Procedimiento

 Pasa la ceniza a través de un tamiz para separar los trozos de carbón. Cuanto más
blanca y calcinada esté, mejor quedará el detergente.

 Ponla en una cubeta con agua caliente y déjalo cubierto con un paño o tapa de 24 a 48
horas.

 Filtra el líquido con la ayuda de un tamiz.

 Este debe quedar con un efecto resbaladizo, que indica su poder como detergente.

 Lo puedes utilizar para el lavado de la ropa y otros utensilios.

Jabón natural

El detergente natural que se obtiene del remojo de las cenizas en agua se puede combinar con
grasa para obtener un jabón casero.

Este se puede utilizar con varios fines hogareños y es más neutro que los que venden en
presentaciones comerciales.

Ingredientes

 3 kg de ceniza

 ½ litro de aceite vegetal reciclado

 El jugo de 1 limón

 1 patata cruda

 1 litro de agua

Procedimiento

•Coloca la ceniza en una cubeta con agua para hacer la lejía.

•Pasados dos días, agrégale una patata cruda y verifica si la solución está lista. Si la patata
flota, debes agregar más cenizas y esperar dos días más.

•Filtra la mezcla a través de una tela y combina un litro del líquido con medio litro de aceites
reciclados.

•Lleva el producto a fuego lento y déjalo hervir hasta que espese.

•Agrega el jugo de limón y retíralo del fuego cuando adquiera una contextura de jabón.

•Viértelo en moldes y úsalo para las tareas de limpieza del hogar.

¿Conocías estas aplicaciones de la ceniza? Ahora que sabes cómo sacarle provecho, no dejes
de intentarlo en casa.

 lejía: con ceniza y agua:

Aunque esta mezcla es menos fuerte, que el agua con lejía pura, unos guantes y unas gafas de
protección podría ser útiles.
 1. Verter las cenizas a través de una criba para eliminar el carbón más grueso.
Alternativamente, podríamos dejar que la ceniza se hunda en el agua y quitar el
carbón más liviano que flota con un colador. Cuanto más blanco sea el color de las
cenizas, mejor lejía mejor obtendremos. Cuanto más dura (de maderas nobles, como
nogal, roble, encina) la madera quemada, mejor será la lejía final.

2. Mezclar cenizas con 4 o 5 partes de agua caliente (o en climas soleados, simplemente

mezclar con agua del tiempo en un cubo metálico y dejar que la mezcla se asiente
fuera durante unos días. Esto es lo que mi abuela hace.)

3. Se remueve durante unos minutos y se cubre el recipiente con un paño o una tapa
durante unos días. Asegúrese de agitar de nuevo, al menos una vez, durante este
tiempo.

4. Las cenizas se depositarán en la parte inferior del cubo, el agua de lejía permanecerá
en la parte superior. Vierta esta solución jabonosa en un recipiente diferente (sea lo
suficientemente cuidadoso para etiquetarlo correctamente!). La lejía de cenizas se
puede utilizar para limpieza de utensilios metálicos, vidrios, y suciedad fuerte, como se
indica anteriormente.

Así se puede utilizar con agua nueva para otro ciclo, hasta que producir “agua jabonosa”.
Entonces se puede utilizar de forma segura como abono (aunque todavía subirá el pH). El agua
de lejía no debe aplicarse a las plantas, ya que las puede quemar.

La “lejía de potasa”, se puede utilizar para lavar vegetales, utensilios de cocina, vidrio ….
Algunas personas lo utilizan para lavarse el cuerpo y el cabello e incluso como ingrediente de
pasta de dientes. También se utiliza para el lavado de ropa y la eliminación de productos
químicos comerciales de las fibras naturales como el algodón, el bambú y el cáñamo (nótese
que las tinturas responsables del color son sustancias químicas también).

Puede ser utilizado como un detergente líquido, el “agua de lejía” puede ser diluido en una
proporción de 1 taza de “lejía de potasa” a 4 L. de agua caliente. Las altas concentraciones
hará un fuerte detergente más agresivo. Las diluciones se “habrán lavado”, serán menos
fuertes, pero la solución sigue sintiendo “jabonosa”.

Para lavar las fibras naturales, se colocan en una olla (u otro recipiente para calentar) y se
cubre con “agua de potasa”. Entonces el agua se calienta a temperatura de ebullición y se
mantiene durante 2-3 minutos, mientras agitamos continuamente. Después de ese tiempo,
retiramos el material y enjuagamos con agua fría.

Otros remedios naturales, menos agresivos para lavar nuestras fibras, se pueden hacer a
mano, por ejemplo, las raíces hervidas de la planta silvestre Saponaria officinalis
(saponaria)(ver Jabón Natural: Hierba Jabonera), que todavía son utilizados por los
conservadores de los museos, para lavar ropa delicada.