Sei sulla pagina 1di 15

Tradicionalmente se ha distingue entre derecho Objetivo y

derecho subjetivo.
El derecho =bjetivo es “el conjunto de normas jurídicas
vigentes en una comunidad históricamente dada", "conjunto de
normas que hacen posible la vida en sociedad) o que regulan la
convivencia social: son las normas de derecho consideradas en
sí mismas (Pescio)".
El derecho subjetivo es "un poder o facultad que el
ordenamiento jurídico positivo otorga en favor de las personas
para ejecutar dentro de su esfera de libre actuación
individual ciertas y determinadas conductas".

Derecho Público y Derecho Privado.


Esta es la distinción más amplia y general que es posible
hacer a propósito del derecho positivo, la cual sirve
comúnmente para ordenar luego las distintas ramas o partes
del ordenamiento jurídico. Se han realizado grandes esfuerzos
para determinar un criterio exacto de diferenciación. El
primero de estos criterios se encuentra en el Derecho Romano
y atiende a "si la utilidad era para toda la comunidad o para
los particulares". Otros criterios o doctrinas son los
siguientes:
1.- Criterio del interés protegido: si la norma protege y
regula el "interés general o común" es de Derecho público; en
cambio será de Derecho privado si ampara y regula los
intereses de los individuos como particulares.
Pero como siempre hay dificultades para distinguir entre los
intereses de los individuos y el interés general o común, se
señala que el derecho privado es el que ampara y regula
principalmente los intereses de los individuos y la norma
será de Derecho público "cuando de manera preponderante se
protege y regule el interés de la comunidad".
2.- Criterio que analiza el carácter derogable o inderogable
de las normas: según este criterio serán de Derecho público,
aquellas normas que sean inderogables, es decir, aquellas que
tienen carácter irrenunciable. Mientras que serán de Derecho
privado aquellas que son derogables o renunciables. Sin
embargo, este criterio no resulta apropiado, pues existen
muchas normas de Derecho privado que a pesar de ser
irrenunciables siguen siendo de Derecho privado, por ej. las
normas que dicen relación con la familia y el matrimonio.
3.- Criterio que mira al sujeto de la relación jurídica: si
el sujeto activo o el pasivo, o el uno y el otro de una
relación jurídica es una persona que ejerce su imperio, la
relación es de Derecho público, al igual que la norma que
regula dicha relación, por ej. el estado, la municipalidad.
En cambio es de Derecho privado, si el sujeto de la relación
carece de imperio o bien teniéndolo no lo ejerce en la
relación determinada, luego la norma que regula esa relación
es de Derecho privado.
Derecho privado
Los tratadistas franceses señalan que en el Derecho privado
siempre existe concurrencia de particulares los que son
libres para hacer todo aquello que el orden jurídico no les
haya prohibido expresamente.
Luego entendemos por Derecho privado “el que regula los actos
que los particulares realizan en su propio nombre y por sus
intereses individuales”.
El Derecho privado está integrado por diversas ramas, a
saber: Derecho comercial o mercantil, Derecho de Minería,
Derecho laboral, Derecho agrícola, Derecho industrial,
Derecho Civil, etc.
A contrario sensu son ramas de Derecho Público, el Derecho
constitucional, Derecho administrativo, Derecho penal,
Derecho financiero. El derecho procesal participa de los
caracteres de Derecho público y privado.
Origen de la expresión Derecho Civil
1.- Según Marcel Planiol, esta denominación corresponde a la
"traducción literal de la palabra latina ius civile”. Su
origen está en el Derecho Romano para quienes éste era el
Derecho propio de un pueblo independiente, es decir, de los
ciudadanos romanos. Se oponía a él el “ius gentium” que
correspondía a las reglas aplicables a todos los pueblos.
2.- Sin embargo, a través de los siglos, esta expresión ha
tomado otros sentidos. Es así que en la Edad Media, cuando ya
solamente existía un solo Derecho (fin del Imperio Romano),
la expresión “Derecho Civil” se utilizaba para referirse el
“Derecho Romano” representado por las recopilaciones de
Justiniano (Siglo VI). En esta época el “Derecho Civil”, se
oponía al “Derecho Canónico”.
3.- Con el transcurso del tiempo las palabras “Derecho Civil”
han adquirido un sentido diverso, lo que tiene una
explicación de carácter histórico. Se empezó a entender al
Derecho Civil como sinónimo de Derecho Privado (en oposición
al Derecho público). Como veíamos anteriormente el Derecho
civil correspondía al Derecho romano en la recopilación de
Justiniano, éste comprendía tanto Derecho público como
Derecho privado, pero al producirse la caída del imperio las
normas públicas perdieron valor y utilidad (por ej. las
relativas a magistrados, funcionarios municipales, etc.). Por
tanto, los juristas sólo recurrían a la obra de Justiniano
buscando reglas de Derecho privado. Esto queda demostrado en
la gran obra del jurista francés Domat (siglo XVI) llamada
“Las leyes civiles en su orden natural”, que versa
exclusivamente sobre Derecho privado. Además escribió otra
obra sobre Derecho político y administrativo y la denominó
“El Derecho público”.
4.- Al producirse en 1789 la Revolución francesa el nuevo
sentido había penetrado en el uso de tal manera que cuando el
constituyente y la Convención quisieron unificar el Derecho
privado de Francia, hablaron del Derecho civil y del Código
Civil. Luego después de haber servido por más de 10 siglos
para designar al Derecho Romano, en la actualidad la
expresión apunta al Derecho privado.
Concepto de Derecho Civil
“Es la parte general del Derecho privado que regula las
relaciones de los particulares entre sí, fundamentalmente en
lo que se refiere a las personas, la familia y el
patrimonio”.
Análisis del concepto
a.- “Es la parte general del Derecho privado..”. Esto
significa que el derecho Civil es aplicable al común o a la
generalidad de las personas, en contraposición a ciertos
Derechos especiales que a pesar de formar parte del derecho
privado, contienen reglas de excepción en atención a la clase
de actividad que se desarrolla o a ciertos bienes. Se dice
que es general, porque es el que proporciona la base
dogmática, para todo el Derecho que no sea estrictamente
político. Esto se hace más evidente si pensamos en nuestro
Código Civil ya que comienza con un “Título Preliminar” cuyas
normas van más allá del solo ámbito civil e incluso más allá
que el Derecho privado, por eso es que al propio decir de don
Andrés Bello, se puede aplicar a la legislación toda.
b.- “…que regula las relaciones de los particulares entre
sí…”.
c.- ….."fundamentalmente en lo que se refiere a las
personas……". Esto es, regula a la persona: su nacimiento,
estado, capacidad, vida, extinción.
d.- "….a la familia….", esto es regula el matrimonio, la
filiación, adopción, guardas, etc.
e.- También regula las relaciones patrimoniales de los
particulares entre sí, esto significa que contiene normas que
se refieren a la constitución de la propiedad, su
transferencia, su transmisión, etc.
Características del Derecho Civil
1.- Es Derecho privado, es decir, es el conjunto de normas
jurídicas que disciplinan las relaciones jurídicas entre los
particulares, regulando especialmente a las personas, la
familia y el patrimonio. Recordemos que no es la única rama
del Derecho privado, pero sí la principal.
2.- Es Derecho interno, pues regula las relaciones jurídicas
efectuadas en nuestro país y que hayan de producir efectos
dentro de nuestras fronteras, en contraposición al derecho
internacional privado que regula las relaciones jurídicas que
se producen fuera de nuestro país, o que hayan de producir
efecto fuera de nuestras fronteras patrias.
3.- Según la distinción que los autores franceses llamados
clásicos han formulado, se entiende el Derecho Civil como un
“Derecho sustantivo”, porque las normas que lo componen tienen
por objeto la determinación de los derechos subjetivos que
nacen o se constituyen a partir de las relaciones jurídicas
privadas.
Se opone a esta clase de derecho el denominado “Derecho
adjetivo” que no se refiere a los derechos subjetivos sino en
cuanto señala la forma de como estos deben hacerse valer
mediante el ejercicio de las acciones respectivas ante los
órganos jurisdiccionales, en este sentido téngase presente que
durante mucho tiempo la teoría de la acción jurisdiccional,
esto es la que permite provocar la tutela estatal representada
por el órgano jurisdiccional no pudo desvincularse del derecho
subjetivo cuya protección se procuraba, así cuando se
intentaba definir la acción se decía que era el derecho
deducido en juicio, exacerbando la dependencia de los llamados
derechos adjetivos, nos referimos dentro de esta categoría
preferentemente y quizás por excelencia al Derecho Procesal.
4.- Es Derecho general, de las disciplinas jurídicas que
componen el Derecho Privado, el Derecho Civil es el más
General, desde un punto de vista histórico la primera
disciplina que reguló las relaciones entre los particulares
fue precisamente el Derecho Civil. El Derecho Civil da su base
dogmática a todo el derecho que no sea estrictamente político.
Esto se patentiza en nuestro Código Civil, ya que las normas
del título preliminar trascienden a la normativa civil, y aún
a la privada, para aplicarse, como lo señaló el propio Andrés
Bello a la legislación toda (en esta parte se siguió el
ejemplo del Código de Napoleón (Código Civil francés de 1804)
que contiene un título preliminar sobre la publicación, los
efectos y la aplicación de las leyes en general, sin embargo
Bello fue más amplio aún).
Por otra parte las normas conceptuales y abstractas que
contienen la teoría de los actos jurídicos y de las
obligaciones configuran la estructura general de nuestro
ordenamiento jurídico.
5.- Es Derecho Común, por este carácter es que el Derecho
Civil constituye la parte fundamental de los estudios
jurídicos. Podemos afirmar que del Derecho civil emanan otras
disciplinas especiales, luego es imposible concebir el
estudio particular de una determinada disciplina jurídica sin
tener conocimiento previo del Derecho Civil. Toda relación
jurídica que no encuentre una disciplina propia, se
encontrará regida por normas de Derecho Civil.
Contenido del Derecho Civil
El Derecho Civil se encarga de regular las siguientes
instituciones:
1.- El Derecho Civil se refiere en primer lugar a Las
Personas, en sí mismas, toda vez que es la disciplina jurídica
encargada de estructurar aspectos referidos al principio y fin
de los sujetos de derecho, "esto es de aquellos entes dotados
de la aptitud legal para ser titular de derechos y deberes
jurídicos", cuando hablamos de sujetos de derecho se entiende
que la referencia está dada para las personas naturales y
jurídicas (art.54). El art.55 define a las personas naturales
como “todo individuo de la especie humana cualesquiera sea su
edad, sexo, estirpe o condición”, por su parte el art.545
define a la persona jurídica diciendo que “es una persona
ficticia, capaz de ejercer derechos y contraer obligaciones
civiles, y de ser representada judicial y extrajudicialmente”.
Además en relación con las personas el derecho Civil regula
todo lo que dice relación con la institución de la capacidad,
estableciendo también alguna regulación de ciertas facultades
que se reconocen a los sujetos de derecho por el sólo hecho de
ser tales.
2.- Los bienes, sabemos que las cosas están destinadas a
satisfacer necesidades humanas, sirven para nuestro
desarrollo y perfeccionamiento. Respecto de las cosas el
hombre puede encontrarse en las siguientes situaciones: a.-
puede tenerse, ostentarse una cosa pero reconociendo que es
de otra persona, es decir, se tiene la mera tenencia de la
cosa, b.- puede que tengamos la cosa sin ser dueño pero con
ánimo de dueño, luego se tiene la posesión de la cosa, c.-
por último puede que tengamos el poder máximo respecto de la
cosa, es decir, el dominio. Pero además del dominio, sobre
las cosas pueden existir otros Derechos reales, por ej. uso,
usufructo, habitación, etc.
3.- Las obligaciones y los contratos (Derechos personales).
En la situación de los Derechos personales, a diferencia de
lo que ocurre en los Derechos reales, no se tiene un poder
directo sobre la cosa, luego se recurre a otra persona, que
sí tiene un poder cuál es la posibilidad de exigir el
cumplimiento de una obligación determinada, esto es, nace un
derecho por un lado y un deber por el otro.
4.- El Derecho Civil, tiene también entre sus cometidos la
regulación de la Familia, que puede ser definida como un
"conjunto de personas unidas por vínculos de parentesco,
matrimonio y adopción". Desde este punto de vista las normas
del derecho Civil regulan las relaciones personales y
patrimoniales entre padres e hijos y entre marido y mujer, a
propósito del matrimonio cabe señalar que lo relativo a los
efectos patrimoniales de este acto jurídico solemne recibe la
denominación de "régimen de bienes o régimen patrimonial
matrimonial".
4.- Sucesión por causa de muerte y herencia. Al fallecer el
titular de un patrimonio, ese patrimonio no se pierde sino
que lo obtienen, lo adquieren sus herederos.
5.- En nuestro Código Civil también se contienen ciertas
materias que desbordan el Derecho civil, es más, van más allá
del Derecho privado por eso es que se contienen normas
relativas a la ley su promulgación, publicación,
interpretación, derogación, etc.
Nota: La expresión máxima del Derecho Civil, está constituida
por nuestro Código Civil.
Un código es “una recopilación metódica y lógica de leyes de
la misma naturaleza" (reunión armónica de normas que regulan
una determinada materia y que responde a ciertos principios
fundamentales). Y el Código Civil, es un conjunto de leyes que
tienen por objeto la reglamentación de las relaciones de
familia, de la propiedad y de las obligaciones. En definitiva
el Código Civil es el Código general de la familia y del
patrimonio. Nuestro Código Civil data del 14/12/1855 fecha que
corresponde a su promulgación, y empezó a regir el 01/01/1857.
Victorio Pescio señala que el Código Civil representa un
esfuerzo prolongado (material y científico) difícilmente
igualado y jamás superado en la acción de nuestro país, su
principal realizador que logró estructurarlo y darle expresión
concreta fue don Andrés Bello.

Principios Inspiradores Del Código Civil Chileno


A.- El respeto a la personalidad
Este criterio rector de nuestro Código se formula en el
principio constitucional de la igualdad ante la ley que había
sido recogido en la Constitución de 1833. Don Andrés Bello,
hombre profundamente imbuido de un espíritu humanista no podía
dejar de establecer como idea central de su obra el necesario
respeto a las personas, puesto que las personas constituyen la
razón de la existencia de la legislación civil, este principio
se manifiesta en diversas normas del Código, así por ej:
1.- En el art.55 cuando Bello define a la persona natural
señalando que “son personas todos los individuos de la especie
humana cualquiera que sea su edad, sexo, estirpe o condición”.
De esta manera el insigne jurista rechaza categóricamente
cualquier forma de discriminación de la persona humana.
Recuérdese que Chile fue uno de los primeros países que abolió
la esclavitud.
2.- En el ámbito contractual, el principio del respeto a la
personalidad se encuentra implícito en el art.1560 que señala
que “conocida claramente la intención de los contratantes debe
estarse más a ella que a lo literal de las palabras”, de esta
manera don Andrés Bello deja inequívocamente consignado un
criterio fundamental en materia contractual: “la voluntad de
las partes prevalece siempre sobre aquello que puedan
expresar”. La idea que subyace en esta norma jurídica es que
siempre debe prevalecer aquello que las partes han querido o
aquello que han tenido la intención de celebrar, por sobre
aquello que ha podido declararse o manifestarse.
3.- En el ámbito del derecho de familia, este principio se
expresa en una concepción del contrato de matrimonio que se
inspira en el derecho canónico, esto es, que para don Andrés
Bello, la familia presenta los rasgos esenciales de
legitimidad, indisolubilidad y monogamia. Este mismo principio
puede constatarse en la regulación exhaustiva de los derechos
y deberes que corresponden a padres e hijos y a marido y
mujer. Cuando Andrés Bello define el matrimonio señala que es
“un contrato solemne por el cual un hombre y una mujer se unen
actual e indisolublemente y por toda la vida con el fin de
vivir juntos, procrear y auxiliarse mutuamente” (art.102).
Con esta disposición consagra una familia legítima fundada en
un matrimonio de carácter monogámico y categóricamente
indisoluble. Siguiendo el criterio que en esta materia de
derecho de familia impuso Bello al padre de familia le
corresponde la decisión económica de algunos asuntos del grupo
familiar y a propósito de la relación entre padres e hijos
estableció el deber de obediencia y respeto que a los hijos
les corresponde con respecto de sus padres.
4.- En materia de bienes, se dice que el principio se
encontraría en la consagración del “derecho de propiedad” y en
la tendencia que podría observarse en numerosas disposiciones
del Código de propender a “la libre circulación de los bienes”
(principio éste de orden público el cual aparece consagrado en
diversas disposiciones del Código, por ej. en los art.745 y
769 que prohíben respectivamente la constitución de dos o más
fideicomisoso o usufructos sucesivos, precisamente porque
entraban la disposición del bien).
Don Andrés Bello estaba influido por los principios económicos
que imperaban en su época marcada por una incipiente
industrialización y por ideas libremercadistas. En este
sentido consagra la propiedad individual, en la estimación de
que por esta vía pudiera ser alcanzada la mayor realización
del hombre. Adviértase que los detractores del Código
esgrimían como principal crítica a las normas que Bello
consagró sobre el derecho de propiedad la de que éste era un
Código elaborado “por y para los latifundistas y por eso lo
llamaban peyorativamente el Código de los propietarios”.
Sin embargo, el jurista venezolano, si bien aceptó la
propiedad privada, también abogó por la libre circulación de
esta propiedad, esto es por un principio de distribución de la
riqueza en la creencia que de esta manera se propendería al
crecimiento social.
5.- En lo tocante al derecho sucesorio el legislador
estableció un sistema de “relativa libertad para testar”.
Andrés Bello, que encuentra entre sus fuentes inspiradoras el
Derecho Anglosajón, estima que es prudente establecer en Chile
un sistema de libertad para testar, pero consiente de la
necesidad de adaptar las instituciones jurídicas a las
características propias del ser nacional. Consagra sin
embargo, una relativa libertad testamentaria, esto es una
libertad restringida para testar, el testamento es un acto de
última voluntad que habrá de producir efectos después de los
días del testador, mientras vive el testador conserva la
facultad de revocar las disposiciones testamentarias
(art.999).
El testador está autorizado por ley para disponer de sus
bienes, pero esta disposición que el testador puede hacer no
es enteramente libre, porque la persona de cuyo testamento se
trata debe respetar cierta parte de sus bienes en favor de
ciertas personas que el legislador llama asignatarios
forzosos.
En el art.1167 se dice que, asignaciones forzosas son las que
el testador es obligado a hacer, y que se suplen cuando no las
ha hecho, aún con perjuicio de sus disposiciones
testamentarias expresas. Asignaciones forzosas son: 1° los
alimentos que se deben por ley a ciertas personas, 2° las
legítimas, 3° la cuarta de mejoras en la sucesión de los
descendientes, de los ascendientes y del cónyuge.
Si la persona que intenta testar no tiene asignatarios
forzosos podrá disponer libre y soberanamente de sus bienes y
si el causante, esto es la persona de cuya sucesión se trata
no otorgó testamento, para saber que hacer con sus bienes se
aplican las normas legales sobre la sucesión intestada o
abintestato.
B.- La autonomía de la voluntad.
El principio de la autonomía de la voluntad es una “doctrina
filosófica jurídica, según la cual toda obligación reposa
esencialmente sobre la voluntad de las partes”. “La voluntad
es, a la vez, la fuente y medida de los derechos y
obligaciones”. Decir que la voluntad es autónoma significa que
ella “es libre para crear derechos y obligaciones”. Se dice
que es "la facultad que el ordenamiento jurídico reconoce a
las personas para celebrar los actos jurídicos que estime
convenientes, determinando su contenido, efectos y duración".
La doctrina de la autonomía de la voluntad sirve como telón de
fondo a la mayoría de los principios fundamentales de la
contratación. Así el principio del consensualismo, la libertad
contractual, la fuerza obligatoria, el efecto relativo y la
buena fe. Los cuatro primeros principios aparecen como sub-
principios o derivaciones de la autonomía de la voluntad. Sólo
el último en la décadas más recientes va adquiriendo renovado
vigor, y se perfila independiente de ella. El sistema de
interpretación subjetiva de los contratos es también corolario
de la autonomía de la voluntad.
El consensualismo y la libertad contractual dicen relación con
la formación, génesis o nacimiento del contrato, esto es, en
el acto de constitución de la relación jurídica contractual.
La fuerza obligatoria y el efecto relativo conciernen a los
efectos del contrato, es decir regulan la relación jurídica ya
formada. El principio de la buena fe se proyecta en todo el
iter contractual. En cuanto a la interpretación de los
contratos, bajo el imperio del sistema subjetivo, admitido en
Chile por el art.1560, el intérprete debe retroceder en el
tiempo, regresando a la génesis del contrato, para dirimir la
controversia a la luz de lo que entonces quisieron los
contratantes.
En la época de Bello se estimaba que el principio de la
libertad contractual dominaba sin contrapeso en el ámbito del
Derecho Privado, pero, claro está, que en ese período
histórico no se concebían aún ciertas figuras jurídicas que
hicieron su aparición más tarde aunque ya comenzaban a
gestarse en el período en comento, se trata de lo que hoy se
conoce como el fenómeno de la “contratación dirigida” (por
razones de orden público económico, o social, el legislador
fija imperativamente las cláusulas mas relevantes de ciertos
contratos, los que dejan de estar entregados a la libre
decisión de las partes, por ej. contratos individuales de
trabajo), “los contratos forzosos” (aquel que el legislador
obliga a celebrar o da por celebrado, por ej. la caución de
conservación y restitución de la cosa fructuaria que debe
rendir el usufructuario o la caución que deben rendir tutores
y curadores para el discernimiento de la guarda).
En todo caso interesa destacar que don Andrés Bello en
consideración a este principio consagró en favor de los
particulares las más amplias facultades para decidir si se
celebra o no un acto jurídico, el contenido de dicho acto, los
efectos que de él emanarán y la manera de como habrá de
extinguirse.
Manifestaciones de este principio en el Código Civil:
1.- El art.12, que consagra la posibilidad de renunciar a los
derechos conferidos por las leyes con tal que sólo miren el
interés del renunciante y no esté prohibida su renuncia.
2.- El art.1445, según el cual para que una persona se obligue
a otra por un acto o declaración de voluntad es necesario, que
sea legalmente capaz, que consienta en dicho acto o
declaración y su consentimiento no adolezca de vicios, que
recaiga en un objeto lícito, que tenga una causa lícita.
3.- El art.1567, establece que toda obligación puede
extinguirse por una convención en que las partes interesadas
siendo capaces de disponer libremente de lo suyo consienten en
darla por nula.
4.- El art.1450 en que se señala que la promesa de hecho
ajeno, el tercero no contraerá obligación alguna sino en
virtud de su ratificación.
5.- El art.1444 establece la facultad de las partes para
modificar las cosas de la naturaleza de un contrato, o para
agregarle cosas accidentales, por medio de cláusulas
especiales emanadas de la voluntad.
6.- El art.1545 que dispone que todo contrato legalmente
celebrado es una ley para las partes contratantes y no puede
ser invalidado sino por su consentimiento mutuo o causas
legales, esta disposición establece toda la fuerza de la
declaración de voluntad, el acuerdo de las partes tiene el
imperio de una verdadera ley para los contratantes.
7.- El art.1560 norma fundamental en materia de interpretación
de contratos, conocida claramente la intención de los
contratantes, debe estarse más a ella que a lo literal de las
palabras.
8.- El art.1234 en materia de aceptación de una asignación
hereditaria.

C.- La Plenitud Hermética


“Se entiende por tal la idea de que todo el derecho está
contenido en la ley”, es decir, “que cualquier conflicto de
relevancia jurídica que se presente en la sociedad tiene
indicada una solución en alguna norma legal”.
El derecho debe dar solución a todo conflicto de relevancia
jurídica que se presente en el orden social. Pues bien, Bello
creía firmemente en la concepción primitiva de la plenitud
hermética y sus normas son el reflejo de ello, por eso nuestro
Código no contempló los vacíos o lagunas legales como un dato
cierto sino que apenas como una posibilidad, ello queda
demostrado con las siguientes normas:
1.- En el art.24 según el cual si una norma legal no logra ser
interpretada mediante los sistemas tradicionales de
interpretación, los pasajes obscuros o contradictorios de la
ley se interpretarán del modo más conveniente al espíritu
general de la legislación y a la equidad natural.
2.- En el art.1 que coloca gran cuidado para definir la ley
diciendo que la ley es una declaración de la voluntad soberana
que manifestada en la forma prescrita por la Constitución,
manda prohibe o permite.
3.- En el art.2 que señala que, la costumbre no constituye
derecho sino en los casos en que la ley se remite a ella.
4.- En el art.3 que señala que, sólo toca al legislador
explicar o interpretar la ley de un modo generalmente
obligatorio, en relación al inciso segundo de este mismo art.
algunos autores opinan que es francamente lapidario porque
establece que, las sentencias judiciales no tienen fuerza
obligatoria sino respecto de las causas en que actualmente se
pronunciaren. Con lo cual Don Andrés deja entrever una
inquietante desconfianza en la magistratura.
D.- El principio de la buena fe
Proyectada en el terreno del derecho Civil, la buena fe asume
dos direcciones: la buena fe subjetiva y la buena fe objetiva.
a.- Estar de buena fe (buena fe subjetiva), "es la creencia
que, por efecto de un error excusable, tiene la persona de que
su conducta no peca contra derecho", el caso mas antiguo y
probablemente el más importante, en que se ha puesto de
relieve la buena fe subjetiva es el de la posesión de buena fe
de una cosa ajena, art.706 inciso primero. En el Derecho
Familia el mayor dispensador de la buena fe subjetiva se halla
en la institución del matrimonio putativo, el que se
caracteriza porque la nulidad sólo se proyecta hacia el
futuro, careciendo de efecto retroactivo.
b.- Actuar de buena fe (buena fe objetiva), a ella se remite
el art.1546 cuando prescribe que los contratos deben
ejecutarse de buena fe, y que, por consiguiente, los contratos
obligan no sólo a los que en ellos se expresa. La regla de la
buena fe objetiva impone a los contratantes el deber de
comportarse correcta y lealmente en sus relaciones mutuas,
desde el inicio de los tratos preliminares y hasta incluso
etapas post-contractuales.

E.- El principio de la responsabilidad


“La responsabilidad civil consiste en la reparación de un
perjuicio o un daño ilícitamente causados”. En materia civil
se distinguen dos campos fundamentales de responsabilidad: a.-
la contractual (respecto de aquellas personas que no han
cumplido oportunamente la obligación derivada de un contrato)
y, b.- la extracontractual (respecto de aquellas personas que,
dolosa o culpablemente han cometido un ilícito que causa daño
a un tercero).
La responsabilidad civil extracontractual se configura a
través de la comisión de un delito o cuasidelito civil, que
los art.1437 y 2284 señalan como fuente de obligaciones. La
obligación que de ellos nace es precisamente reparar el daño
causado.

F.- El principio de la reparación del enriquecimiento sin


causa
Si bien es cierto que el derecho se preocupa de la
equivalencia en las prestaciones de las partes, el legislador
por su parte acepta el lucro incluso desproporcionado en los
contratos siempre y cuando dicha ventaja esté provista de un
fundamento jurídico, en otras palabras acepta el
enriquecimiento pero no el enriquecimiento sin causa.
Luego el enriquecimiento sin causa “es aquel que no tiene un
motivo jurídico válido para haberse producido”.
Requisitos para estar frente a un enriquecimiento sin causa:
a.- El enriquecimiento de un patrimonio.
b.- El empobrecimiento de otro patrimonio.
c.- Relación de causa a efecto entre el enriquecimiento de un
patrimonio y el empobrecimiento de otro patrimonio.
d.- Ausencia de causa eficiente, esto es, sin fundamento
jurídico.
e.- Ausencia de otra acción, esto implica que el que ha
sufrido el emprobrecimiento no cuente con una acción directa
paea restablecer el equilibrio roto, pues si la tiene y no la
ejerce no podrá operar esta institución.
El enriquecimiento sin causa lo considera el Código en
diversas materias, tales como:
a.- En la accesión, en particular en una forma de accesión que
es la edificación, plantación y siembra.
b.- En las prestaciones mutuas.
c.- Recompensas en el régimen de sociedad conyugal.

Códigos Civiles más importantes

I.- Código Civil francés


En 1800 el Primer Cónsul de Francia, Napoleón Bonaparte dictó
un decreto nombrando una comisión encargada de redactar un
proyecto de Código Civil (entre otros, la conformaban
Tronchet y Portalis). Esta comisión culmina su labor en
cuatro meses entregando su proyecto de Código Civil francés.
Napoleón lo envió al Tribunal de Casación y a los tribunales
de Apelaciones, los que hicieron insinuaciones importantes al
proyecto. Para que se convirtiera en ley lo envió al Poder
Legislativo formado por cuatro organismos, uno de ellos (el
Tribunado) rechazó el Título Preliminar.
Ante esta situación Napoleón recogió el proyecto y adoptó dos
medidas: a.- Modificó la composición del Tribunado. b.- Envió
por partes el proyecto de Código Civil, extraoficialmente, a
los miembros del Tribunado y cuando ya contaba con la
anuencia del tribunado entonces lo hizo llegar oficialmente.
Así se aprobaron 36 leyes que más tarde fueron reunidas en un
solo cuerpo en virtud de una ley de 21-3-1804 dando origen al
Código Civil francés. Tenía 2.281 artículos.
Se dividía en un título preliminar y tres libros. El Título
preliminar trata de la publicación, efectos y aplicación de
las leyes en general. El libro I trata en general de las
personas, el libro II trata en general de los bienes, el
libro III trata de los diversos modos de adquirir la
propiedad: de las sucesiones, de las donaciones entre vivos y
de los testamentos.
Características
a.- Se funda en la idea de reconocer el mismo poder jurídico
para todos los franceses (Nuestro Código Civil consagra la
igualdad para todas las personas. Luego, es más generoso).
b.- Consagra la inviolabilidad de la propiedad.
c.- Eleva a la categoría de principio indiscutido el de la
autonomía de la voluntad (en cuya virtud las personas tienen
la facultad de celebrar los actos jurídicos que deseen,
determinando libremente su contenido, efectos y duración).
d.- Es una obra técnica muy bien desarrollada, se dice que es
un código equilibrado y que posee un sentido de realidad.
e.- En materia de dominio y otros derechos reales se aparta
del derecho romano ya que la propiedad se adquiere por el
sólo título.
f.- Seculariza el matrimonio y en esta materia el dolo no
vicia el consentimiento.
g.- No regula el contrato de trabajo y nada estatuye acerca
de las personas jurídicas.
Juicio valorativo
1.- Críticas
a.- Excesivamente individualista.
b.- No protegía la propiedad mueble o mobiliaria, ya que
fundamentalmente se preocupó de la propiedad raíz.
c.- Le falta solidaridad social.
d.- No contempló normas acerca de la investigación de la
paternidad.
2.- Méritos
a.- Es un Código de gran valor técnico, sus soluciones son
adecuadas a la sociedad francesa de aquella época.
b.- Es un Código Civil con sentido de realidad.
Más tarde Napoleón hizo elaborar un Código de Procedimiento
Civil, un Código de Comercio, un Código de Instrucción
Criminal y un Código Penal. Luego, aproximadamente en 1810
Francia ya tenía una legislación completa. La influencia
ejercida por el Código Civil francés es innegable, existen
muchos Códigos tributarios del francés, entre ellos, el
nuestro. Napoleón lo llamaba “mi Código”.

II.- Código Civil Alemán o de Guillermo II (BGB)


La comisión encargada de elaborarlo demoró alrededor de 20
años en su labor. Fue un trabajo muy prolijo, concienzudo. Se
dice que este Código Civil es la obra científica más perfecta
de fines del siglo XIX y principios del siglo XX. Tiene cinco
libros, va precedido de un título preliminar (ley de
introducción que consta de 218 arts.). En total el Código
Civil tiene 2.385 artículos. Entró a regir en 1900.
Características
a.- Es un Código Civil depurado, con gran sentido científico.
b.- Es mucho menos individualista que el Código Civil
francés.
c.- Se inspira en el derecho romano y germánico.
d.- Presenta varias modalidades a propósito de las siguientes
materias:
1.- Matrimonio
Se puede decretar su nulidad si uno de los contrayentes ha
padecido de error en cuanto a las cualidades sociales,
civiles o morales respecto del otro contrayente. Además en
Alemania, se puede decretar la nulidad del matrimonio si
alguno de los contrayentes ha sido víctima de dolo. En Chile
esto no es posible.
2.- En materia de Bienes
Se establece un régimen de inscripción de la propiedad raíz.
Lo que en alguna forma coincide con nuestro sistema. Luego
para adquirir el dominio se necesita: a.- Un título. b.- Un
modo. Al igual que en Chile. A diferencia de lo que ocurre en
Francia, pues ahí basta con el título o contrato para
transferir el dominio.
3.- En materia sucesoria
a.- Se acepta con amplitud los pactos sobre sucesión futura o
también llamados en Roma “pactos corvinos”. Esto significa
que se acepta que por ej. el hijo de una persona actualmente
viva contrate con un tercero cediéndole todos los derechos
que ese hijo tendrá en la sucesión futura de su padre. En
nuestro Derecho lo anterior se prohíbe.
b.- Acepta los testamentos conjuntos pero siempre entre
cónyuges.
Juicio Valorativo
Mérito: Es un trabajo muy depurado desde el punto de vista
científico, es un deleite para los juristas formados o
iniciados. Prohíbe los actos de emulación, esto es, actos que
si bien el titular de un derecho los ejecuta dentro de sus
facultades, los lleva a cabo sobre todo para dañar a otro,
sin un real apreciable beneficio propio (ejercicio de un
derecho que tiene como único fin dañar a otro).
Crítica: Consagra principios abstractos lo que lo hace poco
accequible al pueblo, a los imperados por ese Código Civil.

3.- Código Civil italiano


Italia se encontraba regida por un Código Civil que tenía la
corriente napoleónica, que se había promulgado en el año
1865. Sin embargo, el acontecimiento de la Primera Guerra
Mundial y el surgimiento de un movimiento ideológico fascista
en Italia, hicieron que surgiera el deseo de cambiar su
Código Civil. En el año 1923 se nombra una comisión encargada
de elaborar un proyecto de Código Civil. Intervinieron en su
elaboración y estudio los juristas más notables de la ciencia
jurídica italiana. Es así que se dictaron varias leyes las
que, más tarde reunidas en un solo cuerpo constituyeron el
Código Civil italiano, que fue publicado el 16-3-1942. Consta
de un título preliminar y seis libros. Posteriormente se ha
ido modificando con el objeto de ir eliminando ideas
políticas fascistas que se habían incorporado al Código
Civil.
Juicio Valorativo
Méritos
a.- Reunificó el Derecho privado en torno a un Código Civil,
porque no sólo disciplina a las personas y la familia, los
bienes obligaciones y sucesión por causa de muerte, sino que
también relaciones de trabajo, mercantiles y también normas
procesales en su último libro que se denomina “De la tutela
de los Derechos”. Hoy no existe en Italia un Código de
Comercio.
b.- Se estima que es la obra más brillante en materia de
Derecho privado. Contienen instituciones muy modernas como la
teoría de la imprevisión.
Crítica: No solucionó algunos problemas en materia de bienes
y en materia sucesoria, temas que los tratadistas habían
dejado de manifiesto.

4.- Código Civil Suizo y Código federal de las obligaciones


Hoy rige en Suiza un Código Civil único para toda la
confederación, comenzó a regir el 1 de enero de 1912
conjuntamente con el Código federal de las obligaciones. El
texto está escrito en alemán, francés e italiano. Los tres
textos se consideran originales y no son una traducción de los
otros. Posee la misma técnica legislativa que el Código Civil
alemán pero es más práctico y sencillo, está escrito en un
lenguaje popular y conciso. Ha sido calificado como
moralizador y social por el valor decisivo que concede a la
buena fe y el rechazo al abuso del derecho. Se compone de 977
arts. más un título final. Se divide en las siguientes partes:
Derecho de las personas, Derecho de la familia, Derecho de las
sucesiones y derecho de las Cosas.

Potrebbero piacerti anche