Sei sulla pagina 1di 1

Desde tiempos inmemoriales, las sociedades rigen reglas, estereotipos y diferentes

comportamientos donde el ser humano es un títere, que debe seguir al pie de la letra todo
lo que se imponga, llegar a tal punto que es sometida sin cuestionar. Esto aplica en varios
ámbitos de la persona, una de ellas es la religión, inculcada desde niños con fines morales
y eclesiásticos, pero ¿realmente se practicó?

Unos de los ejemplos más claros y concisos de sometimiento y condena hacia la libre
expresión es Juana de arco; recordamos que fue acusada de herejía y sometida a
interrogatorios, mediante todo este proceso, ella se encontraba en la cárcel. La fe católica
encontró “argumentos” en contra, tales como: vestir como hombre, abandonar a sus
padres y oír voces de origen demoniaco. Por estos motivos fue sentenciada a muerte por
el método de la hoguera, lamentable tragedia.

Otro ejemplo más remoto es Nicolás Copérnico, gran científico con teorías relevantes
para el mundo, pero desprestigiada por la iglesia católica, con la famosa teoría
heliocéntrica. Tanto era el repudio hacia nuevos descubrimientos, que se necesitaba la
ayuda de terceros para la publicación de Copérnico.

Potrebbero piacerti anche