Sei sulla pagina 1di 5

En 2006, la Unión Astronómica Internacional propuso que el término «planeta»

se redefiniera para aclarar el estatus planetario de Plutón e incluir en el grupo de planetas


del sistema solar a otros objetos aparte de los nueve tradicionales.1 La propuesta se
denomina Resolutions 5A, 5B, 6A and 6B for GA-XXVI; miembros de la UAI votaron la
propuesta el 24 de agosto de 2006 en Praga.
En su forma original, la redefinición habría tenido como consecuencia directa la
clasificación de otros tres cuerpos como planetas. Estos serían Ceres (tradicionalmente
considerado como el mayor de los asteroides pero considerado como planeta en la época
de su descubrimiento, 1801), Caronte (anteriormente considerada como un satélite
natural de Plutón, y que ahora serían considerados conjuntamente como un planeta
doble con la definición propuesta), y el recientemente descubierto Eris (apodado Xena por
su descubridor, en honor del personaje de ficción del mismo nombre). Otros 12 cuerpos
podrían clasificarse también como planetas, incluyendo algunos de los asteroides y objetos
transneptunianos mayores. Sin embargo, la abundancia de objetos similares a Plutón en
los límites del sistema solar podría producir una lista mayor de objetos que cumplan con
esta definición a medida que se vayan descubriendo y discutiendo.
El 22 de agosto, la redefinición original (que reconocía doce planetas, incluyendo Plutón)
recibió duras críticas en dos encuentros abiertos de la UAI. Jay Pasachoff, del Williams
College, que asistió a ambos encuentros, dijo: “Creo que el día de hoy puede recordarse
como el día que perdimos a Plutón”.2
La cronología de los hechos ocurridos en la Asamblea están detallados en [1]
Un planeta es, según la definición adoptada por la Unión Astronómica Internacional,
un cuerpo celeste que:1

1. Orbita alrededor de una estrella o remanente de ella.


2. Tiene suficiente masa para que su gravedad supere las fuerzas del cuerpo rígido,
de manera que asuma una forma en equilibrio hidrostático (prácticamente
esférica).
3. Ha limpiado la vecindad de su órbita de planetesimales, o lo que es lo mismo
tiene dominancia orbital.
4. No emite una luz propia.
Según la definición, el sistema solar consta de ocho
planetas: Mercurio, Venus, Tierra, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno. En
cambio Plutón, que hasta 2006 se consideraba un planeta, ha pasado a clasificarse
como planeta enano, junto a Ceres, también considerado planeta durante algún tiempo, ya
que era un referente en la ley de Titius-Bode, y más recientemente considerado
como asteroide y Eris, un objeto transneptuniano similar a Plutón. Ciertamente, desde
los años setenta existía un amplio debate sobre el concepto de planeta a la luz de los
nuevos datos referentes al tamaño de Plutón (menor de lo calculado en un principio), un
debate que aumentó en los años siguientes al descubrirse nuevos objetos que podían
tener tamaños similares. De esta manera, esta nueva definición de planeta introduce el
concepto de planeta enano, que incluye
a Ceres, Plutón, Haumea, Sedna, Makemake y Eris; y tiene la diferencia de definición en
(3), ya que no ha despejado la zona local de su órbita y no es un satélite de otro cuerpo.
Los cuerpos que giran en torno a otras estrellas se denominan generalmente planetas
extrasolares o exoplanetas. Las condiciones que han de cumplir para ser considerados
como tales son las mismas que señala la definición de planeta para el sistema solar, si
bien giran en torno a sus respectivas estrellas. Incluyen además una condición más en
cuanto al límite superior de su tamaño, que no ha de exceder las 13 masas jovianas y que
constituye el umbral de masa que impide la fusión nuclear de deuterio.
El 24 de agosto de 2006, la Unión Astronómica Internacional (IAU), después de evaluar
las diferentes propuestas presentadas en su reunión plenaria, decidió adoptar oficialmente
una definición de planeta y de los otros cuerpos del Sistema Solar, según la cual:
1. Es un planeta aquel objeto que: a) orbita alrededor del Sol, b) posee suficiente masa
como para que su propia gravedad domine las fuerzas presentes como cuerpo rígido, se
encuentra en equilibrio hidrostático y por tanto adopta una forma aproximadamente
redondeada, c) y es el objeto claramente dominante en su vecindad, habiendo limpiado su
órbita.
2. Es un planeta enano aquel objeto que: a) orbita alrededor del Sol, b) posee suficiente
masa como para que su propia gravedad domine las fuerzas presentes como cuerpo
rígido, se encuentra en equilibrio hidrostático y por tanto adopta una forma
aproximadamente redondeada, c) no ha limpiado su órbita de otros objetos, d) no es un
satélite de otro planeta.
3. Cualquier otro objeto excepto los satélites, se deben denominar como pequeños
cuerpos del Sistema Solar, incluyendo la mayor parte de los objetos transneptunianos.
Por tanto, dentro del Sistema Solar, solo existen ocho planetas (Mercurio, Venus, la
Tierra, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno). Plutón, Ceres y Eris (descubierto
en el 2005, anteriormente conocido como 2003 UB313 y el desencadenante del cambio de
definición) pasan a ser planetas enanos. Con posterioridad se han unido a esta
categoría Haumea y Makemake (también. En particular, Plutón pierde su estatus de
planeta debido a varias características, entre las que se hayan: su órbita, altamente
elíptica y fuera del plano de la eclíptica; la presencia de un compañero, Caronte
(descubierto en 1978), de tamaño y masa del mismo orden de magnitud, y la compañía de
otros cuatro objetos de menor masa (Nix e Hidra, avistados por primera vez en el año
2005; Cerbero, anunciado en el 2011; y Estigia, un año después). Así, Plutón no cumple
la condición 2c de la definición oficial de la IAU.
Los planetas del Sistema Solar según la nueva definición de la IAU, y tres planetas enanos. Crédito
IAU.

Por otra parte, Plutón, Eris, Makemake y Haumea, localizados en los confines del Sistema
Solar, pertenecerían a una nueva categoría de objetos, los plutoides, de los cuales se
espera encontrar varias decenas durante los próximos años. Hay otra categoría que
incluye a ésta, los objetos transneptunianos. Esto es, la órbita se encuentra más allá de
la del planeta más alejado del Sol (técnicamente, el semieje mayor del TNO, por su
acrónimo en inglés, es más distante que el Neptuno). Hay más de 1000 objetos de este
tipo censados en nuestro sistema planetario, con tamaños muy diversos. Eris posee un
satélite, también descubierto en el 2005 y denominado Disnomia, por la hija de la diosa
griega de quien toma nombre el planeta enano. Haumea, con nombre de la deidad tutelar
de Hawaii, tiene dos satélites, Hi’iaka y Namaka, hijas de aquella.
Los ya más de 1000 exoplanetas confirmados descubiertos desde el año 1995 (incluso
antes, si se incluyen los que orbitan alrededor de estrellas de neutrones) no están
afectados por esta definición. Para ellos, la IAU acordó en el año 2003 una definición
provisional, insatisfactoria para muchos especialistas y que está sujeta a revisión. Así, un
exoplaneta se caracteriza por:
Orbitar alrededor de una estrella o remanente de estrella (enana blanca, estrella de
neutrones) y tener una masa inferior a 13 masas de Júpiter. Esto es, no fusiona deuterio,
un isótopo de hidrógeno, ni cualquier otro elemento químico. Por tanto, no produce
energía a partir de este tipo de fuente.
Ilustración artística con cuatro planetas enanos localizados más allá de la órbita de Neptuno (Eris,
Plutón, Makemake y Haumea), junto con sus satélites, y otros dos objetos transneptunianos (Sedna
y Quaoar) cuyas características de aquéllos. Los tamaños son proporcionales y por comparación
también se incluye la Tierra / crédito: NASA

Los objetos subestelares, con masas superiores a las de los exoplanetas pero inferiores
a un 8% aproximadamente de la masa del Sol, se denominan enanas marrones. Se
caracterizan por la ausencia de fusión de hidrógeno.
Los objetos aislados de masa planetaria (IPMOs por sus siglas en inglés, o planemos, o
xebarcos, u oriones), con masa por debajo del límite de las 13 masas de Júpiter, se
deben denominar sub-enanas marrones o cualquier otro nombre que sea apropiada,
salvo el de planeta.
Este texto es un extracto actualizado del libro Visiones de Gaia: la Tierra desde el
espacio, escrito por David Barrado y editado por el INTA(Instituto Nacional de Técnica
Aeroespacial “Esteban Terradas”) en 2011. Para acceder al libro completo en castellano,
pincha aquí.

David Barrado Navascués

Potrebbero piacerti anche