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Sic et Non

Ha habido períodos en la historia que tema polémico; enseguida, su escrito será so-
parecían olvidar el carácter dinámico, mu- metido a diferentes conocedores de la temáti-
chas veces transitorio y siempre evolutivo de ca para que conceptúen sobre él, y luego el
cualquier saber. Eran momentos que preten- autor del primer escrito recibirá copia de las
dían haber alcanzado un modelo definitivo, tomas de posición de estos lectores, para darle
válido para siempre e inmutable. Es evidente ocasión de hacer una réplica. Si lo desea lue-
que nuestra época está lejos de pertenecer a go, Artes, la revista publicará el conjunto de
uno de estos períodos; más aún, dentro de la escrito-crítica-réplica.
mentalidad llamada posmoderna muchos de La primera incursión en este concepto de
nuestros contemporáneos tienden a refugiar- debate la hacemos con un tema que ha sido
se en una concepción perezosa, fácil y tímida muy discutido a veces con más acaloramien-
que, en lugar de analizar, refutar y cuestionar to de lo deseable : el llamado Solle. El pianis-
los diferentes modelos para someterlos a la ta y profesor de la Facultad de Artes, Arnaldo 3
criba de la razón, rechazar lo que no resiste, García, expone sus opiniones sobre una meto-
aceptar lo bueno y mejorar lo susceptible de dología en la que ha estado trabajando duran-
mejora intentan reconocer una validez igual te varios años; enseguida, los profesores Gustavo
en todos ellos. Yepes, Jorge López y Darío Valencia se expresan
Artes, la revista no acepta ni las posicio- al respecto. En números sucesivos trataremos
nes cerradas, convencidas de su verdad defini- de aplicar la misma metodología a asuntos
tiva, ni tampoco el facilismo de quienes polémicos de las demás artes.
renuncian a someter las ideas a la crítica ra- Le hemos dado a esta sección un nombre
cional. Quiere, en consecuencia, estimular un que se remonta a comienzos del siglo XII , cuan-
debate académico, que dinamice los procesos do Pedro Abelardo revolucionó el pensamiento
cognoscitivos en las diferentes ramas del arte. de la época, tan pegado al prestigio de las gran-
Está convencida de que este debate enriquece- des autoridades del pensamiento filosófico y
rá el espíritu y, aunque por momentos podrá teológico, cuyas tesis eran veneradas y no cues-
crear situaciones que acaloren los ánimos, lo tionadas. Acudió Abelardo a un artificio de apa-
hará en un ambiente tal de seriedad que per- riencia inocente: yuxtaponer las opiniones
mitirá una oposición creativa, respetuosa de encontradas de esas grandes autoridades, para
las opiniones ajenas y comprometida con la dinamizar la discusión y hacer que los estu-
razón. Para contribuir en este proceso, se ha diantes dejaran de tragar entero. A su obra le
decidido emprender la tarea de formar en cada dio el nombre de Sic et Non: el sí y el no, la
edición un bloque de debate, en el que un confrontación dialéctica.
autor expondrá sus puntos de vista sobre un Javier Escobar Isaza.

Universidad de Antioquia / Facultad de Artes 

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