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Examen de
Premio
De
Otorrinolaring
ología
Tema: Vértigo
5to Año Medicina
2013 - 2014
El Vértigo es una de las principales manifestaciones de alteración del sistema del
equilibrio, síntoma que provoca una gran cantidad de consultas médicas en el
accionar diario otorrinolaringológico y de otras especialidades, siendo necesario
abordarlo por ser una problemática de Salud actual. Habitualmente el vértigo
puede ser muy incapacitante y en algunas ocasiones, actúa como señal de una
enfermedad de pronóstico reservado.
La valoración del paciente con vértigo, una de las molestias más comunes por la
que se busca atención médica, a menudo es estimulante y frustrante para el
médico. Resulta difícil valorar el vértigo, pues se trata de una molestia subjetiva
que no puede medirse. En ese tenor, la causa subyacente de este síntoma común
puede variar de factores psicógenos a una enfermedad del sistema nervioso
central que representa riesgo para la vida.
Formas de Vértigo
• Vértigo:
Los pacientes que experimentan una ilusión de movimiento falso entre sí mismos
y el mundo exterior El movimiento puede incluir una percepción de que el entorno
se mueve mientras el cuerpo permanece fijo (vértigo objetivo) o de que el cuerpo
se mueve mientras que el entorno permanece fijo (vértigo subjetivo). El vértigo,
excepto en sus formas más leves, por lo común se acompaña de grados variables
de náuseas, vómito, palidez y diaforesis, lo que indica actividad excesiva del
sistema nervioso autónomo. Por lo común no hay pérdida de la conciencia.
Cuando el vértigo no se relaciona con movimiento verdadero, la causa se
encuentra en los órganos periféricos de los sentidos 85 % de las veces, y en el
sistema nervioso central sólo en 15 %.
• Presíncope:
Denota la percepción del paciente de que está a punto de desmayarse. Los signos
y síntomas concomitantes son sensación de zumbido en la cabeza, de piernas
flojas, constricción del campo visual, palidez, diaforesis y náuseas. El
presíncope se presenta como ataques agudos, pero en ocasiones en episodios
crónicos. La gravedad de los síntomas depende de la magnitud de la reducción de
flujo sanguíneo que se experimenta en el cerebro.
• Desequilibrio:
Se refiere a la sensación de perder el propio equilibrio sin percibir movimiento
ilusorio o pérdida inminente de la conciencia. Aparece cuando ocurre una
interrupción en la integración entre los estímulos sensoriales y las respuestas
motoras. Por lo común los pacientes no refieren problemas al sentarse o acostarse
sino que perciben inestabilidad en bipedestación, o sobre todo durante la marcha.
Aunque no es raro el desequilibrio en la ancianidad, este síntoma en pacientes
jóvenes sugiere enfermedad neurológica.
Vértigo periférico
Se presenta como crisis súbitas de poca duración, quizás minutos u horas y se
acompaña de manifestaciones auditivas como la sensación de plenitud,
hipoacusia y acúfenos, así como síntomas neurovegetativos (sudoración,
taquicardia, hipotensión y náuseas). No presenta signo de focalización neurológica
Etiología:
• Síndrome de Méniere
El síndrome de Ménière se presenta con síntomas de plenitud aural, hipoacusia
neurosensorial fluctuante, tinnitus y vértigo. Este alcanza máxima intensidad a
pocos minutos del inicio y luego cede lentamente en las siguientes varias horas.
Por lo común el paciente queda con sensación de inestabilidad y mareo después
del episodio agudo. En la mayor parte de los casos se puede localizar el síntoma
en el oído afectado debido a las molestias auditivas relacionadas. En etapas
iniciales, la hipoacusia neurosensorial es de baja frecuencia y completamente
reversible, pero en etapas tardías se observa hipoacusia residual y puede afectar
las frecuencias media y alta. Los epidosios pueden presentarse a intervalos
regulares durante años, con períodos de remisión mezclados de manera
impredecible. Por último el síndrome alcanza una fase de extinción, que origina
hipoacusia permanente grave pero cese del vértigo. El síndrome de Ménière es
idiopático, pero parece estar involucrado el sistema endolinfático del oído interno,
que es responsable del sentido del equilibrio. Se produce una dilatación del canal
endolinfático coclear por un aumento del volumen de la endolinfa.
Es una enfermedad poco conocida cuyo diagnóstico exacto no es fácil. En
general, se diagnostica por exclusión de otras causas de vértigo. Dependiendo de
la circunstancia de cada caso concreto, puede ser necesaria la realización de
diferentes exámenes médicos, entre ellos valoración neurológica, valoración por
otorrinolaringólogo, audiometría y resonancia para excluir otras causas de vértigo,
como neurinoma del acústico.
• Laberintitis
La laberintitis se produce al inflamarse el laberinto por causas infecciosas (virus o
bacterias), lo que genera vértigo, que se asocia a dolor de cabeza, fiebre u otros
signos de infección. Para que ceda el vértigo, debe tratarse la causa infecciosa.
• Fístulas Perilinfáticas
Las fístulas perilinfáticas suelen deberse a lesiones traumáticas (tos o estornudos)
o hiperbáricas (es decir, a un aumento en la presión atmosférica sobre el oído,
como ocurre al practicar buceo). Se presenta como un vértigo de posición y falta
de audición que es variable, dura unos días y cede solo.
• Neuronitis vestibular
La neuronitis vestibular se presenta con vértigo grave y súbito que puede durar
varios días. Aunque son comunes náusea y vómito, no hay hipoacusia u otros
signos neurológicos focales.
• Otras causas
Infección, ototoxicidad, trastornos degenerativos, trastornos metabólicos y efectos
de la cirugía
Vértigo Central
Se caracteriza por ser continuo, dura días y no existen alteraciones auditivas ni
hay síntomas neurovegetativos. Giro de objetos mal definidos, vértigo de aparición
lenta y larga duración no influenciado por los movimientos, signo de focalización
neurológica de aparición común
Etiología
El vértigo es de origen multifactorial, es decir, son muchas las razones por las que
puede percibir una persona esta alucinación. Puede deberse a enfermedad del
tallo encefálico y del cerebelo en lugar de ser un trastorno periférico.
Vasculares
Degenerativas
• Esclerosis Múltiple
Puede presentarse con vértigo hasta 10 % de las veces, y hasta 33 % de los
pacientes con este trastorno experimentan vértigo en algún momento en la
evolución de su enfermedad.
Tumorales
• Neurinomas del Acústico :
Edema súbito o hemorragia del tumor con compresión del tallo encefálico.
Metabólicas
• Diabetes Mellitus
• Hipercolesterolemia
Traumatismos
• Lesión directa del tejido cerebral
• Hematoma intracraneano
Tóxicos o Medicamentosos
• Alcohol
• Café,
• Benzodiazepinas
• Aminoglucosidos
Vértigo cervical
Los síntomas son producidos por una posición del cuello o cuando el paciente
tiene Vértigo continuo y graves problemas cervicales cuando se observan
espasmos musculares prominentes en la exploración de la cabeza. Puede
haber vértigo cervical propioceptivo cuando las carillasarticulares del cuello son
sobreestimuladas, lo que provoca sensación de inestabilidad o vértigo. El
espasmo muscular agudo del cuello, como el observado en lesiones de
latigazo, a menudo se acompaña de értigo, porque la tensión muscular altera
la configuración normal de las carillas articulares.
Diagnóstico
La anamnesis es la parte más importante del estudio del paciente con vértigo
mientras que la exploración física añade información útil a la valoración general;
ambos pueden proporcionar el diagnóstico en más de 80 % de personas con
vértigo. Un procedimiento diagnóstico útil es averiguar si las molestias se deben a
un trastorno encefálico, a uno del oído interno, a ambos, o a ninguno.
• Anamnesis
El vértigo que se origina en el oído interno a menudo tiene inicio súbito.
El antecedente de vértigo o mareo de inicio más gradual sugiere origen en el
sistema nervioso central.
Los síntomas intermitentes son típicos de enfermedad del oído interno, mientras
que los continuos indican que es más probable un trastorno del sistema nervioso
central. Como regla, entre más central el proceso, es más prolongado.
Es esencial averiguar si hay hipoacusia, plenitud aural, presión o dolor, tinnitus,
reclutamiento (percepción de que el sonido es anormalmente intenso), o diplacusia
(distorsión del tono) como fenómenos coexistentes. Todos estos síntomas son
cocleares e indican fuertemente que la enfermedad es periférica más que central.
• Exploración física
Debe enfocarse en los sistemas que participan en el control postural y el vértigo.
Como el único signo objetivo del vértigo es el nistagmo, la exploración de los ojos
es de extrema importancia en la valoración del paciente que sufre ese trastorno.
Tradicionalmente, la prueba de Romberg se ha considerado propioceptiva.
La observación de la marcha del enfermo durante la exploración puede revelar
signos de inestabilidad, tambaleo o posición de base amplia durante la caminata.
Por lo común, el de origen vestibular consiste en movimiento de sacudidas
horizontales rotatorias, con un componente lento y otro rápido.
Vértigo Periférico.
• Nistagmo: horizontal rotatorio, siempre en la misma dirección, proporcional
a la intensidad del vértigo, fatigable, con fase rápida al lado contrario de la
lesión.
• Romberg: cae al lado de la lesión.
• Babinski: marcha hacia la lesión, contrario al nistagmo.
• Prueba de índices: desvía los dos al mismo lado.
Vertigo Central
• Nistagmo: horizontal, vertical o rotatorio, en varias direcciones,
desproporcionado a la intensidad del vértigo, no fatigable, con la fase rápida
al mismo lado de la lesión.
• Romberg: cae indistintamente a los dos lados.
• Babinski: marcha hacia el lado del nistagmo.
• Prueba de índices: sólo se desvía un solo lado.
Pruebas Especiales
• Audiometría: Para valorar la capacidad auditiva del paciente. En la
mayor parte de los casos de vértigo periférico existe caída en agudos,
excepto en el síndrome de Ménière, en el cual se observa una caída en la
frecuencia de graves.
• Craneocorpografía: Para valorar la inestabilidad en posición estática del
paciente y ante desplazamientos.
• Electronistagmografía: Para valorar la existencia de nistagmus.
• Posturografía: Para valorar la inestabilidad simulando movimiento del
entorno.
Tratamiento
El tratamiento del vértigo debe ser aplicado por la necesidad de aliviar de
inmediato al enfermo, la mayoría de las veces cuando todavía no se sabe la
etiología, ya que frecuentemente se presenta con un cortejo de síntomas
neurovegetativos y psicoafectivos que afectan mucho al paciente.
Objetivos:
• Eliminar el vértigo
• Mejorar el compromiso vestibular
• Disminuir o eliminar los síntomas neurovegetativos y psicoafectivos que
acompañan al vértigo
• Identificar los factores desencadenantes que pueden ser prevenidos y
tratados así como, ayudar al paciente a aprender técnicas para mejorar su
independencia
Medidas Generales
Reposo en cama
Cuarto oscuro
Levantarse lentamente, no movimientos bruscos.
Dormir con almohada baja o sin almohada.
Dieta baja de sal
Restringir líquidos
Tratamiento farmacológico
• Antihistamínicos leves (meclizina y fenotiazina):son supresores
vestibulares eficaces y pueden ayudar a que no haya náusea.
• Anticolinérgicos (escopolamina y atropina): disminuyen la descarga
espontánea de los núcleos vestibulares y por tanto reducen la reacción a la
estimulación vestibular.
• Benzodiazepinas: inhiben la actividad en reposo de los núcleos
vestibulares y pueden reducir la actividad en el sistema reticular activador
• Aminoglucósidos: para suprimir el funcionamiento vestibular
(estreptomicina y gentamicina aplicadas en la ventana redonda)
• Histaminérgicos (Betahistina): han resultado de mucha eficacia para el
vértigo y los síntomas neurovegetativo
Tratamiento quirúrgico
Cuando fracasa el tratamiento médico y las crisis generan una discapacidad
importante debe replantearse el diagnóstico y de acuerdo al mismo definir
tratamiento quirúrgico, en el caso que sea indicado y posible.
La cirugía para el vértigo consiste en operaciones conservadoras y destructivas.
Cirugía conservadora
Consisten en un intento por modificar la función del oído interno o destruir la
función vestibular del oído en forma selectiva sin afectar la audición: operaciones
del saco endolinfático, con descompresión y colocación de diversas derivaciones y
tubos de drenaje. Gentamicina o Dexametazona directa en el saco endolinfático.
Esos procedimientos aumentan la capacidad de drenaje del saco endolinfático o
mejoran su poder de resorción, con apenas mínimo riesgo de producir hipoacusia
neurosensorial. El trastorno se elimina en más de 90 % de los casos, con una baja
incidencia (< 10 %) de hipoacusia importante.
Cirugía destructiva
Rehabilitación
Es importante en el tratamiento del vértigo. Los ejercicios de habituación
disminuyen la duración y la gravedad del vértigo, son un útil coadyuvante en el
tratamiento de muchos tipos de vértigo, como en la enfermedad de Méniére y
presbistasia, y en la fase de rehabilitación de neuronitis vestibular.