Sei sulla pagina 1di 5

6.

CONOCIMIENTO Y VERDAD
Problemática
El conocimiento humano, por su proprio valor y sus limitaciones, nos mete frente al problema de la verdad y la
posibilidad de su validez (an sit veritas). Sobre esta base, la natura de la verdad (quid sit veritas) se presenta diversificada en la
historia. La verdad lógica conectaba con las preguntas sobre su estatuto, criterio, modos y estados de la mente. Su relación
con las ciencias de la natura acentúa su perspectiva crítica, ya no metafísica, pues ya no se parte del ente sino del sujeto que
conoce. La crisis del racionalismo moderno introduce nuevas metodologías centradas en lo concreto y la vivencia humana,
como la fenomenología de Husserl, filosofía de la vida (Dilthey), el neopositivismo de Popper, el existencialismo de
Heidegger, el pragmatismo de Peirce, entre otros.

Cuadro histórico [a) Punto de partida; b) contribuciones; c) ventajas y límites; d) crítica en perspectiva realista]
1. Línea realista de matriz tomista
El objeto proprio de la inteligencia es el ser, lo que significa que es potencialmente infinita (Homo quodammodo omnia), pero
en el hombre el conocimiento parte de los sentidos y conoce antes la esencia de los seres sensibles que la de las realidades
espirituales, a las que accede por analogía. Sin embargo, llegar a la verdad no es fácil porque estamos inclinados al mal y al
error, peor es posible siempre y cuando la voluntad no la desvíe de su objeto.
1. Línea cartesiana: la duda metódica y la búsqueda de la certeza
Descartes inicia dudando de todo conocimiento, puesto que los sentidos nos engañan y nos equivocamos al razonar. La
única certeza que tenemos en esta duda metódica es la del hecho de que se piensa, de que hay un yo, un sujeto pensante. De
esta forma el único criterio de certeza será aquello que la mente conciba clara y distintamente. Suprimiendo la verdad objetiva,
se la sustituye por la certeza subjetiva, del juicio.
2. Línea kantiana: el criticismo y la impostación trascendental
El criticismo de Kant busca asegurar la posibilidad de una metafísica, es decir, de la posibilidad de conocer la realidad en
sí y no sólo nuestras representaciones y fenómenos. Al no ser capaces de conocer la realidad en sí (noúmeno), al conocer la
razón aporta algo a lo conocido, en cierto sentido se “construye” el objeto conocido. Si los juicios sintéticos a priori son los
únicos capaces de aportar conocimiento más allá del ámbito de nuestra experiencia, es preciso que la razón posea la capacidad
de interpretar los fenómenos provenientes de la sensibilidad. De esta forma las categorías configuran la realidad tal y como
se nos presenta, lo que hace posible el conocimiento en el hombre, independientemente de la existencia de las cosas en sí.
3. Línea empirista: Locke y Hume
Todo el conocimiento proviene de nuestros sentidos y no se extiende más allá de lo que nos dan a conocer. Aunque
elaboramos ideas complejas, sólo son verdaderas si pueden ser referidas a una impresión sensible. Pero al no tener
conocimiento sensible de la sustancia ni de la esencia de ningún ser, las ideas correspondientes a estas realidades no son otra
cosa que nombres comunes que aplicamos a varios individuos en los que creemos ver alguna nota o propiedad común. La
consecuencia es un escepticismo, en cuanto no conocemos ni la realidad sino sólo las impresiones subjetivas, fenómenos y
apariencias que no sabemos si corresponden con algo existente fuera del propio sujeto.
4. Línea idealista: la búsqueda de una filosofía absoluta en Schelling y Hegel
Hegel no busca una crítica del conocimiento, sino un saber absoluto. En el inicio no hay ni inteligencia que piense ni objeto
pensado. Pensar es iluminar con la luz intelectual el objeto pensado; lo primero es la presencia mental. Identifica el ser y el
conocer, por lo que la teoría del conocimiento será una metafísica: el ser será lo pensado, el objeto fruto del pensamiento.
5. Línea fenomenológica: Husserl
Contra el psicologismo y el cientificismo Husserl propuso atenerse a los fenómenos como aparecen ante el pensamiento.
Prescindiendo de la existencia real de lo conocido se centra en la descripción de la esencia, renunciando también al estudio
de las causas. Lo importante es sólo la descripción del dato de conciencia, así se evita el subjetivismo y se llega a la verdad
objetiva.
6. Línea histórico-existencial: Heidegger
[Ver Cuadro sistemático n. 4]
7. Esbozo sobre la situación actual; diagnóstico y propuestas de la encíclica Fides et Ratio
La crisis del pensamiento ha derivado en varias formas de agnosticismo y de relativismo, que han llevado la investigación
filosófica a perderse en las arenas movedizas de un escepticismo general. La filosofía debe recuperar con fuerza su vocación
originaria, como la desarrollada por Santo Tomás, pues la síntesis entre la exigencia de la razón y la fuerza de la fe supo
defender la novedad de la Revelación sin menospreciar el camino de la razón. Ante la crisis de sentido es preciso que la
filosofía encuentre su dimensión sapiencial y un alcance auténticamente metafísico, capaz de trascender los datos empíricos
para llega, en su búsqueda de la verdad, a algo absoluto, último y fundamental.

Cuadro sistemático
1. Problema crítico, legítimo o seudoproblema; impostación del problema; bases para resolverlo
El núcleo del problema crítico es si consta con certeza, a través de una reflexión filosófica, que el hombre es capaz de
conocer la verdad. No hay que reducirlo simplemente al descubrimiento de una primera verdad indudable y que pueda servir
de principio para deducir todas las verdades metafísicas. Tampoco se reduce al problema del mundo exterior, pues sólo se lo
plantea si se ha empezado la crítica por la duda que rompe todas las comunicaciones del espíritu con el mundo y deja el
pensamiento ante sí mismo. Por otro lado, no se refiere al problema del origen de las ideas, pues si se encuentran en el espíritu
humano, se trata de un problema psicológico. Por último, no consiste en buscar cómo son posibles las ciencias y la metafísica,
pues las ciencias presuponen ya un conjunto de juicios verdaderos. Debemos analizar por tanto cuál es el valor del
conocimiento humano, dar un juicio de valor motivado por las diversas formas del conocimiento humano. Para poder entrar
correctamente en el problema crítico es preciso iniciar con el conocimiento, puesto que cualquier reflexión sólo es posible
por actos directos del conocimiento, y es ella misma un modo de conocimiento.
2. Confronto realismo-escepticismo: solución del escepticismo y fuerza veritativa de la propuesta realista al problema del conocimiento
El escepticismo comienza desde los filósofos griegos, teniendo a Pirrón como forma extrema, y se desarrolla en toda la
historia de la filosofía. Su característica fundamental es la profesión de la incerteza, negación de las realidades trascendentes,
movimiento de disolución de un dogmatismo, en cuanto toma forma a partir de la teoría “dogmática” a la que se opone.
Tipos: Moral práctico: Pirrón enseñaba que había que vivir en la ataraxia, la indiferencia total, abstenerse de juzgar, no creer
en nada, es decir, “despojar al hombre”; Empirismo: Sexto Empírico admite ciertos fenómenos y se somete a leyes, costumbres,
sin comprometerse; Integral: Hume reduciendo el principio de causalidad a puro hábito de sucesión, funda un subjetivismo e
interpretación sensitiva de la experiencia. Argumentos: 1) Las contradicciones de los filósofos y diversidad de opiniones
demuestran que no se puede tener una razón; 2) Los errores de los sentidos, sueños, alucinaciones, nos impiden saber si
estamos equivocados o no; 3) La relatividad del conocimiento respecto a los objetos entre sí y al objeto con el sujeto
(imposible conocer una cosa sin conocer las demás, imposible saber lo que es una cosa en sí sin su relación con nosotros); 4)
círculo vicioso de una proposición no demostrada, que para admitirla necesita un principio que a su vez debe ser demostrado.
Crítica: 1) En ocasiones hay acuerdo, cuando hay contradicciones es por la complejidad o por las interpretaciones, sin
embargo existen hechos y principios aceptados por todos los pensadores; 2) El error no es un hecho ni real ni percibido, se
debe conocer siempre en relación a la verdad, si no, no sabríamos que estamos en el error; 3) Es posible conocer las cosas
sin las otras ya que no es pura relación; a pesar de conocer una cosa desde el particular, se conoce bajo algún aspecto; 4) toda
demostración se apoya necesariamente en principios indemostrables. La indiferencia absoluta no es posible en la práctica, llevaría
consigo la inacción y la muerte; es un comportamiento psicológico subjetivamente imposible.
3. «Analogía de la verdad»; relación entre principales modos de entender la verdad y modo que obra la relación
Podemos entender tres sentidos de la verdad. 1) ontológico: la verdad se predica de la realidad, en cuanto es cognoscible.
Por tanto, “la entidad de la cosa precede a la razón de verdad”. 2) formal: la verdad es la conformidad del entendimiento con
la cosa, su adecuación. La razón formal de verdad no se realiza propiamente ni en la cosa ni en el entendimiento sino en la
adecuación, por tanto, “la entidad de la cosa precede a la razón de verdad, mientras que el conocimiento es como un efecto
de la verdad”. 3) antropológico: el conocimiento es verdadero cuando manifiesta y declara el ser de las cosas, cuando afirma
la realidad sin error. De estos sentidos el principal es el primero, en cuanto el ser constituye el fundamento de la verdad,
mientras que la verdad se encuentra de un modo más principal en el entendimiento que en las cosas. Esto se debe
a que el concepto de verdad es análogo, por analogía de atribución (los entes causan la verdad, pero donde primeramente
se encuentra la razón formal de la verdad es en el entendimiento).
4. Intelecto divino para verdad filosófica: lecturas tomista, cartesiana, agustiniana y heideggeriana
Tomismo: Dios es el creador, y por ello, todas las creaturas han de adecuarse al proyecto divino. En este caso las cosas
son verdaderas porque se conforman a la idea que Dios tiene de ellas, y no al revés, en cuanto las constituye respecto al ser.
“La verdad se da antes en la cosa por referencia al entendimiento divino que por comparación al humano, pues al
entendimiento divino se le compara como a su causa, mientras que al humano se compara en cierto modo como a su efecto,
en cuanto que la inteligencia del hombre recibe de las cosas el saber. Así, pues, una cosa se dice verdadera de un modo más
principal en orden a la verdad del entendimiento divino”. Y dado que el fundamento de la verdad es el ser, las cosas deben
adecuarse a la mente divina, donde esencia (ser) e intelecto (verdad) se identifican. “el intelecto divino mide y no es medido;
las cosas miden y son medidas; nuestro intelecto es medido por las cosas naturales y mide las cosas artificiales”.
Cartesiana: Con el método de la duda hiperbólica intenta descubrir una primera verdad firme, admitiendo el escepticismo
provisionalmente. El ser se resuelve en conciencia, por lo que resulta la certeza de la existencia del sujeto pensante, de la cual
se conquistan las subsiguientes certezas por una deducción casi geométrica. Así, el sujeto se potencia hasta pensar a Dios,
pero nunca traspasa el ámbito de las representaciones mentales. A pesar de sus esfuerzos, Descartes no justifica la capacidad
de llegar a la primera certeza, pues para comenzar a dudar se necesario dudar de un conocimiento previo y de un conocimiento
actual; es imposible llegar a un estado de “duda absoluta”, libre de contenidos de conocimientos, pues es propio de la
naturaleza del hombre percibir la realidad como tal: real existente en sí de nuestro concreto mundo sensible.
Agustiniana: La verdad hace relación a la realidad, estar en ella. Pero la realidad no es autosuficiente, por lo que la misma
verdad ha de referirse a una inteligencia suprema y creadora. Así, la verdad y la realidad se nos imponen, son como son al
margen de nuestra mente, por lo que la verdad tiene un fundamento trascendente más allá de la realidad concreta que
conocemos.
Heideggeriana: El intento por salir de la subjetividad vuelve al hombre a preguntarse por el sentido del ser. Pero como
sólo se presenta al hombre, es preciso analizar el estatuto del Dasein, del ser del hombre, que al estar abierto a lo que aparece,
es el horizonte de la comprensión del ser. El Dasein es pura temporalidad, un ser arrojado al mundo que usa los entes, pero
destinado a la muerte, es decir, un ser que sólo puede saber el sentido de las cosas de un mundo finito y temporal. Después
de su kehre piensa que el sentido del ser no depende del sujeto, sino que es éste el que debe vivir de acuerdo con el ser; pero
al no poder dar sentido a las cosas, sólo cabe esperar que éstas lo manifiesten sin que intentemos encontrarlo por nosotros
mismos.
5. «Adecuación», definición, relación entre el sujeto cognoscente y la cosa conocida
Adecuación es la conveniencia o conformación entre dos términos: el ente y el entendimiento. Por un lado, el ente se puede
adecuar al intelecto (es inteligible), mientras que es el intelecto el que se adecúa a la verdad de las cosas. La verdad es una
relación de correspondencia entre la inteligencia y el ser, y reside primero en la inteligencia [juicio] en cuanto está conforme con el
ser y en el conocimiento asimila la cosa a sí mismo (verum: aquello hacia lo que tiende mi inteligencia. Intencionalidad).
Verdad lógica (inteligencia); verdad ontológica (cosas). Res fundamento en el esse: Esse rei causat veritatem intellectus.
Intellectus la verdad reside formalmente en el juicio, pues la verdad-error sólo existe en el momento de afirmar algo. Tener
conciencia de sentir no significa conocer la relación objeto-sensación, ni tener conciencia de pensar una esencia no es conocer
la conformidad esencia-realidad [verdad materialmente]. Es en el juicio en la cual la verdad está presente formalmente como
conocida.
6. Valor del error: problema inicial o dato con explicación particular
El error es una privación de la perfección propia de la inteligencia, existe sólo en un acto de inteligencia y es siempre per
accidens, esto es posible por la ignorancia y la inconsciencia a las que se halla sujeto el espíritu humano, y sus causas están fuera
de la inteligencia, en la aceptación voluntaria de un juicio falso
7. Criterio de verdad, confrontación con criterios empirista, racionalista, trascendental, de verificación
Aquí comienza mi explicación
8. Verdad absoluta o contingente, temporal-histórica o eterna, exhaustiva o progresiva, del singular o del grupo
Aquí comienza mi explicación
9. Principales trazos de la philosophia perennis sobre el conocimiento de la verdad
“Hay y habrá siempre historia de la Filosofía, porque la Filosofía existe sólo en mentes humanas que tienen ellas mismas
una historia y porque el mundo del conocimiento y la acción a las cuales se aplican los primeros principios mismos es un
mundo cambiante, pero no podría haber historia de los primeros principios mismos, porque la estructura de la realidad no
cambia. La designación perennis philosophia no es un título honorario para una forma particular de pensamiento filosófico, sino
una designación necesaria para la Filosofía misma, casi una tautología. Lo que es filosófico es también perenne por propio
derecho” (E. GILSON, La unidad de la experiencia filosófica). La filosofía no pretende formular hipótesis sobre el mundo, al mismo
nivel que las ciencias positivas, sino conocer lo real: su esencia y su ser. Así, existe una philosophia perennis en la que hay
avances y retrocesos, pero en la que las verdades adquiridas siguen teniendo valor siempre. La situación personal, social,
histórica… condicionará a los filósofos en la manera como se planteen unas cuestiones u otras, pero no relativizará sus
respuestas si llega a la verdad. “La unidad de la filosofía en la historia, como filosofía sintética, es la filosofía perenne”.

Lecturas
ARISTÓTELES, Metaphysica, I (X), 1-2, 1052 a 15 – 1054 a 19.
Aquí comienza mi explicación
TOMÁS DE AQUINO, QD De veritate, q. 1 aa. 1, 4 y 8; q. 21 a. 1 a 4.

Aquí comienza mi explicación


KANT, I., Kritik der reinen Vernunft [Crítica de la razón pura, Analítica trascendental, Lib. I, cap. 2, sec. 1, §13-19].
Aquí comienza mi explicación
5. CONOCIMIENTO Y CIENCIA
Problemática
El término «ciencia» tiene dos significados. En la antigüedad era la cognitio rerum per causas (Aristóteles, Boecio y Santo
Tomás). En el siglo XVII (Bacon) la ciencia debe ser positiva y regulada por un método, sin relación a la metafísica. De esta
forma influye en la filosofía de los siglos XVII-XX. La ciencia antigua se encuentra dentro de la visión de la realidad, en el
contexto de la división de las ciencias. Su método era el silogismo demostrativo y se daba importancia a la observación y a la
inducción, aunque se privilegiará el momento demostrativo. En la ciencia moderna se busca un método riguroso en la
resolución de resultados, lo cual supone interrogantes filosóficos. Diversas corrientes filosóficas intentaron dar razón de los
propios fundamentos y métodos de la ciencia.
Hans Reichenbach distingue entre “contexto de la justificación” y el “contexto del descubrimiento”, para dar razón del
desarrollo de la ciencia. Por el primero el Círculo de Viena buscan dar un fundamento lógico a las proposiciones científicas.
Por otra parte, otro grupo de autores buscan la dimensión histórico-social de la ciencia. Estos han dado un empuje a la
relación ciencia-filosofía, abriendo dos líneas de “nueva filosofía de la ciencia” en la segunda mitad del siglo XX.

Cuadro histórico
1. Bases dadas por Aristóteles en los Analíticos Primeros y Segundos para la ciencia
Aquí comienza mi explicación
2. División de las ciencias propuesta por Santo Tomás en sus Comentarios a Aristóteles y Boecio
Aquí comienza mi explicación
3. Nueva dirección de la ciencia de Francis Bacon en el Novum Organum y presupuestos epistemológicos sustituidos de los aristotélicos
Aquí comienza mi explicación
4. Sentido del uso de la matemática introducida por Galileo en la ciencia y método propuesto
Aquí comienza mi explicación
5. Sentido del tentativo de interpretación positivista de la ciencia propuesta por Comte
Aquí comienza mi explicación
6. Proyectos y tesis del Círculo de Viena bajo el influjo del Tractatus de Wittgenstein para obtener una definitiva fundación de la ciencia y sentido de
su caída
Aquí comienza mi explicación
7. Sentido del falsificacionismo de Popper
Aquí comienza mi explicación
8. Enseñanza de Kuhn sobre los paradigmas y las revoluciones científicas
Aquí comienza mi explicación
9. Descartes, Kant, Hegel, Husserl: ciencias modernas en la estructura de su propia visión filosófica
Aquí comienza mi explicación

Cuadro sistemático
1. Justificación de la inducción sin presuponer elementos “metafísicos”
Aquí comienza mi explicación
2. Valor de una teoría científica: veraz perenne o provisorio por el progreso científico
Aquí comienza mi explicación
3. Ciencia como explicación de fenómenos o descripción de ellos para poder utilizarlos
Aquí comienza mi explicación
4. Interpretación del “progreso lineal” adecuada o descuida algunos aspectos
Aquí comienza mi explicación
5. Definición de la ciencia antigua y moderna por sus métodos o por otros elementos
Aquí comienza mi explicación
6. Distinción entre diversos tipos de ciencia moderna
Aquí comienza mi explicación
7. Influencia de los científicos en los resultados obtenidos
Aquí comienza mi explicación
8. Relaciones y desacuerdos actuales entre ciencias modernas y filosofía
Aquí comienza mi explicación
9. Tipos de ciencia durante la historia. Posibilidad de un concepto analógico de «ciencia» o término equívoco.
Aquí comienza mi explicación

Lecturas
ARISTÓTELES, Metaphysica, A (I), 1; E (VI), 1.
Aquí comienza mi explicación
TOMÁS DE AQUINO, In I Post. Anal., lc 4.

Aquí comienza mi explicación


———, In VI Metaph., lc 1.
Aquí comienza mi explicación
———, In Boethii De Trinitate, q. 5 a. 1 y 3.

Aquí comienza mi explicación


BACON, F., Novum Organum, libro I, nn. 1-22, 68, 100-106.
Aquí comienza mi explicación
GALILEI, G., Il Saggiatore [El ensayador, Obras VI, 232].

Aquí comienza mi explicación


KUHN, T., The Structure of Scientific Revolutions [La estructura de las revoluciones científicas, cap. IV y V].
Aquí comienza mi explicación
BROWN, H., The New Philosophy of Science [La nueva filosofía de la ciencia, Introducción, cap. I y IX].

Aquí comienza mi explicación

Potrebbero piacerti anche