PROBLEMAS DE CONDUCTA Y LA INTERACCION

DE LOS ESTUDIANTES CON SU ENTORNO

RELATO INDIVIDUAL
(Prof. Elvira Condori Huayta)

La Unidad Educativa "Pedro Domingo Murillo A" se encuentra ubicada: en el departamento

de La Paz, en la Provincia Los Andes, en la segunda sección municipal de Laja, es
dependiente de la Dirección Distrital de Educación Laja. En la actualidad el servicio que
presta, la institución educativa, es a nivel secundario.

La población estudiantil, en su mayoría, vienen de distintas comunidades aledañas a la

localidad de Laja. Colaboran a sus padres dedicándose a distintos oficios, como ser la
costura, el comercio informal, actividades agrícolas y ganaderas, ayudantes en talleres, etc.
Esto supone que muchos de los estudiantes no cuentan con el tiempo necesario para la
realización de sus actividades escolares o la lectura constante de textos, y la mayoría de las
madres y los padres de familia no brindan el apoyo y la atención que requieren y necesitan
sus hijos, no solo en el aspecto económico sino también lo relacionado con lo afectivo
emocional por la poca relación dialógica al interior de la familia.

En cuanto a la cultura, al ser una zona altiplánica y rural, predomina la práctica de las
prácticas de las costumbres aimaras. Razón por la cual la lengua materna de los estudiantes
en algunos casos es el aimara; sin embargo el predominio de esta lengua está perdiendo
cada vez su hegemonía en especial en estudiantes que cursan los primeros niveles de
secundaria que solo hablan en castellano.

La realidad de la comunidad de Laja es la que pese a que los habitantes, son en muchos
aspectos ricos en el legado cultural que les dejaron sus antepasados, existentes muchas
actitudes negativas que con el paso del tiempo se han arraigado y se han identificado como
parte de la cultura e identidad de las distintas comunidades indígenas. Siendo así que
algunas de las problemáticas más comunes en nuestro país, en la actualidad, es la pérdida
de valores, el consumo de bebidas alcohólicas y los embarazos en los adolescentes, entre
otras, siendo las mismas una de las causas por lo que los adolescentes ven limitadas sus
expectativas para la educación superior y un sentimiento de frustración constante en su
cotidiano vivir, siendo esta última una excusa para el elevado consumo de alcohol bajo
cualquier circunstancia, en el futuro y en su vida adulta.

Los estudiantes como sujetos que interactúan con la comunidad no están lejos de la
dinámica social que está presente en su contexto, por lo que muchas de las actitudes de los
adolescentes, sean estas positivas o negativas, serán el reflejo de sus vivencias.
Considerando además sus problemas personales que afectan considerablemente en su
comportamiento en la Unidad Educativa, al igual que la relación con las y los profesores y
con sus compañeros de estudio.

Es quizás debido a estas circunstancias por lo que, a finales del mes de mayo, se presentó
un caso al interior de la Institución Educativa, en el que fueron protagonistas tres estudiantes
de quinto y sexto del nivel secundario. En ese momento los estudiantes, el personal docente
y administrativo se encontraban en medio de una actividad extracurricular y que debido a ello
los adolescentes ingresaron y consumieron bebidas alcohólicas al interior de la Unidad
Educativa, razón por la cual, debido a su estado, fue difícil de comunicarse de forma verbal
en ese instante.

Por lo que, viendo estas circunstancias, lo primero que se realizó fue un análisis de esta
problemática con el gestor educativo y el personal docente, junto con el consejo educativo,
considerando, como es lógico, la gravedad de la situación y que la misma no deja de ser
preocupante debido a que se trata de una población en desarrollo y es triste que sus
actitudes puedan afectarles en su vida cotidiana.

Como una segunda actividad que realice fue hablar con cada uno de los estudiantes que
incurrieron en la falta y se les reflexiono y se les trato de hacerles entender lo negativo de su
actitud para ellos mismos, sus compañeros y la comunidad en su conjunto, puesto que
puede afectar la interrelación de ellos con su familia, con sus compañeros y su comunidad. A
medida que ellos se expresaban se pudo evidenciar que hay cierta dificultad en las
relaciones interpersonales con sus madres y padres de familia, siendo una de las que es
importante considerar el dialogo y escucha, ya que en un inicio los adolescentes se
mostraron poco razonables y sensatos, cuando se intentó hacerles comprender que ese tipo
de actitud es cuestionable bajo cualquier tipo de circunstancias.
Después de este dialogo, los estudiantes se comprometieron a no incurrir nuevamente con
su actitud. Por lo que, como un logro que se podría considerar significativo, es el que los tres
estudiantes implicados en el problema no reincidieron en el consumo de las bebidas
alcohólicas y cumplieron con sus actividades de forma aceptable, y su comportamiento
tampoco fue negativo en el transcurso del año y no instigaron a otros estudiantes, de otros
cursos inferiores, de la Unidad Educativa. Esta actitud se podría considerar un logro y que a
partir de la misma se puede continuar con el proceso de prevención para los siguientes años,
incluyendo la participación de los adolescentes en la elaboración de sus propios materiales
para que se las utilice en la concientización de la comunidad en su conjunto.

Como siguiente paso, en Junio: Se citó y habló con las y los padres de familia y se pudo
evidenciar que los estudiantes, que incurrieron en la falta provienen de familias
desintegradas y que su ambiente familiar en ocasiones es agresivo y que no se practica el
diálogo entre los padres y los hijos, siendo la misma una causa por la que atraviesan por
problemas afectivo – emocionales que afectan en su comportamiento y la manera de afrontar
las dificultades que se presentan en su diario vivir sin contar con el apoyo de ambos
progenitores, que realizando un análisis de la coyuntura se pudo observar que la mayoría de
ellos provienen de familias desintegradas, ocasionando en la mayoría de los casos actitudes
agresivas y la falta de respeto a sus madres y padres de familia y a otras personas de su
entorno, creyendo que para obtener respeto es necesario causar temor a las personas
utilizando el uso de la fuerza física y verbal.

Cuando se realizó el diálogo con las madres y padres de familia sobre el comportamiento de
sus hijos. Haciendo también un análisis acerca del problema se pudo evidenciar que en Laja
se consume mucho alcohol en distintas actividades que se realizan en la comunidad y que
los centros comerciales pese a que se le indica que no vendan estos productos a estudiantes
y menores de edad no lo cumplen.

Como una medida de solución, los padres de familia indicaron que la alcaldía cierre los
negocios que incurrieran en la falta y que paguen una multa económica considerable y que
estos recursos se dirigieran a la Unidades Educativas para la realización de materiales de
información, orientación y de prevención sobre el consumo excesivo y de falta de control de
bebidas alcohólicas. También les notar que existe poco compromiso y participación de las y
los padres de familia, con algunas excepciones, y que la tarea educativa no solo
responsabilidad de las y los profesores de la Unidad Educativa. Les hice reflexionar que
como una forma de reducir los niveles de consumo de alcohol se requiere también de su
propia colaboración activa para cambiar la actitud de los estudiantes en su interrelación con
su contexto y que en especial se busque siempre el beneficio de las y los adolescentes.
Muchos de ellos estuvieron de acuerdo que intentarían comunicarse y orientarlos,
estableciendo el dialogo con sus hijos. Con esto se les hizo notar que lo más importante es
pasar un tiempo de calidad con la familia y no de cantidad.

He visto como necesario, también, la participación de las distintas instituciones que se

encuentran en el pueblo como ser el Centro de Salud y la Defensoría de la Niñez y
Adolescencia para que se realicen talleres de orientación y prevención. Hablé con la
profesional psicóloga de la defensoría y pude ver su predisposición para colaborar con los
estudiantes que atraviesan por distintos problemas afectivo emocionales. También trate de
comprometer la participación de los propietarios de lugares de expendio de bebidas
alcohólicas, pero la verdad muchos de ellos culpan al ejemplo que dan sus padres a sus
hijos cuando realizan sus celebraciones en las comunidades. Pero aun así estuvieron de
acuerdo en no vender estos productos a los estudiantes de la Unidad Educativa.

A partir de estos resultados establecí que mis actividades estarían relacionadas con mi
desarrollo curricular, por lo que realicé una concientización e información permanente sobre
los problemas que ocasionan el excesivo consumo de bebidas alcohólicas y los extremos a
lo que conduce su abuso, para lo cual pude articular el tema con la Ley 259 (Ley de Control
al Expendio de Bebidas Alcohólicas). También articule y relacione con algunos temas con el
currículo del ministerio de educación. Estas acciones aún continúan y se seguirá con las
mismas hasta que se observe un cambio significativo en la actitud de los estudiantes.

Es importante considerar que el cambio de comportamiento no es un proceso corto para su

transformación y requiere un seguimiento continuo hasta que se consiga una transformación
significativa de este pensamiento y que sea positiva para la comunidad. Pese a que el actual
modelo está siendo ejecutado casi diez años aún se presenta resistencia por parte de
algunos padres de familia que continúan con el criterio de que esta tarea debe ser
exclusivamente puesto en ejecución por el gobierno y que ellos no debían realizar ninguna
actividad, aparte de enviar a sus hijos a la escuela.

Viendo estas actitudes, llegué a la conclusión que todos debemos cuidar de las actuales
generaciones y reducir el consumo de alcohol en nuestra sociedad y comunidad en todas las
actividades que se realicen, ya sean sociales, culturales, deportivas y religiosas, e inclusive
en reuniones comunales, pude ver que algunas autoridades originarias que se quedan en el
pueblo en ocasiones consumen bebidas alcohólicas a vista y paciencia de los niños y
adolescentes que se encuentran en el pueblo, siendo estas actitudes actividades que se
considerarían naturalizadas.

Esta problemática aún tiene mucha importancia y es un deber de todos y cada uno de
nosotros ser más metódicos a la hora de decidir a realizar distintas actividades en toda la
gestión educativa del presente año, para lo cual se presentó una feria educativa con la
participación de las distintas áreas y campos, en la Plaza de Laja, basado en los principios y
valores socio comunitarios, para lo cual los propios estudiantes produjeron sus propios
materiales y expusieron las distintas temáticas que establecimos como sobresalientes e
importantes para la concientización de la comunidad.

Se había indicado en los anteriores párrafos, que parte del problema que estoy tomando en
consideración, también encontré que muchas familias de la comunidad están desintegradas,
en la mayoría de los casos por motivos de trabajo o porque existen conflictos personales de
pareja, y que como única medida de solución es la separación. Este aspecto también se
consideraría un problema; sin embargo, esta situación no es posible solucionarlo y lo mejor
que se puede hacer es que para una convivencia sin recriminaciones violentas es en muchos
casos recomendable la separación.

Por lo que se habló con muchos estudiantes que se encuentran en esta dificultad es el de
aprender a afrontar estos problemas de manera que se fortalezca su autonomía personal y
de sus decisiones, y que cualquier dificultad no debe ser una excusa para tener un
comportamiento cuestionable en la interrelación con la comunidad y también los
adolescentes deben considerar que el apoyo y comprensión, no solo debe partir de las
madres y padres de familia sino también de ellos a su familia, estableciendo siempre un
interacción positiva.

He considerado, también como una actividad en el que se interactúe parte de la solución al

problema, la organización de actividades en los que los padres de familia sean la parte activa
para la ejecución de la misma, como por ejemplo se socializó un proyecto de hacer un
escenario en la Unidad Educativa Irán en el que se habló con el Consejo Educativo, las y los
Padres de Familia y estudiantes, de la misma institución educativa, en el que se les hizo
conocer la importancia del trabajo comunitario para todas las actividades que se presentan
en todo el año y la revalorización de las formas de organización comunal, considerando así
el legado cultural de la comunidad.

Para la siguiente gestión se acordó que en las primeras semanas se establecería un

proyecto que puede ser ideado por los padres de familia en cuanto al mejoramiento de la
infraestructura de la Unidad Educativa o en organizar charlas en los que los Padres de
Familia compartan con los estudiantes y los profesores sus conocimientos sobre distintas
tareas que sean de beneficio de los estudiantes en primer lugar. La verdad fue ideas valiosas
que pudimos obtener para mejorar la gestión educativa de todos los años a partir de este
compartimiento de experiencias.

La verdad asegurar que se ha cambiado una actitud en meses es un poco pretencioso, lo

real es que toda problemática que esté relacionado con actitudes y comportamientos es un
proceso largo y que en muchos casos puede que los resultados no sean significativos en el
instante, pero esto puede cambiar a medida que pasa el proyecto de concientización y la
aplicación de recursos y estrategias sea aplicado, y esta puede tener una duración de
muchos años, y que la misma debe ser vista de esa forma.

Para un cambio de actitud significativo a gran escala, es necesario ir en contra de lo que se

considera como propio de la cultura, en especial referido al excesivo consumo de alcohol en
la sociedad boliviana, como ser las celebraciones cívicas, prestes, fiestas zonales, bodas, y
otras actividades, que no se pueden considerar necesariamente útiles en el desarrollo y
avance cultural de las colectividades en nuestro entorno. Por eso considero que es muy
importante la revolución dentro de nuestros propios pensamientos para de una vez erradicar
actitudes y practicas negativas, revalorizando así nuestras fortalezas y reduciendo nuestras
debilidades para así realizar un cambio importante en beneficio de nosotros mismos y de
nuestro país.