Vipassana #3

La técnica definitiva que nos libera del sufrimiento

Hola a todxs mis amigxs de Steemit, para comenzar siempre me gusta enviarles un
cordial saludos, deseando que se encuentren bien donde sea que estén, y que tengan una
prospera y enriquecedora experiencia en esta red social tan maravillosa.

En este nuevo post les traigo la continuación de mi serie sobre el vipassana (post 1,
post2). En esta nueva entrega les hablare sobre las tres meditaciones que nos enseñan
durante el curso de 10 días, y a medida que se las vaya explicado les iré comentando como
fue mi experiencia al practicar cada una de ellas. Sin más que decir, comencemos:

Anapana Sati
Esta es la primera meditación que
aprendemos, en la cual pasamos los tres
primeros días practicándola (doce horas diarias
cada día). Al traducir esta palabra al español
tenemos que, Ana significa “Inhalar”, Apana
“exhalar”, y la palabra Sati significa
“conciencia”. Así que esta técnica simplemente
consiste en estar consciente de nuestra inhalación y exhalación.
Se trata que concentremos nuestra atención en todo el triangulo de la nariz, el cual
abarca desde el interior de la nariz, la entradas de las fosas nasales hasta toda la zona del
bigote, y mientras lo estemos haciendo nos enfocaremos en percibir atentamente como
entra el aire, y en como sale, evitando juzgar el proceso.
Más nada, solamente eso, sin intentar forzarlos, ni controlarlo, y cada vez que nos
distraigamos con un pensamiento o sensación, lo que haremos será simplemente llevar otra
vez nuestra atención a la respiración.
Como ya dije, durante el curso practicaremos Anapana durante los primeros tres
días, y a medida que pasen los días iremos reduciendo nuestra zona de atención hasta poder
sentir y mantenerla en un área diminuta en la zona del bigote. Se nos indicara que estemos
consciente a todo aquello que ocurra en ese espacio, incluso se nos indicara que intentemos
percibir como el aire que sale es más caliente que el que entra, poniéndole mayor atención a
aquellas sensaciones que sean más sublimes.

La razón de porque se dedican los tres

primeros días exclusivamente a que solamente
observemos nuestra respiración es primeramente
porque, cuando llegamos a un curso de vipassana
nuestra mente se encuentra muy revuelta y ansiosa
por nuestro día a día, y con nuestra práctica usando
esta técnica nos ayudara a domarla.

Otra razón es porque vipassana es literalmente una operación profunda que hacemos
para arrancar de raíz todo aquello que nos hace sufrir (si quieres saber cuál es la causa del
sufrimiento revisa este post), y para lograr esto necesitamos tener una mente tan afilada
como un bisturí, siendo por ello el Anapana la técnica idónea para lograrlo.

La primera vez que practique Anapana no sabía que era posible llegar a sentirse
agotado puro por el hecho de respirar. Esos tres días caía como un bloque en la cama por
las noches. También descubrí lo agitada que era mi mente, pudiéndome percatar como
saltaba de un lugar a otro como si fuera un mono inquieto y revuelto. Esos tres días me
enseñaron a ver mi propia tormenta mental de frente.
 Vipassana

Luego de haber pasado los tres primeros

días y toda la mañana del cuarto solamente
observando la respiración, y en cada oportunidad
intentando que sea en un espacio de menor
tamaño, nos enseñan vipassana.
La técnica de vipassana consiste en un
escaneo corporal que va desde la coronilla de la
cabeza hasta la punta de los pies, siendo una
exploración que se realiza de manera ordenada
en cada ciclo, para así no pasar por alto ninguna
parte de nuestro cuerpo. Se intenta que el escaneo corporal sea haga a través de zonas que
no sean mayor de 5 u 8 centímetros de espacio corporal. Esto con el fin de que seamos
capaces de percibir las realidades más sublimes de nuestro ser.
Así mismo, a medida que pasen los días iremos aprendiendo diferentes maneras de
explorar nuestro cuerpo. De arriba abajo, por partes, de manera fluida y en forma de
barrido, por diferente zonas a la vez, e incluso hasta penetrando capa por capa a través de el
mismo.
También, a la vez que nos enseñan vipassana se nos
instruye en Adhitthana, que significa “Firme Determinación”,
puesto que tenemos que durar 1 hora sin movernos, tres veces al
día mientras meditamos en vipassana.

Mi experiencia con la técnica del vipassana fue bastante

dura (creo que es así para todos que vamos por primera vez),
puesto que en esas primeras horas de Adhitthana emergieron en
mi mis mayores miedos, apareció mi lado más crítico junto con
enormes tormentas mentales y, a pesar de lo duro, les puedo decir en este momento que
gracias a mi práctica con vipassana aprendí a afrontar estos aspectos de mi.
 Otra cosa impresionante que sucedió esos días en los que practicaba vipassana, fue
que me vinieron recuerdos muy viejos de mi vida, que yo de hace mucho tiempo había
olvidado. Algunos de estos recuerdos eran significativos puesto que me ayudaron a tomar
consciencia y sanar momentos que marcaron mi vida. También tuve recuerdos que fueron
intranscendentes, pero que me impresionaron porque tenían mucho tiempo sin que me
pasaran por la mente. Por ejemplo, recordé a personas que tenia años sin saber de ella.
También me paso que pude vivir en carne propia esa sabia frase que dice “el cielo y
el infierno están dentro de ti”. Esto es una gran verdad, yo me di cuenta de ello porque un
día estaba en una de las horas de meditación en la cual, estaba pasando por una tormenta
mental muy negativa, y, por un momento mi atención se fue a percibir lo que estaba
pasando a mi alrededor, pudiendo escuchar el cantar de varios pájaros y el sonido relajante
de la briza, lo que hizo que me diera cuenta de que yo era el que estaba produciendo mi
propio sufrimiento en ese momento, que yo era el que creaba mi propio infierno.

Metta

Esta es la ultima meditación que aprendemos

durante el curso, la cual nos los enseñan en el
decimo día, y viene siendo en este arduo proceso
como el bálsamo sanador, que viene a cerrar la
herida que hicimos mientras operábamos nuestra
Ser con vipassana.
Metta significa “Amor universal”, y al
practicar esta meditación vamos cultivamos
nuestra capacidad para Amar. Vamos aprendiendo
esta técnica a través de los siguientes pasos:
1. Cultivando Metta hacia nosotros mismo: Todo parte desde nosotros, si no nos
sabemos amar no podemos darle amor a otros, esto lo resumo con una frase de Ayn
Rand que dice: “Para poder decir Yo te amo, primero hay que saber decir Yo”.
2. Dando Metta a una persona querida: Un segundo nivel es poder lograr sentir que
durante la meditación le podemos trasmitido amor a una persona que sea significativa
 para nosotros porque la queremos. Ya hay un lazo de sentimientos positivos que los une,
lo cual facilitara el poder sentir amor hacia esa persona.
3. Desarrollando Metta hacia personas que son indiferentes: Aquí empezamos a
buscar a alguien que no tenga ninguna importancia para nuestra vida, con el fin de que
podamos percatarnos que es un ser viviente como nosotros, que sufre y que solo por eso
es merecedor de dar y recibir amor. De esta forma, podemos empezar a desarrollar
nuestra capacidad para percibir que todos estamos conectados de algún modo.
4. Fomentando Metta hacia una persona difícil: Esta etapa suele ser difícil, puesto que
ya en nuestro interior existen sentimientos negativos hacia ese ser. Por esto es de suma
importancia practicarlo, puesto que nos permite purificar desde nuestro interior y
liberarnos de eso sentimientos negativos.
5. Dirigiendo Metta a todos los seres: Al llegar a este punto seremos capaces de irradiar
amor a todos los seres, pregonando en carne propia lo que dice Goenka:

“Que todos los Seres sean felices, estén en paz, se liberen, se liberen, se liberen”

En las veces que he hecho un curso

de vipassana al llegar al día en que
realizamos la primera sesión de Metta, siento
mientras lo hago como si algo se expandiera
dentro de mí. Poco a poco empiezo a sentir
que la fuerza del latido de mi corazón se
incrementa hasta tal punto que lo puedo
llegar a sentir por todo mi cuerpo. Después
de terminar esta meditación me he sentido
como si estuviera levitando.

Apenas por los momentos llevo dos cursos de vipassana, y le puedo decir que, en
cada uno pude darme cuenta como me encuentro encadenado a aquello que me genera
sufrimiento. Gracias a esto, ahora mi vida transcurre de manera tranquila y sin que me
abrume la dura realidad que se está viviendo en Venezuela. Les digo y les confirmo que, si
no fuera por mi experiencia en Vipassana en este momento estuviera padeciendo de una
depresión profunda. También, gracias a vipassana puedo ser capaz actualmente de ayudar a
todas aquellas personas que acuden a mi consulta.
Por todo esto y mucho más les invito a que hagan un curso de vipassana, el cual es
completamente gratuito y hay un centro de vipassana casi en todos los países del mundo.
Solo tendrías que escribir en google vipassana junto con el nombre del país donde te
encuentras, y te saldrá la página web que te dirá en que parte se encuentra, como también
podrás ver el calendario de los próximos cursos.

Para terminar, hay una frase en vipassana que la quiero compartir con toda la
comunidad de steemit, y especialmente a aquellas personas que están empezando en esta
red social. Goenka dice siempre antes de empezar cada una de las meditaciones que
hacemos durante el curso, lo siguiente:

“Con paciencia y persistencia seguro que lo lograras, seguro que lo lograras”