separaban por completo el concepto de objetividad y
subjetividad, pues él las unifica y dice, que tanto el individuo hace la sociedad, como la sociedad
hace al individuo, no culpa al uno o al otro solamente de la acción social; en cambio, Rousseau sí
lo hace, justificando al individuo. Pero sea culpable el uno o el otro, el punto es, que lo único que
han logrado estos grupos, es imponer sus ideas sin que, en definitiva, prime el bienestar social de
quienes ellos dicen defender.

Otro punto a tratar, es la educación, que en la cinta se manifiesta cuando, al fin, después
de muchos intentos, una maestra decide quedarse en la vereda, pese al conflicto y dispuesta a
enfrentar lo que fuera, incluso, retando a los combatientes, al desvanecer tanto amedrentamiento
con “los colores de la montaña”, un mural que pretendía opacar sus intimidaciones y dar vigor a
la comunidad para seguir luchando contra ellos, sin embargo, tanta deserción escolar y sus
amenazas directas contra su vida, la hacen desistir y en definitiva, abandonar la vereda. Esto es
algo contradictorio, puesto que según las ideas comunistas, ellos propenden por el bienestar de
las clases menos favorecidas, que al parecer, desde su perspectiva, no requiere una educación
formal, más bien, desde lo que se puede contemplar, ellos solamente capacitan y preparan para la
guerra, haciendo que los niños y los jóvenes desistan de una formación académica, y si algunos
de los simpatizantes de esta corriente ideológica llega a tener una educación superior, es para
ponerla al servicio de la subversión como sucede en las grandes universidades estatales del país,
puesto que, de acuerdo a la postura de Bourdieu y por supuesto, de muchos otros, que se
identifican con la misma ideología, las instituciones educativas sólo preparan al individuo no
para alcanzar los principios democráticos y ofrecer posibilidades igualitarias, sino que, con su
carácter represivo, reproducen las desigualdades sociales (Bessone, 2016) ; por el contrario,
Rousseau expresó que “La educación es un proceso natural, no artificial, es un desenvolvimiento
que surge de dentro, no algo que procede de afuera. Se realiza por la acción de los instintos e
intereses naturales, no por imposición de una fuerza externa” (Rossi, 2011).
En definitiva, se deduce que, para los intereses del trabajo social en Colombia, la postura
marxista no aporta ni garantiza nada que vislumbre un futuro halagüeño para el objetivo socio-
cultural de esta profesión, ya que, han mostrado hasta la saciedad, que ellos no están interesados
ni un poco en la restauración de quienes a lo largo y ancho del país, han sufrido las consecuencias
de una guerra injusta y absurda, que solo ha beneficiado a un reducido grupo de idealistas que
prácticamente, se han salido con la suya, colocando al gobierno y a la misma sociedad en una
posición de impotencia dada su capacidad económica, producto de su larga trayectoria de ilícitos
y de opresión política sobre la misma población que, ellos dicen defender del poder también
opresor, imperialista. Así las cosas, el señor Rousseau, es mucho más moderado en su posición
frente al sistema democrático, sin embargo, según su ideología totalitarista, el Estado tiene el
control de todos los entes, incluidas las clases populares, que es más o menos lo que hoy por hoy
se maneja dentro del sistema democrático en Colombia, tampoco garantiza un amplio apoyo a las
instituciones sin ánimo de lucro como el trabajo social, para que se logre llegar a los distintos
lugares marginados y vulnerables. En síntesis, este sistema político no impide proponer ideas,
expresarse libremente y, en fin, que estas se desarrollen y aporten beneficios a la sociedad,
siempre y cuando no pretendan comprometerlos económicamente, ni responsabilizarlos de si se
cumplen los objetivos o no.

Por último y para responder a los planteamientos iniciales de si ¿Ha cambiado la


sociedad colombiana de las últimas décadas el pensamiento marxista leninista? ¿Logrará este
país superar tanta barbarie producida por los subversivos y salir del subdesarrollo que tanto
han propuesto los gobiernos democráticos? Se puede decir con absoluta certeza que lo único que
ha logrado el marxismo leninista en el país es sembrar el terror, a tal punto que un buen
porcentaje de los colombianos ve con demasiado escepticismo la posibilidad de que el
comunismo gobierne a Colombia y no solo escepticismo, más bien se puede decir con mucho
horror; sin temor a equivocarse, este país no está preparado para ser gobernado por el marxismo
leninista, pero desde luego, tampoco tiene muchas expectativas en gobiernos como los actuales
que han probado hasta la saciedad su ineptitud para llevar a Colombia al desarrollo social y
económico que todos los colombianos anhelan.
Referencias
Bessone, F. (25 de enero de 2016) PIERRE BOURDIEU PARA PRINCIPIANTES [archivo de
video] Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=q6w6RydIpfw&t=285s
Educatina (11 de octubre de 2012) Bourdieu y el concepto de Habitus – Sociología [archivo de
video] Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=N24Glj2MSS4&t=405s
Rossi, E. (16 de agosto de 2011) ¿QUÉ ES LA EDUCACIÓN PARA ROUSSEAU Y CUÁLES
LOS CONTENIDOS EDUCATIVOS? [Mensaje en un blog] Recuperado de
http://peducativas.blogspot.com.co/2011/08/que-es-la-educacion-para-rousseau-y.html
Rousseau, J. (1762) El Contrato Social. Recuperado de
http://www.biblioteca.org.ar/libros/70390.pdf
Tamayo, A. (productor) y Arbeláez, C. (director). (2010) Los colores de la montaña [ cinta
cinematográfica] Colombia: Coproducción Colombia-Panamá; El Bus Producciones

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