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UNIVERSIDAD AUTONOMA DEL NORESTE

Campus Piedras Negras

Expresión oral y audiovisuales


Ángela Romero Vela
1° G
11 de diciembre del 2017
“Los seres vivos y el planeta”

No heredamos la tierra de nuestros ancestros, la tomamos prestada de nuestros


hijos, dice un proverbio nativo americano. De antemano sabemos que los seres
humanos somos los responsables del radical cambio de nuestro planeta.
Muy buenos días maestra, directivos y compañeros de clase, mi nombre es Ángela
Romero Vela y esta mañana hablaré de un tema que es muy trillado puesto que las
redes sociales, la televisión y en general, los medios de comunicación, nos hablan
acerca del cuidado de este, pero a pesar de saber y conocer lo que podemos hacer,
no lo hacemos, el medio ambiente.
Se producen alrededor de 2 millones de muertes al año en todo el mundo debido a
la contaminación que sufre el aire que respiramos, la tierra de la que nos
alimentamos y el agua que bebemos a diario.
El medio ambiente es todo ser vivo que nos rodea, de aquí, nosotros obtenemos los
recursos naturales y las materias primas que utilizamos para sobrevivir.
El hombre desde el inicio de los tiempos ha buscado saciar sus necesidades, con
esto, ha fabricado herramientas para facilitar su sobrevivencia como avances
científicos y técnicos, descubrimientos, industrialización, crecimiento demográfico,
etc. Todo esto ha provocado que nuestro planeta este deteriorándose, al abusar y
hacer mal uso de todos los recursos naturales que tenemos lo estamos agotando.

Toda actividad que practica el ser humano tiene impacto en el medio ambiente, no
obstante, hay ciertas actividades que provocan un daño mayor que otras, las cuales
curiosamente se han hecho muy indispensables en nuestras vidas, algunas son la
agricultura, ganadería y la pesca, la extracción de recursos, la industria, la
producción de energía y la urbanización e infraestructuras. Todo esto ha provocado
la contaminación del agua y del aire, la destrucción de la capa de ozono, la
destrucción de los bosques, la eliminación de la biodiversidad en general.

Según distintas instituciones como la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos


Naturales (SEMARNAT) y el Instituto de Geografía de la UNAM, en nuestro país
perdemos alrededor de 500 mil hectáreas de bosques y selvas cada año, esto ha
provocado que cientos de animales y plantas estén extintas, en peligro de extinción
o amenazadas. Las principales causas de la deforestación son los campos de
cultivo, la tala ilegal de árboles, los incendios producidos por causas naturales o
actividad humana y las plagas.

La acelerada deforestación que se presenta en México es alarmante, que a pesar


de ser uno de los países con mayor biodiversidad en todo el planeta y poseer una
gran riqueza cultural gracias a esta, nos coloca en el quinto lugar de deforestación
a nivel mundial. La deforestación lleva a dañar los ecosistemas, a una pérdida de
biodiversidad y a la aridez en el terreno. Además, se evita la fijación de dióxido de
carbono (CO2), por lo que se contribuye al cambio climático.

Uno de los mayores desafíos de nuestro tiempo y para la sociedad, es el cambio


climático, que consiste en un cambio significativo y duradero de los patrones locales
o globales del clima, las causas pueden ser naturales, como por ejemplo,
variaciones en la energía que se recibe del Sol, erupciones volcánicas, circulación
oceánica, procesos biológicos y otros procesos naturales de nuestro planeta, o
puede ser causada por influencia de las actividades humanas, como por ejemplo la
emisión de CO2 o alteraciones del uso de grandes extensiones de suelos que
causan, finalmente y desgraciadamente el calentamiento global.

El calentamiento global es un aumento de la temperatura de la atmosfera terrestre


que se ha visto desde finales del siglo XIX (Revolución Industrial). En donde el
causante principal es el aumento de gases efecto invernadero que resultan de las
actividades humanas, como lo son la quema de combustibles fósiles (carbón, gas
natural y petróleo) y la deforestación.
Las principales consecuencias son la expansión del agua (el nivel del mar
ascenderá), deshielo de los glaciares, inundaciones de ciudades y desaparición de
otras, además, en los lugares donde normalmente llueve o nieva podrían calentarse,
habrá más sequías por lo que será más difícil practicar la agricultura, los lagos y
ríos podrían secarse, los desastres naturales como lo huracanes y tornados serán
más frecuentes y con mayor impacto, los océanos se harán más ácidos lo que
pondrá en riesgo la existencia de arrecifes de coral y seguramente dañará la
industria pesquera y las otras especies marinas existentes.

En la actualidad, se realizan distintas campañas con el fin de concientizar a la


población de todo el daño que estamos causándole a nuestro planeta, también,
surgen diversas propuestas para cambiar el estilo de vida que llevamos,
proponiendo utilizar diferentes fuentes de energía en vez del combustible fósil. Sin
embargo, las personas suelen no darle la importancia debida que necesita esto,
pues no lo ven como algo cercano, lo cual es erróneo ya que prácticamente lo
estamos viviendo.

Es importante tomar en cuenta que no solo se daña nuestro entorno, si no también


tiene un impacto en la salud humana. A consecuencia de las olas de calor, se estima
que ocurrieron alrededor de 30.000 muertes en Europa en el año 2003. Por lo tanto,
los drásticos cambios en la temperatura, han aumentado los casos de cáncer de
piel, problemas respiratorios (neumonía, asma, bronquitis) dispersión de
enfermedades infecciosas, problemas alimenticios, deshidratación, enfermedades
virales (dengue, hepatitis), problemas cardiovasculares, enfermedades del sistema
circulatorio y cáncer de pulmón.
Seguramente para todos esto nos resulta tedioso en vez de preocupante, pues,
miles de conferencias se nos han impartido, sin embargo, ¿alguna vez hemos
tomado en serio alguna de estas? Esto es nuestra realidad.

Si bien, somos los responsables de la contaminación, también somos quienes


podemos hacer la diferencia. Somos quienes podemos ejecutar acciones que
aporten solución a la contaminación.

Cambiar de actitud y practicar pequeñas acciones desde depositar la basura en su


lugar, reciclar, utilizar productos amigables con el ambiente, reutilizar, cuidar y
sembrar más árboles, no tirar desechos en el suelo ni el agua, darle un menor uso
al automóvil; si todos los ciudadanos nos sumamos en hacer algo por nuestro
planeta alargaría la vida de esta.
Aun haciendo estas actividades y cambiando de forma radical nuestro estilo de vida,
sólo lograríamos agregar unos años más a la vida en nuestro planeta, por desgracia,
la única solución efectiva para acabar con esto sería abandonar la tierra.

Y ahora pienso, que si seguimos como vamos sin frenar la contaminación, ¿Qué
mundo le vamos a dejar a nuestras generaciones futuras? Sé que soy joven, pero
me llena de impotencia saber que generaciones pasadas no midieron las
consecuencias y solo les importo el dinero que dejaba el explotar nuestros recursos
naturales.

Sé que soy joven, lo sé, pero, en un futuro yo seré madre y ustedes padres de
familia, imaginen que un día sus hijos los vean a los ojos y les pregunten como eran
los tigres de bengala o un elefante, o como era el respirar aire limpio, o disfrutar de
un atardecer con la familia, algo que tal vez en este momento no le des importancia,
pero que un futuro no muy lejano, un niño te mirara y te dirá por qué no hiciste nada,
por qué dejaste que se desperdiciara el agua, por qué no tiraste la basura en su
lugar, por qué usaste el coche cuando pudiste ir en bici o caminando, por qué, por
qué y por qué...

Deben darse pasos firmes pero seguros para crear una conciencia universal, ya que
nuestra indiferencia, la pereza, la ignorancia y el descuido nos pueden conducir a la
pérdida del mundo tal cual lo conocemos.
Muchas gracias.

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