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• •. ..... , · ' ;. " 'JI.'- r. '.

Etica,
política,
ciudadanía

1 '

0 or su peso histórico,
su personalidad cul-
tural, su propio volumen demográfico, por su
ubicación geoestratégica, México es un puntal
mu y impórtante en el desarrollo de toda Amé-
rica. Una 'transformación positiva hacia formas
más flexibles, abiertas, más participativas, más
justas de democracia en México, indudable-
mente serían un extraordinario estímulo y un
estandarte para el resto de América Latina.

22 7 e r n o n do c5 o u o 1e r t r 1( A . Po 1 1 r 1 e A . e 1 u·o A o A N 1A
23

De modo que es para mí una gran opor- No creo que haya posibilidad de transformar
tunidad po~er colaborar para el desarrollo el mundo si no se le comprende y se le ex-
de una democracia más radical, completa,_ plica; es decir, si no comprendemos la reali-
sustantiva en México, en la medida humildí- dad, es mu y difícil que la transformemos o
sima, evidentemente, de mis posibilidades. '
por lo menos, transformarla de una manera
Yo no me dedico a la ·política activa, co- positiva. De hecho, el propio Marx dedicó
mo ciudadano intervengo en po lítica, pero mucho tiempo a comprender la rea lidad y
mi espacio es el de la reflexión sobre los va- muchos estudios a ello.
lores éticos y políticos, y sobre la realidad Creo que no es una pérdida de tiempo
li histórica en qüe esos valores se desarrollan que lo dediquemos a comprender las cosas y
y toman cuerpo; por i lo tanto, no puedo a estudiar un poco los principios básicos, los
brindar más que unas reflexiones teóricas puntos fundamentales de nuestros valores
que sirvan, naturalmente, para que ustedes ciudadanos. A veces, querer ser excesiva-
piensen por su propia cuenta. Pues se trata, mente utilitarios, pragmáticos, desemboca en
no de que piensen por ¡nosotros, sino de que situaciones contrarias a lo que se había pre-
pensemos juntos, pero cada uno desde tendido. Poco a poco, va uno abandonando
nuestra propia cabeza y desde nuestro pro- como si fuera un lastre, las cuestiones de
pio criterio. Una frase famosa de Carloc principio, las grandes ideas, los ideales; para
Marx, en su tesis sobre Feuerbach, dice que .11 fina) encontrarse en callejones sin salida
"De lo que se trata no es de comprender ni donde solamente los más aprovechados, los
explicar el mundo , sino de transformarlo". menos escnlpulosos, logran salir adelante.
(T/(A, POLÍTIC A
24 7 e r n a n el o Oa u a 1e r
( 1 UD A O A N /A 25

Por supuesto, también me parece impor- tos regímenes la política: está


d monopoliza-
tan te el hecho de que haya un movimiento a, secuestrada
. po r un grupo pequeño de

ciudadano de apoyo a la intervención políti- Pe rsonas que son 1as que deciden d ,
d Y an ar-
ca en el país, en éste o ·en cualquiera , y so- enes
.
por todos los¡ demás . y en 1as demo-

bre todo a la intervención política de los cractas, la política es


' una tarea no a t'
com'p i tempo
jóvenes, que son naturalmente los que más . 1 eto, e h buena medid .
a a tiempo par
tiempo tienen por delante y en quienes, en cta , de todos los ciudad . -
es inút'l . . anos, por lo tarito,
1 Simplemente .
cierta medida , re posa la transformación -. .. queJarse o maldecir
1os poltttcos. · a
sociaL
Muchas veces hablamos exclusivamente En las democracias los ,.
dond - ' po1Htcos están
de los políticos como seres corruptos, vicia-. e estan porq ue d e alguna f,
enviado allí 1 . . arma los han
dos por todo tipo de partidismos, en el peor . _os cw dadanos. L .
no tienen derech . os cmdadanos
sentido de la expresión, incluso cri·minales, . o a que;arse d 1
tole ran que , • e a política si
y o lvidamos que la política en sí misma es d · 1os 1
PO!lttcos 1
1agan alg . d
o , incontrolabl . o m ebi-
un aspecto importante, positivo y necesario. e, nt puedan d .
cua ndo se p estttuirlos
Cuando, de hecho , no se puede decir que la orten de un
lo que se espera de ell a manera opuesta a
política es un asco, que la política no es to- · os . O sea q 1
JD.S universal ue as que-
da ella repulsiva porque en una democracia es sobre la port·
cuando a v . I Ica, sobre todo
polílicos somos todos. Precisamente lo que eces caen de .
nes . que oyen . maravilla a los jóve-
diferencia a una democracia de un rég'imen stmplemente m 1 .
mentarías como "la -. a decu·, o co-
au toritario, de una dictadura, es que en ~s - polittca es un asco . ", a lo
26 :J e do r5aua ler
r n a n t T1 ( A , P 0 l Í T 1 CA , C 1 U D A O A N /A 27

, . 11 van es a que ellos , se retiren, se . de· la palabra. Son actividades que crean
. umco que e ¡ ran beneficto
. e 0 político con g ciudadanos con valores; .con capa cidad de
aparten del ¡u g . olítica pa-
a monopolizar la p . intervenir, de decidir. Por tanto, creo que to-
de los que van debe hacer
ovecho propto. . Lo que se . do aquello que suscite la intervención ciu-
ra pr d las corru pelo nes
tá en contra e dadana, la exquisitez de las expectativas
cuando se es : l'tica y alejarse
rechazar la po 1 ciudadanas, el debate, etcétera, es necesario;
políticas no es ¡· pl·arla de esas
·r para 1m
de ella, sino intervem mueca des- y el exceso de quejas, el cinismo q ue dice:
. A artarse con una
corrupciones. P . rruptos "todos los políticos son iguales, no hay fo r-
, nicamente a los <;o
., : deñosa, favorece u . a:provechan de ma de cambiarlo", está normalmente fomen-
,. los que se
de la pohttca , a para tado por los propios políticos :nteresados en
ese apartamiento. d e los ciudadanos
que se dé por hecho que la corrupción y la
su antojo.
controlar1a a sólo las :falta de participación sean cualidades fa tales
, .
La pohttea son muchas. cosas, . no Ú~1posi bles de solucionar.
. . los cargos pu' bl't cds: y los actos
elccClones, m b: , n una con- Por otra parte, tampoco soy partida rio de
, o éste, sino tam te
naturales com . s debatien- que se recurra J la ética como una panacea,
., izá entre ctudadano.
versac10n qu ~ a madre o u na solución mágica, para los problemas
ideas, un pad~~ o un
do sobre sus .. 1 b del profesor ele la .política. .Ev-identemen te, !os valores,
sus hijos, la a or: tanto de la ética como de la política , como
que educa a d' die comunica-
1 los me tos
de una escue a, _ . 'dades polí- otros va lores social e~ y ciudadanos conflu -
n también acttvt
ción; todo ello so cesario sentido yen en último término. Es decir, a fin de
.
tKas e n el más noble y ne cuentas lo qu e deseamos es una vida plena,
• • •••• ~ • • 1 .. , - '\ ":; - ~ ..,.,..., 1'. ~, ""'""~ ,.., • .. ,; .. ~

28 J- e r n a n ,jo .¿) a u a. 1 e r t T1 eA ' p O L 1T 1e A , e 1U O A OA N 1A 29

más autónoma , la realización de nuestra . aho:a no m~ convi~ne, después del verano,


humanidad de la manera más armónica, pa - actuaré moralmente. Estas actitudes no tie-
cífica y place11tera posible. Éstos son los úl- nen sentido, porque la moralidad es siempre
timos valores en los cuales confluye la ética, una reflexión sobre )a propia libertad en el
la política y casi tod~s los esfuerzos huma- aquí y en el ahora. No basta haber sido mo-
nos: en tener un·a vida más alegre, digna , ral en una época para dejar de serlo en este
mejor, jugosa, e~ una palabra. y en último. momento, no basta el hecho de tener el pro-
término, los valores apuntan hacia ese fin . yecto fir~e ~e ser mor~l para excusarnos de
Ahora bien, la perspectiva de la ética y la inm~ralidad que vamos a cometer en el
la de la política son diferentes. La ética es la momento presente. Por supuesto, aunque la
actitud o la intención del individuo frente a sociedad que n d
os ro ee sea desastrosa, aun-
sus obligaciones sociales, personales. La éti- que estemos bajo una dictadura terrible
ca siempre está en nuestras manos indivi- aunque veamos los peores ejemplos a nues-'
duales para actuar de. forma moral , de forma tro derredor, la persona puede ser moral
ética . Yo no necesito ponerme de acu~r~o por 1 ·
q ue a moralidad depende del individuo .
con nadie , ni pedir permiso a nadie, ni que en su libertad y nada más. En cambio para
los demás estén de acuerdo conmigo. Yo· ac- la política es algo muy. distinto.
tuaré de acuerdo con mis criterios y con ml La 1' · ·
po Ittca tlene y necesita la complicidad
. Slempre
concienCia, . en e 1 aquí y en el abo- Y. el apoyo de los otros, la política no siem-
ra. No tendría sentido, por ejemplo, hablar pte está en nuestra mano deb
' emos conven-
de ser moral hasta pasado el verano porque cer a los otros de las necesidades de deter-
30 'J e r no n ,¡ o <Saualer ÉTICA , POLIT I C A , CIUDADAN1 ,>, 31

. formas o proyect~s · ··p.ara llevarlos


de tener capacidad operativa, d eba ser un
minadas re 'd decir que un
. ie ne perfecto sentt o huen pilo to, tener buena vista y no haber
a ca bo. T d e rea lizar hoy,
l't' co no se pue . .bebido la n oche a nterio r; si, ad emás, es un
pro yecto po 1 1 . de dos m eses,
d ealizar dentrC? . ex·c elente padre de familia , una p e rsona de
pero se pue e r ¡ ces la polí-
·es o cu atro . Enton ' e levados prinCipiosmoral~s, mejor q ue m e-
o de ntro de tt . 1 cual la ética
. . 1 aplazamtento, o . , jor. Pero en cualq uier caso, 1~ i.r lportan tc
tica admtte e . lazo la poh-
n o; la política admite el la rgo p e n:e con el para el piloto es saber despega r, vo la r y ate-
. hecho de que se cu rri;t;ar correctamente, y toda s u mora lidad,
ti ca exige e l :_ 'd d como digo, de

1 la compl!Ct a , vida privada o sus relaciones con los dem ás,
apoyo, con . e instituciones y
o lítica qu ter si fra casa e n llevar bien el avión, no sirven
los otros. La p 1 d o intencio-
. nte buena vo unta absolutamente para nada. Por lo tanto , la idea
n o slmple me ,. , d ife rente de
es de mo d 0 q ue la polttKa es . de que se puede curar o modificar la política
n , . . . exclustvam· en-
la ética Y no pu ede resolverse por dosis de Gtica es una ilusión engañosa de
. ~ ciones de ética. la que hay q ue desperta r. No se puede n cu-
te por myec . las p e rsonas, la
La ética usca b meJorar a
. . Las ~ar lo~ ma les ele la p olítica a base ele Ja é ti-
, . busca m eJora . . r a las instttuCJones .
ca:. lo m ismo que n o se. puede n. apagar los
p ohttca . : lusiva me nte
. no se meJOran e~C e
incendios forestales con un hisopo d e agua
institu Ciones · Natural-
l e rsonas se an buenas . ben d ita . La política 1equiere m ejor política,
po rq u e as p n me jo res en
las buenas p e rso nas so . IJ reforma d e b política requiere m ejor p o-
Ine nte , f ·'b le qu e el pllo-
y e s pre eil. lítica, tra nsformación d e las institu ciones.
todos los cam pos . . ducir ade más
to del avión que n o s va a con i .
Pero evidentemente la éti ca, es decir, la re-
do Q aual~r
32 7e r na n
É r 1eA , P0 Lf r 1 e A, e 1 U O A OA N f A 33

la libertad, sob re lo que quere-


.
flexión sobre . o tiene o bnn- de altura moral que corresponden o pueden
1 valores, slrve servir de vigilancia a la política.
mas, sobre os . las expectativas
da un marco necesano para Quizá hay pqsibilidad de que determina-
de los políticos . , de hacer buena dos objetivos ético~ tran~políticos, que van
ademas
Está bien que 'd les políticos más allá de la política, sirvan para juzgar u
,. elacionemos los 1 ea d la orientar nuestra reflexión sobre los valores
polmca, r , s generales e
. les mo rales ma
con los ¡dea los aspectos co- políticos. Yo creq que hay fundamentalmen-
l re todo con
ciedad, so J . . na faceta , te tres valores, tres fuent~s de valores, tres
so . 1 ética tiene u
lectivos, porque a la búsqueda de nó dulos duros de valoración en los cuales
. , n personal en
una dimenslo . , n personal, y coinciden la ética y la mejor política. Estos
. de la perfecc10
la excelencia , . de nuestras re- tres núcleos de valoración colectiva son
. 1 o colectlva
una faceta soCla , lo que queremos aquéllos a partir de Jos cuales se explica la
los demas y lista de los derechos humanos.
ladones con . ·¿ 1 Entonces pode-
.
h acer ¡unto" e como 1 ea . .
. mpre bien En primer lugar habría que señalar la in -
dejando sie
mas, efectivamente, ma de la política es violabilidad de la persona humana. Es decir,
e la vía de refor el
no sacrificar al individuo, no sacrificar a nin-
claro qu . 'n de as 1
1 ·nstituciones: es
CIO .
la tranforma ·olíticos, la paru- guna persona que sea fin en sí misma, a ob-
,· , n sobre los p
voto, la preslO . la efusión de la jetivos coleqivos; no instrumcntalizar a la
. , Y no simplemente .
cipaoon. . . . . estudiar tam- persona, no sacrificar una generación por el
d· es necesano
buena volunta ' . . de altura étic~ , bienestar de la siguient~; ni sacrificar parte
los ob¡euvos .
pobJación p~Jr el bienestar de otra par-
bién cuáles son
de la
t r 1 e A', P o l 1r 1eA C 1U O A O A N 1A 35
34 'J e r n a n Jo 0 a " a 1« r

ción ., 0 no una colectividad


te de la misma población; no convertir a las buenos · ~ ·. No hay países
' nJ paises malos
personas en meras herramientas o instru- buenos, ni pa t"d , no hay partidos
mentos, sino considerarlas .inviolables. Hay . . r 1 os malos, sino per
e 1 sentido · sanas en
. moral, buenas o mal
cosas que simplemente no pu'eden hacerse a tncciones qu - as. Estas res-
i~
e senalo, estos ,
1 la persona, hay límites. El Estado, la colecti- ración ét' nucleos de valo
.. Icos ' com o 1~Imites. a la ,. -
vidad, puede exigirles, puede imponerles Siempre ref 'd polltrca son
en os a las persa '
una serie de cargas, pero pay unos límites reales , de carn nas concretas
e Y hueso · · . '
más allá de los cuales la persona es inviola- Tras la . . . ' mdivJdua !es
mvJolab 'l'd .. .
ble, ni se puede forzar la individu.alidad l d II ad de la
a a en primer Ju per.s ona, seña-
personal incluso por las mejores razones. La ¡· gar, el segund
a autonomía d 1 . o V8lor sería
inviolab ilidad de la : persona, del individuo l e a persona E
or intrínseco . . s decir, el va-
humano, es uno de los límites éticos con los que tienen los
Jos objetivos 1 . planes de vida
que tiene que contar el desarrollo de la po- ' os Ideales 1 . ,
zar la libertad . ' os estilos de utili-
lítica. Destaco aquí que las cuestiones éticas que tiene cad
ra lmeme ha a persona. Natu
' Y norma .
s neces · , -
siempre se refieren a las personas, porque lo 1
os grupos 1 a nas en t d
' eyes qu e lo o os
único que puede ser moral o inmoral es una que dar a ,' · S grupos se tie
G SI m 1smos nen
persona , no una institución o una colectivi- ras: de lo admisibl para marcar las fronte-
dad; las instituciones son buenas , malas, de : e o lo inadmi .b
~na colectividad SJ le dentro
eficaces, ineficaces, : deseables, indeseables; ne n d erecho a s . Pero .las p ersonas tie-
pero lo único que puede ser ~ticamente bue- b.
o Jetivos, propon
. u autonomí
a, a plantearse
no o malo es una persona, no una institu- ¡1 erse cosas d t·~erentes qu izá

1
t T 1 (A • PO LI T I C A C I UDADAN /
36 J e r n o n do c5 a u a 1e r A 37

cuanto a. sus ratees ) o el color de .


de las que se proponen otros, id_e ales, for-
etnia, gustos . . . . su ptel, su
mas de vida, transformaciones·, experimen- , smo·en lo u . .
sus méritos e q e son respeCto de .
tos en el campo de la estética, en e l de la oncretos en 1 .
nidad de la a soctedad. La dig-
sensualidad, incluso en e l del p lanteamiento persona , el h echo
remos para prerri. de que valo-
de l desarrollo económico. La au tonomía de . tar, o quizá
una persona . para castigar a
la persona , del ciudadano, es también un en un gru . ,
po soci 1
provenir más qu d a' no puede
elemento que la política tiene que recono- e e sus acc·
que es. Todos 1 tones y no de lo
cer. La n ecesidad de que haya leyes comu- . os seres hum
fundamentalm . anos son lo que
nes y d e que se respeten fro nteras comunes ente .tienen
de los demás· ·es d. . que ser respecto
en el desarrollo personal no puede ser causa t ' ecir, human ,
es, compartimo os, semejan-
de que la persona sea violada en su autono- . s ese punto f
dignidad de la undamental y la
mía personal , de desca1tar todos los proyec- persona se b
lo tanto, esa dign idad ~ .asa en eso. Por
tos de autonomía de su estilo de vida .
se p ierde nunc d , en ulttmo término, no
Y la tercera valoración sería la dignidad a el todo In 1
más feroz q . e uso la persona
de la persona. Se debe tratar a cada una de ue tenga
peor con oti-os / . un comportamiento
las personas de acuerdo con sus méritos y ' en ulttmo / .
de ten er u . termmo no d .
na cierta d . . eJa
con sus acciones concretas reales a las qu e Igrudad
reconocérsel 1 y tenemos qu
son sujetas, y no de acuerdo con su se.xo. . a como tal :D / e
tJca tengá que est . . e ahi que la polí-
raza, ideología religiosa u otros criterios ex-. d. . ar dtspuest-
¡gnidad humana . . , a a reconocer la
cluyentes de este tipo. La dignidad de las · sm dtscr· ·
nmgún tipo . . Immaciones de
personas no está basada en lo que son en ' sm clasifica .
. . ctones en h umanos
.
É T 1eA pOi/ T 1 eA , elUDA DAN/ A
39
38 7 e r n a n Jo eS a u a 1 e r

comparte una huma .d d . .


~ n1 a común
de primera, humanos de segu~da, humqnos mas- son 1 - . con los de-
os limites éticos d
de tercera, qué sé yo. desarrollo po lítico. . . e cualquier
La dignidad humana no es compatible
El pol't'
1 tco tiene ob1' .·
con ninguna jerarquización de las formas de b. , tgaciOnes
ten deberes ' pero tam-
,, respe tos que
se r humano; por ello, expres.iones como el gredir y p o · no pu ede trans-
' r tanto·' ya que la -·
r.acismo, el sexismo, o tambié n la suposición como la vida e p oiitica así
n ge neral plant
de que las clases sociales marcan diferencias me nte s itua c · ea constante-
. tones dramáticas - .
de dignidad entre las personas, el absurdo nu estros d , es Iogtco qu e
eseos cho qu en entre sí ~
de que hay personas que1 han nacido para
N o hay que ·asustarse d . 1 ·
¡, llevar el peso de las otras en su espalda, to- normal que . . . e. os confl ictos e .
extstan e n 1 ' ;;,
dos ellos son conceptos contrarios . a este 1 1 as comu .d
o as colectividad !11 ades; só-
. es que está
planteamiento. las tiranías e n some tidas a
arccen de conflict ,
Entonces, la invíolabilidad de la persona gra neles t - . os. Uno ele 1
. eon cos de la -. os
para no sacrificarla a los fines comunes, la XVIII M poltttca d~.·l sigl
' ontesquieu , d ec1a - qu e p . o
autonomía de la persona para respetar sus en una comu .d ara saber si
n t ad hay tiraní
planes de vida y sus proyectos de forma no hacía faltJ ~ a o· no la hay
s e mas c¡ue acercar 1 '
-quizá divergentes de las : de otros gru pos · e oye ruido d. e e· do: si
y Iscordias .
humanos- y la dignidad de la persona no es que hay It' b ' que;as, en onces
ertad· ~
u 1 ' si no se o
basada en su etnia, su sexo, sus preferencias
q :e 1ay una t' - ye n~: da es
en los órdenes de su demostración expresi- :. tranta. Entonces , '
acep t lr que la , . . es necesario
s soctedades 11umahas ¡·b
va, de su vitalidad -· sino en cu anto a que 1 res
40 '] e ,. n a n do (5 a " a /·e r
(TfC A PO tiTI CA , CIUDADAN{A 41

. . s y ' en cua, nto más libres, más


so n confhctJva. que no somos ni un solo hombre ni una so-

conflictivas. . la libertad sirve l~ mujer, sino ~uchos, y debemos hacer las


amos a creer que 1 cosas de la manera más· armónica, más con-
No v 1 los con fl'lCtos ' sino para p an- sensuada, más pactada; pero también sabe-
para reso ver 'l'd d es un sueño
. La tranqUl 1 a
tearlos b1en. humanos mos que los conflictos nunca acabarán , que
. 1 autoritano . . Los seres
dictatona ' cuenta pu e- va n a continuar y. van a. estar constantes en
, an cada uno por su '
libres actu . determinad o el esfuerzo de transacción. Y a veces, digo
den conCiba . . rse,
. p. e ro ex¡ge un
yo, esos esfuerzos adquieren incluso una di-
esfu erzo. mensión trágica.
cuando estaba ha-
A mí me asombra b a, El caso de la embajada .de Japón en Li-
ciendo e1 s·ervicio mt·t·Ita r ' que mi sargento' ma, por ejemplo , es una prueba de esto . Por
, os formados la compañía
.mientras estaba~ , que había que una parte, está el hecho de que un grupo
siempre deCla
de soldados, . . levantarnos , guerrillero secuestra y retiene durante varios
: saludar, sentarnos, .
hacer todo. . , sentarse como meses a un gru po de¡ personas que estaba
1 hombre· deCla .
como un so o , en fin. Yo no simplemente alli, celebrando una fies ta, so-
b e levantarse , metido$ al terro·r, a la amenaza de muerte y,
un solo hom r , , 1 b' qu e hacer las
. 1 , or que 1a 13.
me explica )a p do eramos lógic~mente, el Estado ti ene que intentar al-
solo hombre, cuan
cosas como un ll' go para ayudar a .sus .c;i~dadanos, porque de
, u'e estábamos a l.
300 hombres los q no pueden alguna manera formamos parte de una co-
os humanos lectivida d institucional.
Bueno, los grup 1 hombre , por-
hace r las cosas cómo un so o .
Por otra parte, el h echo de que la intro-
42 'J e r n a n J o c5 a u a 1e r t T 1 (A
P O LI TICA , (/ U D A D A N i
A 43

misión estatal sea de tal contundencia que reprobable.' no dejaba de ser


elimine o borre del mapa a todos los. · terro-.
. seres huma no . un grupo de
s con vmculaci
ristas, va en contra de estos límites morales toria, con un . ones, una his-
.. ttpo de demandas
que estábamos diciendo. Es decir, por malo sociales. ' concretas ,

y por transgresor de la ley que fuera ese gru- Este tipo d e tragedias o .
P9 de personas, no había pe.rdido toda su tica y ocurr· , .curren en la poli-
tran, no nos lleve
dignidad humana y tenían, de alguna mane- Las cosas pasan.h mos a engaños.
, Y ay que d ·d ·
ra , derecho a ser juzgados, a ser conside rados gun modo· . ecz Irlas de al-
., . ' no extste una soluc· ,
como seres humanos, quizá a ser condena- unlc;a para ell IOn mágica
as. Nunca s
l, dos o castigados, pero no ~ ser simple men- cas o totalm e on totalmente blan-
nte negras
te eliminados como si fuesen una mancha un código dond . , .~o basta con l eer
e se encue
sobre la ropa al caer un poco de tinta .. luciones del el ntran todas las so-
esarrollo / . .
La tragedia, que evidentemente es trági- nen más que v .· , etico y el político· tie-
. e r qlllza con 1 '
ca , presenta el choque difícil entre dos co- Ciencia . El a rre e arte q ue con la
se L ' en el sentido de
sas contrapuestas. La seguridad de un grupo . p Jede apre nd d qu e nunca
er el tod
de p ersonas que debe ser rescatado y alivia- estar siem pre reflex · o, de que ha y que
e Ionando
do de la situación de secuestro injusto que onside rando 1 . uno mism o
as Ctrcu '
sufría . Y, por otra pa;te, el . otro · grupo de cla n, no e nstancias tal
n abstracto com o se
t , sino en
pe rsonas, que no dejaba de serlo por el he- enninado un pu nto de-
' ' concreto.
cho de estar transgrediendo tas leyes, por el 1
: Otro de 1os as untos i
hecho de estar llevando a cabo una acción l bc:i9n e ntre , . . mportantes en l-¡
e t1ca y pol, . ' re-
Itlca e s que a veces
1

1
44 7 • r na n Jo .Saualer
t T1 e A , ~p O l 1T1eA , e 1 UD A D A N 1A 45

~ .
. , general, una e~ t'ca
1 en té rminos
hay una ettca 1 ética que tenemos sempeña en un grupo humano . La expresión
1
más abso utos, que son a s que técnica, si me perdonan la pedantería, para
cuanto a seres humano
cada uno en de feli- designar ese tipo de éticas concretas es la
destino, ma ~s 0 me nos
buscamos un l mos dicho. To- deonto1ogía 1 que. viene de la expresión grie-
. d de dignidad, como 1e
Cicla , · . d conjunto de ga taderontak, que significa lo debido, lo que
os un determma o
dos te nem citar el más corresponde a un grupo determinado.
~ . , por ejemplo , para
valores ettcos; ~ como instru- La deontología no es entonces una ética
no utilizar a los demas . , ara global o general para todci el mundo, sino el
obvio: herramtentas p
t os como meras . .
~ mts- código ético que tiene un tipo de persona
men ' considerarlos a st ,
fin es, sino ~
nuestros n fines .rambien determina da que hace una acción determi-
Como personas que so .
mos . . tes que tte- nada, por lo que hay límites deontológicos
son seme¡an '
en ~í misma s. Que e po r conse- . . para unas p rofesion*s, o para unos puestos
ro ios objetivos y qu , .
nen sus p p . 1 mente mam- en la.vida, que no corresponden en cambio
enCia. no pueden ser stmp e a otros.
cu ' benefK10. . d e los nuestros .
pula dos en . ·. .os generales Hay cosas perfectamente lícitas y admisi-
de los p nnclp1
Éste es uno . l . el más abso- bles para un particu1at, por ejemplo, que no
d'da en e mv
de la ética en ten 1 d / s en las lo son para un político. Qué les digo yo, re-
/ . post'ble . A ema,'
npllo .
luto, mas at na serie de étt-' cibir regalos y obsequios no es nada moral-
. o mple jas, hay u
sociedades e la actividad o mente ilícito para cualquiera de nosotros, en
s de acuerdo con
cas concreta, da· uno de- cuanto . que somos ciudadanos privados.
papel socta. 1 que ca '
el puesto o e 1 . ·. . Cuando llegue mi cumpleaños, recibiré, su-
46 'J e r n " n ,{ o 0 a u a 1e r ÉTI CA , POli T ICA , CI UDADAN / A 47

lgún regalo de mis amigos o de mis ustedes o yo , tomándonos una copa en una
pong O , a . ·/
parientes, sin que eso supo nga . ningun de- cantina, podemos comenta r un rumor que
mérito moral; en cambio, si yo ocupase un acabamos de oír, sin ningún problema,
alto puesto político y recibiera esos regalo.s puesto qu e no estamos vinculados a una ve-
. f ores en un sentl- :racidad, sino que somos ciuda~anos cuales-
orientados a ganar mts ~v ./
do 0 en otro d e 1 desarrollo de mi
, fune1on quiera. Un periodista, en cambio, requiere
. . . luso si recibiese te ner una deontología que le impida propa-
pública, ya es dtstmto; me , .
alos sin ninguna intención prevla, lar rumores sin fundamento, porque tiene
esos re g
mbre público no podría admitir una res ponsabili.dad con sus lectores, oyen-
por ser ho . .' . .
/ e·omo hombre pnvado, tes, r:eceptores.
lo que aceptana : ..
aunque Se me hagan regalos ~
con la meJOr Un padre tiene una deontología particub r
. . ,. del mundo Si vo estoy en una de- con sus hij o~, su familia , que evidentemen te
mtenctün · '
terminada función pública, no podría admi- no tienen otras personas que no están vi n-
.
urlos, porque ml. deontología -es decir una culadas a ellos, por lo que cada uno de no-
m.oral que no me prohíbe eso cuando yo sotros con nuestros hijos, o con las personas
. do de hombre de la calle nor-
estoy h ae1en que están bJjo nuestra responsabiliclad, te-
mal- me prohíbe eso cuando estoy actuan- nemos responsabilidades, deonto1ógica mer 1-
do en un cargo público, y esto se extiende te tenemos obligaciones que otras persona o.;
no solamente a los políticos. no ti~n e n.
Hay una deontología de los periodistas y De r'nodo que es importante recorda r
de las personas que deben informar. Quizá _q_ue, además de la ética en el sentido global,
ETICA ' r o t l TIC A , (/UDAD AN I A
49
48 '7 e r n a n d o eS a u a 1e r

tras. que un Ciudadano libre ' smo


. porque es
general, fundamental, hay deontologías que
meJor para uno ser un buen ciudadano que
sólo corresponden a grupos determinados;
ser Calígula ' 0 ser otra cosa por el e t'l
SI O.
tal vez esos grupos, quizá cada uno de no-
Es cuando uno entiende . qué significa lo
sotros en cuanto que formamos parte de un
que es importante en la vida · Natura1mente
grupo y no solamente somos de la humani-
1o q ue es Importante en la 'd
o ,

. ~ VI a no es tener en
dad , sino también parte de otros papeles,
el banco millones ahorrados, o ver cóm 1
debemos reflexionar ·s obre la deontológica d , o 00
emas se agachan ante
d . , i nosotros aterroriza-
.•· de cada uno en esas actividades. ·
os, solo los que t'lenen
. una visión p
En el campo de la política, cuando se· · . . . uen·1 d e
1o Importante ·
' o no Importante de 1' .
dice que es bueno que los políticos sean creen ' a VIda
que eso es lo fundament a1. L'as perso- .
éticos, es bueno para ellos,_ porqu e la ética
nas u n poco maduras lo ·
es buena para quien es ético. La ética no es · . mismo se nen , pater-
nalmente de un nmo . _ pequ -
simplemente qu.e haya que ser éticos para a1 . eno que prefiere
o meJOr un juguete que vale pocos pesos a
dar gusto a los demás. La ética es algo bue-
un cuadro d e Rembrandt; pues de la .
no para la persona moral; la persona moral, misma
manera deberíamos ,' . .
que reflexiona racionalmente sobre su con- ·. . . rurnos, no tan paternal-
mente , ·pero a1 menos desde-
dición humana es.la . que sabe que hay cosas . nar a aquellas
personas
. . que creen que 1o Importante
.
en la
mejores que otras. Que es mejor ser un ciu-
VIda es oprimir al vecino, tener muchos bie-
dadano libre y respetuoso de los demás
nes para com p r ar cosas que uno está t d
que ser Calígula , y eso no simplemente an e-
sasosegado· que no puede disfrutar.
porque Calígula sea más nefasto para noso-
50 :J e r n a n do eS a u a 1e r
CIUD"'DAN /
A 51

Es bueno ser ético, es bueno para la per- lítico mo ra 1 en el sentido , .


b genenco en que es
sona que lo es, no por razones de trascen- ueno que todos seamos morales .
dencia ni de recompensas intramundanas, es político moral en , smo que
ti cuanto a la m oral polí-
no hace falta. Hay que distinguir en. ese sen- ca, en cuanto a su d eontología
a aq ue11 . ' en cuanto
tido , entre la ética que es una cosa laica y as obligaciones pro ias
ción política. p de su fu n-
racional, y luego la religión que tiene sus
propios dogmas y sus propios criterios. Pero y ~·eua' 1es serían ent
~s·p e 'f· onces esas funciones
son dos cosas diferentes. La religión prome- . ct teas de u n puesto. públi . d
lítico? Cre co e un po-
te algo mejor que la vida y en cambio la éti- o que en primer lu
1¡ . seña lar la t gar podríamos
ca lo que promete es una vida mejor. Son ransparencia de su f .,
dos cosas diferentes y no deben confundirse decir, grandes fl , e uncton. Es
1 osoios que han refl .
do sobre est . exwna-
u na con otra. as cuestiones K
quizá · - - ant es el caso
Y es muy bueno que un político sea:una mas extremo--
señalado casi . son autores que han
persona moralmente aceptada, ~s muy bue- universalmente la .
no para él, pero a la vez, la deontología de la transpare . Im porta ncia
neta en la gestión , .
política que tenga es importante para los decir, que ., pul;:>ltca Es
1a gestton pública
ciudadanos; es importante que ese político junto de secret . 1 no sea un con-
. os 1urtados a la .
cumpla con requisitos concretos en el ejerci- ciudacbnos . mtrada de los
' stno algo (TU "1 e puede ser ·
cio de su función pública y, allí sí, de algu- qu e admite d. ., · - vtst , y
Iscrecwn; no es lo .
na manera, hay una posibilidad de hacer d iscreto qu e 1 mtsmo lo
o secreto Ha
ben ser d. . y cosas qu e de-
reclamaciones . El político moral no es el po- Jscretas, en el sentido
. .
.
de que ct lV
· [·~
52 :7 ~ r n a n el o c.'i a '' a 1 e r < r' e,... e 1 UD "" D "" N ¡.... 53

sos proyectos hacia el futuro pueden estro- tendería ' porqu e eso es .m
1 uy complicado
pearse, o una proclamación imprudente ; de- so amente persona s m u ,y especralizadas
. '
ben ser discretas pero no secretas. No · ·
. , no, yo quiero entender, si no 1
Es decir, los políticos rio pued~n ser una tiendo a la primera , o en-
.pacio 1 '! expüquemelo más des-
casta que viva a espaldas de los ciudadanos, a segunda vez y .
. . o qutero que me 1
qu e fragüen sus alianzas, relaciones, planes explique porque de al o
. guna manera me con
y proyectos a espaldas de los ciudadanos y Cierne este asumo. Entone -
sin que éstos nunca logren · penetrar en ese cia es el pacto d h . es, la transparen-
e onradez e
mundo; saber de verdad lo que está ocu- y los ciudadano . . . ntre el político
S.
rriendo, explicitar los proyectos que ellos es- Por político, me refiero al ,
tán haciendo. L~ transparencia que no imp~­ ejercicio p que esta en
' ues, como he d'lC h O ]' ·
de, insisto, una cierta discreción en algunos mos todos l os ' po lticos so-
dos por n:soiroque_mandan son los manda-
ca mpos; pero lo que la impide es el secretis-
. . s, son aquellos 1
mo sistemático de los políticos. Parte de la nosotros manda a os que
mos mandar
deontología de un político es negarse al se- determin~do· por un tiempo
, por 1o tanto no so
eretismo, negarse al oscurantismo y favore- ha ya nacido ' n gente que
. para la au toridad N d.
cer la transparencia de la gestión pública , el Cldo para la . . a te ha na-
.. . autondad , ni· p ara ma d
hecho de que los ciudadanos en cualqu ier nad¡e ha nacido n ar, ni
para obedecer
momento puedan preguntar: yo qu iero sa- En las d emocracias tod ·
ber qué ha pasado allí, quiero que se· me en un determinad , .' os mandamos
~ o ambno y ob d
explique. No responder: no, usted no lo en- otros {lm bitos . e ecemos en
' y nadie ha.
na .d
CI o, como de-
54 !J e r n a n do c5 a u a 1 r
t Ti( A , P OLfT I CA
C I UO"'DI'o N /
"' 55

cía muy bien Thomas Jefferson, con una si- vados, como .las satisfa. . . . .
cctones familiares 11
lla de montar al lomo para que otros se su- var una vida ~ ' e-
camada y grata .. ~
ban y le conduzcan con las riendas. Nadie .des Júdic . · ' qutza activida-
as. Los fmes privados s
nace ni para montarse en la silla que llevan mente respetables . on perfecta-
Siempre qu
~ . e se consigan
11
los demás en el lomo, ni con la silla puesta. por vías adecuadas· el
, pohttco tiene esos f'
Todos, de alguna manera, podemos ocupar ne.s como e 1 . J-
ua qutera de los
cargos, desalojados después, obedecer en nos los tiene P otr9s ciudada-
. or otro lado ~
ocasiones, mandar en . otras. : Por· esto, es de · ' estan los fines
partJdo, pues el ~ .
~ polittco normalm
bueno que los políticos tengan una concep- orma parte de . ente
' un parttdo político E
~ .
1'
ción transparente de su función pública, tros sistemas d . n nues-
.· emocrattcos ' al menos es a ~
pues forma parte inevitable de cualquier ~llJJ?.que quizá hab ~ SI,
na que reforma 1
planteamiento de la deontologí~ . dos· y replante 1 . r: os parti-
ar os en casi todos los
Otro punto importante es la 'delimitación mas· hay siste-
, que replantear su
entre los diversos fines que tiene la actividad como de - transparencia
ctamos ' s u [·manciación '
de una persona con un cargo público. Hay asuntos más. En f . Y muchos
m, a,dmttamos .
tres tipos de fines ·que ·hay qüe distinguí! en los partidos . . que existen
. . y que cada uno de 1 .
la acción de ser político. En pri~ner lugar los tiene sus pro . . f' os partidos
piOs mes como .
fines privados. El político tiene evidente- qu e sean los , - 1 partido. Como
mios os que
mente sus fines privados, como los tenemos te a los otros vayan mejor fren-
' qu e yo tenga ~ ·
nosotros que pudiéramos ser políticos; antes el ve . mas votos que
cmo, que resolv
amos asuntos 1
O· después, ellos tienen sus propios fines pri- d cmás no· p ued · que os
en resolver' etcetera. - Los fi-
56 'J e r n a n el o O a u a 1 " r

nes de los partidos son otras de las cuestio-


uno no es capaz de distinguir en tre los di-
nes que e1, p o1ítico
r en e¡·ercicio se pla ntea. Y,
versos fines, no debe ofrecerse para la activi-
por ú ltimo, están los fines del Estado o los
dad pública, p ues es obv io q ue esa persona.
de ]a colecti vidad como ta1' lo que "~e llama
no p uede ocupar un lugar p úblico, ni tam-
gené ricame nte el bien co mún. Te nemos, en-
poco lo p uede hacer una persona fanatizada
tonces, tt.es, f·n·
1 es dife rentes: los personales,
y obsesi onada con su prop io p artido, de tal
los del partido y los de l Estado. Existe el
manera que re~llmente sea incapaz de ver
peligro de q ue los políticos los mezclen y
que la ~ociedad : es un todo.
confu ndan lo qtie be neficie ~ .ellos p rivada-
Un partido es esO: algO que está partido,
mente, o a su pa rtt'd o, con· lo qu e beneficia
qu e está separado; y la sociedad es un todo
. 'dad o al Estado e n general.
a 1a co1ec t1v1
y si no se beneficia más que a un partido, es
La deonto logía del político exige q ue te n-
evidente que no se está beneficiando a la so-
gan bie n cla ros .los tres fines. Los tres son le-
ciedad. Por lo tanto, la separación de esos
gítimos, pero lo son mie ntras no se mezclen;
fines es imprescindible y es bueno que la
es decir, una pe rsona, un político no puede
ciudadanía se lo recuerde; y es Propicio que
tomar dete rminadas decisio nes que le bene- el r.
fician a é l pe rsonalmente, o a su pa rtido,
po Ittco tenga la. s ufici.ente generosidad
como para que·su irÚerés, ante todo, sea re-
con el pretexto de que benefician a la colec-
solver l os problemas de la colectividad, aun-
tividad . Lo impo rtante es que se distingan
que los resuelva otro. No hay nada peor ni
esos fines, q ue el político sepa diferenciar la más f ~ ·
. ;:matico que esos políticos que p refie-
.
actividad con u nos fmes 0 con otros . Y si
ren que las cosas se estropee~, no se resuel-
SS !J e r non do <So u o l e r .
.
t T1 eA , P0 l 1T 1 e A , e 1 UD A• O A N 1A 59

. mas con tal de que no los re-


van los proble r . o aunque se privado en las empresas y los profesio nales
su adversario po ltlC , .
sue1va . d fnidamente. No, por su cuenta; y luego una zona intermedia
n roblema m e t, .
·mantenga u P .' senttdo gris; en que se mezcla lo público y lo priva-
1 /.
dadero pohttco, que ttene un ·
e ver 1/ . o de su funclün,
. . / q uiere que. se do, y es en esa forma intermedia donde nor-
deonto ogic bl 'cos aunque los
R malmente se roba. La mayoría de los casos
1 roblemas pu 1
resuelvan os P el pri- de corrupción pública no vienen sólo y es-
resuelva otro. Y si los resuelve
. / / el otro,
trictamente de lo q ue es absolutamente pú-
10 a laudirá sera el.
mero que P . deonto- blico y decidida y transparente y necesaria-
.
En esto constste e p 1 lanteamtento ciu-
mente público, ni tampoco quizá de la cues-
. / nosotros
' . · como ade-
lógico espeCl/f'lCO . Qu1za
tión privada que, después de todo, se rige
odemos ser más parttdtstas,
. P
dadanos p r dad tan ecuánime, por otros criterios. Hay personas, por su-
mos no tener esta menta 1 or eso está puesto, muy poco honradas dentro de los
rt' co debe tenerla; p
pero un po 1 1 . capaz de esa mundos de lo privado y de los negocios, pe-
ese puesto. S.1 alguien no es /
en . d )Uesto pu- ro eso ya no afecta tanto a la colectividad.
actttu , no debe ofrecerse a un ~:·
blico.
El problema colectivo ~s esa zona inter-
media en que el Estado, por ejemplo, es em-
Por otra pa rte , es importante también 1la
presario de determinadas obras, promu l·ve
ni hace falta subrayar a,
cuestión económica, -. En todos los ciertas actividades, que son puesus en tc-
. . 1 estión pohttca. .
dentro de a g · . / blico ·de ció n por la iniciativa o Ja función· privada;
n uso estrictamente :PU
países, hay u / . 's un uso entonces, ahí se mueve dinero, se muew'n
determinados on f dos economtco ,
posibilidades de ventaja de triunfo econón li-
ÉTI CA , POLIT I CA
62 :J e r n a n do eS a u a ·1 e r ' Cl U D A D A N / A 63

enorme hacia los partidos. Naturalmente to- electrórlicos


- hab n~an d e acostumbrarse las

dos los partidos se financian de manera irre- campanas pú blicas de los ·.


tumb partidos, o acos-
gu'lar, igual que grandes cooperativas, que rarnos a los electores .
Es el elector el . .
grandes . empresas privadas, que grandes s que debe intentar informar-
multinacionales. A menudo, ellas son las fi- e y enterarse de lo .
¡'
.olitic que plensan los partidos
. nancieras que luego pasan ~u factura y de-· P · os, en vez de · .
conviertan en . exigtr que los partidos se
mandan favores, servicios, preferencias. De . Circos gigantescos .
todo m d . · para que
modo que la transparencia en la financia- un o se entere de lo .
nean d. que hacen pla-
ción de los partidos políticos es otra de las ~
' tcen ' etcetera, etcétera '
que creen . . Circos, por-
normas obvias de de.o ntología pública que que de esa manera !Tanara' n ~
votos . Los . d ~.,., mas
hay que exigir y tenemos también que acos- CJu adanos t d ~
"M . en nan q d .
tren: no ha ~ ue ectr:
tumbrarnos a que los partidos sean austeros, ~ gan mas ru ido·
re, denme 1 ' yo me entera-
a que, por ejemplo, las campañas electorales as cosas claras yo h -
f uerzo po ' . are el es-
no tengan por qué ser un derroc~e apabu- r enterarme de 1o que m .
para saber .~ e Interesa
llante de medios. Ahora existen medios de .~ por qUien tengo u '
(} UJ Cn tengo q e votar o con
comunicación audiovisuales tan importantes .~ que participar" p
OJen es una .- . ero esto tam-
como la televisión y la radio, y probable- : cu estiOn de edu .~
que sea im caeton, de ahí
mente mañana el internet o el correo elec- portante que 1 .
una democ . . a Ciudadanía en
trónico, que permiten formas ~muy amplias raCta, esté educad ,
paz de busca a. Que sea ca-
de difusión de ideas y programas, sin nece- r sus fuentes de . ~
de enterarse de las m ormación y
sidad de grandes gastos. A estos medios propuestas partid.Istas. - Si

t r' e A . POlfTICA CIUO


63
62 :J • r n a n Jo eS a u a ·t e r ' A DA N/ A

enorme hacia los partidos. Naturalmente to- electrónicos


- habrían d e acostumbrarse las

dos los partidos se financian de manera irre- campanas públicas de los part.'d 1 os, o acos
t b
um rarnos (.a lo s e1~ctores. . -
gu"lar, igual que grandes cooperativas , que
grandes . empresas privadas, que grandes Es el elector el que debe intentar info
,, se y e ~ rmar-
multinacionales. A menudo, ellas son las fi- . nterarse de lo .
r'
o''t' que piensan los partidos
. nancieras que luego pasan ~u factura y de-· P ti .lCOS, en vez de . .
conviertan . extgtr que los partidos se
mandan favores , servicios, preferencias. De en ctrcos g ·
todo m . . tga.ntescos para que
modo que la transparencia en la financia- undo se entere d l . .
nean d' e o que hacen pla-
ción de los partidos políticos es otra de las ,
, Icen ' etcetera, etcétera. . , '
que creen que d . Circos , por-
normas obvias de de.o ntología pública que vot e esa man era ganara' n ,
os. Los Clu · d
adanos t d , mas
hay que exigir y tenemos también que acos- "M·tren: no 1 en nan q ue d eCir: .
,
tumbrarnos a que los partidos sean austeros, , 1agan mas ruido·
re, denme las ' yo me entera-
a que, por ejemplo, las campañas electorales cosas claras
fuerzo por , ' yo .haré el es-
no tengan por qué ser un derroche apabu- ~ enterarme de 1
para saber po ., o que me interesa
llante de medios. Ahora existen medios de r qUJen tengo '
quién tengo que vota r o con
comunicación audiovisuales tan importantes ., que participar" P
hien es una ., . ero esto tam-
como la televisión y la radio , y probable- : cu estiOn de edu .,
que sea im cacton, de ahí
mente mañana el internet o el correo elec- portante que 1 .
una democr- . . a CIUdadanía en
trónico, que permiten formas ;muy amplias aoa , este, educad '
paz de buscar f a. Que sea ca-
de difusión de ideas y programas, sin nece- sus uentes de int
de enterarse de las ormación y
sidad de grandes gastos. A estos medios propuestas p artid'ts,tas. s 1.
C IUDAD AN /
64 7 P r n o n d o eS o u o 1e r A 65

minado cuerpo establec·d


se mantiene a la gran, a la inmensa roa yo ría da . 1 o qu e nos defien-

de la población, en un estado de infa ntilis- . ' que nos ptotp' .


: --Ja, qu e JUZ
dispu tas E f : . ; gue nuestras
. sa uncJOn re .
mo perpetuo por 'falta de informació n, por . tar mu . ; . . . p~eszva ·puede resu1-
falta de conocimientos, por analfabetismo, y anttpattca·' prob a bl emente n
mu y bonita . o sea
naturalmente harán falta todo tipo de piro- ' pero e ~ tmprescind 1'bl
''O e . Ahora
e '' no quiere d eclr · que se '
tecnias espectaculares, insu stanciales para lidad 1 . : excuse la bruta-
los partidos políticos, a los cuales h ay que fi- y a mhumanid ad.
Yo creo qu 1 . . :
nanciar, e ntrando e n un círculo perverso. . e a CJ vtlización de E
se mzde n o sólo un ~stado
Las garantías de los ciudadanos también ; por sus escu 1, ,
basico, sin o ta b.; e as, que es l o
deben mantenerse frente a la función , por m ten p or sus e; ,
funcionan las .:- .. arceles. Cómo
otra parte imprescindible, n o seamos inge- . carceles en
la explosión d .
un E
stado, cómo es
nuos, eventualme nte represiva q ue tienen e presos có
personas que 1 ' mo se trata a las
b s autoridades. Es d ecir, una de las atribu- 1an cumetid
error una t , o un clelito un
cion es que la auto ridad d ebe ejercer es la re- ransgresi ó;1 1 . ,
fundamental ,.. ' o cual también es
presión sobre aquellas conductas vio lentas, y e., unJ misn ·
dad de los ciud 1a responsabili-
a ntisociales , que crean trastornos públicos . . a ciano~ . Sin d d .
CXJ.stir un ele u a tiene que
La m ayoría de nosotros h emos re nunciado a mento repres .
unos límites Ivo, p ero tiene
ut ilizar la violencia p~)l· nosotros mismos; si ' como h e m
Son límites . . . os señalado antes
no reso lvemos nuestras disputas a tiros, o · InVIOla bles, ·id e ac d ·
cuales CQnvertir 1 ;' : uer o con los
\'cngamos n uestras ofensas a puñaladas,· . . . as carceles
mfternos de 1· . en verdaderos
pues hace fa lta que haya entonces un deter- Jacmamien to .
' margmació n, sin .
66 'J e r na n do r5 a u aler
{T IC A , POL/TICA, CIUDADAN{A 67

1 a f unet·o' n resocializaaora
- 1 , o la tortura,
ne una función ejemplar, también de cara a
a gun . . 1 tantas otras. cosas,
1' brutalidad polloa ' y ·. . la sociedad. ·
O a
.d ntemente a 1 función repre51Va,
pervierte evl e . instrumento El político realmente tiene q~e ser cons-
.d d asa a ser un
cuya racionah a p 1 . 'dad A veces, efec- ciente de que, de alguna manera, su gestión
d la co ectlvl . es educativa en cierta medida. El hecho de
bru talizador e h. smo po-
una especie de mac 1
tivamente, hay b . . nte que pega que él se comporte no sólo .de una manera
,. disfruta el go e rn.a . decente, sino que también se vea esa decen-
lltlCO que 1.· ina adversanos
l ea que e lm
fuerte , que go p , . . de En fin, esa cia, esa honradez, se vea una cierta austeri-
más inmlse ncor .

de la manera 1 ho~bres son dad, sobre todo cuando los países atraviesan
. . , h' ánica de que . os
tradlClOn lSp ¡ virilidad Y p or ·momentos de depresión económica;
en eso se nota su
feroces y que . d ente también cuando saben que hay muchos conciudada-
,
n su razo 'n desgraeta am
· 1' nos que están ·atravesando sítuac.iones muy
no e . amientos po 1-
se cumple a veces en funclOn difíciles económicamente. Es responsabilidad
tic os. del político no mostrarse de una manera in-
· 1' · debe-
Por último, la deontología po ltlca sensata, con ostentación, como si fuera una
, . ulsar una ete . rta .función ejemplar .o
especie de sultán de los antiguos tiempos .
na 1mp l'tico. Es deetr,
. l s tareas de1 po 1
educauva e n a . , expuesto que Es decir, esa mentalidad que admira en el
,. , la vtsta , mas .
el pohtlCO esta a . ·, . d pública , político el hecho del derroche hay que aca-
d 's· por 1o ta nto ' su actltu . barla. El político debe destacar precisamen-
los ema ' t s doml-
e comportarse, sus gas o '
su forma d ~ '1' a todo eso tie-
. e l de su tamJ 1 ,
te por su austeridad, porque sea capaz de
cilio , vestuano, mostrar una imagen de ciudadanía civil, so-
68 .7 e r n '! " or o Üaualer

E T1 eA , PO L/ T1 e A , e 1 ti D A DA N f A 69

.
lidaria , sin ostentaciones, y ~so tambié n es , la.
. rtante ' ademas que hacer. Es la ciudadanía la que tiene
funció n educativa. Es lmpo . ". ~,
tam bién que educar a los políticos de cietta
ue el político se porte b.t en ' como dtee ,ese
medida y decitle "no, :no queremos eso,
célebre afon.smo . d e qu e ·"la mu jer del Cesar
q .
. que ser decente, smo que remos o tra cosa . Y como usted tiene q ue
solamente tiene .
no , ,.. también e l político tiene servir a l o qu e se supone que qu eremos, en-
tambié n parecerlo '
·tonces vamos a explicitar lo que queremos,
que parecerlo.
edes ' éstos son as pectos para que ust~d sepa a qué atenerse y no
Co mo ve n us t
. o líticos . Ha h a l) t'd 0 gran- simplemenre seguir aq uello contrarío a los
no estrictamente p b able- intereses globales" .
,.
·1 d es inteligencias po ItlCa r.
S que pro
' .
, ban muchas de las pautas En nu estro tiemp o, los momentos, los
~ te no res pe t a
men , , . . y cons1dero . . portante que
1m campos en que ética y política entran en co-
deontolog tcas. 1 e cífica de
, esta mora es p lisi ón son muy numerosos y va a ser así,
esta deon tologia , r

,. p o rq ue cada uno de nosotros además de ser


rticos en. ejerctclo,
. . de las~. personas
los po l , bl. s se recue rde individuos con nuestras ideas, con nuestra
q C upan cargos .pu tco ' .~
ue o d ¡ so- forma d e p ensar, for~amos parte de socie-
y los únicos que podemos recor aro . '

dades muy com,plejas. El mundo va avanzan-


1 s ciudadanos.
mos o . nosprc cia do p ro bablemente hacia una glo balizacíón
S, · la ciudadama - olvtda o me
, t ¡ · llevar política; es decir, hoy ya sabemos que hay
s valores, SI. al contrario
. se c. e¡a
esto. , s personas muchos problemas importantes de la hu -
o uestos o apoya a 1a.
po r va lores p ha y nada manidad, d esde el hambre, el respeto a
que ostentan valores op uestos, no
las fuentes de energía o a la preservación
70 !7 e r n o n do c5 a u a 1e r E T/CA . POt/T tC A , CIUDADANIA 71

ecológica, hasta la educación de los niños .. te morales en un momento determinado, a


Cada vez hay más países que no pueden comienzos del siglo, en un país determinado
garantizar estas funciones y que deberí~n qu e es EstJdos Unidos. Y por la fuerza y el
formar parte de un esfuerzo común de la ~u­ peso de ese país, se ·extiende ·a todo el resto
~,
l. manidad. En fin, hay muchos proble:Tias :que del mundo , ·creando el problema práctica-
ya no se van a poder seguir planteando a es- mente, evidentemente insoluble del narcotrá-
cala meramente individual. fico, ·¡a adulteración. Todo esto surge y todo
Seis mil millones de seres humanos no se el mundo lo ve porque existe la ·prohibición.
pueden regir exclusivamen~e -~on una men- No es que la prohibición derive de los ma-
talidad tribal, llevando cada ·uno su cuenta les de la droga, sino que los males de la dro-
por su lado. Por lo tanto, ética y política van ga derivan de que exista la prohibición.
a ser conflictivas en los años venideros. Es~ · A_ comienzos del siglo, hasta 1905, la co-
tamos viendo constantem~nte hasta qué ca se incluía en la Coca Cola y por eso se lla-
:
punto hay cuestiones, a veces aparentemen- maba así; hasta. 1905, 1910,· .1915, las drogas
te éticas que se convierten en un pro~lema eran un problema privado. Es decir, había
político de primera magnitud: el tema de la personas que tenían- un problema con las
persecución de las d~ogas, es un caso bien drogas, como hoy hay personas que tienen
claro. un problema con la bebida con el .
, Juego,
La prohibición de las drogas responde a con el sexo, o con cualquier otra cosa; es
un tipo de moralidad puritana, surge no por decir, había personas cuyos deseos les ha-
razones médicas, sino por razones .puramen- cían entrar en situaciones dramáticas para
72 :J " r n a n ,j 0 0 a " a 1e r
t uc A , POlíT I CA, e
~UDADAN i A 73

ellos mismos. Pero no eran problemas para


inmensos perjuicios a países en desarrollo y
la colectividad, no eran problemas para los a otros.
países en su conjunto. A partir de la prohi-
Otro problema: es la utilización de ideas
bición y del negocio que se basa en la pro-
religiosas como fermento de discordias polí-
hibición, se ha convertido en un problema
ticas. Desgraciadamente, a lo largo de la his-
de escala mundial, en un gangsterismo ge-
toria ha habido abundantes casos en que la
neralizado. Se amenaza a países enteros co-
religión ha sido utilizada cqmo un fermento
mo Colombia , como el caso de México, y
de enfrentamiento y de problemas políticos,
todo eso va a seguir cada vez peor. porque
y hoy tod~vía en el Oriente próximo, tanto
no se da una soiución política a lo que no
el integrism o musulmán como el . t .
es, en el fondo, más· .que la deri:vación de m egnsmo
judío y otros casos sef11ejantes en otros Juga-
. , puramente , no digo moral ,
una mltologla
res. Hay q ue ver el pkpel que tuvieron las
porque la moral me parece más elevada, si-
diversaS iglesiaS en el conflicto de Ja ex-Yu,
no puritana o moralista que exista la prohi-
goslavia. Dan lugar a situaciones en
bición de esas sustancias. . que
ideas religiosas, priVadas, unas mejores,
Allí vemos un punto en que la inmorali-
otras peores, pero todas ellas privadas, se
dad. la falsa moralidad, se convierte en pro-
convierten en fuente de trastornos, enfrenta-
blema político para· la mayoría; lo que sería.
mientos y cuestiones de falta de annonia
una cuestión de información y de educación gravísimas.
de las personas, se convierte en un. proble-
Otra cueÚión de
ma a escala internacional q':le puede causar . este mismo orden tam-
bién quizás es el nacionalismo. Los naciona-
74 ::Jcr n a n d o cSa u a l e r {TI C ;.. , POtfT IC ,A. , C I UD;..D;..N f ;.. '
75

lismos extremados, el apego a un nosotros Ésos son casos, como l.es digo, en que
que excluye a los otros, un nosotros que se . entran en colisión ideas, principios, algunos
convierte en un no a los otros, ese tipo de incluso estimables, de orden moral, de or-
planteamiento en algunos lugares está crean- den trascendente en la política cotidiana, en
do dificultades de convivencia inmensa. Yo el conflicto político cotidiano .. Entonces, no
les puedo hablar a ustedes como vas.co: h~ hay una soluc;ión, nadie va ~ pensar por no-
padecido, durante la époc~ de Franco, el na- sotros y no podemos dispensarnos de estar
cionalismo impositivo a la española y, luego, const~ntemente en una cierta. vigilancia, en
por desgracia, el nacionalismo impositivo a un cierto pensamiento, en una cierta lucha
la vasca y, todavía para asombro de uno, ver por nuestras libertades. La li.bertad es algo
que los terroristas o los cónip~i.ces del terro- en qué emplearse con~tantemente p orque, si
ri~mo etarra, que son la única verdadera no, se cristaliza y desaparece.
a~enaza que hay en este momento para las ~amentablemente no tengo soluciones
libettades del país Vasco, vie:ne de ETA y na pero puedo contagiarles inquietudes. Lo que'
de ningún otro sitio. y sin erribargp, en el ex- les digo es ;
, o SI, es que son importantes las
tranjero a veces son vistos como si fueran actividades como ésta mo . ·. ; .
' Vlilllentos CIVICOS,
el deseo de participación cada vez ~ayor de
perseguidos luchadores por la libertad, cuan-
do en realidad son personas que quieren
los ·ciudadanos, para un siglo que, como to-
acabar con las libertades de gente en una co-
dos los demás, no va a ser fácil. Aquí está,
munidad plural, por tanto no homogénea, y
me parece, la verdadera esperanza: el deseo
no sometida a unas pautas únicas nacionales.
de participar y no el deseo de descansar en
76 'J e r n a r1 d o Ú u ,, a 1 e r

f
alguna solució n !DagKa q ue nos ve nga de
fu era o desde arriba y nada más.

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