Autoevaluación y evaluación del proceso en Creación

Iván Zúñiga
Facultad de teatro
Me parece que el material con el que se inicia es bastante básico, creo que bien
podría comenzarse con las teorías psicológicas y pasar a Ramos para poder
ahondar mayormente en la práctica, entiendo que es una experiencia de teoría pero
el proceso creativo no se detona tomando notas y reportando lecturas, sino, cuando
hay material incisivo y provocador que altera el estado natural del “estudiante” y le
estimula para abrirse paso de entre esta sombra de sistema educativo y ponerse
manos a la obra.
No obstante, el proceso es rico en fuentes y de alguna manera sí acerca a
algunos métodos que pueden hacer la diferencia entre una obra inconclusa y una
obra lograda. El desempeño del grupo se ve mermado por el formato de analizar los
primeros textos que en resumidas cuentas dicen lo mismo y son opiniones muy
personales de los escritores. No condeno la vida saludable y el balance emocional,
pero me atrevo a decir que la creación genuina está más hacia el desequilibrio y se
usa como medio de expresión de las pasiones más bajas.
Personalmente luché con esta idea de que para crear hay que “estar bien”,
cuando llegamos a las posturas psicológicas y filosóficas comenzó la parte objetiva
y se logró el diálogo. Lamentablemente, a pesar de haber realizado las lecturas no
encontré la forma de reportar las lecturas, los resúmenes no son cercanos para mí.
Pero la reflexión está y los autores me ayudaron a completar mis procesos tanto en
teorías de actuación con los postulados sobre estética teatral de Serrano y en
técnicas de actuación de diferente manera.
Finalmente creo que el proceso logra el objetivo, tal vez un poco lento y muy
sobre la norma, pero ayuda a comprender desde distintos puntos la creación y el
conocimiento de algunas herramientas que pueden ser muy útiles para futuras
investigaciones y procesos.