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CANCIONES, POEMAS Y OTROS

TEXTOS
CHICHO SANCHEZ FERLOSIO

Madrid, 2008
PRÓLOGOS

AGUSTÍN GARCÍA CALVO

CHICHO ENREDANDO CON LOS TIEMPOS,

AÑOS 1967-69

(Pasaje de una obra inédita acerca del Desvivir

benditas otras, que a veces

al paso quisieron, o sin querer,

aliviar con una sonrisa

los hierros de la pasión de la fe

y que siguen aún, lo que dure,

jugando a dejar libre y suelto el amor

sin miedo al ceño del Amo,

que está ya mandando hacerlo volver

a la santa pareja y al orden,

y, en tanto que entre el ajetreo y el vaivén

se sigue aún fabricando

versos o panfletos, razón o canción,


bendito entre tantas el Chicho

que se avino en el trance a cantar por mí

y poner mis delirios en solfa,

¡ah, si te pudiera hacer revivir,

querube cetrino, con el repetir

tus tonadas con esta mi ronca voz

y que, al ser cada vez menos tuyas,

más de veras vivieras en ellas tú

con tu maliciosa inocencia!

AMANCIO PRADA

HASTA OTRO DÍA

(Prólogo de su disco-homenaje a Chicho,

que lleva el mismo título)


"Porque en mi cabeza

manda el corazón

a veces me callo

teniendo razón"

Este disco es el fruto de mi amistad con Chicho, y a él está dedicado: al cantor con
más gracia y talento que he conocido. Algunas de sus canciones se hicieron muy
populares en los años sesenta y la gente las cantaba pensando que eran
"anónimas", ese estado de gracia de una fama superior. No puede aspirar un autor
a mayor gloria. Él sólo publicó dos elepés, uno en Suecia, de título y fecha
inciertos, y otro en España, A contratiempo, en 1978, ambos descatalogados.

Los temas interpretados en este disco representan una pequeña parte de su amplio
repertorio. La mayoría tienen música y letra suya; otras las compuso sobre poemas
de Agustín García Calvo; a "La vecina" le puse yo música hace años; también hay
cuatro tradicionales, que él me enseñó, adaptadas a mi manera. De una forma o de
otra, todas son de Chicho Sánchez Ferlosio. Forman la huella sonora que ha dejado
en mi vida y en la de tantos amigos: su memoria.

Chicho ha sido una de las personas más inteligentes y bondadosas que he


conocido. Se interesaba por todo, sabía de casi todo. Así se lo dije un día. "Qué va,
qué va, lo que pasa es que donde los demás tienen lagunas yo tengo islotes...", me
contestó. Era elegante en su desaliño, educado y generoso, dulcemente ácrata y
benevolente en el sentido de querer encontrar el bien, la bondad y el placer. "La
diferencia entre un cigarro y un porro es que el primero te quita la ansiedad y el
segundo te da placer. La misma diferencia que hay entre un analgésico y un
masaje".

Me llamaba la atención su mirada reflexiva, siempre lúcida, que te hacía ver las
cosas desde una perspectiva distinta. Pero, por muy crítico que fuera, nunca
manaba de él rencor ni amargura. Serio y sonriente. Respetuoso con todo el
mundo: "Hay que respetar más a las personas que a las ideas, porque las personas
sufren y las ideas no".

Fue García Calvo quien me habló de Chicho por primera vez, allá en París, por el
año 70. Empezaba yo a rondar musicalmente su poesía y entonces me dejó una
cinta magnetofónica con algunas composiciones de Chicho para que tomara buena
nota, supongo. En 1975 le conocí personalmente en casa de Carmen Martín Gaite,
la Calila de "Caravel de Caraveles". Recuerdo que aquella tarde nos quedamos los
tres cantando hasta las tantas. "Por el camino viene", "Si las cosas no fueran", "Hoy
no me levanto yo"... ya las conocía de habérselas oído a Calila. Y es que Carmiña
admiraba y quería muchísimo a Chicho. Sobre él escribió:

"Chicho Sánchez Ferlosio es una referencia ineludible para todo aquel que se
interese en serio por la evolución de la canción de autor española, campo en el que
entró a saco desde los albores de los años sesenta, con la audacia, el desparpajo, la
sabiduría y la capacidad de innovación que caracterizan al poeta genuino, volcado
-como los primeros juglares- en llegar directamente al alma de sus oyentes (...). No
existe en este momento un letrista más inspirado que Chicho. El tema de la
injusticia, uno de los que más obsesionan a nuestro autor, está tratado siempre con
esa mezcla de simbolismo y léxico callejero que caracteriza su quehacer poético.

Capaz de improvisar, al hilo de la actualidad y perpetuamente atento a ella, las


críticas más acerbas y satirizar a base de trabalenguas las cuestiones espinosas, su
arma más eficaz, y siempre de dos filos, reside en el poder admirable que le asiste
desde niño para jugar brillantemente con las palabras.

Saludamos en la supervivencia y la insolencia de Chicho Sánchez Ferlosio esa


conjunción imperecedera de desgarro, burla y placer típica de los niños expulsados
de todos los paraísos, menos de aquel recinto cerrado y secreto donde, de espaldas
a las catástrofes, aún pueden seguir jugando con las palabras."

En febrero de 1978 nos subimos juntos por primera vez a un escenario con Agustín
García Calvo. Fue en el Colegio Universitario de Zamora. En el otoño de 1982 José
Luis Gómez, que dirigía el Teatro Español, nos invitó a dar allí varios recitales. En
el programa de mano Agustín había escrito:

"Es una empresa un tanto desesperada ésta de ponerse a cantar y declamar poesía
en un teatro. Porque es que los campos están bien delimitados: por un lado,
canción para masas, más o menos roquera o cupletera, cada vez más pobres,
desgraciadas y repetitivas letras, y también las melodías, supliéndose esas faltas
con los efectos de ruidos o de imagen y gesto del ejecutor; y por otro lado, la poesía
de los poetas, literaria, muda, condenada al libro y a la lectura de unos pocos,
poetas también o críticos de poetas, eternamente experimental y viéndose a sí
misma inscrita desde el nacimiento en una Historia de la Literatura. Pero ello es
que lo uno va con lo otro: que la desgracia de los géneros de consumo masivo está
en correlación con la reclusión al libro de la poesía culta, su ausencia de la voz y el
verdadero uso.

Es esa separación lo que se ataca con intentos como éste: Amancio Prada y Chicho
Sánchez Ferlosio han venido con sus artes y gracia haciendo revivir en voz y
melodía algunas de las canciones, y por mi parte vengo ensayando para el drama,
pero también para la lírica, modos de declamación con recursos de la voz y el
ritmo, públicos y casi teatrales, que se atreven a hacer sonar la poesía, por si sirve
para algo. Y algo de esto es lo que vamos a ofrecer en estas sesiones del español:
cosa, como espectáculo, probablemente pobre y desairada; de modo que confiamos
en que sean oyentes apasionados también por ese intento de rotura de la
separación que digo los que acudan a escucharnos.

Desde aquel entonces, nos seguimos viendo de vez en cuando y compartimos


escenario en varias ocasiones. En estos últimos años, cuando empezó a estar mal de
salud, nos veíamos con más frecuencia, unas veces en su casa, otras en el hospital.
Pasaba temporadas en La Paz y allí acudía a verle. Su conversación era muy amena
y siempre aprendías cosas con él. No te aburrías nunca. " He observado que hay
cinco tipos de enfermeras: las maternales, que tratan al enfermo como a un hijo; las
parentales, que lo tratan como a un familiar; las muñecas, que te tratan como si
fueras un muñeco; las profesionales, que tratan a los enfermos como a seres
humanos; y las enfermeras vudú, que te tratan como a un muñeco, ¡pero para mal!
Las mejores, desde luego, las profesionales". Otro día me lo encontré conectado a
varios tubos y sondas, con un ordenador portátil que le acababa de regalar su
hermana Gabriela. Estaba escribiendo unas fórmulas matemáticas para un
programa informático que debiera corregir, según él, el error de ciertas estadísticas
médicas... "es que los médicos saben muy poco de matemáticas... ¡256 megas de
memoria!, ¡Con este ordenador me doy miedo a mí mismo!".

Un día, no sé cómo, resulta que nos pusimos a cantar los dos la misma canción; yo
la recordaba vagamente, de cuando era niño, ¡qué bien la cantaba, por cierto,
nuestro pariente Antonio el de Valtuille! :
Soy soldado de levita

de esos de caballería,

de esos de caballería,

soy soldado de levita.

Y me incorporé a las filas

por una mujer bonita,

por una mujer bonita,

que arruinó la vida mía.

Corazón apasionado,

disimula tu tristeza,

disimula tu tristeza,

corazón apasionado.

Que el que nace desgraciado

desde la cuna comienza

desde la cuna comienza

a vivir martirizado.

Otro día me puso el ejemplo de la siguiente copla:


Qué delantal más tirano

que llevan las tudelanas

por la mañana temprano

cuando van a la Mejana.

mostrándome cómo se desordenan las sílabas y los acentos al cantarla, y cómo en


esa alteración está la gracia:

Qué llévan

que llevan las tudelanas!

Qué delán

qué delantal más tirano

qué llévan

que llevan las tudelanas;

por la má

por la mañana temprano

cuando van

cuando van a la Mejana;

qué delán

qué delantal más tirano

qué llévan
que llevan las tudelanas!

"Esto de convivencia es una sinvivencia"... Y te contaba cómo es la pícara vida del


cuco, que tiene la suerte de no soportar ni ejercer autoridad alguna, pues no conoce
a sus padres ni a sus hijos..., y la de otros animales sinvergüenzas que hay en la
naturaleza, como la oruga cerdo o el pulpo mimético... Ya lo he dicho, imposible
aburrirse con él. En cierta ocasión le tenían que hacer unas pruebas bastante
dolorosas. El médico así se lo advierte, "bueno, adelante". Al concluir el médico le
dice "se ha portado usted muy bien, sí señor"... "Bueno, es que soy un
profesional...", contesta Chicho. "Ah, ¿es usted médico?"... "No, no yo soy enfermo,
un enfermo profesional..."

"El único ritmo que siente nuestro cuerpo es el de los días. El de los años es un
ciclo que sigue el sol, pero no nuestro cuerpo". Y te lo explica. Otra vez, al
despedirnos, me dice "Te hará gracia esta cuarteta que se me ha ocurrido":

Porque en mi cabeza

manda el corazón

a veces me callo

teniendo razón.

Además de escribir poemas y canciones, se adentró en el terreno de la lingüística,


de las matemáticas y de la informática; inventó numerosos juegos y rompecabezas.
"Un buen juego es aquel cuyas reglas son fáciles de explicar y de entender, pero
difíciles de dominar". Todo lo hacía por gusto, por amor al arte.

Así era Chicho. Cráneo privilegiado. Genio y figura. "Ni mejor ni peor" diría él.
ISABEL ESCUDERO

CARTA A CHICHO

(Leída en el Homenaje a Chicho Sánchez Ferlosio en el café "El

Manuela". Madrid, 4 de Noviembre del 2003.)

Querido Chicho: Bien sé que allá donde tú estés quizá no haya tanta bulla, ni tanta
información, ni tantos autos, ni tantos negocios; que a lo mejor haya algo que no
sea realidad ni dinero, y que es una solemne idiotez querer traerte de nuevo a esta
barbarie, en la que malamente sobrevivimos, sólo por el egoísmo de tenerte cerca.
Pero debes disculparnos. ¡Es que nos haces tanta falta, Chicho! No es sólo que nos
falta tu amor y tu figura, es que tu palabra, tu conversación, tu generosa
inteligencia, tu gracia singular, era el contrapeso de tanta sinrazón, de tanta
pesadumbre. Escucha. Ahora que ya no estás, te lo confieso (de tú a tú, me daba un
poco de vergüenza y me lo callaba, quizá por miedo de que al hablar de ello se
rompiera el milagro y tú te convirtieras en uno más de los prójimos, con tu rollito
particular, un prójimo al uso: cada uno salvando su personita y su futuro).

Pero tú te saltabas de la manera más graciosa esa ley fatal y, cosa curiosa, sin dejar
de ser tú (lo eras más singularmente que nadie: tú fuiste el más singular de los
plurales), siempre andabas como fuera de ti mismo, curioseando como un niño no
domesticado. Tú eras hasta para ti mismo, tanto como lo eras para los demás, caja
continua de sorpresas. Incluso en tu larga enfermedad, Chicho (hay cosa tan
desgraciadamente "personal" y cerrada a cualquier escapatoria de uno, como es la
enfermedad, cosa tan desoladamente propia como es el dolor y el miedo), tú nunca
hablabas de ello, tratabas de salirte de la cárcel propia, de la cárcel de adentro,
como el prisionero de la avecilla que tú cantabas.

Sí, Chicho: tú nos enseñaste como nadie a desentendernos de nosotros mismos.


Tantas eran tus habilidades y tan clara tu razón, que en torno tuyo siempre nos
sentíamos aliviados de sí, llevados por algo que aún en la penumbra de tu
habitación doliente nos hacía ver lo nunca visto. Tú nos arrastrabas en esa
fascinación por las cosas, los misterios, lo desconocido en lo familiar y cotidiano, el
alma de las cosas y el lenguaje que las fabrica y enreda. No te dejaste atrapar por la
falsedad de la realidad, por su cerrada mentira; tú, amigo, sabías desmontarla
como nadie, no sólo enarbolando lanza en ristre la indómita Negación en boca viva
del muchacho rebelde que siempre fuiste, sino mejor aún, como en un juego, sabías
burlarte de ella, ponerla en evidencia disparatándola: haciéndola estallar como un
globo sobrealimentado de su propia ilusión. Sí, atacabas como el águila desde las
nubes lanzándote sobre ella, sobre la Realidad, pero también, y a la vez -ésa era tu
gracia singular- tomándola desde abajo, estando dentro y a la vez no estando,
exagerando sus contradicciones, inflando su real entelequia, para que ella explote
de sí misma. Era así tu guerra, al mismo tiempo que eficaz, de veras divertida. Y
así razonabas y cantabas contra la vanidad de la Justicia, la Autoridad, la
Información, la Democracia y otros dogmas consagrados. Te interesaba cada cosa,
cada caso y desde ahí dabas guerra al Ideal.

Y luego está ahí, ahora y siempre, aunque tú no estés, lo que tú, Chicho, hacías
como nadie, el canto de la razón viva, la voz del corazón despierto y entregado: tú
pusiste en solfa lo divino y lo humano, con una gracia singular e inimitable. A tu
lado siempre: Rosa, Amancio, Alberto, Mariano... y otros descontentos, flor de
lejanas catacumbas: Joaquín, Javier, Teresa, Julia... (compañeros de voz cantante).
También tus siempre amigos de versos en el café Manuela, embelesados contigo en
juegos y razones (Paco, Antonio, Carmiña, Agustín, Isabel, Rafa, Lisi, Hans, Inma,
Pony, Julio, tu hermano Rafael y tantos otros), todos los que se alimentaron de la
sal de tus composiciones, del acierto de tus letras, ya fueran baladas o coplas,
matemáticas o panfletos, nacidos de tu clara inteligencia, o sencillamente de tu
jugosa compañía, te damos las gracias. Aquí me tienes a mí misma, amiga tuya de
tantos años, en agradecimiento de ti, de las horas vivas nunca perdidas que
jugamos a hacer adivinanzas y enigmas que tanto te gustaban y que te prendían
hasta en tus últimos momentos, en tu lecho de hospital... Tú nos unías, tan
dispersos y diversos, en tu compañía. Nos acogías siempre a todos, sin escatimar
tu tiempo, Chicho: "Igual que Cristo/ lo mismo con los tontos/ que con los listos".

Así viviste, atento -y hasta feliz- pese a las repetidas heridas de la desgracia. Buen
padre, buen amigo y maestro de tus hijos, tanto en su compañía como en la
distancia.

Te recordaremos siempre rebosante de claridad en tu nido oscuro, junto a Rosa, tu


última compañera, amor bueno y duradero (¿Oyes, Chicho, cómo aún resuena tu
límpida voz junto a la de tu querida amiga de vida y escenarios cantando con la
gracia del agua los delirios del querido Agustín: "El mundo que yo no viva, / lo
viví como cosa extraña, /como arca de maravilla /¡Ay, de mi vida!"? Y esa estrofa
que hoy cobra más verdad que nunca: "Era un hombre y te quiso mucho/ y mucho
llorando digas...".)
Síguenos, Chicho, desde donde quiera que estés, alimentándonos con la gracia de
tu trato y compañía, enseñándonos a vivir esta vida como tú la viviste, despojado,
desnudo de fama y dinero, sin esperanza ni miedo... No estás solo, Chicho. Aquí
nos tienes de nuevo: en "El Manuela", el lugar donde tantas veces cantaste tu
rebeldía, tu modo de estar despierto: Aquí resuena tu voz viva, oye tu grito alto y
claro: "HOY NO ME LEVANTO YO".

(Archipiélago, n.° 58)

RAFAEL R. COSTA

FRACTALES

¡Este es el resultado de sorprendentes operaciones matemáticas! me dijo Chicho


aquella tarde mientras señalaba el monitor de su ordenador.

Uno esperaba ver cifras hilvanadas con signos y símbolos trigonométricos que
vendrían a dar resultados inverosímiles como capicúas y números π, pero lo que
mis ojos vieron estaba muy lejos de parecer una simple operación matemática por
muy incomprensible que esta fuera. La pantalla estaba llena de colores que
parecían surgir del mismísimo centro del disco duro y abrirse paso como una flor
hasta ocupar los límites.

¿Qué ves?, me preguntó sin darme tiempo a despojarme del asombro.

Después de un momento de reflexión le dije que veía la cabeza de un elefante con


la trompa enroscada en una ese.

¡Exacto! ¡Pero, mira aquí!

Chicho me señaló la punta de la trompa, y desde allí partía una nueva cabeza de
elefante, exactamente igual, también con la trompa enroscada en ese, en cuya
punta volvía a nacer otra y así hasta que la agudeza visual fue incapaz de percibir
cabezas y trompas cada vez más diminutas...
¿Ves? De una fracción del dibujo vuelve a resurgir el dibujo entero. Tiene uno la
sensación de entrar en uno de esos jardines de senderos que se bifurcan, ¿verdad?

No le respondí, pues mi amigo, a pulso de ratón, fue cambiando las estructuras


plasmadas en la pantalla, y ante mi pasmo y asombro allí aparecieron estrellas de
seis puntas cuyas puntas eran estrellas de seis puntas cuyas puntas... se sucedieron
como a vueltas de caleidoscopio mosaicos caprichosos, dientes de narval
desenroscados, arabescos imposibles, fragmentos de vidrieras de los manicomios,
laberintos inagotables que se ensimismaban, rinocerontes bicornes cuyos cuernos
eran rinocerontes bicornes, miniaturas hasta el límite de cuernas de ciervo, alas de
moscas minimizadas miles de veces y, finalmente, mapas de abruptos litorales
cuyas ínfimas penínsulas eran a su vez mapas de abruptos litorales plagados de
réplicas exactas de ínfimas penínsulas... (Fueran nubes crepusculares o sucesiones
interminables de cordilleras cada más pequeñas e inaccesibles a la vista, ¡todas
resultaban absolutamente perfectas!

Cualquier cosa imaginable estaba allí y era capaz de desarrollarse. Cualquier cosa
menos el concepto.

¡No son más que fractales!, aseguraba Chicho, para enseguida apostillar: ¡En
realidad, sólo es una de sus aplicaciones!

Dado mi estupor él se dejó caer en el respaldo de la silla giratoria, chascó la lengua,


reencendió un cigarrillo y me explicó con lujo de detalles todo lo que sabía del
tema, que era mucho.

¡Son representaciones visuales de fractales! Los fractales son fracciones, polígonos


cerrados cuyos bordes son infinitos. Tienen algo de periódicas puras, son las
derivaciones infinitas que se producen al combinar un número real con uno
imaginario. Dicho de otra manera: tú a un número imaginario le restas un número
real, por ejemplo el menos uno...

Atento a todo lo que decía, y sin llegar a comprender cómo puede uno imaginar un
número, agradecí que Chicho me escribiera en un resto de papel la fórmula
magistral de los fractales: i=_-i, donde el signo A_@ representaba el número
imaginario.

¡En realidad, los fractales se conocen hace más de cien años, porque Henri Poincaré
ya los definió! Pero fue el sabio Gaston Juliá quien aplicó a los resultados
adquiridos en primer orden operaciones matemáticas reiterativas, que es de lo que
se trata... Sin embargo, lo que más me sorprende es que ellos, Poincaré y Juliá,
debieron imaginarlos... No tuvieron más remedio que hacerse una idea mental,
pues hasta 1975 los fractales no pudieron representarse en la pantalla de un
ordenador: sencillamente los ordenadores no existían. Y gracias al talento de un
polaco: Benoit Mandelbrot.

Me quedé absorto. Quería oír todo lo que él me decía y al mismo tiempo era
incapaz de apartar los ojos y con ellos la atención de las secuencias de la pantalla.
Los dibujos estaban allí, no sé hasta qué punto ajenos a nosotros, envueltos en ese
hálito de misterio matemático, trompas en ese, costas abruptas, senderos que se
bifurcan... continuaban apareciendo con aparente, y sorprendente, facilidad.
Composiciones propias de sueños que rozaban las pesadillas sin serlo, geometrías
borgianas, absorbentes, esquizofrénicas.

¡Si Euclides levantara la cabeza, él que no creía en las fracciones!, exclamó al fin,
con aviesa sonrisa, mientras se levantaba meneando negativamente la cabeza.

Cosa enigmática es, esta de los fractales.

Hoy día el desarrollo de esas fórmulas maestras ha llegado a caminos, veredas y


senderos insospechados entonces. Ya se habla sin bajar la voz de curvas y recurvas
fractales, de desarrollo de densidades espectrales, de curvas de Peano, triángulos
de Koch y paseos aleatorios... Un mundo cada vez más explorado e
inexplicablemente más desconocido.

No hace mucho he tenido la fortuna de oír música derivada de fractales. Y supera


la música de las esferas, las ondas transradios y las psicofonías. Ordenadores y
programas de última generación, sintetizadores, y manos expertas, han logrado
trasladar a puro sonido toda esta magia. Supera cualquier noción previa de tiempo
y de espacio, de lucidez y de ingravidez. Ojalá Chicho pueda oír esa música: creo
que él amaba los fractales porque veía en ellos un camino hacia lo infinito.
RAFAEL R. COSTA

ENTRE CINCO VOCALES

Meditabundos por curiosear el acuífero del surrealismo y la ocurrencia


concienzuda, estimulados con el sahumerio tertuliano y refugiados en ese
riachuelo freudiano de la amistad, aquellas tardes ferruginosas y ojituertas nos
dedicábamos Chicho y yo a buscar por simultáneos recovecos palabras con las
cinco vocales sin repetir ni faltar.

Comenzamos, pura huronería, cambiando el nombre a su calle y en lugar de


Avenida de Betanzos la llamamos unas veces Estuario de Fuengirola y otras
Republicano de Orihuela; en este espiráculo de hipercarburos léxicos y
multiofertas del lenguaje modificamos después nuestros sencillos nombres: Aurelio
y Eufrasio en lugar de Chicho y Rafa.... Llamemos (decía alzando un dedo y dando
una patada al suelo) eucaliptos a las acacias, murciélago al gorrión, digamos
duodécima por doce, bandurriero por guitarrista y al ladrón bauticemos
hurtadineros...! Muy pronto, el entusiasmo auténtico que presumíamos y la
contundencia eufórica de la imaginación nos llevó largas horas (gigasegundos
viene a ser lo mismo, decía) de la costurería al cuadernillo, del enunciado a la
numeración.

Conociendo la nebulosidad supersónica de Chicho, su talante seculario y


neofigura, es fácil cuestionar que el muestrario y manutención de palabras
pentavocálicas se viera expuesto y enunciado con exhaustivo rigor. No faltaron
leyes sujetas a un centrifugado feudalismo, meticulosas reglas eufónicas,
propiedades ventrílocuas y neumonías de la palabra: no vale ésta, ésta sí... hasta
llegar al subordinaje de un código de normas comunicantes tan extenso y
educativo como la lista primigenia.

Llegamos a reunir doscientas en muy poco tiempo, dispares, distintas, neuróticas,


valgan blusonería y leguminosa, siendo aceituno la primera de la lista y
zurrapiento la última. Siempre había un momento en que el peliagudo y
persuasivo Chicho echaba manos de su opulencia semántica y su escultórica
habilidad para construir palabras primonuevas (cuando no simplemente
inventadas) con parturienta y fulminante ahínco, y saltaba con filougandés,
terajulio, pentanewton (léase pentaniuton) ciudadelo, venusiano... hasta
obnubilarse, y entre risas, pericanutos y vicecónsulas bielorrusas la verdad es que
descubríamos escupitajos de plata, neurorraquis de oro y paupérrimos e
inexistentes zarigüeyos.

ALBERTO PÉREZ

NOSTALGIA CHICHESCA

Llegabas siempre con tiempo, y esperabas a que fueran las diez en punto en tu
reloj para llamar al timbre. Pasábamos directamente a la cocina y, mientras yo
preparaba la bandeja con el café, el ron y todo lo demás, me contabas las
incidencias del trayecto en bicicleta o en 850 desde tu casa. A veces, tu relato se
alargaba hasta la hora de comer, y entonces nos bajábamos al bar de la esquina a
reponer fuerzas; aunque tú, lo único que tomabas era un helado de tres bolas con
un chorro de coñac. Al volver a casa, mientras te hacías la primera pipa y yo abría
las ventanas, abordabas con decisión el balance del trabajo realizado la víspera, y
ya no parábamos hasta por la noche. Si, por el contrario, iniciábamos la sesión sin
preámbulos, hacíamos un descanso a media mañana, en el que tú me leías, en
italiano, algún fragmento de la Divina Comedia y yo te daba a conocer alguna rareza
musical. Le cogiste afición al bullerengue colombiano y a la trova yucateca de los
años veinte. En verano, por la tarde, cuando el calor nos vencía, nos echábamos
una pequeña siesta, uno en el sofá y otro en la alfombra, antes de continuar. Nos
habíamos propuesto poner en marcha un baile con canciones originales, y
estuvimos trabajando en él alrededor de dos años, sólo interrumpidos cuando yo
tenía que salir de gira. Partimos de una colección de piezas compuestas
previamente, a las que fuimos poniendo letra sin prisa, recreándonos en el origen y
carácter de cada género. Un día llegaste con casi dos horas de retraso y me
enseñaste, como justificación, la copia de una queja que acababas de presentar en la
Oficina del Consumidor, por los efluvios que despedía una chuleta de Sajonia a la
que habían manipulado la etiqueta de caducidad. Aquel día, por cierto, debió de
ser uno de los pocos que hiciste la compra en tu vida, aunque, como le dijiste a
Rosa, la hiciste "de corazón". Otro día, apareciste vestido con un traje que te había
comprado tu madre esa misma mañana, para que la acompañaras al médico, y no
dudaste en tirarte al suelo,• para, tomando como unidad de medida tu propia
estatura, calcular la última marca olímpica de salto de longitud. Uno de nuestros
momentos más esperados era el de contemplar, recién impresa, la versión
definitiva de una canción, para después registrarla, cosa que, sin embargo, nos
llevaba siempre a discutir, pues cada uno se empeñaba en que el otro había
trabajado más, y, por lo tanto, debía atribuirse una mayor parte de los derechos.
Pero una vez tuvimos una discusión muy seria, que duró casi dos semanas, por un
slow que se nos resistía, y al final me pediste licencia para "realcoholizarte",
mientras yo me encargaba de terminarlo. Sin embargo, a los pocos días, cuando
ibas con el coche por la calle Alcalá, diste con la estrofa completa que nos faltaba
para rematar un fox, también rebelde, y te paraste en la primera cabina telefónica
que encontraste para dictármela, antes de que se te olvidara, sobre el fondo de
cláxones del atasco que habías formado. Viviste con emoción los pasos siguientes a
la composición de las canciones -nuevos para ti-, como la escritura de los arreglos,
los ensayos con la orquesta y, sobre todo, su estreno en la pista de baile. No sé de
dónde te sacaste ese paso tan endiablado que te servía para bailar todos los ritmos,
desde el vals hasta el rock, y que producía consternación en los danzantes.

Todavía tuvimos ocasión de compartir algunos proyectos, antes de que tus


achaques nos lo impidieran, y, ya en el hospital, nos dedicamos simplemente a
dejar pasar el rato, aunque a veces, también, a pensar en nuevas invenciones. Yo te
tenía al corriente de la suerte que iban corriendo nuestras canciones, y me pedías
que te cantara algún anticipo de las versiones a capella que estaba haciendo. Me
dibujaste el esquema de todos los tubos que tenías puestos y me explicaste el orden
en que tenía que sujetarlos para que pudieras llegar hasta el cuarto de baño a
fumarte un cigarrito de los tuyos. Previamente y según tus instrucciones, yo había
salido a explorar al pasillo y había perfumado el servicio con colonia.

Cuando te quedabas dormido, me ponía a pensar en lo mucho que había


disfrutado contigo a lo largo de esos 15 años en que te había tratado casi a diario.
Recordaba tu dieta veraniega a base de polos de chocolate, con la perrita Tina
esperando su parte; la exhibición de salto que le hiciste a tu sobrinita en el somier
del corral del pueblo; la crisis mística que te sobrevino al volver a escuchar la
ranchera "Hace un año"; las visitas que me hacías al camerino, temblando, cuando
yo estaba a punto de salir al escenario, para decirme que no me pusiera nervioso;
las evocaciones de tu infancia en Coria y la reverencia con que te referías a tus
padres y hermanos. Y me admiraba el que, siendo tan locuaz, no te hubiera oído
jamás hablar mal de nadie. Hiciste canciones memorables, que cantabas
maravillosamente, y no había nadie que leyera ni recitara como tú. A veces, me
imagino que son las diez en punto, suena el timbre y nos volvemos a encontrar.
JULIO MARTÍN CASAS

Pero al poder del mundo

no esperes que me incline

mientras el cuerpo aguante

y el cuento no termine

Tuve la suerte de conocer a Chicho en Salamanca en el año 1958 y he tenido la


suerte de ser su amigo durante casi medio siglo.

El "Hernán Cortés" de Salamanca, con el "Guadalupe" de Madrid era un Colegio


Mayor Hispano-Americano donde convivíamos unos pocos españoles, colegiales y
profesores universitarios, con una gran mayoría de estudiantes de todos los países
de Iberoamérica.

Chicho apareció en el colegio al inicio del curso, recomendado y con credenciales


de su padre, fundador de la Falange, ex ministro de Franco y sobre todo escritor,
para D. Alonso Zamora Vicente, también escritor, catedrático y rector de nuestro
colegio.

Con estos antecedentes y con la presentación oficial y pública del nuevo colegial,
José Antonio Julio Onésimo Sánchez Ferlosio, un chico flaco, miope, con grandes
gafas y elegantemente vestido con buena ropa y calzado "a la italiana", se
desataron los cotilleos e informaciones sobre quién era, intentando calibrar al
nuevo compañero.

Chicho estaba matriculado en Primero de Derecho, aunque no debió ir a la


Facultad más allá de tres o cuatro veces y por pura curiosidad, por ver el ambiente.
Pero haciendo gala de inteligencia despierta y simpatía, imaginando mil diabluras
y bromas sorprendentes, se ganó a todos y fue enseguida muy popular e
imprescindible en todas las movidas. A los pocos días participaba en todas las
actividades "extraescolares", vinos y copas por todas las cafeterías, paseos y
cortejos por los soportales de la Plaza Mayor, visitas al "barrio chino", fiestas y
guateques.

Pero lo más enriquecedor y lo que más huella nos dejó a todos fueron las tertulias
interminables, hasta el amanecer, en las habitaciones del colegio, con cafés, copas y
nubes de tabaco, escuchando y bailando chachachás, merengues, boleros, sones,
cumbias y valsecitos y oyendo las increíbles historias y sucedidos de los barrios de
Nueva York, Panamá, Guayaquil, Lima o Tegucigalpa que nos contaban nuestros
compañeros, abriéndonos las puertas de un nuevo mundo, tan variopinto y
sorprendente que nos dejó para siempre interesados por esas tierras. Chicho se
quedó prendado de aquellas músicas y canciones y esa afición la cultivó durante
toda su vida.

En el curso siguiente, Chicho se quedó en Madrid y poco después supimos que se


había casado. Cuando yo pasaba por Madrid iba a su casa, conocí a su primera
mujer Ana Guardione, a su familia y amigos.

En las vacaciones de verano, Chicho y su madre, Doña Liliana, me invitaban a


pasar unos días en Coria, coincidiendo con las fiestas del "Toro". Hacíamos
excursiones a los pueblos de los alrededores y sobre todo, con sus hermanos,
amigos e invitados, tertulias, charlas y música. Chicho estaba recogiendo el
folklore de la comarca, cantos de ronda, de boda, bailes, romances y coplas de
ciego y nos las cantaba con todos los matices de emoción, misterio, crítica social o
gracia maliciosa de las coplas del pueblo. Las alternaba con un extenso repertorio
italiano aprendido de la familia de su madre, su bachiller en el Liceo Italiano y sus
frecuentes viajes a Italia.

Yo tuve que irme de España, "por si acaso", y viví en Ginebra dos años. Visitaba a
menudo a Miguel, el mayor de los Ferlosio, exilado con su familia en Suiza y a
través de Miguel y por carta seguí en contacto con Chicho y supe la trágica muerte
de su primer hijo, sus actividades políticas y los primeros tropiezos con la policía y
la justicia de la dictadura que denunciaba con sus canciones clandestinas en
manifestaciones y panfletos.
En recitales clandestinos nos fueron llegando sus primeras canciones, "El gallo
rojo", "La paloma de la paz", como canciones de la guerra civil. En las guitarras de
los "progres" sonaban "Hay una huelga en Asturias", "He conocido el crimen una
mañana", denunciando el asesinato de Julián Grimau en 1963 o la muerte de
Agustín Rueda en Carabanchel, las prisiones de Luis Llorente o de Josefa García,
alternadas con denuncias de lo cotidiano, coplillas satíricas, tocando todos los
palos, en un son cubano, en un garrotín, en un corrido o en unas seguidillas que
generosamente lanzaba al viento sin firma ni derechos de autor.

Luego, durante dos o tres años le perdí la pista, dejó la casa de la calle
Guadalquivir y los amigos comunes también estaban dispersos o huidos. Supe que
estuvo viajando por Suecia, Francia, Italia, Albania y que se embarcó en una
larguísima aventura, con su mujer y sus hijos, en una furgoneta convertida en
caravana, por el Sur de Europa, Turquía, Irán, Afganistán, Pakistán, India, Ceilán y
vuelta.

Al finalizar un concierto de Atahualpa Yupanqui, en Madrid, oí que gritaban con


voz potente: ¡Julio Martín Casas! ¿Dónde está Dios? Era Chicho que me saludaba
desde un palco. Nos dimos un abrazo y desde entonces nos hemos visto muy a
menudo, con las interrupciones de sus cárceles, escapadas y viajes -en algunos le
acompañé-, Marruecos, Doñana, Canarias, Ibiza, Cádiz, Roma, Coria, continuos
cambios de domicilio y de trabajo, trágicas desgracias familiares, amores y
desamores, alegrías y penas, latentes en sus canciones, poemas y escritos.

En los últimos años, la casa de Rosa y Chicho en el Barrio del Pilar ha sido para mí
una amable y acogedora cita de muchos fines de semana, así como los recitales y
lecturas en pequeños locales entre amigos y los menos frecuentes conciertos con
Agustín, Amancio, Alberto o Mariano.

Los "trabajos" de Chicho sorprenden por su volumen y variedad, son un rico


mosaico, colorido y original. Todo le interesaba.

Trabajó como corrector de estilo, traductor, librero, articulista en periódicos y


revistas, comentarista en radio y televisión, actor y cantante, pero en "sus ratos
libres", estudiaba e investigaba sobre problemas matemáticos y físicos, temas de
lingüística y gramática, métrica y armonía. Gran lector del Antiguo Testamento,
temas científicos, demografía, sociología, medio ambiente...
Su casa era también un pequeño taller artesanal en el que se hacía los prototipos de
sus juegos e inventos, rompecabezas, laberintos y toda clase de artilugios, entre
rasgueos de guitarra y charango, verso y verso, notas y escritos, denuncias contra
el poder y los prepotentes, y divertidas críticas de los sucedidos cotidianos.

Muchos trabajos de la enorme producción de Chicho se han perdido, por su


rechazo visceral a registrar, conservar o editar sus continuos cambios de domicilio
y ciudad, abandonando, perdiendo o destruyendo todos sus papeles.

El tesón de Rosa, su mujer, enfermera y cuidadora abnegada en su larga y penosa


enfermedad, mano a mano con Lisi Prada, nos ha movilizado a todos los amigos en
una ardua tarea de recopilación de la dispersa obra de Chicho.

Ni subdito ni rey

ni a cualquier viento hoja

ni el paso activo y fuerte:

por donde pisa el buey

pero en la cuerda floja

mientras llega la muerte.

PONI MICHARVEGAS

La Poesía me despejó el camino

Vicente Huidobro
I

era un hombre de palabra

era un hombre de la palabra

era un hombre por la palabra

desde la palabra hacia ella

era un hombre con la palabra

para la palabra para la palabra

no estaba encima ni por debajo de ella

era un hombre a la altura de la palabra

sondaba a la palabra que le sondaba a él

cresta altísima de palabra de piedra

abismo insondable del aire de la palabra

la superficie sonora de la palabra

su vastísima extensión sin fronteras

érase un hombre a una palabra pegado

érase una palabra superlativa

su encrucijada su enigma su cálculo

su vaticinio inescrutable

sus cantidades mayúsculas

que no remiten ni a cifra ni a letra

era un hombre
palabra

Dos

Como hermanos que conocíamos

el porvenir de la memoria

y sus campos anegados,

coincidíamos en dos puntos

principales: nadie debería

limitar ni movimientos ni

desplazamientos de nadie.

Hacerlo genera enfermedad.

Y el hombre enferma y con

él, el mundo.

Nadie debería ni estimular

ni incrementar la dependencia

de nadie. La dependencia

genera enfermedad. Crece y

crece la demanda. Y los

hombres enferman. Con

ellos, enferma el mundo.


Tres

Sabes, Querida Vieja, que uno

de tus batalladores hijos

se ha muerto en Madrid? No lo

mató ninguna guerra sucia

-todas las guerras son sucias-,

aunque también.

Lo mató la guerra pulcra

de este vivir que no lo es.

En su recuerdo y homenaje,

Mater Dulcissima, decirte

que dio hermosura sin fin,

que enrostró a la sibila

con testa de toro de Guisando,

que intentó la respuesta y

dio en el clavo del amor:

escribió y fue escrito,

cantó y fue cantado.

Para el compañero Chicho Sánchez Ferlosio,


quien me enseñó que los botines se reparten.

JESÚS MUNÁRRIZ

CHICHO

El corcho de los años nos rodea

machacón, nos insensibiliza,

nos protege del mundo,

nos aisla.

La muerte ajena a cierta edad es ya

insistente costumbre recurrente

que no sorprende y, aunque duela,

ya no nos impresiona.

Pero hay muertos y muertos.

Todos somos distintos, cada cual

es cada cual, diverso, diferente,

todos irrepetibles. Pero hay muertos

y muertos.
Si alguien fue independiente, ese fue Chicho.

Si alguien fue generoso, ese fue Chicho.

Si alguien fue desprendido, ese fue Chicho.

Si alguien no doblegó la cerviz nunca,

si alguien no permitió que pensaran por él,

si alguien le plantó cara a la injusticia siempre,

a las tramas y engaños,

si ha existido alguien único, ese fue

Chicho Sánchez Ferlosio.

Nunca quiso aprender a someterse

a las reglas del juego, de este juego

sin principios ni fin justificable

que nos engloba y nos tritura.

Regaló su talento a manos llenas,

derrochó corazón como si nada,

huyó del triunfo, rechazó el sistema,

eligió la amistad, la inteligencia,

los rumbos sin marcar,

las tierras sin cercar,


las gentes sin domar,

el campo abierto.

Entre la corrupción, la falsedad, la servidumbre

fue íntegro, fue auténtico, fue libre.

Era de ley, no de la ley;

creía en la justicia, no en sus profesionales;

apoyaba a los débiles, les buscaba los fallos a los fuertes.

Aborrecía la cosmética, el perfume

del disimulo, la máscara

tramposa.

Ni la riqueza le atraía ni le asustaba la pobreza,

y aunque de casa bien, pasó muchos apuros

en muchas ocasiones.

No le gustaba el mundo que le tocó en herencia

porque lo conocía, y cuando eligió otros

fue siempre a contratiempo,

y de los que no estaban permitidos.

No encajaba en las hormas.

Le sacaban de quicio los abusos.


Le repelían los solemnes,

congeniaba con los sencillos.

Fue siempre, en el sentido mejor de la palabra,

bueno, fue buena gente

hasta las cachas.

Eso a lo que llamamos corazón,

la ternura, el cariño, la entrega, la bondad,

no en palabras, en actos,

presidió su quehacer.

Ni pasaba la cuenta ni guardaba rencores;

ni toleraba imposiciones, ni imponía.

Creía que las cosas deben ser

de quien más las aprecie

y lo practicó siempre con las suyas.

Siendo hijo de quien fue,

y llevando por nombre José Antonio

Julio Onésimo, pronto

se quedó sólo en Chicho

y le bastaba.
Y a nosotros también,

a los que disfrutamos del regalo

de ser amigos suyos,

nos basta con su nombre: esas dos sílabas

por las que respondía alguien irrepetible,

alguien que ya no está

pero que va a seguir acompañándonos

mientras el cuerpo aguante.

(Cuadernos del Matemático, n.° 31-32. Getafe, 2003)

NOTA A LA EDICIÓN

La obra incompleta de Chicho Sánchez Ferlosio (canciones, poemas, artículos, etc.)


la hemos ordenado de una forma anárquica, personal, como él nos la cedió o nos la
participó, en su intensa vida y sus extensos conocimientos autodidactas,
situacionistas...

No es fácil ordenar correctamente las producciones de Chicho, ya que él nunca se


preocupó de hacerlo; aun así, las hemos dividido en tres grandes grupos:
canciones, poemas y textos en prosa, y, dentro de las canciones, que es lo principal,
hemos hecho varios apartados, que corresponden a las diversas épocas de su vida
en que las compuso. Hemos recogido también en dos apartados las canciones con
música de Chicho sobre textos ajenos, casi todos de Agustín García Calvo, y
algunas de las canciones populares que cantaba.

Ni están todos los textos (algunos se han perdido o no aparecen), ni quizá estén en
el orden correcto, pero estamos seguros de que Chicho nos lo permite.
CANCIONES

CANCIONES ANTIFRANQUISTAS

OTRAS DE LOS AÑOS SESENTA Y PRIMEROS SETENTA

EL DECRETO

Son distintos por completo

el decreto y el decano,

el decreto acaba en reto

y el decano acaba en ano.

Un decano enajenado

por la superestructura

cerró las puertas al arte,

el progreso y la cultura.
Te lo están avisando, José Camón,

se te está complicando la situación

y con razón.

Escucha bien mis augurios,

oye mi premonición,

no olvides mis advertencias,

cuídate José Camón.

Te lo están avisando, José Camón,

se te está complicando la situación

y con razón.

Ándate con pies de plomo

amigo Camón Aznar,

que el día menos pensado

te van a descamonar.

Te lo están avisando, José Camón,

se te está complicando la situación


y con razón.

Un aviso a los cantores:

déjenlo para otro día,

que parece que allí vienen

coches de la policía.

ESTUDIANTES ESTUDIANTES

Estudiantes, estudiantes,

que estudiáis filosofía,

por cualquiera de vosotros,

Llorente lo mismo haría.

Estudiantes, estudiantes,

que jamás nadie nos tuerza;

basta ya de indecisiones,

en la unión está la fuerza.

En su celda Luis Llorente,

no distingue noche y día;


y el asunto del decreto,

no entendemos todavía.

Nada humano me es ajeno,

un filósofo decía;

lo contrario dice hoy,

una nota de la policía.

Estudiantes, estudiantes,

de la facultad de enfrente;

no olvidéis que allí estudiaba,

nuestro amigo Luis Llorente.

¡Pacifistas, pacifistas,

es la paz la que os anima!;

lo mismo dicen los Yanquis,

y ya veis lo de Hiroshima.

¡Pacifistas, pacifistas,

queréis con la paz callarme!;

lo mismo dicen los yanquis,


y no quieren el desarme.

GALLO ROJO, GALLO NEGRO

Cuando canta el gallo negro

es que ya se acaba el día,

cuando canta el gallo negro

es que ya se acaba el día,

Si cantara el gallo rojo

otro gallo cantaría.

Ay,

si es que yo miento,

que el cantar que yo canto

lo borre el viento,

ay,

qué desencanto

si me borrara el viento

lo que yo canto.
Se encontraron en la arena

los dos gallos frente a frente,

se encontraron en la arena

los dos gallos frente a frente,

el gallo negro era grande

pero el rojo era valiente,

el gallo negro era grande

pero el rojo era valiente.

Ay,

si es que yo miento,

que el cantar que yo canto

lo borre el viento,

ay,

qué desencanto

si me borrara el viento

lo que yo canto.

Se miraron cara a cara

y atacó el negro primero,

se miraron cara a cara

y atacó el negro primero,


el gallo rojo es valiente

pero el negro es traicionero,

el gallo rojo es valiente

pero el negro es traicionero.

Ay,

si es que yo miento,

que el cantar que yo canto

lo borre el viento,

ay,

qué desencanto

si me borrara el viento

lo que yo canto.

Gallo negro, gallo negro,

gallo negro, te lo advierto,

Gallo negro, gallo negro,

gallo negro, te lo advierto,

no se rinde un gallo rojo

mas que cuando está ya muerto,

no se rinde un gallo rojo

mas que cuando está ya muerto.


Ay,

si es que yo miento,

que el cantar que yo canto

lo borre el viento,

ay,

qué desencanto

si me borrara el viento

lo que yo canto.

LA PALOMA

Soy un hombre del pueblo

harto de trabajar,

mi vida es el trabajo, paloma,

pero me pagan mal.

Las leyes están hechas

a favor del patrón;

la ley no escucha al pueblo, paloma,


aunque tenga razón.

Que no, que no, paloma, no,

que así que no trabajo yo,

que no, que no, palomita, que no,

que así que no trabajo yo.

El deber del trabajo

dicen que tengo yo,

de mis deberes hablan, paloma,

de mis derechos no.

Pero nos uniremos

contra la explotación;

la fuerza de los hombres, paloma,

siempre será la unión.

Que no, que no, paloma, no,

que así que no trabajo yo,

que no, que no, palomita, que no,

que así que no trabajo yo.


Nos juzgan y condenan

en nombre de la paz,

cada vez que pedimos, paloma,

justicia y libertad.

Pero la paz tú eres

y con ellos no estás,

que vuelas con nosotros, paloma

paloma de la paz.

Que no, que no, paloma, no,

que así que no trabajo yo,

que no, que no, palomita, que no,

que así que no trabajo yo.


COPLAS DEL TIEMPO. LOS MINEROS EN HUELGA

(HAY UNA LUMBRE EN ASTURIAS...)

Hay una lumbre en Asturias

que calienta España entera,

y es que allí se ha levantado,

toda la cuenca minera,

que calienta España entera,

Hale, asturianos,

están nuestros destinos

en vuestras manos.

Empezaron los mineros

y los obreros fabriles.

Si siguen los campesinos

seremos cientos de miles,

y los obreros fabriles.

Bravos mineros,

siguen vuestro camino


los compañeros.

Hay algunos sacerdotes

francamente progresistas;

apoyan las peticiones

de los mineros huelguistas,

francamente progresistas;

Santa María,

haz que empiece la huelga

en Andalucía.

Oh, Virgen Pura,

lleva la huelga al campo

de Extremadura.

Santa Patrona,

Haz que siga la huelga

de Barcelona.
JULIÁN GRIMAU

He conocido el crimen una mañana,

color tiene mi pena de sangre humana.

Sólo nubes y plomo

lo presenciaron.

Julián Grimau, hermano,

te asesinaron, te asesinaron.

Ya no nace en la tierra ni un pensamiento

que no lleve esta pena dentro del cuerpo.

Del dolor de mi pueblo

nace mi canto,

cuerdas de mi guitarra,

sois compañeras de nuestro llanto.

Malditos los que viven de la venganza

mientras mueren los pueblos por la esperanza.

Silencio de mi tierra,

qué amargo suenas,

las piedras del camino


hoy sangre llevan, hoy sangre llevan.

Nacerá el trigo joven entre besanas,

las razones de nuevo pisoteadas,

pero a pesar de todo

yo sé que un día

tú estarás con nosotros

como querías, como querías.

DICEN QUE LA PATRIA ES

Dicen que la patria es

un fusil y una bandera,

mi patria son mis hermanos

que están labrando la tierra.

Mi patria son mis hermanos

que están labrando la tierra

mientras aquí nos enseñan

cómo se mata en la guerra.


Ay, que yo no tiro, que no,

ay, que yo no tiro, que no,

ay, que yo no tiro contra mis hermanos.

Ay, que yo tiraba, que sí,

ay, que yo tiraba, que sí,

contra los que ahogan al pueblo en sus manos.

Nos preparan a la lucha

en contra de los obreros

mal rayo me parta a mí

si ataco a mis compañeros.

La guerra que tanto temen

no viene del extranjero;

son luchas de proletarios

como los bravos mineros.

Ay, que yo no tiro, que no,

ay, que yo no tiro, que no,

ay, que yo no tiro contra mis hermanos.

Ay, que yo tiraba, que sí,

ay, que yo tiraba, que sí,


contra los que ahogan al pueblo en sus manos.

Cuando muere un general

lo llevan sobre un armón,

al que se mata en la mina

lo entierra el mismo carbón.

Al que se mata en la mina

lo llevan dos compañeros,

dolor de carbón de piedra,

luto de bravos mineros.

Ay, que yo no tiro, que no,

ay, que yo no tiro, que no,

ay, que yo no tiro contra mis hermanos.

Ay, que yo tiraba, que sí,

ay, que yo tiraba, que sí,

contra los que ahogan al pueblo en sus manos.

Si mi hermano se levanta

estando yo en el cuartel

cojo el fusil y la manta


y me echo al monte con él.

Oficiales, oficiales,

tenéis mucha valentía

veremos si sois valientes

cuando llegue nuestro día.

Ay, que yo no tiro, que no,

ay, que yo no tiro, que no,

ay, que yo no tiro contra mis hermanos.

Ay, que yo tiraba, que sí,

ay, que yo tiraba, que sí,

contra los que ahogan a España en sus manos.

CAPITÁN GENERAL

Ganaron los nacionales,

perdimos los españoles;

ganaron los nacionales,


perdimos los españoles,

ganaron los capitales

la guerra contra los hombres,

perdimos los españoles.

la guerra contra los hombres,

perdimos los españoles.

Ay capitán general

de la tierra y el aire,

del aire y el mar.

Las cadenas son de hierro,

de madera el ataúd,

las cadenas son de hierro,

de madera el ataúd,

si la guerra trajo muerte

la paz trajo esclavitud,

si la guerra trajo muerte

la paz trajo esclavitud,

de madera el ataúd.
¡Ay!, capitán general

de la tierra y el aire,

del aire y el mar.

Obreros y campesinos,

fusiles contra el patrón;

obreros y campesinos,

fusiles contra el patrón;

es guerra contra nosotros

la paz de la explotación,

es guerra contra nosotros

la paz de la explotación,

fusiles contra el patrón.

Ay, capitán general

de la tierra y el aire,

del aire y el mar.


A LA HUELGA

A la huelga, compañeros

no vayáis a trabajar,

dejad quieta la herramienta

que es la hora de luchar.

A la huelga diez,

a la huelga cien,

a la huelga, madre,

yo voy también.

A la huelga cien,

a la huelga mil,

yo por ellos, madre,

y ellos por mí.

Desde el pozo y la besana,

desde el torno y el telar,

irán los hombres del pueblo,

a la huelga general
A la huelga diez,

a la huelga cien,

a la huelga, madre,

yo voy también.

A la huelga cien,

a la huelga mil,

yo por ellos, madre,

y ellos por mí.

Todos los pueblos del mundo

la mano nos van a dar

para devolver a España

su perdida libertad.

A la huelga diez,

a la huelga cien,

a la huelga, madre,

yo voy también.

A la huelga cien,

a la huelga mil,

yo por ellos, madre,


y ellos por mí.

FUEGO DE LOS ALTOS HORNOS

Fuego de los altos hornos

que estás fundiendo el metal,

con mis manos te alimento,

con ellas te he de apagar. (bis)

Franco no puede apagar

el fuego de los mineros,

metalúrgicos, uniros,

a la huelga, compañeros.

Fuego de los altos hornos

que estás fundiendo el metal,

mira cómo crece el fuego

de la huelga nacional.

Son como el hierro candente

los mineros asturianos,


que no me los toque nadie,

que se va a quemar las manos.

Fuego de los altos hornos

que estás fundiendo el metal,

los campesinos y obreros

forjarán la libertad.

Fuego de los altos hornos.

LOS MINISTROS ESPAÑOLES

[*Coplas del tiempo. Segunda parte. Crítica general (1963)]

Los ministros españoles

lo hacen todo del revés,

unos andan de cabeza

y otros piensan con los pies,

lo hacen todo del revés,


Romeo Gorría,

ha incrementado mucho

la plusvalía.

Alonso Vega,

parece una persona

bastante ciega.

Los estudiantes

dicen que el pobre Fraga

no es el de antes.

Son Valiño y Muñoz Grandes,

de los que no se reprimen,

forman con Martín Alonso

el sindicato del crimen.,

de los que no se reprimen.

García-Valiño,

jugaba con pistolas


desde muy niño.

Era muy raro,

que no se le escapara

ningún disparo.

Muy poca gente

piensa que Muñoz Grandes

sea inteligente.

Las opiniones,

dice Martín Alonso

que son traiciones.

No es muy frecuente,

hallar un argumento

tan contundente.

Es obsesivo,

saber que hay un ministro

tan impulsivo.
Hay criminales

que llevan las estrellas

de generales.

La policía,

Si oyera estas canciones

Se enfadaría.

SI LAS COSAS NO FUERAN...

Si las cosas no fueran

tan enojosas,

si quedara más tiempo

para otras cosas

que no fueran andarse

desesperando

y abominar del mundo

de cuando a cuando:
a tu vera, hermana mía,

cuántos ratos pasaría,

a tu vera, hermana mía,

cuántos ratos pasaría,

Si no exisiteran tantos

inconvenientes

y los recelos fueran

menos frecuentes,

si los que nos rodean

lo comprendieran

y en el fondo del alma

no se ofendieran:

a tu cuerpo y a tu cara

con qué gusto me arrimara,

a tu cuerpo y a tu cara

con qué gusto me arrimara,

a tu cuerpo y a tu cara

con qué gusto me arrimara.

Si pudieran curarse
ciertos humanos

del vicio de adueñarse

de sus paisanos,

si pudiera decirse

lo que se siente

en vez de andar hablando

veladamente,

en tus piernas y en tu pecho

qué pronto buscaba lecho,

en tus piernas y en tu pecho

qué pronto buscaba lecho,

en tus piernas y en tu pecho

qué pronto buscaba lecho.

Los que cosas tan simples

no las conciben

poco asimilan

de este mundo en que viven

y siguen en sus trece

año tras año

aún sabiendo en el fondo


que es un engaño:

por eso en vez de mirarte

miro siempre hacia otra parte,

por eso en vez de mirarte

miro siempre hacia otra parte,

por eso en vez de mirarte

miro siempre hacia otra parte,

por eso en vez de mirarte, morena

miro siempre hacia otra parte,

LA CANCIÓN DEL SOLDADO

(En colaboración con Jesús Munárriz)

Dos veces salí del pueblo,

ninguna de ellas en balde

a la mili, y a buscar

un cochino del alcalde.

El cochino del alcalde

no corría muy deprisa,

conque al cogerlo me dije:


"París bien vale una misa".

Sin embargo, en el servicio

tuve algún inconveniente,

aunque supe comportarme

de manera inteligente.

No soy alto, desde luego,

pero en la talla, conforme:

por un centímetro escaso

me dieron el uniforme.

El viaje no fue muy bueno

pues me equivoqué de tren

y en vez de ir a La Coruña

amanecí en Almadén.

Lo malo es que el equipaje

me lo habían facturado

y aún estará en Almadén,

porque no lo he recobrado.
Como llegué al campamento

el último de mi serie,

ya no les quedaban tiendas,

conque dormí a la intemperie.

El rancho no era tan malo

como se suele decir;

cuando nos daban garbanzos

yo intentaba repetir.

Menos mal que no fui tonto

y no hice muchas cocinas

porque también me apuntaba

para limpiar las letrinas.

En la instrucción, a los que

demostrábamos más arte,

nos hacían desfilar

en un pelotón aparte.
El pueblo del coronel

del mío no queda lejos:

él es de Matacartuchos

y yo de Correconejos.

Asi que fui a visitarle

para ver si me enchufaba;

desde entonces, las mejores

guardias me las reservaba.

Por fin me dan un permiso,

me acuerdo perfectamente,

pues me escriben que mi padre

está de cuerpo presente.

Si muere unos meses antes

hubiera sido una ayuda

porque no van a la mili

los que son hijos de viuda.

En el cuartel, apreciando
mi amor a los animales,

me pusieron a cuidar

a unos cuantos sementales.

Un día que me dormí

se escapó el más corpulento

con tan mala suerte que

le dio una coz a un sargento.

Para que no les liara

con algún otro destrozo,

la mili que me quedaba

la pasé en el calabozo.

Y aunque tuve que pasar

por algunos sacrificios,

también era una ventaja

no tener que hacer servicios.

Nunca tuve que gastarme

ni un duro en el peluquero
porque me salía gratis:

me lo cortaban al cero.

Pero al darme la licencia

se me aclaró el horizonte,

porque ya decía mi padre

que la cabra tira al monte.

No vuelvo a salir del pueblo

pese a su mucha pobreza;

yo ya no me busco más

quebraderos de cabeza.

CANCIÓN ADÚLTERA

—Aquí en tu cuarto y solos

ya no me aguanto,

—Por mi parte diría

casi otro tanto


—Pues quítate la falda,

blusa y sostén

y ven, que me aceleras

a más de cien. ¡Laaá!

—Bésame donde nunca

me besa el sol,

y muérdeme que pierda

todo control.

—Algo anchos son tus hombros,

pero derechos,

y bien suaves y llenos

estos dos pechos, ¡Laaá!

—El pecho que me tienes

ahora mordido

gana para mí el doble

de contenido.
—En mejor punto que éste

yo te mordiera,

mas no parece propio

la vez primera. ¡Laaá!

—No tienes mucha carne.

—Bien que lo siento.

—Mejor te quiero flaco

que corpulento

—Dale a la luz y cierra

la celosía.

—Deja que entren los rayos

del mediodía. ¡Laaá!

—Yo si me da el sol nunca

entro en acción.

—Pues es una tremenda

limitación.

—Limitación, si quieres,
pero de veras.

—Pues entonces me visto.

—Haz lo que quieras. ¡Laaá!

—Me parece imposible

que así no puedas.

—Lo lamento infinito,

aquí te quedas.

—Si es inhibición ésa

que no dominas,

igual cierro ventanas

como cortinas. ¡Laaá!

—Pues quítate la falda,

blusa y sostén

y ven, que me aceleras

a más de cien.

—Tienes morenos todos

tus elementos.
—Misterios endocrinos

de los pigmentos.

—Échate ahora de un lado,

según estamos,

que me ponga yo encima

y continuamos.

—Yo nunca me coloco

bajo mi esposa.

—Será porque la trates

como a una cosa. ¡Laaá!

—Pues espera un momento

a que me vista,

y móntate en tu esposo,

que es progresista.

—Yo cedí en el asunto

de la ventana.

—Pues ven y ponte como


te dé la gana, ¡Laaá!

Y añade un mandamiento

junto a los diez:

No aplicar los principios

con rigidez.

—Bésame donde nunca

me besa el sol

y muérdeme que pierda

todo control.

CUATRO ESQUINAS

(Música: Chicho. Letra en colaboración con Jesús Munárriz)

No tropieza el que no anda,

no yerra el que no responde,

no duda el que no pregunta

Por qué, cómo, cuándo y dónde.


Cuatro esquinas en el techo

y en el suelo cuatro más,

cuatro en las cuatro paredes,

anda y vuélvelo a contar,

anda y vuelve,

anda y vuélvelo a contar.

Lo que dices no lo sientes,

lo que sientes no lo nombras,

lo que nombras no lo entiendes,

sombras de sombras de sombras.

Cuatro palabras escritas,

no sé quien las escribió,

las cuatro dicen lo mismo:

nadie, nada, nunca y no,

nadie, nada,

nadie, nada, nunca y no.

Y no te engañes diciendo
a los otros tus verdades,

la verdad es como todo:

vanidad de vanidades.

Cuatro puertas tiene el campo

que a los cuatro puntos dan,

al que se le abre una puerta

se le cierran las demás

se le cierran,

se le cierran las demás.

Si nadie te ha consultado

para traerte a este mundo

no esperes explicaciones

en el último segundo.

Una cuna sin remedio

y una tumba sin por qué

y una vida por en medio,

nace, vive y muérete,

nace, vive,
nace, vive y muérete.

Unos hablan de la historia

y otros hablan del destino

y todos dicen que llaman

al pan pan, y al vino vino.

Y un buen día te das cuenta

de que todo se acabó.

lo que pudiste haber hecho

no lo harás ya nunca, no,

no lo harás ya,

no lo harás ya nunca, no.

EL SER

Dices que buscas, que buscas,

dices que buscas el ser,

cuando lo encuentres le dices


que yo estoy en contra de él.

Ni el propio San Antonio lo encontrará,

lo que no se ha perdido no se hallará,

¿qué será el ser?

Buscas el ser por lo alto,

tan alto que yo me temo

que el ser que tú andas buscando

debe ser el ser supremo.

Una vez que lo encuentres habláis los dos,

no os aclarareis mucho ni tú ni dios,

¿qué será el ser?

No preguntes por el hombre,

menos por la alienación,

que la pregunta pregunte

su propia interrogación.

Y ya que preguntamos, preguntaré

por qué no te preguntas este porqué:

¿qué será el ser?


Preguntar la realidad

sin intentar transformarla

eso es pasar por la vida

sin romperla ni mancharla.

Hay quien sigue caminos que son igual

que el del sol cuando pasa por el cristal,

¿qué será el ser?

¿Qué es el ser, qué es el ser, qué es el

ser qué es el ser, qué es el ser,

qué es el ser, qué es el ser, qué es el

ser, qué es el ser, qué es el ser?

¿Qué es el ser, qué es el ser, qué es el ser? El ser.

¿Qué es el ser, qué es el ser, qué es el ser? El ser,

Eso es el ser.
METALENGUAJE

No aguantan que diga

(que observe) que no

toleran, permiten

ni dejan hablar

de cómo fomentan,

procuran e intentan

que nunca se sepa,

que siempre se ignore,

que no se conozca,

comprenda y divulgue

(que quede secreto)

que quieren que no,

que no se mencione,

que no se registre,

que no se reseñe,

toleran, permiten

ni dejan hablar

de cómo fomentan,

procuran e intentan
que nunca se sepa,

que siempre se ignore,

que no se conozca,

comprenda y divulgue

(que quede secreto)

que quieren que no,

que no se mencione,

que no se registre,

que no se reseñe,

describa ni pinte

(y en cambio se calle,

silencie y oculte)

que impiden, condenan,

estorban y penan

contar, referir,

narrar, relatar,

soltar, concluir,

cantar, susurrar,

gritar, balbucir,

argüir y expresar

que está reprobado,


que está perseguido,

que está castigado,

vedado y prohibido

sacar a la luz

el hecho de que ellos

se enfadan e irritan,

disgustan y ofenden

si alguno destapa,

si alguno desvela

(si pone a la vista,

descubre o revela)

lo de esa censura

que ordena y exige,

prevé, reglamenta,

decreta, dispone

y manda que omitas,

soslayes y escondas

que nunca es legal

tratar el asunto

de que es un delito

charlar de que hay leyes


que obstruyen hacer

ningún comentario

acerca del tema,

materia y objeto

que vengo exponiendo.

CÁRCEL TENGO POR FUERA,

CÁRCEL POR DENTRO

Cárcel tengo por fuera,

cárcel por dentro,

voy vagando y vagando,

puerta no encuentro;

puerta no encuentro, ¡ay, no!,

puerta no encuentro,

el camino que busco

nace de adentro.

Tener no me importara
cárcel por fuera

si de la de aquí adentro

salir pudiera,

salir pudiera, ¡ay, sí!,

salir pudiera,

por un rayo de luz

mi vida diera.

Veo el campo a lo lejos

por la ventana,

tristeza y esperanza,

noche y mañana;

noche y mañana, ¡ay, sí!

noche y mañana,

tristeza omnipotente,

esperanza vana.

Allí crece la yerba

de primavera.

esperanza y tristeza,

(luz y quimera)
flor y tijera,

flor y tijera, ¡ay, sí!,

flor y tijera,

tristeza del que espera

y desespera.

Donde nacen las penas

no crece hierba,

crecen cardos y ortigas,

frontera negra,

frontera negra, ¡ay, sí!,

negra frontera,

por dentro mi dolor,

mi alma por fuera.

EL DÍA EN QUE YO ME MUERA

El día en que yo me muera,

que no me llore la gente,


que no me llore la gente

el día en que yo me muera,

yo ya me morí hace tiempo

sin que nadie lo supiera.

La muerte no me da miedo,

yo no vivo por vivir,

yo no vivo por vivir,

la muerte no me da miedo,

pero cuando pienso en ti

quiero matarme y no puedo.

Era una esperanza triste

la esperanza que perdí,

la esperanza que perdí

era una esperanza triste,

vuelve a mí con tu tristeza,

esperanza que te fuiste.

Hoy no vivo de verdad,

ayer vivía en la vida,


ayer vivía en la vida,

hoy no vivo de verdad,

mañana seré un recuerdo,

luego ni recuerdo ya.

LA INSTANCIA

Ilustrísimo señor:

Fulano de Tal y Tal,

recluso en esta prisión

por propaganda ilegal,

acogiéndose a un derecho

que el reglamento dispone,

con el debido respeto

a Uve punto I punto expone:

Que a ser posible en el pan

dejen de poner bromuro,

pues aun con buena intención


no nos saca del apuro.

Que cuanto antes sea posible

se acondicionen las canchas

para que los detenidos

puedan jugar a sus anchas.

ítem más, que se supriman

las prácticas restrictivas

que injustamente prohiben

las protestas colectivas.

Y siguiendo con la serie

de las súplicas legales,

que no se obligue al recluso

a ir a lecturas morales.

Que a algunos que están casados

les dejen por unas horas

en contadas ocasiones

cohabitar con sus señoras.


Que además de tomar duchas

nos permitan tomar baños.

Esto es justicia que pido,

Dios guarde a usted muchos años.

FANDANGOS PRO-CHINOS

¡Los chinos,

qué bien lo dicen los chinos:

coger todos el fusil,

obreros y campesinos,

no pase como en Brasil

y ganen los asesinos!

¡Conciencia,

ay mare, cuánta conciencia

hace falta para ver

que el marxismo es pura ciencia

y no verdades de fe
ajenas a la experiencia!

Lenín,

Vladimír Ilich Lenín

era un hombre extraordinario

que dijo que un proletario

debe luchar hasta el fin

pa' ser revolucionario.

Fusil,

con balitas de fusil

repartiremos la tierra

y a los del 1 de abril

les vamos a hacer la guerra,

¡fuera la Guardia Civil!

Carrillo,

¿adonde vas tú, Carrillo,

con tu reconciliación?

Ponte con hoz y martillo

a hacer la revolución
no sólo contra el Caudillo.

Campillo,

¿adonde vas tú, Campillo,

con esa organización?

Mira que no es tan sencillo

hacer la revolución

sólo con hoz y martillo.

EL "REVI" *

Era una mierda de "revi",

era un "revi" de la mierda

el que vino a prospectarme

cuando yo estaba en mi celda.

Entelequias sus razones,

engañosos sus conceptos,

veladas contradicciones

en todos sus argumentos.


---

* (Compuesta en la cárcel de Carabanchel con la música de "El pajarraco" de


Muuárriz, sólo se conserva la primera estrofa de esta canción satírica contra los del
PCE, llamados "revisionistas" - "revis"- por los pro-chinos.)

LIBERA NOS DOMINE

De los hijos predilectos»

de inspectores y prefectos,

de ministro, de fiscal,

de alférez provisional,

Libera nos domine.

Del poder atrincherado,

del amor como pecado,

de la vida dependiente,

del aval de la corriente,

Libera nos domine,

De la guerra sanguinaria,
de la paz publicitaria,

de las leyes especiales

y también de las normales,

Libera nos domine.

Libera nos, libera nos,

libera nos domine.

YO NO

Yo no

tengo

carnet de identidad

ni figuro en el registro

civil (3 veces).

Yo no

gasto

reloj despertador
ni me rijo por el tiempo

real.

Yo no

acepto

poder de juez ni rey

ni miro nunca el aspecto

legal.

Yo no

siento

la fe del del mal ni el bien

ni me atengo a ningún canon

moral

Yo no

uso

bozal, rienda o dogal

ni aguanto fácil la espuela

dorsal.
Yo no

sigo

jamás la voz social

ni mi vida es una vida

normal.

HOY NO ME LEVANTO YO

Una cosa hay bien segura:

hoy no me levanto yo;

tengo sábanas y mantas,

buena almohada y buen colchón,

tengo tabaco y cerillas

y buena imaginación,

y aquí en la cama he llegado

a la clara conclusión

de que, pase lo que pase

hoy no me levanto yo.


Cerca ya de mediodía

entran en mi habitación

mi mujer y mi cuñada

y mi hija la mayor

y mi suegra con su hermana

que está aquí ahora de pensión

y confirma mi designio

constatar su irritación

cada vez que les repito

que hoy no me levanto yo.

Hablando todas a un tiempo

reclaman una razón,

—No siento molestia alguna

ni tampoco desazón,

no me ha despertado el niño,

he dormido de un tirón,

digerí bien la fabada,

pesadillas, no, señor,

pero aquí estoy en la gloría


y hoy no me levanto yo.

Mi mujer me amonestaba

con paciencia y con amor,

mi suegra más duramente,

mi hija desapareció

y me trajo un té con leche

y unas lonchas de jamón;

yo me tomé el té con leche,

me arrellané y dije: no,

dejarme por imposible,

que hoy no me levanto yo.

Por fin les dije: aunque vengan

gobierno y oposición,

la televisión y prensa

y el cabildo en procesión,

policías y alguaciles

que mande gobernación

y los propios comunistas

me envíen su excomunión,
aunque vengan dios y el diablo

hoy no me levanto yo.

Hoy se nace con el sino

de actuar por actuar,

la gente anda arrebatada

y no se para a pensar

que hay veces que el levantarse

se lo puede uno saltar

y aunque a nadie le hagas falta

allí te vienen a hurgar,

pues por mí que canten misa,

no me pienso levantar,

POR EL CAMINO VIENE

Por el camino viene

viene el amor,

más bien pasando frío


que no calor.

Por el camino viene

la realidad;

cierra la puerta, hermano,

que va a pasar.

Las llaves de tu casa

las tienes en la mano,

cierra la pueerta, hermano.

Por el camino viene

la libertad,

un soldado delante

y otro detrás.

Por el camino viene

la convicción

cargada de razones

y de razón.

La verás en tu casa

Por todos los rincones


Cargada de razones.

Caminito adelante

va la justicia,

toga de terciopelo,

conciencia limpia.

Por el camino viene

el Ser supremo,

aunque sé que no existe,

algo le temo.

Caminito adelante

viene la muerte;

abre la puerta, hermano,

que viene a verte.

Abre, hermano, a la muerte

abre y dale la mano;

abre la puerta, hermano.


ODAS A GONZALO TORRENTE BALLESTER*

Cuando yo le canto a un hombre

sé muy bien por qué le canto,

las coplas de ciego son

para el valiente y el santo,

sé muy bien por qué le canto.

La copla corre

y lo que lleva dentro

que no se borre.

Le oprimió la prensa mucho

pero él dijo: no me rajo;

hombre que vienes de Arriba,

qué tal estás aquí abajo,

pero él dijo: no me rajo.

La copla corre

y lo que lleva dentro

que no se borre.
Desde luego, no me extraña

el que te suceda esto;

crítico que bien critica

suele resultar molesto

el que te suceda esto.

La copla corre

y lo que lleva dentro

que no se borre.

Sobre todo no te aflijas,

ya verás por qué lo digo,

reyes hay que estando en jaque

le dan mate al enemigo,

ya verás por qué lo digo.

La copla corre

y lo que lleva dentro

que no se borre.
Ya con ésta me despido

con doscientos de a caballo

que asunto tan manifiesto

es mejor no meneallo,

con doscientos de a caballo.

La copla corre

y lo que lleva dentoro

que no se borre.

---

* (Al ser expulsado como crítico teatral del diario Arriba por haber firmado
una carta de protesta contra el trato dado por la policía a los mineros asturianos
huelguistas y a sus mujeres.)
CANCIONES DE LA ÉPOCA

DE LA DEMOCRACIA

COPLAS RETRÓGRADAS

La lengua suelta,

la lengua suelta,

de la niñez me queda

la lengua suelta

y me explico al momento

cuando me dejan.

Y cuando no,

me lo aprendo y lo canto

de viva voz.

Dicen que son mis coplas

del diecinueve

porque digo que es blanca


la blanca nieve;

yo no me enfado,

que mi siglo parece

que no ha empezado.

De forma golfa,

de forma golfa,

reconozco que canto

de forma golfa,

pero yo a los tiranos

los pongo en solfa.

Fuera el abuso,

fuera los abusones

y quien los puso.

Dicen que son mis coplas

del dieciocho

porque yo a lo podrido

lo llamo pocho.

Ay Pero Grullo,

si tuvieran las cortes


consejo tuyo.

Que ella me ampara,

que ella me ampara,

la constitución dice

que ella me ampara

y que acate las leyes

de forma clara.

No lo prometo,

que luego se descuelgan

con un decreto.

Dicen que son mis coplas

del diecisiete

porque ataco a los miembros

del gabinete.

Son tan modernos

que provocan la envidia

de otros gobiernos.

No les importa,
no les importa,

aunque a muchos la guerra

no les importa

se ponen como fieras

cuando una aborta.

Van por las crías

para hacerlas soldados

y policías.

Dicen que son mis coplas

del dieciséis

porque digo los fechos

que vos facéis,

vuesos entuertos

por doquiera nos facen

presos e muertos.

Perder la cara,

perder la cara,

cuando el macho no quiere

perder la cara
no se asoma al abismo

que nos separa,

y esa locura

es un fallo mu grande

pa la cultura.

PANFLETO VERDE

Eh, oh, sí, ah,

lo verde reverdecerá.

Yo no sé la gente qué paciencia tiene,

qué paciencia tiene,

parece que no sabe lo que le conviene,

lo que le conviene.

Ve venir las cosas pero luego se entretiene,

luego se entretiene,

el tren a todo trapo y nadie que lo frene,

nadie que lo frene,


Eh, oh, luz del alba,

si no se para no se salva,

eh, oh, verde prado

y lleva sello del estado.

Árbol de la ciencia, ilumínalos,

Ilumínalos,

rebuznan por la tele y parece que habla dios,

parece que habla dios.

Hay quienes te hablan jugando a mala fe,

jugando a mala fe,

otros como al ciego que ni sabe que no ve,

ni sabe que no ve.

Eh, oh, sí, mira,

se va a acabar con la mentira,

eh, oh, luz de sol,

que no se tiren el farol.

No voy contra nadie, miren lo que digo,

miren lo que digo,


yo es en las ideas donde tengo a mi enemigo,

tengo yo a mi enemigo,

cojo al capital y lo insulto y lo maldigo,

le pego y le castigo,

que a mi me amarga el pan y a ti te roba el trigo

a ti te roba el trigo.

Eh, oh, verde oliva,

mar abierto y tierra viva,

eh, oh, sí, bueno,

se va a acabar con el veneno.

Miren la soberbia del oro y el poder,

el oro y el poder,

que va comprando tanques y los riega por doquier,

los riega por doquier.

Niego la creencia de que haya que creer,

que haya que creer

jurar contra conciencia, luchar y acometer,

callar y obedecer.
Eh, oh, verde mar,

que no haya quinta militar

eh, oh, agua pura,

se va a acabar con la tortura

eh, oh, sí, ah,

lo verde reverdecerá.

MALDITA MILI

No hay bien que por mal no venga

ni principio sin final,

ni principio sin final ni filósofo sin pena,

flor de rosal, mal rayo parla al general.

Militares, policías y también guardia civil,

y también guardia civil,

funcionarios de prisiones,

flor de clavel, mal rayo parta al coronel.


Estoy en mi campamento preparándome a matar

preparándome a matar,

preparándome a morir,

flor de azafrán mal rayo parta al capitán.

Oye tú mi hermano chico, cuando llegues a mayor,

cuando llegues a mayor

no te vistas de soldado,

flor sin color, mal rayo parta al ganador.

No te cojan preparado si te toca pelear,

si te toca pelear

y cambiar vida por vida,

flor de azafrán, mal rayo parta al militar.

PERO AL CUARTO NO

Pero al cuarto no,

pero al cuarto no:

el segundo acalló al primero, amarró al tercero y al cuarto no.


Pero al cuarto no,

pero al cuarto no:

el segundo acalló al primero, amarró al tercero y al cuarto no.

Yo iba mirando la Enciclopedia y hallé una regla que no está mal:

separar el Legislativo, el Ejecutivo y el Judicial

y pe asaba yo,

y pensaba yo

que en mi tierra de alguna forma la antigua norma se quebrantó

y el segundo acalló al primero, amarró al tercero y al cuarto no.

Pero al cuarto no,

pero al cuarto no:

el segundo acalló al primero, amarró al tercero y al cuarto no.

No me parece que vayan hacia la democracia que yo soñé:

sólo siento mucho recelo, poco consuelo, ninguna fe

porque digo yo,

porque digo yo

que al fundirse los tres en uno quizá ninguno sobrevivió

y el segundo acalló al primero, amarró al tercero y al cuarto no.


Pero al cuarto no,

pero al cuarto no:

el segundo acalló al primero, amarró al tercero y al cuarto no.

Por eso busco por los diarios y por las radios mi libertad

con cuidado de que en la tele no se me cuele la autoridad.

porque ya se vio,

porque ya se vio

que a despecho de tanta euforia la vieja historia se repitió

y el segundo acalló al primero, amarró al tercero y al cuarto no.

Pero al cuarto no,

pero al cuarto no:

el segundo acalló al primero, amarró al tercero y al cuarto no.

Pero al cuarto no,

pero al cuarto no:

el segundo acalló al primero, amarró al tercero y al cuarto no.


A LA VECINA

(con música de Amancio Prada)

A través de la pared

oigo tu parte peor,

y aun ésa le da calor

a este corazón sin fe.

Oigo tu parte peor

y tu voz me gusta tanto

que me suena como un canto,

aunque grites de furor.

Converso con tu señor

y siento que es como yo,

en parte por eso no

le doy alas al amor.

No encuentro nada de malo

en soltar lo que uno siente,

pero la gente es ardiente

y enseguida coge el palo.


Si se lo cuentas a él

se va a enterar también ella

y se armará una querella

por un trozo de papel.

"Este me tira los tejos

sólo porque vivo aquí..."

No es cierto, pensaba en ti

también cuando estaba lejos.

Y no me voy a morir

por no poderte abrazar,

pero tener que callar

no lo podía sufrir.

Por mí no tendrás problema,

desconocida paloma,

tómatelo todo a broma

y arroja al fuego el poema.

Soy un viejo prematuro,


sin dientes y sin cabello,

pero me queda un destello

de niño sencillo y puro.

Jamás te molestaré,

me conformo con tu cara

y tu voz cálida y clara

a través de la pared,

LA LEY

Reconozco que vivo con miedo,

la muerte me asusta, la vida también;

de los prójimos temo el desprecio,

la risa, el vacío, la falta de fe;

no la fe en un dios poderoso

ni en el hombre mismo ni en ninguna ley,

sino sólo el valor de jugar a este juego de azar

que no dice nada del bien y del mal;


pues en caso contrario es mejor

ignorar el dolor y el terror

y engañarse uno mismo

pensando que el mundo...

Quién

quitará eso

que no me deja dejar de ser,

quién quitará eso

que me hace hablar en lugar de ver.

Hace tiempo que yo no soy yo,

hace tiempo que sólo deseo,

que sólo deseo y no sé si sé,

si debo querer, si quiero saber.

Quién

quitara eso

que acosa al súbdito y derriba al rey,

quién quitará eso

que no me deja ignorar la ley.


Señor juez, no le quiero faltar,

pero a mi ya no hay rito ni símbolo,

rito ni símbolo,

que me haga creer

que la ley es la ley.

La ley, la ley

y mira lo que dice el juez,

la ley, la ley

y da con el martillo el juez,

la ley, la ley

y mueve la peluca el juez,

la ley, la ley

ley, la ley, la ley,

la ley, la ley,

agarra la balanza, juez

la ley, la ley,

remángate la toga, juez,

la ley, la ley,

y sácate la venda, juez,


la ley, la ley,

ley, la ley, la ley,

la ley, la ley,

perezoso juez

la ley, la ley

y cómo se dobla el juez,

la ley, la ley,

y no quiere gosar mi juez,

la ley, la ley,

ley, la ley, la ley.

Quién

quitará eso

que acusa al reo y condena al juez,

quién quitará eso

que filtra el agua y se bebe al pez.

No miréis si he cantado verdad,

la verdad vale menos que el aire

que cuesta decirla.


Quién

quitara eso

que acusa al reo y condena al juez,

quién quitará eso

que filtra el agua y se bebe al pez.

No miréis si he cantado verdad,

la verdad vale menos que el aire

que cuesta decirla.

Quién

quitará eso

que no me deja pasar de aquí,

quién quitará eso

que no me deja salir de mí,

que no me deja salir de mí,


CONTRA LA PENA DE MUERTE

Cazadores de ciudad

que nunca os veis satisfechos,

no me matéis en la jaula

profunda donde estoy preso.

Matarme en un sitio claro

de las montañas de Gredos,

un sitio que corra el aire

y la vista llegue lejos.

Que lleven allí el garrote,

la silla y los aparejos,

que venga el juez con su coche

a hacer el levantamiento.

Que dejen a los paisanos

que suban desde los pueblos,

que vean matar a un hombre

que lo tienen ya sujeto.


Que me sienten en la silla,

que me amarren con los cueros

mirando para Madrid,

aunque yo no pueda verlo.

Maldito seas, Madrid,

tu corte y tu parlamento,

malditas sean tus leyes

y los que las hayan hecho.

Cazadores de ciudad.

COPLAS DE UN CANTANTE POPULAR

Compañeros de este pueblo

que sos ponéis a votar

y escuchar las tristes coplas


de un cantante popular,

no votéis a los que fueron

alcaldes anteriormente;

cómo va a cambiar el agua

si no se cambia la fuente.

No votéis al orgulloso

ni a los que tengan dinero,

votad al que favorezca

al peón y al jornalero.

No votéis por los discursos

ni las palabras bonitas,

votar al que haga justicia

y al que más lo necesita.

Ya están cerrando las urnas

sin darme tiempo a pensar;

iba a echar mi voto en blanco

y ahora no voy a votar.


NO LES DOY MI VOTO

Ya

¡cualquiera desentraña la verdad!

El saco está cerrado y bien atado

como en el pasado,

como en el pasado,

como en el pasado.

Mira,

se valen del secreto y la mentira,

lo tienen todo sucio y todo roto,

no les doy mi voto,

no les doy mi voto,

no les doy mi voto.

No,

el tiempo del gobierno se acabó,

se palpa por la calle y en la prensa:

ucedé no piensa,

ucedé no piensa,
ucedé no piensa.

OTAN NO, NO PASARAN

Si con Estados Unidos

dejamos de ser neutrales,

hoy, para colmo de males,

nos quisieran ver metidos

en un bloque que vive para la guerra

y te la mete por tierra,

por el aire y por el mar.

Por eso digo yo:

OTAN no, no pasarán

OTAN no, ya lo verán

OTAN no, no pasarán

OTAN no, ya lo verán.

Señor Gutiérrez Mellado,


si sigue siendo valiente,

a ver si puede hacer frente

a este tío desgraciado

que nos mete, pero ya,

en la OTAN, en la NATO,

cometiendo un insensato

abuso de autoridad.

Por eso digo yo:

OTAN no, no pasarán,

OTAN no, ya lo verán,

OTAN no, no pasarán,

OTAN no, ya lo verán.

El jefe del gabinete,

tan orgulloso y severo,

ojalá caiga el primero

si nos mandan un cohete.

Qué lástima de ocasión

para un tiro a quemarropa

o un venenito en la copa
que le corte la intención.

Por eso digo yo:

OTAN no, no pasarán,

OTAN no, ya lo verán,

OTAN no, no pasarán,

OTAN no, ya lo verán,

ALGO ME DICE QUE NADA

Algo me dice que nada,

algo me dice que nada.

Ayer me decía el presidente,

algo me dice que nada,

lo libres que vamos a estar,

algo me dice que nada,

pero aunque lo dijo seriamente,

algo me dice que nada


no sé qué pensar.

Algo me dice que no,

siempre que no.

¿Qué haces, Barrionuevo?

¿Procuran tus hombres la paz

o no habéis cambiado

más que de disfraz?

Látigo, plomo y poder

vuelve al ayer.

¿Qué pasará ahora?

¿Podrá la razón renacer

o está satisfecha

con languidecer?

—Es el progreso, señor.

—No, por favor.

Quizás en el fondo tenga fondo,

se sufra al final por un fin

o pueda buscarse algún "principio"


a este mundo ruin.

—No tiene usted mucha fe.

—¿Yo? ¿Para qué?

ANÓNIMO GRATUITO

En interés de todos,

en interés de todos quisiera yo que te salga del alma,

que te salga del alma decir que no, pero afuera y afuera,

pero afuera y afuera y afuera voy, ya no quiero más armas,

ya no quiero más armas en donde estoy,

en donde estoy, en donde estoy:

OTAN no,

bases fuera.

Si el temor que levantas,

si el temor que levantas fuera dinero, no quedaba en el mundo,

no quedaba en el mundo ni un pordiosero, y afuera y afuera,


pero afuera y afuera y afuera iré, que no quiero ni sombra,

que no quiero ni sombra de mala fe,

de mala fe, de mala fe.

OTAN no,

bases fuera.

Para entrar en la OTAN,

para entrar en la OTAN es necesario un cobarde y un ciego,

un cobarde y un ciego y un mercenario, y afuera y afuera,

pero afuera y afuera y afuera iré, yo no quiero misiles,

yo no quiero misiles ni los querré,

ni los querré, ni los querré.

OTAN no,

bases fuera.

General que te llamas,

general que te llamas siendo negrero que le vendes soldados,

que le vendes soldados al extranjero, y afuera y afuera,

pero afuera y afuera y afuera iré, que se vayan los yanquis,

que se vayan los yanquis lejos de aquí,

lejos de aquí, lejos de aquí.


OTAN no,

bases fuera.

Pa' salir de la OTAN,

Pa' salir de la OTAN se necesita un caldero de agua,

un caldero de agua clara y fresquita, y afuera y afuera,

pero afuera y afuera y afuera van, que no quieren a Reagan,

que no quieren a Reagan de capitán,

de capitán, de capitán.

OTAN no,

bases fuera.

PRECISAMENTE AHORA

Precisamente ahora

que tienes todo el patio revuelto,

precisamente ahora

que tu caballo anda medio suelto,


precisamente ahora,

cuando tu crédito ya venció,

levanto la mano y te digo que no.

Por favor, que

Felipe,

Felipe,

Felipe nos engañó;

que te digo que

Felipe,

Felipe,

Felipe nos arruinó.

Y merece que la gente

le grite ya

que rinda cuentas

con claridad:

que deje el puesto,

que vaya al juez,

que dé la cara

por una vez.


Me refiero a

Felipe,

Felipe,

Felipe nos engañó;

la ambición de

Felipe,

Felipe,

Felipe nos arruinó.

Precisamente ahora

que no controlas la Economía,

precisamente ahora

que te malmueves en el día a día,

precisamente ahora,

cuando tu orgullo te desbordó,

agarro mi voto y te digo que no.

Por culpa de

Felipe,

Felipe,
Felipe se transformó;

pero mira que

Felipe,

Felipe,

Felipe se trastornó.

Que le quiten los trastos

de gobernar,

y que abran las ventanas

de par en par,

porque siempre se pringa

con lo peor:

Filesa, Malesa

y Time-Export.

El bribón de

Felipe,

Felipe,

Felipe nos arregló;

le aseguro que

Felipe,
Felipe,

Felipe se estropeó;

la verdad que

Felipe,

Felipe,

Felipe se enloqueció;

y el cuento de

Felipe,

Felipe,

Felipe se terminó.

LA HORA DIGNA

Me revuelve la memoria

y me priva del sentido

recordar la triste historia

de un gobierno corrompido.
En la Sala del Supremo

se barrunta la condena

y discuten los fiscales

de delitos y de penas:

Se presenta Narcís Serra

y Benegas llega luego

y después de mucho rato

comparece Barrionuevo.

y le manda el magistrado

a su guardia permanente:

«Que se lleven al ministro

y que suba el Presidente».

A la entrada de González

el jurado se estremece

porque viene sudoroso

con esposas y grilletes.


Y al oír a su abogado

que «presunto» le llamaba

se levanta del banquillo

y se agarra a la baranda:

«Ni presunto ni culpable,

ni convicto ni confeso,

que me quiten las cadenas

que yo no puedo estar preso.

El Partido Socialista

respaldó mi autoridad

y les hice juramento

de salir con dignidad.

Que me bajen a la celda

y me den una pistola;

que levanten mi cadáver

a la vuelta de una hora.

Que dispersen mis cenizas


por los puntos cardinales

y se olvide para siempre

que hubo un Felipe González».

MEDIAS VERDADES

De medias verdades

te quejas tú,

Felí Gonzá,

polí-corrú-.

Felí Gonzá-

Filé, Paló,

el Bán de Espá,

que Flí, que Fló.

Felí Gonzá, polí-corrú, Filé, Paló;

que Sarasó, que Palomí, que Galeó.

Te dan cuartel
Pujol y Arzá-

(Tibí Culléll,

tragaperrá).

Que tú, que yo,

que no, qué va,

que Fli, que Flo,

que bla, que bla.

Que tragapé, que De la Ró, que Tibidá;

que la corrú de la mordí del pelotá.

Despá Juan Gué

abrió fraudú:

Sevilla enté

de más lo sú.

Dijiste tú

"por uno dos":

mentira pú,

que venga Dios.

Que la corrú del pelotá de la mordí;

que la locú desesperá del nuevo rí.


El Ave fue

negocio sú:

Aidá chalé

montó de lú.

Marí Barbé

fisgó local:

tapó Galé

lo más vital.

Que Galeó, que Salanué, que Mari Rú;

que el pelotá de la mordí de la corrú.

Narciso Sé

Roldán nombró:

fondó resé

Roldán chupó.

Por culpa tú:

Roldán salió

la carta sú

sunción rompió.
Que el pelota de la corrú de la mordí;

que Sarasó, que Salanué, que Palomí.

Paló taller

CAÉ compró:

Moncló bunkér

así ganó.

Señá del tren

FEVÉ cedió:

informe bien

que se saltó.

Que si Palo, que si FEVÉ, que sí Dragá;

que la mordí de la corrú del pelotá.


OH, GONZÁLEZ, FELIPE GONZÁLEZ

Oh, González, Felipe González,

comediante y contorsionista,

maquiavélico y oportunista,

ya no sé cuántos crímenes van.

Tú pusiste a España en la OTAN

y la mano en el fuego por Rubio,

protegiste a los GAL del diluvio

y dejaste medrar a Roldán.

¿Es verdad o no,

es verdad o no,

es verdad, es mentira, es verdad, o no

que, robar, se robó,

que, matar, se mató

y Felipe se desentendió?

¿No recuerdas cuando ibas de progre,

proletario y descamisado,
levantabas el puño cerrado

y cantabas La Internacional?

Presidente, yo sólo espero

que, por muchas intrigas que fragües,

se te traguen aquellos desagües

que tú mismo brindaste a los GAL.

¿Es verdad o no,

es verdad o no,

es verdad, es mentira, es verdad, o no

que, robar, se robó,

que, matar, se mató

y Felipe se desentendió?

No soportas la voz de la Prensa

ni la crítica del Parlamento

aunque sigas gritándole al viento

que la equis fatal no eres tú.

El esfuerzo que has hecho es enorme


pero no has convencido a la gente

conque lárgate por consiguiente

despidiéndote sin acritud.

¿Es verdad o no,

es verdad o no,

es verdad, es mentira, es verdad, o no,

que, robar, se robó,

que, matar, se mató

y Felipe se desentendió?

AY LIBERTAD

Amigo Luis Llorente que fuiste preso ayer,

escúchame Felipe, Santiago, entérate,

bajar de esos escaños forrados de papel,

que Agustín Rueda Sierra murió en Carabanchel.


Ay libertad,

qué libertad

si cuatro de uniforme te empiezan a pegar,

ay libertad,

qué libertad,

tendida está en el suelo y no contesta ya.

Bonita democracia de porra y de penal,

con leyes en la mano te pueden liquidar

y a aquél que no lo alcanza de muerte un tribunal

lo cogen entre cuatro y a palos se la dan.

Ay libertad,

qué libertad,

lo sacan de la cárcel para ir al hospital,

ay libertad,

que libertad,

Agustín por buscarla mirarlo dónde está.


EL CORNETA REBELDE

Toca, corneta, la muerte infamante

del gran comediante señor Pinochet:

que hasta en los sótanos de los cuarteles

se escupe su nombre, señor Pinochet;

señor Pinochet, señor Pinochet, señor Pinochet.

No seguirá la soberbia impostura

de su dictadura, señor Pinochet,

ni le valdrán los Estados Unidos

el último día, señor Pinochet;

señor Pinochet, señor Pinochet, señor Pinochet.

No vestirá su brillante uniforme,

parásito enorme, señor Pinochet,

ni encontrará un agujero tan negro

que quiera salvarlo, señor Pinochet;

señor Pinochet, señor Pinochet, señor Pinochet.

Toca, corneta, la muerte inminente


del gran indecente señor Pinochet:

y que lo entierre con todo su peso

su propia muralla, señor Pinochet;

señor Pinochet, señor Pinochel, señor Pinochet.

CADA VEZ QUE TE MIRAN

Cada vez que le miran

dos comandantes

te arrepientes de cosas

de las de antes.

Cada vez que te miran

dos coroneles

se te salen los trenes

de los rieles.

Cada vez que te miran


dos generales

se te van las ideas

fundamentales.

Ay Felipe González,

flor de una hora,

quién te ha visto en tu día,

quién te ve ahora.

A Bruselas ha ido

Narciso Serra

en calesa de gala

pidiendo guerra.

A Bruselas han ido

Felipe y Guerra

pa' ponernos a todos

rodilla en tierra.

Donde dices que Diego

yo digo digo
y te digo que Reagan

no es buen amigo.

Donde dices que digo

yo digo Diego,

tú me pides el voto

yo te lo niego.

No me cambies la seda

por el percal,

que ha pasado la fuista

del Carnaval.

Para qué tanto aire

de gran potencia;

si tuviera una poca

de independencia.

En el nombre de Troya

quisiera yo

que se lleve el caballo


quien lo metió.

No me gusta la bronca

ni la pelea,

pero tú no me oyes

maldita sea.

En mi casa me dicen

el inocente

por oír las promesas

del presidente.

ROCK DE BELLOCH

Hay un ciudadano que se llama Belloch

y es protagonista de mi ultimo rock;

le vi con su paraguas amparando al boss

(un desaprensivo al que llaman 'Dios')

y yo me dije:
"Qué maquinarán esos dos".

Era Juan Alberto magistrado ejemplar

y en cosa de minutos empezó a cambiar;

coge el Ministerio de Justicia e Interior

(cosa que a un demócrata le da pavor)

y yo me dije:

"Mira cómo muda de color".

Belloch,

Belloch,

Belloch,

Belloch:

si tú no fueras doble

yo me guardaría mi rock.

Cuando lo de Laos y lo de Roldan

cuánto presumía de su lúcido plan;

ver cómo se echaba la pelambre hacia atrás

era para todos un auténtico flash

y yo me dije:
"Otro esquizofrénico más".

Fue desesperante que pudiera seguir

siendo como era tan proclive a mentir,

luego Su Excelencia pretendió zanjar

lo de las escuchas ante un juez militar

y yo me dije:

"Vaya con el juego de azar".

Belloch,

Belloch,

Belloch,

Belloch:

si tú no fueras doble

no te chuparías mi rock.
A LA DIPUTACIÓN DE SEVILLA

Diputación de Sevilla,

mayo del ochenta y tres,

si el primero no era bueno,

fue peor el de después.

El uno se llama Valle

y el otro se llama Pino,

pero yo siempre les llamo

al pan pan y al vino vino.

Era Valle presidente

y era Pino el aspirante,

un presidente saliente

y otro presidente entrante.

El presidente del Valle

ya por el mes de febrero

nos pidió cantar aquí

en el Álvarez Quintero.
La fiesta ya preparada

y anunciada en ABC

coge Pino y la suspende

sin explicarnos por qué.

Ni se lo ha explicado a nadie

ni jamás lo explicará

porque sólo pretendía

demostrar su autoridad.

Autoridad demostrada

y razón escarnecida,

libertad escarmentada

y soberbia enaltecida.

La luna en cuarto creciente

y la justicia menguante,

por fiarme del saliente,

tropecé con el entrante.


Del Valle no dice nada

por no perder a un amigo;

ojalá y no se arrepienta,

con el alma se lo digo.

AL AYUNTAMIENTO DE CÁDIZ

Permítame usted que hable:

yo he venido aquí a cobrar;

si lo piensan demorar

¿quién se va a hacer responsable?

¿eh?

No tienen al señor Gelos

y así mi fortuna mengua,

pero lo que es en la lengua

yo tampoco tengo pelos

¿eh?

Ni en la lengua ni en la pluma,
porque estoy hasta los huevos

de estos políticos nuevos

que el viejo estado rezuma

¿eh?

Entre estas blancas paredes

hay mucha negra rutina;

el tiempo que se avecina

no es el de vuesas mercedes

¿eh?

He perdido varios días

de un tiempo que no es de oro

pero pasado lo añoro

igual que sus señorías

¿eh?

Si no me pagan les juro

que esto y más se irá imprimiendo

a ver si lo voy vendiendo

y saliendo del apuro


¿eh?

Que el propio señor alcalde

deje claro cuanto antes

que el tiempo de los cantantes

no se gaste más en balde

¿eh?

LA HUELGA DE SINTEL

Canta, garganta,

si eres cabal:

o me dan lo que me deben

o la huelga sigue igual.

Canta, garganta,

si eres cabal:

o me dan lo que me deben


o la huelga sigue igual.

No te cierres en tu concha,

compañera, compañero:

los mangantes andan sueltos

y machacan al obrero.

Telefónica se fía

del valor del capital

pero no ha tenido en cuenta

el valor del personal.

Mucha promesa,

poco jornal:

o me dan lo que me deben

o la huelga sigue igual.

Esta es la huelga

y es natural:

o me dan lo que me deben

o la huelga sigue igual.


Presidente, presidente,

que presumes de sincero,

¿cómo quieres que me calle

si me roban el dinero?

Los ministros del Gobierno,

contemplando al capital

se olvidaron de la fuerza

del obrero del metal.

Ahí va un aviso,

y es oficial:

o me dan lo que me deben

o la huelga sigue igual.

Cesar Alierta,

¡vaya informal!:

o me dan lo que me deben

o la huelga sigue igual.


La Castellana

no va normal:

o me dan lo que me deben

o la huelga sigue igual.

Viva la Sintel

hasta el final:

o me dan lo que me deben

o la huelga sigue igual,

o me dan lo que me deben

o la huelga sigue igual.

MIEDO, ELLOS

Veo por la Prensa

que la soga está muy tensa

por el caso de Manglano y del Cesid:

cintas con escuchas

a Juan Carlos y otras muchas


consentidas y ocultadas por Madrid,

¿y para qué?

Siento un hormigueo

por el alma, porque creo

que a menudo digo cosas sin pensar;

suena el aparato

y me quedo largo rato

sin moverme ni atreverme a descolgar,

pero, ¿por qué?

¿Es que no ve Serra

cómo el cíngulo se cierra

de la carne de su cuello alrededor?;

sigue convencido

de que nada está perdido,

de que el mundo en el que vive es el mejor,

y le diré:

"No,señor, ese mundo mejor será

después, cuando ya no estés, cuando ya no estés".


ENCUESTA JUNTO A LA CENTRAL NUCLEAR

Me cago en la ley porque es fría y cerebral,

me cago en la ley por altiva y por brutal,

me cago en la ley por machista y por feudal,

me cago en la ley corrompida y desigual.

Me cago en el dinero porque es pasta de papel,

me cago en el dinero porque no hay guerra sin él,

me cago en el dinero porque tengo un churumbel,

me cago en el dinero y en su torre de babel.

Me cago en el poder porque ya no puedo ver

el ansia de mandar contra el hambre de placer,

me cago en el poder porque soy una mujer,

me cago en el poder porque sigue como ayer.

Me cago en la central por su forma y su color,

me cago en la central porque da mucho calor,

me cago en la central porque temo lo peor,

me cago en la central porque sirve a su señor.


Duduru ay, duduru ay,

duduru ay, duduru ay,

duduru ay, duduru ay,

oh oh oh oh oh, duduru ay.

CAMPAÑA CONTRA EL GOBIERNO FRANCÉS

(por reanudar ios ensayos nucleares en el Pacifico)

(Chicho S. Ferlosio / Julio M. Casas, Septiembre de 1995)

(Con la música de "Las vacas del pueblo")

¡La bomba de Francia ya se ha disparao, riau, riau!

¡La bomba de Francia ya se ha disparao, riau, riau!

y dice el gen darme

que nadie se alarme,

que no es peligrosa,

que está controlao, ¡ríau, riau!


Les han dejao solos a los de Tahití

por eso apoyamos todos desde aquí.

Les han dejao solos en el atolón

¡abajo la bomba,

abajo la bomba,

fuera el megatón!

¡Y son, y son, y son unos fanfarrones

que cuando van por los mares

van soltando megatones!

NO, SEÑOR CHIRAC

(Con la música de "María Isabel"

NO, señor Chirac, no, no, no, no

llévese la bomba que construyó.

No señor Chirac, no, no, no, no:


llévese la bomba que construyó.

Chibiribirí, popopompón,

chibiribirí, popopompón,

chibiribirí, popopompón,

chibiribirí, popopompón.

Llevado por la arrogancia

y el ansia de dominar

el nuevo señor de Francia

se vistió de militar.

No, señor Chirac [...]

Chibiribirí [...]

Y el jefe de los nativos,

mirándole de través,

le dijo sin paliativos

al político francés:

«No señor Chirac [...]

»Chibiribirí [...]»

Despéjeme Mururoa,
enváinese el kilotón

y no haga su barbacoa

en mitad de mi atolón.

»No señor Chirac [...]

»Chibiribirí [...]»

Regrese a su fortaleza,

que está tan lejos de aquí,

y no insulte la belleza

de las islas de Tahití.

»No señor Chirac [...]

»Chibirib¡rí [...]»

CAMPAÑA CONTRA LOS VERTIDOS NUCLEARES EN LAI

(Letras de ocasión pura algunas canciones populares gallegas)

(Chicho Sánchez Ferlosio / Julio Martín Casas, Verano de 1983)

(Música: A feira de Monterroso)

Se vírades o qu'eu vide

ay na fosa de Finisterre,
os outros bota que bota,

os nosos erre que erre.

No camiño pr'a fosa vironte pasar,

bidones de merda viñas de botar,

viñas de botar lixo nucleare!

No camiño pr'a fosa

do fondo do mare,

ay na fosa de Finisterre.

(Música: Una troita dapé)

Polo mar abaixo vai o barril nuclear

corre que te corre, quen o poidera parar

quen o poidera parar,

quen o poidera coller,

polo mar abaixo vai o barril nuclear.

(Música: A raíz de toxo verde)

A raiz d' este problema


e moi mala d' arrincare,

ternos d' arrincar primeiro

ternos d' arrincar primeiro

ternos d' arrincar primeiro

todo o lixo nucleare.

O pescadiño que é fresco

eche un regalo do mare,

os mariñeiros da fora,

os mariñeiros da fora,

os mariñeiros da fora

non o deixan respirare.

Aire puro e auga pura

a vida da cousa viva,

nen n'a terra nen nos mares,

nen n'a terra nen nos mares,

nen n'a terra nen nos mares

quero cousa radiativa.

Mariñeiriños galegos

ide polo mar adentro


ide e contadelle á Tacher,

ide e contadelle á Tacher,

ida a contadelle á Tacher

as cousas que está facendo.

(Música: As mozas de Vilanova)

Inglaterra manda o barco

e diz que non ten perigo

e logo dentro o bandullo

leva o seu morto escondido

(Música: Ai o río cando vai cheo...)

Ai a mar cando vai crecida

leva leva os arenques mortos,

ai tamben podía levare

os resigos lonxe dos portos.

(Música: Rianxeira)
Os pescadiños do mare

morrendo de morte lenta, (bis)

Mais quero vivir de probE

e capear a tormenta. (bis)

Oliñas veñen,

oliñas veñen,

oliñas veñen e van,

levade lonxe da praia

todo o lixo nuclear.

O meu pai morreu no mar,

botaron o corpo aos peixes, (bis)

Veneno les botan hoje,

Mariñeiro, non os deixes, (bis)

Oliñas veñen,

oliñas veñen,

oliñas veñen e van,

non os deixes, mariñeiro,

que os poden envenenar.


CÓMO CANTA LA PALOMA

¡Cómo canta la paloma!

¡Cómo la mira el halcón!

¡Cómo vive lo que vive!

Un, dos, tres.

Agua turbia y agua clara:

si volvieran a correr

contigo las bebería

otra vez.

Guerra eres, guerra llevas,

y en la guerra hay que vivir,

No hagas la guerra a la guerra

porque sí.

De las dos me dices una,

de las tres me dices dos,

de una no me dices nada


sin razón.

Luz de niebla, flor de nada,

hija del hambre y la sed,

ciega de vida y de muerte,

como yo.

Árbol que crece a la puerta

de casa del leñador

cómo quieres que dé fruto...

¡por favor!

BARAKA

De mi tierra me despedí,

que la baraka me falló.

A tu casa me dirigí,

llamé a la puerta y nadie abrió.

Llamé a la puerta,
¿Por qué quieres saber de mí,

si no consigues comprender

que mi ser se parece a ti

en el dolor y en el placer?

En el dolor.

DULCE VINO DE OLVIDO

Dulce vino de olvido en tu vaso tenías

y yo vi claro

que por más que te hablara no me oirías,

dulce vino de olvido en tu vaso tenías.

Ese niño que tienes mi nombre se sabía,

él me llamaba

y a mí el oír su voz me revivía,


ese niño que tienes mi nombre se sabía.

Ojalá te dejaran las palabras que digo

por un momento

el amargo sabor que va conmigo

ojalá te dejaran las palabras que digo.

Ese niño que tienes mi rostro conocía

y por tu causa

moriré en su recuerdo día a din,

ese niño que tienes mi rostro conocía.

Como flores que nacen de una rama arrancada

salen mis versos

sabiendo que su suerte está ya echada,

como flores que nacen de una rama arrancada.


VILLANCICO LAICO-GITANO

Vente, amigo, vamos a ver

al hombre nuevo que va a nacer.

El valor y la fortuna

se pelearán por abrirle la cuna.

Es tan vivo y tan gracioso

que no te acuerdas de ver si es hermoso.

Vente niño, vamos a ver

a este sol nuevo que quiere nacer,

vente a ver cómo ha brotado

la llama viva del fuego apagado.

Llorará sin fundamento

y se le olvida cuando está contento.

No comprende el churumbel,

pero tampoco nosotros a él.

Vente, prima, vamos a ver


la luna nueva que empieza a crecer.

Vente a ver cómo ha salido

la rama fresca del árbol partido.

No podrá ver el futuro

pero sabrá vivir inseguro.

Será igual que otro cualquiera

pero a su estilo y a su manera.

Vente, amigo, vamos a ver

la fuente clara que rompe a correr.

Vente amigo, vamos a ver

si el hombre nuevo pudiera nacer.

RUMBA GITANA

Los gitanos son de verdad,

no son de plata ni de oro,

los gitanos tienen dos ojos

como los tienen los payos.


Los gitanos son de verdad,

no son de piedra ni cartón,

los gitanos son de este mundo,

cómo que no.

Mira tú con mi rumbita qué iba a pasar

el día que no quieran colaborar.

Déjame

que toque palmas pa jalear,

que me emborrache y tome café,

que me divierta toda la noche.

Déjame

de madrugada junto a la mar,

que a mediodía pueda comer

y por la noche vuelva a empezar.

Déjame seguir bailando hasta que venga el amanecer,

no me quemes la chabola que tengo yo por ahí,

Déjame olvidar la pena con la mirada de una mujer,


sea paya o sea gitana, claro que sí.

Los gitanos son de verdad,

no son de plata ni de oro,

los gitanos tienen dos ojos

como los tienen los payos.

Los gitanos son de verdad,

no son de piedra ni cartón,

los gitanos son de este mundo,

cómo que no.

CÍRCULOS VICIOSOS

—Quisiera hacer lo de ayer

pero introduciendo un cambio,

—No metas cambios, Eladio,

que anda el jefe por ahí.


—¿Por qué está de jefe?

—Porque va a caballo.

—¿Por qué va a caballo?

—Porque no se baja.

—¿Por qué no se baja?

—Porque vale mucho

—¿Y cómo lo sabe?

—Porque está mu' claro

—¿Por qué está tan claro?

—Porque está de jefe,

—Eso mismo fue

lo que yo le pregunté:

¿por qué está de jefe?

Eso mismo fue

lo que yo le pregunté:

¿por qué está de jefe?

—Quiero formar sociedad

con el vecino de abajo.

—Ese no tiene trabajo,


no te fíes Caridad.

—¿Por qué no trabaja?

—Porque no lo cogen.

—¿Por qué no lo cogen?

—Porque está fichao.

—¿Por qué lo ficharon?

—Porque estuvo preso,

—¿Por qué lo metieron?

—Porque roba mucho.

—¿Por qué roba tanto?

—Porque no trabaja.

—Eso mismo fue

lo que yo le pregunté:

¿por qué no trabaja?

Eso mismo fue

lo que yo le pregunté:

¿Dor aué no trabaia?

—Yo quiero bailar un son


y no me deja María,

—Yo que tú no bailaría

porque está triste Ramón.

—¿Por qué está tan triste?

—Porque está malito.

—¿Por qué está malito?

—Porque tiene anemia,

—¿Por qué tiene anemia?

—Porque está mu' flaco,

—¿Por qué está tan flaco?

—Porque come poco.

—¿Por qué come poco?

—Porque está mu' triste.

—Eso mismo fue

lo que yo le pregunté:

¿por qué está tan triste?

Eso mismo fue

lo que yo le pregunté:

¿por qué está tan triste?


—Quiero conocer a aquél,

hablarle y decirle hola.

—¿No le has visto la pistola?

Deja esa vaina, Raquel.

—¿Pa' qué la pistola?

—Porque tiene miedo.

—¿Por qué tiene miedo?

—Porque no se fía.

—¿Por qué no se fía?

—Porque no se entera.

—¿Por qué no se entera?

—Porque no le hablan.

—¿Por qué no le hablan?

—Por llevar pistola.

Eso mismo fue

lo que yo le pregunté:

¿pa' qué la pistola?

Eso mismo fue


lo que yo le pregunté:

¿pa' qué la pistola?

¡Se acabó!

SEGUIDILLAS CASTELLANAS

Pa' la sangre la vida, pa' Dios la muerte,

pa' Dios la muerte,

pa la sangre la vida,

pa' Dios la muerte,

pa' mi cuerpo la pena

de conocerte.

De conocerte,

pa* la sangre la vida

(y) quién olvidara

la manera en que vuelves,

niña, la cara.
A la zorra la liebre y al lirio el valle,

y al lirio el valle,

a la zorra la liebre

y al lirio el valle,

al tirano las leyes

y a ti la calle.

Y a ti la calle,

a la zorra la liebre

y a mí condena

si me vuelves la cara,

flor de azucena.

Si te ríes me río, si lloras lloro,

si lloras lloro,

si te ríes me río,

si lloras lloro

y si cantas, mi vida,

yo soy el coro.

Yo soy el coro,

si te ríes me río,

flor de retama,
y si tú eres el fuego

yo soy la llama.

LA ISLA

(con música de Ipacaraí)

Isla donde yo vivía,

refugio

del viento,

isla de mi amor oscuro,

a proa

ya la veo

flotando sobre la niebla

como un monte de silencio;

mi barca me lleva a ella

y también mi sentimiento.

¡La isla!
¡La isla!

Isla de mi amor perdido,

cubierta

de selva;

no le dije que la amaba,

y nunca

lo supo ella:

por eso retorno ahora

como un pobre marinero,

remando contra el destino

que se me llevó tan lejos.

¡La isla!

¡La isla!
CANCIONES DE CHICHO SOBRE LETRAS AJENAS

LLEGARAS POR LOS CALVEROS

(Rafael Sánchez Mazas)

Llegarás por los calveros

que se ven por la ventana

señora blanca y lejana

de todos los caballeros.

Llegarás por los calveros

para llevarme a deshora

blanca y última señora

de todos los caballeros.

Llegarás por los calveros

calveros de mi encinal

muerte, señora inmortal

de todos los caballeros,

ay.
VILLANCICO

(Rafael Sánchez Ferlosio)

Nazca el niño negativo,

nadie, nunca, nada, no.

Si amanece la arrogancia

de la fuerza y el valor,

niño débil y cobarde,

niño niebla y deserción,

nazca el niño negativo,

nadie, nunca, nada, no.

Si relumbran los fusiles

de la blanca afirmación,

niño oscuro, niño inerme,

niño noche y evasión,

nazca el niño negativo,

nadie, nunca, nada, no.

Si a la luz de la justicia
toda culpa se aclaró,

niño bueno, niño malo,

blanco de contradicción,

nazca el niño negativo,

nadie, nunca, nada, no.

Si la lógica dispone

de la verdad y el error,

niño cierto, niño falso,

sembrador de confusión,

nazca el niño negativo,

nadie, nunca, nada, no.

Si en el quicio de la carne

la palabra se escindió,

niño niño, niño niña,

niña niño, niño no,

nazca el niño negativo,

nadie, nunca, nada, no.

Si entre la carne y el verbo


imposible fue el amor,

niño nadie, niño nunca,

niño nada, niño no.

TANGO

(Rafael Sánchez Ferlosio)

Ya no refresca esa mancha

que en otro tiempo era sombra,

¡farsantes! ya no os calienta

ese redondel pintado

que todavía llaman sol,

¡farsantes!, ya no os desvela

ese café malaguado

que arrastra el nombre de amor,

ni os abrasan las entrañas

esos fuegos de artificio

con efectos calculados

que llamÁs revolución.


Hoy muñecas se fabrican

que también mueven los ojos,

que también dicen mamá.

Ni sus pupilas de vidrio

vislumbrarán la mentira

ni palparán el engaño

sus mónitas de cartón.

¡Farsantes!

ya no hay virtud ni pecado.

Los pecados capitales

ya no son siete pecados,

son un solo capital.

Los magnates del mercado

con sus libros comerciales

lo podrán certificar.

Mas al fin qué más daría,

farsantes, qué más daría,

si todo este tiatro malo


fuese del todo mentira,

pero la bala y el muerto

siguen siendo de verdad.

NI AGUANTAR NI ESCAPAR

(Carmen Martín Caite)

Ni aguantar ni escapar,

ni el luto ni la fiesta,

ni designio ni azar,

que es la misma respuesta.

Ni cubierta la faz,

ni mirando al abismo,

ni a mandobles ni en paz,

que viene a ser lo mismo.

Ni víctima ni rey,

ni a cualquier viento hoja,


ni el paso altivo y fuerte.

Por donde pisa el buey

pero en la cuerda floja

mientras llega la muerte.

SON DE CANTALISO

(Nicolás Guillen)

Los turistas en un bar,

Cantaliso, su guitarra

y un son que comienza a andar.

No me paguen por que cante

lo que no les cantaré.

Ahora tendrán que escucharme

todo lo que antes callé,

¿Quién los llamó?

Gasten su plata,
beban su alcohol,

cómprense un güiro,

pero a mí no (3 veces).

Todos estos yanquis rojos

son hijos de un camarón

y los parió una botella,

una botella de ron.

¿Quién los llamó?

Ustedes viven,

me muero yo,

comen y beben

pero yo no (3 veces).

Aunque soy un pobre negro

sé que el mundo no anda bien;

ay, yo conozco a un mecánico

que lo puede componer.

¿Quién los llamó?

Cuando regresen

a Nueva York,
mándenme pobres

como soy yo (3 veces).

A ellos les daré la mano

y con ellos cantaré,

porque el canto que ellos saben

es el mismo que yo sé.

CANTO III DE "EL INFIERNO"

(De la Divina Comedia de Dante Alighieri)

Per me si va nella cittá dolente

per me si va nell'etterno dolore

per me si va tra la perduta gente.

Giustizia mosse il mio alto fattore

fecemi la divina potestate

la somma sapienza e il primo amore.


Dinanzi a me non fur cose create

se non etterne, ed io etterna duro.

Lasciate ogni speranza voi che entrate.

(Traducción)

Por mí se va a la ciudad doliente

por mí se va al eterno dolor

por mí se va donde la perdida gente.

Fue justicia lo que impulsó a mi alto hacedor,

me hizo la divina potestad

la suma sabiduría y primer amor.

Antes que yo no fue creado nada

que no fuese eterno, y yo duro eternamente

Dejad toda esperanza los que entráis.


CANCIONES CON LETRAS DE

AGUSTÍN GARCÍA CALVO

AFRO TAMBÚ

(Versión libre de Chicho para canción)

Afró, Tambú,

Zadüíngara, Júmbara, Semelé.

Señora del amor, la del vientre azul,

paloma de oro y madre de rosas, oh

ungida de sudor de mirra,

diosa del mar de risueño llanto.

Afró, Tambú,

Zadüíngara, Júmbara, Semelé.

Tú que en tus pechos das a pacer a cien


asnos en celo, abrevas del corazón

de la granada de tu cuerpo

larga la sed de los paraísos.

Afró, Tambú,

Zadüíngara, Júmbara, Semelé.

Escúchame señora a mi rezo tú,

la santa oreja vuelve y haz venir

aquí a mi casa, aquí a mis brazos

a Mariló la de mansos ojos.

Afró, Tambú,

Zadüíngara, Júmbara, Semelé.

Y por tu mano tráela, tu mano pon

en su cintura, y tráela así como un

aliento de canela empuja

mástil en flor por el mar antiguo.

Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé.

ANTIVILLANCICO

Don, din, din, dan,

ya.

La gracia nevando

y el puerco sangrando,

la perla temblando,

la llama llamando

y el chantre cantando

y el ama amasando,

nevando

la gracia en la ciudad sin fe,

¿Dónde, dónde, dónde fue?

Pues aquí, pues allá,

no sé...

Pero ¿qué más da?

La luna, rocío;
el sol, su sed;

el rico, oro;

el pobre, palidez.

Eh, eh;

ah, ah.

Uno sólo tiene

aquello que da.

Don, din, din, dan,

ya.

Nacida la vida, la peña florída,

la loba dormida,

la casa caía,

la leche vertida,

la cierva parida,

la vida

nacida de la mar sin fe.

¿Cómo, cómo, cómo fue?

Pues así, pues asá,

no sé...

Pero ¿qué más da?


Tristeza, el espejo;

los ojos, miel;

amor, el hombre;

justicia, la mujer.

Eh, eh,

ah, ah,

Lo que olvide uno,

todo eso sabrá.

Don, din, din, dan,

ya.

La grana, granada

y el alba, alborada,

la mora morada,

la pólvora helada,

la carne encarnada,

la sombra asombrada,

granada

la grana de la paz sin fe.

¿Cuándo, cuándo, cuándo fue?

Pues ayer,
pues será,

no sé...

Pero ¿qué más da?

La cal, delirio;

el vino, pez;

el reo, cáñamo

y terciopelo el juez.

Eh, eh,

ah, ah.

Cuando ciegue el alma

será Navidad.

Don, din, din, dan,

ya.

La muerte, muriendo

y el río, riendo,

y el papa paciendo,

y el lirio liriendo

y el credo creyendo

y Adán sin atuendo,

de estrella en estruendo
reverdinaciendo,

muriendo,

muriendo la fidelidad

sin fe.

¿Cuándo, cómo, dónde, qué?

Te diré,

pues verás,

no sé...

Pero ¿qué más da?

Eh,

ah.

Todo lo que esperes,

jamás lo verás.

Don, din, din, dan,

din, don,

dan.
A LA ESCUELA DEL SUPREMO SER

A la escuela del Supremo Ser

-tintero, puntero, pupitre, pizarra-

ha venido Blancaflor

para hacerse una mujer

como Dios manda.

-Blancaflor.

-Servidor

del Ser y de Usted.

-Blancaflor, todos los hombres

son mortales, Blancaflor.

-Sí, sí, sí, señor.

-Es así que

sabemos que

tú eres por ejemplo un hombre

como lo indica tu nombre.

-Sí, Señor,

puede ser.

-Luego, entonces, por tanto, por consiguiente...

-Pues
ya veremos a ver,

ya veremos a ver.

Blancaflor sacude el pelo

y se ríe sin saber.

-Pero, pero, pero,

pero muera el Ser,

Muera el Ser en buena hora

y que viva la blanca,

la blanca flor

de la zarzamora.

Ante el Alto Comité del Ser

-fusiles, estrellas, trompetas, medallas-

se presenta Rojaflor

a cumplir con su deber

de ciudadana.

-Rojaflor.

-Servidor

del Ser y de Usted,

-Rojaflor, la ley es dura,

pero es la ley, Rojaflor.


-Sí, sí, sí, señor.

-Es así que

la ley es que

te alistes en las banderas

y defiendas las fronteras.

Rojaflor por la ventana

mira las nubes correr.

-Pero, pero, pero,

pero muera el Ser

en las minas y en las olas

y que viva la roja,

la roja flor

de las amapolas.

A la mesa de su Padre el Ser

-florero, cuchillo, sopera, cuchara-

sentada está Flordeor

a la hora de comer

cotidiana.

-Flordeor,

-Servidor
del Ser y de Usted,

-Flordeor, pobres y ricos

siempre ha habido, Flordeor,

-Sí, sí, sí, señor.

-Ya vemos que

resulta que

pese a huelgas y revueltas

sigue el mundo dando vueltas.

-Sí, Señor,

puede ser.

-Luego, entonces, por tanto, por consiguiente...

-Pues

ya veremos a ver,

ya veremos a ver.

Flordeor tira la silla,

se ríe y echa a correr.

-Pero, pero, pero,

pero muera el Ser.

Muera el Ser que Ser se llama.

Viva la flor de oro,

de oro la flor
de la retama.

En el Mágico Bazar del Ser

-menaje, tualet, escalera mecánica-

se ha metido Moraflor

a comprar todo el placer

de la semana.

-Moraflor.

-Servidor

del Ser y de Usted,

-Moraflor, cada producto

tiene un precio, Moraflor.

-Sí, sí, sí, señor.

-Es así que

es claro que

hurtando lo que está en venta

contra el sistema se atena.

-Sí, Señor,

puede ser.

-Luego, entonces, por tanto, por consiguiente...

-Pues
ya veremos a ver,

ya veremos a ver.

Moraflor regala besos

desde el debe hasta el haber

-Pero, pero, pero,

pero muera el Ser.

Que se pierda el que se salva

y que viva la mora,

morada flor.

la flor de la malva.

En el Centro de Liberación

-panfleto, petardo, consigna, tabarra-

se ha metido Negraflor

a hacer la Revolución

para mañana.

-Negraflor.

-Servidor

del Ser y de Usted.

-Negraflor, imperialismo,

monopolio, Negraflor.
-Sí, sí, sí, señor.

-Es así que

no hay más que

frente al poder dinerarío

el poder del proletario

-Sí, Señor,

puede ser.

-Luego, entonces, por tanto, por consiguiente...

-Pues

ya veremos a ver,

ya veremos a ver,

Negraflor se acuesta con

su hermano y ríe al amanecer

-Pero, pero, pero,

pero muera el Ser.

Muera el Ser sin testamento

y que viva la negra,

la negra flor,

flor de pensamiento.
EN LA TRENA

En la trena le tienen aún

a Jaime, la prenda

de la buena compañía;

en chirona está Paco Gil,

que así se sonreía;

y Miguel en Carabanchel

y en las Ventas las tres Marías;

para Izquierdo, Aldecoa y Giral

y Emilio y David

son número los días;

y también a la sombra está

Josefa García.

Los jueces, como es natural

se van a La Toja o, si no, a Fuenterrabía;

su permiso irá a disfrutar

el blanco policía;

la justicia descansa en paz

pero no muere todavía;


generales, ministros y dios

tostándose están

las panzas respectivas;

y también a la sombra está

Josefa García.

La señora que va de bazar,

jarrones, visillos,

sábanas, mantelerías;

la empleada, el sábado, al fin,

el tren de cercanías;

cada cual en su condición,

todo el mundo a vivir su vida

y, en el apartamente dos mil,

con hielo y con gin

el disco se vacía;

y también a la sombra está

Josefa García.

No están por amor de poder,

ni honor, ni dinero,
ni ninguna mercancía,

sino porque guerra la paz,

porque la noche día;

por la misma razón que aún

cruje el arco y gime la lira;

el peón que quedó sin jornal

y aquella que ya

mas flores no le envían;

y por eso a la sombra está

Josefa García.

Porque llaman "amor" a la ley

y "ley" a la fuerza

y "verdad" a la mentira;

y por eso el sol sabe a hie

y el pan a cobardía

y los libros a muerte y

a sin sal la sabiduría

y los besos de hombre y mujer

a cal, y el amor

a reja y celosía
desde que ella a la sombra está,

Josefa García.

TÚ, CUYA MANO

Tú, cuya mano me ha bañado

de un fuego transparente las espaldas,

cuyos ojos en claros naufragios

hundieron algunos principios

elementales de mi alma,

tu eres mi patria.

Tú, que no tienes ni apellido,

ni sabes si eres pájaro, si alcándara,

que de todos tus brazos

los miles de títulos

cayendo se han ido

como si fueran nueces vanas,


tú eres mis padres

y mi patria.

Tú, que ni tú te acuerdas dónde

pusiste a orear las nubes blancas,

que de tantos amores que tienes

olvidas los nombres de todos

los días de cada semana,

tú eres mi Dios,

y mis padres

y mi patria.

Tú, que tan dulcemente besas

que el cielo boca abajo se volcaba

y que no se sabía

de quién ya la lengua,

de quién la saliva,

de puro sabrosa y templada,

tú eres mis leyes

y mi Dios

y mis padres
y mi patria.

Tú, que apacientas calaveras

en las praderas de la verde África

y a los rojos leones

les echas de pasto

las rosas de leche

de aquella luna de Sumatra,

tú eres mi ejército

y mis leyes

y mi Dios

y mis padres

y mi patria.

Eres mi ejército y mis leyes

y mi Dios y mis padres y mi patria,

y el ejército y Dios y las leyes

y todos los padres y patrias

se creen que tú no eres nada,

que no eres nada.


LAS MORAS NEGRAS

Creí que buscaba

las moras negras,

y encontré la rosa de zarza.

Creí que cogía

la rosa blanca,

y se hincó la espina en mis venas.

Creí que saldría

clavel caliente,

y brotó un arroyo de leche.

Creí que el arroyo

se hundía en tierra,

y fluyó al océano verde.

Creí que era aquello

el verde Océano,

y era el río eterno de estrellas.


Creí que hallaría,

cruzando el cielo,

al señor del todo y la nada,

y sólo encontré

puñado de moras

que de amor en mi mano sangraba.

ah ah ah ah ah ah ah.

A CONTRATIEMPO

Caravelas de Colón,

todavía estáis a tiempo:

antes que el día os coja

virad en redondo presto, presto;

tirad de escotas y velas,

pegadle al timón un vuelco


y de cara a la mañana

dasandad el derrotero.

¡Atrás, a contratiempo!

Mirad que ya os lo aviso,

mirad que os lo prevengo:

que vais a dar con un mundo

que se llama el mundo nuevo, nuevo,

que va a hacer redondo el mundo

como manda Tolomeo

para que siga girando

desde lo mismo a lo mesmo.

¡Atrás, a contratiempo!

Por delante de la costa

cuelga un muro de silencio;

si lo rompéis, chocaréis

con terremotos de hierro, hierro,

agua irisada de grasas

y rompeolas de huesos:

de fruta de cabecitas
veréis los árboles llenos,

¡Atrás, a contratiempo!

A orza, a orza, palomas,

huid a vela y a remo,

que el mundo que vais a hacer

más os valiera no verlo, verlo:

hay montes de cartón piedra,

ríos calientes de sebo,

arañas de veinte codos,

sierpes que vomitan fuego.

¡Atrás, a contratiempo!

Llueve azufre y llueve tinta

sobre selvas de cemento;

chillan, colgadas enjaulas,

crias de mono sin pelo, pelo;

los indios pata de goma,

acorazados de acero,

por caminos de betún

ruedan rápidos y serios.


¡Atrás, a contratiempo!

Por las calles trepidantes

ruge el león del desierto;

por bóvedas de luz blanca

revuelan pájaros ciegos, ciegos;

hay un plátano gigante

en medio del cementerio

que echa por hojas papeles

marcados de cifra y sello.

¡Atrás, a contratiempo!

Sobre pirámides rotas

alzan altares de hielo

y adoran a un dios de plomo

con dientes de oro negros, negros:

con sacrificios humanos

aplacan al dios del miedo,

corazoncitos azules

sacan vivos de los pechos.

¡Atrás, a contratiempo!
Trazan a tiros los barrios,

a escuadra parten los pueblos;

se juntan para estar solos,

se mueven para estar quietos, quietos;

al avanzar a la muerte

allí lo llaman progreso:

por túneles y cañones

sopla enloquecido el tiempo.

¡Atrás, a contratiempo!

Por eso, carabelitas,

oíd si podéis consejo:

no hagáis historia, que sólo

lo que está escrito está hecho, hecho;

con rumbo al sol que os nace

id el mapa recogiendo,

por el Mar de los Sargazos

tornad a Palos, el puerto.

¡Atrás, a contratiempo!
Monjitas arrepentidas

entrad en el astillero:

os desguacen armadores,

os coman salitre y muergos, muergos;

dormid de velas caídas

al son de los salineros

y un día, de peregrinas,

id a la sierra subiendo.

¡Atrás, a contratiempo!

Volved en Sierra de Gata

a crecer pinos y abetos:

criad hojas y resina

y hacedle burla a los vientos, vientos.

Allí el aire huele a vida,

se siente rodar el cielo

y en las noches de verano »

cantan grillos y jilgueros.

¡Atrás, a contratiempo!
CARMEN ARVALE

(Letra: Frates Arvales. Recogida por A. García Calvo)

E nos lases iouate (3 veces)

Ne uelve

rue marmar

sin sin currer

inple ori (3 veces)

Satur fu

fer e mars

limen sali

sta berber (3 veces)

Se muni

sal sterne

i aduoca

pet conctos (3 veces)

E nos marmor iouato (3 veces)


Triunpe, triunpe....(ad libitum)

***

¡Eh lares, ayudadnos! (3)

¡No des más vueltas!

¡Arrasa, Marte!

¡Deja, déjanos correr!

¡Llena los oidos! (3)

¡Sáciate!

¡Lánzate, eh Marte!

¡Salta el umbral!

¡En pie, voceador! (3)

¡Del muro abajo

salta, derriba!

¡Anda, llama en ayuda!


¡Vé tras todos! (3)

¡Eh, Marte, no dejes de

ayudarnos! (3)

¡Triunfa, triunfa... (ad libitum)

AY DE MI VIDA

El mundo que yo no viva

lo pensé como cosa extraña,

como arca de maravilla.

Ay de mi vida.

Allí ¿sonará la lluvia

junto al fuego las noches frías?

¿Tendrá Agosto en el río barcas?

Y tú ¿la gentil sonrisa?

¿Durará en el papel que siembro


la negra flor de la tinta?

Ay de mi vida.

¿Será posible que vengan

los amigos y que "Era" digan

"un hombre, y te quiso mucho"

y "Mucho" llorando digas?

Es el mundo que no conozco.

Atlántída sumergida.

Ay de mi vida.

Allí las palmeras echan

esmeraldas. Allí las crías

del delfín esmeraldas pacen.

Allí no hay noche ni día:

cuando ordeñan a los rebaños,

de púrpura el mar se agría.

Ay de mi vida.

Más limpio que agua de oro

es el mundo que yo no viva:


no hay naves de arar espumas

ni arado para las viñas;

el gran árbol le da su fruto

al que el nombre del fruto diga.

Ay de mi vida.

Ese mundo no es el mío:

es el tuyo, el que en tus pupilas

hundido está desde siempre

y no lo alcanza mi vista.

A ese mundo quisiera entrar,

antes que suene la hora

-ay- de mi vida.

SONETOS TEOLÓGICOS

Enorgullécete de tu fracaso

que sugiere lo limpio de la empresa:


luz que brilla en la sombra, más espesa

hace la noche, y más durable acaso.

No quiso Dios que dieras ese paso

y ya, del solo intento, bien le pesa;

que tropezaras y cayeras, esa

es justicia de Dios; no le hagas caso,

¿Por lo que soy y lo que logro, ciego

me nombras y me amas? Yo me niego

y en ese espejo no me reconozco.

Yo soy la luz que rompe espejo y ciencia;

yo soy el que no es, y no conozco

más forma de virtud que la impotencia.

II

Pero no cejes, porque no se sabe

cuando pierde el amor, dónde la tierra

volteando camina, ni que encierra

misterio del que nadie tiene clave.

Porque el libro mayor, y eso es lo grave,


del debe y el haber nunca se cierra

-y acaso acierte quien con tino yerra-

ni es nada el mundo hasta que el mundo acabe.

Si te dicen que Dios es infinito

di que entonces no es, y si finito,

que lo demuestre, pues, y que concluya.

Pero no hay Dios ni ley que a contradanza

no se pueda bailar: tu muerte es tuya.

Tu no saber es toda tu esperanza.


LETRAS EN COLABORACIÓN CON ALBERTO PÉREZ

PARA EL DISCO "SOBRE LA PISTA"

CABEZA LOCA

(chachachá)

Fíjese

cómo es mi chachachá.

Sáquelo

pronto a bailar;

pájaro

de playa cálida

que voló

para gozar.

Sé que tú

te pones trágica
que te da

por cavilar,

oye mi

palabra mágica,

chachachá

pa' vacilar.

Negro,

cabeza loca;

negra,

piel de café;

negro,

cuello 'e gacela;

negra,

ligero pie.

Me voy

para La Habana,

me voy

pa' Panamá

me voy
pa' Venezuela

al son

de un rico chá.

EL PROFESOR DE BAYÓN

(bayón)

—¿Para qué tocan esos así?

¿Para qué tanta gente de pie?

¿Para qué tanto músico?, sí,

dígame para qué.

—¿Cómo que para qué?

Caballero, ¿no ve

la avalancha de gente que sale a la pista?

¡Dice que para qué!

Ahora se lo diré,

un momento, que voy a bailar un bayón.


—Por favor, ¿me podría informar

si pasó por aquí mi mujer?

¿No sabrá si se puso a bailar

o le dio por beber?

—Yo no sé si bebió,

no le digo que no,

de una copa de ron que llevaba en la mano,

pero sí que bailó

hasta que se cayó.

¡Un momento, que viene otra vez el bayón!

—Que me pongan un doble de ron

y me deje la gente pasar

porque soy profesor de bayón

y se va a demostrar.

—Ya está aquí mi mujer

que no sabe beber

pero sabe llevar el bayón como nadie;

quédense donde están


y lo comprobarán,

un momento que ya está sonando el bayón.

Cada vez que me pongo a bailar

y me dicen que lo hago mejor

yo no puedo dejar de pensar

en aquel profesor.

Qué bonita lección

la que dio de bayón

dibujando el compás por la pista de baile

con aquella mujer

que era su partener.

Un momento, que va a terminar el bayón

RUINA

(bolero)

Al contemplar tus amargos ojos


me estremeció comprender el fin.

Solo sin ti

pero contigo;

loco de amor

pero sin ti;

sentado al pie

de tanta ruina

como dejó

tu amor,

¿de dónde sales tú

quimérica ilusión?

¿por qué te llamo aún,

por qué

vuelvo

siempre

dónde

tú estás?

No,

yo no puedo ya seguir
con

la mentira de vivir.

Nada,

ruina

solo,

sin ti.

EL TACÓN

(fox)

Voy a pensar

cómo contar

un caso singular.

Iba yo una mañana

por la calle mayor

con mi novia del brazo

como un señor
y al subir a la acera

sin poner atención

se le ha roto un zapato

por el tacón.

Hecha una fiera

se revolvió

como si el torpe

hubiera sido yo;

¡vaya piropos

que me soltó!

—Estúpido,

entérate,

arréglalo

o lárgate.

¿Te parece normal

apoyar al andar

un pie bien y otro mal?

Yo no soy agresivo,
no me gusta reñir,

pero nunca he valido

para sufrir

y los malos modales

que empleaba mi amor

me dejaron un poco

de mal sabor.

Cojo el zapato

bueno del par

y atentamente

lo empiezo a examinar,

lo hago dos trozos

sin mas ni más

—Estúpida,

histérica,

ridicula,

colérica,

ya los tienes igual

y ahora puedes andar


a tu altura normal.

Ella gritó,

luego lloró

y al rato se calmó.

Yo sonreí,

me arrepentí

y todo acabó ahí.

PENA BRAVA

(letra en colaboración con Antonio Bueno)

Una sentida canción

en un encendido pecho

para mi sincero amor

y tu fingido desprecio.

Tengo ya todo el dolor


que me permite mi cuerpo:

el de un frío corazón

con un ardiente recuerdo.

A poeta me metí

por ver si me consolaba;

con el pienso que le di

se volvió mi pena brava.

La pluma por el papel

va sudando negra tinta

de los tragos que pasé

cuando te perdí de vista.

Yo no vivo por vivir,

la muerte no me da miedo

pero cuando pienso en ti

quiero morirme y no puedo.

Subí al monte y me senté

por ver si me distraía;


el halcón que divisé

tu recuerdo me traía

FLOR DE SAMBA

(samba)

Pasa ligera por mi calle una mujer

moviendo el cuerpo al caminar

y yo me pongo a imaginar

que aquellos pasos pueden ser

un son de samba pa' bailar.

Anima el paso y acentúa mi interés,

aunque me va dejando atrás,

y cada vez me empeño más

en descifrar ese compás

que va llevando con los pies.

Un aire leve que acaricia a un palmeral,

un paso vivo al que seguir,


una cadencia natural

y una aventura musical

que no se puede repetir.

Yo voy mirando la soltura con que va

desde la playa al malecón;

bota una barca de un tirón,

larga la vela y zarpa ya

con una mano en el timón,

Caramba, ¿y qué?

caramba, ¿y qué?;

caramba, y qué caramba,

que así terminé mi samba

contento de sentir el viento,

el viento que te aleja

mar adentro, y que me deja

bailando de mi samba el son.

No sé qué brisa la traería por aquí

ni para dónde se marchó;


yo sólo sé que llevo en mi

la flor de samba que brotó

de aquellos pasos que seguí.

PERO NO

(chachachá)

Lo que termina un día,

terminó.

Yo

no recuerdo nada

de

lo que me pasó:

sí,

sé que te hice daño

y sé que fue

cuando ya
no era yo.

No soy aquél

que se quemó contigo.

No siento ya

ni frío ni calor;

algo de vacío

y un vago sentimiento

de dolor.

No,

no puedo acordarme

de

cómo era tu voz

ni

de la noche ciega

en que creí

ser de ti,

pero no.
Ya me olvidé

del brillo de tus ojos

cuando te vi

bailando un chachachá

casi no me acuerdo

de cuando me querías,

pero no.

Lo que termina un día,

terminó.

CUMBIA FORASTERA

(cumbia)

Esta es la cumbia que yo aprendí

de una mulata que conocí

y la mulata se me olvidó

pero la cumbia no,


que sí, que sí,

la cumbia se baila así,

que no, que no,

la cumbia la bailo yo.

Un pañuelito blanco te doy

pa' que te acuerdes, niña, de hoy

con el aroma que recogió

de donde vivo yo

y vengo de madrugada

para que me puedas ver

cuando quiera despertar

la luz del amanecer

que sí, que sí,

la cumbia se baila así,

que no, que no,

la cumbia la bailo yo.

Si me preguntas te contaré,

prenda querida, lo que soñé:

que con el agua del temporal


brotaba un manantial.

Que baile todo el que tenga

amores que festejar,

anoche los tuve yo,

por eso vengo a bailar.

Que sí, que sí,

la cumbia se baila así;

que no, que no,

la cumbia la bailo yo.

Con este viento pasajero

va navegando mi velero:

con esta cumbia forastera

quererte quisiera.

Que sí, que sí,

la cumbia se baila así;

que no, que no,

la cumbia la bailo yo.

SLOW DE AMANECER
(slow)

¿Cómo la luz

del amanecer

me puede cegar así?

Nunca pensé

que de un resplandor

brotara la oscuridad.

Me envuelve la humedad

en esta calle gris

al tiempo que un rumor

me viene a despertar.

Creo qué aún

resuenan en mí

las notas de aquel slow

con su sabor

profundo y sensual

que me llena de inquietud.

¿Lo habré escuchado yo

y no me acuerdo ya
o acaso lo bailé

pero no sé con quién?

Miro hacia atrás

y veo pasar

la vida lejos de mi.

Llegan aquí

sonidos que ya escuché:

van al azar

girando a mi alrededor.

No sé por qué

me pierdo en mi soledad

sin encontrar

más que una sombra de ti.

¿Cómo la luz

del amanecer

me puede cegar asi?

Nunca pensé

que de un resplandor
brotara la oscuridad.

Me envuelve la humedad

en esta calle gris

Pal tiempo que un rumor

me viene a despertar.

Miro hacia atrás

y veo pasar

la vida lejos de mí.

PARA EL DISCO "TIEMPO DE BAILE"

NO SÉ POR QUÉ

(calipso)

Cómo quieres que sepa yo

lo que nunca me dices tú;

cómo puedes pensar de mi


que te voy a engañar.

La otra tarde viniste aquí

maldiciéndome sin razón

por la carta que te mandé

y que no te llegó.

No sé por qué

se va yendo la luz

que refleja la mar.

Ven a bailar,

que ya empiezo a sentir

el calipso sonar.

Tanto como presumes tú

cuando sales a pasear

de que todo te sienta bien

con tu cuerpo gentil.

La otra tarde viniste aqui

maldiciéndome sin razón


por la cinta que te compré

y que se te voló.

No sé por qué

se va yendo la luz

que refleja la mar.

Ven a bailar,

que ya empiezo a sentir

el calipso sonar.

Cuántas veces te he dicho yo

que si quieres llevarte bien

no te puedes tomar a mal

lo que tengas que oír.

La otra tarde viniste aquí

maldiciéndome sin razón

por aquello que te conté

y que no te gustó.

No sé por qué
se va yendo la luz

que refleja la mar.

Ven a bailar,

que ya empiezo a sentir

el calipso sonar.

AQUELLA NOCHE

(beguine)

Estoy soñando

bajo el resplandor

de las estrellas.

Todo me invita a contemplar

la inmensidad.

Me vuelvo loco

al imaginar

que estoy contigo

y que las horas dejan de pasar

para los dos.


Aquella noche

pudo trastornar

toda mi vida.

Yo no esperaba descubrir

cómo eras tú:

bailé contigo

hasta que sentí

que me quemaba

y te oí

suspirar.

Despertará la mar

con la marea

y crecerá la flor

del palmeral;

yo sueño con vivir

mirando al cielo,

y tenerte otra vez

cerca de mí.

Aquella noche
pudo trastornar

toda mi vida.

Yo no esperaba descubrir

cómo eras tú:

bailé contigo

hasta que sentí

que me quemaba

y te oí

suspirar.

Despertará la mar

con la marea

y crecerá la flor

del palmeral;

yo sueño con vivir

mirando al cielo

y tenerte otra vez

cerca de mí.

CHICA
(swing)

Chica,

vas de guapa por la vida,

¿o es que vas tan distraída

que no te acuerdas ya de mí?

Niña,

cuánto hará que no te veo:

desde el último paseo

al terminar el baile aquel.

Yo

soy el mismo:

vivo junto a la estación,

ya

no trabajo

para la Administración,

no

veo a nadie.

ni siquiera voy por el billar


y

los domingos

no me suelo despertar.

¿Y tú qué has hecho,

nena?

Ya serás independiente,

te verás con mucha gente...

qué sorpresa verte aquí.

Chica,

vas de guapa por la vida,

¿o es que vas tan distraída

que no te acuerdas ya de mí?

Niña,

cuánto hará que no te veo:

desde el último paseo...

qué sorpresa verte aquí.


EL SON DE RAQUEL

(son)

Por culpa de pensar

en ti

me subo sin pagar

al tren

y dice el revisor

que yo

me tengo que quedar

allí.

"Perdóneme, señor,"

-grité-.

"el baile va a empezar

sin mí".

Entonces me dejó

pasar

y aquí me tienes ya

por fin.
¡Qué bueno va mi son,

Raquel!,

te miro y se me van

los pies.

¡Qué gusto da bailar

así!

¿Adonde iría yo

sin ti?

Queriéndote comprar

un chal

me voy a descargar

café

y dice mi patrón

que a él

le tengo que llamar

de usted.

"Perdóneme, señor,"

-grité-

"me lo debió decir


ayer.

Yo dije: "¿Cómo estás,

Damián?"

y usted me contestó:

"Muy bien".

¡Qué bueno va mi son;

Raquel!,

te miro y se me van

los pies.

¡Qué gustó da bailar

así!;

¿adónde iría yo

sin ti?

Cansado de esperar

por ti

me duermo en un sofá

del bar

y dice no sé quién

de allí:
"Despierte de una vez,

gandul".

«Perdóneme, señor,"

-grité-

"mi novia se olvidó

de mí,

así que déjeme

dormir

y en sueños la veré

llegar".

¡Qué bueno va mi son,

Raquel!,

te miro y se me van

los pies.

¡Qué gusto da bailar

así!

¿Adónde iría yo sin ti?


EL P1NCHADISC0S

(rock)

Le dije al pinchadiscos que pusiera este rock

que traje aquel verano que pasé en Nueva York

y mira tú por dónde lo estrenaron aquí

con todas las estrofas que me oyeron a mí:

le dije al pinchadiscos que pusiera este rock

para bailar.

Llevaba ya un buen rato sin poder avanzar

por culpa de la gente que llenaba el local

así que cuando tuve la primera ocasión

pasé por la cabina donde estaba el control,

le dije al pinchadiscos que pusiera este rock

y se negó.

Yo me puse a gritan "Rock and roll,

no me niegues a mí rock and roll;

he venido a bailar rock and roll;

sé que tienes ahí rock and roll!:


te he pedido mi rock and roll".

La música que oía me empezaba a aburrir

y estaba casi a punto de marcharme de allí;

de pronto vi la forma de pasarlo mejor

y dando media vuelta me acerqué por Control:

le dije al pinchadiscos que pusiera este rock

para bailar.

Estaba yo seguro de llamar la atención

haciendo que apreciaran mi dominio del rock

y al ver a un par de amigas en la barra del bar

sali para la pista sin poderlo evitar:

le dije al pinchadiscos que pusiera este rock

y se negó.

Yo me puse a gritan "Rock and roll,

no me niegues a mí rock and roll;

he venido a bailar rock and roll;

sé que tienes ahí rock and roll:

te he pedido mi rock and roll".


¿Por qué se negó?, ¿por qué se negó?

¿y no me escuchó?, ¿y no me escuchó?

¿por qué se rió?, ¿por qué se rió?,

¿por qué me engañó?; ¿por qué me engañó?

y no, y no

pinchó, pinchó

rock and roll?

Yo me puse a gritan "Rock and roll,

no me niegues a mi rock and roll;

he venido a bailar rock and roll;

sé que tienes ahí rock and roll":

te he pedido mi rock and roll".

Yo me puse a gritan "Rock and roll,

no me niegues a mi rock and roll!;

he venido a bailar rock and roll;

sé que tienes ahí rock and roll":

te he pedido mi rock and roll".


AUNQUE NO SEPA DECIRTE

{vals)

Aunque no sepa decirte ninguna palabra tan dulce que te haga olvidar

sigo creyendo en un sueño que acaso recuerdes lo mismo que yo.

Hay una luz

lejos de mí,

una esperanza que me hace vivir,

vino una vez

y me dejó

ciego con su resplandor.

Aunque no fuera capaz de llegar hasta el fondo de aquello que nunca


entendí

siento latir un deseo que sólo tus labios podrían calmar.

Te veo aún

como una flor

stempre cautiva de un rayo de sol;

dejas crecer

tu soledad
viendo las nubes pasar.

Aunque no sepa decirte ninguna palabra tan dulce que te haga olvidar

sigo creyendo en un sueño que acaso recuerdes lo mismo que yo.

Era tu voz

triste y fugaz,

agua de lluvia cayendo en el mar,

yo la escuché

y descubrí

ríos que ardían en mí.

Te veo aún

como una flor

siempre cautiva de un rayo de sol;

dejas crecer

tu soledad

viendo las nubes pasar.

Aunque no sepa decirte ninguna palabra que te haga olvidar.


Aunque no sepa decirte ninguna palabra que te haga olvidar.

VOLVER DE UN SUEÑO

(bossa)

Si yo pudiera

saber por qué

se ve tan lejos

el tiempo aquél;

por qué se acaba

cualquier amor

y sin palabras

se dice adiós.

Volver de un sueño,

sentir tu piel

sabiendo siempre

que no hay después.


Volver de un sueño,

sentir tu piel

sabiendo siempre

que no hay después.

Todo se inunda

de soledad;

la luna llena

sobre la mar.

Dulce quimera,

no te alcancé

y ya no quiero

saber por qué.

Volver de un sueño,

sentir tu piel

sabiendo siempre

que no hay después.


Todo se inunda

de soledad;

la luna llena

sobre la mar.

Dulce quimera,

no te alcancé

y ya no quiero

saber por qué.

DÉJEME USTED

(merengue)

Yo voy a un baile

al lado de mi casa

porque me gusta

la música que hay,

y el otro día,

bailando tan contento,


un incidente

me vino a importunar.

Llega un sujeto

vestido de uniforme

va señalando

mi nombre en un papel,

y entra en la pista

siguiéndome los pasos

para mandarme

camino del cuartel.

—Déjeme usted

que baile mi merengue;

¿es que no ve

que quiero disfrutar?

No tiene usted

ni idea de merengue;

hay que gozar

del ritmo hasta el final.


Un individuo

que vive en mi edificio,

con el que a veces

me cruzo en el portal,

quiere informarme

con gesto temeroso

de que ha rozado

mi coche al aparcar.

Viene cargado

con medio parachoques

y una rejilla

que tapa el radiador

y entra en la pista

siguiéndome los pasos

para decirme:

"disculpe, por favor".

—Déjeme usted

que baile mi merengue;

¿es que no ve
que quiero disfrutar?

No tiene usted

ni idea de merengue;

hay que gozar

del ritmo hasta el final.

Veo de pronto

al padre de mi novia

muy bien vestido

con traje de chaqué;

lleva en la mano

los guantes y el sombrero

y anda muy serio

buscando a no sé quién.

Sale del fondo,

se acerca decidido,

con la mirada

me quiere fulminar

y entra en la pista

siguiéndome los pasos


para ponerme

delante del altar.

—Déjeme usted

que baile mi merengue;

¿es que no ve

que quiero disfrutar?

No tiene usted

ni idea de merengue;

hay que gozar

del ritmo hasta el final.

Un camarero

que lleva muchos años

viendo a la gente

bailar en el salón

va recogiendo

las sillas y las mesas

porque ha sonado

la hora en su reloj.
Le hace una seña

al jefe de la orquesta,

yo continúo

bailando sin parar,

y entra en la pista

siguiéndome los pasos

para pedirme

que salga del local.

—Déjeme usted

que baile mi merengue;

¿es que no ve

que quiero disfrutar?

No tiene usted

ni idea de merengue;

hay que gozar

del ritmo hasta el final.

—Déjeme usted

que baile mi merengue;

¿es que no ve
que quiero disfrutar?

No tiene usted

ni idea de merengue;

hay que gozar

del ritmo hasta el final,

hay que gozar

del ritmo hasta el final,

hay que gozar

del ritmo hasta el final.

EL ECO DEL VACÍO

(bolero)

Quién pudiera contemplar

el mar

y dejarse acariciar

por él.

Quién pudiera recordar

sin temer la soledad.


Cuántas veces aparté

de mí

la esperanza del amor

aquel.

Fue como una maldición

que me está siguiendo aún.

Al mirar el horizonte

siento el eco del vacío

y me pierdo en la penumbra

sin llegar a comprender.

Quién pudiera despertar

y olvidarse del dolor.

Nunca cesa de latir

y no entiendo la razón.

Fue como una maldición

que me está siguiendo aún,


Al mirar el horizonte

siento el eco del vacio

y me pierdo en la penumbra

sin llegar a comprender.

Quién pudiera despertar

y olvidarse del dolor.

Nunca cesa de latir

y no entiendo la razón

porque ya no soy capaz

de pensar ni de sentir

ni me enfrento a la verdad

de que ya no puedo.

Quién pudiera despertar

y olvidarse del dolor.

Nunca cesa de latir

y no entiendo la razón

ni me enfrento a la verdad

de que ya no puedo más.


LA PERRITA TINA

(pasacalle)

Yo tengo una perrita

simpática y audaz:

si se le dice "Tina"

nunca se hace de rogar,

le gusta dar vueltas

alrededor de mí

y no hay quien la sujete

si se quiere ir.

Ayer por la tarde

la saco a pasear

y no sé cómo fue y se me escapó;

la gente ayudándome a buscar...

y de pronto en la otra acera apareció.

-Caramba, Tinita,

los sustos que me das:


ya sabes que no tienes que cruzar.

—¡Guau, guau!

—Escucha un momento

y deja de jugar,

que ya estoy empezándome a enfadar.

—¡Guau, guau!

Cómo me mira mi perríta

cuando le llamo la atención,

pero si vuelvo la cabeza

sale como una exhalación.

Yo tengo una perrita

que no es nada común:

me empeño en educarla

pero no he podido aún;

se pierde por casa

en cuanto no la ves

y nunca estás seguro


de lo que va a hacer.

El jueves pasado

volvía de comprar,

lo dejo todo junto en un rincón

y al irme a poner el delantal

un paquete de la bolsa se esfumó.

—Perdona, Tinita,

te voy a preguntar:

¿acaso no habrás visto un calamar?

—¡Guau, guau!

—¡Demonio de perra!,

me vas a liquidar,

que sólo te preocupas de zampar.

—¡Guau, guau!

Cómo me mira mi perrita

cuando le llamo la atención,

pero si vuelvo la cabeza


sale como una exhalación.

ROCK DEL CAPÓN

(rock)

La gente piensa que cantar es fácil,

que vas viviendo sin preocupación,

que llevas chicas a tu camerino

y que al final te pagan un pastón;

pero, a menudo, cuando voy de gira,

me cae un marrón.

El otro día, en una de mis galas,

a dos minutos de la actuación,

llegó el alcalde con los concejales

y me dijeron con educación

que al empezar interpretara el himno

de la población.
—No tragaré con esas exigencias,

no pasaré por esa humillación,

no cantaré ninguna cosa rara,

-¿por quién me toman?-

sólo canto rock and roll.

El pobre alcalde se quedó de piedra,

igual que toda la corporación;

se despidieron a regañadientes

y se marcharon con resignación

sin conseguir que interpretara el himno

de la población.

Si nada cambia seguiré cantando,

juntando el arte con la diversión,

llevando chicas a mi camerino

y presumiendo con la profesión;

pero al que venga a darme la paliza,

le pego un capón.

No tragaré con esas exigencias,


no pasaré por esa humillación,

no cantaré ninguna cosa rara

-¿por quién me toman?-

sólo canto rock and roll.


LETRAS EN COLABORACIÓN CON GINETTE LAVIGNE

PARA LA PELÍCULA "BUENAVENTURA DURRUTI:

ANARQUISTA" DE JEAN-LOUIS COMOLLI

TRÉBOL NEGRO

Historia de tres amigos

de la dulce libertad:

si se hicieron anarquistas

no fue por casualidad.

Buenaventura Durruti,

Ascaso y García Oliver

llamados "Los Solidarios",

que desprecian al poder.

Buscados y perseguidos

por el campo y la ciudad,


si acabaron en la cárcel

no fue por casualidad.

Buenaventura Durruti,

Ascaso y García Oliven

tres hojas de trébol negro

contra el viento del poder.

Siguiendo con su costumbre

de burlar la autoridad,

si cruzaron la frontera

no fue por casualidad.

Buenaventura Durruti,

Ascaso y García Oliver:

la negra sombra del pueblo

contra el brillo del poder.

Después de una temporada

se volvieron para acá:

si temblaron los burgueses


no fue por casualidad.

Buenaventura Durruti,

Ascaso y Garcia Oliver:

tres balas negras de plomo

apuntando hacia el poder.

LA MUERTE DE ASCASO

(poema)

En julio del treinta y seis,

el veinte por la mañana,

unos cuantos anarquistas

detrás de una barricada

preparaban el asalto

del cuartel de Atarazanas

vigilando una garita


y el fúsil que la guardaba.

Todos querían pasar

pero nadie se arrancaba.

Siguiendo a su corazón,

Ascaso cruza la Rambla,

le apuntan desde el cuartel,

de pronto sale una bala:

Ascaso yace en el suelo

con la frente atravesada.

Cinco minutos después

la batalla está ganada

y en la torre del cuartel

izan ya bandera blanca.


EL FRENTE POPULAR

Aunque en Madrid y en París

ha ganado el frente obrero,

el obrero sigue alerta

y coa los pies en el suelo.

El pueblo vuelve a salir

en defensa de los presos

y revienta las prisiones

sin la venia del Gobierno.

También la reforma agraria

la emprende a su modo el pueblo:

en Encinar de la Parra,

dehesa de Cenicientos,

los terrenos del señor:

los toman los lugareños

sembrando en cotos de caza

sin permiso del Gobierno.


La reforma campesina

se propaga como el fuego

desbordándose hacia el sur

por los Montes de Toledo

y en España el viejo arado

va rompiendo suelo nuevo:

los hambrientos tienen pan

a despecho del Gobierno.

NOVIEMBRE DEL 33

Diecinueve de noviembre,

malos tiempos me recuerdas,

que ganaron las derechas

al partirse las izquierdas.

Los obreros no se rinden


y se lanzan a la huelga,

pues no hay nada que perder

sino las mismas cadenas.

En Gijón, en Barcelona,

y en Granada, y en Valencia

y en otros muchos lugares

la huelga surge y progresa.

Pero el viento del poder

recorre pueblos y aldeas

arrastrando a los huelguistas

hasta el fondo de las celdas.

Los rebeldes anarquistas

en la cárcel no se arredran

y proclaman la unidad

con el resto de las fuerzas.

"Lucharemos codo a codo

sin ponernos etiquetas:


los mismos amos tenemos,

la misma cárcel nos cierra".

LA HUELGA DE LSA URNAS

Que el mundo va a cambiar,

nos dicen,

que cuando votemos

nos escucharán.

Si en cambio no votáis,

nos dicen,

los del otro lado

nos aplastarán,

y así se quedarán,

nos dicen

con las manos libres


para hacer su plan.

Menudos demagogos

con sus perros de presa,

jugando como siempre

al palo y la promesa.

Malditos socialistas

vendidos al patrón,

jugando con nosotros

al gato y el ratón.

Nos habéis traicionado

sin ninguna vergüenza,

nos habéis desterrado

y matado también.

Habrá que echar la cuenta

de tantas injusticias:

la cuenta de la sangre

y de la libertad.
Malditas elecciones,

decimos,

si la voz rebelde

se domesticó.

Malditas elecciones,

decimos:

quieren el Gobierno

y nosotros no.

LOS BANDIDOS

Yo soy del campo,

amigo mío,

y luego fui

peón minero.

Cerró la mina
y al poco tiempo

me hice bandido,

ay.

Me fui del pueblo,

amigo mío;

inútilmente

busqué trabajo

y renegando

del mundo entero

me hice bandido,

Ay.

Como los lobos,

amigo mío,

robo comida

y hasta he matado;

la mala vida

aunque no quieras
te hace bandido,

ay.

No tengo casa,

amigo mío;

mis compañeros

andan huidos.

Cerró la mina

y en vez de obreros

somos bandidos,

ay.

BASTA YA

El ejército español

se prepara en los cuarteles

para hacer volver al Rey


con su séquito de fíeles.

Compañero, basta ya:

la anarquía vencerá;

compañero, basta ya:

la anarquía vencerá.

Los obispos y los curas

nos prometen el infierno

y predican que el patrón

representa al Padre Eterno.

Compañero, basta ya:

la anarquía vencerá;

compañero, basta ya:

la anarquía vencerá.

Los burgueses nos acosan

con la Biblia y el bastón

pero no han tenido en cuenta

el poder de la razón.
Compañero, basta ya:

la anarquía vencerá;

compañero, basta ya:

la anarquía vencerá.

EL DESTIERRO

Para tierras africanas,

como fieras, amarrados,

va a llevarse el Buenos Aires

a unos presos desterrados.

Se revuelve un preso joven

cuando suben al navío:

va gritando "Compañera!"

y ella le dice "Amor mío!",

"A la fuerza me han traído


sin sentencia ni proceso

pero el fuego no se apaga

aunque a mí me tengan preso".

"El destierro no me importa

ni me asusto de la muerte:

la anarquía vencerá

aunque yo no vuelva a verte".

Ya se marcha el Buenos Aires,

ya la vista no lo alcanza,

ya va rumbo del Estrecho,

ya se pierde la esperanza.

LA HUELGA DEL METAL

Canta, garganta,
si eres cabal:

o liberan a Durruti

o se quedan sin metal.

Deja ya las herramientas,

metalúrgico tornero:

los ladrones andan sueltos

y detienen al obrero.

Los ministros del Gobierno,

contemplando al capital

se olvidaron de la fuerza

del obrero del metal.

Mucha cadena,

poco jornal:

o liberan a Durruti

o se quedan sin metal.

Poca justicia,

mucho penal:
o liberan a Durruti

o se quedan sin metal.

Que no vuelva a repicar,

el martillo calderero,

que Durruti está en la cárcel

por luchar contra el dinero.

El señor don Miguel Maura

piensa poco y piensa mal

y por eso se ha topado

con la huelga del metal.

Ahí va un aviso,

y es oficial:

o liberan a Durruti

o se quedan sin metal.

Esta es la huelga

y es general:

o liberan a Durruti
o se quedan sin metal.

Mucha miseria,

poco hospital:

o liberan a Durruti

o se quedan sin metal.

Poca enseñanza,

mucho bozal:

o liberan a Durruti

o se quedan sin metal.

Fuera caretas

de carnaval:

o liberan a Durruti

o se quedan sin metal.

Viva la FAI,

viva el Metal:

o liberan a Durruti

o se quedan sin metal.


LA SUBASTA

Por el año treinta y dos

pasa el campo privaciones

porque muchos propietarios

no contratan ya peones.

Empezaron los patronos

a marcharse al extranjero

sin dejar labrar sus tierras

y llevándose el dinero.

Solidaridad Obrera,

un periódico anarquista,

se enfrentaba al millonario

desalmado y egoísta.

El ministro de Interior

requisó la rotativa

y al quererla subastar

se le puso cuesta arriba


Se empezó por mil pesetas

y a cualquiera que pujaba

el cañón de una pistola

por lo bajo le apuntaba.

Al decir Durruti: "Veinte"

la subasta está cerrada:

Solidaridad Obrera

va a salir de madrugada.

POR ALLÍ VIENE DURRUTI

Por allí viene Durruti

con una carta en la mano

donde pone la miseria

de este pueblo soberano;


por allí viene Durruti

con un libro en el morrai

donde apunta los millones

que ha robado el capital.

Por allí viene Durrutil

con catorce compañeros

y le dice a los patronos,

lo que quieren los obreros;

por alll viene Durruti

con un pliego de papel

a pedirle a los soldados

que se salgan del cuartel.

Por allí viene Durruti

sin carroza y sin dinero

saludando a todo el mundo

campesino y jornalero;

por allí viene Durruti


con las tablas de la ley

pa' que sepan los obreros

que no hay patria, Dios ni rey.


ALGUNAS CANCIONES POPULARES O ANÓNIMAS

CANTADAS POR CHICHO

ROMANCE DEL PRISIONERO

(Anónimo del Siglo XVI, aproximadamente

Chicho solía cantarlo enlazándolo con su canción

"Cárcel tengo por fuera, cárcel por dentro".)

Que por mayo era, por mayo,

cuando face la calor,

cuando los trigos encañan

y están los campos en flor,

cuando canta la calandria

y responde el ruiseñor,

cuando los enamorados

van a servir al amor

sino yo, triste cuitado,

que yazgo en esta prisión


aue ni sé cuándo es de dia

ni cuándo las noches son

sino por una avecilla

que me cantaba al albor;

matómela un ballestero,

dele Dios mal galardón.

ROMANCE ANÓNIMO

—Abre la puerta, Teresa,

ladina daina,

ábremela, flor de lis,

ladina ay di.

Que soy aquel don Francisco,

ladina daina,

que tú solías abrir,

ladina ay di.

Al abrirle la cancela,

ladina daina,
un soplo le da al candil,

ladina ay di.

La ha cogido de la mano,

ladina daina,

la lleva por el jardín,

ladina ay di.

Vamos a rezar un credo,

ladina daina,

un credo por ti y por mí,

ladina ay di.

Al decir "Su único hijo",

ladina daina,

una puñalá le di,

ladina ay di.

CANTES DE BODA DE PORTAJE (CÁCERES)

Verdeguea y grana

el tomillo en la ribera,
verdeguea y grana

y grana y verdeguea

y verdeguea.

El novio le dio a la novia

un anillo de oro fino,

ella le dio su palabra

que vale más que el anillo.

Verdeguea y grana, etc.

Al novio le dio la novia

la mano por la gatera,

y no podemos saber

lo que el novio le dio a ella.

Verdeguea y grana, etc.

Esta noche se te cumple

el título de soltera;

para mañana a la noche


otro título te espera.

Verdeguea y grana, etc.

Novio, a la novia te entrego

para que duermas con ella;

si le has de dar mala vida,

deja a la moza soltera.

Verdeguea y grana, etc.

El padrino es un piñón,

la madrina es una almendra,

el novio cadena de oro,

que a la novia lleva presa.

Verdeguea y grana, etc.

Qué bonita está la sierra,

cargadita de rocío;

más bonita está la novia


al lado de su marido.

Verdeguea y grana, etc.

MADRE, MAÑANA A LOS TOROS

(Popular extremeña)

-Madre, mañana a los toros.

Yo quisiera disfrutar.

Por lo menos veinte duros

me tiene usté' a mi que dar. (bis)

-Si veinte duros me pides,

veinticinco te daré,

pero por Dios, Manolito,

olvida tú a esa mujer. (bis)

-Yo a esa mujer no la olvido

aunque me den tres mil reales,


la quiero más que a mi vida,

más que a usté' con ser mi madre

y si no fuera pecado

más que a la virgen del Carmen.

En la pared de las viñas

se pararon a fumar.

-Vela allí viene mi madre

y ahora la voy a matar.

-Velo allí viene Manolo

con cara de renegado.

La tuna de la querida

malos consejos le ha dado.

Mi madre muerta en la cama

y yo le robé el dinero.

Como marido y mujer

marcharon al extranjero.
QUE LA TORTILLA SE VUELVA

(La hierba de los camínos...)

(Canción recogida por Liberovici y Straniero en su libro

Canciones de la Nueva Resistencia española

rebautizado por Fraga Iribarne como "El libelo de Einaudi")

La hierba de los caminos

la pisan los caminantes

y a la mujer del obrero

la pisan cuatro tunantes

de esos que tienen dinero.

Qué culpa tiene el tomate

que está tranquilo en la mata

y viene un hijo de puta

y lo mete en una lata

y lo manda pa' Caracas.

Los señores de la mina


han comprado una romana

para pesar el dinero

que toditas las semanas

le roban al pobre obrero.

Cuándo querrá el Dios del cielo

que la tortilla se vuelva

que los pobres coman pan

y los ricos mierda, mierda

LA CIGÜEÑA

(Popular castellana recogida por Agapito Marazuela

y transmitida por Julia León)

Yo me quedé clisadó de la cigúeña

que andaba de batalla con la culebra.

Cómo la picotea,

cómo revolotea,

cómo le tiende el ala sobre la arena.

Pica en el verde, pica en la arena,


pica en los picos de mi morena.

Hay que ver la cigüeña cuanto nos vale.

Si no fuera por ella cualquiera sabe.

Cómo la picotea,

cómo revolotea,

como le tiende el ala sobre la arena.

Pica en el verde, pica en la arena,

pica en los picos de mi morena.

Nos quita los reptiles de los caminos

y nos mata los bichos que son dañinos.

Cómo la picotea,

cómo revolotea,

cómo le tiende el ala sobre la arena.

Pica en el verde, pica en la arena,

pica en los picos de mi morena.

ADDIO LUGANO BELLA


(Canción de los anarquistas expulsados de Suiza.

Texto de Pietro Gori -1895-, musica de Addio Sanremo bella

canción popular toscana)

Addio Lugano bella,

o dolce terra pia,

scacciati senza colpa

gli anarchici van via

e partono cantando

colla speranza in cor.

Ed è per voi, sfrutatti,

per voi, lavoratori,

che siamo ammanettati

al par dei malfattori

eppur la nostra idea

è solo idea d'amor.

Anonimi compagni,

amici che restate,


la verità sociali

da forte propagate,

e questa è la vendetta

che noi vi domandiam.

Ma tu che ci discacci

con una vil menzogna,

reppublica borghese,

un dì ne avrai vergogna,

ed ora t'accusiamo

in faccia all'avvenir.

Scacciati senza tregua

andrem' di terra in terra

a predicar la pace

ed a bandir la guerra,

la pace tra gli oppressi,

la guerra agli oppressor.

Elvezia il tuo governo

schiavo d'altrui si rende,


di un popolo gagliardo

le tradizioni offende

e insulta la leggenda

del tuo Guglielmo Tell.

Addio, cari compagni,

amici luganesi,

addio, bianche di neve

montagne ticinesi,

I cavalieri erranti

son traccinoti a nord

e partono cantando

con la speranza in cor.

***

Adiós, Lugano bella,

oh dulce tierra pía,

expulsados sin culpa

se marchan los anarquistas

y se van cantando
con la esperanza en el corazón.

Y es por vosotros, explotados,

por vosotros, trabajadores,

por lo que estamos esposados

como los malhechores

aunque nuestra idea

es sólo idea de amor.

Anónimos compañeros,

amigos que os quedáis,

las verdades sociales

propagadlas con fuerza,

es ésta la venganza

que os pedimos.

Y tú que nos expulsas

con una vil mentira,

República burguesa,

un día te avergonzarás,

y ahora te acusamos
de cara al porvenir.

Acosados sin tregua

iremos de tierra en tierra

predicando la paz

y condenando la guerra,

la paz entre oprimidos,

la guerra al opresor.

Suiza, tu gobierno

esclavo de otros se hace,

de un pueblo gallardo

las tradiciones ofende

e insulta la leyenda

de tu Guillermo Tell.

Adiós, queridos compañeros,

amigos luganeses,

adiós blancas de nieve

montañas del Ticino,

los caballeros errantes


han marchado hacia el norte

y se van cantando

con la esperanza en el corazón

STORNELLI ROMANOS

(en dialecto romanesco)

Vola, stornello, e sfoglia

fiore de voce;

stasera canto a qquella

che ppiú me piace:

co'ste parole voglio

metterla 'n croce.

Giovanottino che

tte perdi er flato,

se sente bbene che

ttu hai digiunato:

fai come er pupo quanno


nun ha magnate.

Chi tti potra capire,

fanciulla bruna:

tu sei tre quarti o un terzo

o mezzo piena

pocché tu cambi e fai

come la luna.

Colui che ddice donna

dice danno:

dicon la donna che tte

rovina er monno

pero chi nun ce l'ha

la va cercanno.

Quanno la donna dice

"amore caro,

so l'edera die in do

m'attacco moro"

er giorno appresso te
da piantinaro.

Ce sta 'na strada tutta

de cartelli;

Gigi nun ce passá'

che tte ce taji:

ce fumo accortellati

i meglio bbulli.

Vuela, stornello, y deshoja

una flor de voz;

esta noche canto a la

que más me gusta:

con estas palabras quiero

crucificarla.

Jovencito que pierdes

el aliento,

se nota mucho que

estás ayuno:
haces igual que el nene

cuando no ha comido.

Quién te podrá entender,

chica morena:

estás tres cuartos, o un tercio,

o medio llena

porque cambias, y actúas

como la luna.

"El que dice mujer

dice daño":

dicen que la mujer

te arruina el mundo

pero quien no la tiene

la va buscando.

Cuando la mujer dice:

"amor querido,

soy como hiedra y donde

me agarro muero"
al día siguiente te

deja plantado.

Hay una calle toda

de cuchillos;

Gigi, no pases por ella,

que te cortas:

ahi fueron acuchillados

los más chulos.

OTROS

Dentro a Regina Celi c'è 'no scalino

Chi nun salisce quello non è romano

Nun è romano e manco trasteverino

L'amore mio me manna 'na pagnotta

Che a me er vitto der Celi nun m'abbasta

Si nun se sbriga mece trova l'ossa.


Dentro Regina Celi c'è 'na campana

Possi morì ammazzato a chi la sona

Si la sona er mio amore, che Dio l'aiuta

Amore amore manneme un saluto

Dentro Regina Celi so'rinserato

Me trovo come 'n albero caduto

Da amici e da parenti abbandonato

Dentro de Regina Celi hay un escalón

y el que no lo pasa no es romano,

no es romano y menos trasteverino.

Mi amor me manda un mollete

que a mi la comida del Celi no me basta

Si no se da prisa me encontrará en los huesos.

Dentro de Regina Celi hay una campana


puede morir asesinado quien la toca,

si la toca mi amor, que Dios le ayude.

Amor, amor, mándame un saludo,

dentro de Regina Celi estoy encerrado;

me encuentro como un árbol caído,

de amigos y parientes abandonado.

OTROS

Lasciateci passà,

semo romani,

de li giardini semo

li mejo fiori,

de le ragazze semo

li rubacori.

Il mio amore sta

lontano mio,
se mi manda un saluto,

io non lo vojo,

ma se mi manda un vaglia

io me lo pijo.

Dimme se mi voi bene

e si te piacio,

io sto vicino al foco,

io esto vicino al foco

e non m'abbrucio,

e tu m'abbruceresti

con un bacio.

Cosí voglio cantare,

Fiorinda brutta,

la donna senza sposo

è mezza matta,

quando ha sposato invece

è matta tutta.
Dejadnos pasar,

somos romanos,

de los jardines somos

las mejores flores,

de las chicas somos

los robacorazones.

Mi amor está

lejos de mí;

si me manda un saludo,

no lo quiero,

pero si me manda un vale

sí que lo cojo.

Dime si me quieres

y si te gusto,

estoy cerca del fuego,

estoy cerca del fuego

y no me quemo

y tú me quemarías

con un beso.
Así quiero cantar,

Florinda fea,

la mujer sin marido

está medio loca,

pero cuando se casa

está loca del todo.

LA MAREMMA

(La marisma. Popular italiana)

Tutti mi dicon maremma, maremma!

e a me mi pare una maremma amara:

l'uccello che ci va perde la penna,

io ci ho perduto una persona cara.

Sia maledetta maremma, maremma,

sia maledetta maremma e chi l'ama:

sempre mi trema il cuor quando ci vai,

perché ho paura che non torni mai.


Todos me dicen: "¡marisma,, marisma!

y a mi me parece una marisma amarga:

pájaro que va allí pierde la pluma

y yo he perdido a una persona querida.

Sea maldita la marisma, marisma,

sea maldita la marisma y quien la ama:

siempre me tiembla el corazón cuando vas allí

porque tengo miedo de que no vuelvas más.

EGOAK EBAKI

(Canción popular vasca recogida por Imanol

y que les enseñó, a Rosa y Chicho, Julia León)

Egoak ebaki baniskion

neurea izango zen

ez zuen aldegingo (bis)

bainan, honela
ez zen gehiago

txoria izango (bis)

eta nik... txoria nuen maite, (bis)

Si yo te cortara las alas

nunca más

te irías de mí (bis)

pero si lo hiciera

ya no serías

pájaro (bis)

y yo pájaro te quiero. (bis)


CANTOS DE PILÓN

(Cantos de trabajo populares venezolanos)

Dale duro a ese pilón iuu, iuu,

que se acabe de romper iuu, iuu,

que en el monte hay mucho palo

y papá lo sabe hacer iuu, iuu.

Ya me duele la cabeza iuu, iuu,

de tanto darle al pilón iuu, iuu,

para engordar un cochino

y comprarme un camisón iuu, iuu.

Si por tu marido es iuu, iuu,

cógelo que allá te va iuu, iuu.

Un camisón de cretona

no me lo ha llegao a dar iuu, iuu.

Allí arriba en aquel cerro iuu, iuu,


dan matrimonio civil iuu, iuu.

Se casa la bemba e burro

con el pescuezo er violin iuu, iuu.

Yo no quiero hombre casao iuu, iuu,

porque hiede a mataura iuu, iuu.

Yo lo quiero solterito

que huele a pifia madura iuu, iuu.

Y allá va la cara el diablo iuu, iuu,

de corazón de demonio iuu, iuu,

que tiene la lengua negra

de levantar testimonio iuu, iuu.

Y la zoqueta se cree iuu, iuu,

que todo se lo merece iuu, iuu,

y vive en un piazo e rancho

que el viento se lo estremece iuu, iuu,

iuu, iuu, iuu, iuu, iuu, iuu.


II

Las estrellas en el cielo

toítas tienen su nombre ah,ah,ah,ah.

Y la ingrata de María

la llamó y no me responde ah,ah,ah,ah.

Allá va la que decía

que ella no se enamoraba

y de un cariaqueño menos

porque no iba a cargar mara ah,ah,ah,ah.

Ayer yo te vi venir

rascándote la cabeza.

Le dije a mi compañera

allá va la sinvergüenza ah,ah,ah,ah.

Tuve queriendo una Juana

pero no Juana de aquí,

Juana de muy lejas tierras,

Juana de Paragúachí ah,ah,ah,ah,


ah,ah,ah,ah. ah,ah,ah,ah.

EL CANTAR TIENE SENTIDO

(Joropo venezolano recogido por Soledad Bravo)

El cantar tiene sentido,

el cantar tiene sentido,

entendimiento y razón.

La buena pronunciación,

la buena pronunciación,

y el instrumento al oído.

La noche me enamora más que el día

pero mi corazón nunca se sacia (bis)

de seguir el paso de la luna

que en el silencio de la sombra viaja (bis).

Que hago yo sólo en el campo,

que hago yo sólo en el campo,


que hago yo en el campo sólo.

Yo no enamoro ni canto,

yo no enamoro ni canto.

Yo no canto ni enamoro.

Suspira la brisa y suspirando lejos

trae el capullo de una blanca rosa (bis).

Sale el gusano de su prisión de seda

y se convierte en linda mariposa (bis).

Que el cantar tiene sentido,

el cantar tiene sentido,

entendimiento y razón.

La buena pronunciación,

la buena pronunciación,

y el instrumento al oído.

La buena pronunciación,

la buena pronunciación,

y el instrumento al oído
ZUMBA QUE ZUMBA

(Joropo venezolano, emparentado con el polo margariteño.

Recogido por Soledad Bravo)

Voy a zumbar este gallo

y en medio de la gallera

óyelo bien, y en medio de la gallera

pa ver si existe otro gallo

que quiera medirse y pueda,

verdad mi hermano,

que quiera medirse y pueda.

Cuando me pongo a cantar

no pido permiso a nadie

cuando me pongo a cantar

no pido permiso a nadie

que eso de pedir permiso

y es cuando el hombre es cobarde,

óyelo bien,

y es cuando el hombre es cobarde.


Soy palo que no me cimbro,

que no me cimbro,

barco que no me volteo.

Cuando a mí me da la gana

toco el cielo que no veo,

verdad, Catira,

toco el cielo que no veo.

Recuerdo cuando en Oriente

brilló el astro diamantino

recuerdo cuando en Oriente

brilló el astro diamantino

con sus rayos cristalinos

alumbrando e reluciente

verdad Cristóbal,

alumbrando e reluciente.

Más allá de no sé dónde,

de no sé dónde

mataron a no sé quién

y si no corro tan duro


me matan a mí también,

verdad Saúl,

me matan a mí también.

Y a mí me gusta cantar

donde cantaores cantan

y que sepan declarar

el eco de su garganta

y que sepan declarar

el eco de su garganta,

óyelo bien,

y el eco de su garganta.

Cantando el zumba que zumba,

zumba que zumba

fue que yo me enamoré.

Yo voy a seguir cantando,

verdad mi vida,

pa' enamorarme otra vez.


HACE UN AÑO

(Vals mexicano de F. Valdez Leal)

Hace un año que yo tuve una ilusión;

hace un año y hoy se cumple en este día:

te recuerdas que en tus brazos me dormía,

que yo, inocente,

muy confiado te entregué mi corazón.

Ese tiempo tan feliz no volverá;

mi cariño lo pagates con traiciones:

hoy me quedan sólo crueles deceiciones

pero, anda ingrata,

como pagas, otro así te pagará.

El recuerdo de tu amor quero olvidar;

me quisiera emborrachar de sentimiento,

te quisiera yo borrar del pensamiento,

pero es inútil,

que borracho más y más me he de acordar.


Pero el tiempo es justiciero y vengador,

y a pesar de tu hermosura placentera

si hoy te sobran muchos hombres que te queran

verás más tarde:

no habrá naide que se acuerde de tu amor.


POEMAS

SOL ANTIGUO

Sol antiguo, sol perdido,

bajo ese sol, agua de río.

Sol de invierno, sol lejano,

bajo ese sol, limón cortado.

Sol del note, sol ficticio,

bajo ese sol, corazón frío.

Sol de eclipse, sol extraño,

bajo ese sol, ojos cerrados.

Sol de tarde, sol caído,

bajo ese sol, cuerpo vacío.


Sol futuro, sol helado,

bajo ese sol, agua de lago.

(NO SÉ SI HAY ALGO QUE DECIR AÚN...)

No sé si hay algo que decir aún;

la cabra tira al monte, el pez al agua.

Todo gira y oscila sin sentido

bajo el signo del ruido y la locura.

¿Quién puede asegurar que en su camino

no se encuentra un obstáculo insalvable

que cierre para siempre el horizonte?

Un caballo, una flor, el sol, la niebla,

tal vez no existan en el mundo mío

si en mis ojos no mora su figura.

Ayer supe que tienes un amante:


chaqueta gris, zapatos sin cordones,

un coche estacionado en doble fila,

una copa en la mano y una esposa

que oculta en otra parte su amargura.

La noche se reparte por las calles

y un extraño minuto de silencio

acompaña al crepúsculo en mi barrio.

Empieza el juego; mira bien tus cartas,

no dejes que te tomen la medida,

procura aprovecharla bueña racha

combinando la astucia y el valor.

"Si no puedes batir a tu adversario

únete a él." ¡qué idea más absurda!

oye más bien la voz que te asegura

que en el huerto agridulce de la vida

hay un árbol eterno a cuyo pie

un letrero de signos misteriosos

resume la razón del universo

en una sóla fórmula ilegible.


Yo no tengo la culpa de querer

una copa en la mano y una esposa

chaqueta gris, zapatos sin cordones

y un extraño minuto de silencio

bajo el signo del ruido y la locura.

Una casa en el campo, no muy lejos

del sitio aquel que aguarda tu presencia

donde sabes que suenan flautas dulces

y entre verde hojarasca resplandecen

las blancas manos con que tú me abrazas.

(BEBE DESPACIO ESTA NOCHE EN MI CASA)

Bebe despacio esta noche en mi casa

ponte ahora la túnica amarilla:

dátiles verdes te daré por besos

despierta ahora de la casa aquella

y ven conmigo al río, charlaremos


y yo te contaré de mí pasado

cromos antiguos y fugaz infancia.

Entretanto, los años van pasando

bajo el signo del ruido y la locura.

Un caballo, una flor, la niebla, nada

me saca de mi atroz melancolía

como si el tiempo fuera de cristal

y todos los sucesos de la historia

se juntaran, inmóviles y eternos

en una sola forma omnipresente.

Los egipcios, los chinos, lo destreza

con que entonces se amaba o se mataba,

su dominio del fuego y los metales

los príncipes, los súbditos, las víctimas,

que engalanan el triunfo de los dioses

con las joyas ardientes de sus pechos,

los poblachos perdidos, las cavernas

donde cientos de siglos permanecen

ordenados en capas de basura


de amor, de muerte, de razón, de olvido.

Pero el alma no sabe resignarse:

es preciso buscar entre las sombras

los lazos que nos unen con la vida

o poner de una vez en la balanza

lo que gozamos y lo que sufrimos,

lo que queremos y lo que podemos,

lo que esperamos y lo que tenemos,

lo que pensamos y lo que sentimos,

y acatar con valor el veredicto.

Que se apaguen el sol y las estrellas,

que el tiempo se detenga, y que la nada

impere por doquier indiscutida.

BALANCE DE UN VIAJE Y ANUNCIO DE OTRO

Con este viaje yo vuelvo a ser yo:


sufridor, caminante y ex convicto,

vividor, traficante y drogadicto,

seguidor de un estilo que murió.

Que no, que no, que no, que no, que no,

que ya no acato ley ni veredicto,

que persigo la duda y el conflicto

hasta el último instante del reloj.

Rechazo lo seguro y lo admitido,

me doy a lo imprevisto y lo prohibido,

lo que nunca se logra con certeza.

Quien me busque, que vaya a la marisma,

que abandone su orgullo y su carisma

y que apoye en la arena la cabeza.

(LE ECHÉ CABALLO A LAS PALOMAS...)

Le eché caballo a las palomas


y se dormían en medio del bando

como palabras sueltas que se caen de una frase

Le eché perico a las palomas!

y refulgían en mitad del vuelo

como ideas brillantes que ilustran un discurso.

Le eché jachis a las palomas

y parecían interrogar al cielo

poniendo en duda la verdad de siempre.

{PORQUE EN MI CABEZA)

Porque en mi cabeza

manda el corazón

a veces me callo

teniendo razón.
EL MORO JUDÍO

Yo soy un moro judío

que vive con los cristianos,

no sé qué Dios es el mío

ni cuáles son mis hermanos.

BRINDIS AL SOL

Bríndo al sol por el pírrico destino

del que no quiere nubes en su cielo

y vive siempre como el macho en celo,

corneando la sombra del vecino.

Bríndo al sol por el místico mezquino

que cifra en el poder su torpe anhelo

y a quien nunca le sirve de consuelo


seguir de caminante en el camino.

De golpe se agiganta tu enemigo,

vas en un carro incómodo y repleto,

ya no llevas al potro de las riendas,

En tu soberbia tienes el castigo

y no te digo más, que mi soneto

no espero que lo aprecies ni lo atiendas.

NO FUE POR EL PERRO

Lo que dice quien lo dice

son mentiras sin valor.

La que se fue, no se fue

por el perro del doctor

sino por su pajarillo,

que lo muestra sin rubor:


en dos años, que se sepa,

cinco veces, ¡por favor!

Ni el hecho se ha demostrado

ni de esta carta el autor:

palabra contra palabra

de fullero a jugador.

La verdad no es muy bonita

pero el engaño es peor:

quien lo dude, que pregunte

o que apenque con su error.

LIRA A ROSA

Permítanme que cuente

sin cólera, sin pena y sin empacho,

de la vida presente,

ya sobrio, ya borracho,
los gozos y las sombras que despacho.

Tengo yo una mujer

entera, verdadera y singular

que aunque se hace querer

y también admirar

a veces la podría estrangular.

¿Pues no va la insensata

y si ve que contundo alguna cosa

me mira que me mata

con una mueca odiosa

que me hace poner pies en polvorosa?

Pocas veces me enfado,

pues no aguanto la bronca ni el jaleo,

pero estoy enseñado

para el placer, y creo

que es harto razonable mi cabreo.

Rosa, no sé vivir
sin la brisa gentil de tu caricia

pero habrás de admitir

que en nada beneficia

regañar al que yerra sin malicia.

Y dejo ya la lira

para manos más finas y virtuosas

en tanto el mundo gira

por bóvedas grandiosas

mermando la importancia de las cosas

(SI DE Mi HERIDA...)

Si de mi herida

se hubiera de morir, ya estaba muerto

pero estoy cierto

que me ha de acompañar toda la vida.


No da tiempo a curar la herida abierta

y por saberlo

siento mi cuerpo como carga muerta.

COPLAS DE LA BODA

(con motivo de la boda de Mariano Marín

Zaragoza, 23 de Junio de 1997)

Llegó el profesor Marín

a las orillas del Ebro(sí)

por culpa de una mujer

y de su inquieto cerebro

(no sé si empiezo bien)

De Paz no les digo nada

porque apenas pude verla (sí)

pero dicen sus amigos

bue es una auténtica perla


(no sé si me oyen bien)

Mariano, Mariano

quién te ha visto y te ve ahora (sí)

anoche tan campechano

y hoy aquí con tu señora?

(no sé si cuadra bien)

De la novia nada digo

porque no sé cómo es (sí)

pero sé que es una chica

de la cabeza a los pies

(no sé si digo bien)

Mariano, Mariano

flor de la musica entera (sí)

acuérdate de nosotros

por mucho que ella te quiera

(no sé si canto bien)

La novia no sale aquí


porque apenas la conozco (sí)

pero sé que no ha salido

de los delirios del Bosco

(no sé si rima bien)

El sol se sigue poniendo,

la luna sigue brillando,

la gente sigue viviendo

y el tiempo sigue pasando

(no sé si suena bien)

La novia le dice al novio:

lo que le alarga se trunca" (sí)

y el novio le ha replicado:

"más vale tarde que nunca"

(no sé si lo hago bien)

La novia suelta otra puya

y Mariano la contesta (sí)

y están los dos cavilando

lo que la boda les cuesta


(no sé si pienso bien)

El novio pide paciencia,

la novia serenidad,

y yo una copa de vino

de vuestra comunidad

(no sé si acabo bien).

A LA NIÑA

(poema con todas las preposiciones)

Todas las prendas del habla

le quedan bien a la niña.

Anoche me desnudé

por completo ante la niña.

Después me tumbé en la cama

cayendo bajo la niña

(si llego a ser de otro siglo


me caigo cabe la niña).

Al verla encima de mí

me puse a hablar con la niña,

y por sentirla mejor

me apreté contra la nina.

Me parecía flotar

con el peso de la niña.

Una risa suelta y clara

llegaba desde la niña,

que al reír, más que al hablar,

se ve claridad en la niña.

No sé qué que me gustó

vi por allí entre la niña.

Levanté mi no sé qué

y lo moví hacia la niña;

como no me lo estorbaba

lo adelanté hasta la niña,


y al ver que me lo cogía

le dije "para la niña",

pues la fuerza que tenía

la tenía por la niña.

Casi la mitad de mí

latía según la niña

pues nada de todo aquello

podía ser sin la niña.

Aquí termina la historia

que escribí sobre la niña:

quizá mi forma de estar

de algún modo tras la niña.

EL BIGOTE EY LA SONRISA

Érase un bigotudo trasnochado,

¿obre un vado de sonrisa hueca;


érase una sonrisa de muñeca,

bajo un falaz bigote malhadado.

De Hitler y Charlot entreverado,

la máscara asincrónica lo amueca,

a contrapié de la sonrisa clueca:

de qué se ríe nadie está enterado.

Érase una sonrisa putativa,

pegada a un bigotucho que da risa;

una sonrisa incierta y abusiva

que a destiempo vomita a toda prisa

un rictus de amenaza medio viva:

Érase una sonrisa sin sonrisa.

A DON AMANDO DE MIGUEL

Don Amando de Miguel

cuando aborda lo social


queriendo ser racional

acaba por ser cruel.

Tiene tanta confianza

en el sistema vigente

que a la mitad de la gente

le niega toda esperanza.

No tolera inmigraciones

si rebasan cierto cupo,

pero Amando nunca supo

regañar a las prisiones,

cuyo cupo se desdeña

desde tiempo inmemorial

aunque es del todo ilegal

según el Código enseña.

Como es listo y está vivo

De Miguel detecta el mal

pero lo ve natural
en cuanto explica el motivo.

LA ESTAMPA DEL VALOR

(cartas al director)

Señor director,

quisiera decirle a Jiménez Alfaro lo siguiente:

Yo no sé si son tirios o troyanos

los que han hecho estallar su cobardía

ni cómo su siniestra mercancía

se pudo abrir camino hasta tus manos.

Pero sé distinguir, en los humanos,

la mirada que el miedo no desvía

y en ti la vi brillar el mismo día

que quisieron vencerte los tiranos.

Contra gestos así no logran nada


esos miseros títeres de barro

que procuran matar la inteligencia.

Ahí estabas: la diestra ensangrentada,

con la izquierda fumándote un cigarro,

impertérrito y firme, ante la Audiencia.

DEL HEREJE AL QUEMADOR

Te voy a molestar poco

aunque me tires al fuego:

no puedo insultar a un ciego

ni batirme como un loco.

Abandona tus rabietas,

hijo de la Inquisición,

que nuestra liberación

no va a ser de metralletas.
Sino de pura palabra,

que si es libre nos libera

y es mágica y hechicera

sin truco ni abracadabra.

Si tu mente no es cobarde

contesta con argumentos:

que no hay en estos momentos

más cera que la que arde.

POR LA ABSTENCIÓN

No me haréis escoger gaviota o rosa.

Con todo mi respeto por quien vota

no me quiero sentir como un idiota

que atiende más al nombre que a la cosa.

Os digo en verso lo que pienso en prosa:


si sólo importa el triunfo o la derrota,

que perezca la rosa y la gaviota

y que selle su fin la misma losa.

Al voto en blanco por igual me niego,

porque va a consagrar el rumbo ciego

de un sistema viciado de antemano.

De las listas jerárquicas me aparto;

si es un error, sabed que lo compartoo

con Antonio García Trevijano.

LA TOCINO

¿Quién convoca a su consejo

para Pleno extraordinario,

hilando fino y muy fino

y luego no se presenta?
¡La Tocino!

Ante tal comportamiento,

¡Le importamos un comino!,

oenegés del Medio Ambiente,

amas de casa y vecinos,

abandonan el consejo

avisando a la Tocino.

¿Quién regala a los privados

de La Mesta los caminos

y cede puertos y costas

a Pujol y a sus meninos?

¡La Tocino!

¿Quién con perfil aquilino,

con vaivenes de fular,

se autonombró Presidenta

de Doñana y su destino?

¡La Tocino!
¿Quién paseó de zagala,

camero, perro y pollino?

La misma que no protege

a pastores de merinos

¡La Tocino!

¿Quién nos tendrá que librar

de basuras y residuos

asesinos?

¿Quién tiene que proteger

bosques, montañas y ríos?

¿La Tocino?

¿Es Lady Bacon, panceta,

vaca loca o ibérico

porcino?

¿Es garza real, codorniz,

gallina clueca, estornino?

¿Qué es La Tocino?

Viendo todo el desgobierno


Me desmadro y ya sin tino,

Grito con todas mis fuerzas:

¡Yo me cago en La Tocino!

A BALTASAR GARZÓN

Tú que dejaste un claro interrogante

trazado en el papel con mano justa,

dime ahora, si acaso no te asusta

el camino que tienes por delante.

Ejercer de político elegante

que combina el halago con la fusta,

sentir cómo en el alma se te incrusta

una droga sutil y dominante.

Contemplar el soborno y la frescura,

transigir con la trampa y la mentira,


arrinconar tu ciencia justiciera.

Renegar del valor y la cordura,

convivir con el déspota y su ira,

con la cima del GAL y con Corcuera.

(EL SEÑOR RUIZ-GIMÉNEZ...)

El señor Ruiz-Giménez

no busca el mando

ni se acoge a la sombra

de ningún bando.

El defensor del pueblo

ya no interesa

por si pone su carta

sobre la mesa.
IDA Y VUELTA

Cuando se murió el pachá

y dio principio el deshielo

yo pregunté con recelo

si se podía hablar ya.

Y ahora que la libertad

vuelve a su celda sombría

y acordándome del día

en que enterramos a Franco

yo le pregunto a Polanco:

"¿Se puede hablar todavía?"

A FELIPE GONZÁLEZ

Por mucho que retuerzas el idioma

defraudando a cualquiera que te hable


decir que dimitir no es saludable

no es saludable, ni Filesa broma.

Ni la deuda ni el paro son de goma,

ni siempre va a salir quien te eche un cable,

ni basta declararse responsable

si miramos las cárceles de Roma.

Te atropella tu tren a toda prisa

se te borra la impúdica sonrisa

y la olímpica antorcha se te apaga.

No te salvan los medios de Polanco,

se te queman Benegas y Barranco,

Rosa Conde, Borrell y hasta Solchaga.

CARTA DESDE ALCOBENDAS

Señor o señora mía:


se pide por la presente

una acción clara y urgente

contra tanta felonía.

Del periódico ejemplar

que fuimos en el pasado

tan sólo nos han dejado

los ojos para llorar.

Nuestra lucha represento

mirar de frente a esos magos

de la suspensión de pagos

y la quiebra fraudulenta

que se pasan la pelota

sin dejártela tocar

y te intentan marear

como si fueras idiota.

Nos hacen falta letrados

que se sirvan de su ciencia


y de su simple conciencia

de seres civilizados

pronunciando conferencias

donde brille la verdad

para aplicársela al "Ya"

con todas sus consecuencias;

periodistas y escritores

que sepan que la cultura

cuando es mercancía pura

nos da sus frutos peores

y que el rumbo de la prensa

conduce a un puerto maldito

si la maneja un grupito

que existe porque no piensa;

pero también el calor

de poetas y cantantes

y de finos comediantes
con sentido del humor

que no es la primera vez

que se ponen a la brega

cuando lo justo se niega

y no comparece el juez.

A mal tiempo, buena cara,

y a mal paso, quien lo salva:

la ocasión la pintan calva

para ver cómo se aclara

la mentira de esa gente

que amparándose en lo oscuro

nos despoja del futuro,

del pasado y del presente.

Usted puede defendernos

frente al designio arbitrario

de que a este viejo diario

se lo traguen los infiernos.


Lo que sea sonará

y con eso me despido.

No me niegue lo que pido.

Le espero en mi casa.

YA.

"VENDETTA" LUMPEN-SATÍRICA

(a don Eugenio Suárez)

8 de agosto de 1984

Me presentó a don Eugenio

un amigo a quien aprecio,

compañero de trapecio

por los circos del milenio.


Don Eugenio es editor

y yo corrector de imprenta,

mi trabajo estaba en venta

y era el único postor.

En la primera reunión

no noté que fuera idiota,

pero tomé buena nota

de su torpe indiscreción:

"Tu padre -me comentó-

me hizo una faena un día..."

No sé qué coño le haría,

ni si se lo haría o no

pero es un síntoma cierto

de psicosis inestable

buscarse un falso culpable

para vengarse de un muerto


pues pocos días después

me echa de forma rastrera:

se lo encarga a una cajera

y sale el tío por pies*

II

El señor es presumido

y cree que puede suplir

a quien sabe corregir

porque lo tiene asumido

y el tonto va a confundir

algo que es tradicional

en el ramo editorial:

"infringir" con "infligir";

y por eso me ha largado:

porque le mostré el gazapo

cuando iba haciéndose el guapo


de blanco y acompañado

por una chica muy mona

el otro día en la imprenta.

Pero no sale la cuenta

porque a mí no se me abona,

porque a mí me ha despedido

sin que lo pueda explicar

y pretende no pagar

el trabajo producido.

III

Mi padre, según contó,

le hizo alguna fechoría...

No sé qué leches le haría

pero sé lo que haré yo:

dejar más libre mi brazo


que los cetros de los reyes

e infringir algunas leyes

infligiéndole un tortazo.

"Y eso ¿cuándo?" ¡Qué pregunta!

La venganza más certera

llega cuando no se espera,

cuando no se la barrunta,

cuando respira el cobarde

y olvida cargar el arma:

entonces suena la alarma

pero demasiado tarde.

DESPEDIDA

(del diario Ya)

Hay que ver con qué descaro

Adrián, Valtueña y Serres


-que es especialista en cierres-

nos empujan hacia el paro.

Hay que ver con cuánto morro

Valtueña, Guerra y Laguna

-sin pararse en ley alguna-

se nos pasan por el forro.

Tal el perro, tal el dueño;

malos trapos mal apañan;

las apariencias engañan;

no hay enemigo pequeño.

Porque si vamos al fondo

no me quejo de mi suerte

ni me cambio por el fuerte,

que ni es serio ni es cachondo.


COPLAS DEDICADAS A DON VALERIANO WEYLER

(Gobernador General de Cuba, llamado "El Carnicero")

Mirada de reptil, cuerpo de enano

instinto de chacal, alma de cieno,

hipócrita, cobarde, vil y obsceno

como el más asqueroso cuadrumano.

Un tiempo azote del país cubano,

fue a todo noble sentimiento ajeno,

y hoy al mismo Satán convierte en bueno

esta excrecencia del linaje humano.

LOS DERECHOS DEL PACIENTE EN LA LEY GENERAL DE

SANIDAD (ARTÍCULO 10, PÁRRAFOS 1,3,5 Y 11)

A TRAVÉS DE UN CASO CONCRETO

¡Don Luis Molina Trigueros


eminente cirujano,

quiere cortar por lo sano

derechos vivos y enteros!

Para escándalo y bochorno

de Justicia y Medicina

supone don Luis Molina

que la Ley está de adorno,

pero, si hay legalidad,

hasta el médico del Rey

tendrá que acatar la Ley

General de Sanidad,

que de modo concluyente

desde su artículo diez

establece de una vez

los derechos del paciente,

y (de no mediar locura

ni profunda depresión)
hay que darle información

como parte de la cura.

Con esta humilde poesía

le digo a don Luis Molina,

que su libertad termina

donde comienza la mía.

RTVE Y PARANOIA

(el "lunes" a que se refiere el autor en el primer verso

es el 24 de agosto de 1998. El soneto está escrito el 28).

Resuelta desde el lunes mi tarea,

permita que te diga, caballero,

que encuentro escasamente lisonjero

que no me digan nada de la idea.

¿Será que me ha quedado torpe y fea


a pesar de haber puesto tanto esmero

o es el turbio transfondo de dinero

de una intriga perversa y farisea?

Seguro que hay un cerdo en un despacho,

que marca el territorio de su casta

con orines que vierte sin empacho.

Perdonen si me siento de otra pasta

y no vuelvo a acercarme ni borracho

a una tropa tan borde y tan nefasta.

COCINA FUTURO

Estimado comensal:

con paso firme y seguro

sigue Cocina Futuro

deleitando al personal
Ya se trate de fabada,

de paella o de cocido,

el sabor no está reñido

con la higiene más cuidada.

Por eso nuestra revista

recoge sanos consejos

(unos nuevos y otros viejos)

y se los pone a la vista.

Si la cocina es cultura

y somos lo que comemos,

alce su copa y brindemos

por la cocina futura. I

(ASÍ QUIERO SEGUIR...)

Así quiero seguir, en mi forma incompleta,

un oscuro cantor y aprendiz de poeta,

Perogrullo inventor, Perogrullo profeta,


filósofo irreal a quien nadie respeta.

¿Para qué definir a quien no se define?

A fuerza de no ser, no he sido ni en el cine.

Pero al poder del mundo no esperéis que me incline

Mientras el cuerpo aguante y el cuento no termine.


OTROS TEXTOS

DESEOS DE UN TIPO CON EL ESTÓMAGO MUY VACÍO

-Fresón.

-Helado de limón

- Zumo de naranja natural con hielo

-Queso de Burgos

- Sardinas asadas

- Solomillo

-Patatas hervidas con aceite y sal

- Merluza hervida. Con pan.

- Besugo al horno

-Fondue Bourguignon

-Camembert muy hecho

- Emmental

-Anchoas

-Manzana asada

-Aguacate.
DIARIO IMPERSONAL

1998, Diciembre

Sábado 19

20:35

Los hombres no pueden ser iguales porque ninguna cosa es cabalmente


igual a otra. Al no tener el universo simetría bilateral ni de ninguna otra clase, el
mero hecho de que dos cosas ocupen en él posiciones diferentes las distingue sin
remedio (ni siquiera pueden ser especularmente iguales), y si ocupan el mismo
lugar son la misma cosa. Pero cualquier persona puede convenir con otra hacer
caso omiso de las diferencias entre ellas a la hora de repartirse una tarta o un
trabajo. Esa es la forma más simple de la igualdad de derechos, y retrotraerla al
momento del nacimiento ("los hombres nacen libres e iguales") induce a confusión.
Esta igualdad de derechos no tiene por qué aceptarla todo el mundo, e intentar
imponerla es quebrantarla. Y no se puede culpar a los que no se comporten de
acuerdo con ella porque en rigor no se puede culpar a nadie de nada. Todo cuanto
constituye nuestra manera de ser, de sentir, de pensar y -en consecuencia- de
comportarnos viene de dos únicas fuentes: la herencia biológica y el entorno, que
nos afectan desde el nacimiento sin haberlos elegido. La primera decisión
consciente que tomamos en la infancia obedece a la interacción entre esos dos
factores, sus consecuencias pasan a formar parte del entorno, desde donde
contribuyen a condicionar nuestra siguiente opción, y así sucesivamente. Con los
actos semiconscientes o incluso inconscientes ocurre tres cuartos de lo mismo. Si
antes de decidirnos a actuar se produce una lucha en nuestro interior, y es
espontánea, la habrá originado nuestra dotación genética, o una comreflejos
inconscientes que el entorno nos haya imbuido, o u binación de ambas cosas; si esa
lucha interna, o duda, no se pro^ duce de por sí, sino que somos nosotros mismos
quienes nos hemos acordado de suscitarla, se deberá a nuestro carácter, a nuestra
educación o a una mezcla de ambas cosas. Eso en cuanto al hecho mismo de que se
produzca o no esa lucha: con su duración, alternativas y desenlace sucede tres
cuartos de lo mismo (por no decir lo mismo). Tirar a cara o cruz para que el azar
decida por nosotros proporciona una libertad puramente ilusoria, ya que escoger el
método Montecarlo es una decisión como otra cualquiera que viene determinada
igualmente por la herencia, por el medio, o por ambos, y todo lo dicho puede
aplicarse tanto a las disyuntivas morales como a las demás (lo que queremos comer
o si es ya hora de irse a la cama, por ejemplo). Nos sentimos libres en la medida en
que no sabemos lo que va a ocurrir ni la influencia que tendrá sobre nosotros. Esta
idea de que nuestro comportamiento esté rigurosamente condicionado resulta
humillante para muchas personas, pero no hay razón para ello.

Lunes 21

1:58

Casi al mismo tiempo que las organizaciones no gubernamentales se


hicieran populares en España se acuñó también la expresión "catástrofe
humanitaria". Estas acuñaciones de fortuna son siempre sospechosas, sobre todo
cuando entran en juego vidas humanas, y en general consisten en eufemismos
destinados a distraer la atención de lo principal para dirigirla a lo accesorio (así,
"daños colaterales" nos hace pensar en "perjuicios no deseados" antes que en civiles
muertos y heridos"), ¿Por qué no dicen "catástrofe" a secas? Tal vez alguien se
sienta impulsado a responder: "Porque entonces podría pensarse que se trata de
algo menos grave o menos urgente, como que no funcionan las líneas telefónicas o
que no hay combustible, y aquí lo que ocurre es que llegan todos los días doce mil
refugiados, la mayoría de los cuales habrá muerto para dentro de dos semansa".
Entonces, ¿por qué no dicen "catástrofe humana"? ¿No ven que es absurdo aplicar
el calificativo "humanitario" a una catástrofe, y que sólo el tácito acuerdo unánime
de utilizar siempre las mismas palabras exactas ha acabado por acomodar a ellas
nuestro oído lingüístico, como ocurre con las frases de los anuncios publicitarios?
"Se ha producido un desastre humanitario" suena menos natural y "una desgracia
humanitaria" menos aún. Si, paralelamente, se dijera, por ejemplo, que "la gran
afluencia de mendigos procedentes del extrarradio ha causado una catástrofe
caritativa en el centro de la ciudad", ¿qué podría entenderse? Como una catástrofe
no puede ser caritativa, nuestra mente buscará el sujeto más próximo al que
razonablemente pueda aplicarse dicho predicado: las personas e instituciones que
socorren a los mendigos, y así el aspecto de la catástrofe que quedará en primer
plano será la imposibilidad de esas personas e instituciones para cumplir con su
caritativo cometido y no el incremento del hambre de los indigentes. "Se ha
producido una catástrofe humanitaria" dice "los humanitarios nos sentimos
desbordados" más bien que "está muriendo mucha gente (a nadie se le ocurriría
llamar "catástrofe humanitaria" a la erupción del Vesubio que sepultó a Pompeya),
y nos transmite el pesar del médico antes que la agonía del enfermo, y la
impotencia del funcionario de la FAO antes que el hambre del niño africano. Así
protegidos, ya podemos leer en el artículo las cifras y detalles de la catástrofe sin
peligro de olvidar que Occidente hace lo que puede.

Martes 22

14:20

En el debate sobre la pena de muerte brillan por su ausencia dos


importantes argumentos. Uno de ellos, de orden práctico, es que cuando sabes que
si te detienen te pueden condenar a muerte no es probable que, al darte el alto la
policía, decidas entregarte con un suspiro de resignación, y sí que te líes a tiros o
cojas algún rehén, habida cuenta de que, como hemos supuesto que te has hecho
acreedor a la pena capital, seguramente no serás ningún angelito, sino un tipo
violento y acostumbrado a luchar, con razón o sin ella. Esto podría contribuir a
explicar por qué la tasa de delitos contra las personas en los países o territorios
donde está vigente dicha pena no es menor que la que se registra en los demás
sitios.

El otro es histórico y está contenido en Génesis 4,13-15: "Y dijo Caín al Señor:
«[...]He aquí que hoy me echas de la faz de la tierra, y me esconderé de ti, y seré
errante y fugitivo en la tierra, conque cualquiera que me hallare me matará». Y le
dijo el Señor: «De ninguna manera sucederá así, sino que cualquiera que matare a
Caín, siete veces será castigado». Y el Señor puso en Caín una señal para que no le
matara quien le hallase1". El Señor lleva a tal punto su postura abolicionista que no
sólo no mata a Caín sino que prohibe que nadie lo haga, aunque no lo impide
físicamente, y, consecuente hasta el final, no dice "y al que te mate le mataré yo"
sino sólo que será castigado siete veces, con lo que le garantiza la supervivencia
por lo menos hasta haber sufrido los seis primeros castigos. Para los que creen que
la Biblia es un texto revelado por Dios, el mandato es clarísimo e indiscutible; los
no creyentes pueden admirar la sagacidad del Señor en una época en que no había
penalistas ni sociólogos o al menos reconocer que lo de no matar al matador no es
una moda inventada en nuestros días por los pacifistas.
1999, Enero

viernes 1

16:02

El comienzo del Ángelus en castellano está equivocado. "El ángel del Señor
anunció a María". El ángel, según el Evangelio, le dice a María que va a concebir a
Jesús, el cual será llamado Hijo de

---

1 Dixitque Cain ad Dominum: "Maior est poena mea quam ut portera eam. Ecce
eicis me hodie afacie agri, et afacie tua abscondar et ero vagus et profugus in terra; omnis
igitur, qui invenerit me, occidet me". Dixitque ei Dominus: "Nequaquam ita fiet, sed
omnis qui occiderit Cain, septuplum punietur!". Posuitque Dominus Cain signum, ut non
eum interficeret omnis qui invenisset eum.

Dios. Es decir, le anuncia a María algo, pero como el Ángelus no nos dice ese
algo parece como si fuese María la anunciada a otras personas (como en "el portero
del rey anunció a la duquesa"). Debería decir "avisó", "advirtió" o "alertó", aunque
estas palabras puedan parecer menos poéticas.

La segunda frase, "y concibió por obra y gracia del Espíritu Santo", oída
después de la primera, nos obliga a tomar como sujeto al mismo de la frase
anterior y a pensar que fue el ángel quien concibió (si decimos "el portero del rey
avisó a la duquesa y se sentó por voluntad y mandato del Gran Visir" el que se
sienta es el portero, no la duquesa).

En consecuencia, la Iglesia española tendrá que cambiar el texto del Ángelus


por algo parecido a "El ángel del Señor avisó a María / y ella concibió por obra y
gracia del Espíritu Santo".
21:06

Más difícil de arreglar es lo que ocurre con la genealogía de Jesús según san
Mateo y según san Lucas. San Lucas dice que Jesús era "hijo de José, que lo fue de
Heli, que lo fue de Mathat, que lo fue de Leví" y sigue del mismo modo hasta
llegar a Adán.

San Mateo comienza diciendo: "Abraham engendró a Isaac. Isaac engendró a


Jacob. Jacob engendró a Judas y a sus hermanos. Judas engendró a Fares y a Zara
de Tamar. Fares engendró a Esron." Y continúa así, diciendo a veces el nombre de
la madre o de los hermanos del engendrado, hasta llegar a Jesús.

Pues bien, si comparamos ambas genealogías desde Abraham (que es por


quien empieza san Mateo) observamos que sólo coinciden en el nombre del esposo
de María -José- y en los que van desde Abraham hasta David. Así, mientras para
Mateo Jesús desciende de Salomón, Lucas le hace proceder de otro hijo de David
(Nathan), y dice que el abuelo paterno de Jesús era Heli, cuando Mateo considera
que se llamaba Jacob.

Las biblias anotadas suelen salir al paso de este escollo arguyendo que en
Israel se aplicaba entonces la ley del levirato, que obligaba al hermano de más edad
de un fallecido a aceptar a la viuda por esposa y a adoptar a los huérfanos; así
pues, la aparente divergencia se explicaría porque uno de los evangelistas
contempla la ascendencia biológica y el otro la paternidad legal o administrativa.

Pero ese argumento no es suficiente, puesto que, al ser hermanos el padre


biológico y el padre legal de una persona, Mateo y Lucas deberían estar de acuerdo
en el nombre del abuelo, a menos que también dichos hermanos fueran hijos de
viuda, en cuyo caso sus dos padres -biológico y legal- serían hermanos, con lo que
el nombre del padre de ambos debería coincidir en las dos genealogías, y así
sucesivamente.

Para abreviar: aun suponiendo que desde David hasta José todos los
antepasados de Jesús excepto David fueran hijos de viuda (única explicación,
según el argumento del levirato, de que en ese tramo del árbol genealógico no haya
ni una sola coincidencia entre los dos evangelistas) el número de antepasados de
Jesús desde David debería ser exactamente el mismo en ambas listas, y no es así.
San Mateo da 25 nombres desde David hasta José; san Lucas, en cambio, cita 39.
Para hacerse una idea de lo que esto representa, supongamos que, por término
medio, cada individuo de la lista tuviera 25 años menos que su padre: entonces,
para Mateo, David es 625 años anterior a José; para Lucas, 975 años.

Sábado 2

17:01

La mayoría de las veces que sacan por la televisión a alguien que va


detenido se puede observar que lo han esposado con las manos atrás. Esto es
profundamente cruel, ya que el individuo no puede proteger su rostro de golpes o
miradas, ni limpiarse los mocos, el sudor o las lágrimas, ni rascarse un ojo o
arreglarse el pelo, y si se cae de bruces puede romperse fácilmente la nariz o la
mandíbula. La Ley de Enjuiciamento Criminal especifica que "cualquier detención
debe practicarse en la forma que menos perjudique al detenido en su persona,
reputación y patrimonio" (art. 520. 1o L.E.Cr.) y, vistas las molestias, humillación y
riesgos enumerados más arriba difícilmente puede discutirse esta norma
arguyendo por ejemplo que con las esposas atrás se reduce en un 1% la
probabilidad de que se escape el detenido.

Sábado 19

23:22

Nadie hace lo que no quiere. Con la tortura no te fuerzan a hacer lo que no


deseas sino a desear hacer lo que quieren que hagas, que es peor. Porque si ya te
cogen la mano con la pluma y te la llevan a la fuerza para firmar no puedes decir
que estés haciendo lo que no deseas porque en rigor no lo estás haciendo tú. Cada
cual opone su pauta de comportamiento, más o menos coherente, más o menos
previsible, más o menos desarrollada, a las de los demás. Algunas pautas son
ampliamente cooperativas y otras nada en absoluto, con muchos grados
intermedios.

Cuando el voluntario rescata de las llamas al niño lo hace porque, por lo que
sea, le resulta más insoportable la inacción que el temor a perecer (temor cuya
fuerza guarda una relación, más o menos estrecha pero inevitable, con la idea que
de la cuantía del riesgo se haga el individuo), y nadie debe culparse por no sentir
los estímulos necesarios para actuar de esa forma, como no debe culparse por no
sentir los estímulos necesarios para actuar de esa forma, como no debe culparse
por su aspecto físico o por su pasado.

Eso no nos impide envidiar la generosidad ajena como el que envidia la


belleza de su vecino o la infancia que tuvo, pero cambiar de improviso el carácter,
la ética, el patrón de conducta que hemos alcanzado en un momento dado puede
ser más difícil que mejorar nuestro físico o incluso tan imposible como alterar
nuestro pasado. Todo el mundo puede evolucionar, y hasta progresar, influido por
el entorno, pero el ritmo y el estilo de ea evolución son diferentes para cada
individuo y es inútil intentar imponérselos desde fuera, como suele hacerse.

Lunes 21

4:33

El amor, como la muerte, cuando es no es, y cuando no es, menos aún.

[La gobernabilidad]

[Sociópatas]

[Ludópatas]

[Los símbolos que se comen a lo representado]

[Materialismo]

Lo de la regeneración de los presos entra en flagrante contradicción con el


hecho de que se siga tolerando que haya prisiones.

Si a la democracia le quitamos la nota de racionalidad se queda vacía de


contenido. Para un demócrata no debería ser fácil de digerir lo de tener un líder. Y
si es carismático, peor aún.

En todo caso, para los que creen que la Biblia es un texto revelado por Dios a
los hombres el argumento de que Mateo sigue la línea biológica y Lucas la legal
representa un esfuerzo adicional: ¿por qué va a dictarle Dios al uno la una y al otro
la otra? , o, si se supone que la revelación es indirecta, esto es, que vivimos en
perpetua contradicción: tan pronto espoleamos al caballo como derribamos al
jinete.

Viernes 25

16:22

¿Se ha puesto el guardia a dirigir el tráfico a despecho de los semáforos


porque se ha formado un embotellamiento fuera de lo común o se ha formado un
embotellamiento fuera de lo común porque el guardia se ha puesto a dirigir el
tráfico a despecho de los semáforos?, ¿aumenta sin cesar el Estado el ámbito y el
alcance de las decisiones que toma sin consultarnos porque cada día somos menos
responsables o somos menos responsables cada día porque el Estado aumenta sin
cesar el ámbito y el alcance de las decisiones que toma sin consultarnos?, ¿tememos
poner a Fulano al corriente de lo que pasa porque se está volviendo paranoico o se
está volviendo paranoico Fulano porque tememos ponerle al corriente de lo que
pasa?, ¿se arma más y más a los ejércitos porque las guerras son cada vez más
inevitables o son las guerras más inevitables cada vez porque se arma más y más a
los ejércitos?

Domingo 27

16:19

La palabra inglesa leader significa conductor, guía, igual que el Alemán


führer, y carisma es don gratuito que Dios concede en abundancia a una persona.
Así pues, líder carismático podría ser, o bien alguien a quien Dios ha concedido
con largueza el don gratuito de guiar a otros o bien una guía que Dios ha
concedido gratuitamente a alguien (y en abundancia, es decir, que guiará mucho).
Ninguna de estas ideas parece demasiado democrática, y en cambio ambas se
ajustan perfectamente al concepto de monarquía. Véase, si no, cómo se produce la
fundación de la monarquía israelita. El sacerdote...
CINCUENTA Y DOS PREGUNTAS SIN RESPUESTA

CUADRO ÚNICO

[Viandante 1.°, Viandante 2.°, Portero, Taquillera, Camarero, Parroquianos,


Ciego, Conferenciante, Uno del público.]

[La acción empieza en la calle, cerca de la Casa de Galicia en Madrid.]

Viandante 1.°: ¿Qué hora es, por favor?

Viandante 2.0: ¿Cómo sabe si llevo reloj?

Viandante 1.°: ¿Es usted gallego?

Viandante 2.0: ¿Se lo parezco?

Viandante 1.°: ¿Y si le dijera que yo soy de Santiago?

[Entretanto han llegado frente a la puerta de la Casa de Galicia. Los dos


están sacando de sus carteras los carnets de socio. A la entrada está el Portero].

Portero: ¿Los señores son socios?

Viandante 2.0: ¿No ve los carnets?

Viandante 1.° [al Portero]: ¿A qué hora es la conferencia de filosofía?

Viandante 2.0 [al Viandante 1.0]: ¿Es que habla hoy el doctor Vasconcelos?

273

Portero: ¿Tienen entradas para la conferencia?

Viandante 1.°: ¿Hay que pagar entrada aunque seas socio?


Viandante 2.0: ¿Dónde está la taquilla?

Portero [inclinándose un poco hacia adelante porque una columna de la


fachada le estorba la vista de la taquilla]: ¿Está abierta ya?

[El Viandante 2.0 va hasta la taquilla].

Taquillera [que ha visto llegar juntos a los dos Viandantes]: ¿Dos?

Viandante 2.0 [cogiendo las entradas y entregando un billete de 5.000


pesetas]: ¿Ha venido mucha gente?

Taquillera [al ver el billete]: ¿No tiene más pequeño?

Viandante 2.0 [encogiéndose de hombros]: ¿Y qué quiere que le haga?


[Recoge el cambio].

[Los dos Viandantes muestran sus entradas al Portero, que las pica, y entran
en el hall. A la derecha se ve una barra con un Camarero y algunos Parroquianos.
Una gran pancarta anuncia: "RIBEIRO 150 PESETAS"]-

Viandante 1.°. ¿Le parece que tomemos un Ribeiro mientras llaman para la
conferencia?

Viandante 2.0 [al Camarero]: ¿Tiene Ribeiro?

Camarero [llenando dos tazoncillos]: ¿Quieren un trocito de empanada?

Viandante 1.°: ¿Empanada a estas horas?

Viandante 2.° [al Viandante 1.0]: ¿Y hace mucho que falta usted de Santiago?

Viandante 1.°: ¿Se acuerda usted cuando aquel escándalo, que tuvo que
intervenir el Obispo, de aquel chantre de la Catedral con la señora que le limpiaba
la casa?

Viandante 2.0: ¿Se refiere a don Genaro?

Viandante 1.°: ¿Se marchó por fin?

Viandante 2.0: ¿Y qué otra cosa podía hacer?


Viandante 1.°: ¿Y ella se fue con él?

Viandante 2.0: ¿Cree usted que estaba loca?

Viandante 1.°: ¿Pero no decían que estaba tan enamorada de él?

Viandante 2°: ¿Enamorada? ¿Está de broma?

Viandante 1.°: ¿Pues qué buscaba ella entonces?

Viandante 2.0 [levantando la voz]: ¿Cómo que qué buscaba? ¿Usted sabe la
cantidad de tierras que tenía don Genaro sumando todas las parcelas y parcelillas
que fuera comprando por todo el término y otros colindantes? ¿Le parece poco lo
que buscaba?

[El Viandante 1.° se queda cohibido ante la excitación del Viandante 2. 0. En


ese momento entra en el hall un Ciego vendiendo lotería].

Ciego: ¿Quieren cupones?

Viandante 1.° [al Ciego]: ¿Tiene alguno que acabe en 3?

Ciego [que no lo sabe]: ¿Puede cogerlo usted mismo, si es que lo llevo?

Viandante 1.° [cogiendo un cupón de la solapa del Ciego]: ¿Cuánto vale?

Ciego: ¿No lo pone en el cupón?

Viandante 1.°: ¿Tiene cambio de 2.000?

Ciego: ¿Le importa que se lo dé en monedas de 100?

Viandante 1.°: ¿Acaso no es dinero igual que los billetes? [Coge el cambio].

[En ese momento suena un timbre].

Viandante 2.0: ¿Es la conferencia?

[Los dos Viandantes entran en el salón de actos. En la tarima está el


Conferenciante].
Conferenciante: ¿Han podido sentarse todos? [Hace una pausa hasta que se
hace silencio] ¿Creen ustedes, como aquel gran filósofo de principios de siglo, que
el verdadero problema de la filosofía es su radical incapacidad para plantear un
verdadero problema, para formular una auténtica pregunta? ¿O cuál sería, en caso
contrario, la pregunta fundamental, la cuestión esencial que justificaría la decisión
de interrogar al mundo sobre el sentido de nuestra pertenencia a él o de
interrogarnos a nosotros mismos acerca de la naturaleza de aquél? ¿Sería la de
"¿Por qué el ser y no más bien la nada?", del filósofo alemán Martín Heidegger, o
más bien esa otra, más conocida (y más comprensible para la mayoría de la gente)
que reza: "¿Qué somos, de dónde venimos, adónde vamos?"?

Uno del público: ¿Y eso quién lo dijo?

Conferenciante [visiblemente molesto]: ¿Le importaría esperar al turno de


preguntas, por favor?

TELÓN
LABERINTO 3D

Laberinto 3D es un juego de habilidad al que pueden jugar indistintamente


ciegos y videntes.

Se compone de una caja cuadrada, un pequeño cilindro metálico y un imán.


La caja es opaca y de baja altura y está cerrada por todas partes salvo por dos
pequeñas aberturas circulares. Para jugar se introduce el cilindro por una de las
aberturas de modo que se le pueda guiar con el imán por el interior de la caja.

El objetivo del juego es hacer que la ficha cilindrica salga por la otra abertura
sorteando los distintos obstáculos que hay en el interior de la caja. Como estos
obstáculos no están a la vista, el jugador tendrá que guiarse por el tacto (al sentir la
resistencia que el imán opone al desplazamiento cuando el cilindro se ha topado
con un obstáculo interior) y el oído (al oír el ruido que hace la ficha al chocar con
las paredes del laberinto o al caer al suelo de la caja, cosa que ocurre cuando el
imán-guía se aleja demasiado).

Aunque este laberinto se ideó pensando en los ciegos, es posible que venga a
llenar también un vacío en el campo de los juegos de destreza e inteligencia en
general. En efecto: los únicos laberintos que estamos acostumbrados a ver (en la
sección de pasatiempos de los periódicos, por ejemplo) nos ofrecen una visión de
conjunto que no tiene el que está metido en un laberinto "de verdad", quien sólo ve
lo que en cada momento tiene delante, detrás, a la derecha y a la izquierda, y que
para progresar tiene que guardar en la memoria los errores cometidos para no
repetirlos e irse haciendo así su composición de lugar. Nuestro laberinto, además,
está a oscuras, lo cual permite a quien goza del don de la vista comprender algo
mejor lo que supone carecer de ella.

Para quien no consiga resolver el juego se adjunta una lámina de cartulina,


con la solución impresa en relieve, que puede superponerse a la caja del juego para
recorrer sin vacilaciones el trayecto correcto.
PEDONOLOR

(ROPA INTERIOR MASCULINA Y FEMENINA

ANTIVENTOSIDAD)

Si ha observado usted que las producciones gaseosas de su propio intestino


le complacen tanto como le desagradan las ajenas, sepa que no tiene por qué
avergonzarse. El olfato es, entre otras cosas, una sofisticada ventana del sistema
inmunitario que detecta los iones ajenos a nuestro organismo y los señala como
cuerpos extraños potencialmente peligrosos de los que, en la duda, es preferible
alejarse. En cambio, los iones propios son bienvenidos, ya que lejos de hacernos
daño, pueden servirnos, con la debida práctica, como indicadores que nos
permitan valorar distintos aspectos de nuestra digestión y así efectuar las
correspondientes correcciones en la ingesta diaria.

Está claro que no podemos obligar a nadie a soportar mis olores más
íntimos, y además, aunque ocasionalmente podamos escucharnos en el anonimato
-ha de haber al menos tres personas-, si abusamos de esa momentánea impunidad,
los demás, por un proceso deductivo y estadístico, acabarán comprendiendo que
somos nosotros los responsables de los distintos episodios de pestilencia, y de
nada nos servirá negar cínicamente o intentar que las víctimas se lo tomen a risa:
nuestro prestigio social habrá sufrido un daño difícilmente reparable. El amor
paternal, filial o de pareja, así como la amistad sincera, podrán a la larga -y no
siempre- perdonar estos deslices, pero nunca en el momento mismo en que se
producen.

Sin embargo, contener el impulso de emitir gases es, aparte de desagradable,


notoriamente insano, y algo de razón tiene el refrán castellano (más conocido en
Hispanoamérica que en España) que advierte: "Más vale una amistad perdida que
una tripa reventada". Por otra parte, son muchas las ocasiones en que no podemos
ausentarnos constantemente para dar salida a estos naturales impulsos: piénsese
en las recepciones oficiales, las audiencias de la realeza o del Vaticano, o
simplemente el trabajo cotidiano en un Ministerio o en un banco, sobre todo en el
caso de un alto cargo, cuyas constantes visitas a los servicios no pasarían tan
inadvertidas como las de los empleados de rango inferior.

Y ahí es donde interviene PEDONOLOR®. Las prendas de PEDONOLOR®


tienen, en la parte trasera inferior, millones de cristales de óxido de hierro que, en
contacto con el anhídrido sulfuroso responsable del olor de las ventosidades, da
lugar a sulfuro de hierro más agua según la fórmula

SH2 - fFeO->SFeH hH2O

Estos dos, precipitados (sulfuro de hierro y agua) son inodoros: el sulfuro de


hierro, más conocido como pirita, de color amarillento, nunca falta en las
colecciones de minerales. Para más adelante se contempla la fabricación de
prendas PEDONOLOR® que, en el momento en que se produce la ventosidad,
desprendan olor a jazmín o lavanda.

Pero para eso habrá que esperar a que, gracias a PEDONOLOR®, la emisión
de gases en público haya dejado de merecer la repulsa social.
PROBABILIDAD DE TENER UNA ENFERMEDAD

para un sujeto que haya dado positivo en un test de dicha enfermedad:

PREVx(1-TFN)

-----------------------------------------------------------

{PREV x (1-TFN)} + {(1-PREV) x TFP)}

Un sujeto que haya dado negativo en un test de dicha enfermedad:

PREVx(TFN)

-----------------------------------------------------------

{PREV x (TFN)} + {(1-PREV) x (1-TFP)}

PREV: Prevalencia, frecuencia observada de la enfermedad dentro de la


población considerada.

TFP: Tasa de falsos positivos, frecuencia estadística de personas que no


padecen la enfermedad pero dan positivo en el test.

TFN: Tasa de falsos negativos, frecuencia estadística de personas que


padecen la enfermedad pero dan negativo en el test, sensibilidad del test.

Estas variables, en las fórmulas, no están expresadas en porcentaje, sino en


valor absoluto, 100 veces menor (0.01=1%; 0,035=3,5%; 0,00001=0,001%, etc.), con el
que se opera con más sencillez. Una vez completadas las operaciones, si se quiere
saber el porcentaje bastará con multiplicar por 100 las cifras obtenidas.

Se está terminando un pequeño programa informático que efectúa el cálculo


con sólo introducir las tres variables.

ALEGATO CONTRA LA PORRA

Felipe:

Entro en materia.

A nadie que se haya peleado alguna vez se le ocurriría elegir una porra para
atacar o defenderse. Al ser flexible, no resulta un obstáculo mecánico eficaz para
frenar la masa corporal de un adversario; los porrazos no nos causan un dolor tan
vivo que nos corte el resuello, ni unos cuantos trastazos, incluso en la cabeza,
dados al azar en una contienda o una carrera, bastan para reducir a una persona.
La porra sólo sirve en realidad para minar, castigar y humillar a quien ya se tiene
neutralizado y sin escapatoria.

La porra estorba para correr, tanto si se intenta pegar mientras se corre como
si se lleva colgada, y el poder correr es esencial en cualquier situación de violencia.
Si el guardia la esgrime a pie quieto se la arrancan a menudo de las manos, a no ser
que se la asegure a la muñeca con la correílla, en cuyo caso al tirar de la porra suele
ir detrás el guardia entero; dicho sea con el mayor respeto a unas personas que, en
general, provienen de situaciones de paro e incultura de las que no son
responsables, se ven luego abocadas a bregar con episodios de barbarie no
previstos en su educación familiar y terminan con demasiada frecuencia bajo la
tierra que no pudieron labrar.

La porra y lo que representa, no sólo como símbolo para todos sino también
como muda instrucción impartida a quien reglamentariamente tiene que llevarla,
induce, a corto y a largo plazo, a situaciones de violencia que se prestan a la
escalada. Sin porra, el guardia usará más la cabeza.
La porra es el símbolo de una clase de autoridad que no es compatible con la
democracia. La pistola puede que sea un arma de intimidación desde luego
terrible, pero plantea más bien en todo caso la alternativa de ser o no ser, y no la
ominosa, de libertad o esclavitud (se aniquila al enemigo, se aporrea al esclavo). La
porra no se usa para vencer sino para "patear al vencido", como se dice en el
póquer.

Empleada durante el tiempo necesario sobre una persona inmovilizada o


acorralada, la porra hace desfallecer al individuo, atontándolo y magullando
dolorosamente todo su cuerpo, pero sin la "bronca" médico-legal y periodística de
un látigo o una picana. Pero sobre todo es una afrenta permanente y reiterada;
usada así, ciertamente, la porra es demoledora, pero lo que es para la defensa
personal o para reducir un foco de resistencia resulta nula o contraproducente, a
pesar de que se la suele llamar "la defensa".

No se puede pegar, mejor dicho, sólo se puede uno pegar en las peleas o
reyertas, con las consecuencias legales ordinarias. Puede uno "pegarse con" pero no
"pegar a", sea policía o no. Pues bien, la porra está concebida para pegar a
cualquiera y no para pegarse con nadie. Es un artefacto cobarde, tan humillante
para su portador como la antigua capucha de los verdugos.

El policía debería en todo caso dejar para los demás cualquier iniciativa en el
quebrantamiento de la ley y asumir por su parte las de reposición del estado de
legalidad, sin mezclarse para nada en luchas ambiguas ni dedicarse a ahuyentar,
como el que canea ganado, a grupos casi siempre heterogéneos que como tales
grupos no pueden delinquir, por no ser sujetos de derecho.

La supremacía de un grupo de policías con relación a un grupo donde hay


personas que quebrantan la ley no podrá procurarse nunca dando vergajazos a
diestro y siniestro, sino mediante el número, la cohesión del grupo, la firmeza,
claridad y razón de sus palabras y acciones y la última garantía de defensa
personal que proporciona la pistola. Cuando no puedan, de este modo, restablecer
la legalidad, deberán replegarse, pedir refuerzos y despachar con sus
comandantes.

Los misiles son espectaculares como instrumentos de agresión, pero en la


práctica su papel es menos importante que el de la porra.

El misil sólo mata una vez: la porra nos mata a diario (véase texto de A.
García Calvo en que, criticando un artículo de periódico, muestra cómo, con el
terror y la fascinación de la muerte cósmica total, se eclipsa y camufla el otro terror
de la destrucción terrenal diaria y de la muerte, y el sufrimiento individual o de
grupos parciales; lo mismo piensa Rafael Sánchez Ferlosio desde posiciones que no
pueden llamarse pacifistas). Así pues, ya que cuesta tanto trabajo quitar por arriba
el misil de la cadena de violencias, eliminemos al menos el eslabón de abajo: la
porra.

Su supresión sería un acto claro y simple que todo el mundo podría


comprender.

Resultaría una adquisición permanente que difícilmente nos dejaríamos


arrebatar por futuros gobiernos. La exigencia popular de su eliminación podría
extenderse y constituiría una medida muy precisa del grado de civismo de los
distintos gobiernos del mundo. ¿Con qué cara y con qué argumentos oponerse, en
un Parlamento, a una propuesta así? Y además, dentro de las cosas un poco
amplias y generales que en este momento puedan hacerse, la supresión de la porra
es seguramente de lo más barato, cosa importante, y es una medida que no precisa
consulta con ningún otro país. Y si la porra es un símbolo, abolirla también lo es.

El hecho de que fuera precisamente España, con su tradición de noches


toledanas, quien tomara una iniciativa tan firme en el tácito debate de fondo
("pegar o no pegar"), podría estimular la imaginación de los políticos en que aún se
pueda confiar. Si se imagina una España sin porras se ve que tal idea pertenece a lo
que hay de común en las mejores aspiraciones de socialistas, anarquistas,
cristianos, etc.

Si, en cambio, no se suprime la porra, no se podrá apostar muy fuerte por la


seguridad que ofrezcan comisarías, cuartelillos y prisiones para los delincuentes y
no delincuentes.

La situación de nuestro país es singular, con sus diez millones de votos


sosteniendo en cierto modo el momento presente de la política del gobierno, ¿por
qué, pues, no invertir una parte de ese capital de confianza en proporcionar a todos
un alivio duradero, haciendo verdad las palabras del poeta?:

"Siset, ¿que no veus l'estaca

on estem tots lligats?

si no podem desfer-nos en
mai no podrem caminar. [...]

Bon cert se' que esta' podrida

pero es que, Siset, pesa tant

qu'a cops la força m'oblida;

tornara a dir el teu cant:

Si estirem tots, ella caura'

i molt de temps no pot durar:

segur que tomba, tomba, tomba

ben coreada déu ser já.

Si tu l'estiras fort d'aquí

y jo l'estiro fort d'allá

segur que tomba, tomba, tomba

i ens podrem alliberar"?

(Lluis Llach: L'estaca)

[Siset, ¿no ves tú la estaca/donde estamos amarrados?/si no podemos


deshacernos de ella/jamás podremos caminar. [...] Bien sé yo que está
podrida/pero, Siset, es que pesa tanto/que a veces las fuerzas se olvidan de mí;
/vuelve a decirme tu canto: //Si estiramos todos, ella caerá/que mucho tiempo no
puede durar/seguro que cae, cae, cae/bien carcomida debe de estar ya./Si tú estiras
de ella fuerte de aquí/y yo lo hago fuerte por allá/seguro que cae, cae, cae/y nos
podremos liberar]

Un abrazo,

Chicho

Madrid, veintiséis de enero de 1984.

SOBRE LA OTAN

A mí no me basta con que Caro Baroja haya desavalado la carta de "medio


centenar" de intelectuales pidiendo el sí a la OTAN, ni con que "un centenar" de
intelectuales diferente haya pedido lo contrario. Necesito atender a las ideas
mismas, olvidando lo que "mis conciudadanos podrán entender".

No me gustan las ideas con aval. En un anuncio de la tele te venden la


palabra de Dios (una Biblia) y se apresuran a asegurar que está avalada por
prestigiosos eruditos y doctores de la Iglesia. Yo en la primera carta he visto lo
siguiente:

1) Se supone que en nuestra "vida democrática" se da un "funcionamiento


normal".

2) El "sentido unívoco del no" no hay quien lo modifique, ya que la palabra


lo dice: no.

3) La abstención no se adultera ni a tiros -literalmente-, y además está


tratada en la carta de pasada y como cosa sabida (después de haber dicho "por
último"), cuando probablemente sea el dilema central de todo referéndum (to be or
not to be).

4) El Gobierno, en su pregunta, no habla para nada de perpetuación de los


yanquis. Si ustedes tienen información convincente de que ese es el dilema de
fondo, deben comunicarlo y explicarlo, pero es equivocado pretender que el mero
prestigio de las firmas nos convenza, ya que el nombre no hace la cosa y, si la
hiciera, el noventa por ciento de los firmantes tienen una escasísima afición,
información y cualificación políticas. El diez por ciento restante se ha equivocado y
precipitado esta vez, pues ha aceptado la torpe adhesión de ese otro noventa, un
texto chapucero, mal construido y con palabras pedantes (habiendo buenos
periodistas y escritores, como Guelbenzu, Pradera y Ferlosio, y profesores de
varios tipos) y el tremendo patinazo con Caro Baroja.

5) El voto de castigo, con tanta pirueta, se puede convertir en uno de


premio, y tampoco es eso. Si mi compañero de banco, de derechas, se adelanta a
decir que 'Colón descubrió' América, o que quiere que haya recreo en vez de
rosario, seré muy tonto si digo que prefiero el rosario o que Atahualpa descubrió
Europa. Sería antidemocrático, ya que yo me estaría esforzando en diferenciarme
allí donde lo natural es coincidir, al menos por mi parte.

6) Tal vez los firmantes (al margen de lo anterior) crean que de verdad
España puede entrar en la OTAN (esto es, puede modificar con su presencia este
organismo). Creo, a despecho de eufemismos, que es la OTAN la que en todo caso
entrará en España.

Y a eso me opongo.

REFERÉNDUM OTAN

Por circunstancias que escapan al control de todos, un referéndum


convocado para determinar una cuestión central de la política exterior española,
como es la permanencia o salida de España en la OTAN, ha creado un estado de
confusión e incertidumbre que puede acarrear consecuencias indeseables para el
normal funcionamiento de nuestra vida democrática. En principio, cualquier
respuesta que proceda de ideas o convicciones acerca de la política exterior
española es pertinente. Por el contrario, nada tan censurable como los intentos de
adecuar esa respuesta a las torticeras maniobras de algunos grupos resueltos a
utilizarla para fines espúreos a costa de los intereses de la ciudadanía.

Entre otras cosas, tal desfiguración del referéndum modifica el sentido


unívoco del no, defendido hasta el presente de manera exclusiva por los
movimientos pacifistas y grupos de izquierda y usurpado ahora por sectores
reaccionarios. Recordamos que el dilema planteado por el gobierno sólo da a elegir
entre la permanencia de España en la OTAN y la salida de esa Alianza con la
perpetuación del Tratado Bilateral con Estados Unidos. Ante tal disyuntiva
creemos sin duda preferible un pacto múltiple, tal como el que ofrece la OTAN, a
otro bilateral, tal y como establecen los acuerdos con Estados Unidos.

Por último, y a despecho de las evidentes contradicciones y culpables


errores de los dirigentes socialistas en este y otros asuntos, consideramos que el
llamado voto de castigo, en este referéndum, es impropio de quien tenga un recto
sentido de las responsabilidades ciudadanas.

A la vista de estas consideraciones, y por cuanto la abstención ha quedado


adulterada por el burdo oportunismo de la derecha, solicitamos de la ciudadanía
un voto afirmativo en el próximo referéndum convocado para el 12 de Marzo.

"INDIGNACIÓN EN ESPAÑA POR EL ERROR EN EL ÚLTIMO TITULAR


DE EL PAÍS"

Pongo entre comillas el título de esta posible carta porque por desgracia, con
lo embotados que andamos todos, dudo que a la mayoría de los lectores de "El
País" les haya chocado siquiera el titular máximo-primera plana, lugar preferente,
cuerpo mayor-que edita el número 3.242. Reza así: "Indignación en Francia por el
error en el último atentado de los GAL". Para empezar, por el tono parece que dice:
"Indignación en el sorteo de la Lotería Nacional porque uno de los huérfanos del
Colegio de San Ildefonso se trabó al cantar la bola de las decenas". Pero, además,
como dice "el error", se supone que, si no fuera por eso, el atentado podría haber
sido "un éxito", aparte de que la población francesa se ha indignado sólo por "el
error", y no por el atentado en sí.

Estamos tan hechos a que nos exijan y a exigir eficacia que la pedimos hasta
en lo más adverso, como el forense que asistió a la ejecución del pobre Jarabo, que
al ver que el corazón del ajusticiado se empeñaba en latir más de lo acostumbrado
después del garrote, le dijo al verdugo: "Haga usted el favor de matar bien". Le
debía haber contestado: "Mejor hago yo mi trabajo que usted el suyo"

.
FOMENTO DE EMPLEO

(Madrid, 18 de febrero de 1993)

1. La legislación vigente sobre contratos que se acogen a la modalidad de


fomento del empleo ofrece a las empresas la cómoda e inédita posibilidad de
revisar dichos contratos cada seis meses, como contrapartida a la función social de
reducir, aunque sea momentáneamente, la tasa de desempleo.

2. En compensación a esta facilidad, se establece, y la jurisprudencia reciente


del Supremo confirma (ver anexo), que toda empresa que, aprovechando el escaso
control que existe de hecho sobre la contratación, haga un uso fraudulento de la
modalidad de fomento de empleo, aplicándosela a quien no figure como
desempleado en la Oficina de Empleo (con lo que engaña a la Administración al no
reducir la carga que ésta soporta en la cobertura del paro y perjudica al contratado
al escamotearle las indemnizaciones que de ser fijo le corresponderían en caso de
resolución de contrato), venga obligada a considerarlo como fijo de plantilla, de
forma que, al menos, le resulte más difícil y costoso despedirlo, y aumentar con
ello la tasa de desempleo, en sentido opuesto a lo que el legislador pretendió con la
modalidad de contratación citada.

3. Yo fui contratado según dicha modalidad pese a que mi nombre nunca ha


figurado en la Oficina de Empleo, pero Personal, en lugar de remediar la chapuza
inicial reconociéndome de una vez por todas y de modo explícito la condición de
fijo, pretende contra todo derecho resolver mi contrato, contradiciendo así de
forma flagrante las recientísimas promesas de la Dirección sobre mantenimiento de
los puestos de trabajoque la perspectiva de huelga le arrancó.

CONTRA MIRÓ

(Cartas al director)

No importa que Pilar Miró adulara (fue a Felipe). No importa que


manipulara la información (fue en beneficio del Gobierno, y por echar un capote a
Amedo, que si asesinó, lo hizo para librarnos de los asesinos de ETA). No importa
que machacara a un señor como Luis de Benito, que intentó evitarlo (no era
«progre», ni intelectual). No importa que imponga su voluntad en TVE por
cojones, dicho por ella. No importa que, infatuada, se haya jactado de todo esto.
No importa que concediera a una película suya la mayor subvención,
proporcionalmente, que se ha concedido en ese ámbito. No importa que haya
vendido a la Sociedad General de Autores su capacidad de decisión, y que haya
salido elegida como no sé qué en esta entidad por el procedimiento de figurar en
todas las listas que se podían votar (debe de ser esta la forma que, «en
democracia», adopta la figura fascista del candidato único). No importa que
malverse caudales públicos en su propio beneficio, jactándose también de esto, ni
que se limite a considerarlo como un «error contable» que amenaza con corregir en
el futuro camuflando mejor sus gastos personales, dicho por ella en el Congreso de
los Diputados. No importa que reparta premios y subvenciones entre sus «fans» (o
es justamente lo que importa, pues «beneficia al cine español»). No importa que,
con nocturnidad, haya vampirizado ávidamente la dirección de un doblaje, siendo
ya directora general, en desleal competencia respecto de sus compañeros de
profesión. No importa, en suma, que se favorezca a los «amiguetes» y se aplaste a
los «enemigotes». Esto es lo que, a mi juicio, se desprende de la carta de
solidaridad con Pilar Miró firmada por el señor Asura, el señor González Trueba, el
señor Martín Patino, el señor Manuel, la señora Belén, el señor Diego y otros
iconos.

Y no me vengan con que hay otros latrocinios de Estado (es decir, que
utilizan como arma, no la navaja o la pistola del atracador, sino todo el poder del
Estado, sostenido por miles de armas) mucho más gordos y que con este se intenta
tapar aquellos, ya que, como los hechos están demostrando ya, tirar de cualquier
extremo de la descomunal manta da bastante resultado, al menos informativo. Lo
contrario sería como pretender que se archive el «caso Amedo» sólo porque
sabemos que no es ni con mucho el mayor culpable de los asesinatos cometidos
por el GAL.

Déjenme, por último, aclarar dos cosas. Hay, entre los firmantes de esa carta
cuyos nombres ha publicado la prensa, algunas personas a las que en otros
aspectos aprecio, como González Trueba, Patino y Juan Diego, aunque a los dos
últimos los conozco menos. Me ofrezco a darles personalmente toda clase de
explicaciones adicionales de mi creo que clara postura, siempre, naturalmente, que
estén a la recíproca. Pero no podía, sólo por amistad, hacer la vista gorda, como
han hecho ellos con Miró. Tampoco la hice, cuando la carta de la OTAN, con
personas más allegadas, como Pradera y Ferlosio, y eso que ellos no se pringaban
(Ferlosio, por cierto, acaba de rectificar aquella metedura de pata). También me
ofrezco a devolver la parte proporcional del modesto premio de consolación que
hace seis años recibió en San Sebastián la película, de González Trueba y mía,
«Mientras el cuerpo aguante» si, como ahora sospecho, no se le otorgó en
consideración a su calidad (ya me extrañaba a mí) sino por amiguismo.

SISTEMA XYZ

(Pabellones de emergencia)

La tienda de campaña es uno de los hallazgos más importantes de la historia


del hombre y la propia historia, civil y militar, es sencillamente inconcebible sin
ella. De pieles o de tela, nos ha acompañado por desiertos y montañas durante
muchos milenios como alternativa móvil a la choza. Se deja abatir: no hay que
cambiar de horizontes. Aún hoy día, hay grupos humanos habituados a vivir
permanentemente en ellas y que se encuentran algo incómodos si las
circunstancias les obligan a alojarse en un lugar cerrado, rígido, con paredes y
suelo. Otros, como muchos de los peregrinos a La Meca, no desdeñan servirse de
ellas temporalmente, aunque estén acostumbrados a la ciudad o a la aldea. Unos
pocos, finalmente, las utilizan para algún cometido científico, profesional, afectivo
o recreativo, y son gente joven o muy bien entrenada y en un buen momento de
forma física y nutrición. Estos siempre hacen sus planes con gran antelación,
escogen con cuidado los lugares de emplazamiento (cerca de algún lugar donde
abastecerse de agua; siempre que sea posible) y llevan repuestos y herramientas
para hacer frente a los imprevistos que siempre se dan en campo abierto.

Pero a la hora de acoger refugiados, de guerra o de catástrofes, a menos que


se trate de grupos estrictamente nómadas (en cuyo caso probablemente tendrán
sus propias tiendas), el alojamiento masivo en tiendas de campaña supone un
golpe a la dignidad de estas personas entre las que suele haber muchos niños,
viejos y mujeres embarazadas, y casi todos desfallecidos y desnutridos, que de
pronto se encuentran casi a la intemperie, en un lugar dónde apenas se pueden
poner de pie y mucho menos caminar, en alguna vaguada seca que pronto dejará
de estarlo por las lluvias o por los desechos líquidos o semilíquidos de la
muchedumbre. Cuando hace calor, el sol recalienta la tienda sin piedad y la
necesidad de beber agua se incremente en alto grado. Cuando hace frío, uno se
convierte en una estatua inmóvil y atrofiada, arrebujada en la ropa disponible
durante horas y horas, perdiendo calorías en un momento en que son más escasas
y a la vez más necesarias que de costumbre. Allí anidan y procrean con gusto
piojos, pulgas y otros parásitos (las tiendas se van ensuciando inevitablemente y no
hay agua para lavarlas ni siquiera una vez). La tienda de campaña es vulnerable a
los ataques de animales salvajes o a una simple pedrada. Socialmente, para
personas que no se conocen entre sí, supone un coto cerrado proclive a los
conflictos.

¿Por qué, pues, se sigue utilizando preferentemente el sistema de tiendas de


campaña en los campamentos de refugiados, en lugar de instalaciones rígidas?

Una de las razones es sin duda la inercia, y no tanto la mental (que también)
como la de los stock y la de los procesos de producción.

La otra, más difícil de resolver, es que el montaje de pabellones rígidos,


hasta la fecha, requería una variedad de componentes muy compleja y aparatosa,
un considerable allanamiento del terreno, un equipo de técnicos bastante
numeroso (las tiendas, mal que bien, las pueden montar los propios destinatarios),
claveteo, tornillería, tal vez soldadura o taladros eléctricos, un plan cuidadoso (ya
que, una vez establecido el emplazamiento y la distribución interna de un pabellón
es difícil cambiar cualquiera de estos factores), en contraste con el carácter
provisional y cambiante de la situación de emergencia en que se vive y trabaja, y,
sobre todo, un tiempo que casi siempre es vital. La recuperabilidad del material de
estas instalaciones es escasa o nula.

Sistema XYZ@ propone un modelo de pabellones reutilizables, basado en un


nuevo principio constructivo estrictamente modular, que sale al paso de todos
estos escollos.

Sus componentes (que en parte pueden llegar premontados) pertenecen a


menos de diez tipos diferentes, y su almacenamiento es muy compacto, lo que
abarata y acelera el transporte.

No es necesario allanar mucho el terreno, ya que los elementos de apoyo


pueden salvar desniveles de varios decímetros (o más, si se proyecta así). El
montaje es tan sencillo e intuitivo que cualquiera puede hacerlo con sólo ver un
dibujo o una maqueta a escala y utilizando una llave Allen y otra de tuercas: Si los
elementos básicos han llegado premontados, el montaje de pabellones es muy
rápido y aún más el desmontaje, porque los distintos planos de construcción
pueden deslizarse en dirección perpendicular a ellos, permitiendo ajustar las
alturas, anchuras y profundidades de los distintos espacios hasta decidir la
configuración más apropiada (que más adelante podrá variarse de nuevo, si es
necesario).

La limpieza de estos pabellones es muy fácil, cualquier componente puede


retirarse y sustituirse sin necesidad de desmontar ningún otro y el material
generalmente podrá recuperarse en su integridad y reutilizarse exactamente del
mismo modo. La ventilación puede graduarse con facilidad y la
impermeabilización se consigue y restaura fácilmente con simple cinta de embalar.

El refuerzo, en caso necesario, de cualquier parte de la estructura se practica


con la misma clase de elementos que sirvieron para la construcción y es tan
intuitivo y fácil como ésta.
PALABRAS CON LAS CINCO VOCALES (con Rafael R. Costa)

Aceituno

Acuífero

Adulterio

Ahuizote

Aneurosis

Anfineuro

Anticuerpo

Aturdiendo

Aurelio

Aurífero

Autension

Auténtico

Auxitopes

Bandurriero

Beluchistano

Bielorrusa

Bisabuelo

Blusonería

Bribonzuela

Buhonería
Buitreado

Canturrien)

Cedulario

Cefsulodina

Cefuroxima

Celulósica

Centáurico

Centrifugado

Cigoñuela

296

Ciudadelo

Cocleárium

Columpiarse

Computerizar

Comunicable

Comunicante

Concienzuda

Confluencia

Congruencia

Contundencia

Costurería
Cuadernillo

Cuchicheado

Cuestionar

Custodiante

Cynocéphalus

Decanewton

Decuriato

Denticulado

Depurativo

Deucalión

Dicranocerus

Discurseado

Duodécima

Duodecimal

Ecuación

Educación

Educativo

Emulación

Emulsionar

Encáustico

Ensuciado
Entusiasmo

Enunciado

Erupcionar

Escuálido

Esculapio

Escultórica

Escupitajo

Espiculado

Espiráculo

Estimulador

Estuación

Estuario

Eucalipto

Eucrático

Eudoxia

Eufamio

Eufónica

Eufrasio

Eulalio

Eulogia

Euphonia
Euphorbia

Eustaquio

Eustasio

Eutropia

Exajulio

Exanewton

Exaudido

Exhaustivo

Fentounidad

Ferruginosa

Feudalismo

Filougandés

Freudiano

Frumentario

Fuengirola

Funerario

Gatuperio

Gaudencio

Gauderico

Gaudermio

Gerundiano
Gesticulador

Gigasegundo

Globicéphalus

Goizueta

Gubernativo

Habichuelo

Haemóphilus

Hectounidad

Hieróbula

Hierocarpus

Hieródula

Hijuelado

Hipercarburo

Hipotenusa

Hippocamelus

Humanoide

Humilladero

Imperturbado

Impetuosa

Inconmutable

Inerudita
Infernáculo

Jupiterano

Kurdistáneo

Laudermio

Laurencio

Laurentino

Laurífero

Lauríneo

Lectuario

Leguminosa

Leucographis

Lucernario

Luciérnago

Luteranismo

Manipuleo

Manuelino

Manutención

Meditabundo

Megajulio

Meganewton

Megapodius
Menstruación

Metalúrgico

Meticulosa

Micronuclear

Muestrario

Multioferta

Murciélago

Musicadero

Nebulosidad

Necroludía

Neofigura

Neptuniano

Neumático

Neumatosis

Neumonía

Neurálgico

Neuroglia

Neurorraquis

Neutralismo

Nucleótida

Numeración
Obnubilarse

Ocurrencia

Ojituerta

Opulencia

Orihuela

Pandemónium

Parturiente

Patituerto

Paupérrimo

Pecuario

Peliagudo

Pentosuria

Percusionar

Perfunctoria

Peripulmonar

Perjudicado

Persuasión

Persuadido

Persuasivo

Perturbación

Peruviano
Petajulio

Petanewton

Petulancio

Pichagüero

Precaución

Prejurásico

Prelunático

Prelusitano

Prenumantino

Prudenciano

Pterodáctylus

Pudelación

Putrefacción

Putrefáctico

Recapítulo

Recurvirrostra

Recusación

Redargución

Refundidora

Refutación

Reproductiva
Republicano

Repudiado

Reputación

Resucitado

Reumático

Reumatismo

Riachuelo

Rubensiano

Ruiseñora

Rumeliota

Sahumerio

Seculario

Secundario

Secuoia

Sensualismo

Simultáneo

Stramónium

Subdirectora

Subdominante

Subestimado

Sublevación
Subordinaje

Subrealismo

Subvencionar

Sucesoria

Sudoccidental

Sudoriental

Sudorífera

Sugeridora

Supeditado

Superádito

Superiora

Superlativo

Supersónica

Supletoria

Suroccidental

Suroriental

Surrealismo

Terajulio

Teranewton

Tertuliano

Teutónica
Tuberosidad

Turbelario

Ultraligero

Universado

Uperizado

Uratelormis

Uzbekistano

Ventrílocua

Venusiano

Verdulario

Vesiculado

Vestuario

Viceconsular

Zarigüeyo

Zurrapiento
EPÍLOGO

RESUMEN Y AGRADECIMIENTOS

Este proyecto empezó a gestarse hará ya casi ocho años, cuando una
editorial malagueña nos hizo llegar a través de Francisco Cumpián (poeta, editor,
amigo y colaborador nuestro en las lecturas de poesía de La Manuela) su deseo de
publicar la obra de Chicho. En ese momento, sólo se pensaba en editar un libro con
la recopilación que yo ya había hecho hace años de las letras de sus canciones y
poemas.

Además de este material también financié en el año 1997 una grabación


hecha en un recital en directo en el Círculo de Bellas Artes para tener una muestra
de nuestro repertorio bien hecha y con vistas a una futura publicación. Por otro
lado, una amiga nuestra, Lisi Prada, comenzó a preparar, como regalo para
nosotros, una pista interactiva con fotos, montajes de imágenes, algunos videos con
música, etc., para poder incluirla en este CD. A Chicho, en su estilo, no le gustaba
publicar nada suyo. Le daban pudor todo este tipo de historias. Pero en cuanto vio
este trabajo de Lisi le gustó tanto que dejó de poner obstáculos a una posible
edición.

Mientras el interactivo seguía cambiando y ampliándose, Chicho murió.

A partir de entonces empezamos a reunirnos con sus muchos y fieles


amigos, para planear juntos la mejor manera de difundir su obra; pensamos que
ésta debería ser lo más completa posible y ya se pensó en entrelazar todos estos
elementos. Como la pista interactiva se había ido ampliando y transformando con
nuevas aportaciones de grabaciones de actuaciones en directo de los dos, tanto de
música como de poesía, de la introducción de las canciones junto a las imágenes de
la película que hizo con Els Joglars sobre Durruti, de actuaciones con Amancio
Prada y otras muchas cosas, ya empezamos a dividirlo en distintos formatos. Por
un lado un CD del recital del Círculo y por otro un DVD-Video y un DVD-ROM
con el resto de los materiales, aparte de la recopilación de sus letras y escritos.

Desde entonces el trabajo más duro ha sido el de Lisi pasando el CD a


formato DVD añadiendo y quitando cosas (porque la burocracia ha hecho
prácticamente imposible que publiquemos muchas cosas que nos llevaría mucho
trabajo conseguir los permisos), todo esto en sus ratos libres y sin ninguna ayuda.
Estoy segura de que Chicho estaría muy orgulloso de ella por todo su esfuerzo.

Tengo que agradecer especialmente la sensibilidad y la generosidad de


Rodicio, dueño de "La Campana de los Perdidos" de Zaragoza. Y también a Luis
Felipe Alegre, a Amancio Prada, a Paco Poch, a Ginette Lavigne, Gérald Collas,
Jean-Louis Comolli y, también, a Fernando y David Trueba por las facilidades que
nos han proporcionado para poder sacar adelante el DVD. Y cómo no, a nuestro
querido amigo Mariano Marín, gran compositor y arreglista, que nos ha
acompañado al piano en muchas de nuestras actuaciones, incluida la que aquí se
recoge en el CD-Audio del Círculo de Bellas Artes.

Por último, gracias a Luis Francisco García y a Jesús Munárriz que se van a
encargar de que este trabajo vea la luz. A Jesús especialmente también, porque ha
contribuido notablemente a que la recopilación fuera mucho más completa.

Y sólo me queda expresar mi admiración al resto de nuestros amigos que


participan en esta obra, sobre todoa Lisi, con admiración en mi nombre y en el de
Chicho, por su amor, su paciencia, las horas de trabajo, su sensibilidad y todo lo
que ha puesto para sacar adelante esta obra. Sin su trabajo no habría sido posible
su realización.

Rosa Jiménez

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