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CONOCIMIENTO DE DIOS A TRAVÉS DE LAS COSAS SENSIBLES

INTRODUCCIÓN

Es complicado para el hombre comprender, la posibilidad de conocer a Dios a través de las


cosas sensibles, entender cómo a diario se hace presente en cada una de las cosas creadas por Él,
y al mismo tiempo ver en toda la creación su sabiduría, su bondad y sobre todo el amor que expresa
a cada uno de los seres que ha creado. Es por eso que en este trabajo se abordará el tema del
conocimiento de Dios a través de toda su creación, para así dar respuesta a la interrogante que
motiva a realizar este trabajo, ​esta es: ¿Cómo es posible conocer a Dios a través de las cosas
sensibles?

Para la realización de este trabajo se tomará como fuente principal el ​Itinerario de la mente
a Dios, específicamente el capítulo II y III. ​Esta obra representa una de las obras cumbres del
misticismo escolástico cuya influencia ha permanecido hasta nuestros días. Impulsado por un gran
amor por la contemplación divina hacia todos los seres de la creación, San Buenaventura se adentra
en el misterio de la ascensión a Dios teniendo muy cercanas sus experiencias franciscanas pero sin
dejar de lado la reflexión filosófica. El autor consideraba que se puede llegar a Dios uniendo ambas
tendencias, la teológica y la filosófica, aunque esta última, siempre a merced de la primera. “El
Itinerario del alma de Dios” es una obra a la vez filosófica, teológica y mística, en la que se encierra
gran parte del pensamiento bonaventuriano pues la doctrina de San Buenaventura se presenta
expresamente y de manera primordial como un "Itinerario del alma hacia Dios". Por eso toda su
filosofía se reduce a mostrar un universo en que cada objeto nos habla de Dios, nos lo presenta a su
manera y nos invita a volvernos hacia Él. Si la vida nos es más que una peregrinación hacia Dios, el
mundo sensible es el camino que nos conduce a Él. Los seres que bordean este camino son otros
tantos signos que pueden parecernos, a primera vista, enigmáticos, pero si los examinamos
atentamente, la fe, ayudada por la razón, descifrará en ellos, bajo caracteres siempre distintos, una
sola palabra, una llamada siempre igual: Dios.
El presente trabajo estará organizado en tres apartados, en los que se desarrollara la teoría
del conocimiento de Dios para el doctor seráfico, y los elementos que permiten al hombre llegar al
conocimiento del creador, como lo son los vestigios de la creación y el alma.

I. CONOCIMIENTO DE DIOS PARA SAN BUENAVENTURA

San Buenaventura afirma que no es difícil al hombre admitir la existencia de Dios, le es más
difícil negarla. Le basta poner atención en lo que es Dios para sentir que todo lo que es el hombre y
todo lo que lo rodea proclaman su existencia. Es Dios quien le hace comprenderse a Sí mismo y
comprender las cosas.

El conocimiento de Dios para el doctor seráfico, tiene su origen en los sentidos, ya que por
ellos el ser humano es capaz de percibir el mundo que lo rodea, san Buenaventura realizó pruebas
sobre la existencia de Dios, buscando el fundamento de éstas en donde el creador se manifiesta y
esto es, en sus creaturas. El gran místico franciscano tiene en cuenta tres jornadas, que deben ser
iluminadas de acuerdo a la triple existencia de las cosas: materia, inteligencia y arte eterna; a través
de las cuales es posible investigar a Dios ya que tienen relación con las tres sustancias que hay en
1
Cristo:«corporal, espiritual y divina».

«Conforme a la triple progresión antes descrita, el alma tiene tres aspectos principales. Uno
es hacia las cosas corporales o exteriores, razón por la que se llama ​animalidad o sensualidad​; otros
hacia las cosas interiores y hacia sí misma, por lo que se llama ​espíritu​; y otro, en fin, hacia las
2
cosas superiores a sí misma, y de ahí que se llame ​mente​» .

Cada uno de los aspectos anteriores «Disponen al hombre para subir a Dios. “A fin de
3
amarle con toda reverencia, con toda la mente, y con toda el alma”» pero estos se duplican según
se considere a Dios, ya que puede ser considerado como ​Alfa o como ​Omega ​(principio y fin) o se
puede ver a Dios en cada uno de ellos como por espejo o como en espejo. Así pues se obtienen seis

1
Cfr. SAN BUENAVENTURA, ​Itinerario del alma a Dios, ​En Obras de san Buenaventura, Tomo I, Madrid, BAC,
1955. 867
2
SAN BUENAVENTURA, ​Itinerario del alma a Dios,​ Tomo I, 867
3
VELÁZQUEZ LÓPEZ Jorge, ​Recensión del Itinerario del alma hacia Dios, ​México, Guadalupana, 2010.
grados que corresponden o tienen relación con los seis grados de las potencias del alma (sentido,
imaginación, la razón, el entendimiento, inteligencia, y el ápice de la mente) «por los cuales subimos
4
de lo ínfimo a lo sumo, de lo externo a lo íntimo, de lo temporal a lo eterno.»

El doctor seráfico sostiene que estos grados han sido dados al hombre de manera natural y
que han sido deformados por la culpa, pero que pueden ser reformados por la gracia, así se puede
afirmar que sólo a aquel que se halle en gracia le será posible contemplar al creador.

II. ESPECULACIÓN DE DIOS A TRAVÉS DE LOS VESTIGIOS DE LAS CRIATURAS.

Como se ha visto anteriormente, el hombre es capaz de percibir a Dios por medio de los
sentidos exteriores, ya que por ellos percibe los vestigios de Dios que cada ser creado posee en Sí.

San Buenaventura por su parte propone un itinerario que nos permita conocer al creador; en
este “camino hacia Dios” hay que comenzar por el objeto más fácilmente accesible, el mundo
sensible (primer grado) que es el vestigio de Dios. El movimiento de especulación parte, pues, del
espejo de la naturaleza, donde se contempla el poder de Dios, su sabiduría y su bondad.
Prosiguiendo esta especulación, San Buenaventura subraya cómo podemos considerar a Dios
elevándonos a él por las criaturas sensibles y contemplándose en esas mismas criaturas (segundo
grado). El estudio de ese microcosmos que es el hombre le hace subir la escala de los seres
creados, que va de lo sensible, puesto en contacto con nuestra alma espiritual, hasta del mundo de
espíritu, libre de toda limitación sensible. El tercer grado nos eleva todavía más por el estudio del
alma misma en sus potencias: memoria, entendimiento y poder electivo, que son como la impronta
de nuestro origen divino. Por nuestra alma llegamos a Dios, de quien ella es imagen y de quien
recibe la luz de las razones eternas; en nuestra alma descubrimos la acción personal de Dios
recreando nuestro ser sobrenatural, e inaugurando así una nueva relación con nosotros en una
presencia de gracia.

De este modo para san Buenaventura, «el conjunto de las creaturas es escala para subir a
5
Dios» ya que cada una de ellas posee en sí elementos que reflejan al sumo bien eterno, como por
medio de un espejo, se tiene así que; «entre las criaturas unas son vestigio; otras, imagen, unas

4
Cfr, SAN BUENAVENTURA, Itinerario del alma a Dios, Tomo I, 569.
5
SAN BUENAVENTURA, ​Itinerario del alma a Dios​, Tomo I, 865
6
son corporales y otras espirituales, unas son temporales y otras eviternas» cada uno de estos
elementos conducen al hombre a Dios, pues para el doctor seráfico «pasar por el vestigio que es
corporal, temporal y exterior al hombre, es ser conducido por la senda de Dios; por otra parte
entrando al alma que es imagen eviterna de Dios, espiritual e interior al hombre, es entrar en la
7
verdad de Dios» .

Antes de continuar se pretende explicar a qué se refiere san Buenaventura cuando ve a las
creaturas como vestigio y como imagen. Según Fr. Philotheus Boehner en su libro “​San
Buenaventura, El doctor seráfico” ​dice que las creaturas «son llamadas vestigio de Dios porque en
ellas hay una triple propiedad, a saber, unidad, verdad y bondad; mediante las cuales se relaciona
8
con el Creador.» .

En cuanto a las creaturas como imagen dice: «se llaman imagen de Dios por aquellas
propiedades, que dicen relación a Dios, no solo como una causa sino también como a su objeto; y
éstas, que se encuentran en el alma racional son: la memoria, la inteligencia y la voluntad, por las
9
cuales el alma es capaz de Dios» ​dicho de otra manera, las creaturas son imagen de Dios porque
teniendo a Dios como modelo, poseen un alma que está dotada de memoria, inteligencia y voluntad,
potencias que hacen al alma capaces de Dios ya que en estas facultades se puede contemplar la
eternidad, la suma verdad y la suma bondad de Dios. Cito al R.P Fr. Jorge Velázquez «La memoria
es imagen de la eternidad… nuestro entendimiento está unido a la verdad eterna, pues nada
verdadero se puede conocerse sino enseñado por ella, por último, la voluntad, se echa de ver en el
10
consejo, en el juicio y en el deseo, y esto lleva a la suma bondad.»

Así pues se puede ver que por medio de estos elementos es posible trascender a quien es
el primer principio, el sumo y eterno Bien ya que como se ha dicho en todas las creaturas se puede
contemplar la unidad, la verdad y bondad de Dios y en algunas otras como es el caso del ser
humano también podemos ver la memoria, inteligencia y la voluntad que como ya se ha dicho son
imagen de la eternidad, la verdad y la suma bondad de Dios; pero esto no sería posible si no fuera

6
SAN BUENAVENTURA, ​Itinerario del alma a Dios​, Tomo I, 865
7
Cfr. SAN BUENAVENTURA, ​Itinerario del alma a Dios​, Tomo I, 867
8
Cfr. BOEHNER Philotheus, ​San Buenaventura, El doctor seráfico, ​México, Ideales Franciscanos,1957.
9
BOEHNER Philotheus, ​San Buenaventura, El doctor seráfico,​ p. 92
10
​ .26-27
VELÁZQUEZ LÓPEZ Jorge, ​Recensión del Itinerario del alma hacia Dios. P
gracias a los sentidos que permiten que los vestigios de todas las cosas que hay en el mundo
sensible entren al alma, por la aprehensión, delectación y juicio. Pues dice san Buenaventura, «por
la aprehensión, en efecto entra en el alma todo el mundo sensible […] entran, digo no por su
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substancias sino por sus semejanzas» , por la delectación se puede decir se degusta lo
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aprehendido «por la delectación entran en el alma los objetos exteriores que deleitan» y el juicio
que es según el doctor seráfico la «operación, que depurando y abstrayendo la especie sensible,
sensiblemente recibida por los sentidos, le hace entrar en potencia intelectiva. Y así todo este
mundo tiene entrada en el alma por las puertas de los sentidos, conforme a las tres operaciones
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mencionadas»

Así pues a modo de conclusión se puede ver que siendo posible conocer todas las cosas
sensibles, es posible conocer a Dios ya que como se ha desarrollado cada cosa creada predica a su
creador pues «todas las cosas cognoscibles, teniendo como tienen la virtud de engendrar la especie
de sí, mismas proclaman con claridad que en ellas como en espejos, puede verse la generación
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eterna del verbo, imagen e hijo que del Dios padre emana eternamente» .

III. EL ALMA COMO ELEMENTO FUNDAMENTAL PARA EL CONOCIMIENTO DE DIOS.

En el desarrollo de los apartados anteriores se ha visto que el alma es parte fundamental


para llegar al conocimiento de Dios; el alma como se dijo anteriormente ocupa el tercer grado del
itinerario que propone San Buenaventura. En este tercer grado el ser humano vuelve a sí mismo,
entra de nuevo en sí, y así, ve como en su alma resplandece la a manera de candelabro la imagen
de la Trinidad Beatísima, pues el alma es para el doctor seráfico imagen de Dios «De algún modo,
el alma lo es ​todo ​en virtud de su potencia para conocer ​todo y esta es la capacidad divina, pues es
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imagen y semejanza de Dios (Isent.d.3,p.1 a.un.q.1 ad1.)» Así pues, se puede llegar a la
conclusión de que «Dios puede ser conocido, aunque sea infinito y nosotros finitos; pues nuestra

11
SAN BUENAVENTURA, ​Itinerario del alma a Dios​, Tomo I, 579
12
SAN BUENAVENTURA, ​Itinerario del alma a Dios​, Tomo I, 581
13
SAN BUENAVENTURA, ​Itinerario del alma a Dios​, Tomo I, 581
14
SAN BUENAVENTURA, ​Itinerario del alma a Dios​, Tomo I, 583
15
MERRINO José Antonio, ​Historia de la filosofía franciscana, ​Madrid, BAC, 1993.
estructura mental nos capacita para ello, ya que Dios y el alma pertenecen al mismo orden de lo
16 17
inteligible» recordando a Empédocles que dice «lo semejante se conoce por lo semejante» . se
concluye que si el alma es semejante a Dios puede conocerle.

CONCLUSIÓN.

Después de haber desarrollado el tema sobre el conocimiento de Dios a través de las cosas
sensibles, se puede dar una respuesta a la interrogante planteada al inicio, esta es una respuesta
afirmativa, ya que después de desarrollar el presente trabajo se concluye, que sí es posible conocer
a Dios por medio de su Creación; para esto sólo basta con detenerse un momento, poner atención y
contemplar las maravillas de la creación como lo propone el gran filósofo franciscano, pues se ha
visto que cada una de las cosas creadas proclama a su creador. Otro elemento importante para
llegar a este conocimiento será el volver a cada uno de nosotros y contemplar nuestra alma pues
ella es imagen de Dios.

Finalizó con la siguiente cita, «El que con tantos esplendores de las cosas creadas no se
ilustra, está ciego; el que con tantos clamores no se despierta, está sordo; el que por todos estos
efectos no alaba a Dios, ése está mudo; el que con tantos indicios no advierte el primer principio,
ese tal es necio. Abre pues los ojos, acerca los oídos espirituales, despliega los labios y aplica tu
corazón para en todas las cosas ver, oír, alabar, amar, y reverenciar, ensalzar y honrar a tu Dios, no
sea que todo el mundo se levante contra ti». (Itinerario I, 15)

16
MERINO José Antonio, ​Historia de la filosofía franciscana, ​p.73
17
Cfr,HIRSCHBERGER Johannes,​ Historia de la filosofía, tomo I​, Barcelona, Herder, 1994. p.63

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