EL COORDINADOR: TRAS LAS HUELLAS DEL BUEN PASTOR

ENCUENTRO CON LA PALABRA

JESÚS, BUEN PASTOR, Jn. 10, 2-6. 14-15

Actitudes del Buen Pastor

La figura de Buen Pastor con la cual Jesús se identifica puede ayudarnos a descubrir rasgos poco
explorados de nuestra vocación de coordinadores- animadores (líderes cristianos).

Para un pueblo acostumbrado a la vida rural, como era el israelita, la imagen del pastor se asociaba
fácilmente a una serie de tareas, rutinas, preocupaciones y cuidados propios de su oficio. La
cotidianeidad del ejemplo que señalaba Jesús permitía reconocer de inmediato las situaciones con
que las comparaba.

La reflexión de la Biblia conjugada con la vida enseña y descubre el gran tesoro de esta comparación
que Jesús utiliza para darse a conocer. A Jesús se le conoce mejor contemplando su rostro de
“Pastor”. Jesús no se describe a sí mismo con definiciones abstractas sino de forma concreta, con
acciones verificables:

1) EL BUEN PASTOR CONOCE SUS OVEJAS

¿Conocemos la vida de nuestros hermanos de comunidad?

¿Compartimos sus alegrías, sus angustias, sus esperanzas, sus desalientos?
¿Sabemos lo que están viviendo las familias de cada hermano de comunidad? ¿Nos interesamos por
su situación de vida?

2) LAS LLAMA POR SU NOMBRE

¿Tenemos un trato personal con nuestros hermanos?

¿Buscamos llegar a su interioridad? ¿Somos portavoces para que el Señor llame a cada uno por
su nombre?

3) CAMINA AL FRENTE DE ELLAS

¿Damos testimonio de lo que enseñamos? ¿Intentamos vivir lo que creemos? ¿Somos los primeros
en cumplir lo que pedimos a los demás que ellos cumplan? ¿Vivimos de forma coherente, como
para ir al frente y de frente?

4) DA LA VIDA POR ELLAS

¿Entregamos lo mejor de nosotros por nuestros hermanos?

¿Buscamos donar los talentos que recibimos de Dios para beneficio de los otros?

5) SUS OBRAS LO DAN A CONOCER

¿Nuestras obras, gestos, actitudes de vida muestran a los demás lo que creemos y enseñamos?
¿Somos transparentes: los demás descubren al Dios de la Vida a través de nuestra práctica? Nuestra
manera de estar con los demás, ¿refleja y testimonia nuestra cercanía con Dios?

1
 Concretando actitudes

Preguntemos a Jesús ¿Quién eres tú en mi vida? Jesús pronuncia un discurso en el que lista de los
verbos retomando el contenido más profundo.

Bellísima imagen del pastoreo, de las ovejas, se centran todas ellas en la descripción de la relación
entre Él y todas las personas que le pertenecen, todos aquellos que han entrado en el camino de la
fe, confiando en Él sus vidas.
Jesús es el Buen Pastor enamorado de sus ovejas. Creer es: escuchar la voz de Jesús, seguir la
dirección del Pastor, descubrirse a sí mismo como don del Padre.

Sugerencias del Buen Pastor

El Buen Pastor nos lleva muy dentro de Él, y expresa una honda comunión: Nadie las arrebatará de
mi mano. Los cuidados del Buen Pastor rompen la barrera del tiempo. El punto culminante es
darnos la vida eterna. Es un amor que resguarda al amado de todo peligro, Desde ahora nuestra
vida está en manos seguras. La comunión de Jesús con sus discípulos se deriva de su relación con el
Padre y por el poder del Padre.

El (la) coordinador (a) como discípulo de Jesús tiene que aprender a ser pastor de sus hermanos
y hermanas. Estamos llamados en todas nuestras relaciones a inspirar confianza, así tejeremos la
anhelada comunión, la unidad (como la del Padre y el Hijo) que colma de sentido cada segundo de
nuestro tiempo, de vencer el mal que acaba con las relaciones más bellas, y que es capaz de pastorear
el amor hasta traspasar las barreras de la muerte, y prolongarlo hasta la eternidad. El coordinador,
tratará de comprender la Cruz Pascual de Jesús, Cruz luminosa de Buen Pastor que dio su vida
por nosotros.

Actividad:

ACTITUDES DEL BUEN PASTOR MOMENTOS DE LA VIDA DE JESÚS ANIMADORA, COORDINADORA Y/O
FORMADORA

Juntas, reelaboren el Salmo 23 (22), como si hubiera sido escrito en nuestro tiempo,
usando imágenes, situaciones y palabras de nuestra cultura.