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SERVICIOS a la COMUNIDAD Animación Sociocultural •1
TEMA 10: La Animación Sociocultural: nacimiento y evolución.

Concepto de Animación Sociocultural, objetivos y
funciones. Animación Sociocultural y valores. Otros
conceptos próximos: educación formal y no formal,
educación informal y educación de adultos. La Animación
Sociocultural en España y en la Unión Europea.
Autor: Ángel Parada Albertos

Esquema:
1. Introducción
2. La Animación Sociocultural: nacimiento y evolución
3. Concepto de Animación Sociocultural, objetivos, funciones y valores

3.1. Concepto
3.2. Objetivos
3.3. Funciones
3.4. Valores
Email: info@preparadores.eu • Web: http://www.preparadores.eu
4. Otros conceptos próximos: educación formal y no formal, educación

informal y educación de adultos
4.1. Educación permanente
4.2. Educación formal
4.3. Educación no formal
4.4. Educación informal
4.5. Educación de adultos.
4.6. Educación y Animación Sociocultural: elementos de comparación
5. La Animación Sociocultural en España y en la Unión Europea

5.1 La animación sociocultural en la Unión Europea
5.2. La animación sociocultural en España.
5.3. La animación sociocultural otros países: Francia, Reino Unido,
Alemania, Suiza, Estados Unidos, América Latina.
6. Conclusiones.
7. Referencias bibliográficas y documentales

REV.:10/15
Preparadores de Oposiciones para la Enseñanza c/ Sagasta nº 20 • 1ªD 28004 • Madrid Tel. 91 308 00 32
Abreviaturas, acrónimos y siglas utilizadas
ANSC ANIMADOR SOCIOCULTURAL

ASC ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL
BUP BACHILLERATO UNIFICADO POLIVALENTE
EB ESTADO DE BIENESTAR
EdA EDUCACIÓN DE ADULTOS
EdA-Ad EDUCACIÓN DE ADULTOS A DISTANCIA
EF EDUCACIÓN FORMAL
EI EDUCACIÓN INFORMAL
ENOF EDUCACIÓN NO FORMAL
EP EDUCACIÓN PERMANENTE
FP II FORMACIÓN PROFESIONAL 2º GRADO
INAEM INSTITUTO NACIONAL DE EMPLEO
MEC MINISTERIO DE EDUCACIÓN Y CIENCIA
ONG ORGANIZACIÓN NO GUBERNAMENTAL
OTL OCIO Y TIEMPO LIBRE
RD REAL DECRETO
TSASC TÉCNICO SUPERIOR EN ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL
TSASCYT TÉCNICO SUPERIOR EN ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL Y
TURÍSTICA
UE UNIÓN EUROPÉA
UNED UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACIÓN A DISTANCIA
UNESCO ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LA
EDUCACIÓN, LA CIENCIA Y LA CULTURA
1. INTRODUCCIÓN
Para hablar con suficiente criterio de la teoría y práctica de la ASC

debemos tomar en consideración algunos elementos preliminares fruto
tanto de la construcción teórica que sobre la naturaleza de sus
fundamentos pretende elaborar la literatura sociocultural, como de los
resultados que ha ido evidenciando su praxis a lo largo del tiempo. De
manera sintética podemos realizar algunas afirmaciones introductorias al
respecto:
− La ASC: no es una ciencia social. Se configura como una
metodología de la intervención social de carácter especulativo.
− Presenta dificultades de fundamentación teórica y epistemológica
compatibles con la determinación del objeto de estudio
− Entrar en el problema de la metodología implica, a su vez, considerar
que:
o No existen criterios de intervención que de manera exclusiva
asuma la ASC; existen diferentes propuestas metodológicas que
comparten rasgos y características a través de las que se pretende
estructurar la ASC como “ciencia social”:
o En todo caso, debe tratarse de una metodología participativa,
abierta, flexible, adaptativa y dialogante que en todos sus
momentos y acciones tienda a generar procesos en los que se
implican directamente los colectivos sujetos a intervención. Es
decir, se modifica y enriquece de acuerdo a las intervenciones y

aportes de los usuarios, de sus intereses y preocupaciones, de sus
carencias y limitaciones, de sus vivencias e intereses. Se adapta,
también, teniendo en cuenta los cambios que experimenta la
realidad social que le otorga cobertura; objetivando los procesos y
modificando, a tenor de ellos, los pasos, ritmos, procedimientos y
temporalidades.
o Esta retroalimentación es parte esencial de la metodología
sociocultural, tal como aquí la contemplamos; en el entendimiento
de que nunca debe interpretarse como acción dogmática y rígida,
que de la espalda al contexto en que se ubica; bien al contrario,
debe tratarse de una práctica en permanente revisión y
actualización, en consonancia con sus orígenes, funciones y
conexiones con otras disciplinas afines.
Señalar, por último que resultará dificultoso evitar el alto grado de

ambigüedad, que por la propia esencia de la materia de la que
hablamos, se aloja detrás de cada uno de los conceptos y circunstancias
que entramos a considerar.
2. LA ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL NACIMIENTO Y EVOLUCIÓN.
ASC es un término joven y con perspectiva de futuro. Actualmente

existen numerosas experiencias en este campo, materializadas en la
existencia de diversas propuestas y planes con resultados significativos
diferentes. Las intervenciones en ASC parece que apuntan hacia un
magma originario comúnmente determinado: la carencia y necesidad
social. Intervenciones con marcado carácter intencional que en su
diseño intentan delimitar el marco teórico en que se desarrolla la
práctica y se ve sometida a procedimientos metodológicos
homologables.
El término ASC surgió por primera vez en una reunión organizada por la
UNESCO en Mondesee (Austria) en 1950. Al referirse a una actividad de
naturaleza grupal que convino denominarse “animation socioculturelle”.
Desde esa fecha se han llevado a cabo múltiples prácticas de ASC, así
como también una profunda reflexión teórica, pero tenemos que señalar
que no se ha llegado a elaborar una teoría general que formalice la
disciplina ya que se encuentra en fase de tanteo, experimentación y
descubrimiento de nuevas alternativas, que contribuyan a su
estructuración y sobre todo establezcan correspondencias coherentes
entre los dos factores del binomio: teoría y práctica.
Podemos afirmar que la ASC ha existido siempre, sobre todo en los

pueblos/comunidades donde la vida interactiva ha sido importante, en
torno a la plaza o cualquier otro lugar de encuentro ciudadano, pero esa
existencia singular debemos entenderla subsumida en un formato de
educación difusa. Sin embargo, en el momento actual adquiere
connotaciones peculiares. Pretende fundamentalmente producir
transformaciones en los niveles de vida de la comunidad usando la
tecnología y el método científico con fines prácticos; buscando
soluciones concretas a contextos concretos y sobre todo generando
redes de comunicación comunitaria que perduren en el tiempo.
Plantea como objetivo una cierta transformación de las actitudes y las

relaciones colectivas, una acción sobre los individuos y sus conflictos
interactivos, enfocada a estructurar la vida social recurriendo a métodos
cimentados en la autopercepción ciudadana y la participación directa en
el proceso de transformación que se postula.
Temáticas como la despoblación rural, la superpoblación urbana, el

aumento del ocio, el deterioro de la naturaleza, el desempleo, la
alienación consumista, la crisis familiar... plantean una problemática
compleja que genera grandes bolsas de marginación, desarraigo y
exclusión social. Estas circunstancias urgen nuevas formas
socioeducativas capaces de integrar a los diferentes colectivos e
incrementar el grado de cohesión social; estimulando la participación y
desarrollo de los grupos marginados y el aumento global de la calidad
de vida intercomunitaria.
A esta situación añadimos la existencia de grupos reivindicativos que

han fomentado, mediante una continua denuncia, nuevas formas de
concienciación social, reivindicando una cultura popular, como seña de
identidad comunitaria y como vehículo de expresión y apertura a los
demás. Tanto éstos como las organizaciones culturales de distinto
signo ideológico, y las instituciones políticas gubernamentales
nacionales e internacionales coinciden en manifestar la necesidad de
estimular una cultura más activa y democrática, con el fin de corregir los
desajustes y disfunciones socioculturales que debilitan el cuerpo social y
generan contradicciones incompatibles con la esencia del EB, como
principal promotor de una política sociocultural integradora y adecuarla a
las necesidades de los colectivos que más demandan intervenciones
que son el resultado de un análisis social prioritario.
Por lo tanto, la ASC surge como una necesidad social debido al gran
desarrollo industrial y urbano, a los cambios sociales y tecnológicos, a la
mutación económica y cultural de las sociedades modernas, a la
masificación y, sobre todo, a la necesidad que tiene el hombre de
adaptarse al cambio, no solo para comprender la soledad de su tiempo,

sino para colaborar activamente en la transformación de la misma y
superar la despersonalización.
Luego los elementos de tipo social, político, económico y educativo, son
los desencadenantes de esta nueva modalidad educativa. El nacimiento
de la ASC debemos enmarcarlo, necesariamente, en la crisis de la
civilización occidental, sobre todo, a partir del periodo transcurrido desde
el final de la Segunda Guerra Mundial, que es cuando, con mayor
dimensión, se acentúan los cambios, hasta llegar al momento actual. El
individualismo y la disgregación social generan nuevas formas de
marginación sociopsicológica e incapacidades en el individuo para
afrontarlas. Es ahí donde toma cuerpo la ASC como medio para prever
el cambio y preparar a la comunidad para salir de la crisis buscando y
desarrollando soluciones en, desde y para la comunidad
Después de varios años, la ASC ha pasado de ser considerada como

algo periférico a la acción social estructural a convertirse en dominio y
dimensión de políticas institucionales. Con ello se potencia una nueva
modalidad pedagógica, un nuevo modelo de intervención cultural que va
perfilando sus fines, objetivos, métodos, programas, etc. y conformando
un nuevo tipo de profesional a su servicio, el Animador Sociocultural.
Las circunstancias en que surgió la ASC y las causas que la motivaron,

fueron y siguen siendo de carácter marcadamente educativo. Vivimos
en una sociedad con profundos desajustes en todos los órdenes
afectando directamente a la convivencia humana. Y estos no son
solamente técnicos, por tanto su solución no está en la aceleración de
los desarrollos tecnológicos, lo que originaria un bucle estructural de
desajustes sociales; en realidad, sus causas básicas radican en la
creciente complejidad social, económica, cultural y política y en la falta
de recursos humanos para afrontarla; en la dicotomía o separación que
hay entre la creciente complejidad de nuestros propios actos y la
inmadurez de nuestras capacidades para afrontarlos.
Este desfase se manifiesta en todas las áreas y dimensiones de la
sociedad a escala mundial: desde el tejido social elemental (individuo,
familia), hasta los conjuntos macrosociales, que experimentan graves
desajustes en formas muy diversas y con marcadas diferencias: paro,
destrucción ecológica, producción incontrolada de productos tóxicos,
agresividad urbana, etc. Estos ejemplos, entre otros muchos, son más
que suficientes para constatar un desfase que nos afecta a todos, en
tanto que ciudadanos conscientes y solidarios. Su complejidad repercute
en las mismas realidades culturales y educativas, produciendo graves
alteraciones en esas áreas imprescindibles para afrontar humanamente
los desafíos del mundo actual. Hemos entrado en una crisis mundial de
la cultura y la educación (Faure, 1973; Coombs, 1985), tanto cualitativa

como cuantitativa. En consecuencia, la educación se ve hoy desbordada
para afrontar la compleja problemática, y la demanda que le plantean
instancias cada vez más amplias y urgentes tanto en el nivel formal
como no formal.
La impresión generalizada es que, a pesar de los múltiples y crecientes
medios y modalidades educativas, el desfase humano sigue
aumentando. El concepto clásico de educación es incapaz ya de dar
respuesta a las alteraciones socioeducativas actuales lo que ha
provocado una avalancha de ofertas de educación y cultura que afectan
a planteamientos propios de la ASC, obligando a esta joven disciplina a
reconvertirse para readaptarse, sin tiempo material para encontrar su
mejor acomodo conceptual. Es decir:
a) Se han producido cambios sociales muy importantes en la estructura

demográfica de la población (envejecimiento progresivo). Estos
cambios con todos sus matices, producen una modificación profunda
en los usuarios reales y potenciales de la ASC.
b) Se han producido cambios radicales en el sistema productivo
(revolución tecnológica y cibernética), liberando mano de obra y
alterando profundamente el mercado de trabajo.
c) El vertiginoso cambio productivo experimentado a finales del siglo XX
y desarrollado con plenitud en el actual, ha generado, en las
sociedades occidentales desarrolladas, enormes masas de tiempo
libre que es necesario canalizar y dar salida, personalizada y
humanizada, para rescatar al hombre moderno de la tiranía del
consumo, la pasividad y el aburrimiento.
Paralelamente a todo esto se producen otros procesos sociales
degenerativos:
Se desarrolla un sentido de asistencialismo, es decir, la conciencia
de que el Estado, por cuenta de la sociedad, solucione todos los
problemas y desajustes, ya que la persona tiene derecho a ello,
generando, como consecuencia, una dependencia con cierto grado
de improductividad social.
La falta de perspectivas humanas, profesionales, sociales y la
expulsión precoz de los procesos productivos origina conflictos y
crisis sociales permanentes concretadas entre otras en:
▪ Incomunicación
▪ Disgregación social y colectiva
▪ Nuevas formas de marginación y exclusión
▪ Desarrollo del corporativismo entendido como expresión de
intereses parciales y sectoriales, en contraste (directo o indirecto)
con intereses generales y comunes…
Todas estas circunstancias nos remiten a la necesidad de volver a partir

de la comunidad real y asumirla como punto de referencia integral de
toda intervención social que pretenda dar respuesta a estas situaciones.
Asumir la comunidad significa que los problemas y su superación
pueden venir solamente de la misma comunidad cuando sea consciente
de la necesidad de buscar, y generar soluciones participativas que
analicen las condiciones de vida y de trabajo de la población y sus
necesidades.
Pero cuáles son los antecedentes inmediatos o líneas de trabajo que
podernos considerar como configuradoras de lo que hoy podernos
entender corno ASC.
a) La democratización cultural (permitir el acceso “universal” a todos los

bienes culturales) donde la cultura es entendida como un producto
comercializable, elaborado para el consumo de la mayoría. Sus
mecanismos funcionan a través de la extensión cultural. La persona
se reduce a mero receptor de una cultura pragmática transmitida por
los mass-media. La ASC con este enfoque corre el peligro de
convertirse en un mecanismo de control político y cultural, y su
dimensión educativa acabaría reduciéndose a un instrumento
domesticador. Por lo que se hace necesario evolucionar hasta
planteamientos de democracia cultural, donde el protagonismo
(productivo y reproductivo) de la acción cultural recae directamente
en el ciudadano, en la comunidad, en el grupo social en marcha.
b) El alejamiento de esquemas de beneficencia o asistencia social
individualizados, debido a la evolución del trabajo social en el
contexto del EB hacia planteamientos de desarrollo de la comunidad.
c) La evolución del trabajo con adultos en el sentido de educación
básica, llevada hacia la concienciación y emancipación.
Para terminar este epígrafe señalaremos que en el nacimiento y

evolución de la ASC aparecen dos corrientes que tienen su origen en
dos formas de IS diferentes pero que al conjuntarse han ido dando
forma a la ASC tal como actualmente la conocemos.
− IS desde el EB: que se implementa en los países occidentales
desarrollados y que genera fenómenos sociales que reciben
atribuciones conceptuales diferentes: civilización del ocio, cultura de
masas, sociedad de consumo…
− IS desde la perspectiva del desarrollo comunitario: proceso mediante
el que la comunidad participa en la planeación y ejecución de
programas tendientes a elevar su nivel de vida y solucionar sus
problemas.
3. CONCEPTO DE ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL, OBJETIVOS

FUNCIONES Y VALORES
Punto de partida:
La ASC no tiene contenidos teóricos propios. Rescata las huellas
históricas de los procesos educativos, culturales y de interacción
comunitaria y los somete a consideraciones metodológicas, para
incorporarlos, con fundamentación teórica, a los diferentes procesos
planificadores e interventores…
3.1. Concepto
Tratar de definir la ASC puede significar dar sólo un paso más en la

acentuada ambigüedad que rodea a la expresión. Resulta difícil delimitar
el concepto de ASC en cuya idea se entrecruzan elementos tan
heterogéneos y polisémicos como: descentralización, educación
popular, comunicación, derechos culturales, concienciación...
Intentar aproximarse al concepto de ASC es una tarea compleja, dado

que tanto su definición como sus contenidos hacen referencia a los
distintos componentes de la persona, de tipo afectivo, conductual,
cognoscitivo, así como a los distintos planos en los que se desenvuelve
la vida del hombre: familia, escuela, comunidad, grupo de iguales,
municipio, nación, relaciones internacionales…
Es muy difícil delimitar la idea o definir el concepto de Animación
Sociocultural, ya que como indica Barrado (1984), es un fenómeno
social muy amplio que abarca realidades muy diversas y a veces
contrapuestas.
Arranz (1989), por su parte, viene a manifestar que la variedad de
definiciones corresponde a la variedad de conceptualizaciones sobre la
cultura, y que, tras cada formulación de la ASC, existe una diferente
comprensión de la cultura. Podemos atribuir la profusión terminológica a
la falta de un modelo de desarrollo cultural y de un paradigma de
desarrollo comunitario.
A pesar de todo, existe la necesidad de una fundamentación técnica y

epistemológica, una clarificación teórica y una delimitación ideológica de
la ASC, para poder justificar sus intervenciones. Son muchos los autores
que han realizado acercamientos al concepto de ASC, aún teniendo en
cuenta que ésta se distingue más por su modo de actuar, que por su
contenido. Veamos algunos:
Quintana Cabanas (1993), viene a defender que no es lo mismo
Animación que ASC; que ésta es solamente una de las diversas
especialidades de la Animación. Añade posteriormente que resulta
difícil separar los dos términos, puesto que, cuando queremos

expresar qué son cada una de las clases de la animación (cultural,
recreativa, deportiva, social), automáticamente nos referimos a sus
objetos (actividades culturales, de diversión, deporte, interés social...)
con lo cual quedan determinados de un modo tan claro como difícil.
Definir la Animación sin determinantes nos sitúa en un grado de
abstracción que contribuye al desconcierto.
“… la animación sociocultural es un conjunto de técnicas de
intervención que tienen como finalidad estimular una iniciativa que
implica tres procesos: de desarrollo, de puesta en relación y de
creatividad donde el grupo sea el protagonista, destinado a promover
el desarrollo integral de las personas para provocar una
trasformación social.” García Menéndez (1989)
”Es el método de intervención social, centrado en la dinamización de
colectivos humanos a partir de sus propias necesidades e intereses
autoorganizandose y desarrollando sus propias potencialidades
distanciado de un tiempo libre y consumista donde se impone el
objetivo de disfrute y participación en la actividad.” B. Morea (1999)
“Proceso que se dirige a la organización de las personas para
realizar proyectos e iniciativas desde la cultura y para el desarrollo
social.” S. Herman (1988)
“Se trata de una técnica orientada a la promoción de actividades
comunitarias y sociales a partir del desarrollo de nuevos canales de
participación y / o el refuerzo de aquellos canales y espacios ya
existentes. Mediante esta técnica es posible tomar y formar parte de
los proyectos y problemas de una comunidad, al tiempo que se
atienden las experiencias y los lazos existentes entre los
participantes de las diferentes actividades. De esta manera, se
optimiza el desarrollo de las mismas.” D. Fretman (1990)
”…la animación sociocultural se puede definir como el conjunto de
prácticas sociales que tienen como finalidad estimular la iniciativa y la
participación de las comunidades en el proceso de su propio
desarrollo y en la dinámica global de la vida socio-política en que
están integrados…” UNESCO (1982)
“El conjunto de acciones realizadas por individuos, grupos o
instituciones sobre una comunidad (o un sector de la misma) y en el
marco de un territorio concreto, con el propósito principal de
promover en sus miembros una actitud de participación activa en el
proceso de su propio desarrollo tanto social como cultural.” J. Trilla
(1998)
“El conjunto de prácticas sociales que tiene como finalidad estimular
la iniciativa y la participación de las comunidades en el proceso de su
propio desarrollo y en la dinámica global de la vida sociopolítica en
que están integradas.” Barrado (1982)
Por otro lado, si nos acercamos a distintos autores e instituciones, en un

intento de construir una posible definición vinculante (Maíllo, Del Valle,
Quintana, Puig, Ander-Egg, FDC, UNESCO etc.) nos encontraremos
que todas las definiciones expresan un deseo de profundización teórica,
a la vez que indican tanto el carácter incierto de esta noción, como la
gran riqueza que se vislumbra en cuanto a la amplitud de su campo de
aplicación.
Si tratamos de resumir las diferentes concepciones aportadas podemos

afirmar que, desde una vertiente práctica, la ASC se entiende como:
Un estímulo que incita a las personas a iniciar experiencias sociales.

Una acción o conjunto de acciones dirigidas a la elaboración y
desarrollo de un proyecto esencialmente práctico.
Un elemento técnico que permite ayudar a los individuos a tomar
conciencia de sus problemas.
Un conjunto de prácticas sociales que estimulan la iniciativa y la
participación de la comunidad.
Una tecnología social basada en una pedagogía participativa.
Una transformación social y proceso de liberación que lleva a los
pueblos a la creación de su propia cultura y, en suma, a la
construcción critica de la realidad.
Los fundamentos filosóficos de la ASC parten de una reflexión sobre la

crisis de la cultura occidental que puede definirse como la crisis de
transición del materialismo al posmaterialismo, manifestándose en un
profundo y complejo cambio de valores en favor del libre desarrollo de la
persona, la defensa del medioambiente, la libertad de expresión, el
pluralismo ideológico y cultural, la ruptura de las convenciones estéticas,
la relativización de los dogmatismos y la reconceptualización de los
modelos de desarrollo.
Este cambio de paradigmas se materializa, desde políticas
internacionales, en varios trabajos, documentos y programas aparecidos
desde los años sesenta, se generaliza a partir de la década siguiente y
se incorpora a las políticas de intervención más cercanas al ciudadano,
las locales y municipales.
3.2. Objetivos
Para la mayoría de los autores, los tres principios fundamentales en

que se apoya la ASC responden a esta nueva concepción en la que se
ha gestado:
Confianza en la persona. Toda persona es capaz de crear,
desarrollar y expresar su propia personalidad.
Pluralismo cultural. La humanidad se compone de diferentes culturas

desarrolladas en la diversidad de los grupos sociales. En
consecuencia, todas las formas culturales tienen la misma
consideración social, deben ser elegidas libremente y desarrolladas
de forma participativa.
Cooperación. Tanto los individuos como los grupos diferenciados han
de cooperar al desarrollo de los demás individuos y grupos en la
construcción de su propia cultura dentro del marco de la sociedad
global, que es en definitiva, la que justifica a los individuos y los
grupos implicados, dándoles el verdadero, sentido social.
En la práctica, estos principios se orientan hacia estas finalidades:

Universalización: De medios, bienes y acciones sin ningún tipo de
discriminación.
Normalización: Integración de los distintos individuos en su
comunidad.
Descentralización: Toma de decisiones dentro de cada grupo
organizado, democráticamente.
Participación: Autogestión en todos los niveles de la vida social.
Y en consonancia con lo descrito hasta ahora, la ASC perseguiría, en

líneas generales, los siguientes objetivos:
Favorecer que las personas participen en la vida del grupo y de la

sociedad intentando la mejora permanente de la calidad de vida.
Facilitar la adhesión a objetivos libremente elaborados de acuerdo
con las necesidades, las aspiraciones y los problemas de cada
miembro y grupo social.
Vivir en relación con las otras personas, en la aceptación y el respeto
a cada uno, sus valores, sus creencias y las de su medio.
Dar a cada uno la ocasión de intercambiar ideas y expresarse
libremente de acuerdo con su marco de referencia.
Atenuar, para, finalmente, eliminar el hándicap sociocultural y dar a
todos las mismas oportunidades en este campo.
Disminuir, para suprimir finalmente, el vacío sociocultural entre los
estratos sociales.
Crear las condiciones adecuadas que inciten al mayor número de
personas a revalorizar plenamente su potencialidad, así como los
recursos que pueden encontrar en su asociación con otros…
Para Ucar (1992), la ASC persigue en suma:

El desarrollo de la concienciación y el sentido critico
La participación
La integración social
La dinamización sociocultural
La innovación y la creación cultura

La utopía.
3.3. Funciones
La ASC se enmarca en parámetros ideológico-políticos desde los cuales

pueden pretenderse distintas funciones, pero en general, se postulan las
siguientes:
Función de integración. Pretende corregir tanto los defectos del
desarrollo (demográficos, del medio ambiente...), como los fracasos
del Sistema Educativo (analfabetismo, insuficiente educación básica,
fracaso escolar, escasa formación profesional...).
Función de desarrollo. Su labor es la de elevar la calidad de vida de
forma cuantitativa y cualitativa, desarrollando no sólo el nivel cultural
sino también el afectivo, ético, cívico...
Función creativa. Trata de generar procesos de participación que
propicien nuevas formas culturales, así como facilitar los medios y
técnicas para adquirir esas formas culturales orientadas a la
transformación social.
La ASC (siguiendo a Ander-Egg) propone un modelo de intervención

abierto, flexible y dinámico, que se adecue a las distintas necesidades y
características de los grupos implicados, propicie la participación activa
y critica de los individuos y estimule la creación de nuevas expectativas
socioculturales. La función de la ASC no está definida por determinados
sectores o actividades culturales que le son propias, sino por el modo o
perspectiva de promover actividades socioculturales capaces de
proporcionar medios, espacios y recursos para que la participación de
las personas sea efectiva.
3.4. Valores
La ASC debe definir claramente el modelo de cultura y de proyecto al

que ha de dirigir sus esfuerzos. Desde este punto de vista, conviene
subrayar la acción cultural como una tarea de incorporación de los
valores culturales populares a la cultura universal, a la nueva cultura, al
nuevo humanismo como alternativa a la cultura masificada.
-La ASC: transforma socialmente
La ASC se caracteriza por preparar al hombre no sólo para adaptarse
a las distintas situaciones sociales sino para transformarlas.
-La ASC: promueve la participación
La ASC alcanza su pleno sentido cuando se aplica para promover la
participación comunitaria de las capas sociales y de los sectores de
la población que se encuentran ignorantes en lo cultural, aislados en
la sociedad y con indiferencia política.
La ASC implica a las personas y crea una metodología adecuada a

todos según su sexo, edad y condición. Tiende siempre a generar
dinámicas que conviertan al público de espectador en actor y creador
de su propia cultura con el fin de desarrollar sus propios valores.
Conseguir este objetivo implica un proceso para fomentar:
La capacidad para analizar una situación como persona y
colectivo dentro de una realidad más amplia interpretada
críticamente y sentirse responsable de su configuración.
La realización de acciones que transformen las condiciones de
vida a la vez que se está participando en el nacimiento de
relaciones sociales y humanas alternativas
La ASC presenta dos referentes constantes que determinan la
adecuación de su metodología para cada caso concreto: por una
parte la práctica de la misma gente; por otro lado, el nivel de
conciencia que tienen los que participan en las actividades.
-La ASC: incentiva la acción
La ASC se orienta preferentemente a un “hacer” e implica también
una superación de la dicotomía entre teoría y práctica.
La ASC demanda la presencia de un Animador cuya función debe
orientarse a proporcionar elementos para que el grupo encuentre las
repuestas a sus necesidades y contribuir a que la gente recupere sus
propias dimensiones y sea capaz de generar cohesión grupal.
-La ASC: promueve la vida asociativa
Como soporte del crecimiento y de la participación y como
instrumento permanente del cambio. Es urgente que se establezcan
procesos que garanticen a las capas menos integradas la
participación directa en la vida asociativa.
-La ASC: promueve el pluralismo
La pluralidad de valores implica la sana tolerancia de una
multiplicidad de opiniones. El pluralismo no sólo es una constatación
de hecho sobre la existencia de una multiplicidad de grupos, usos y
convicciones diferentes. Es además, una postura de principio por
medio de la cual se acepta o propugna que en la sociedad, coexistan
sin excluirse ni subordinarse unos a otros, distintos grupos sociales
(pluralismo social), distintas fuerza políticas que compiten con el
poder (pluralismo político), y distintas convicciones irreductibles entre
sí (pluralismo ideológico).
Partimos de la base de que la sociedad no tiene por que ser
homogénea o estar monolíticamente organizada, ni todas las
convicciones tienen por que ser compartidas. La consecuencia lógica
de este reconocimiento se cifra en el pluralismo social de intereses,
tendencias ideológicas, culturales y religiosas. EI problema consiste
en articular la unidad y la diversidad, en conciliar los derechos
fundamentales y la dignidad a la vez que respetar las diferencias que
forman parte de sus derechos personales.. La Constitución Española
(1978) enumera los que son fundamento del orden político y de la

paz social tales como: la dignidad de la persona, los derechos
inviolables y el libre desarrollo de la personalidad.
Existen diferencias entre los individuos que son tan reales y
consistentes como lo que tienen de común entre ellos. Es más, la
configuración y estructura que poseen en común ciertos individuos es
la misma que permite que existan diferencias entre ellos. El problema
clave es la búsqueda de equilibrio estable entre la unidad y la
multiplicidad.
-La ASC: promueve la concientización
El trabajo comunitario para lograr cambios y mejoras en las
condiciones de vida, se subordina a una comprensión profunda de la
dimensión de la persona, de sus derechos y del mundo social en el
que habita. Esta es la idea general de concientización que es
fundamento de la Educación Popular. No se trata sólo de un
conocimiento crítico de la realidad social en términos sociológicos y
operativos, sino de la construcción colectiva de las ideas base que le
dan sentido, tanto a la crítica del orden social vigente como a la
disposición del pueblo para transformarlo.
Concientizar según Ladim (1970), es tomar conciencia de lo que el
hombre es, conciencia de sí, de lo que es el mundo y de lo que son
los demás hombres. Sin embargo en cada época histórica es variable
el modo de encarar el mundo, el modo en que se manifiesta la
comunicación entre los hombres y, en fin, el valor de la propia
persona. En último término, todo el proceso de concientización
reclama una concepción del hombre, una visión del mundo, luego se
inserta en una conciencia histórica, donde la concientización es el
inicio del propio proceso educativo, que toma a la persona como
fundamento y su realización como fin. Nadie educa a nadie, diría
Freire, y nadie se educa a sí mismo, los hombres se educan en
comunión y el mundo es el mediador, esto es, los hombres se
educan entre sí transformando el mundo. La educación
problematizadora juega un papel muy importante en este proceso,
por su carácter auténticamente reflexivo que implica un acto
permanente de descubrimiento y acercamiento a la realidad en
constante cambio y renovación.
El proceso no depende de las teorías ni de los estudios empíricos
aunque estén bien diseñados, sino del proceso para ir transformando
la realidad en una acción-reflexión; esto es, la praxis en
comunicación con el mundo. Porque el hombre se transforma a
medida que transforma la realidad adquiriendo otros niveles de
conciencia, planificando su acción y reflexionando sobre tal realidad,
por lo que, tanto el promotor como la comunidad, se introducen en un
proceso de sensibilización y concientización. Por lo tanto, el proceso
de concientización exige la colaboración con la comunidad, educar
para la participación responsable, estimular la expresión de

sentimientos de solidaridad, animar la fraternidad, madurar el sentido
de colaboración.
-La ASC: promueve el ejercicio de la libertad
La ASC busca ante todo promover la libertad. Libertad que reposa en
un juicio de valor positivo, en la fe en la libertad con la convicción de
que la libertad de cada uno es preferible a una limitación de las
posibilidades de elección. Promueve, pues, la libertad de cada
persona. Parte de la base de que el hombre posee un impulso propio
hacia la autorrealización. La animación le facilita el camino hacia la
conquista de la libertad. En este sentido, lo que se persigue es que el
sujeto vaya actualizando su capacidad de ser principio, es decir,
capaz de protagonizar sus propios actos responsablemente.
-La ASC: promueve la democracia
La ASC promueve, sobre todo, la democracia, pues considera que un
individuo, no encuentra su verdadera talla humana hasta que no
ejerce un control activo sobre la comunidad a la que pertenece y si se
priva al individuo de este derecho, queda disminuido y frustrado. A
esto se añade la convicción de que el deseo por el bienestar de los
otros es un impulso humano muy fuerte y el hecho de descuidarlo o
contrarrestarlo provoca insatisfacción y tensiones personales.
La ASC estimula, por otra parte, a los individuos a buscar un modelo
de vida más satisfactorio que sólo se puede conseguir con la
aplicación de estos principios morales, pues la participación activa
del individuo en la vida comunitaria no es solamente un medio para
evitar desacuerdos, sino un valor moral en sí mismo. La ASC no
puede convertirse en realidad más que si el individuo puede
constatar que su acción tiene una influencia real sobre las decisiones
que afectan a la comunidad en la que vive.
La ASC trabaja por conseguir una sociedad verdaderamente
democrática. Por su propia naturaleza reviste un aspecto no
autoritario y participativo, libremente elegido, y su forma y orientación
dependen de la elección concertada con los participantes.
-La ASC: promueve las relaciones humanas
La ASC promueve las relaciones humanas intentando crear un nuevo
clima de opinión pública y una mejor calidad de vida. Aspira a crear
en la sociedad el derecho reconocido de cualquier hombre, a
cuestionar las decisiones de las autoridades políticas, sociológicas,
científicas, etc. Quiere dotar a los individuos del sentido de su propio
valor y de la conciencia de ser miembros completos de una
comunidad.
4. OTROS CONCEPTOS PRÓXIMOS: EDUCACIÓN FORMAL Y NO

FORMAL, EDUCACIÓN INFORMAL Y EDUCACIÓN DE ADULTOS
4.1. Educación Permanente
El concepto de EP expresa una de las grandes revoluciones que surgen

en nuestra época. Trata de llevar la educación a todos los niveles de la
vida con la intención de que la reciban y la ejerciten todas y cada una de
las personas. Constituye una meta pedagógica mucho más ambiciosa
que la propuesta por una educación de adultos o por un programa de
alfabetización total. Sin embargo, la EP no es sinónimo de la Educación
de Adultos. La confusión es fácil ya que, por una parte, lo que impulsa
su introducción es la necesidad de continuar la educación después de la
edad escolar y, por otra parte, las prácticas más extendidas e
innovadoras de la EP se están llevando a cabo en la EdA. Tampoco la
EP es igual a Educación Recurrente, es decir, al despliegue de los
periodos de escolaridad intercalándolos en tiempos de trabajo (es una
ampliación de la Educación a Distancia); ni tampoco puede ser
sinónimo de Educación Continua ya que ésta se centra en el
perfeccionamiento profesional de los trabajadores.
En definitiva, aunque las definiciones de esta disciplina son aún
demasiado amplias, queda claro que sus finalidades, contenidos y
procedimientos no se reducen a una edad poco atendida en la
educación institucional (EdA), ni a determinados medios o formas de
ponerla en práctica (EdA-aD), ni a algunos programas y objetivos
(perfeccionamiento y promoción profesional). Tratando de integrar las
aportaciones anteriores, llegamos a la conclusión de que la EP es la
educación como proceso continuo, que prosigue durante toda la vida,
con el propósito de que toda persona pueda mantenerse actualizada
respecto a las transformaciones poblacionales, económicas, políticas,
tecnológicas, científicas, artísticas, socioculturales y ambientales de
nuestro mundo; logrando el máximo desarrollo individual y social que les
sea posible, y englobando todo tipo de experiencias y actividades que
sean o puedan ser portadoras de educación.
Como vemos, se trata de un concepto muy amplio que integra el resto
de las modalidades educativas. Para Gelpi (1989) viene a coincidir con
el concepto de educación.
La expresión EP según el Libro Blanco de Educación de Adultos,
designa un proyecto global encaminado tanto a reestructurar el sistema
educativo existente, como a desarrollar todas las posibilidades de
formación fuera del sistema educativo. En ese proyecto, el hombre es el
agente de su propia educación por medio de la interacción permanente
de sus acciones y su reflexión.
El Consejo de Europa subraya que para que la EP cumpla su función de

modo eficaz ha de complementarse con una política de desarrollo y de
ASC.
Por su parte Ander-Egg (1987) plantea la ASC y la EP como anverso y

reverso de la misma realidad al indicar que la educación permanente
está concentrada en la necesidad de una capacitación continua y en el
desarrollo de nuevas actitudes culturales acordes con los cambios que
se producen en la sociedad.
Desde el punto de vista teórico la expresión EP consiste en ampliar,

coordinar e innovar todos los recursos disponibles en las sociedades
para la formación de las personas a lo largo de la vida, y en todos
aquellos aspectos que sean perfectibles para el desarrollo de la
subjetividad y de las comunidades sociales. Y desde el punto de vista
práctico la EP orienta sistemas y acciones educativas para:
- Prevenir y remediar carencias a determinadas edades (adultos,

preescolar), en ciertas ocasiones económico-socio-culturales
(igualdad de oportunidades, diversidad, promoción de la mujer...), en
determinados aspectos de vida y convivencia (educación política,
sanitaria, comunitaria, ecológica, para el ocio, para la paz...), en el
uso de medios de comunicación social, enseñanza mutua...
- Actuar con una perspectiva continua y de transformación integral e
los periodos de formación, de los medios, de las materias...
- Incorporar una perspectiva de globalización y de educación universal
sin fronteras, simultáneamente con una consideración de lo particular
que respeta la heterogeneidad y la diversidad.
- Fomentar una educación integral y global como principio básico de
todo el sistema educativo y en el contexto de una sociedad educativa.
- Favorecer que hombres y mujeres comprendan la sociedad en la que
viven, participen en la formación de la misma en un espíritu de
progreso social, respondan a las exigencias del desarrollo y a las
necesidades de la sociedad y se formen en continua
interdisciplinariedad, de acuerdo con el desarrollo económico, cultural
y social de la comunidad.
- Procura superar y vencer las actitudes de apatía y fatalismo, con
relación al esfuerzo para aprender durante toda la vida, que es lo
substancial de la EP.
- Lograr la participación en las reformas, medidas y proyectos
educativos, preparando al individuo para sus responsabilidades
cívicas y sociales y respondiendo a sus exigencias, necesidades y
aspiraciones.
A tenor de lo expuesto, los objetivos de la EP no se reducen al campo

de la actividad escolar, por ello no termina en una reforma de programas
y métodos de enseñanza. No serán, por lo tanto, temas ajenos a la EP,
la familia, el mundo del trabajo, el ámbito de lo político, el arte, los
deportes, los medios de comunicación, las diversiones, la pareja, etc. La
EP se propone así ayudar al hombre en su realización personal, a lo
largo de todo su ciclo vital.
4.2. Educación formal
Según Coombs y Ahmed la EF comprendería el sistema educativo

altamente institucionalizado, cronológicamente graduado y
jerárquicamente estructurado que se extiende desde los primeros años
de la escuela primaria hasta los últimos años de la universidad.
Se conoce también con el nombre de educación reglada, organizada por
el Gobierno; podríamos decir que es la educación que se imparte en los
centros educativos, donde se obtienen unos títulos oficiales con
diplomas acreditativos: Colegios, Institutos, Universidades, etc.
Se trataría de un tipo de educación regulado (por los diferentes

reglamentos internos dentro del proyecto educativo de cada Centro),
intencional (porque tienen como intención principal la de educar y dar
conocimientos a los alumnos) y planificado (porque antes de comenzar
cada curso, el Centro regula y planifica toda la acción educativa que va
a ser transmitida en el mismo).
Otras características:
Se produce en espacio y tiempo concretos, y además con ella se
recibe una credencial formativa: título.
Se transmite y ejercitan los valores que hacen posible la vida en
sociedad.
Conlleva la existencia de un calendario escolar y horario definido.
Se planifican los temas y se programan las actividades.
Responde a una estructura jerarquizada.
Se calendarizan las evaluaciones y se ajustan al proceso de
enseñanza-aprendizaje.
Existe fecha límite de estudios.
Se adquieren hábitos de convivencia democrática y de respeto mutuo
Integración social, cultural y familiar.
Favorece el desarrollo comunitario.
Sin embargo la EF resulta insuficiente para satisfacer las necesidades

de los individuos, en este sentido, se hace necesario poner en marcha
una amplia gama de actividades de educación no-formal
4.3. Educación no formal
La EnoF, según la define J. Trilla (1989) refiere a todas aquellas

instituciones, ámbitos y actividades de educación que, no siendo
escolares, han sido creadas expresamente para satisfacer determinados
objetivos. Asegura que la ASC entraría a formar parte de la EnoF,
aunque si consideramos la ASC en un sentido más amplio y teniendo en
cuenta la diversidad de tipos de animación, habría situaciones en las
que podríamos considerarla vinculada a la educación informal:
animación en fiestas de los pueblos, campamentos etc., o la educación
formal: preparación para el acceso a la prueba de mayores de 25 años
para la Universidad…
Este tipo de educación esta inserto en la tripartición del universo

educativo dividido en EF, EI o EnoF. De esta forma, la EnoF nos queda
definida como toda actividad educativa, organizada y sistemática
realizada fuera del marco del ámbito oficial, para facilitar determinadas
clases de aprendizaje a subgrupos particulares de la población.
Correspondiente a la gran diversidad de experiencias no formales las

características de sus modalidades, agentes, organización, etc. son muy
diversas aunque es posible identificar algunos puntos en común. Su
organización está basada en unidades independientes. La acreditación
es específica de logros especiales, no correspondientes a niveles
modalidades, carreras ni grados académicos. En este ámbito quienes
imparten la educación muchas veces no son ni académicos, ni
profesionales. En sus orígenes estuvo muy ligada a la educación de
adultos, pero hoy adquirió una heterogeneidad de actuaciones y
usuarios.
M.T. Sirvent (1998) marca el ámbito de la EnoF como un espacio de

lucha entre tendencias contrarias y a veces antagónicas ya que muchas
veces se la considera sinónimo de la educación contestaría pero los
estudios demostraron que la demanda y la oferta de la EnoF agudizan
las diferencias sociales y consolidan el déficit del sistema formal. La
EnoF responde, entonces, al conjunto de procesos, medios e
instituciones específicas, y diseñadas en función de objetivos de
formación e instrucción que no tienen directa vinculación a sistema
educativo reglado y oficial.
De acuerdo con Ander-Egg (1999) la preocupación y la práctica de la

educación de adultos surge en forma paralela con el proceso de
industrialización y el desarrollo de las ideas democráticas a mediados
del siglo XIX. Es justamente en este momento histórico que podemos
ubicar los comienzos de la EnoF casi exclusivamente contemplando la
alfabetización de adultos con el objetivo de brindar las herramientas

elementales de la lectura y escritura y algunas nociones de cálculo a las
personas mayores de 16 años para que puedan participar del proceso
de industrialización y democratización que comenzaban a visualizarse.
En este sentido, la educación de adultos ha recibido un tratamiento a
nivel internacional en estrecha relación con los procesos políticos,
sociales y económicos que se han ido desarrollando durante el siglo XX.
En la actualidad el campo de la EnoF, se caracteriza por su amplitud y

heterogeneidad y las funciones que abarca van desde numerosos
aspectos de la educación permanente (alfabetización de adultos,
programas de expansión cultural, etc.), a tareas de complementación de
la Escuela; desde propias de la pedagogía del ocio, a otras que están
relacionadas con la formación profesional. Asimismo atiende a aspecto
de la formación política, cívica y social; ambiental y ecológica; física;
sanitaria; etc. Al mismo tiempo, M. T. Sirvent agrega la Educación
Popular como parte integrante del campo de la EnoF.
Para Coombs (1986), es sencillamente una etiqueta genérica y práctica

que cubre toda actividad organizada, sistemática, impartida fuera del
marco del sistema formal, para suministrar determinados tipos de
aprendizaje a subgrupos concretos de la población, tanto adultos como
niños o jóvenes. En este sentido podemos decir que se trata del
conjunto de actos educativos con objetivos definidos, que se realiza
fuera de la escuela institucionalizada. Está organizada y estructurada.
Tiene la misión de complementar a la educación formal en los ámbitos a
los que ésta no puede llegar. Asimismo, la EnoF utiliza varios
mecanismos para llegar a los ciudadanos, como, por ejemplo: cursos,
conferencias, programas de televisión, etc.
La educación la EnoF para Collado y Álvarez (1986), además de

vivencial, centrada en las necesidades vividas, se caracteriza por ser
crítica, en cuanto pretende fomentar el análisis de todos los factores que
intervienen en cada situación, creadora porque estimula la creatividad
de todos los miembros de la comunidad para descubrir nuevos métodos
de análisis y nuevas soluciones a los problemas, realista en la medida
que se aleja de soluciones utópicas, e integradora porque pretende
establecer un diálogo con la educación formal/institucional para romper
las fronteras artificiales existentes entre ambas, incompatibles con el
objetivo de una educación global y permanente, de forma que los
diversos grupos de una comunidad, niños, jóvenes, adultos, participen
en la prevención de problemas comunitarios.
4.4. Educación informal
La EI permite adquirir y acumular conocimientos y habilidades mediante

las experiencias diarias y la relación con el medio ambiente. Es un
proceso continuo y espontáneo que no se da de manera intencional que
se realiza fuera del marco de la EF y la EnoF, como hecho social no
determinado, de manera intencional. El sistema la reconoce y la utiliza
como parte de sus aprendizajes.
Los aprendizajes están determinados por situaciones cotidianas del

contacto social, en su mayoría no son organizados o administrados por
una estrategia educativa determinada, son experiencias que se dan en
ámbitos más relajados que los escolarizados; la familia es el principal
grupo social en el que se desarrollan este tipo de aprendizajes, que con
sus respectivos contactos sociales facilitan la personalización de los
individuos, el club deportivo, la asociación cultural a la que concurren las
familias, el grupo de amistades con el que se vive la sociabilidad, entre
otros; y en definitiva los medios masivos de comunicación que entran ya
en otra modalidad de la educación informal, es decir, son actividades
diseñadas, pensadas y por tanto programadas para lograr un objetivo de
formación específico.
Internet, la televisión, la radio, los libros, el diario, las revistas, la

telefonía móvil, los radio transmisores, son algunos de los ejemplos de
la realidad tecnológica que dinamizan este tipo de educación en la que
se pueden perder las conciencias débilmente socializadas ya que es un
enorme cúmulo de información sin límite que se dispone para una
infinidad de usos en los que las consecuencias pueden ser avasallantes
para la formación de los individuos que no han fortalecido
suficientemente la personalidad, principalmente, en los aspectos éticos
de su desarrollo social.
La EI es una dimensión educativa casi inexplorada e incomprendida por

el sistema educativo, por lo que se entiende como un vasto y fértil
campo para realizar investigación educativa y social que nos permita
erradicar, en medida de lo posible, el mal uso que hacemos de los
elementos y factores que componen su dinámica natural.
Sería la educación que todos recibimos por ósmosis al vivir en una
sociedad en la que cada momento de la vida nos enseña algo. Coombs
(1975), considera la EI como un proceso que dura toda la vida en el que
las personas adquieren y acumulan conocimientos, habilidades,
actitudes en relación con el medio ambiente. La EI carece de
organización, por lo tanto, las personas no tienen clara conciencia ni
voluntariedad acerca de tales procesos de educación. Para. Trilla
(1986), la EI seria la que se promueve sin una mediación pedagógica
explicita, la que tiene lugar espontáneamente a partir de las relaciones

del individuo con su entorno humano, social, cultural, ecológico; la que
no está institucionalizada, no es sistemática, metódica, consciente e
intencional.
4.5. Educación de adultos

La EdA sería según la UNESCO (1976) sería:
“...la totalidad de los procedimientos organizados de educación, sea cual

sea el contenido, el nivel y el método, sean formales o no-formales, ya
sea que prolonguen o reemplacen la educación inicial dispensada en las
escuelas y Universidades, y en forma de aprendizaje profesional,
gracias a los cuales las personas consideradas como adultos por la
sociedad a la que pertenecen desarrollan sus aptitudes, enriquecen sus
conocimientos, mejoran sus competencias técnicas o profesionales o les
da una nueva orientación, y hacen evolucionar sus actitudes o su
comportamiento en la doble perspectiva de un enriquecimiento integral
del hombre y en la participación en un desarrollo socioeconómico y
cultural equilibrado e independiente.”
La EdA no puede ser considerada intrínsecamente, sino como

subconjunto integrado en un proyecto global de EP
"Por educación de adultos se entiende el conjunto de procesos de

aprendizaje, formal o no, gracias al cual las personas cuyo entorno
social considera adultos, desarrollan sus capacidades, enriquecen sus
conocimientos y mejoran sus competencias técnicas o profesionales o
las reorientan a fin de atender sus propias necesidades y las de la
sociedad." Declaración de Hamburgo. 1997.
La EdA es concebida, en consecuencia, como educación durante toda la

vida.
Características implícitas en el concepto
Pretende la adquisición de conocimientos que mejoren la
cualificación profesional y el logro de actitudes y aptitudes cívicas,
sociales, morales y culturales para el desempeño de
responsabilidades y para el progreso en todas las esferas.
Se basa en la justicia, en la disposición a favorecer la comprensión
de los aspectos culturales de la evolución humana y en la
cooperación y la paz internacionales, llevando adelante un proceso
de enseñanza-aprendizaje que tiende a hacer aflorar en las personas
una actitud abierta, un modo de entender las relaciones humanas,
una forma de ver el mundo, un espíritu, un estado de ánimo, una
disposición mental y un talante ético.
Pretende equilibrar la importancia de los conocimientos técnicos y

las exigencias profesionales con el pleno desarrollo de la
personalidad.
Persigue mejorar la enseñanza; proporcionar conocimientos; y
favorecer una formación que garantice la igualdad de
oportunidades ante la vida, adaptándose a las necesidades de los
individuos de todas las edades, con objeto de que se armen de una
capacidad que les permita una comprensión crítica del mundo y de
los cambios.
Persigue fomentar la valoración positiva de la participación activa
en la vida cívica y en el desarrollo sociocomunitario.
Trata de facultar para apreciar las relaciones que unen al hombre con
su medio ambiente físico y cultural; de favorecer su respeto por la
diversidad de culturas y costumbres; de fomentar su interés por la
creación de nuevos bienes materiales y nuevos valores
espirituales o estéticos; de elevar su nivel cultural desarrollando la
comprensión crítica de los principales problemas sociales; y de
mejorar la capacidad de valerse por sí mismo para facilitar una
supervivencia autónoma y poder ser feliz.
En consecuencia, la EdA debe constituirse en un elemento estructural

del sistema de enseñanza de cualquier país otorgando prioridad a los
procesos de alfabetización, el acceso de las mujeres a todos los tipos de
educación, la preparación para una participación cívica, la revalorización
de la acción de las organizaciones de carácter voluntario, la formación
sistemática de personal docente especializado, la necesidad del
desarrollo de la investigación y la consideración de la educación de
adultos como parte integral de los sistemas regulares de enseñanza.
Ander-Egg (1999) destaca tres elementos diferentes en la EdA:

1. Educación compensatoria: alfabetización de adultos y alfabetización
funcional (la primera se limita a la adquisición de conocimientos de
lectura, escritura y cálculo mientras que la segunda avanza un poco
más)
2. Educación transitoria: orientación profesional, especialización en un
determinado campo de actividades, perfeccionamiento, reciclaje
profesional.
3. Educación complementaria: acceso a bienes y objetos culturales, y
aprendizaje y adquisición de conocimientos.
Respecto a las tendencias actuales en la EdA nos encontraríamos con:

Una educación de adultos para el OTL: referida a las zonas
desarrolladas económicamente y que asume la necesidad de ocupar
de forma constructiva los excedentes de tiempo generados por la
evolución social
Una educación de adultos para el desarrollo social: tendencia de las

zonas del sur de Europa dirigida a afrontar las necesidades de
estructurar unos cauces de participación e integración en el tejido
social
Una educación de adultos para el trabajo: tendencia especialmente
asentada en las zonas hispanoamericanas y del sur de Europa, en
razón de la imperiosa necesidad de garantizar la incorporación de los
excedentes democráticos de las capas populares al mercado laboral
y al mundo productivo, así como una existencia digna ASC no sea
considerada como un fin en si misma, ni como un apartado más de
un programa de actividades, sino como una herramienta
metodológica de gran importancia que acompañe y fundamente
todos los procesos de aprendizaje
La ASC en relación con la EdA asume primordialmente dos funciones
(Ucar 1992):
Sirve de complemento a los procesos de educación básica de adultos
y de formación ocupacional, dado que conecta y contextualiza los
aprendizajes instrumentales y ocupacionales con la realidad de la
calle.
Constituye en si misma una metodología especifica de intervención
sobre los adultos. Como tal metodología se propone dotar a los
individuos y a los grupos sociales de instrumentos que
complementen, aumenten y/o perfeccionen sus capacidades y
posibilidades de participación social.
4.6. Educación y ASC: elementos de comparación.
- Proceso educativo e intervención sociocultural comparten buena
parte de objetivos y finalidades.
- La ASC se define más por su praxis que por la teoría que la sustenta.
- La ASC configura un marco interactivo más amplio y flexible que la
intervención educativa
- La ASC trasciende la metodología educativa y se centra en los
intereses y expectativas de los ciudadanos
- La ASC valora más el “proceso” que los parámetros de “logro y
recuperación”
- La ASC delega el protagonismo directo de la acción en el ciudadano,
considerado como miembro de un grupo social representativo
- Educación y ASC comparten recursos y experiencias, imprescindibles

para desarrollar sus cometidos propios, y se diferencian en el grado y
dimensión que otorgan a:
o La promoción social
o La cooperación solidaria
o La transformación personal
o La libertad individual
o La compensación de dificultades…
5. LA ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL EN ESPAÑA Y EN LA UNIÓN

EUROPEA
5.1 La animación sociocultural en la Unión Europea

“La animación sociocultural surge en Europa no como una práctica
social, sino como respuesta necesaria a la desvalida situación del
hombre post-industrial”. Ventosa (1989)
Los primeros en utilizar los conceptos referidos a la ASC son las

instituciones de carácter político. Pues aunque la ASC trata de las
necesidades de comunidades y grupos sociales, las instituciones
políticas tras la Segunda Guerra Mundial apoyados por las iglesias, los
partidos políticos, el movimiento laico y el movimiento Scout en el campo
de la juventud dan lugar a grandes asociaciones y federaciones en el
ámbito nacional e internacional, que van a ser origen de los modelos de
intervención social y cultural que actualmente se desarrollan en Europa.
A partir de 1950 estas asociaciones tienden a potenciar las
metodologías y técnicas educativas que se han considerado propias de
la animación: concienciación, participación, animación de grupos, etc.
En los años 60-70 la UNESCO en su Declaración de los Derechos
Culturales (y desde el Consejo de Europa con la creación del Consejo
para la Cooperación Cultural en 1962) se adoptan medidas de Política
Cultural con la finalidad de difundir la cultura, considerándola como un
medio para el desarrollo personal de todos los ciudadanos y los pueblos,
concretada en:
-Intervenciones estatales, partidos políticos, iglesias…
-Creación de asociaciones y de movimientos socioculturales
-Políticas socioculturales públicas
-Cristalización en el marco de la UE: política cultural integrada e
incentivada (planes, programas y proyectos)…
En esta década se da un gran impulso a la ASC tal y como se entiende
en la actualidad. A través de simposios y de la creación del Proyecto de
Animación Sociocultural, elaborado bajo la dirección de J. A. Simpson
por encargo del Consejo de Cooperación Cultural. En este periodo el
ANSC es el encargado de generar procesos de participación cultural de
la manera más amplia posible, y un catalizador cuya finalidad es la de
desatar los proceso de dinamización cultural.
Esta década culmina con la conferencia de Ministros de Cultura

celebrada en Oslo en 1976 en la que se recomienda a los participantes
que pongan los medios suficientes para que sea la misma gente quien
configure su propia cultura.
En la década de los ochenta la ASC deja de estar principalmente en
manos de voluntario y de tener un carácter principalmente marginal,
para profesionalizarse e institucionalizarse. En este periodo hay que
destacar la Declaración de Bremen en 1983, documento que salió de la
reunión que tuvo lugar en esta ciudad y en la que participaron La
Conferencia Permanente de Poderes Locales y Regionales y el Consejo
de Cooperación Cultural del Consejo de Europa, además de
representantes de distintas ciudades europeas siendo el tema de debate
Ciudad y Cultura. En el documento se quiere recuperar el pueblo, el
barrio, como lugar de creación y expresión cultural.
Desde este momento se da paso a la gestión cultural, es decir la
Administración pone al alcance del ciudadano los bienes culturales y, al
mismo tiempo, les facilita la participación y producción libre y
espontánea de estos. Se intenta abrir cauces formales y efectivos de la
cultura a las personas y de las personas a la cultura.
Pero lo cierto es que Animación y Cultura se complementan
diferenciándose por los materiales y espacios donde trabajan cada una
de ellas.
La Animación actúa en Centros Cívicos y su material esencial son las
relaciones humanas y puesta en común de la cultura. Mientras que la
gestión cultural lo hace en museos, teatros, etc. y su material principal
es la cultura como producto humano.
Actualmente, la ASC actúa también desde el ámbito de los Servicios
Sociales, porque la ASC hay que entenderla también como una acción
social transformadora y como una alternativa al esquema paternalista-
asistencialista que usa el EB que hace depender al ciudadano del
Estado para solucionar sus problemas. La ASC intenta que la sociedad
civil recupere protagonismo, asumiendo que los problemas y su solución
pueden venir solo de la misma comunidad, y que la Administración
suministre los medios al alcance de la comunidad cuando los
ciudadanos sean conscientes de la necesidad de buscar y aportar
soluciones.
Por otro lado, el Consejo de Europa ha contribuido al desarrollo y

divulgación de la animación clarificando el concepto, tratando los
problemas de formación de los profesionales de la animación y
formulando las condiciones mínimas para el ejercicio de esta práctica
profesional.
5.2. La animación sociocultural en España

La ASC como tal, aparece en España en torno a los años 60 llega de
Francia y recoge una tradición anterior basada en la educación de
adultos y la educación popular con las que se pretendía culturalizar al
pueblo.
Desde el siglo XVIII y durante el siglo XIX y XX hasta la guerra civil hay
numerosos antecedentes de lo que será la ASC. Como por ejemplo:
o Las Sociedades Económicas de Amigos del País.
o En el siglo XIX los Clubs, Casinos y Ateneos obreros
o La Institución de Libre Enseñanza: renovó “modelarmente” todo el
sistema educativo (como alternativa) e inspiró la creación de
instituciones como la residencia de estudiantes y el patronato de
misiones pedagógicas
o La Fundación de Casas del Pueblo y las Universidades Populares…
Después de la Guerra Civil y hasta la década de los cincuenta y

sesenta los programas de actividades están marcados por la política y
son foco de adoctrinamiento (cultura del régimen). La única Institución
que puede realizar actividades al margen del Estado, aunque con
carácter de apostolado, es la Iglesia. Desde la Iglesia nacen las
primeras organizaciones infantiles y juveniles, campamentos para
jóvenes al margen de la organización gubernamental. Estas actividades
con el tiempo fueron pasando a iniciativas de tiempo libre como servicio
a los diferentes sectores de la población.
Desde la Iglesia las Mujeres de Acción Católica fundan los Centros de
Formación Familiar para promocionar a las mujeres casadas de medios
populares y urbanos. Este colectivo es el primero en utilizar los términos
animador y animación en España.
En la década de los sesenta, la Iglesia más progresista inicia acciones

de intervención social y estructuración de colectividades que son
precursores de lo que hoy se conoce por desarrollo comunitario.
Desde los aparatos del estado franquista se intenta provocar la
socialización de la juventud a través de actividades integradas en la
férrea estructura política, evitando todo tipo de crítica social o cultural
Gracias a los grupos formados en las iglesias los jóvenes pueden
desarrollar actividades formativas y recreativas. Surgen los movimientos
Scout y Junior. También surgen un gran número de Clubs juveniles,
colonias de verano de las que había otra vertiente que estaba promovida
por entidades de ahorro como obra social y que daban respuesta a
situaciones de salud y nutrición.
Al final de la década de los sesenta y década de los setenta, surge un

fuerte entramado asociativo: la ASC se funde con los procesos de
transformación política: cambio de régimen y transición a la democracia.
o Movimientos vecinales y comunitarios: creación de las Escuelas de
Aire Libre.
o En 1976, se crea la Subdirección de Animación Sociocultural y la
Dirección General de Desarrollo Comunitario.
o La ASC se desarrolla y expansiona.
Con la aparición de la democracia en España se dan variadas
situaciones que favorecen el desarrollo de la ASC:
o La constitución de Escuelas de Tiempo Libre
o La Constitución de las Escuelas Campesinas
o La creación de una subdirección de Animación Cultural
o La incorporación de España en el Consejo de Europa y en un ámbito
más particular, la edición de la colección Fondo de Cultura Popular de
la editorial Marsiega.
Década de los ochenta: con la disminución de la fuerza contestataria

(que coincide con una mayor intervención de la administración pública
en el campo sociocultural) los programas se orientan hacia modos
alternativos de vivir el OTL y EnoF.
Con la llegada de la democracia plena y la aparición de los primeros
ayuntamientos democráticos se crean fundaciones, asociaciones,
centros cívicos, concejalías de cultura y juventud, escuelas de formación
de animadores...
La ASC se institucionaliza, especialmente desde los Ayuntamientos, es
cuando la ASC llega a la madurez en España.
Las posibilidades educativas alcanzan prácticamente a todos los
ámbitos de la intervención social. Se celebra en Madrid el primer
Congreso de ASC y Municipios y se crean las Escuelas de Animación de
carácter municipal y autonómico que sirven para definir la figura del
Animador Sociocultural.
Conviene destacar la creación de las Escuelas de Animación de carácter

municipal y autonómico: Barcelona, Madrid, Llobregat, Murcia,
Valencia..., hecho que se produce entre los años 80-85. Estas
instituciones se dedican a la formación de animadores. Con la aparición
de estas escuelas la animación se afianza. Se va perfilando la figura del
animador, y se reconoce profesionalmente. Se multiplican las
experiencias y programas de intervención así como la comunicación y
coordinación entre ellos.
Sin embargo, de forma paradójica este modelo expansivo, generado y

desarrollado en los tres lustros anteriores, a finales de esta década
entra en crisis: institucionalización excesiva, crisis de la militancia
vecinal, promoción política de los líderes comunitarios, crisis del

movimiento juvenil y del voluntariado…
Década de los 90:

o Plena institucionalización de la ASC
o Políticas públicas subsidiarias de los procesos de ASC
o Empresas privadas de servicios socioculturales
o ONGs y asociaciones con fuerte vinculación económica con la política
social pública: subvención
o El INAEM después de un estudio ocupacional de la ASC, la introdujo
en su catálogo de ocupaciones en 1987, y en 1990 conjuntamente
con el MEC se sientan las bases para definir el contexto de la
formación de la ASC en la actualización de la Formación Profesional.
A partir de entonces desde el INAEM se programan cursos de
formación ocupacional para personas con nivel académico de BUP y
FP II con la denominación de Animador Sociocultural.
o Desde la Administración Educativa
- Se crea y desarrolla, desde la Formación Profesional reglada, el
perfil del título de Técnico Superior en Animación Sociocultural
o Referencias legales, establecidas en los siguientes RR.DD.:
RD 2058/1995, de 22 de diciembre, por el que se establece
el título de técnico superior en animación sociocultural y las
correspondientes enseñanzas mínimas.
RD 1264/1997, de 24 de julio, por el que se establece el
currículo del ciclo formativo de grado superior
correspondiente al título de técnico superior en animación
sociocultural.
Competencia general
o “Programar, organizar, dinamizar y evaluar proyectos
de intervención social encaminados al desarrollo social,
aplicando técnicas de dinámica de grupos y utilizando
recursos comunitarios, culturales y de ocio y tiempo
libre”
o Se crea la Diplomatura en Educación Social, directamente
relacionada con la Animación Sociocultural
o La UNED, en sus programas de Educación Permanente desarrolla
cuatro cursos sobre Animación Sociocultural y desde 1999/2000
cuenta con la titulación Universitaria Experto Universitario en
Animación Sociocultural.
o Las Administraciones Centrales desarrollan proyectos de ASC y a
medida que la Administración Central transfiere competencias a las
Autonomías y a los Ayuntamientos desde las concejalías
relacionadas con educación, cultura y servicios sociales se crean
centros para desarrollar proyectos de ASC y se convocan plazas para
dotar de profesionales estos servicios.
o Desde las Administraciones Autonómicas y locales se hace formación

de Animadores por medio de cursos de Monitor de Tiempo Libre y de
Campamentos.
o En cuanto a las Instituciones no gubernamentales cabe destacar:
Cruz Roja, que a través de Cruz Roja de la Juventud desarrolla
programas de ocio y tiempo libre
Cáritas Española que ha sido impulsora del desarrollo comunitario
y actualmente lleva a cabo proyectos de promoción social para
población marginada.
Desde las Asociaciones se impulsa la participación ciudadana. En
España existen asociaciones de todo tipo que trabajan con la
metodología de la ASC.
Algunas Instituciones privadas por medio de asociaciones o bajo
la forma jurídica de Fundación desarrollan importantes proyectos
de ASC.
Segunda década del 2000:
Creación de la siguiente figura profesional a implantar en el marco de la
FP reglada y que sustituirá a la anterior:
o RD 1684/2011, de 18 de noviembre, establece el título de Técnico
Superior en Animación Sociocultural y Turística y sus enseñanzas
mínimas
o Orden ECD/82/2013, de 23 de enero, por la que se establece el
currículo del ciclo formativo de grado superior correspondiente al
título de Técnico Superior en Animación Sociocultural y Turística.
En la actualidad, la ASC se encuentra en una profunda encrucijada,

tanto en lo referente a:
o Su marco teórico-fundacional
-Dando lugar a diferentes modelos teóricos e itinerarios de
intervención sociocultural: humanista, comercial, técnico, político…
o De carácter residual
La ASC como actividad ideológico-política
La ASC como acción comunitaria transformadora
o De carácter expansivo
La ASC en el marco de la política institucional
La ASC desde la óptica productivo-comercial
o El marco referido al perfiles profesionales a través de los que se
desarrolla su actividad
-Proliferación de perfiles del ámbito sociocultural, que generan
o Colisión de competencias de acreditadores y de credenciales
formativas.
o Confusión de ámbitos de intervención: voluntariado, profesional,
de valor añadido.
o Aparición del perfil profesional: TSASC y TSASCyT
Todas estas circunstancias perfilan un futuro de ASC en España cuando

menos incierto y con incógnitas de difícil superación: crisis sociocultural
compleja y plurifactorial, proliferación de modelos de intervención sc,
estancamiento de la interacción comunitaria, problemática laboral
(inserción) difícil del perfil de TSASC…
5.2. La animación sociocultural otros países
a) La Animación Sociocultural en Francia
En Francia se comienza a hablar de ASC a partir de 1960. Concebida

desde el Movimiento de la Educación Popular. En 1964 la Unión
Francesa de Centros de Vacaciones abre su primera escuela de
Animadores de Tiempo Libre.
A partir de ahí, el término se va generalizando progresivamente, se
afianza la figura del animador y se irán determinado sus funciones y su
status. En la actualidad, la ASC en Francia se fundamenta en la
intervención de las asociaciones federadas a nivel estatal, y con
presencia relevante a nivel municipal; por lo que podemos hablar de
asociaciones:
Que se organizan en función de un proyecto educativo: Scouts,
Exploradores, Movimientos de Acción Católica, Federaciones de
Albergues Unidos Juveniles...
Que se configuran como prestadoras de servicios: Casas de
juventud, Clubes y Hogares, Centros de Entretenimiento, Colonias de
Vacaciones...
b) La Animación Sociocultural en el Reino Unido
Tanto en Gran Bretaña, corno en Irlanda del Norte, la ASC se basa en

las teorías de desarrollo comunitario (Community Development) con
referencias en la educación social de la comunidad, y la prestación de
servicios interdisciplinares. Esta política de desarrollo comunitario se
basa en dos tipos de asociaciones:
Centros Cívicos Comunitarios: son complejos centros culturales en la
ciudad con la finalidad de hacer aumentar la calidad de vida mediante
una variada oferta de actividades artísticas y culturales de carácter
comunitario.
La educación social de la juventud, basada en el trabajo de los
educadores (animadores). Forma parte del sistema educativo, y
ofrece a los jóvenes participar en una gran variedad de actividades en
sus ratos libres.
c) La Animación Sociocultural en Alemania
La ASC en Alemania, se orienta prioritariamente a la ocupación del de

tiempo libre, a la vez que a la formación permanente, formación social y
creación cultural.
Quienes estructuran los servicios y las actividades de animación son los
Ayuntamientos y las grandes asociaciones privadas como sindicatos,
iglesia, federaciones culturales, partidos políticos. La animación juvenil
tiene gran importancia y se basa en la formación social e ideológica de
la juventud en las ideas democráticas, ocupación del tiempo libre y
formación cultural. Cada una de estas actividades da lugar a
asociaciones diferentes: Casa de la juventud, Escuelas Musicales y de
Teatro, Asociaciones para la formación de jóvenes...
d) La Animación Sociocultural en Suiza
Aquí la ASC se concreta en diferentes momentos y entidades

asociativas:
o Animation socioculturelle
o Movimientos de juventud y educación popular
o Movimientos eclesiásticos y centros de tiempo libre
o Asociacionismo comunitario…
e) La Animación Sociocultural en Estados Unidos
Responde a los siguientes elementos conformadores:

o Fuerte presencia comunitaria articulada.
o ASC como voluntariado permanentemente movilizado: acción contra
la marginación y exclusión sociocultural de minorías, extensión de
derechos sociales y civiles.
o Fuerte presencia e implantación comunitaria.
De las diferentes iglesias: merodista, baptista, mormona…
De lobbys y grupos de presión: raciales, de condición sexual,
culturales, económicos…
De todo tipo de movimientos asociativos.
De fundaciones.
o Acciones de respuesta a iniciativas políticas: sistema electoral
participativo…
f) La Animación Sociocultural en América latina
Responde al siguiente perfil:

o Pervivencia coyuntural de la
ASC como desarrollo comunitario
ASC desde la vertiente sociopolítica.
ASC como posibilidad de transformación de la realidad social.

o También aquí se evidencian los síntomas de la crisis de identidad y
de acción que la ASC está experimentando en las sociedades
occidentales avanzadas.
g) Tendencias actuales
Ventosa (1997, pp. 81-82) anota la existencia de diferentes maneras de

entender y abordar la Educación Social que, a su vez, determinan
diversas orientaciones de la ASC, concretadas en:
o Sociocéntrica. Bajo este planteamiento, la ASC adquiere un carácter
integrador, adaptativo y de ajuste del individuo respecto al modelo
social imperante. Su presencia se registra predominante en los
países de la Europa del Este.
o Antropocéntrica. En este caso, en la intervención prevalecen
los procesos de conformación de la sociedad a los
requerimientos de sus miembros. La ASC se conviene en un
instrumento de transformación, asumiendo un enfoque crítico
respecto a la sociedad y emancipador en cuanto a los individuos que
la componen. Esta orientación ha conseguido un mayor desarrollo en
los países escandinavos y en Latinoamérica.
o Psicocéntrica. Se entiende especialmente la intervención como
proceso de adaptación del individuo a sí mismo. El enfoque de la
ASC es relacional, orientado al fomento de la comunicación y la
optimización de las relaciones personales. Se constata un mayor
auge de esta corriente en los Estados Unidos y los Países Bajos.
o Ecléctica. Se plantea la acción socioeducativa como un proceso
recíproco de adaptación- transformación entre el individuo y la
sociedad para lograr un equilibrio entre el bienestar personal y la
transformación social. Supone una integración de los enfoques
anteriores. Está más extendida en Francia.
6. CONCLUSIONES
Desde la perspectiva de la cultura popular es donde fundamentalmente

se ha iniciado la tarea de ASC actual. En primer lugar en cuanto
superación de la cultura como privilegio así como de los rasgos de la
cultura tradicional en su versión burguesa: minoritaria, individualista,
utilitaria, compartida y dicotomía, particularista, represiva y autoritaria
(González Estéfani, 1979).
En segundo lugar, por cuanto la misma cultura popular implica ella

misma un movimiento sociocultural emprendido por cl pueblo para
elaborar una cultura en la que se reconozcan sus propios valores ante la
crisis que afecta a la cultura tradicional en sus formas tanto

aristocráticas como populares. Precisamente por ello se ha propuesto y
preferido por algunos (Maíllo, 1971) la denominación de Educación
Popular y su definición como:
“...un tipo complejo de acción sociocultural que utiliza ocios para

suscitar, promover y difundir ideas, hábitos y modelos de enjuiciamiento,
estimación y acción susceptibles de impulsar en sentido ascendente a
los sectores social y culturalmente rezagados, fomentando una
participación en los bienes de la cultura, y de propiciar y favorecer la
integración comunitaria en la vigencia y la vivencia de un núcleo central
de valores compartidos”. Maíllo, 1971.
Más allá de la opción terminológica lo que subyace es que un proyecto

de Intervención Socioeducativa debe hundir sus raíces en las realidades
culturales en cuanto dimensión configurante a la totalidad de la persona
y del grupo en aspectos materiales (productos del pensar organizado
humano) como espirituales (ideas, valores, concepciones del mundo).
En dicho proyecto son tres básicamente los niveles de actuación:
a) Los elementos infraestructurales condicionantes: nivel de análisis del
hábitat físico-geográfico.
b) Las formas superestructurales que provienen de la interacción de los
modelos culturales interactuantes con distintas instituciones sociales.
c) El diseño de los programas educativos que fomenten una acción
educativa donde la cultura sea concebida como transformación, como
conocimiento movilizado a la acción, como realización creativa y
participativa.
7. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS Y DOCUMENTALES
Sobre los contenidos el presente tema contamos con una amplia

bibliografía. El opositor puede formular la propuesta personalizada que
considere oportuna. Aquí reseñamos los siguientes textos:
• CEMBRANOS, MONTESINOS Y BUSTELO: LA ANIMACIÓN

SOCIOCULTURAL: UNA PROPUESTA METODOLÓGICA. ED.
POPULAR, 1992.
• OUINTANA, JM: FUNDAMENTOS DE LA ANIMACIÓN
SOCIOCULTURAL”. ED. NARCEA, 1985
• VENTOSA PÉREZ, V.J.: FUENTES DE LA ANIMACIÓN
SOCIOCULTURAL EN EUROPA. ED. POPULAR, 1993.
• CABELLO MARTÍNEZ, Mª J.: EDUCACIÓN PERMANENTE Y
EDUCACIÓN SOCIAL. CONTROVERSIAS Y COMPROMISOS.
2002.
• TRILLA, JAUME; ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL. ED. ARIEL

EDUCACIÓN. BARCELONA 1997.
• ANDER-EGG, EZEQUIEL; ¿QUÉ ES LA ANIMACIÓN
SOCIOCULTURAL? ED. HUMANITAS; BUENOS AIRES 1987.
• FROUFE, S., GONZÁLEZ M.: PARA COMPRENDER LA
ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL. ED. EVD. ESTELA 1995.
• FROUFE, S. CONSTRUIR LA ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL. ED.
AMARU. SALAMANCA 1998.
• SÁNCHEZ ALONSO, M. LA PARTICIPACIÓN, METODOLOGÍA Y
PRÁCTICA. ED. POPULAR; MADRID 1991.
• UCAR, X. LA ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL. ED. CEAC.
BARCELONA 1992.
• VENTOSA PÉREZ, VICTOR. EVALUACIÓN DE LA ANIMACIÓN
SOCIOCULTURA. ED. POPULAR; MADRID 1992.
• VICHÉ, MARIO. ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL Y EDUCACIÓN EN
EL TIEMPO LIBRE. ED. VÍCTOR ORENGA; VALENCIA 1986.
• VICHÉ, MARIO. INTERVENCIÓN SOCIOCULTURAL. ED. GRUP
DISSABTE; VALENCIA 1989.
• VICHÉ, MARIO. ANIMACIÓN, SISTEMA DE COMUNICACIÓN. ED.
GRUP DISSABTE; VALENCIA 1991.
• VICHÉ, MARIO. UNA PEDAGOGÍA DE LA CULTURA, LA
ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL. ED. CERTEZA. ZARAGOZA 1999.
• ANDER-EGG, E: METODOLOGÍA Y PRÁCTICA DEL DESARROLLO
DE LA COMUNIDAD. ED. ATENEO. 1982
NOTA
Las referencias a la Comunidad de Madrid se citan a modo de ejemplo.

El alumno deberá sustituirlas por las de la Comunidad en que oposite.
Email: info@preparadores.eu • Web: http://www.preparadores.eu
NOTAS
REV.:10/15

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SERVICIOS a la COMUNIDAD Animación Sociocultural •1

TEMA 10: La Animación Sociocultural: nacimiento y evolución.

Autor: Ángel Parada Albertos

2. La Animación Sociocultural: nacimiento y evolución

3. Concepto de Animación Sociocultural, objetivos, funciones y valores

4. Otros conceptos próximos: educación formal y no formal, educación

5. La Animación Sociocultural en España y en la Unión Europea

7. Referencias bibliográficas y documentales

Abreviaturas, acrónimos y siglas utilizadas

ANSC ANIMADOR SOCIOCULTURAL

Para hablar con suficiente criterio de la teoría y práctica de la ASC

decir, se modifica y enriquece de acuerdo a las intervenciones y

Señalar, por último que resultará dificultoso evitar el alto grado de

2. LA ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL NACIMIENTO Y EVOLUCIÓN.

ASC es un término joven y con perspectiva de futuro. Actualmente

Podemos afirmar que la ASC ha existido siempre, sobre todo en los

Plantea como objetivo una cierta transformación de las actitudes y las

Temáticas como la despoblación rural, la superpoblación urbana, el

A esta situación añadimos la existencia de grupos reivindicativos que

adaptarse al cambio, no solo para comprender la soledad de su tiempo,

Después de varios años, la ASC ha pasado de ser considerada como

Las circunstancias en que surgió la ASC y las causas que la motivaron,

la cultura y la educación (Faure, 1973; Coombs, 1985), tanto cualitativa

a) Se han producido cambios sociales muy importantes en la estructura

Todas estas circunstancias nos remiten a la necesidad de volver a partir

a) La democratización cultural (permitir el acceso “universal” a todos los

Para terminar este epígrafe señalaremos que en el nacimiento y

3. CONCEPTO DE ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL, OBJETIVOS

Tratar de definir la ASC puede significar dar sólo un paso más en la

Intentar aproximarse al concepto de ASC es una tarea compleja, dado

A pesar de todo, existe la necesidad de una fundamentación técnica y

difícil separar los dos términos, puesto que, cuando queremos

Por otro lado, si nos acercamos a distintos autores e instituciones, en un

Si tratamos de resumir las diferentes concepciones aportadas podemos

Un estímulo que incita a las personas a iniciar experiencias sociales.

Los fundamentos filosóficos de la ASC parten de una reflexión sobre la

Para la mayoría de los autores, los tres principios fundamentales en

Pluralismo cultural. La humanidad se compone de diferentes culturas

En la práctica, estos principios se orientan hacia estas finalidades:

Y en consonancia con lo descrito hasta ahora, la ASC perseguiría, en

Favorecer que las personas participen en la vida del grupo y de la

Para Ucar (1992), la ASC persigue en suma:

La innovación y la creación cultura

La ASC se enmarca en parámetros ideológico-políticos desde los cuales

La ASC (siguiendo a Ander-Egg) propone un modelo de intervención

La ASC debe definir claramente el modelo de cultura y de proyecto al

La ASC implica a las personas y crea una metodología adecuada a

(1978) enumera los que son fundamento del orden político y de la

para la participación responsable, estimular la expresión de

4. OTROS CONCEPTOS PRÓXIMOS: EDUCACIÓN FORMAL Y NO

4.1. Educación Permanente

El concepto de EP expresa una de las grandes revoluciones que surgen

El Consejo de Europa subraya que para que la EP cumpla su función de

Por su parte Ander-Egg (1987) plantea la ASC y la EP como anverso y

Desde el punto de vista teórico la expresión EP consiste en ampliar,

- Prevenir y remediar carencias a determinadas edades (adultos,

A tenor de lo expuesto, los objetivos de la EP no se reducen al campo

4.2. Educación formal

Según Coombs y Ahmed la EF comprendería el sistema educativo

Se trataría de un tipo de educación regulado (por los diferentes

Sin embargo la EF resulta insuficiente para satisfacer las necesidades

4.3. Educación no formal

La EnoF, según la define J. Trilla (1989) refiere a todas aquellas